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Moly, la séptima Robin por azumi16

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- Entiendo…w22; La habitación matrimonial de la mansión Wayne estaba en penumbras. Sólo era iluminada por la luz de la luna que se colaba por la ventana.

En la cama, estaba la pareja. Dick estaba sentado encima de las almohadas y Bruce estaba recostado bocarriba encima de este, con su cabeza en su pecho.

Ambos ya estaban bañados y en pijamas, listos para dormir, pero ninguno de los dos tenía sueño. Richard acariciaba la frente y el cabello de su esposo suave y amorosamente, escuchando atentamente todo el relato que este le contaba pausada y desanimadamente, cómo si estuviera triste o decepcionado de los hechos.

En vista de eso, Dick se imaginó una escena en donde Moly les hacía daño a los niños, o algo así. Al final, no resultó tan mal pero…claro que Richard entendía cómo se sentía su pareja.

- Aún me cuestiono el haberle hecho esa propuesta w22; Comentó Bruce sereno, tras haber terminado de contarle todo y hacer una pausa.

- Lo viste cómo una salida, Bruce…

- Si, pero no es eso. No es la propuesta en sí lo que me molesta, si no el haber sido tan ingenuo cómo para creer que ella aceptaría…

- Quien sabe, si de describir a esa chica se trata, no podríamos usar la palabra “Predecible” w22; Dick seguía acariciándolo, intentando aliviar su desasosiego.

Ambos se quedaron en silencio unos minutos. Sólo sintiendo el calor del otro.

El vivo recuerdo de la chica quedó ilustrado en sus mentes el resto de la noche, aunque estando juntos podían anestesiar la inquietud del otro.

Así pasaron varios días, en los cuales, no tuvieron muchas noticias de Moly. De vez en cuando los llamaba Bárbara, para contarles alguna misión que Alternative estaba llevando a cabo, pero Nightwing la puso al tanto de lo que había ocurrido, y Bárbara entendió que la pareja, en ese momento, estaba pasando por un autentico dilema, en el cual, su mayor preocupación era que no había mucho que ellos pudieran hacer para enfrentarlo.

De modo que optaron por seguir en lo suyo, tratando de ignorar el recuerdo de Moly, aprovechándose de que, aparentemente, no estaba causando problemas últimamente.

Aferrados a esa filosofía, pasó poco más de un mes.

Como ejemplo de que el tiempo cura todo, la pareja ya casi había olvidado a la joven recuperadora. Sabían que se debía en gran parte a la gran inactividad por parte de la misma, ya que la misma Bárbara les mencionó que, desde hacía un par de semanas, parecía haberse retirado.

Como todo lo que provenía de esa muchacha, para la pareja resultó ser una noticia agridulce, aunque no lo admitían ni entre ellos mismos, y sumidos en otras cuestiones, fue una completa sorpresa lo que protagonizó una sección importante del periódico, que el señor de la noche leía todas las mañanas.

Se trataba de Moly, no tenía la menor duda de eso, aunque en el periódico la habían bautizado como “La dama sangrienta” titulando la noticia como “El retorno de la Dama Sangrienta en Business City” y colocaba una imagen, de mala calidad, que parecía haber sido sacada de una cámara de seguridad, en donde aparecía Moly agrediendo a tres hombres en una especie de estacionamiento de terraza.

Por supuesto, Bruce lo consultó con su esposo, y el sentimiento intranquilo de un mes antes se coló nuevamente en sus pechos.

Por otra parte, la llamada de Bárbara no se hizo esperar, pero los tres estaban de acuerdo en que la información no significaba mucho. Sin embargo, la pareja tuvo un animado debate esa noche, convencidos de que era imposible que después de todos los enemigos que habían tenido, una chiquilla los dejara en jaque, y que debía haber algo que ellos pudieran hacer.

Esos pensamientos los reconfortaron un poco y, a pesar de que no encontraron una solución de momento, ahora tenían el objetivo de encontrarla, aunque la sorpresa que vendría el día siguiente le dio un giro a las cosas.

Ambos héroes se preparaban para sus deberes como civiles. Casualmente, ambos tenían mucho trabajo en sus oficinas y habían decidido salir un poco antes. Dick partió a Bludhaven casi a las 7, en cuanto a Bruce tenía planeado ir a la oficina pasadas las 8.

Ya estaba vestido y ya había desayunado, sólo preparaba un par de documentos para salir cuando el timbre de la mansión sonó.

w22; Si es algún abogado, dile que ya me fui a la oficina w22; Le dijo serio Bruce a Alfred mientras seguía en lo suyo

w22; Entendido, señor w22; Respondió finamente Alfred mientras se dirigía a la puerta.

Bruce siguió distraído en lo suyo durante los minutos que tardó Alfred en la puerta, hasta que el mencionado regresó.

w22; Señor, en la puerta está una señorita llamada Moly w22; Al oír ese nombre Bruce abrió los ojos como platos, Alfred pareció no notarlo y calmadamente prosiguió w22; Dice que lo conoce y que necesita hablar con usted. Al no tratarse de un abogado no negué su presencia, sin embargo…w22;

w22; Llévala al estudio y dile que iré en seguida w22; Dijo Bruce con firmeza.

w22; Entendido, señor w22; Alfred se retiró a cumplir con lo pedido.

Bruce, honestamente, tuvo el impulso de ir personalmente a la puerta y hablar con ella lo antes posible. Pero debía calmarse, debía serenarse si esperaba sacar provecho de aquella oportunidad. ¡Que irónico resultaba todo aquello! …l, el caballero de la noche, puesto en aquella situación a causa de una chiquilla.

Por supuesto, dejó todo a un lado y se dirigió al estudio lo más calmado que pudo.

Una especie de alarma natural recorrió su cuerpo al entrar y verla. Estaba sentada en uno de los sofás, con la confianza de alguien que está en su casa, mirando a través del gran ventanal.

w22; Vaya que me has impresionado. Tu casa es muy grande, incluso más grande que la mía, aunque la mía es más bonita w22; Tras decir eso, Moly volteo a verlo, sonriendo caprichosa. El rojo de sus labios, talvez porque era de día, le pareció a Bruce de un tono más claro, como el del rubí.

La muchacha tenía su larga cabellera semi-recogida con dos elegantes pinzas plateadas a los costados, cargaba una camisa sencilla color blanco dentro de unos blue jeans que le llegaban a la cintura, y unos botines de cuero, como su correa.

w22; Moly…cuanto tiempo w22; Sólo pudo decir Bruce, aun plasmado en la entrada

w22; Si, cuanto tiempo…w22; Moly apoyó su mejilla en su mano flexionada mientras lo miraba y le seguía sonriendo

w22; ¿y, a qué se debe tu visita?

w22; Oh, vamos. No seas aguafiestas. Ven y siéntate, ¿O tienes algo mejor que hacer?

w22; La verdad debo ir a trabajar

w22; Pues entonces ve a trabajar y talvez volvamos a hablar otro día ¿te parece? Aunque no te prometo nada, ya que yo también tengo cosas más importantes que hacer w22; A Bruce le molestaba sospechar que ella sabía de su interés por ella, y que se aprovechaba de eso.

Pero Bruce se equivocaba, verdaderamente Moly no lo sabía, sólo jugaba con él por dos simples razones, en primera estaba su desinteresada postura hacia el mayor y en segunda estaba lo divertidas que conseguía las serias reacciones de este.

Bruce, con amarga resignación, se encaminó al sofá que estaba al frente de ella, dispuesto a escuchar. Moly lo miró unos segundos sin dejar de sonreír.

w22; Bueno, Batman, ¿Cómo has estado? ¿Me extrañaste? – Moly apoyó sus codos en sus piernas, inclinándose hacia él

w22; Vi lo que le hiciste a esos hombres en el periódico…

w22; No puedes quejarte, Batman, me porté muy bien por un tiempo – La muchacha volvió a incorporarse, guiñándole el ojo.

Bruce le dedicó una mirada seria, casi amenazante. En respuesta, Moly volvió su vista hacia la ventana.

w22; Creo…no estoy segura, pero creo que existe la posibilidad de que talvez pueda portarme bien por más tiempo…– La sonrisa de Moly se desvaneció y dio paso a un rostro pensativo – Sin embargo, he comprobado que eso no es posible estando sola…– Bruce la escuchó con toda su atención

w22; ¿y entonces, que tienes en mente? – Dijo finalmente Bruce tras una larga pausa por parte de la muchacha, quien sólo veía al jardín como hipnotizada.

La chica sacudió su cabeza y volteó hacia él como si la hubiera despertado.

w22; Ah, si, a lo que quiero llegar es que acepto tu oferta de ser Robin, si es que sigue en pie – Sentenció Moly con su tono más casual.

Bruce recordó, en ese momento, las palabras de su esposo: “Si de describir a esa chica se trata, no podríamos usar la palabra predecible”. En verdad, a su parecer, aquella muchacha había pasado la raya de lo inesperado.

No le respondió de inmediato, sin embargo disimuló muy bien su sorpresa y nunca perdió su característica serenidad. Luego de unos segundos, en los que una voz interna le insistió que le diera una rotunda negativa, le respondió.

w22; Esta bien…– La parte racional de Bruce no entendía su comportamiento – De acuerdo, Moly – Incluso la muchacha parecía sorprendida de que Bruce no hubiera cambiado de opinión.

Bruce sabía que no estaba siguiendo ningún movimiento racional, y que en su lugar, estaba siguiendo un instinto emocional, pero es que una corazonada le indicaba que aquello era lo mejor. Talvez no era la única forma de vencerla, talvez su apariencia y su impresión los estaba confundiendo a su esposo y a él, y talvez, poniéndole cerebro o aliándose con otros superhéroes, podrían encontrar la forma de detener sus acciones, pero un “algo” lo estaba llevando a seguir ese curso, a utilizar esa exótica alternativa.

No era la primera vez que la usaba, la había usado con Jason Todd, y bien sabía que las cosas no habían resultado del todo bien, y que las posibilidades de salir victorioso con Moly eran incluso menores, pero tenía que intentarlo, algo le decía que debía hacerlo.

- Pero tengo mis condiciones…w22; Le dijo serio mientras ambos se miraban a los ojos fijamente.

- Me lo esperaba w22; Una sonrisa resignada fue trazada por los labios de Moly.

- Yo diría que más bien son promesas, que tienes que cumplir para poder tener el manto de Robin w22; Bruce pensó unos segundos que le diría antes de proseguir w22; Las resumiré en dos. La primera: No matarás, ni robarás, ni masacrarás, ni mutilarás, ni tortur…

- ”yeme, yo no robo w22; El interrumpió bruscamente Moly w22; No tengo necesidad w22; Le sonrió caprichosa.
Bruce odiaba que lo interrumpieran, sin embargo respiró y se dispuso a continuar.

- Como decía, el punto es que Robin no puede ser un criminal w22; Sentenció Bruce, a lo que Moly asintió lentamente. Convencido de que la muchacha lo había comprendido, prosiguió w22; Lo segundo es que Batman y Robin tienen un objetivo fijo y puntual: la justicia, nunca tienen otras intenciones, ni dinero, ni favores…

- ¿Ni siquiera cobrar cuentas? w22; Le preguntó Moly con total autenticidad. Bruce alzó una ceja w22; Ya sabes…w22; Moly sonrió pícara y le guiñó un ojo w22; Como pasar factura w22; Bruce la miró serio

- No w22; Bruce sabía que ser héroe, sin “cobrar factura” al menos una vez, era casi imposible, ya que en sí, era una forma de hacer justicia. Pero los motivos eran diferentes, se desviaban del objetivo principal que era defender a los que no podían por sí mismos. Además, tratándose de Moly, él sabía debía tener más firmeza que con los otros Robins.

Moly lo miró dudosa por un segundo. Honestamente, ella no sabía si sería capaz de seguir las reglas de Bruce, o por cuanto tiempo, pero sacudió levemente la cabeza pues no estaba dispuesta a sumirse nuevamente en todos esos endemoniados pensamientos que la atormentaron desde que empezó a considerar la oferta de Batman.

De modo que dejó su mente en blanco y sonrió, fingiendo completa despreocupación.

- De acuerdo, Batman w22; Moly se levantó, se acercó a él y le extendió la mano w22; Trato hecho w22; Bruce miró la pequeña mano de Moly dudoso, preguntándose por ultima vez si estaba haciendo lo correcto.

Pero no había marcha atrás.

Y con esa conclusión, Bruce cubrió su mano con la suya, levantándose y estrechándola, cerrando el trato.

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