Toda la cabeza le daba vueltas no sabía que había pasado. Abrió los ojos con lentitud y se vio en una sala y fie hay cuando lo recordó: la prueba de Herencia, el robo, los hechizos y pociones en su cuerpo, los bloqueos en este y finalmente un trozo de alma de Voldemort sellado en su frente.
Pero había algo diferente... se sentía más liviano, fuerte y poderoso que antes.
_Cachorro_ dijo una voz.
_Sirius ¿eres tú? _dijo asombrado y como para no estarlo su apariencia había cambiado radicalmente.
Ya no se veía desnutrido y sus ojos habían recuperado un brillo que nunca vio en él.
_Si, digamos que no eras el único manipulado, hechizado y vete tu a saber qué más_ murmuró asqueado_ (en verdad cuando pille a esa cabra la destriparé y le arrancaré todos y cada unos de sus pelos de esa maldita barba)
_¿Remus y el profesor Snape?_ preguntó preocupado.
_Aquí cachorro_ dijo una voz detrás de él y lo que vio lo dejo sin habla.
Remus parecía haber rejuvenecido muchos años, varias de sus cicatrices no se notaban, tenía mejor aspecto más musculatura, su pelo estaba con más color y sus ojos eran de un dorado líquido espectacular.
Mientras que Snape era otro cantar.
Su pelo ya no tenía grasa sino que era suave y dedos a, su piel era de un blanco como las muñecas de porcelana, su nariz ya no tenía esa forma si no que era recta y bien perfilada, sus ojos eran de un color onix pero si te fijabas bien veías notas de color marrón oscuro en ellas.
_ ¿Sorprendido señor Potter? _ dijo divertido Snape.
_ ¿Cómo ha pasado esto? _ preguntó Harry con la boca desencajada.
_Al mismo tiempo que tu te hacías tu Prueba de Herencia nosotros nos hicimos una similar_ empezó Sirius a contar.
_Con eso descubrimos que nuestras memorias fueron bloqueadas, estábamos bajo los efectos de varios hechizos y / o pociones y algún que otro conjuro oscuro como en el caso de Severus y Sirius_ continuó Remus.
_ ¿Ustedes dos sois pareja? _preguntó Harry después de ver detalladamente a su padrino y profesor.
_¿Cómo...?
_Por vuestras auras hay una especie de hilo rojo que se conecta entre las dos_ dijo encogiéndose de hombros.
_Ya veo _murmuró Remus pensativo _ (quizás el podría ver si él y yo... no, Remus aquello no tuvo que ver nada con la cabra maldita eso fue su culpa y mi cachorro murió por él a menos que... no, no pienses eso. Pero por que si no, no podría recordar eso. Porque la cabra me bloqueó mis recuerdos de él y yo).
Harry miraba a quien consideraba un tío con pena, intriga y furia.
Su aura era de un color entre gris, azul oscuro y negro.
Gris significaba que estaba deprimido; azul oscuro muy triste y negro con un profundo dolor.
_Y no solo nosotros cambiamos, cuando te desmayaste llamaron a varios duendes y medi-magos especialistas y no solo deshicieron nuestros bloqueos y quitaron los hechizos; también los tuyos_ informa su padrino mientras le enseñaba un espejo.
En el aparecía un joven de metro setenta y cinco, guapo con músculos y su tono de piel era de un tono canela, ya no era pálido como un fantasma, sus ojos eran de un verde esmeralda increíble y ahí se dio cuenta de que no utilizaba gafas; su cicatriz apenas y era visible y su pelo antes que parecía un nido de pájaros era ahora manejable, suave, sedoso y con tonos rojo oscuro.
Ya no parecía aquel muchacho descuidado y desnutrido sino que parecía un joven saludable, lleno de vitalidad, fuerza confianza y carácter.
Que se preparasen todos los traidores porque su castigo iba a llegar y él se encargaría de ello...
Con sus propias manos si era necesario pero esa maldita cabra junto a aquellos que se hacían llamar sus amigos y familia; aquellos que lo traicionaron, que se burlaron de él y que lo utilizaron a su antojo controlándolo como les dio la gana, robándole y mintiéndole iban a pagar... incluso si era con su propia sangre.
Se acabó ser el Harry manipulado, llegó la hora de que conocieran al verdadero Harry James Potter.