Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Forbidden heart por hannastony

[Reviews - 151]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Cuando el cielo comenzó a oscurecerse fue que Los Vengadores supieron que era momento de zarpar nuevamente hacia donde su capitán los guiase. Se despidieron con gusto y nostalgia de las personas que habían visitado, con la promesa de regresar fue que los piratas partieron de nueva cuenta rumbo hacia su transporte.


Para Peter aquella había sido la primera vez haciendo esos actos de caridad, por lo que en todo el camino hasta llegar al barco no pudo parar de parlotear y decir cuán feliz estaba al ver la cara de gratitud en todas esas personas. Nunca pensó que hacer algo bueno por los demás se sintiera tan bien y él también agradecía infinitamente el poder pertenecer a aquella nueva familia.


Steve miraba con ternura al joven mientras hablaba con ilusión de todo lo que hicieron ese día. A pesar de que él no era un pirata, se podía sentir más que identificado con todo lo que relataba Peter ya que en algo tenía razón,  y eso era que el ayudar a los demás era un sentimiento sin igual.


Al llegar al navío Thor les entregó al pueblerino y sus hijos los cuáles habían cuidado el barco una valiosa recompensa viendo como éstos les daban las gracias y los despedían con gran alegría, para que después cada uno de los piratas tomara su puesto en la embarcación, comenzando así a avanzar con la ayuda de la brisa nocturna.


Una vez que ya todo se encontraba en orden y el barco comenzaba a andar por su cuenta fue que Tony los reunió de manera rápida a todos, incluyendo ahora a Steve en aquel círculo que normalmente formaban, ya que éste desde la conversación que habían tenido comenzó a cambiar su actitud, volviendo a ser poco a poco el Steve que Tony llegó a conocer en un principio: el verdadero Steve.


—Quiero agradecerles inmensamente a todos ustedes, sin el apoyo de cada uno hubiese sido imposible el ayudar a estas familias que sobreviven a diario con mucho trabajo. Una vez más hemos tenido éxito en nuestra misión y a decir verdad no esperaba menos de tan increíble tripulación, estoy muy orgulloso. Gracias —habló Tony con satisfacción viendo las sonrisas que sus palabras comenzaban a formar en sus compañeros—. ¡También quiero un muy fuerte aplauso para nuestro tripulante más joven! —dijo señalando a Peter con orgullo.


Peter miró a su capitán un poco confuso escuchando como todos los de su alrededor a excepción de Steve comenzaban a aplaudir con grandes sonrisas de por medio.


—Felicidades pequeño, ya eres oficialmente un vengador, hiciste un buen trabajo —felicitó el capitán hasta acercarse al joven para darle un fuerte y estrecho abrazo.


El muchacho no cabía de la felicidad por todo aquello, a la vez de que escuchaba como todos los demás lo felicitaban y elogiaban, agradeciendo sin parar el que le hayan dado una oportunidad, en especial al capitán.


—A este paso te quitará el puesto de capitán, Tony —dijo Loki con gracia.


—Créeme, no lo dudo —respondió el castaño con satisfacción.


Steve al ver aquella escena tan bonita, familiar y cálida, decidió esperar a que los aplausos y aclamaciones cesaran para él también poder tomar la palabra.


—A mí también me gustaría decir algo —comenzó hablando el caballero tomando la completa y seria atención de todos los presentes—, sé que en estos días no me he portado muy bien con ustedes, en especial con Tony y Natasha, por lo que a todos y cada uno les quiero ofrecer mis más sinceras disculpas, me dejé cegar por los prejuicios juzgandolos antes de saber las razones por las cuales hacían todo lo que hacen. Me gustaría empezar de nuevo y por favor llámenme Steve, no Lord Rogers. Soy su igual —finalizó sus disculpas el rubio haciendo una leve reverencia que normalmente se realizaba en las familias de los nobles, mostrando con ello el respeto y admiración que les tenía.


—Steve no tienes porque, en todo caso yo soy la que quiero ofrecer una gran y sincera disculpa —habló Natasha haciendo que el caballero se levantara para poder mirarla—. Todos los aquí presentes jamás quisimos lastimarte y siento haberme acercado en un principio a ti y a Bucky para lograr nuestros propósitos. Pero te lo digo con el corazón en la mano Steve, lo que siento por Bucky es real y siempre lo será —finalizó Natasha sintiendo como unas lágrimas querían comenzar a salir.


Aquello era una confesión pública para todos. Hasta donde los Vengadores sabían, aquel romance de la pelirroja con el noble solo había sido una treta para conseguir información; nunca nadie llegó a creer que fuera más que en serio para la pirata, a excepción de Clint. Pero el que Natasha se lo confesara a Steve ahí enfrente de los demás con los ojos a punto del llanto sólo aumentaban la veracidad del amor que la pelirroja le tenía a Bucky.


Tony de la nada se sintió mal al obligar a la pelirroja a traicionar a su amado sin tomar en cuenta sus sentimientos, pero sabía que ya luego se podría dar un tiempo para hablar con ella a solas.


—Acepto tus disculpas Natasha —respondió Steve por fin omitiendo por primera vez el Lady, sonriéndole a la pelirroja demostrándole que ahora sí le creía y que todo lo pasado se quedaba ahí, en el pasado.


—¡Wow, Nat! Sí que te lo tenías guardado, pobre hombre no sabe que se involucró con la mujer más terrorífica de los 7 mares —dijo Loki de pronto aligerando el ambiente y sacando una que otra risa, incluyendo a Natasha que sonrió resignandose a la actitud de sus amigos.


—Bueno ya que todos somos amigos otra vez y en vista del grandioso éxito obtenido, declaro que nuestro próximo destino serán… ¡unas vacaciones! —exclamó Tony con gusto ganándose el asombro de todos los demás—. Hemos trabajado mucho y merecemos disfrutar del mundo como tal.


—¡Por fin! Unas vacaciones —exclamó Clint soltando un exagerado suspiro como si estuviera en extremo cansado.


Todos estuvieron de acuerdo con aquella frase y asintieron con agrado por la nueva situación. No estaba de más el que se tomaran unos días o incluso meses para ellos únicamente.


—¡Perfecto! decidiré nuestro primer destino junto con Steve —comentó el castaño obteniendo una mirada de desconcierto por parte del rubio—.  Pueden volver a sus puestos.


Con aquello dicho cada uno regresó a atender sus asuntos, deshaciendo el pequeño círculo dejando a Steve y Tony solos.


—¿Qué fue eso? —preguntó Steve con una ceja enarcada a la vez de que se acercaba más al capitán.


—Ven, te lo mostraré —respondió Tony para después caminar a su camarote asegurándose de estar siendo seguido por el caballero.


Cuando llegaron al cuarto Tony se acercó a la mesa de madera que se encontraba ahí y abrió un compartimiento que estaba debajo de ésta, como un cajón en el cual contenía varios pergaminos guardados. El capitán solo se interesó por uno, el cual sacó y desdobló para así poderlo extender sobre toda la mesa, poniendo su brújula y un vaso a las esquinas para que este se mantuviera a la vista.


—¿Un mapa? —Steve preguntó aún más confundido mientras veía el pergamino.


—Así es, obvio es un mapa de la región en la cual nos encontramos, para tener un mapa de todo el mundo se necesitaría muchísimo más espacio, pero empezaremos por aquí —señaló Tony los territorios que se mostraban dibujados para luego continuar—. Selecciona a donde te gustaria viajar, no sé, algún lugar que siempre tuviste ganas de conocer que se encuentre en este mapa y ahí es a donde nos dirigiremos.


Steve miró al castaño sin comprender que era realmente todo aquello  ¿Por qué le estaba dando el poder de elegir? Después de todo él no era nadie en aquella tripulación como para decidir el destino de toda la embarcación.


—Vamos Steve, no me hagas rogarte, sólo escoge un lugar interesante para ti y punto. Después de todo nosotros los vengadores ya conocemos bastantes lugares y el único que no ha salido a descubrir las maravillas del mundo eres tú —dijo Tony al ver la indecisión en los ojos azules.


La verdadera razón por la cual hacía todo aquello era porque realmente esperaba complacer a Steve en su estadía con ellos, quería que el rubio se sintiera cómodo, que disfrutara pasar el rato con en su compañía, y que no pareciera que lo tenían ahí por mera obligación; pero sobre todas las cosas, lo hacía porque quería ver al rubio sonreír de felicidad, sentimiento bastante extraño en el capitán, ya que hasta él mismo a veces solo se preocupaba por sus propios intereses.


—Por lo mismo de que yo casi nunca he viajado la verdad es que desconozco qué lugares podrían ser buenos para que todos lo disfruten —dijo Steve más para sí mismo que para Tony mientras veía aquel mapa con la barbilla apoyada en su mano en un gesto pensativo.


El castaño con ello llegó a pensar como rayos Steve podía ser tan amable a pesar de todo. Aun cuando le dijo que podía escoger el destino, el rubio se enfocaba en pensar que podría ser lo mejor para todos los piratas. Aquel cruel mundo no merecía a alguien como Steve.


—Está bien, ¿te parece si yo decido uno de los lugares más bonitos a los que hemos ido? Para que lo conozcas —dijo Tony viendo como Steve subía la mirada con alivio, como si le hubieran quitado un peso de encima, para después sonreír y asentir.


                                                                          ><><><><><


Pasaron pocos días hasta que por fin arribaron al destino que tenía planeado el capitán para Steve. Se trataba de una isla aparentemente desierta que a simple vista encandilaba con la belleza que su naturaleza ofrecía.


Al momento en el que Steve la observó faltando poco para anclar el barco  se quedó sin palabras ante tal atractivo paisaje que se mostraba frente a sus pupilas.


Arena suave y blanca como la nieve, la vegetación fresca y verde decorada por una gran variedad de colores gracias a las flores que nacían ahí, pero lo más hermoso era el agua al mostrarse de un color verde azulado claro luciendo casi transparente, que dejaba ver una parte llena de corales y pececillos de colores, sencillamente majestuosos.


—Hemos venido aquí unas dos veces, pero para ti y para Peter será su primer vez, es simplemente hermoso, entiendo porque al capitán le gusta regresar a este lugar de vez en cuando —dijo Thor quien se encontraba cerca de Steve, notándose boquiabierto por la vista a su alrededor.


Steve al escuchar las palabras de su compañero buscó con la mirada a Peter, notando con gracia como el más joven también se encontraba con la boca abierta.


—¡Bienvenidos a la isla vengadores! —gritó Tony a todo pulmón para que todos o al menos la mayoría de los de su tripulación lo pudiese escuchar.


—¿La isla vengadores? —preguntó Bruce con una ligera sonrisa al ser quien encontraba más cerca de su capitán.


—Nadie la ha nombrado, ni siquiera encontrado, no veo porque no pueda bautizarla —respondió el castaño como si fuera lo más obvio del mundo viendo como su hermano de ciencia se limitaba a sonreír y negar con la cabeza.


Al momento de anclar el barco y comenzar a pisar tierra firme Steve notó como todos los de la tripulación daban gritos de regocijo mientras se apresuraban para empezar a correr hacia adentro de la isla, como dirigiéndose a un punto en concreto.


Algunos se mostraban más rápidos y eufóricos que otros, pero con el pasar de los segundos fue que uno por uno se fue perdiendo en la enorme y vasta vegetación que estaba en la isla. Incluso Peter corrió apresurado siguiendo a los demás, con cara emocionada pero en expectación, sin saber a ciencia cierta a qué lugar se dirigía en específico, pero sin  contener toda su euforia, dejándose guiar por las acciones de los mayores.


Steve en cambio no supo qué hacer, por lo que se quedó parado mirándolos alejarse. Tony fue el que se percató de esto, por lo que justo cuando estaba a punto de adentrarse por completo en aquella isla fue que dio media vuelta y se volvió para posarse a lado del rubio y sin pensarlo lo tomó de la mano.


—¡Vamos! No te quedes atrás —le dijo Tony con una sonrisa sin soltarlo ni un poco para después comenzar a caminar y jalarlo para que lo siguiese.


Steve tampoco pensó mucho en aquella mano que se encontraba unida a la suya, simplemente se dejó guiar por la calidez del castaño, siguiéndolo sin percatarse de que inconscientemente afianzaba su agarre. Tony en cambio, era más que consciente del agarre que estaba correspondiendo el rubio en su mano, pero fingió el no tomarle ni un poco de importancia, mostrándose casual mientras que por dentro sentía como los nervios comenzaban a invadirlo.


Caminaron juntos tomados de la mano por unos pocos minutos hasta que finalmente llegaron a lo que parecía ser el centro de aquella isla, con una imponente y sublime gran cascada que caía a lo que parecía ser un puro y claro lago de agua dulce provocando un sonido de paz y armonía en el lugar.  


Para cuando los dos llegaron,  todos los demás ya se encontraban prácticamente dentro del agua, zambulléndose con gusto y placer al sentir la fresca agua sobre su piel. El caballero comenzó a sentir como se le subía la sangre a la cabeza al notar como todos los hombres se encontraban prácticamente DESNUDOS nadando a la intemperie sin nada que cubriera sus entrepiernas. La única que se encontraba con su corsé interior puesto era Natasha, la cual increíblemente no parecía inmutarse ni un poquito por toda la hombría libre a su alrededor.


Steve sabía que aquellos piratas vivían sin reglas, estatutos o preocupaciones, pero no se imaginó aquello de forma tan liberal. Fue en el momento que dejó de sentir el calor de la mano de Tony en la suya que volteó a su lado, notando como éste comenzaba a desnudarse a su lado sin quitar la vista del enorme lago con una sonrisa.


El rubio no supo porque el ver como el de piel acanelada comenzaba quitarse la ropa le dió muchísima más vergüenza que antes, por lo que por reflejo apartó la mirada, sintiendo ahora sí sus mejillas completamente acaloradas.


Tony notó todos y cada uno de los gestos del príncipe azul, que le provocaron un ligero calorcito de satisfacción en el pecho. No por ello dejó desvestirse, pero al momento de estar a punto de quitarse su ropa interior para quedar totalmente sin nada encima fue que se detuvo, no porque fuera la primera vez que nadaba desnudo, ni porque pensara que fuera incorrecto, sino por el simple hecho de que ahora no se encontraba solamente con su tripulación, ahora se encontraba con Rogers, con el guapo, atractivo y perfecto  Rogers y por alguna inexplicable e incoherente razón, le daba pena mostrarse completamente al descubierto frente a él.


Tony Stark, el pirata más temido de todos ¿Sintiendo vergüenza por la desnudez? Definitivamente era algo atípico en su personalidad, pero decidió ignorarlo al comenzar a sentirse de verdad abrumado por el hecho. Para enfriar su cerebro fue que una vez estando sólo con su ropa interior se adentró con un gran clavado hacia el cristalino lago, refrescándose finalmente en aquellas aguas limpias y dulces sintiendo placer en ello.


Steve ahora era el único que se encontraba seco con todas sus prendas puestas, por lo que no tardó mucho en ser presionado por los piratas para que se metiese de una vez al agua.


—Adelante Steve, el agua esta deliciosa —dijo Bruce viendo al rubio aun indeciso en si meterse o no.


—¡Anímate Steve! Te lo estás perdiendo —gritó Clint para después sumergirse y nadar como pez en el agua.


—¡Steve¡ ¡Steve! ¡Steve! —comenzó a gritar Natasha siendo seguida inmediatamente en coro por todos los demás, animando al caballero a que por fin probara un chapuzón.


El rubio se vio abrumado por la presión social que estaban ejerciendo en él y con nerviosismo e incomodidad fue que también se comenzó a deshacerse de sus prendas hasta quedar en ropa interior al igual que Tony y sumergirse en aquellas claras aguas.


A pesar de que lo hizo en movimientos rápidos para después cubrir su cuerpo en el agua, Tony tomó nota de todos y cada uno de los exquisitos músculos que se habían mostrado a la vista para su gracia, a pesar de que  fue por muy cortos segundos. Aquellos grandes pectorales, acompañados de esos rectos abdominales y fuertes bíceps eran algo digno de saborear.


Tony no pudo evitar comenzar a excitarse ni fantasear con aquel cuerpo tan perfecto y bien trabajado, ya que casi al instante sintió como de lleno le aventaban un chorro de agua en la cara, sacándolo del trance en el cual había entrado, notando como Loki con ese gesto le hacía entender que debía de despertar.


El capitán comprendió el asunto, además, no quería que su deseo sexual hacia el rubio interfiriera en la relación que apenas estaba volviendo a construir con este. No lo quería asustar ni nada por el estilo, por lo que dejó todos sus deseos de lado, disponiéndose a disfrutar de aquel hermoso lago junto con sus amigos.


Para Steve en pocos minutos la vergüenza se había ido e inesperadamente no pasó mucho para que se pudiese acoplar perfectamente en el ambiente junto con todos ellos.


Nadaron, jugaron, rieron y se divirtieron como hace mucho no lo hacían. Todos conviviendo con todos, como la gran familia que eran, solo que con una persona extra incluida ya en su pequeño grupito.


Hubo un punto en el que tanto Thor como Loki se alejaron un poco de todos los demás, tomando distancia pero no la suficiente como para no quedar a la vista de las personas que se encontraban por los alrededores.


A ninguno de los dos “hermanos” les importó. Loki al ver al rubio de cabellos largos todo empapado, mostrando su cuerpo en todo su esplendor, con gotas de agua perlando su piel sencillamente no se pudo aguantar las ganas de llevar al fortachón hacia un rinconcito para comenzar a besarlo con insistencia, siendo muy rápida y gratamente correspondido por el más alto.


Loki había reprendido a Tony por habérsele quedando viendo a Steve, pero eso no significaba que él tuviera que reprimirse al respecto, después de todo, él sí podía hacer lo que quisiera y con más que consentimiento.


A decir verdad a ninguno de los piratas les impresionó o importó las acciones de aquellos dos calientes. Incluso Peter a pesar de ser aún muy joven, tuvo que comenzar a acostumbrarse por aquellas muestras de afecto que a veces se tornaban un tanto intensas. Ya no era nada del otro mundo, para todos era de lo más natural… claro, para todos menos para el caballero Steve Rogers.


El rubio JAMÁS en todos los años que llevaba de vida había visto algo parecido a aquello  mostrándose de forma tan normal y natural para todos. La verdad es que si Steve hiciera un conteo de las cosas que lo habían dejado boquiabierto desde que comenzó a viajar con aquellos piratas, muy probablemente no le alcanzarían los dedos de las manos.


Steve sabía que existían ese tipo de personas, personas que sentían atracción por otras de su mismo sexo, pero también sabía por todo lo que le habían enseñado desde pequeño que eso era considerado una gran abominación en la sociedad. Era algo malo, uno de los peores pecados que un ser humano podía cometer. Si Thor y Loki se mostraran besándose así en cualquier lugar público probablemente serían colgados en la horca, y no exageraba, de verdad el ser homosexual para todos podría igualarse a ser un asesino o violador, sin embargo ahí se mostraban, frente a sus azulados ojos, como algo de lo más natural y sobre todo, inofensivo.


El rubio caballero no pudo quedarse viendo por mucho tiempo, en el momento justo en el que salió de su estupor desvió la mirada exageradamente, evitando a toda costa el verlos a pesar de sentir tremenda curiosidad por ello, al final, Steve no quería mostrarse irrespetuoso con los piratas y el quedarse mirando sería algo incómodo tanto para él como la pareja que compartía besos.


Al parecer nadie de los demás tripulantes recordó los modales e ideales que traía Steve, ni se percataron como éste sólo por un instante ya no sabía ni qué hacer o pensar con lo que estaba sucediendo. Cada quién estaba en su propio mundo, disfrutando de su nado y de la compañía de los otros, por lo que aquel singular y breve gesto por parte del rubio al notarse impactado hacia las muestras de afecto homosexual, no fue advertido por absolutamente nadie.


Steve también hizo de su parte y se forzó a despejar su mente en otras cosas, tratando de olvidar lo que sus ojos habían apreciado siendo más fácil al ver como después de unos minutos, Thor y Loki salían del agua, tomaban sus prendas, y desaparecían entre la vegetación probablemente dirigiéndose a algún lugar más privado.


Nadie hizo ningún comentario al respecto ni se tocó el tema, por lo que siguieron disfrutando de las apacibles aguas.


Poco a poco comenzó a hacerse presente el atardecer para dar paso a la noche, y así como lentamente el sol se iba metiendo fue que los tripulantes de la misma forma empezaron a salirse del agua dando por terminada su sesión de nado, secándose y poniéndose sus respectivas ropas.


Los últimos en salir fueron Tony, Peter y Steve, al haberse quedado sólo un pequeño rato más jugando a quién podía aguantar más la respiración bajo el agua. Tony se proclamó ganador al hacer seguidamente trampa sin sumirse dentro del agua hasta que presentía que los otros dos saldrían a tomar respiración y entre risas, chistes de Tony, y comentarios banales, fue que los tres decidieron terminar por aquel día y secándose para vestirse , ya que la noche comenzaba a dar paso a un viento frío.


Tony reprimió todos sus pensamientos pervertidos evitando ver a toda costa mirar el cuerpo del rubio, fallando por completo en lo segundo al echar vistazos de vez en cuando mientras se ponían su ropa de nuevo. Claro que la presencia de Peter ahí con ellos también le ayudó a calmar su mente en aquel aspecto. Debía de comportarse con el más joven presente, después de todo era él ejemplo a seguir del pequeño.


Cuando terminaron de cambiarse los tres se dirigieron hacia la orilla del mar, donde cerca de ahí se encontraba su barco, ya que los Vengadores se habían encargado de hacer una fogata en la arena para así calentarlos a todos, asar los respectivos peces que Clint antes ya se había encargado de pescar y terminar el día de la mejor forma posible.


Steve y Tony se encontraban sentados en un gran tronco de madera, uno a lado del otro frente a la cálida fogata en la cual los demás se encontraban alrededor platicando con sonrisas y asando su comida.


El rubio pudo percatarse de cómo tanto Thor como Loki no habían regresado y al notar como cada quien estaba en su propia platica y Tony estaba disponible para una charla no pudo evitar sacar a flote el tema.


—¡Oh!, eso… tú no te preocupes Steve, pronto regresaran, seguramente andan haciendo sus cosas —contestó Tony como si nada ante el comentario del caballero sobre que aún no aparecían aquellos dos.


Steve frunció levemente el ceño, con aquella respuesta dada tan fácilmente se podía dar un malentendido, por lo que continuó con sus cuestionamientos.


— ¿Siempre son así de…. cariñosos?


—Si con cariñosos te refieres específicamente a que se comen a besos, sí, por lo regular  son así siempre, solo que no te había tocado verlos —dijo el castaño como si nada, pero después abrió de más los ojos, dándose cuenta por fin por qué de todos aquellos cuestionamientos por parte del rubio.


—Pero son dos hombres… —dijo Steve tratando de no sonar grosero, pero queriendo dar a entender a lo que se refería.


Tony ahora lo comprendía, comprendía el pensamiento inculcado por los nobles; personas de la realeza, iglesia y demás. Pero no por ello el capitán iba a reprimir sus opiniones y pensamientos al respecto y si podía hacer que Steve cambiara tan solo un poquito de opinión, con eso bastaba.


—Dime Steve, ¿Tú por qué crees que esté mal una relación entre dos personas del mismo sexo? —preguntó posando firmemente su mirada en los ojos azulados notando algo de confusión en ellos.


—Mmmm la verdad es que no sabría qué decir al respecto. Supongo porque desde que tengo memoria se me ha repetido que eso no es natural, que esas personas son malvados, pervertidos, depravados, enfermos….


—¿Y tú crees que Loki o incluso Thor comparten algunas de esas características que tu mencionas?


Steve al escuchar aquella pregunta fue que su mente comenzó a formular cuestionamientos que nunca antes se hizo. A pesar de que no fuera mucho, había tenido la oportunidad de convivir más con Thor y la realidad es que él no era ninguna de aquellas cosas, al contrario, Thor era un hombre amable, gentil, bueno, respetuoso, con sentido de lealtad y justicia. El simple hecho de que se uniera a la noble causa de ayudar a los más pobres lo demostraba… entonces, ¿Porque la sociedad catalogaba una cosa con otras totalmente diferentes?


—Yo no sé tú Steve, pero lo que yo veo son solamente a dos personas, que tienen la madurez suficiente para saber lo que quieren y que se aman con locura; que se tienen un gran cariño y que demuestran su amor de solo la forma en la que ellos saben. El amor puro y real por alguien más no puede ser algo malvado, depravado o enfermo ¿o sí?. La verdad yo lo veo de esa forma, pero al fin y al cabo es una opinión y comprendo que no todas las personas puedan pensar de la misma manera —dijo Tony finalmente desviando su mirada de los ojos del rubio y subiéndola para quedarse con la cabeza hacia arriba, apreciando el negro cielo que se decoraba con bastas y luminosas estrellas.


El caballero nunca había debatido su perspectiva respecto al tema y ahora que escuchaba a Tony hablar podía sentir como se le abrían los ojos. El generalizar, juzgar y ser prejuicioso eran realmente comportamientos del todo ignorantes, cerrados y poco inteligentes. Steve era consciente de la amplia capacidad mental del castaño, tanto que hasta le hizo cuestionarse sus “ideales”, que más bien no eran realmente parte de él, sino que simplemente se los inculcaron como a cualquier otro hijo de familia noble.


¿Y que si Tony tenía razón? ¿Qué si toda la sociedad estuviera mal? ¿Acaso era posible aquello? Steve no lo sabía, pero lo que sí sabía es que las palabras del castaño tenían sentido, mucho sentido y eran del todo coherentes.


Fue en ese momento en el cual, Steve volteó directamente a ver a Tony mirando el magnífico cielo, tomando nota de todas y cada una de las facciones del contrario haciendo especial énfasis en la muy tenue sonrisa que se asomaba rodeada de la perfecta barba cortada, sintiendo por primera vez en toda su vida un brincoteo sin igual en su corazón.


 
Notas finales:

Quiero dedicar este capítulo a Niky Aragón, que es la personita la cual me ayudo a corregir el capítulo siendo ya mi Beta. También quiero agradecer a todos los que me ofrecieron su apoyo, sin lugar a dudas les digo que estoy realmente conmovida y es un honor el escribir para ustedes, gracias.

No leemos.  


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).