Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Poseidón por Pao araceli

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Nuevo capitulo! disfruten

Capítulo 5

--------------------------------------------

 

-Te estas divirtiendo? – pregunto Sidon en una pausa que habían hecho para hidratarse luego de bailar un rato

-… - Link asintió sin poder quitar la sonrisa de su cara. Era la mejor primera cita del mundo

Sidon iba a decir algo mas pero su atención fue captada por la pequeña niña de tras de Link intentaba tomar uno de los pastelillos que se encontraba en la barra de bocadillos, estaba parada de puntitas intentando alcanzar el que tenía más chispas colores. El pelirrojo se acercó tomo paso el pastelito, la niña le miraba un poco asustada antes de que se agachara y se lo entregara en sus pequeñas manos. Link que miraba todo no pudo evitar sentirse totalmente enternecido por la acción del chico que le gustaba pues eso decía mucho de él.

-Estas tu sola? – pregunto de pronto a la niña

-No – ella negó con su cabeza – mis papis están en la mesa – dijo mientras señalaba una mesa un poco alejada donde se veía a un preocupado rubio que comenzaba a mirar a todos lados antes de que el moreno a su lado preguntara que pasaba

-Cómo te llamas? – le pregunto

-Greta

-Muy bien Greta, que te parece si regresas pronto con tus papis eh, seguro que están preocupados por ti, no deberías alejarte sin su permiso – dijo mientras le revolvía el cabello

-Si! – contesto ella con las mejillas sonrosadas

 

 

En la cabina del capitán la tripulación cumplía con sus tareas asignadas, cada hombre se encontraba en su puesto y nadie perdía de vista los sensores. Todo se encontraba en perfecto orden sin embargo el  teniente no dejaba de sentir ese mal presentimiento y cada vez miraba más insistente al radar pero era lo mismo, no detectaba nada. Fue cuando tomo los binoculares y el mismo se puso a buscar aquello que le producía tal sensación que fue cuando lo encontró. Aquel mal presentimiento no estaba infundado, no, era más que acertado.

-Contacten al capitán! – ordeno – y ustedes activen el motor y pónganlo a toda máquina, giren a estribor!

-Que sucede? – pregunto uno de los cabos sin dejar de hacer lo que le pidieron

-Seremos golpeados por una ola errante  – dijo seriamente y todos en la cabina le miraron aterrados

-Quiere que active la alarma señor? – pregunto alguien sin poder evitar el temor en su voz

-No – dijo el teniente – eso tan solo creara pánico, contacten al capitán el decidirá que hacer…  la mayoría de los pasajeros se encuentran en el salón con el

Lo único que podían hacer ahora era intentar alcanzar la ola antes de que reventara de lo contario les iría muy mal. Solo quedaba proteger como fuera posible a los pasajeros así que eso harían el tomo el radio y presiono el botón esperando contactarse con el capitán quien era el anfitrión de la fiesta que se realizaba en el salón.

Faltaban quince minutos antes de que dieran las doce de la madrugada el capitán se preparaba repasando mentalmente el discurso que había planeado para la celebración del nuevo año que venía en camino, con micrófono en mano daba vueltas mientras lo repetía una y otra vez pues no quería olvidar nada de tan inspirador mensaje que había planeado.

Estaba a punto de encender el micrófono cuando un cabo le pasó su radio, la mirada del hombre parecía preocupada por lo que no se demoró más y tomo sostuvo lo que le ofrecía. El teniente le dijo claramente lo que ocurría y de pronto la alegre mirada del capitán se transformó a una seria y determinada.

-Comiencen a cerrar las compuertas – dijo firmemente

-Si señor! – dijo el cabo y junto a otros hombres se dirigieron a cumplir la orden

 

-Muy bien Greta, ya no hagas esperar a tus papis – dijo Sidon antes de revolverle nuevamente el cabello

-“fue un placer conocerte” – dijo Link cuando la niña volteo a verlo pues había permanecido a un lado del pelirrojo mirándoles

-Él dice que fue un placer conocerte – le explico el pelirrojo al ver que ella no entendía

La tripulación del barco seguía las órdenes del capitán y cerraba las compuertas intentando no llamar la atención de los pasajeros para evitar el pánico pero antes de que pudieran cerrarlas todo el barco se sacudió fuertemente y al instante comenzaba a inclinarse.

-Greta! Link! – grito Sidon al verlos caer a ambos al suelo

Sin perder el tiempo abrazo a la niña y se acercó lo más rápido que pudo al cuerpo del rubio para abrazarle también en un intento de protegerle mientras su cuerpo se resbalaba por el piso.

No muy lejos de ellos Wolfram asustado intentaba sostenerse de algo mientras su mirada seguía buscando a su pequeña hija. No se había dado cuenta de que su esposo ya no estaba a su lado. En su intento por encontrar a la niña no se dio cuenta de que una silla se dirigía hacia él, el impacto fue fuerte y le hizo apartar la mirada pues el golpe le había dejado aturdido.

Cuando Iwaizumi vio los vasos y platos caer al piso supo que algo andaba mal, no lo menos dos veces antes de agarrar la mano de su esposo con fuerza y acercarle a sí mismo, y cuando la fuerza de gravedad los había hecho caer al piso no le soltó por nada del mundo. Ambos gritaban, lo sabía pero no podían evitarlo.

Antes de que Edward pudiera hablarle a Roy sobre su hermano los dos ya estaban siendo arrastrados por el piso del barco, sus pies habían topado con los objetos amontonados junto a la pared lo que hizo que se fuera de frente hasta caer en dicha pared que por el momento era el nuevo piso.

Yuri había caído junto al pequeño rubio y en el pequeño lapso de tiempo antes de que la gravedad volviera a hacer lo suyo y le arrastrara de nuevo, busco con la mirada a su esposo pero por más que intentaba ver no podía pues uno de los cristales de sus lentes se encontraba estrellado y la sangre que resbalaba de su frente le impedía la visión a su otro ojo.

En la discoteca todo era igual, las personas se resbalaban por doquier al igual que los objetos a su alrededor la única diferencia era que el cableado de luz y sonido comenzaba a reventase y dejaba escapar la electricidad.

Alphonse había perdido a Winry casi al instante y esperaba por lo más preciado en el mundo que ella y su hermano estuvieran bien.

Yurio se aferraba a la mano de Otabek quien por fortuna había encontrado un lugar de donde sostenerse, sin importar el cansancio que comenzaba a sentir en sus brazos el no soltaría al rubio, los mantendría a los dos a salvo.

Estas eran algunas de las situaciones a las que se enfrentaban los pasajeros del barco. Quienes estaban dentro tenían que evitar ser golpeados por objetos o el cableado o quizás en lugares como lo era la cocina se tenía suerte si no eran alcanzados por el gas que se prendía. Las personas que estaban en los exteriores habían terminado ya en la inmensidad del océano, no habían podido hacer mucho para salvar sus vidas pues al impactarse la ola el agua de esta les había tirado fuera del barco.

Eran demasiadas vidas las que se estaban perdiendo cada que el barco giraba, parecía una eternidad cuando en realidad todo había pasado en tan solo unos minutos. Cuando el barco por fin se detuvo las luces se apagaron dejando todo a obscuras por unos segundos antes de que volvieran a prenderse gracias al regulador.

Algunas personas, los sobrevivientes,  comenzaron a levantarse como podrían puesto que se encontraban atrapados entre los “escombros” entiéndase los muebles o personas ya sin vida.

Cuando Yuuri abrió los ojos su vista estaba borrosa, estaba confundido, no lograba entender que era lo que había pasado, lo que si sabía era que algo le estaba impidiendo respirar bien por lo que aun resintiendo los golpes en sus músculos hizo a un lado lo que estaba sobre él y como pudo se levantó. Se quedó parado un momento antes de que sus pensamientos se aclararan y cuando por fin pudo entender lo que había pasado entro en pánico y comenzó a buscar a su esposo y a su hija.

-Wolfram! – le llamo – Greta!

Su mirada iba de un lado a otro hasta que cerca de ahí capto la cabellera rubia de su esposo, sin pensarlo dos veces corrió hacia él y levanto lo que le impedía levantarse. Cuando no hubo nada sobre él le ayudo a levantarse pues Wolfram estaba más concentrado en recuperar el aire que había perdido.

-Yu-Yu… no puedo… no puedo respirar – decía entrecortado, la agitación y el pánico le impedían la tarea

-Tranquilízate – Yuuri le tomo de los hombros fuertemente – inhala y exhala, uno, dos – el conteo ayudaba pues Wolfram seguía sus indicaciones tanto como podía y repitiendo una vez más el proceso pudo respirar normal nuevamente

-Yuuri… - dijo el rubio antes de abrazarle y llorar en su hombro y hubiera seguido de no ser porque de pronto algo importante llego a su cabeza – Mi bebe! Yuuri mi bebe!

-Greta…

-Greta! – grito Wolfram y comenzó a buscar

 

Fue el grito desesperado de ambos padres lo que logro que Sidon reaccionara, se sentía demasiado adolorido pero en ningún momento soltó su preciada carga, aun recostado entre el inestable montón de madera y cuerpos miro al chico y a la pequeña niña que aún estaban en sus brazos inconscientes, no podía culparlos con semejante susto cualquiera perdería el conocimiento, se sentía tranquilo al sentir que respiraban, eso era lo importante.

Se levantó sin soltarles haciendo fuera en sus brazos que cada vez parecían volverse más débiles. Ante el movimiento Link pareció reaccionar, abrió sus ojos y miro al pelirrojo confundido antes de recordar que era lo que había pasado, cuando lo hizo sus ojos se abrieron a mas no poder, se removió un poco per Sidon no le soltó hasta comprobar que se podía mantener de pie por el mismo.

-Greta! – nuevamente capto el desesperado grito

-Ella está aquí, está bien! – grito en después llamando la atención de ambos padres que al ubicar de donde provenía el llamado acudieron a el

-Mi bebe! – sollozo Wolfram cuando Sidon le entrego a la niña en brazos

-Solo esta inconsciente, no tardara en despertar – aseguro el

-Muchas gracias amigo – dijo Yuuri sinceramente para luego abrazar a su familia

-Fue un placer – respondió el – Link estas bien? – le pregunto al joven a su lado – estas herido? Te duele algo? – había puesto sus manos en sus mejillas mientras miraba que no hubiera ningún rasguño

-“Estoy bien” – dijo – “que hay de ti?, no te lastimaste nada?” – pregunto preocupado por el

-No te preocupes por mí – respondió Sidon con una sonrisa en su rostro

Dicha sonrisa se borró cuando escucharon una voz conocida, ambos voltearon al lugar de donde provenía el sonido y al instante se dieron cuenta de quien se trataba. No era nadas más ni nada menos que Tooru, se le veía desesperado abrazando a su esposo mientras le llamaba por su nombre  en un intento de que despertara.

-No podemos dejarle así – dijo Sidon y Link asintió en total acuerdo, ambos se acercaron a la pareja

-Iwa-chan esto no es gracioso, despierta – pedía Tooru las lágrimas ya habían comenzado a descender de sus ojos

-Tooru-san – Le llamo el pelirrojo

-Si-Sidon? – pregunto no tan seguro pues la lagrimas le obstruían la vista

-Sí, somos nosotros Link y Sidon, que pasa?

-Es Hajime, me protegió cuando todo esto paso pero ahora no despierta – sollozo

-Puedo? – pregunto mientras se agachaba hasta quedar a su altura

-… - el castaño asintió aun sin dejar de abrazar a su esposo

Sidon coloco su cabeza en el pecho del hombre y por suerte logro oír los latidos acompasados del hombre, no había nada de que preocuparse, seguro se había golpeado la cabeza con algo y le había dejado inconsciente, se sintió feliz de que no hubiera sido más grave.

-Descuida – le dijo – solo esta inconsciente, seguro no tardara en despertar

-Gracias – le sonrió aun ente lágrimas

-Tooru? – el rubio que aún seguía abrazado a su hija y a su esposo había notado la conmoción y reconoció al castaño de inmediato

-Wolf-san – dijo Oikawa al verlo frente suyo

-Que paso? – pregunto el rubio sinceramente preocupado por la pareja

-Iwaizumi-san esta inconsciente – respondió Sidon por el chico que aun lloraba

-… - Link le abrazo al no poder demostrar su apoyo y dolor con palabras

-Tranquilo, estamos aquí para ti, veras que pronto abrirá sus ojos de nuevo – dijo Wolfram se unía al abrazo

-Gracias – Oikawa en verdad necesitaba ese abrazo

 

No muy lejos de ahí un pelinegro de lentes se levantaba lentamente del lugar donde su cuerpo había caído luego del brusco movimiento del barco, cuando por fin logro ponerse de pie lo primero que hizo fue llevar su mano a su frente, aún no había dejado de sangrar, dolía!

Le costó algo de tiempo antes de que su mente procesara lo que estaba ocurriendo pero cuando sus ideas se acomodaron el pánico le invadió de golpe. Donde estaba su esposo? La última vez que lo había visto se había levantado para ir al baño y no mucho tiempo después el barco se había volcado!

-Víctor! Donde estás? – se quitó sus anteojos y limpio la sangre que le impedía ver correctamente y luego de ponerse los lentes de nuevo reanudo la búsqueda, no podía estar muy lejos o sí?

-Yuri! – le grito el platinado en respuesta

-Víctor! – Yuri miro al lugar donde había provenido el grito de su esposo

El pelinegro corrió a su encuentro, su esposo se encontraba sepultado por varias mesas que habían caído sobre él, estaba atorado pero con un poco de ayuda logro salir, lo primero que hizo fue abrazar a su esposo y luego besarlo sin soltar el abraza. Se había preocupado mucho, había temido lo peor.

-Vitya, Yurio… Yurio… tenemos que ir por el – sollozaba el pelinegro

-Lo haremos, iremos por nuestro gatito, seguro que está bien, no te preocupes – le consoló mientras repartía besos en su cabeza

-Si pe-

-No de nuevo, no de nuevo…. – la pareja escucho cerca suyo – no de nuevo, no de nuevo – ambos miraron al hombre que hincado en el suelo repetía las palabras una y otra vez, se le veía ansioso

-Oye, estas bien? – pregunto Víctor

-… - el hombre se sobresaltó ante el toque del ruso – que… yo… Edward!

-Quien? – pregunto Yuri

-Edward! – ambos escucharon – donde estas!

-Roy! Ayúdame a bajar de aquí! – grito el rubio en respuesta

Víctor y Yuri miraron la escena. El chico llamado Edward estaba en uno de los balcones del salón, al estar el barco de cabeza no había una forma de baja de ahí al menos que el chico saltara, aun así la distancia de donde estaba y del “piso” era lo suficiente como para que se lastimara.

-Como llegaste ahí! – dijo el hombre llamado Roy, se le veía considerablemente aliviado de ver que el chico se encontraba bien

-Ni siquiera yo lo sé! – Respondió Ed – solo sé que no me gusta estar aquí! Así que busca una forma de que pueda bajar

-La cortina! – exclamo Roy

A un lado del balcón había una cortina sujeta de ambos lados, de lo que antes fue el piso y el techo, pero por suerte la parte que estaba unida al techo se había soltado lo que le permitió levantar los extremos y extenderlos. “Pero yo solo no puedo” pensó y pronto recordó al hombre que sin querer había ignorado hace unos momentos.

-Lo siento, pero podrías ayudarme? – pregunto al hombre de cabello plateado

-Claro – contesto este

-Yo también ayudare – dijo Yuri decidido

-Ed! Tendrás que saltar! – le dijo Roy

-Que! Estás loco? – Grito Ed obviamente asustado ante el hecho de saltar al vacío

-Estarás bien, eres tan pe-

-Como hagas un chiste respecto a mi estatura te matare!

-Edward solo salta!

-No es tan fácil como parece – dijo aun inseguro del plan mientras se acercaba al borde del balcón – espero que no me vayan a soltar – dijo antes de saltar

Fue un poco difícil mantener el equilibrio  la hora de atraparle después de todo se trataba del peso de una persona adulta y no por ser pequeño Ed dejaba de ser pesado. Aun así no le soltaron y Ed estaba en verdad agradecido por eso.

-Estas bien? – pregunto el de lentes

-E-eso creo – respondió Ed levantándose como podía

-Sí que estaba muy alto – volvió a hablar el pelinegro mirando al lugar de donde el chico había saltado

-Vámonos Ed, tenemos que salir de aquí – dijo de pronto Roy tomando su mano

-Eh? Que! – exclamo el rubio confundido

-Ustedes! – les llamo la voz de una chica – ustedes! Mi hermano estaba con ustedes ayer, es rubio de ojos azules, delgado y no habla, lo han visto? – pregunto, se le notaba asustada por no poder encontrar a su hermanito

-Hablas de Link? – pregunto Ed aun preso por la mano de Roy

-Si! El, lo han visto? – pregunto de nuevo – normalmente no habla pero cuando está asustado no puede emitir ningún sonido, qué tal si está atrapado debajo de todo y no puede pedir ayuda? – parcia que pronto la chica entraría en crisis

-Oye – Yuri le tomo las manos para sacarla de su trance – necesitas tranquilizarte un poco, de lo contrario no podrás buscar a tu hermano

-Está bien… - dijo ella luego de soltar un suspiro

-Vienes con alguien más? – pregunto Víctor

-Con un amigo pero… - Zelda no termino la frase

-Entiendo… - contesto el peli plateado, podía imaginar lo que había pasado

-Sabes, nuestro hijo Yura también está en el barco – dijo Yuri de pronto – que te parece si los buscamos juntos eh – propuso Yuri en un intento de tranquilizar a la chica aun cuando él estaba más que asustado por su bebe

-Yuri… - Víctor sabía que su esposo intentaba no pensar negativamente

-Vamos con ellos – le dijo Ed a Roy quien aún no había soltado su mano, parecía no querer dejarlo ir y Ed podía sentir como el hombre temblaba

-Vamos, también tengo que buscar a mi hermano – dijo – iba directo a la discoteca antes de que todo esto pasara

-Mi hijo igual! – dijo de pronto Yuri

-Ed no… - Roy detuvo al chico

-Roy que estas…

-No puedes ir ahí – dijo sorprendiendo tanto a Ed como al par de padres – es un piso arriba pero ahora que el barco está volcado tendrás que bajar, tenemos que subir! No bajar! – Roy soltó la mano de Edward y señalo al “techo” – allá es a donde tenemos que ir antes de que el agua nos alcance!

-Estas diciendo que deje a mi hermano allá abajo? – Edward le miro incrédulo, al parecer Roy no era la persona que había creído – vamos Zelda, busquemos a nuestros hermanos y a Yurio – sin mirar al pelinegro Ed comenzó a andar

-Ed! – le llamo Roy – Edward! Por favor!

-Déjalo Roy, no voy a irme de aquí sin mi hermano – dijo seriamente el rubio

Sin prestar atención a las disculpas del pelinegro el grupo comenzó a avanzar, prestaron atención alrededor en busca de sus seres queridos, estaban preocupados? Si, pero manteniendo la calma podrían razonar y saber cuál era la mejor forma de actuar, entrar en pánico solo complicaría las cosas.

-No es ese Sidon? – dijo de pronto el rubio de baja estatura

-… - Zelda miro a donde el chico apuntaba – si! Es el – confirmo feliz de encontrarlo, Link había estaba con el – Sidon! – grito la chica iniciando la carrera hasta el – Sidon!

-Zelda! – dijo en cuanto descubrió quien le llamaba – Link está aquí! – dijo mientras se movía para dejarle ver a Link que seguía abrazando al castaño pues su esposo aun no recobraba la conciencia

-Link! – la chica llamo a su hermano quien volteo a ver de inmediato al lugar donde provenía la voz, cuando se dio cuenta de quien se trataba se levantó y corrió a su encuentro

-Uno menos – dijo Víctor refiriéndose a las personas que estaban buscando, suspiro, tenía el miedo profundo de que alguno de ellos ya no se encontrara con vida

Y como si el pensamiento llamara a la mala suerte, Yuri que iba caminado a su lado tropezó de repente, el ruso se detuvo a ayudar a su esposo pero cuando ambos miraron en busca de lo que le había hecho caer ambos se quedaron pasmados, no podían creer lo que estaban viendo. Debajo de los escombros estaban Jean e Isabella era obvio que el hombre había intentado protegerla pero el brusco movimiento y peso de las cosas sobre ellos había sido demasiado para ellos.

-Es… es… - el pelinegro no podía completar la frase, estaba por demás impactado

-Si… - Víctor tomo a su esposo de la barbilla para que desviara la mirada de tan horrible escena, ellos eran sus amigos, claro que dolía

-Tenemos que buscar a los chicos – dijo Yuri mientras quitaba las lágrimas que querían salir de sus ojos

-Sacaremos a Yurio y a Otabek de aquí – dijo Víctor en dirección a la fallecida pareja – es una promesa

 

 

 

 

 

Continuara…

Notas finales:

Hola! espero les guste el cap, no duden en comentar ;D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).