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Chilanguitos. por Linlim

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Notas del capitulo:

 

 

Doble actualización.

Segundo capitulo que me cuesta escribir. Espero entiendan el orden. Me salió un poco largo (20 hojas de Word)  y eso que le borré cosas.  A ver si no aburre.  

 
 
 
 
 
-Métele pata….uyyyyyy-
 
-Más rápido, Maniquí, no importa que te despeines jajaja- Se reían mientras Bryan.
 
El maniquí sentía que volaba, claro en la medida de lo que su viejo auto podía correr. Llevaba una botella de cerveza en la mano, mientras el cartón de cervezas era distribuido entre los acompañantes. Cabe mencionar que no tenía licencia para manejar, que era un riesgo no llevar cinturón de seguridad, pero que importaba, si todo era divertido.
 
-Necesitamos apodos, bueno ustedes, ni modo que llegue diciendo que tu Carlitos y Pepito vienen hacer negocios conmigo  o… bueno ya es suficiente castigo llamarte Bryan…que culero nombre-
 
-Bueno tu ya no necesitas apodo Maniquí, con ese cortesito de cabello que te hace ver tan chulo…jejej- Bryan movió la parte larga del cabello bajo la mirada de desaprobación de Charly.
 
.A mi pónganme padrote, porque tengo muchas viejas-
 
-Va-
 
-A mi el negro , para que piensen que soy vergudo-
 
-Nel,  pendejo lo tienes bien chiquito …bueno ya queda  de apodo el Bryan-. Rio nervioso  el Maniquí viendo a Charly que lo veía con desaprobación.
 
-A ti culón-
 
-Chinguen a su madre putos…bueno Fernando tu si eres puto…bueno mmm ¿eso no te excita verdad’-
 
-¡Pinche madre ... que no chingaos! –
 
-… ya se pongámosle Pañal de adulto-
 
-…tu también vete a la chingada Madrota…-
 
-…Puta madre …es Padrote pendejo, dime Padrote…-
 
-…ah es lo mismo cabrón…-
 
--serás pendejo…-
 
-…¡Huggies, como el pañal!…-
 
-…Ta madre que inteligente…-
 
-Jugis…me gusta…-
 
-…no  mames  Bryan es Huggies no Juguis, suena diferente…-
 
-…me vale verga, reprobé ingles le digo como se me hincha el puto güevo…-
 
-…pendejo…-
 
Ellos eran toda sutileza, verbigracia y donaire. Es ironía.
 
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Llegaron a una colonia a la Ciudad de México. Tocaron fuertemente un zaguán, donde salió un sujeto con la cabeza rapada y tatuajes en ambos brazos. 
 
-¿A quién buscan?-
 
-Al Mara-
 
-De parte de…-
 
-De Fernando…el de Hidalgo, nomas dile así-
 
El sujeto los miró con desconfianza y entró. Después de un rato de esperar, salió un sujeto, muy bien peinado, con lentes vestido de manera formal, con camisa de manga larga y eso. Le chocó la mano. 
 
-Que tranza carnal.-
 
-¿Del Beto no?-
 
-Si-
 
-Pásenle a echarse unas- . Dentro de la casa,  había ya un pequeño grupo  de sujetos tomando frente a una mesa, se veía todo normal, excepto por la cantidad de botellas de licor en ella, se veía licores de los mas baratos y una cubeta con agua de algo, se miraba era de color rojo,  un  sujeto vertía la botella de licor y revolvía. 
 
Les hicieron espacio, sentándose unos en el suelo y otros en sillones.
 
La música urbana sonaba fuertemente. Con el discurrir del tiempo se fueron relajando, ayudados con la bebida que sabía espantosa, pero mientras cumpliera su objetivo, valía la pena soportarlo, después de un par de horas, el Mara se metía con los sujetos  mas tomados en  cuarto que se veía de frente, la cortina movida dejaba ver que aspiraban por la nariz , agachados sobre un mueble, después de entregar un billete. Salió y se sentó con el maniquí.
 
El hombre rapado y con tatuajes saló de otro cuarto que si tenía puerta. 
 
-No manches pinche Mara, bájale a tu puto escándalo-
 
-No seas mamón, échate una y se te pasa-
 
-Me tienes hasta la puta madre…mañana tengo examen y tengo que estudiar- entró dando un portazo-
 
-Chingas a tu puta madre que te parió…´que es la misma que la me parió a mi…pendejo´-Dijo esto mas bajo, mientras refunfuñaba.-Se cree mucho porque esta en la Universidad, que mamón, de que le va a servir, nació en este pinche barrio culero y aquí se va a quedar…pero tu si eres inteligente , le tiras a lo grande.-Se dirigió al   Maniquí, pasándole el brazo por los hombros y le sonrió, sus mirada  se veía perdida y las pupilas dilatadas . Cualquiera hubiera pensado que el Mara era el estudiante y su hermano un presidiario huyendo del orden penal. Prejuicios sociales, que estigmatizamos a alguien por su apariencia física. Era la segunda vez que en dos días le pasaba a Charly…ahora conocido como Juguis.
 
-Vente carnal, vamos a ver a el Boss, es el cabrón con el que puedas hacer el negocio. 
 
 
Salieron los seis  (el Maniquí con el Mara , que le puso el brazo en los hombros, pepe Toño, Bryan,  Carlos y un sujeto raro, flaco con cara de disgusto).
 
Después de andar caminando un rato llegaron a un bar: La oficina.
 
-Se sentaron y pidieron un cubetazo para empezar. Los 3 jóvenes se sintieron aislados , terminaron por compartir una sola cerveza, que solo le tomaron un trago, tenían ya el estomago revuelto, se sentían mareados y hambrientos. 
 
Un mesero se les acercó y el sujeto extraño  le dijo algo al oído y este asintió retirándose.
 
Después de un rato llegó un un hombre  alto, moreno claro , grueso, velludo, con barba y  bigote , cabello negro peinado de lado, nariz gruesa, labios delgados, en el pecho mostraba  dos cadenas gruesas de oro, una con un Cristo y otra de la virgen de Guadalupe se sentó  con ellos . Iba acompañado de un sujeto saludó al sujeto extraño por el que había pasado el Mara, el sujeto volteó viendo a los presentes y cuando vio a Carlos lo miró con atención mientras este distraído miraba a algún punto perdido , sonrió, Juguis sintió la mirada, volteando a verlo, un escalofrió lo recorrió.
 
-Pero que gente tan triste- Palmeó con las manos y el mesero llegó corriendo- Tráete unas dos botellas , pero de las buenas y botanas- 
 
Los tres amigos sonrieron, tenían hambre. Más rápido que ahorita llegaron las botellas, vasos, hieleras, botanas de diferentes formas y texturas. Los adolescentes comieron, no, devoraron. 
 
Carlos se levantó para ir al baño. Cuando pasó cerca, sintió la mirada del sujeto recorrerle el cuerpo. Han tenido esa sensación de que alguien les mira y sienten la pesadez de ello, a el le pasó. Volteó y así era, el sujeto le miraba de manera extraña.
 
A su regreso su lugar estaba ocupado, sentándose al lado del tipo. El hombre empezó a repartir grapas, para pasarse un poco la borrachera y  pastillas como si fueran caramelos.
 
-Entonces Boss, aquí mi cuate quiere entrarle al negocio, mas en grande-
 
-Pero si son unos escuincles.
 
-Ya somos hombres- Refuto Pepe Toño.
 
-Pues si me regalan al nalgón  les doy lo que quieran-
 
-Sobres, es suyo- Dijo Bryan y rieron todos...menos el  nalgón.
 
-Anda que nos hacemos ricos Juguis.-
 
-Chinguen a su madre culeros-
 
Siguieron vacilando, no acordaban nada. El Boss pasó la mano por la espalda bajando hasta el trasero de Juguis.
 
El Joven dio un salto y en respuesta le aventó el contenido del líquido de su vaso  a la cara. Todo se detuvo, el hombre grande lo jaló de la camisa,  Chiquilín, déjalo…ustedes no se preocupen es un chamaco-
 
-Me largo, si se quieren quedar aquí es su pedo. El maniquí hizo amago de seguirlo .
 
-Déjalo, se le va a pasar, así son los jóvenes- El Boss le hizo una seña casi imperceptible al Chiquilín  que salió.
 
Juguis, salió a la calle y respiro profundo, algo en su interior le decía que algo andaba mal,  no sabia que,  pero lo intuía. Era esa sensación de peligro inminente, de querer huir sin saber de que, algo en su interior le decía corre, lastima que no supo escucharlo.
 
Reviso su celular y vio la cantidad de llamadas perdidas y mensajes de texto  de sus padres, de ambos, deseo en ese momento estar en su cas, con su mama rellenándolo de comida , de su hermano esperándolo despierto, de su beso de las buenas noches, de su mullida y tibia cama, de su hogar, en cambio estaba ahí, solo,  borracho, mareado, con frío, solo en sabe que lugar. Leía los mensajes cuando sintió una mano sobre su cara, intento zafarse pero fue levantado en vilo, le dificultaba respirar, sus fosas nasales dilatadas ardieron. Pataleo pero la fuerza era mayor que la de el, hasta que su cuerpo dejó de responder y los ojos de manera autónoma y sin aviso se cerraron.
 
 
-No regresa,  vamos a buscarlo- Dijo Bryan.
 
-Es un niño, déjenle, no tardará
 
-Mejor vamos-Replicó Pepe Toño.
 
-Esta bien muchacho, se ve que tienes ganas, te daré el crédito, pero debes darme tu palabra que regresaras a pagarme.-
 
-Si Boss-
 
-Estas conociendo por las buenas, no me busques por las malas- Le dijo en un tono amenazante, su mirada lo decía todo.
 
-No Boss, la próxima semana aquí me tiene. El Oso le entregó algo, le dijo algo y acordaron algo.
 
Se despidieron, el maniquí sentía la angustia de no ver regresar a Juguis.
 
Salieron , anduvieron unas calles, le marcaron, dieron vuelta a las cuadras, peinaron la colonia. Llegó el sol. No apareció, ni aparecería.
 
 
 
 
 
 

 

 

 


 
 
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Había pasado una semana, los chicos habían regresado a sus casas después de el fin de semana de pulular buscando  y preguntando. Ninguno se atrevió a ir a avisar a casa de Juguis, prometieron buscarlo y regresarlo sano y salvo. Hasta entonces avisarían a sus padres.  Bryan en la escuela negó una y otra vez ante la directora y los padres del menor saber de el.
 
Bryan,  Maniquí y Pepe Toño  (El apodo de Padrote después de todo le dejo de gustar), habían vuelto a ir a buscarlo el viernes, se habían salido de clases.
 
Debían ir a dejar dinero al Boss. Cuando llegaron el Maniquí vio de reojo sobre la mesa el celular del Juguis, por desgracia, le reconocía con mucha facilidad. 
 
-Oiga Boss, no ha visto a mi amigo, usted cree que no lo encontramos-
 
-No, no se nada de el, pero si se de el te aviso…bueno está completa la lana, pero  no podre seguirte vendiendo mercancía, lo que me debes se la entregas al Mara, lo buscas allá en su casa y el me hace entrega. Ahora lárguense-
 
-Pero si dijiste…-
 
-¡DIJE PERO YA NO Y ME VALE VERGA LO QUE PIENSES PUTO PENDEJO! …a ver Oso, acompaña a los caballeros a la puerta.-
 
Los jóvenes que se mantenían al margen  de la conversación miraron asustados, siendo empujados por el Oso.
 
En un impulso, motivados por el Maniquí que estaba seguro que ahí lo tenían,  se dirigieron buscando a policía cerca de ahí. La encontraron, parados Solicitaron insistentemente ayuda, porque aseguraban que su amigo perdido estaba ahí. Después de insistir y gritonear que la policía no hacía nada frente a la gente que pasaba cerca del mercado, los oficiales optaron por acompañarlos.
 
 
Entraron al bar, saludando y preguntando por el acusado. Los dirigieron a la oficina. Adentro estaba el Boss en su escritorio. Juguis no estaba .
 
-Buenas Boss-
 
-Pasen polis, están en su casa, les ofrezco de tomar  algo-
 
-No mi Boss, estamos en servicio, no podemos, tal vez después algo nos apetezca- Rieron ambos uniformados, mirándose cómplices. Disculpe la molestia pero estos jóvenes insisten que aquí esta su amigo desaparecido  y …pues nomas queremos constatar…-
 
-Si yo vi su celular aquí , estoy seguro que es el –
 
-Ahhh, pero si el no quiso irse contigo-
 
-¡!MENTIRA… LO NEGASTE…TU LO TIENES-
 
-Juguis ven que te buscan …- El menor salio del baño.
 
-Hola chicos-
 
-El Dijo…lo ve policía- Insistió el Bryan. La cara de terror de Pepe Toño era un poema.
 
-Yo le dije que …que les dijera que no estaba-
 
-Ah jovencito, esta usté por gusto entonces-
 
-Si, yo lo decidí- Bajo la mirada, llevaba una camiseta de mangas largas, un pantalón que ya dejaba ver un poco de delgadez, pese a ver pasado solo una semana, ojeras pronunciadas, pero aun asi, limpio.
 
-No es verdad Juguis, tu no quieres estar aquí…-
 
-Si, estoy bien aquí, quiero estar con el...váyanse-
 
El Boss se paró frente a ello.- El quiere estar conmigo, que se le va a hacer señor oficial-Lo Abrazó por los hombros y el Juguis tembló. 
 
-Pues así es el amor, no podemos ir contra de ello.
 
-…no es verdad… el no es así… nunca lo sería…- Espetó el Maniquí tratándose de tocarlo  de el pero fue aventado por el Oso.
 
-Diles Juguis-
 
-El me dará lo que quiero y …y…yo le quiero…lárguense por favor...- La voz se quebró.
 
-Bueno , aclarado las cosas , nos retiramos.
 
-Claro, señores oficiales disculpen la perdida de tiempo…se les compensará- Hizo una seña al Chiquilín que sacó un paquete de un cajón del escritorio.
 
 
-No se vayan, por favor, el no quiere…estoy seguro- Bryan Chilló un poco.
 
-Bueno ya vieron…está por sus gusto. Concluyó la policía falsamente.
 
-Vámonos Juguis, tu mamá y tu papa te buscan, están preoucpados, te quieren…me dijeron que si te veía te dijera…tu  abuela se puso mala cuando se enteró…tus tíos han andado buscando con la policía…yo no se si deba…-
 
-Les dijiste…-
 
-No…pero les diré si no vas-
 
El Boss sacó una pistola amenazándoles. El Oso sacó también una pistola. Pepe Toño, temblaba. Maniquí quiso enfrentaros. Las palabras sobraron, los golpes intentaron dar solución, nada funcionó para convencer al Boss dejarlo ir, lo único que se consiguió fue llevarse amenazas, intimidarlos, acorralarlos. El victimario conoce el punto débil: el miedo, a morir, a perder un ser querido, a perderla tranquilidad y la víctima actúa evitando el miedo, el daño, la muerte. Está en algún momento se vio muy cerca.
 
- Boss , dejalos por favor-. Juguis le dijo algo al oído. El tipo sonrió.
 
-Lárguense y no vuelvan o me encontraran - 
 
El juguis se dirigió a Bryan. -Prométeme que no le dirás nada a mis papas, júralo-
 
-Nooo...- Bryan lloraba. 
 
-Juralo…sino que se muera yo- Juguis se  señaló a si mismo.
 
-No Yo…-
 
-Júralo Bryan, es mi decisión, si yo te acepte con todo lo que te paso…tu también hazlo-
 
-….pero dijiste que me presentarías a Gladys…-
 
-Tu puedes solo, no eres feo… ahora júralo, sino que me muera yo-
 
-……te lo Juro-
 
-Me cansan los melodramas. Oso  sácalos.-
 
Estando fuera.
 
-Que hacemos-
 
-No se…la policía-
 
-No seas pendejo Bryan, ellos sabían.-
 
-Pero entonces…-
 
-Me mié del susto-
 
-Si ya te vi  Pepe Toño-
 
-Tenemos que irnos-
 
-No quiero
 
-No podemos hacer nada…además es su decisión…perdóname pero no quiero morir.
 
Caminaron, desorientados, la gente pululaba a su alrededor. Nadie se interesó. Nadie le importo, pero la tristeza era avasalladora. Caminaron juntos sin saber que hacer. Mentalmente se despidieron de su amigo. Sin saber lo que sucedería con el. No lo volvieron a ver.
 
 
 
 
 

 


 
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El Juguis sentía que poco a poco toma conciencia. Volteó a su alrededor,  era un cuarto enorme, la cama King size con sabanas rojas. Del mismo color las cortinas de las ventanas, el baño al fondo iluminaba la habitación.  Se acercó a prender la luz, una gran lámpara colgada en el centro de la habitación iluminó todo.
 
-Sabes me gustaste desde que te vi- El Boss se quitaba lentamente a ropa. 
 
Recordó que lo último fue estar fuera del bar cuando alguien lo sujeto. Lo entendió, estaba ahí a la fuerza.El sujeto se acercó y le acarició las piernas. -¡SUÉLTAME…AYUDA, AYUDA!- 
 
-Nadie te va a escuchar no importan los putos gritos que des , pero es mejor, mas me excitas,- Semidesnudo , portaba solo unos bóxers oscuros. 
 
 
Juguis  quiso moverse, pero no lo logró,  se dio cuenta que tenía las manos atadas a la cabecera de la cama, que era de barrotes. Pataleo y empujó con todas  sus fuerzas su cuerpo,  estaba desnudo, expuesto, el hombro lo miraba con morbosidad , en especial cuando pataleaba,  lo notó, miraba su entrepierna, se sintió perdido, se sintió angustiado, se sintió arrepentido, podría estar en ese momento en su casa, en su mullida cama, bajo el techo protector de su casa…de su hogar.
 
El Hombretón se acerco a el, trato de patearlo, pero el sujeto tomo ambos tobillos y abrió sus piernas, quiso cerrarlas pero no pudo, se dio cuenta que no tenia fuerzas, se extraño, se sintió débil e impotente. En ese momento le dobló las piernas hacía el pecho, quiso aventarlo y lo logro, se fue de lado .  El Hombre soltó una carcajada sin sentido, las luces iluminaban todo el lugar, nuevamente lo pateó en el pecho, se dio cuenta que su fuerza había disminuido, tal vez en otra situación por o menos lo hubiera tirado bajo la cama, pero no fue así.
 
El tipo retuvo su pierna por el tobillo, la abrazó doblada. Por cada patada que aventaba, recibía una cachetada con la palma abierta, no supo cuantas recibió, una, dos, tres…perdió la cuenta, sintió el sabor magro correr por su labio y de su nariz sintió la gota recorrer su garganta, se conjugaba la sal de sus lagrimas, el sabor ferroso de la sangre y lo espeso de la mucosidad revuelta con sangre de la nariz. Los fluidos abandonaban su cuerpo como en ese momento estaba abandonando la fuerza su cuerpo.
 
-Chiquilín agárrale la otra puta  pierna - No había caído en la conciencia que había alguien a lado de el, en la cabecera, le tomo la pierna y la abrió totalmente, como  en Split. Gritó un poco por que sintió el jalón, el esguince. 
 
El hombre se masturbó un poco, el tiempo se le hizo eterno, su fuerza disminuía y su conciencia se alejaba. Se fue tumbando sobre el y en ese momento cayó en cuenta. Iba a ser violado. Sintió la intrusión de unos dedos abriendo su ano, intentó gritar pero su boca ahogo el grito, tal vez si gritó, pero no se escuchó a si mismo.  Las lágrimas empezaron a rodar mojando su rostro, sentía el jaloneo bajo su cuerpo, fue surrealista.  
 
El sujeto empujo su cuerpo sobre el, sintió un desagarre o un jalón, sintió como empujaba con fuerza, era como un cuchillo desgarrando su cuerpo…no solo su cuerpo, su hombría su dignidad, se jaloneaba, se sacudía , pero eso solo hacia que el hombre se excitara, le dedico una mirada, sus pupilas dilatadas, su mirada penetrante, terrorífica, sintió un ultimo esfuerzo por el tipo y grito, el grito  fuerte y claro de dolor, reconocible, seguía tratando de evitar lo ya hecho. 
 
Jamás imagino tal imagen, jamás se imaginó mancillado, jamás se imagino humillado de esa manera. Sus manos ardían, desde las muñecas, el dolor y la vergüenza lo cegaban. El hombre se removía dentro de el provocando mas dolor, aunque aun no se daba cuenta de la intensidad del dolor que le iba a provocar. En un ultimo intento trato de empujarlo con la pierna recién liberada.,  pero no pudo, lo único que logro herir, fue su mismo orgullo. Un chinga tu puta madre fue la última arma esgrimida, pero  solo le provocó una sonrisa de burla por parte del Boss.
 
El hombre entraba y salía lento , para después enterrarlo hasta el fondo, para después moverse frenético, El dolor fue incontable, incontenible, interminable, fue como ver una película, sin ser el protagonista, el cuerpo se defendió mediante la despersonalización, es como si Juguis viera a alguien que gritaba y lloraba pero no era el. El sujeto, mordía, engullía y destrozaba la piel donde su boca le tocaba, el cuello estaba ya magullado. La percepción del tiempo se perdió, no supo si aguantó una hora o un minuto, tal vez más.
 
Como si esto fuera poco, se vio volteado, abierto nuevamente, sintió dos manos tomando y abriendo sus piernas, sentía como si el fuego consumiera su interior, no como ese fuego de la pasión que envuelve y es abrazador cuando se llega al orgasmo. No, fue como ese fuego que arde, que daña , que consume un bosque , destruyendo a toda especie a su paso, sus nalgas magulladas por el masajeo del tipo, olisqueadas, lamidas, húmedas de semen y sudor. 
 
Creía que si el infierno existía, debía ser igual de doloroso,  debía serlo, tenía que serlo, tal vez ya lo era. Fue sujetado de los cabellos para poder aumentar la fuerza y frecuencia de las embestidas, las piernas ya estaban entumecidas.
 
Pensó que ya no podía haber mas humillación, pero si fue posible.  Lo volteó, Sus pezones fueron mordisqueados con fuerza, que uno sangró un poco, las piernas le fueron sujetadas nuevamente juntas, estiradas a lo largo de la cama. El Boss se hincó frente a su cara , con las piernas alado de su cuello , empezó  masturbarse , tomo su cara y aunque se agito con todo el cuerpo, el sujeto , desnudo, se sentó sobre su pecho, haciendo presión para inmovilizarlo, le tomó la cara, le abrió la boca y en un intento de protegerse un poco de todo ese acto de degradación, mordió con fuerza, aunque dañó, los dos bofetones que recibió fueron el pago con intereses que ganó por la osadía.  
 
El Boss le tomó la cara y apretó la nariz, se negó a respirar, lo mas que pudo, como si en la inmersión intentara competir por durar mas tiempo, no lo logró,  pues el cuerpo en la necesidad de autoprotección buscó oxigeno y solo encontró con semen y un tanto de urea, el sujeto rió, como las veces anteriores, son sorna, con superioridad con vanidad, de poder someter a un joven al que le doblaba la edad.
 
Las pupilas dilatadas parecían absorberlo y perderlo en esa vorágine de emociones.
 
Desde la imagen de Pedro Infante, de Blue Demon, de los hermanos Almada hasta lo reguetoneros, con su poder de conquista de mujeres y su sometimiento sexual, demostrando cuan grande es su hombría en proporción al número de mujeres poseídas, el falocentrismo. En ese momento quiso morir, le habías sometido, había pasado de conquistador a conquistado, habían matado su hombría y sin ella sentía que no tenía nada.
 
Después del interminable martirio el hombre lo dejo, el sujeto denominado Chiquilin lo desató, lo llevó al baño y lo lavó. Se dejo hacer, pues lo peor ya lo habían hecho. Su cuerpo en diversas partes esta amoratada,  había marcas de dientes, de ataduras y eran dolorosas, pero las que mas dolían eran las internas, las que no se veían, literal y metafóricamente.
 
Le dieron de tomar lo que el imagino era un gatorade y algo mas que no supo y estaba azucarado, como una leche. Al salir a la habitación las sabanas y colcha habías sido cambiadas.
 
Con cuidado lo recostaron y cayó perdido en la inmensidad del sueño. Perdió la noción del tiempo, no sabía si era de día o de noche, si era el mismo día o habían pasado días, seguía recibiendo lo mismo de comer. Cuando estaba solo, únicamente  se levantaba para ir al baño y volvía a dormir.
 
En una de esas vueltas vio la ventana de baño con barrotes, pero supuso una parte podría dejarlo pasar, tomó una escoba que estaba dentro y los abrió un poco . Con esfuerzo y semidesnudo trato de salir, cayó de un brinco y terminó de bruces, se sentía muy débil. Pero el deseo de irse de ahí lo energetizaron, cayó a un patio con piso de cerámicas, había lavaderos y sillones, trató de buscar ayuda. Una mujer ya mayor lavaba algo, corrió hacia ella.
 
-Pp-por favor ayúdeme, me trajeron ala fuerza-
 
La mujer volteó y aterrizó su dulce mirada, cargada de años, de malos tiempos, de tristeza, de culpa…no supo porque  le acarició el cabello.
 
-Ten paciencia, no pelees, no luches, no busques lo que no encontraras- Quiso entender lo que le dijo pero no lo entendió. Retrocedió un poco y una manota cayó en su hombro: el Chiquilín . Lo cargo sin dificultad y aunque nuevamente luchó, nada pudo hacer lo tumbaron a la cama y lo amarró otra vez. Lloró amargamente, porque dulcemente no fue.
 
 
 
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--Porque me hiciste venir aquí- Dijo Juguis, mientras era empujado adentro de la oficina por el Chiquilín. 
 
- …tus amiguitos te andan buscando-
 
Una ráfaga de alegría lo animó.
 
-Me dejará ir con ellos-
 
-No…les diráss que esta aquí por gusto.-
 
-Pero que pendejada, no diré eso-
 
-Chiquilín pásame el celular…esta es la foto de Tus papas y de tu hermano ¿no? Mi querido amante, ( irónicamente, amante es de amar y el  Juguis distaba mucho de eso).
 
-¡ NI TE ATREVAS HIJO DE PUTA!- Se le fue encima 
 
-¡NO ME PROVOQUES PENDEJO! -
 
-¡NO ME QUEDARÉ AQUÍ!-
 
-Es una lastima, tendré que traerme en consolación a tu hermanito…esta chulo …¿No lo crees Chiquilín?- Dijo mas tranquilo, pero se sentía la malicia y perversión en sus palabras.
 
El sujeto rió por el comentario.
 
-Si tu te vas estaré muy triste y me buscaré un remplazo de ti- Dijo con falsa tristeza y un puchero ridículo.
 
Juguis recuerda  entre bruma, recordó  había un chico, blanco, de tez aniñada y bonita. Tal vez de su edad…tal vez no. Lo vio unas dos veces y no lo volvió a ver. El era el reemplazo ahora.
 
-¡NO TE ATREVAS!-
 
-No me provoques-Marcó un numero copiándolo desde el celular del Juguis.
 
-¡Doña Marta…que gusto…!
 
-¡DÉJAME HABLARLE…MAMÁ…MAMÁ!
 
El tipo colgó.
 
-Se escucha bonita su voz, debe estar bien sabrosa, ya vimos la foto que cargas en tu celular de ella, al Chiquilín le gustó- El sujeto lo vio e hizo un movimiento obsceno con su cuerpo como si intentara penetrar a alguien.
 
-De Hidalgo ¿no?...de…-Empezó a decir la dirección y características de su casa. -…tus amigos son….-Mencionó a todos. -…tus abuelos en Tlaxcala a los que visitaste en vacaciones…-
 
-Tu… ¿como sabes…?-
 
-Face papacito, ni siquiera tuvieron que jakearlo , al conectarme a internet solo toque tu foto y vi todo, tooodo, las fotos de tu pito, las viejas que te tiras ,  hasta tus conversaciones leímos …eres muy travieso con esas niñas, mira que te gustan chichonas ehh…pero bueno no te culpo, con esa carita y ese culote que te botas…- Se acercó a acariciar el rostro del Juguis  pero este le volteó la cara.
 
-No te preocupes, tu solito empezaras a ceder por gusto-
 
-ESTAS PENDEJO …-
 
-…o por las malas, tu decides,  les dirás que no quieres volver a verlos. Recuerda si haces una pendejada, tu mami, tu papi, tus hermanito y sobre todo tu hermanito será el que pague ehh, de paso el Chiquilín se va a coger a el Bryan, es de tu edad ¿no?, debe estar bien apretadito…ah  e inmediatamente el video delo que has hecho se subirá en tu pagina, tus amigos, tus novias, la escuela, tus conocido…verán como gritas cuando te cojo…ah y no te preocupes por mi, no se me ve la cara…nunca…-
 
Lo tenía agarrado por los güevos.
 
 

Notas finales:

 
Estoy bien em%*°ñ pal perro, me dijeron que no entregue la última  y si la entregue!!! Así que me desahogue escribiendo. 


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