Capitulo 7
Decir que el camino habia sido incomodo seria quedarse corto, despues de aquella noche, Naruto no habia conseguido hablar correctamente con su amigo de la infancia. Si lo que queria era dejar atras aquel sentimiento opresivo que se instalaba en su pecho cada vez que pensaba en su salida de Suna, pues lo habia conseguido, aunque el precio, habia sido alto.
Gaara tampoco se habia enfocado precisamente en lograr que su rubio amigo le hablara, era cierto que por fin habia logrado comprender, por que tanta repulsion hacia la existencia del Uchiha en su grupo y su "vinculo" con Naruto; pero por otra parte, eso significaba que entendia la naturaleza de la "relacion", que en verdad deseaba con el muchacho y el hecho de saber si Naruto estaria de acuerdo o no.
Todos en el grupo se dieron cuenta que la relacion entre ambos muchachos habia cambiado, pero nadie se atrevia a decir nada, siendo esto algo que Naruto agradecia, aun no estaba seguro de poder afrontar el hecho de conocer la verdadera naturaleza de la mirada que Gaara le habia dedicado aquella noche. - Ten cuidado dobe- llamo Sasuke, mientras tomaba a su caballo de la rienda, para regresarlo al camino.
Naruto sabia perfectamente que el azabache sabia lo que habia sucedido, aunque desconocia por que no le habia dicho nada. -Tampoco era que se quejara-. Tal vez lo mejor seria aclarar las cosas con Gaara, no hablar con el en ese dia, habia sido doloroso, mas de lo que le gustaria admitir. Pero algo le indicaba que si hablaba de lo ocurrido la noche pasada, su relacion no volveria a ser la misma.
La fuerte corriente de aire, que sacudio un poco la capucha que llevaba, desperto a Naruto, sintiendo como unos pequeños rastros de arena golpeaban su rostro- Hemos llegado- anuncio la voz de Gaara, mientras daban vuelta entre los matorrales, saliendo por fin de ese estrecho, frondoso de arboles.
Aquello era parecido a Suna de cierta manera- Genial mas clima extremo- escucho gruñir a Sasuke a su lado, mientas Naruto observaba los acantilados alzarse a sus lados. Si algo tenian de diferente Suna e Ishigakure, eran las piedras; en Suna la mayor parte estaba constituida por arena, pero en esta villa, todo estaba rodeado de rascacielos hechos de aquella poderosa piedra. Al menos era lo que podia observarse desde a fuera.
-No se separen, ya casi llegamos al punto de reunion- aseguro Gaara mientras seguia avanzando, mientras Shikamaru se colocaba a su lado y hablaban acerca de sus siguientes movimientos.
Llevando su mirada de manera discreta hacia el frente, Naruto pudo observar de perfil al chico, y como este discutia con Nara. - si sigues viendolo de esa forma, se dara cuenta- comento el Uchiha posesionado a su lado, mostrando una sonrisa.
-Y-yo, yo no estaba viendo a Gaara- contesto con un carmin en sus mejillas.
-Si claro- dice sonriendo mientras continua a su lado.
-Odioso- gruñe ante la risa divertida del chico.
Gaara veia de reojo aquella escena apretando la rienda de su caballo. Le fastidiaba aquellas escenas, y para su enojo, tal pareciera que habian pasado semanas desde que no habia podido hablar con Naruto, aunque lo cierto es que a penas el suceso del lago habia sido la noche pasada.
-Esta bien?- pregunto Shikamaru con autentica preocupacion
-Perdon Shikamaru, esque estoy algo distraido.
Shikamaru sabia aquello, sobre todo cuando de la noche a la mañana, el rubio parecia tener un especial interes por mantenerse alejado del pelirrojo, mientras que este, no sabia como acercarsele- "tks... que problematicos"- gruño, siguiendo la caminata, notando como hacia enfrente un enorme edificio sobre salia- por fin llegamos- comento Shikamaru, mientras poco a poco se acercaban a la entrada principal de la villa. Tsuchikage se alzaba delante de sus ojos.
***
El cantar de las aves que llegaban revoloteando, lo despertaron, mientras los rayos de luz que anunciaban el dia, se erguia por la rejilla de las sabanas que cubrian la ventana. Parpadeo un par de veces mas, para al momento de girar su rostro encontrarse con el rostro tranquilo del bastardo, el cual, al enterarse que debian compartir habitacion, no dudo en compartir la habitacion con el.
Con cuidado de no despertarlo, se levanto de la cama que ocupaba en esos momentos, caminando con un poco de calma al balcon que se asomaba por la ventana que momentos antes, filtraba la luz del amanecer. Ishigakure era mas hermoso de lo que alguna vez alcanzo a leer, siendo sede de la migracion de miles de aves de todas partes, era un verdadero deleite escuchar sus cantos al amanecer y atardecer. En apariencia un pais neutral y pacifico a diferencia de muchos otros que habian continuado conflictos, era un verdadero oasis en medio del desierto. El aire se respiraba tranquilo, mientras el bello rio daba un aspecto semiacutico al paisaje, el cual se extendia mas alla de lo que sus iris azules podian abarcar con su sosegada mirada. A pesar de ser la primera vez que tocaba aquella tierras, verdaderamente podria decir que se habia enamorado. El cantar de algunas aves lo obligo a zurcar su mirada al cielo, viendo bandadas de aves zurcar en centenares los cielos del pais. Los cascos de caballo y pisadas de algunas personas que empezaban a abrir sus comercios, provoco que dirigiera su mirada nuevamente al pueblo.
-Muy bello- susurro maravillado.
-Veo que ya despertaste, dobe- escucho la voz del Uchiha, el cual se encontraba a sus espaldas, sentado en su cama, tallando su ojo derecho, en señal de querer despertar por completo- quien diria que este pueblo seria mejor que el tuyo dobe- afirmo estirandose, para despues de levantarse dirigirse al baño que les habian asignado.
Dolia aceptarlo, pero era cierto, aquel pais era mas bello que el suyo; En cuanto habian llegado el Tsuchikage, habia solicitado de inmediato que se les asignara una habitacion a sus invitados provenientes de Suna, siendo Gaara mandado al area real, al ser el principe de dichas tierras. Asegurando que ese dia tendrian una audiencia mas propia a la cual habian acordado que solo Shikamaru y Gaara asistirian.
El suave toque en la puerta, saco a Naruto de su ensoñacion, alejandose de aquella vista panoramica- en seguida voy- contesto con voz fuerte, mientras abria la puerta, encontrandose con una joven con ojos color rojizos, y un cabello de un tono curiosamente morado, llegando sus ondas hasta por debajo de los hombros, sujetado por una media coleta, mostrando orgullosa su banda que la identificaba como guardia de la villa.- Buenos dias- saludo la chica con voz jovial, pero madura y diplomatica- Tsuchikage-sama solicita su presencia para el almorzar juntos- Naruto sonrio- claro, estaremos alli- afirmo cerrando la puerta, para ver como el Uchiha salia ya bañado.
-¿Pasa algo?
- No nada- contesto Naruto - solo que solicitan nuestra presencia- afirma sonriendo- Oye teme, no te gustaria ir a dar una vuelta?- pregunto con ilusion.
***
A penas habian escuchado el sonido de los pajaros cantar y estos ya se dirigian a la camara real, donde tendrian su audiencia con la soberana de aquellas tierras.
-Pareciera que no pudiste dormir Gaara- comenta el de coleta, sabiendo que ante la intimidad de aquella sala, su conversacion podria llevarse tu sin ningun honorifico y sin problema.
-No me hagas caso- contesto con sus ojeras aun mas marcadas que de costumbre.
La realidad es que la tarde pasada, habia tenido toda la intencion de por fin poner un limite a su distanciamiento con su querido amigo, pero en cuanto habian pisado el palacio, todos sus planes se vinieron abajo, empezando por que la Tsuchikage, no pudo atenderlos y por ende les ofrecio hospitalidad. Eso no era tan malo, estaba de acuerdo, el veradero problema surgio, cuando debido a su "status", fue asignado al ala real, mientras sus "guardaespaldas", fueron al ala jade, lugar donde colocaban a la servidumbre mas cercana, siendo asignados en pareja. Y aunque en el fondo deseo que Shikamaru durmiera con Naruto, el Uchiha y su amigo terminaron compartiendo habitacion.-"Espero que las habitaciones sean dobles"- penso con un claro gesto de cansancio.
-Gaara- volvio a llamar Shikamaru, imaginando por que esa expresion de afligido en el rostro del pelirrojo- ya estamos aqui- afirma.
-Claro
Con un suave movimiento de cabeza, el guardia que vigilaba aquella enorme puerta de roble, indico que se abrieran delante de Gaara y Shikamaru, dejando ver una sala extensa, con figuras de dragones impregnadas en la cupula que se extendia sobre sus cabezas, con decorados de jade en ciertas partes, las cuales ayudaban a resaltar de madera enigmatica aquellos seres plasmados.
Delante de los chicos, la bella figura estilizada de una mujer se erguia. La nueva Tsuchikage era un fuerte y atractiva mujer, de cabello negro corto, que apenas llegaba por debajo de los lobulos de la oreja, vistiendo un vestido negro el cual asentuaba su bella figura, con unos zapatos de tacon, no muy alto.
-Es un placer volverlo a ver, Gaara-sama- saluda de forma educada la mujer mientras se levanta de su asiento.
-El gusto es todo mio, mi señora Tsuchikage- correspondio el saludo, quedando frente a la chica, mientras Shikamaru realizaba una reverencia.
-Bueno diganme, que trae a nuestros vecinos de Suna, por estas tierras?- pregunta curiosa.
Despues de unas cuantas horas de explicacion, por parte de Gaara y Shikamaru, varias expresiones de incredulidad por parte de la Tsuchikage y las mejores respuestas que podian brindar, debido a la escasa informacion con la que contaban, por fin, terminaron su relato.
-Disculpa que lo diga Gaara-sama, pero lo que me dicen usted y su escudero, es realmente impresionante- afirmaba la pelinegra, aun sin poder caber dentro de la impresion. Su abuelo le habia contado acerca que civilizaciones antigüas que manejaban los sellos con esa maestria, pero llegar a presenciar algo asi, y sobre todo, una persona con el famoso y legendario Sharingan, era algo sorprendente.
-Lo se, ni nosotros mismos podemos creerlo aun- dice mientras ve a la mujer.
-Mi señora- llamo con respeto y diplomacia Shikamaru- con todo respeto, podriamos ver la escena.
-Claro, de hecho, mande a ordenar que esta misma tarde se nos muestre la residencia del señor feudal. Me parece que trajeron al señor Naruto, no es asi?- pregunto curiosa- me gustaria que tratara de leer unos simbolos grabados- pidio.
-Estoy seguro que si Naruto-san puede, lo hara con gusto- contesto de inmediato el pelirrojo
***
Insisto que deberiamos haber esperado a que tu novio nos dijera que hacer- insistia el Uchiha caminando detras de Naruto, el cual iba con una sonrisa de oreja a oreja.
-Por quinta vez, Gaara no es mi novio- dijo sonrojado, viendo maravillado el mercado que se erguia frente suyo.
Aves, escencias, animales que jamas habia visto, telas y piedras preciosas, todo aquello se posaba delante de sus ojos. El ambiente olia a diferentes mezclas, dando un toque unico al lugar, como habia dicho antes, era un verdadero oasis - en varios sentidos-, en medio del clima tan extremo que se veia fuera de la proteccion de esas paredes. La mirada de varias chicas llamaron su atencion, al percatarse que varias chicas veian con interes al azabache, que justo en esos momentos se habia detenido a ver un estante lleno de espadas y lanzas- "si tan solo supieran como es"- penso con una sonrisa mientras regresaba su mirada a su estante.Esta bien, esta bien, que aceptaba que el Uchiha era un poco atractivo y tenia rasgos unicos, como el cabello y ojos negros, y una piel sumamente blanca, casi como el color de la nieve. Pero llevando eso a un lado, el cabron tenia un caracter horrible, ademas que siempre queria que se hiciera lo que el deseaba y cuando este lo ordenara. Respirando profundo, regreso su mirada a una coleccion de papiros y libros en un intento de seguir buscando "defectos", en la persona del bastardo. Tal vez y con un poco de suerte encontraria algo interesante procedente de esa villa. Una fuerte punzada en su pecho nacio, al ver delante suyo, aquella portada que tantas veces habia visto, con manos un poco temblorosas tomo el ejemplar entre sus manos.
Icha Icha Paradise
Leyo el titulo, mientras lentamente giraba el libro, para ver por detras del empastado, una foto de su padrino, mostrandose con un gesto serio. Aun recordaba el trabajo que habia costado tomar esa impresion, ya que sin poderlo soportar mas, Jiraiya estallaba en risa, al ver los gestos que realizaba Naruto antes los comentarios de Kakashi. Ahora que lo pensaba, hace años que no sabia nada de Kakashi, se preguntaba que seria de el o que estaria haciendo. La ultima vez que supo algo, el peligris habia afirmado que haria un viaje para reencontrarse.- No sabia que tenias esos gustos- Comento el Uchiha detras de el, colocandose a su lado, para ver que habia alrededor.
-No me gustan- dice soltando el libro, para inmediatamente alejarse. En que maldito momento el Uchiha habita terminado. No le gustaba admitirlo pero se estaba volviendo despistado y eso no era bueno. Girando su rostro hacia el bastardo vio que algo detras de la espalda del muchacho resaltaba- ¿que llevas alli?- pregunto.
-Algo necesario- dijo sonriendo.
Al escuchar su respuesta, decidio que lo mejor era no darle importancia, pero al dar unos cuantos pasos algo en su cabeza hizo clic.
-Oye y de donde sacaste dinero?- pregunto topandose con la sonrisa en los labios del Uchiha.
-Digamos que es un pequeño pago por mis servicios, ademas no es tan cara - afirma alejandose.
-¡Oye, maldito teme!- grito fuerte, atrayendo varias miradas, avergonzandose, mientras realizaba reverencias, alejandose de alli para alcanzarlo.
-Sera mejor que te apresures, dobe, recuerda que tenemos el almuerzo- contesto caminando hacia el castillo.
***
Diferentes manjares se posaban delante de ellos, Kiba era el que mas disfrutaba de todo aquello, jamas penso que la carne de lagartija, fuera tan sabrosa, era cierto que era un poco seca, pero como lo acompañaban en aquellas tierras, era en verdad delicioso.
- En verdad no sabe como agradecemos toda su hospitalidad Tsuchikage-sama- comento Gaara en su asiento que estaba hasta el otro extremo de la mesa, frente a la cabecera de la mesa, puesto que se reservaba para el miembro de mayor importancia -despues del anfitrion-, a su lado del pelirrojo, se encontraba Naruto del lado izquierdo y del derecho Shikamaru.
-Ha sido un verdadero placer- contesto la pelinegra, la cual por su lado, tenia a su lado derecho al Uchiha y del izquierdo a kiba- y por favor, pueden llamarme kurotsuchi- contesto la chica, mientras veia con un claro interes al pelinegro.- jamas habia visto a un Uchiha- dijo sonriendo.
Naruto sabia que Sasuke no estaba dispuesto a contestar, por lo cual, cuando vio que este pasaba de la soberana de ese pais, no pudo evitar bajar una mano y pellizcarlo.
-Dobe- gruño viendo al rubio, viendo que este le dirigia una mirada para que le hiciera caso a esa molesta mujer- asi es- contesto por fin.
-Y todos son tan atractivos como tu?- pregunto sonriendo de forma sugerente.
Nadie en la mesa podia creer lo que acababa de pasar- a excepcion de Kiba que seguia comiendo con una sonrisa en su rostro-, esa mujer acababa de coquetear con el Uchiha.
- Tal vez- contesto el Uchiha sonriendo de lado.
Mas sorpresa para los presentes, e incluso mas sopresa para Naruto, el cual pudo sentir perfectamente, como esa mujer no despertaba nada en el bastardo.-"¿ Entonces por que le correspondia?"- fue la pregunta que nacio en su cabeza, pero decidio ignorarla. Una mano posada en su pierna lo desperto, dirigiendo su mirada azulina al pelirrojo.
- ¿Crees que podriamos hablar mas tarde?- pregunto el pelirrojo a su amigo.
Ante aquella pregunto el rubio no pudo evitar sorprenderse, al igual que se sorprendio al sentir un vuelco en su pecho al sentir aquella mano en su pierna.- " ¿porque?" - se pregunto mentalmente, mientras con un ligero asentimiento de cabeza regreso su mriada a su plato.
-Tal vez despues me podrias mostrar un poco mas... de tu cultura, Sasuke- escucho decir a la Tsuchikage, provocando que Naruto viera a los pelinegros, vaya esa mujer si que era rapida.
-Claro, por que no, Kurotsuchi- escucho con una molesta sensacion en el pecho, como el Uchiha al parecer siempre no era tan indiferente al coqueteo por parte de aquella mujer.
-Por cierto Naruto-san- llamo su atencion la soberana.
-¿S-SI?- contesto un poco alzando la voz al verse sorprendido.
-Me gustaria que fueran con nostros para ver unos simbolos, estoy segura que alguien con tus capacidades podra traducirlos sin problemas, ya solicite tu ayuda a Gaara-sama y estuvo de acuerdo- afirmo son una sonrisa educada, nada que ver con la que momentos antes habia dedicado al Uchiha.
-Claro mi señora- reverencio con la cabeza, mostrando una sincera sonrisa, Simbolos, jeroglificos, sabia que ese viaje tendria que ver con aquello, pero confirmalo, solo lo llenaba de emocion. Le encantaba saber cosas y entenderlas. Definitivamente esa visita seria algo bueno para el.