amo y mayordomo han confesado los sentimientos de uno por el otro, llevan siendo una feliz pareja alrededor de 3 meses, pero, ¿Qué sigue después de esto?
-Ahhh!!!- jadeaba Ciel al estar recostado en el pasto mientras su amado mayordomo devoraba su cuello con algunos besos.
-Mi amo es más que perfecto.- decía el demonio desvistiendo al joven conde.
-Ahhh! Cállate.- se sienta un momento para comenzar a desvestir al demonio.
-¿Seguro mi amo desea que yo haga ahhh! Silencio?- pregunta el demonio soltando un pequeño gemido en el oído de Ciel al sentir que este acaricia tímidamente su entrepierna por encima del pantalón.
-Tienes razón, pero vas a tener que llamarme por mi nombre en esta situación.-
-Te deseo Ciel.- susurra antes de lamer el cuello del menor mientras le quita los pantaloncillos y la ropa interior de un solo movimiento.
-¿Qué hacen?- aparece de la nada Finny llevando una canasta con varias flores recién cortadas.
-Emmm… yo…
-No hagas preguntas y lleva esas flores.- dice Ciel muerto de pena.
-Como diga bocchan.- se va silbando y brincando más que feliz.
-Sebastián… mi ropa.-
-Oh! Si señor enseguida lo arreglo….
Moraleja: Por más apasionado que estes revisa que nunca allá nadie al otro lado del jardín.
Fin.
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(Claude & Alois)
No es ningún secreto el deseo que Alois siente por su mayordomo ni el cuanto le gustaría que aquel hombre de ojos ámbar le poseyera hasta que consuma todo de él, ¿Qué pasa cuando la araña cae en la red de su amo?
Son las 7 de la noche, no importa que la planta baja este llena de nobles y sus parejas disfrutando del baile organizado por el cumpleaños del joven rubio, cuando la carne y la pasión te llaman, te llaman y no puedes hacer nada para detenerlo. Alois lo sabe y no le interesa estar a unos metros de la escalera principal gimiendo el nombre de su mayordomo que lo tiene apresado de cara a la pared mientras toca su cuerpo de manera degenerada pero excitante.
-Deje de hacer tanto ruido o nos van a atrapar.- susurra Claude en su oído antes de morderle la nuca.
-AH!- grita Alois placenteramente al sentir esa mordida. –Llévame a mi habitación entonces.-
-Yes your higness.- responde el mayordomo antes de levantar a su contratista sobre su hombro y cargarlo como un costal de papas sobre su hombro y levarlo hacia la habitación donde con un giro muy rápido cerró la puerta sin percatarse de que el rubio había resbalado un poco por lo cual le acabo golpeando fuertemente la cabeza contra la enorme y pesada puerta.
-¿Your higness?- pregunta al escuchar el golpe una vez que deja al conde sobre la cama. –Estupendo.- dice enojado al ver al rubio inconsciente.
Tanto que insistió y al finar lo dejo caliente.
Ni modo Claude, por bruto hoy no coges.
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(Agni & Soma.)
No existe persona en este mundo que no haya oído hablar de aquel libro traído de la India con un montón de poses para amar, pero, ¿Qué tan bueno es un hindú para ponerlo en práctica?
Los ojos del joven príncipe dejaban salir un montón de lagrimas de placer al sentir los movimientos de su mayordomo/protector en su interior pues al estar acomodado en 4 puntos toca lugares tan adentro que él jamás imagino que podrían sentirse así de bien.
-Prin…Ah! Principe… venga… agárrese fuerte.- sin darle tiempo al menor a reaccionar y abrazarlo Agni lo carga dispuesto a recargarlo contra la pared y darle tan fuerte como si lo odiara, claro que no contaba con un zapato que quedo tirado justo en el paso lo hiciera tropezar y caer al suelo de rodillas y el príncipe varios metros más delante de cara contra el suelo en una posición más que provocativa.
Precaución ante todo señor Agni.
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(Grell & Will.)
Grell es más que conocido por ser un alma que jamás se calla lo que quiere, sin importar que tan promiscuo suene, pero, ¿Qué pasa con él cuando se encuentra con Will?
Discreción no es una palabra que defina a esos dos y prueba de ello es la situación actual…
Desnudo y sudoroso se encontraba Grell apoyado en la ventana a las 9 de la noche jadeando mientras recibe las rudas estocadas del siempre serio William.
-Nnnghhh!!! Ahhh!!! Si Will…- gemía más que gustoso el shinigami pelirojo.
-Silencio cariño, ¿No querrás que nos escuchen o sí?- susurra el otro shinigami en su oído antes de morder su cuello mientras lo acomoda de rodillas.
-No Will… Ahh! Así no…- gime el pelirojo mirando hacia debajo de él, estar en esa posición y vivir en un 4to piso no es una idea.
-Greeeeeeeeeeeeeeell!!!!
Gritaba angustiado William al ver caer al pelirojo hacia la calle.
Admítelo Will, el exhibicionismo no es buena idea si se trata de Grell y de ti.
Toda la vida hemos leído en el yaoi que las relaciones sexuales son dulces, son perfectas y salen siempre bien a la primera, los personajes de Kuroshitsuji nos han demostrado que no todo en la vida es así.
¿Continuara?