Capítulo 12.- Encuentros no tan bienvenidos
Shun estaba caminando en medio de la oscuridad y tenía los ojos bien abiertos, él mismo había dejado a Hades encerrado en su jaula pero esa espina en el pecho que tenía cuando salía a cazar no se le quitaba con nada, él temía disparar a Hades por equivocación, temía herirlo por accidente, temía que sus amigos lo mataran sin saber que Hades era Hades, Shun odiaba guardar secretos a sus amigos y en especial a su hermano pero no había nada que pudiera hacer, esta situación no era buena pero… no les podía decir a sus amigos la verdad sobre su novio, ellos no lo entenderían y lo matarían sin siquiera considerarlo, para eso habían entrenado toda la vida, ese era su llamado y no dudarían en matar a un lobo de tenerlo en frente, claro que lo harían…
- Hey… ten cuidado Shun – Ikky había atrapado a su hermano antes de que caiga al piso porque se tropezó con sus propios pies aparentemente
- Lo siento Ikky – contestó automáticamente el peliverde tomando de mejor manera su ballesta, su mano aún le dolía un poco en las noches frías, y esta era una de esas noches
- ¿Estás bien?, has estado callado – dijo Ikky poniendo la mano en el hombro de su hermano, a sus ojos Shun estaba preocupado por algo y no se lo había dicho
- No me pasa nada Ikky – Shun se encogió de hombros al decir esto
- ¿Todo bien con tus clases?
- Si… todo bien
- ¿Y con tus clases de arte?, ¿con la gimnasia? – Ikky presionó
- La gimnasia va bien, mi entrenador está un poco disgustado conmigo porque me duele un poco la mano y no necesariamente estoy al 100 por ciento, Hyoga se unió al equipo y eso lo tiene molesto también, porque a veces nos cacha en las pláticas y nos manda a correr vueltas extras, pero nada de importancia, mis clases de arte van bien, el maestro es un idiota resbaloso que pone el ojo y la mano en todo lo que le atrae, no me mires así que no me ha hecho ningún tipo de insinuaciones pero se le acerca, con Sorrento si estuvo en los romances pero de un día al otro lo botó de la manera más cruel, al parecer le dijo que aquel que había estado esperando al fin había llegado y que ya no necesitaba seguir jugando con él, pobre Sorrento… estaba como alma en pena el pobre
- ¿Ese Sorrento es otro de sus estudiantes, o entendí mal?
- Si, es mi compañero en la clase pero estudia algo en la facultad de Ciencias, no me acuerdo, lo triste del caso es que en su delante hace insinuaciones de todo tipo a todo el mundo, puedes creer que dijo el otro día que vamos a iniciar la etapa de dibujo de formas humanas y que iba a sortear quién de nosotros posa desnudo para la clase, ¿qué tal con ese idiota?
- ¿Vas a posar desnudo para la clase??? – Ikky abrió mucho los ojos al preguntar esto
- Claro que no Ikky, como es una clase electiva, si el muy imbécil ese me dice que yo soy el que tiene que posar, me retiro de la clase, si no soy yo pues… dibujaré formas humanas con el modelo que se preste para eso
- Haz el favor de no posar desnudo para nada de esas cosas, a papá le explota la cabeza – dijo Ikky sintiéndose un poco más tranquilo, las crisis existenciales de Shun al parecer estaban dentro del rango de lo normal, como su hermano a veces se le desaparecía por ese novio que tenía pues, Ikky no quería dejar que el tiempo y las ocupaciones los distanciaran, Shun era su hermano menor y le había prometido a su padre cuidarlo, lo bueno era que Shun siempre fue responsable entonces Ikky en verdad que no se preocupaba mucho por él, no había necesidad
- Pues sí… ¿hablaste con él hoy?
- No, hablé ayer y me dice que está preocupado por ti, lo que me recuerda… ¿qué pasa con tu novio?
- Dioses… es mi culpa por decir algo, no le pasa nada a mi novio, él está bien, yo estoy bien, es solo que Hades anda un poco distraído de vez en cuando, eso es todo – Shun suspiró al contestar esto, algo le había comentado a su padre y lógicamente lo había sacado de toda proporción alertando a su hermano, eso de estar lejos de sus retoños si era duro para Shion
- ¿Crees que te engaña? – preguntó Ikky a quemarropa, a la final ese siempre fue su estilo
- No… no lo creo, siempre está con Julián así que no lo creo, deja la desconfianza en Hades, a él le caes bien
- Eso es lo que dices tú, tu novio no es necesariamente muy sociable, nunca ha salido con nosotros, si apenas hemos cruzado palabra con él, ¿por qué?
- Hades no es sociable con nadie, no te lo tomes a manera personal, si Julián no fuera su mejor amigo pues no tendría amigos, se lleva con todos pero no se lleva con nadie, es todo reservado, ¿es eso un crimen?
- Pues no, pero si me preocupa que mi hermanito bebé tenga por novio a alguien que tiene todas las características de un asesino en serie – Ikky codeó a Shun cuando dijo esto, Shun rió divertido cuando respondió:
- Hades no es asesino en serie
- Si lo fuera no te lo diría, ¿no lo crees?
- Eso sí… Ikky… ¿escuchas eso? – Shun puso la mano en el pecho de su hermano para detenerlo y poder escuchar mejor, Ikky se volteó ligeramente y entrecerró los ojos, a pocos metros los matorrales se movieron, Mu también lo había escuchado y se detuvo tomando de la chaqueta a Milo para que se detenga y se calle, Camus se volteó al darse cuenta que todos sus amigos lo habían hecho y le lanzó una piedrita a Shura para que los tome en cuenta y se detenga también
- ¿Lobo? – susurró la pregunta Mu, Shura meneó la cabeza pero se volteó a sus espaldas, el sonido de los matorrales en movimiento llamó su atención
- ¿Dos lobos? – susurró Shura señalando el arbusto tras de Shun que caminó pegándose un poco más a Ikky
- Es lo más probable – susurró Ikky preparando su arma cuando el movimiento del arbusto fue mucho más evidente, pero la verdad no tuvo oportunidad de dispararla porque el lobo que emergió de la maleza no necesariamente los tomó en cuenta, sino que corrió rápidamente entre ellos perdiéndose entre los arbustos con dirección al río
- Dioses… ¿qué fue eso? – Mu si había disparado su arma pero no le dio al escurridizo lobo
- Un lobo, pero no fue el mismo de las otras veces, este era un poco más pequeño y su pelaje era más claro y algo cafecito, ¿se fijaron en eso? – dijo Shun sin bajar su ballesta, él escuchó un gruñido pero no venía de la dirección en la que el lobo se había perdido entre la maleza, este gruñido venía desde atrás suyo, se volteó, Ikky lo imitó y levantó el arma, lentamente unos ojos brillantes se hicieron visibles, este si era el lobo de la vez pasada, era mucho más grande que el otro y les gruñía amenazadoramente, el otro lobo más pequeño simplemente había huido sin atacarlos
- Ikky no¡¡¡ - Shun trató de impedir que su hermano disparara pero no lo logró, el lobo saltó directo a él y lo arrojó con fuerza contra el árbol más cercano, Shun no tuvo defensa y se golpeó feísimo su mano lastimada que puso frente a su rostro cuando se dio contra el árbol
- Shun¡¡¡ - Ikky disparó al lobo y le rozó la pata trasera, el animal aulló y como pudo corrió perdiéndose entre la maleza, Ikky fue junto a Shun y lo tomó entre sus brazos, el muchacho de ojos verdes se quejó, su ceja sangraba porque a pesar de que detuvo el golpe de su rostro contra el árbol con el brazo, si se lastimó de todas maneras
- Auch… despacio Ikky…
- ¿Estás bien? – Mu se arrodilló junto a herido muchacho y sin mayores ceremonias lo estaba revisando por mordidas, Shun lo notó y dijo:
- No te apures, solo me empujó no me mordió
- ¿Estás seguro?
- Si… estoy seguro, ¿vieron a dónde se fue? – Shun trató de ponerse de pie pero Mu no dejó que se moviera y meneó la cabeza al decir:
- Tú no te mueves, mírame… eso es… - Mu sacó una linterna e hizo que Shun siguiera con la mirada la luz, el peliverde lo hizo sin problemas, ahí fue que Ikky lo incorporó y Shun se apoyó en el árbol llevando una mano a su frente, si se había golpeado la cabeza
- Debemos seguir al lobo – dijo Shun señalando la oscuridad
- Shura, Camus y Milo fueron tras él, nosotros vamos a volver al campus – dijo Mu tomando a Shun del brazo
- Yo puedo volver solo – se quejó Shun al sentir que Ikky lo estaba sosteniendo
- Papá me asesina si algo le pasa a su retoño favorito, ya no te quejes Shun y camina, eso es…
Ikky y Mu ayudaron a Shun y volvieron lentamente al campus, Shun si podía caminar pero no lo estaba haciendo muy rápido que digamos, si se sentía algo mareado y no quería tentar a la suerte, al llegar al campus, Mu insistió en llevarlo a emergencias, Ikky lo apoyó pero Shun se negó, según él no estaba tan grave, claro eso fue hasta que Ikky tomara su mano y le diera un muy suave apretón, luego de eso Shun ya no opuso resistencia, si estaba lastimado
El doctor de turno lo revisó y le puso una muñequera, no estaba rota su mano pero si estaba magullada, así que le recetó medicación para el dolor y lo mandó a casa luego de limpiar y parchar su ceja, Shun había dicho que lo asaltaron, esa era la historia oficial que el médico no necesariamente creyó, pero si su paciente no le contaba lo que pasó, legalmente no podía forzarlo.
Al día siguiente Shun despertó con el aroma de café recién hecho en su nariz, al abrir los ojos miró a Hades que tenía su mano herida entre las suyas y lo miraba con el ceño fruncido
- Hey… - dijo Shun medio dormido a manera de saludo, la medicación para el dolor había ayudado a que durmiera cual piedra
- ¿Noche ruda? – preguntó el pelinegro tamborileando los dedos en la muñequera de Shun
- No es nada, un lobo se puso rudo pero no te apures que no me mordió, solo me empujó con violencia, nada que no haya pasado antes
- Que mal… ¿y te duele?
- Un poco, ¿qué tal tu noche?
- Cansada, sin eventualidades supongo yo porque desperté dentro de la jaula, Julián me dijo que los vio en la noche pero que prudentemente no se acercó a ustedes, él fue montaña arriba a las cuevas de los osos
- ¿Está loco?
- No… los osos usualmente no nos toman en cuenta, no los molestamos y ellos no nos molestan, ustedes no se acercan por allá, es un buen lugar para pasar la noche sin temer a ser cazados
- ¿Tú has ido para allá?
- Un par de veces pero prefiero no salir, ya te lo dije, dale… toma un sorbito o dos antes de que se enfríe, frío no es bueno – Hades acercó el jarro de café a los labios de Shun que meneó la cabeza y dijo:
- Tú lo tomas casi a punto de ebullición, prefiero no quemarme la lengua
- Mal amor, el café se toma caliente – Hades si tomó un bocado de café antes de besar en los labios a su adolorido novio y acomodarlo mejor en la cama
- No me digas que tú también te vas a poner paranoico como Ikky
- No llego a tanto pero déjame atenderte hoy, ¿yogurt con cereal?
- Ok.
Shun pasó el día en cama atendido por su novio y por su hermano, al caer la noche se quedó en la casa de Hades, el pelinegro bajó a su jaula y Shun esperó a que la casa entera durmiera para bajar con una almohada y una manta para acomodarse en las escaleras y leer mientras Hades en su forma de lobo se paseaba de lado a lado en la amplia jaula. Julián lo despertó al día siguiente cuando vino a sacar a Hades, y juntos fueron a desayunar.
Ya el tercer día de luna llena fue un lunes, el muchacho de cabellos verdes ya no la pudo pasar en casa y tuvo que ir a clases, eso no fue del todo incómodo, pero al caer la tarde, Shun estaba haciendo sus mejores esfuerzos por no demostrar dolor, su muñeca no estaba rota pero por el trajín del día si la sentía sensible y estaba algo adolorido, así que en el entrenamiento de gimnasia se estaba paseando literalmente entre las colchonetas mirando a sus amigos mientras estaban entretenidos en sus prácticas, Hyoga estaba intentando hacer un salto triple pero no lo conseguía del todo, y lucía frustrado, corría por la pista pero cuando lo intentaba no aterrizaba correctamente, perdía el equilibrio y no podía hacerlo limpiamente
En eso estaban cuando dos chicos entraron a la pista, Shun miró y no lo podía creer, era aquel muchacho castaño del otro día y venía acompañado del muchacho de cabellos largos y negros, ambos estaban riendo de algo y ya vestían su ropa de entrenamiento. Shun vio que el castaño era un poquito más alto que él, un poco más corpulento y algo musculoso pero no mucho, su tono de piel bronceada era muy bonita al igual que su sonrisa, eso le reventó el hígado, era atractivo pero no como para que Hades prácticamente se le lanzara como perro hambriento a un pedazo de carne como había pasado esa mañana en el jardín, Shun no lo hubiera reconocido pero si se sintió herido por la manera en la que Hades miraba a ese desconocido, y no pasó por desapercibido a sus ojos que el sentimiento era plenamente correspondido, Hyoga le había dicho que eran ideas suyas pero no… él estaba seguro y daría lo que no tenía para no volver a cruzarse con ese muchacho en lo que le quedaba de vida
El castaño y el pelinegro empezaron a correr alrededor de la pista como calentamiento, iban en competencia y ambos resultaron ser por demás veloces, pero más que nada reían mientras corrían y se retaban, la estaban pasando genial en el entrenamiento porque parecía que jugaban más que entrenaban, el que la estaba pasando mal era Shun porque los miraba con rabia, y más rabia le dio cuando el castaño se paró al extremo de la pista y empezó a hacer varios giros y saltos de acuerdo a lo que el entrenador le estaba instruyendo, diablos… era un muy buen gimnasta porque era veloz, su aterrizaje era perfecto y tenía una gracia felina bastante especial que se le hacía familiar pero no lo podía determinar, el muchacho de cabellos negros también pero el castaño era mucho mejor, una de las cosas de las que Shun sentía orgullo a manera personal era de su habilidad para la gimnasia y él estaba convencido que era el mejor de la clase, por lo menos eso había escuchado decir a su entrenador hasta que ahora había llegado este castaño de la nada y rayos… era casi tan bueno como él…
- Seiya!!!, vámonos!!! – el muchacho de cabellos negros llamó al castaño que estaba girando en los anillos, pero con el grito se desconcentró y se cayó – Ohh cielos… - el muchacho de cabellos negros corrió hasta el centro de la pista para encontrar a su amigo que reía muy divertido y pregunto: - ¿Estás bien?
- El orgullo es lo que tengo magullado – respondió el castaño poniéndose de pie
- Eres una ardilla, ¿sabías lo que hacías? – incriminó el pelinegro, los anillos no era su disciplina, pero Seiya estaba jugando ahí de todas formas, y en verdad que jugaba porque no tenía ningún tipo de técnica ni mucho menos, Shun pensó que le gustaba escalar cosas o que simplemente quería intentarlo a ver qué pasaba
- Ay Shyru no seas dramático, del suelo no hubiera pasado, además… si no haces cosas tontas de joven, ¿de qué te vas a reír cuando estés viejo?
- Tu filosofía te va a matar uno de estos días – Shyru dijo esto meneando la cabeza en un tono sumamente divertido
- Pues ojalá – Seiya seguía sonriendo pero a lo que caminaba se frotaba el hombro derecho que al parecer se había golpeado, pasó junto a Shun de camino a los vestidores y se miraron por unos segundos nada más, Shun lo siguió con la mirada hasta que se perdió dentro pero Seiya prácticamente lo ignoró
Desde ese día las prácticas del equipo de gimnasia dejaron de ser divertidas para Shun porque Seiya estaba allí, el castaño era bastante sociable y hacía amigos con facilidad, era bueno en el estilo libre de pista aunque igual practicaba en el caballete, en las vallas, en los aros, en todo la verdad, Seiya había resultado ser atlético pero más que fuerte era flexible y muy curioso, el entrenador estaba frustrado con él porque no le ponía seriedad a las prácticas, llegaba tarde a veces, otras veces de plano no iba, otras veces iba pero no entrenaba nada y decía que estaba herido o lesionado de alguna forma y otra aunque Shun nunca le notó nada extraño, lo que era claro para él era que Seiya estaba ahí para divertirse y jugar mas no para competir, el entrenador había dicho que tenía potencial pero al castaño no le importaba al parecer, talento desperdiciado al más alto nivel, en verdad que su entrenador no podía estar más frustrado
Por algunas semanas Shun veía a Seiya solamente de lejos en sus prácticas de gimnasia y eso a veces era demasiado para él, le reventaba la tensión que se generaba en Hades cuando el castaño estaba dentro de su campo visual, Seiya no necesariamente se acercaba a ellos pero Shun notaba que las miradas con Hades se seguían cruzando y eso lo molestaba más de lo que le gustaría admitir porque el pelinegro no disimulaba su interés hacia aquel en lo más mínimo
Uno de los puntos álgidos de esta situación se dio cuando el temido día llegó y el Maestro Saga anunció que iban a empezar a dibujar el cuerpo humano, para molestia del muchacho de ojos verdes el modelo que iba a posar para la clase resultó ser Seiya, que llegó al salón y sin mayores preámbulos se fue quitando la ropa en la parte trasera del aula pero se puso una bata que Saga le había dado con anterioridad, cuando estuvo listo caminó hasta el centro del círculo que los chicos habían formado, se quitó la bata quedando desnudo para que la clase lo dibuje, Saga hablaba de la anatomía básica humana señalando a Seiya sin realmente tocarlo, pero fue muy obvia que esas hubieran sido sus intenciones de no tener a 20 muchachos de testigos, tomando en cuenta la situación entera, Shun pensó que lo que Seiya no acababa de hacer, él no lo habría podido hacer nunca y le molestó la naturalidad que el castaño mostraba, al igual que le molestaron los tatuajes, que ahora al verlo desnudo, notó que tenía
Bajo el hombro derecho tenía un Pegaso con las alas extendidas, no era un tatuaje muy grande pero si era muy hermoso, el detalle del dibujo era exquisito, el artista había sido muy hábil aparentemente, Seiya tenía también una frase en su pantorrilla en un lenguaje que Shun no entendió, probablemente era japonés o algo así, y tenía otro en la cadera, era la silueta de un lobo que aullaba, eso más que cualquier otra cosa molestó a Shun hasta que se dio cuenta de que lo que decía Hyoga era verdad, él estaba mirando hasta el último detalle de Seiya para poder odiarlo de mejor manera, y eso no era saludable
Otra cosa que Shun notó, no que le hubiera sorprendido porque el comportamiento de su Maestro Saga en lo que al ligue se refiere era legendario, era que el mayor se estaba comiendo con los ojos al desnudo modelo, nunca había sido tan obvio al respecto pero en esta oportunidad mandó todo tipo de compostura al diablo, y para sorpresa de la clase entera, también había tomado todos los implementos necesarios y estaba entretenido dibujando a su modelo, Seiya no necesariamente lo estaba tomando en cuenta, el castaño tenía la mirada en la ventana tratando de dejar su mente en blanco, la verdad no estaba tomando en cuenta a nadie mientras la clase entera lo dibujaba, de rato en rato sonreía pero luego recobraba la compostura, él debía mantenerse sereno o por lo menos eso le había dicho Shyru que debía estar, su pelinegro amigo le había hecho todo tipo de recomendaciones de cómo debía portarse en la clase de su cuñado, a la final el maestro Saga era el gemelo de su novio y eso era algo complejo, el castaño no estaba del todo convencido de estar allí pero… una apuesta es una apuesta…
Al final de la clase Shun empezó a dibujar pero los trazos no le salían, rompió un par de sus lápices y cuando estaba por romper el tercero se decidió y mandó todo al diablo, no iba a poder dibujar a ese imbécil ni así su vida dependiera de ello, así que empacó para irse, lo que más quería en este punto era descansar, ese no era su día y no tenía por qué amargárselo por gusto, no… era mejor aplicar lo de: “Lejos de los ojos, lejos del corazón”