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Merlín y Arthur habían salido temprano esa mañana, de esa forma Merlín podría hacer su magia en los alrededores, aumentando la cantidad de comestibles y sin arriesgarse demasiado. Hechizó los manzanos para hacer que tardaran menos en dar frutos. Merlín se divirtió mucho con eso. Hizo crecer uno justo debajo de Arthur haciendo que se elevara en el aire a medida que las ramas crecían a su alrededor. El príncipe le grito para que lo bajara para asi poder atravesarlo con su espada, asi que Merlín simplemente se la arrebato con un hechizo y se fue a cultivar otro árbol, solo para regresar unos minutos más tarde. Ayudó a Arthur a bajar y le devolvió su espada antes de reírse de las hojas atrapadas en el cabello del Príncipe. Extendió la mano y comenzó a quitarlos.
"¿Qué crees que estabas haciendo allí?" El brujo rio y luego corrió.
Los aldeanos observaron con asombro como el Príncipe de Camelot agarraba a Merlín y lo derribaba al suelo, los dos se reían cuando el príncipe rodó sobre el brujo. Hunith se rio cuando Merlín se puso de pie y se soltó una vez más agitando algo, "¡Merlín, devuélveme la billetera!" El príncipe grito indignado.
"Quizás… ¡más tarde!" Merlín grito mientras continuaba corriendo, sabiendo que el príncipe lo estaba persiguiendo. Corrió alrededor de la casa de su madre y susurró un hechizo, volviéndose invisible.
Cuando el príncipe dobló la esquina frunció el ceño, "Estas haciendo trampa".
Merlín hizo lo posible por no reírse de la cara de Arthur y arrojó el pequeño monedero el cual era invisible a Arthur, golpeándolo en el estómago. Cuando golpeó a Arthur, este volvió visible, y el lo agarró, pero siguió mirando a todas direcciones buscando a Merlín. El hechicero sonrió y se revolvió cuidadosamente hasta que estuvo detrás del príncipe.
"¿Merlín? ¿Dónde estás?" Arthur dijo, descontento. El sirviente sonrió y saltó sobre la espalda de Arthur.
El príncipe se sobresaltó sorprendido, atrapando por instinto las piernas de Merlín, por lo que le estaba cargando al hombre más pequeño.
"¡¿Qué demonios Merlín?!" Exclamó en estado de shock cuando el brujo volvió a ser visible. "¿Desde cuándo puedes ser invisible?"
"Desde hace aproximadamente un minuto. Nunca he probado ese hechizo antes". Arthur miró a Merlín con los brazos colgando de los hombros.
"¿Soy tu conejillo de indias o algo así?"
Merlín se rio de eso, "Bueno, ¿confías en mí, verdad?"
El príncipe se encogió de hombros y reajustó su agarre sobre Merlín, "¿Por qué no lo haría?" Merlín sonrió y le hizo un gesto al príncipe para que soltara, pero Arthur sonrió, "Nah. Me robaste la billetera".
Merlín parpadeó y lo siguiente que supo fue que Arthur había cruzado la puerta trasera de la casa de Hunith y lo había arrojado al catre y comenzado a hacerle cosquillas. Merlín se retorció e intentó escapar, pero no era rival para Arthur sin su magia. Finalmente, Arthur lo dejó respirar y se acostó en el catre junto a Merlín, que respiraba pesadamente.
"Imbécil." Merlín murmuró.
"Oh vamos. Si estuvieras realmente enojado conmigo, no me hubieras dejado hacer eso". Arthur dijo dándole un codazo a Merlín.
El hechicero rodó los ojos, "¿Cuándo quieres irte?"
Arthur pensó por un momento, "Tal vez en 3 o 4 horas".
Merlín asintió mientras recuperaba el aliento.
Arthur se encontró pensando en algo que nunca le había preguntado, "¿Cómo sobreviviste al Dorocha?"
Merlín miró al príncipe y se encontraron mirándose a los ojos, "Me agotaron toda la vida. Pero yo soy la encarnación de la magia. Mi suposición es que era demasiado para tomar de una sola vez. "
"Entonces, ¿la magia es más o menos la parte central de ti?" Arthur dijo lentamente.
"Creo que podrías decir eso". Merlín cerró los ojos pero su rostro todavía estaba inclinado hacia Arthur, "cuando mi magia está bloqueada o agotada, se siente como si alguien estuviera desgarrando mi alma en dos".
Arthur estudió la cara de Merlín, "Realmente me pregunto cómo te las arreglaste para mantenerlo en secreto por tanto tiempo".
Merlín abrió un ojo, "Bueno, las únicas personas que lo descubrieron murieron o juraron nunca contar". Sus ojos se cerraron.
"Realmente no puedo imaginar que mates a nadie". Arthur dijo en voz baja.
"Yo, a nadie . Sin embargo lo he pensado, cuando era necesario. Al mismo tiempo, ha habido personas que debería haber matado pero no lo hice". Merlín tomó una respiración profunda.
"¿Sabías que siempre hueles a chocolate? Honestamente, no lo entiendo, no tienes nada de chocolate perfumado en casa y definitivamente no lo sabes ahora".
Arthur levantó una ceja, "¿Tal vez es tu imaginación?" Él dijo.
La respiración de Merlín era rítmica mientras hablaba: "Lo dudo. Todos huelen de cierta manera. Mi madre huele a brownies, todo el tiempo. Lancelot huele a salvia. Gwen huele a jengibre. Leon siempre huele a pimientos. Gwaine huele a manzana. . La lista sigue y sigue."
Arthur frunció el ceño, "¿En serio?" Preguntó.
Merlín asintió y agarró la muñeca de Arthur. El príncipe sintió que una especie de electricidad lo atravesaba y de repente todos los olores en la habitación fueron cien veces más agudos. Podía oler la comida en sus bolsas y la tinta en la mesita de noche y el olor de las sábanas. Y efectivamente podía oler el chocolate. Inhaló profundamente por instinto y olió algo más. Olía a té mezclado con otras especias ricas.
Sacudió la cabeza un poco, "Hueles como la tienda de té y especias en el mercado de primavera".
Los ojos de Merlín se abrieron y parpadeó, "¿De verdad?" Arthur asintió con la cabeza, "También hay otras esencias pero eso es lo más fuerte".
Merlín lo miró fijamente, "Siempre hueles como el chocolate, pero también hay un olor metálico de tu armadura y un olor a algodón y flores de tus telas. Además de eso, usualmente hueles a papel y tinta si has estado trabajando".
Arthur miró a Merlín, "¿Te das cuenta de todo esto?"
Merlín sonrió y cerró los ojos, "Paso la mayor parte de mi tiempo contigo, Arthur. Conozco casi todo de ti, tus historias como te ves, hueles, suenas, etc." Arthur miró a su sirviente por un tiempo hasta que se dio cuenta de que se había quedado dormido. Rodó sus ojos y pronto se encontró haciendo lo mismo.
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Cuando Merlín se despertó, se sorprendió al ver que el príncipe seguía junto a él. En realidad, más exactamente, encima de él.
El príncipe se había movido mientras dormía y terminó con un brazo colgando alrededor del torso de Merlín. Merlín empujó a Arthur fuera de él, sin preocuparse por despertarlo, siempre dormía como una roca, antes de pararse y mirar afuera.
Necesitaban irse de inmediato. "Arriba, es hora margarita perezosa”. Dijo sacudiendo a Arthur.
El rubio parpadeó varias veces antes de enfocarse en Merlín.
"Tenemos que irnos." Merlín dijo "Tenemos que ver a Morgana, si es que ella viene".
Arthur se sentó inmediatamente, él y Merlín rápidamente guardaron sus cosas en las bolsas antes de dirigirse a sus caballos, y luego se despidieron de Hunith.
Mientras Merlín preparaba los caballos, Hunith apartó a Arturo un poco, "Mi señor. Quiero agradecerle por proteger a Merlín. Sé que no es fácil de contener y que nunca hace lo que le dice y me he estado preocupando tanto tiempo de que lo mataran…Pero creo que ahora que usted sabe más sobre él, hará cualquier cosa por usted. Lo que sea. Por favor, manténgalo a salvo” Parecía preocupada todavía, pero parpadeó cuando Arthur le puso una mano en el hombro.
El príncipe sonrió, "Nunca metí intencionadamente a Merlín en peligro. No se preocupe, estoy seguro de que es más que capaz de cuidar de sí mismo y ahora tiene muchos caballeros que le cubren la espalda. No irá a ninguna parte".
Hunith sonrió cálidamente y luego abrazó a Merlín cuando se acercó para decir adiós.
Mientras se alejaba, Merlín miró a Arthur: "¿Qué dijo mi madre?"
"Soy el príncipe Merlín, no necesito responder tus preguntas". Arthur dijo astutamente.
"¡Arturo!"