OLVIDO
Nunca han tenido la sensación que olvidan algo importante que debían hacer o decir…
Era la duda que últimamente Sam tenía cada vez que miraba el bunker, sentía que olvidaba algo importante pero en los últimos días todo había sido una de las pocas experiencias que en su vida deseaba saber… Sí tener a un embarazado no era cosa fácil y póngale en la ecuación a que el embarazado era su hermano pues es la fórmula perfecta del caos.
Dean era un niño en un cuerpo de un adulto antes de estar en cinta, pero ahora algunas veces Samuel está tentado en ponerle en la bebida vitaminada de su hermano unos somníferos… ¡Qué! Medidas desesperadas para casos desesperados… pero al menos luego de estar por tres horas sobando los pies de su hermano, tener un día de estar arriba y abajo por los dichosos antojos de Dean, en donde la comida iba de los gustos más extraños como asquerosos, no Sam jamás miraría con los mismo ojos a la leche de cabra… quitando sus traumas que eran muchos al fin de estar más de 24 horas sin dormir, porque su querido Cuñado tuvo que ir al cielo por tres días dejando a él al cargo de su queridísimo hermano, pero solo negó un poco podría estar agotado, no solo cazando sino llenando de mimos a Dean porque se lo merecía, ver el brillo único que tenía el cazador le daba las ganas de seguir pero esa noche no o madruga al fin podría cerrar los ojos por unas horas….
Jamás hubiera creído que al ver su cama se encontraría feliz de la vida pero era verdad, desde ahora en adelante la única relación seria que tendría seria con ella, si desde la puerta le estaba llamando para que se tirara en ella y olvidara las penas, se estiro un poco listo para acostarse solo faltaba unos paso y estaría durmiendo solo unos pasos y adiós mundo real y hola mundo de los sueños…
” ¡Sammy quiero una hamburguesa doble carne con pepinillos y helado de piña ahora! ” Grito Dean a la una de la mañana, el cazador podía sentir como su pequeño bebé estaba batallando en su vientre, no solo le estaba afectando las hormonas por todos los cambios en su cuerpo, sino al parecer despertarse sin sentir que su ángel lo estuviera cuidado le había pasado factura, y como toda persona civilizada, con sus prioridades bien definidas se le ocurrió molestar al único que tenía en el bunker, si su querido hermanito estaba de chef personal mientras apareciera su esposo.
Samuel estaba a punto de llorar como tentado en poner los somníferos en esa hamburguesa, solo se dio por vencido para ir a la cocina a preparar el dichoso alimento para su hermano y sobrino.
”Descansa, Sam ” aparece de la nada Castiel, viendo como su cuñado solo se toca el corazón para ver como el ángel desparece para reaparecer con su hermano lo sabe por el grito de Dean es de seguro que de un chasquido el ángel le dio lo que deseaba su hermano, solo giro para meterse en la cama antes que algo sucediera, estaba a punto de cerrar los ojos cuando se le vino un recuerdo…
” ¡el perro! ”
HAWAII
” ¡Steve detente! ” Grito Danno, cerrando los ojos cuando su querido novio lo estaba llevando de corbata mientras habían decidido dar una vuelta, se suponía que era un día… se suponían pero lo que era un día ya era varios… no que va eran meses. .. A ese paso le saldrían arrugas en su hermoso rostro.
Los vecinos solo miraban con algo de pena como ese enorme perro negro se llevaba como bandera a su amo, algunos que conocían la verdad de quien era ese perro no daban crédito de ver al recto, como ordenado, disciplinado Seal se comportaba tan diferente, era tantas las travesuras como aventuras que había tenido el pobre detective que algunos estaban tentados en hacerle un altar por la infinita paciencia que tenían.
” ¡en la piscina no! ¡No Steve! ”
Todos solo vieron en cámara lenta como el enorme perro se lanzaba sin miramientos en la piscina llevándose entre las patas a Daniel que ya estaba a punto de considerar la academia de adiestramiento para perros…
CONTINUARA…