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El último Milagro de Sherlock Holmes por sherlocked221B

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Notas del capitulo:

Hola nuevamente! gracias a quienes siguen este fanfic. Agradezco mucho sus comentarios e impresiones a quienes me escriben! 

Disfruten el capítulo! 

-Boni-

Los incesantes golpes en la puerta se estaban volviendo irritantes, ¿quién podía llegar a ser tan grosero para golpear de tal forma a esas horas de la noche? los vecinos comenzarían a reclamar

—¿quién es? —preguntó la mujer con tono demandante sin atreverse a abrir—es muy tarde, vuelva mañana—dijo al no obtener contestación, Los toques se detuvieron un momento, y comenzaron nuevamente a avasallar la puerta. Ya está, el intruso había colmado la paciencia de Mary, fue a coger un arma cargada a su habitación como “protección” y la escondió entre los pliegues de su bata de dormir. Al abrir se encontró con el rostro de Sherlock Holmes apoyado en el marco de la puerta con expresión fastidiada. Con una mano se sobó el puño, al parecer no le había hecho gracia tener que insistir tanto tiempo frente a la puerta.

—Hola Mary—dijo con falso entusiasmo—puedo pasar—aquella ultima frase fue más una demanda que una pregunta, luego de pronunciarla Sherlock se adentró en el interior de la casa pasando por el lado de la rubia, caminando por toda la sala mientras observaba cada posible rincón, cada detalle, sin disimular en lo más mínimo su exhaustiva indagación.

—Sherlock, que sorpresa. ¿Pasó algo con John? —preguntó Mary intentando mantener una actitud relajada

—no, nada en especial—respondió el con aire indiferente, mientras se inclinaba para ver algún detalle de la chimenea, su abrigo flameaba con sus repentinos movimientos, giraba sobre sus pies cada cierto tiempo enfocándose en alguna imperfección en la residencia, estudiando el polvo de los muebles, las pisadas marcadas en el piso encerado.

—¿está recuperándose bien? —interrogó la rubia intentando ignorar las extrañas actitudes de Holmes.  

—sí, se encuentra mejor, después puedes verlo por ti misma

—bueno y entonces ¿qué te trae por aquí?

—…estaba aburrido, Sali a dar un paseo, pasaba cerca de aquí y entonces…me asaltó una pequeña duda, que solo tu puedes resolver Mary…—dijo Sherlock abriendo los ojos con entusiasmo mientras elevaba los brazos en dirección a la mujer. Mary lo observaba con creciente impaciencia

—¿hace cuánto tiempo...?

—no estoy entendiendo Sherlock ¿cómo sabes dónde vivo? —interrumpió ella intentando desviar el curso de la conversación.

—ah por favor…no perdamos el tiempo con preguntas estúpidas…será mejor que respondas lo verdaderamente importante, el motivo que me trae hasta aquí— En ese momento el móvil de Holmes comenzó a sonar, pero él lo ignoró.

—¿no contestarás? —

—estoy esperando una respuesta—señaló Holmes enfatizando en cada sílaba—será mejor que nos ahorres tiempo a ambos Mary…podemos estar aquí toda la noche.

—Sherlock no quiero ser descortés, pero…estás en mi casa, es una propiedad privada y estas no son horas para visitas sociales, estoy cansada…sinceramente no estoy para juegos, así que si me disculpas…—pero no pudo terminar Sherlock se aproximó a gran velocidad y la tomó por los hombros

—esta no es una visita social Mary Morstan, es una visita de advertencia, un interrogatorio, estoy pesquisando las pruebas necesarias…así que será mejor que colabores—dijo con seriedad.

—eres lo que todos dicen, un psicópata—dijo ella intimidada por el impulso del detective, Sherlock apretó su agarre elevando el rostro mientras la miraba desde su envidiable altura, estaban en la penumbra de la sala, la lúgubre luz que ingresaba por la ventana generaba sombras que se proyectaban en el rostro de Sherlock dándole un aspecto amenazante.

—te equivocas Mary—dijo aproximándose a ella con sus profundos ojos fijos en las pupilas de la mujer—soy un sociópata altamente funcional, con tu historial de vida. Lo sé todo…—Mary, quien había desempeñado su papel de inofensiva mujer y enfermera de la consulta del doctor Watson de forma magistral durante dos largos años, de pronto vio  como se le desprendía el antifaz del rostro, se sintió plenamente  descubierta ante la escrutadora mirada del detective. Y su única opción fue empujarlo con fuerza, dándole un golpe en las costillas, dejándolo sin aire,  para luego propinarle una patada haciéndolo perder el equilibrio, Sherlock se iba a incorporar pero elevó oportunamente la vista observando como Mary Morstan la amable mujer que siempre había estado ahí para John cuando él lo había necesitado ahora apuntaba un arma hacia su cabeza.

Mary pensó que al menos con eso el detective se asustaría, a todos les intimidaba la idea de la muerte, pero no Sherlock Holmes, quien la miró con fiereza y decisión desde el piso…Holmes solo quería resolver el caso, aunque eso le costara la vida.

—no te ves muy asustado—admitió quitándole el seguro al arma.  

—no lo harás

—tu no sabes eso…créeme motivos no me faltan—amenazó

—las paredes…son de yeso—comentó Sherlock como si fuese un dato interesante que se le había ocurrido en el momento.

—y…

—el arma no tiene silenciador, cualquier disparo alertaría a tus vecinos…la estación de policía esta a menos de 10 minutos en auto por la avenida principal, a esta hora no hay tráfico, no tienes suficiente tiempo para idear una coartada, ni para  limpiar los restos de sangre derramada o deshacerte del cuerpo…estoy en medio de un caso muy importante y vine a tocar tu puerta, si me encuentran muerto aquí ni el más inepto de los detectives tardará mucho tiempo en atar cabos…serás la principal sospechosa ¿cuánto crees que tardara Scotland Yard en perseguirte por todo Londres? O quizás por toda Inglaterra…. te sorprendí…no tienes plan de escape…quizás la asesina que eras antes tenía inmunidad, eras invisible…no eras nadie. Pero Mary Morstan es vulnerable. Así que deja de hacernos perder el tiempo,  baja esa arma y responde a mis preguntas

—bien Sherlock Holmes, ¿qué quieres saber? —preguntó Mary con fastidio al no tener otra opción.

—¿hace cuanto tiempo que tienes esta nueva identidad?

—2 años

—¿John lo sabe?

—¿Qué crees tu? —preguntó Mary con ironía

—esto es muy cruel…realmente le has mentido en todo—declaró Sherlock con una sonrisa engreída

—escucha Sherlock, John no debe enterarse de esto…lo amo ¿entiendes? Cuanto adopté esta identidad quise enterrar mi pasado…empezar de nuevo, haría lo que fuera para evitar que John se entere—por primera vez el detective notaba angustia y desesperación en esa impostora de aspecto calmado y sonriente.

—el ni siquiera sabe tu nombre Mary… ¿así es como te haces llamar verdad?

—Sherlock, tu no entiendes…

Pero el la interrumpió presa de la impotencia—¿fuiste tu? Acercándote a John en sus peores momentos durante mis años de ausencia, una ex agente de la CIA …que antes sirvió a particulares…una asesina entrenada, espía…tienes todas las habilidades para ser a quien busco. Usaste a John…para elaborar todo este plan…y acercarte a mí, fuiste tú quien montó los explosivos en esa estación… la pregunta es ¿por qué? —preguntó el detective juntando las manos bajo su mentón  retomando su postura pensativa

Mary observó a Sherlock con incredulidad y por un instante se distrajo, fue ese el momento perfecto que estaba esperando el detective, pues con agilidad le dio un certero golpe en la mano en la que tenía el arma atrapándola en el aire, apunto a Mary solo un segundo, ya que procedió a sacar todas las balas de la pistola, odiaba las armas.

—será mejor que respondas todas mis preguntas

—no lo sé Sherlock, no sé de qué hablas… yo jamás le haría daño…no tenía idea de los explosivos ¿John está en peligro? —preguntó con auténtica angustia en su voz  

—No permitiré que sigas mintiendo—dijo Sherlock dando un fuerte golpe en la mesa, observó a Mary escrutándola con la mirada…decía la verdad, maldita sea…no era ella.

—¿cómo conseguiste toda esa información sobre mí? —preguntó de pronto la mujer observándolo, intentando descifrar sus pensamientos.

—ah…eso es muy fácil, uno puede acceder la información de todos cuando sabe en donde buscar... —dijo Sherlock mientras elaboraba intrincadas teorías en su cabeza, si no era esa mujer entonces quien—soy hermano del gobierno británico en persona, tengo acceso a archivos de todo tipo…aunque admito que fue difícil saber quien era la verdadera Mary Morstan

—escucha, te ayudaré en todo lo que necesites…pero por favor

—¿por favor no le digas nada a John…? no estás en posición de pedirme nada “Mary” no somos amigos, no me agradas…lo único que siento por ti es lástima…John no se merecía esto—dijo el detective con frialdad preparándose para su retirada.

—tampoco se merecía que lo abandonaras durante dos años—Sherlock se tensó ante el incisivo comentario— ¿Quién lo apoyó durante todos esos momentos?

Sherlock se volteó—tu no lo entiendes—replicó a la defensiva.

Mary sonrió con amargura, las lágrimas corrían por sus mejillas—¿Entender qué? ¿Qué estás enamorado de John? ¿Qué sientes celos de mí y arrepentimiento por la forma en la que te has comportado con él todo este tiempo? ¿Acaso tú no le ocultas cosas, no le mientes ni lo manipulas para tus propios propósitos? Si lo piensas bien entre tu y yo no hay mucha diferencia

—te equivocas…al menos el sí conoce mi nombre—dijo Sherlock mientras salía de la residencia, dejando a Mary en la penumbra.

—pelearé por él, Sherlock…no me rendiré tan fácil—amenazó Mary antes de que el detective saliera de su alcance.

—yo tampoco—murmuró Holmes alejándose por las desoladas calles con una mirada iracunda, sus deducciones lo habían engañado…quizás no interpretó  bien las pistas guiado por los celos. Su celular continuaba vibrando…era Lestrade…eso podía significar solo una cosa.

—¿qué sucede?

—Sherlock al fin contestas…hubo un nuevo asesinato... —dijo el detective con frustración

—¿qué ocurrió?

—no lo sabemos bien…es una escena teatral…supongo, como la anterior…hay unos símbolos pintados con aerosol amarillo y…una especie de origami negro en una de las manos de la víctima.

—una flor de Loto… “nada es nuevo, todo ya ha sucedido antes” — pensó para sí mismo el detective en voz alta

—¿qué dijiste? —preguntó Lestrade al otro lado de la línea

—nada…notas mentales. Envía los detalles por mensaje, voy para allá—dijo Sherlock retomando su caminar elegante, apresurando los pasos hasta encontrar un taxi…esta era una nueva oportunidad de encontrar al asesino. Y esta vez no lo dejaría escapar.

Notas finales:

Gracias por leer, por favor no olviden dejar sus comentarios con sus impresiones sobre el capítulo 


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