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Mi Historia por Leo-chan y Kirito-san

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Notas del capitulo:

Jueves 09 de Agosto - 2018

 

I: Bueno, creo que me tarde una semana? Lo siento, siento que ha pasado mucho tiempo y es que estaba empezando a actualizar seguidamente, pero es que ya entre a la universidad y pues estaba llendo a unas pláticas a esta y salía cansado y totalmente aburrido, agregando que estaba divirtiéndome con mis amigos en el xbox y llevando a cabo grandes hazañas.

 

Mejor dejó esto aqui y nos vemos abajo para que puedan leer el capítulo ^w^

 

 
Había llegado al gremio un poco tarde y es que había llegado tarde por haber platicado con su “hermano” y por contarle a Cayde un fragmento de la historia que trataba de ocultarle a todo el mundo, ¿Qué pensaría la gente si supieran la historia del chico? Creerían que estaba loco apesar de que algunas personas no creían que estuviera loco, entre estos sus hermanos o ex-hermanos.
 
 
Apenas entro al gremio se fijó en la chica del segundo piso la cual lo vio y negó con una sonrisa cosa que contagio al peli-azul, se escuchaba como el gremio estaba animado esa mañana y no sabía porque, había una grupo de magos formando un círculo alrededor de una mesa, a simple vista parecía que estaban admirando algo, o a alguien, o que estaban tramando algo pues de vez en cuando los miembros del gremio tramaban algo para pasar el rato como por ejemplo, peleas, juegos, apuestas, entre otras cosas inofensivas para los habitantes de la ciudad.
 
 
Ahora que lo pensaba las calles no estaban tan llenas como antes esa mañana, de aseguró por el movimiento que estaban haciendo todos para mandar a personas y magos a la ciudad recuperada. Estaba algo apenado, recordó que había dejado el lugar un poco… destruida pero habitable, aún quedaban muchas casas y edificios en pie, por no decir más de la mitad, era cuidadoso con su magia en especial con la que no le pertenecía y que tomaba prestada en épocas tan oscuras. Suspiro pesadamente dejando de pensar en eso y volvió a mirar fijamente al grupo.
 
 
-Venga chicos, dejenlo respirar -dijo una chica azabache de ojos violeta y tez blanca con un hermoso vestido negro y mangas que dejaban expuesto sus hombros, el grupo parecía no hacerle caso causando que está soltara un pucheo adorable pero peligroso liberando un aura negra que todos en el grupo sintieron alejándose un poco del animal o persona que estaban admirando.
 
-¡Oye, Iceen! -grito un rubio de ojos verdes abalanzandose sobre el orbes marinos quien se exhalto creyendo que lo iba a tumbar al suelo y aplastar, pero el rubio cayó de pie cerca de él y rodeo su cuello con uno de sus brazos mientras que en la otra sostenía un papel. El grito había captado la atención de una persona o más bien el nombre que fue gritado- ¿Qué tal si nos vamos a otra misión? Si quieres, encontré está que pueda que te agrade -le mostró el papel viendo los que estaba escrito durante unos segundos, en si la misión parecía interesante pero tuvo que negar con la cabeza.
 
-Es interesante pero hoy quería escoger una misión e ir yo solo, hace rato que no lo hago -dijo amablemente para luego poner una cara un poco molesta viendo el cuello del orbes rojos- ¿Ya te recuperaste? -pregunto con autoridad a lo que esté se puso nervioso y dejó de abrazar al mago de hielo.
 
-Me… me siento mejor que ayer, si~ -se rasco la nuca sonriendo nerviosamente, el chico suspiro nuevamente en el día. Un hombre se levantó de la mesa para dirigirse a donde estaban los dos magos platicando
 
-No deberías de esforzarte, te puede hacer mucho daño… más del que ya te cause -dijo esto en un susurro, de la nada un hombre se inclinó un poco y abrazo al chico de la misma forma que el rubio lo había hecho segundos atrás sorprendiendo al chico.
 
-Deberias de hacerle caso, él sabe lo que te dice en la mayoría de las veces -dijo con una leve sonrisa un hombre de pelo anaranjado, ojos marrones y tez acanelada. Iceen reconoció la voz de la persona que estaba junto a él y giro sus ojos hacia él con la misma sorpresa.
 
-Venga ya, Tsuyoi-san ¿Es en serio? -el ojos marrones asintió- bien, entonces supongo que tendré que abandonar la misión -se deprimió un poco.
 
-Pero prometo que vamos a ir a la siguiente misión, justo cuando vuelva ¿Si? -le saco una leve sonrisa al rubio y asintió.
 
-Bueno, en ese caso voy a ir a tomar algo, nos vemos niño -eso le saco una gotita de sudor al chico.
 
-¿Podemos hablar? -pregunto seriamente el de cabello naranja, el peli-azul lo miro de igual manera y asintió. Ambos salieron del gremio un rato para poder conversar un rato.
 
-¿Y qué pasó? “hace rato que no te veo” -penso.
 
-Solamente venía a ver cómo estabas, hace rato que no hablamos y me puse a pensar que ya que me encontraba de pasó con el gremio ¿Por qué no entrar y saludar a la vieja escuadra? -se rasco la mejilla. Llevaba puesto un traje negro con una camisa marrón ¿Por qué todos visten de traje? Se preguntaba el menor, media al rededor de 1.79m quedando.
 
-Bueno, al menos no viniste por la misma cosa que Pride -dijo triste.
 
-¿Tú y Pride se reunieron? -se sorprendió, después de todo lo que había pasado entre los cuatro, en especial por estos dos- debió ser algo… muy incómodo.
 
-… Fue algo molestó -menciono- Tsuyoi ¿Puedo preguntarte algo? -el mayor lo miro curioso por esa pregunta.
 
-Como solías decir -penso picando la cabeza con su dedo índice- depende del tema -el peli-azul sonrio ante eso recordando los viejos tiempos no tan viejos para él.
 
-¿Tú qué piensas de lo que estoy haciendo? -miro al cielo triste siendo seguidos por el de traje- digo ¿Estoy haciendo bien? o ¿Es que al caso hago mal y estoy equivocado? -ambos miraban al cielo sin despegar su vista de este.
 
-Creo que hiciste bien, las cosas se estaban poniendo muy tensas ¿No? -el chico asintió-…lamento que las cosas no fueran como antes -dijo repentinamente con una voz triste (Si, todo es tristeza, pero no va a ser para siempre ;-;) lo que hizo que el chico se viera repentinamente.
 
-¡No es tu culpa! -recalco- …todo esto… no es culpa de nadie -dijo mirando levemente al suelo para luego mirarlo a los ojos. El mayor sonrió y puso una mano en la cabeza del chico para despeinarlo, algo que lo hizo reír.
 
-Bueno, espero y nos podamos ver pronto -camino directo a la calle.
 
-¿Ya te vas?
 
-Si, me tengo que ir ya, ya es muy tarde y si no quiero llegar más tarde tengo que irme ahora, adiós -se despidió de espaldas alzando una mano algo que el chico imitó alzando solamente la mano y sonriendo.
 
 
Entro en el gremio dirigiéndose al muro de las misiones siendo seguido por unos al muro. Reviso las misiones viendo cual era buena para él.
 
-Oye Iceen, ¿De qué hablaron tú y Tsuyoi? -pregunto un hombre de tamaño anormal, unos 2.20 metros para ser exactos, con una armadura de hierro que cubría cada parte de su cuerpo y su rostro también, su casco tenía cuernos apuntando hacia arriba.
 
-Es confidencial -dijo sin más.
 
-Ya veo -se marchó de ahí así como si nada.
 
-¿Cuál será? ¿Cuál será? -pregunto viendo todas las misiones que estaban clavadas al muro- ¿Un monstruo en un lago? no -y es que había tantas misiones y opciones que parecía no poder elegir alguna sin tener a la mano otra- ¿Recuperar un…? no -dijo sin relevancia en su tono de voz- ¿Uh? “¿Y esta qué?” -penso viendo el papel de la misión que había captado su atención.
 
 
La miró se cerca pues notaba algo muy raro en la misión, se dedicó a analizarla durante un rato sin notar algo fuera de lo común pero aún así sentía algo extraño. Tomo la misión y decidió llevársela al hombre que se encargaba de reportar las misiones que habían sido tomadas y el nombre del mago o maga que la había aceptado.
 
 
-Oye Chris -se acercó a la barra llamando a un hombre de pelo negro corto, ojos marrones, un poco moreno. Vestía de una camiseta sin mangas negra que se ajustaba a su cuerpo musculoso y solo eso se podía ver a la vista pues se tendrían que acercar mucho a la barra para ver qué más tenía puesto (:D). El mencionado volteo a verlo con una leve sonrisa y sus ojos afilados.
 
-¡Hey! Iceen ¿Qué pasa? -pregunto limpiando un vaso de vidrio con un trapo blanco.
 
El mago de hielo puso la misión en la barra y se dispuso a hablar- verás, necesito que me hagas un pequeño favor -dijo juntando sus dos manos y poniéndolas enfrente de su rostro.
 
-Oh, ya veo -le hizo una seña al chico para que se acercara y decirle algo al oido- ¿Quieres ayuda para conquistar a Lucero? -el chico se alejó repentinamente.
 
-¡¡¡No!!! -dijo con la cara roja y con ambas manos en la barra, muchos se voltearon a ver qué pasaba mientras que el empleado reía por la expresión del menor- ¡no es gracioso! -grito, el azabache se calmó parando su risa de poco en poco siendo esperado por la mirada seria, enojada y sonrojada del mago de hielo.
 
-¿Qué necesitas? -se recargo en la barra con el ojo izquierdo cerrado, el mago de hielo giró su cabeza a ambos lados viendo que no había nadie que pudiera escuchar lo que le iba a pedir, se acercó a al oído del azabache para poder pedirle el favor.
 
-Necesito que verifiques si está misión tiene un hechizo que oculte algún mensaje o algo, pero que nadie te vea por favor -al terminar de decirle lo que ocupaba se alejó de su oído para acto seguido verse a la cara con un semblante serio. El azabache asintió; tomo la misión que estaba en la barra y se fue a la parte trasera del pequeño bar que tenía para poder usar su magia.
 
 
El mago de hielo suspiro pesadamente sentándose en uno de los asientos frente a la barra, se recargo en esta con una expresión aburrida en su rostro pensando en lo molestó que pueden ser estos tipos de hechizos. Él no sabía cómo descifrar el verdadero texto que podían llegar a ocultar estos hechizos haciendo que este buscará ayuda de algún mago que si supiera deshacer este hechizo.
 
 
Espero un rato hasta que volvió el azabache con la misión en la mano, el menor se sentó rectamente a la vez que el azabache le extendía el papel.
 
 
-Tenias razón, este cartel estaba hechizado por lo tanto aquí tienes tu verdadera misión -el menor tomo el pedazo de papel que ahora tenía nuevas indicaciones.
 
-¿Lo leíste? -el azabache asintió- ¿Puedes guardar el secreto? -volvio a asentir cruzado de brazos- bien, gracias Chris, te debo una -sonrio sabiendo que podía contar con él, luego se levantó del asiento y se encaminó hacia la salida del gremio.
 
 
 
-------- En otro lugar lejano del gremio --------
 
 
 
Una persona se encontraba caminando por los pasillos de un castillo con un paso rápido. Los pasillos del castillos eran iluminados por antorchas encendidas con una llama de color índigo; tras unos minutos de estar caminando, la persona se detuvo frente a una gran puerta inclinándose ante esta en forma de reverencia. La persona comenzó a transformarse cambiando su aspecto a uno demoníaco, tenía cuernos puntiagudos en forma de   / y eran de un tamaño mediano. Su ropa estaba un poco desgarrada pero aun así no se le veían mal.
 
 
La puerta frente a él comenzó a abrirse de poco en poco indicándole que ya podía entrar a la gran habitación (o sala?).
 
 
-Mi señor -camino hacia el trono en el cual se encontraba un demonio con cuernos de carnero, los ojos pintados de negro, la piel manchada de un líquido oscuro y rojo parecido al color de la sangre.
 
-¿Qué quieres? -dijo el demonio con el ceño fruncido, la voz calmada y mirando al invasor de su tranquilidad de una forma amenazante y afiladamente.
 
-Venga a informarle que los “invitados” están causándole un gran lío a nuestras fuerzas -informo.
 
-Aja.
 
-También que los enemigos cerca del centro de Rakuen están preparándose para atacar, justo como lo predijo.
 
-Bien.
 
-… Mi señor, ¿Qué quiere que hagamos con el “ángel caído”? -pregunto muy serio esperando una respuesta distinta a las que siempre recibía por parte de este.
 
-Dejalo ser -se levantó del trono y camino con las manos atrás hacia la gran ventana que estaba a lado derecho del trono- tenemos muchos planes que seguir y muchas más desiciones que tomar -con su mano derecha tocó el vidrio de la gran ventana- pero no te preocupes, tenemos todo bajo control -con una mirada seria y con una gran exitación por llegar a su meta, expandió capa de viscosidad negra y púrpura por la ventana oscureciendo la luz que entraba anteriormente por la ventana.
 
 
 
-------- En otro lugar --------
 
 
 
Un venado merodeaba por el bosque buscando algo de comer, el venado buscaba de arbusto en arbusto pero no encontraba algo bueno que comer, los arbustos en esa zona estaban negras por una especie de contaminación o reacción mágica. Detrás del venado se escuchó un sonido proveniente de entre unos arbustos, el venado se giró rápidamente para observar el arbusto negro con espinas que se movía, preparándose por si tenía que escapar.
 
 
-Wow, tranquilo venado -dijo una persona con una capucha negra que cubría la mayor parte de su cuerpo dejando expuestos sus brazos que había sacado para calmar al venado, su barbilla y su boca. El venado se acercó con total confianza hacia el encapuchado dejándose acariciar por este sacándole una leve sonrisa y una breve risa. Se volvió a escuchar un sonido proveniente de otro arbusto, el venado quería mirar pero el encapuchado lo acaricia con un aura blanca que lo tranquilizaba, ignorando al arbusto que era agitado por el movimiento de un lobo.
 
 
El encapuchado dejo de sonreír y acarició por última vez al venado- lo siento… pero ya es hora… pequeño -se alejó del venado acercándose al lobo quien igualmente se dejó acaricia al igual que el venado se había dejado acariciar- se bueno con él, hazlo rápido -el lobo lamió su mano para acto seguido acercarse con un gruñido ha su presa mientras que el encapuchado se alejaba del lugar dejando a estos dos solos.
 
Notas finales:

I: Como iba diciendo, me la pasé genial, del asco y exhausto por tantas cosas que tuve que hacer obligatoria y voluntariamente, pero bueno, ya subí el capítulo, ahora me toca seguir con el próximo capítulo del otro fanfic (Ben 10 Omniverse) es yaoi por si lo quieren leer, la semana pasada subí el primer capítulo.

 

Trataré de actualizar los fanfics dentro de poco tiempo más no prometo nada, ya saben, universidad. Les deseo buena noche porque lo subo en la noche XD y pues nos vemos en el próximo capítulo, hasta luego


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