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Blood and love por momu

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Era el segundo receso, Milo había decidido armarse de valor, esa día comería con Alex y su grupo si o si. al tocar la campaña vio salir a Alex en dirección a los comedores y fingiendo una tropiezo choco contra él por la espalda.

--l...lo siento --dijo Milo y levanto la mirada para ver a Alex que le sonreía

--No importa, no hay problema --dijo acariciándole la cabeza y siguiendo con su camino, Milo se quedo sorprendido pues Alex no lo había invitado aquella vez.

--Em..¿Alex? --lo alcanzo y lo detuvo del brazo suavemente. No sabia como decirlo, le daba vergüenza así que pronto sus mejillas se pusieron rojas.

--Milo ¿te han dicho lo lindo que eres? --le dijo Alex. -- ¿Oye no quieres comer hoy con nosotros?

--¿Puedo?

--Claro que si, ven te presentare a mis amigos.

Caminaron al comedor donde estaban Cross y otro chico en la mesa de la terraza como siempre, al llegar saludaron.

--Buenos ellos son mis sirvientes --dijo Alex de forma socarrona.

--Dices pendejadas --rió Dan.

--Chicos él es Milo --presento y todos saludaron animados, excepto Cross que solo levanto la mano seriamente. --Milo, Dan y Cross --al decir el ultimo nombre Alex le dio unos discretos golpesitos con el codo y Milo solo pudo ponerse rojisimo.

--¡oye Milo! dinos ¿como va nuestro bebe en clase? --molesto Dan y Milo sonrió un poco.

--creo que no puedo saber tan pronto...

--es verdad, tienes que verlo reprobar primero --dijo y Alex le dio un golpe en el hombro.

--y tu Milo ¿tienes novia? --pregunto Dan de nuevo y Alex saco el aire.

--No se si eres pendejo o te haces, imbecil ...--dijo Alex y Dan recordó que Milo había terminado con Carlos hacia pocos días.

--lo siento, lo siento Milo, fue una distracción --explico y Milo negó amablemente, parecía no importarle ya.

--Cambiando de tema. Milo hoy hay una fiesta por la noche, es el cumple de este idiota. ¿no vienes?--pregunto Alex

--eran esos anuncios que estaban pegados en todas partes ¿no? --pregunto Milo y Dan rió.

--si, exacto, espero que valla mucha gente. --explico Dan.

--¿entonces, vienes? --insistió Alex y Milo sonrió.

--ire...

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La sesión había terminado, eran las 6:00 en punto. Adam salio de la escuela y se dirigió a su casa.

Jamas le había gustado vivir allí, era un lugar demasiado grande para él, entre tantos pasillos y habitaciones la casa siempre parecía estar deshabitada. Cuando finalmente llego se encontró con su madre que estaba en la cocina preparando algunos postres. Ella era una mujer delgada y muy hermosa, auqnue con uno que otro tornillo suelto.

--¡Mi amor! --dijo cuando lo vio entrar y corrió a él. -- ¡ay! tu padre me dijo que vendrías hoy

--Hola mamá.

--¿Como estas? ¿te encuentras bien? ¿has comido bien?--pregunto

--Mamá solo me he ido un par de días, no es para tanto.

--Sabes que me preocupo por ti, te he preparado todos estos postre solo para ti. --dijo entrando a la cocina, -- aunque...bueno, que lastima, si quieres conservar esa figura voy a tener que tirarlos.

Adam la miro fijamente, siempre había sido igual, cada día de su vida. Los pastelillos cayeron al bote de la basura.

--Corazón no me mires así... --se acerco y le acaricio de las mejillas. -- ...sabes que me rompes el corazón.

--¿sabes donde esta Eduardo? --se dio media vuelta apartando las manos de Sofie.

--en su estudio, te esta esperando.

Adam camino hasta llegar a la ultima puerta de la casa y entro. Eduardo estaba leyendo algunos documentos con sus lentes puestos mientras fumaba un puro, Miro a Adam, dejo los papeles en el escritorio y se quito los lentes.

--¿Ya saludaste a tu madre? me parece que te había preparado algo. --dijo Eduardo.

--La acabo de ver.

--Bien.... ¿Quieres tomar algo?

--No gracias, ¿Para que me has pedido que viniera?

--Bueno... vamos al punto. --Eduardo se acomodo en su silla.

--Mira Adam, desde que tu hermano murió, las cosas aquí se pusieron muy difíciles, es tiempo de que comiences a involucrarte en el negocio, finalmente tu vas a tener que dirigirlo cuando yo muera.... en fin. Últimamente voy a estar saliendo repetidas ocaciones y necesito que te hagas cargo aquí. El lunes que viene voy a salir del estado a hacer unos negocios muy importantes, pero ese mismo día tengo que autorizar unos contratos con unos sujetos en el despacho. Necesito que tu vayas allá y arregles los papeles, yo te daré un código de autorización y con tu huella digital podrás "firmar el contrato para cerrarlo. --explico Eduardo. --ten esto es lo que necesitas. --le entrego un folder y Adam lo tomo.

Por mas que Adam no tolerara a tu padre y tuvieran los problemas que tenían, no era tan fácil negarse a lo que le pedía, su relación era pésima y si Eduardo decidía echarlo de casa, ni él ni su madre, ni nadie era capas de impedirlo. Eduardo eran ese tipo de hombre renuente, indiferente y frió que seria capas de echar a su propio hijo.

--¿A qué hora?

--tarde, como a esta hora mas o menos.

--Bien. --dijo finalmente Adam y salio de allí, miro su reloj, aun tenia tiempo de llegar a buena hora a la fiesta.Tomo el metro en la estación de vuelta y cuando se bajo camino unas cuadras hasta que escucho la música a todo volumen, era fácil de saber que casa era, porque había tanta gente que algunos estaban en el jardín de enfrente.

Como pudo se colo entre las personas dentro de la casa en busca de sus amigos, cuando finalmente llego a la parte trasera donde había aun mas gente y una piscina intento divisar a alguno de los tres pero no vio a nadie, saco su teléfono y comenzó a marcar cuando Milo le grito desde unas mesas en el jardin.

--¡Adam! ¡Aquí! -- levanto las manos.

--hasta que llegas --dijo Cris sentado a un lado de Santiago.

--Creí que no vendrías --dijo Santiago.

--Pensé que me tomaría mas tiempo pero salí antes.

--Pues no te has perdido de mucho. Estos tipos llegaron también tarde y estuve esperando por dos horas casi. --Cris rió un poco

--Eso fue mi culpa --le dijo Cris y Milo rodó los ojos con una sonrisa.

--¿Por qué no fuiste con Alex o ese tal Cross? quizás conseguías algo. --dijo Cris y Milo rió.

--No, me escondí una hora en uno de los cuarto de arriba... --confeso y todos comenzaron a reir.

--Milo ¿que te pasa? --pregunto Cris sin terminar la oración por la risa

--Creo que hubiera sido mas probable que te violaran allá arriba que aquí abajo Milo --dijo Santiago

--¡Lo se chicos! es solo que no soy bueno relacionándome, ademas todos aquí son de octavo

--¡Bueno, bueno, basta! ¡que quieren tomar amigos! -- dijo emocionado Cris con unas botellas sobre la mesa.

--¡TEQUILA!!--grito Santiago y todos comenzaron a reír.

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Carlos estaba mirando por la ventana de un cuarto obscuro del segundo piso, desde ahí podía controlar todo lo que ocurría o si algo se salia de control. Se sentía intranquilo y nervioso, le dio una profunda fumada a su cigarrillo, las manos le temblaban, recordaba una y otra vez lo que había ocurrido hacia un par de días.

FLASH BACK:

--¿Baten tu crees que esto es un juego? --pregunto Marie, estaban en un cuarto de paredes de sementó, donde había una mesa y una silla en la cual estaba Marie, el lugar era iluminado con dos focos let largos que emitían un zumbido sofocante y tendían a parpadear intermitentemente.

--No Marie

--Es que lo has jodido, algo tan sencillo no has podido hacer. -- Marie estaba furioso. --¿sabes lo que pasara no? --Carlos trago saliva y Marie mando a llamar a un cuidador a quien le susurro algo al oído. Los cuidadores eran como subordinados vestidos de traje negro a los que Marie ponía a hacer cosas de todo tipo por él. Marie saco un látigo con dos cueros largos que al final tenían unas volitas de metal.

Al cabo de unos minutos entro por la puerta Dan acompañado por dos cuidadores, que le quitaron la playera y lo encadenaron en unas estacas en la pared. Carlos miro con angustia a Marie y él solo le hizo entrega del látigo.

--Marie...

--25 asotes, si no quieres hacerlo, entonces tendrás que verme hacerlo yo mismo --Dijo Marie.

--Por fav...

--¿Vas a hacerlo o no? --lo interrumpio Marie


La manos de Carlos temblaban pero prefería 1000 veces hacerlo él que dejar que Marie lo castigara. Tomo el mango con fuerza, tenia un nudo en la garganta, se acerco a Dan y cerrando los ojos dio el primer golpe.


--¡Mierda! si vuelves a hacerlo así, te juro que serán 1000 latigazos ¡duro carajo! --le grito Marie. Carlos ofuscado y temeroso, volvió apretar el mango y respirando hondo volvió a darle, ahora con mucha mas fuerza. Dan apenas se tambaleo, uno, dos, tres, cuatro, la sangre comenzó a escurrirse por su espalda hasta ser absorbida por su pantalón, aun así Dan no permitía soltar ningún ruido y se sostenía fuertemente de las cadenas. Finalmente termino, Dan apenas podía sostenerse en pie, dos cuidadores lo descadenaron y lo ayudaron a salir de allí.

--Ahora escúchame bien Bate. si vuelvo a saber, si escucho un rumor, si los encuentro juntos, incluso si el viento sopla en su dirección, juro que lo mato ¿entendiste? --Dijo Marie.

-- Si Marie

FIN DEL FLASH BACK:

Esa noche por mas que había contenido el llanto no pudo soportarlo y se encero en su cuarto un largo tiempo. Desde entonces había evitado cualquier tipo de contacto con Dan, ni siquiera verlo, el solo hecho de pensarlo sugería un riesgo innecesario.

Alguien abrió la puerta y Carlos asustado se giro de inmediato y vio a Dan cerrando la puerta detrás de él.

--Lárgate ahora mismo si no quieres que te rompa la mandíbula --dijo Carlos y se giro indiferente.

--¿Me evitas de nuevo?

--¿Que no oíste?

--Necesito que me ayudes con algo...

--Joder... ¡QUE TE LARG...--no termino porque Dan lo tomo de los brazos y le planto un beso apasionado, lo empujo a la cama y aunque el castaño intento escapar Dan ya estaba sobre su espalda. Así decidió que si queria que Dan dejara de tener interés en él tendría que mostrarle que ya no le importaba, entonces dejo de luchar y dejo que Dan hiciera lo que le placiera con su cuerpo. Le quito los pantalones y ropa interior, apenas lo preparo un poco lo embistió, Carlos solo hundió la cara en la almohada evitando que sus gemidos y uno que otro grito se escuchara, el dolor se mezclaba con el placer. Dan todavía continuo un buen rato embistiendo, besando y mordiendo brutalmente y Carlos agradeció estar boca abajo, porque si no, Dan hubiera notado su lagrimas. Finalmente Dan dio un gruñido vehemente y se vino, se tiro a un lado agitado. Carlos como pudo se sentó en el filo de la cama unos segundos, apenas apoyo los pies para ponerse de pie, sintió una punzada en la cadera y dolor en la parte lumbar de la espalda, se tambaleo pero se mantuvo, se vistió y antes de salir se detuvo.

--Espero que lo hayas disfrutado porque esta fue la ultima vez. ya estoy harto de ti --dijo y salio, dejando a Dan en la penumbra.

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