CAPÍTULO 08 - DESINTOXICACIÓN
Nos encontrábamos en el aeropuerto internacional, esperábamos que nuestro mánager organizara todo el viaje mientras descansábamos en los asientos. Tendríamos que aprovechar cada momento que tuviéramos para dormir, en los asientos de los aeropuertos o en la camioneta...donde fuere. Renovamos un viejo pacto con mis compañeros, no importa lo que pase, cualquier roce entre nosotros se iba a olvidar después de la gira. Sabíamos que el agotamiento sería nuestro enemigo más cercano. Tuvimos tres fechas en los pasados días en distintos distritos de Japón, lo que dio como inicio la gira mundial, luego volveríamos aquí con una presentación de cierre. Charly se acercó a nosotros con una cámara que nos habían dado para que grabáramos nuestro recorrido a través del mundo, luego lo subían a las redes oficiales de las bandas.
Los primeros países a los que fuímos, fueron Corea del Sur y China. Tocábamos un día en un lugar y a la noche siguiente en otro. Apenas teníamos tiempo de salir por la ciudad y probar las comidas típicas, éramos recibidos por grandes grupos de fans en los hoteles. Localidades vendidas en su totalidad, una locura de dimensiones épicas. Jamás hubiera pensado que éramos tan conocidos en aquellos lugares. Luego vinieron algunos tropiezos, hubo atraso en los vuelos y quiénes tenían que estar antes que nosotros, los sonidistas, los encargados de las luces terminaron su trabajo apenas unos minutos antes de que saliéramos a tocar.
Hablaba con Yuki regularmente, eran más los mensajes que las llamadas que las hacía cuando conseguía un tiempo libre. Me obligaba a mantenerme despierto unos quince minutos para escribirle, por la diferencia horaria yo sabía que la respuesta no sería rápida de ninguna de las dos partes.
Decidimos que compartiríamos los cuartos Suguru, Hiro y yo. Tomábamos los instrumentos que tuviéramos a mano y aprovechábamos a componer canciones, cuando la gira terminara comenzaríamos a grabar el próximo álbum. Hasta el momento teníamos treinta canciones, algunas era creaciones propias de Hiro o de Suguru, otras eran mejoras de proyectos rechazados.
-Bueno chicos, voy a buscar algo para beber.
-Es raro...-Dijo Suguru.
-¿Qué?
-Hace días que no te escucho hablar de de Eiri-san. Para éste momento deberías estar saltando por las paredes de abstinencia por estar sin él.
-Ouw .-Hice una pausa buscando las palabras correctas.- Nos tomamos un tiempo.
-¡¿Qué?!
-Shuichi ¿Es en serio? - Dijo Hiro muy sorprendido.- ¿Está bien con ésto?
-Momento, no es que hayamos terminado, es solo que...no estaba funcionando. -Sin quererlo voz se quebró un poco, aunque hice lo posible por sonreír.-Ya no está funcionando.
-¿Qué pasó?- Preguntó Suguru, realmente preocupado.
-Creo...- No pude aguantar el llanto.- Creo que se enamoró de alguien más.
-Shuichi no puede ser. Puede ser que sea un malentendido.- Dijo Hiro intentando que me calmara.- Ustedes siguen juntos ¿No es así?
-Por supuesto, Hiro tiene razón. Debe ser algo pasajero como siempre.
-No, chicos, ésta vez es en serio. Me dijo que está confundido.
-Pero debe ser algo pasajero.- Insistió Suguru.- Tal vez no entendiste bien.
-¿Qué dijo exactamente Shuichi?
-Le pregunté si la amaba y me pidió que no insistiera, que no quería mentirme. Insistí y él...él me dijo que no sabía si la amaba.
-Shuichi ustedes siguen viviendo juntos ¿No es así?-Preguntó Hiro ahora viendo la gravedad.-No puede estar todo perdido hace cuatro años que están juntos.
-Hablamos cuando podemos, yo lo sigo extrañando...pero yo no sé...yo lo amo todavía.
-¿Por qué no me contaste ésto antes?
-Lo siento Hiro, quise hacerme cargo del problema. No pensé que llegaría a éste extremo, no quise pensar que fuera algo tan grave.
Me dieron palabras de aliento pero sabíamos que no había nada que se pudiera hacer más que escuchar todo lo que había pasado durante esos años. Pasamos por varios sentimientos a medida que la historia avanzaba, reviví todo pero sentí un alivio enorme. Tomaron partido por mí, como se esperaba de mis amigos también les pedí que no intervinieran. Mi relación con Yuki seguía siendo eso, una cosa de a dos.
Era tarde cuando nos fuímos a dormir, en la cama escribí un mensaje.
"Yuki te extraño. Me haces tanta falta."
"¿Estás despierto?¿ Puedo llamarte?"
"Llámame."
Me levanté de la cama y me arreglé el cabello, e hice una videollamada. Fue extrañamente lindo, amable y atento. Pareció de buen humor, en el momento no me sorprendió, el problema fue cuando terminó la llamada y me acosté. Solo cerré los ojos por unos segundos y los abrí con la bilis en la garganta ¿Por qué teníamos que llegar hasta éste punto para estar bien? ¿Le habría pasado algo bueno ese día o el problema era yo cuando estaba cerca?
-Shuichi basta ¿Puedes dejar la paranoia por una vez? - Me reprendí.
No tengo que aclarar que dormí peor que si no me hubiera atendido el llamado. No ayudó que tuviéramos que levantarnos temprano, el vuelo salía a las 7 A.M. Cada día nos presentaban a cientos de personas, empresarios, músicos y fans, algunos que habían pagados los Meet and Greet. Usualmente al final de cada recital íbamos todos a comer a algún lugar juntos, fotos y reporteros de cada revista nos preguntaban si habíamos probado las comidas típicas del país, qué pensábamos de los fans de ese lugar y para todas ellas teníamos respuestas armadas."Sí, no encanta su país y los fans son muy cálidos", "Recorrimos lo que pudimos y probamos las cosas típicas. Nos gustó todo, en especial esa comida ¿Cómo se llamaba?...","No nos importa el tamaño del escenario, tocamos para todos los fans aunque fuera uno solo"...ésta última frase la utilizábamos cuando tocábamos en países en los que lo hacíamos por primera vez. Era muy difícil incursionar en países que no hablaran nuestro idioma, es decir, es difícil cantar y que pocos lo hagan contigo, sientes que estás algo desamparado en el escenario y no sabes si lo disfrutan o no. Un detalle muy importante sobre los regalos era que en caso de ser alimentos no comíamos ninguno que no estuviera envasado y bebidas cerradas, con éste tipo de cosas K nos las hacía cumplir siempre. Nunca confiábamos en lo que nos daban los fans, nunca se sabe si alguien quiere hacerte daño.
Me estaba dirigiendo a mi habitación cuando escuché unos gritos provenientes del corredor del lado contrario. Era Charly que gritaba a sus compañeros, corrí hacia allí justo en el momento que abría la puerta. Su rostro enrojecido y lleno de furia se desvaneció de inmediato por la sorpresa.
-Charly ¿Qué pasó? -La vi apretar los labios.
-Vamos, no quiero hablar aquí.
Nos sentamos en el recibidor del hotel, yo esperando a que ella se calmara. La escuchaba murmurar cosas que no sonaban demasiado bonitas.
-Toma.- Le ofrecí una bebida que agradeció.- ¿Me vas a contar?
-Hoy tuvimos una entrevista para una revista, todo comenzó bien. El problema fue cuando comenzaron a centrarse en mí solamente y el resto no soportó ver que no les prestaran atención.
-¿Un problema de egos?
-Algo así. No es mi culpa, yo solo soy la voz en ésta banda pero si los temas los hacen ellos porque no quieren que yo participe no es mi culpa.
-¿No te dejean componer? ¿Por qué?
-Sospecho que es por los derechos de autor, no quieren que pueda reclamar algo si me voy. No es que me vaya a ir, algo raro está pasando...es como si me presionaran o buscaran hacerme enojar para que me vaya.
-¿Estás segura?
-No, pero los escuché, estaban planeando hacer una gira al terminar ésta pero nadie me dijo nada.
-¿Por eso discutieron? -Ella asintió.- ¿No te hace sentir mal ésto?
-Por supuesto que me siento mal, hace años que estamos juntos. Solo tengo que aguantar hasta que termine la gira, hay muchos músicos y quiero hacer lo mío propio. Me gusta la música pero me doy cuenta que no sirvo para lo extra que viene en el paquete, no tengo carisma...soy más del tipo gruñona y me cuesta quedarme callada. Ahora la relación se va a volver tensa y ya era bastante incómoda.
-¿Sabías que muchas bandas no superan su éxito? Usualmente las bandas cuando llegan al tope de su éxito, se les exige que hagan más giras y más entrevistas. Finalmente renuncian. Estamos ahora mismo en la cresta de la ola y nadie sabe que hay más allá.
-Ésto es muy solitario aunque no lo parezca, nos vemos a nosotros mismos y alrededor son todos desconocidos.
-Entiendo lo que dices, vemos correr a gente que todo el tiempo está ocupada, nos presentan a personas que apenas vamos a recordar al día siguiente. Todos te hablan como si te conocieran de toda la vida.
-Eso son los peores, me molesta que se tomen confianza. Entiendo que no tienen nuestras costumbres pero a algunos les gusta invadir el espacio personal. -Ella bebió un trago.- Dime ¿Cómo están las cosas con tu novio?
-Aún estamos.
-Ya veo.
Luego de eso el silencio se hizo incómodo para los dos, creo que sintió como si la hubiera rechazado y yo no encontraba las palabras para expresar que esa no había sido la intención.
-Charly.
Ambos dirigimos la mirada a uno de los pasillos. Un joven de cabellos rojos la llamaba, yo lo había visto en algunas ocasiones con el equipo.
-¿Quién es?- Pregunté antes que el chico nos alcanzara.
- Es uno de los trabajadores.
El muchacho se acercó con una sonrisa en los labios y por la forma risueña que la saludó, sentí que tal vez yo estaba sobrando en ese momento. Era tan atractivo como Hiro. Ellos cruzaron unas palabras de cortesía y el muchacho me saludó de buena gana. Me levanté para despedirme y admito que me molestó un poco que Charly me dejara ir así como así...pero no puedo culparla.
-Alright Boys! Listen to me. -Gritó K llamándonos a todo el equipo de Bad Luck.- Estamos en una situación complicada. La lluvia no paró en ningún momento y según los meteorólogos no creemos que pare por el día de hoy. Apenas se logró preparar el escenario, como sabrán es un estadio a cielo abierto, el granizo ya rompió tres luces y no tenemos de repuestos. Hay gente afuera esperando desde hace horas, solo podemos hacer ésto, darles lo mejor que tenemos. No podemos darnos el lujo de perder días, todos extrañamos a nuestras familias e hijos. Hagásmolo por ellos.
Esa noche me mojé como nunca en mi vida sobre un escenario, era una lluvia de invierno. Cada tres canciones me alejaba con los chicos para que los asistentes nos secaran con toallas y nos ayudaran a entrar en calor. La gente saltaba y gritaba tapados con pilotos improvisados hechos de bolsas, luego del concierto nos enteramos que mucha gente no había podido ir a vernos porque las calles estaban anegadas. Al día siguiente la situación siguió igual, nos dijeron que los vuelos habían sido suspendidos temporariamente.
-¿Ahora qué va a pasar? Mañana mismo tenemos que tocar.- Preguntó Suguru.
-Ustedes no se preocupen por eso, solo atiendan lo que les incumbe. Si mañana tienen la presentación, ocupensen de prepararse para la presentación. Junto con K nos ocuparemos del resto. -Dijo Sakano con tanta seguridad que nos hizo pensar que podía controlar el clima.
Finalmente la aerolínea puso a nuestra disposición unos micros que nos trasladaron a otro aeropuerto. Así que finalmente pudimos partir haciendo una escala de desvío, tal como nos dijo Sakano nos ocupamos de lo nuestro. Los estilistas adelantaban su trabajo como podían mientras yo calentaba la voz. El equipo sin descanso se dirigió al lugar que tocaríamos, pusieron las luces y los sonidos. Esa noche solo usé un conjunto de vestimenta, el clima era demasiado frío como para utilizar el conjunto que era usual. Luego de tocar tuvimos entrevistas con los medios locales y nos llenaron de presentes, dulces y cartas de los fans. Nos sacamos cientos de fotos. Llegué al hotel a las tres de la madrugada...un día más que no pude escribirle a Yuki porque me desmayé del sueño. Nos despertamos a las 6 A.M. las maletas todavía estaban hechas cuando tuvimos que salir camino al aeropuerto. Nos dormimos en los asientos, ya esto era normal y la verdad había dejado de importarme roncar frente a los demás, todos lo hacíamos y nunca faltaban las bromas. Más de una vez me desperté con bigotes pintados.
Miré a un costado buscando a quién había considerado mi amiga de andadas, pero últimamente la veía más seguido con el chico de sonrisas risueñas. Sí, era inconfundible el interpretar sus intenciones. No podía culparlo, ella era muy bonita, la chica más linda de todo el equipo. Estaba muy sola también. Ya no hablaba con sus compañeras, es más, se mantenían formales en el trato pero distantes.
Le mandé un mensaje a Yuki, casi de rutina. Le dije dónde estaba y mandé una foto de la hermosa mañana en aquel lugar, a veces en el hotel, a veces en el avión. No miento cuando digo que dejé mi corazón en Japón, lo extrañaba a morir y sonreía por esos mensajes de respuesta que recibía. Tan escuetos, tan de él y a veces le pedía que me mandara audios o fotos que a regañadientes hacía.Lloraba cuando colgaba las videollamadas con Yuki y no me ayudaba la frustración de más de tres meses sin sexo. Eso quedó en evidencia cuando noté que comenzaba a afectarme que varios fans, mujeres y hombres, se me insinuaran cuando estábamos visitando bares en las noches. Era difícil ignorar a algunas personas, modelos, actrices, actores y gente de mucho dinero que hacían lo imposible por llamar mi atención.Y no faltanban lo fans más insistentes. Me alejé del grupo que se había formado para buscar algo para beber, en esas ocasiones, yo desconfiaba de beber cosas que me dieran las personas desconocidas pero es que nunca se saben sus intenciones.
-Disculpa ¿Tienes algo que no tenga alcohol? -El barman me observó pero me trató con indiferencia ignorando mi tosco inglés.
-Tengo agua, bebidas gasificadas o gaseosas.- Me mostré sorprendido y se explicó mejor, mostrando que conocía el idioma.- Hay conductores designados entre nuestros clientes, no podemos ofrecerles alcohol a todos.
-Eso es genial, muchas gracias.
Recorrí con la mirada la pista y vi a Charly bailando en la pista con el chico con el que se había hecho costumbre verla acompañada. El ambiente parecía más caldeado entre ellos y no pude evitar pensar que ella era demasiado para él, era muy llamativa y se movia muy bien.
-Hola ¿Cómo estás?
Un chico se acercó sin que yo me diera cuenta y por el susto volqué un poco mi gaseosa.
-Lo siento.- Me disculpé rápidamente pero cuando lo vi, las palabras se me quedaron en la garganta.
-No importa ¿Te molesto si te acompaño?
¿Me molestaba? No, lo cierto es que no. Sentí que mi piel se erizaba frente a semejante ángel, tenía cabellos rubios y ojos azules, yo estaba más que seguro que era un modelo.
-¿Quieres bailar?
-No, lo siento.
-No lo hagas, tampoco soy demasiado bueno bailando. -Él estiró su mano.- Me llamo Xander.
-Shuichi.- Respondí, dándome cuenta de inmediato por su sonrisa que él ya lo sabía y me sonrojé de verguenza.
-Lo sé, estuve esperando mucho tiempo para poder alcanzarte.- Él se acercó a mí, sentía su aliento y su pierna rozaba la mía. -Es difícil llegar hasta ti, siempre estás rodeado de personas.
Sus ojos me miraban hambrientos y yo estaba demasiado necesitado de contacto.
-¿Te gustaría venir conmigo a mi casa?
Mi cabeza intentó funcionar lo más rápido posible, yo ya había pasado por ésto y saber que en ese entonces fui tan tonto, me molestó.
-¿A qué te dedicas?
-¿A qué crees que me dedico?
-¿Eres modelo? - Negó varias veces.- ¿Eres actor?
-¡Bingo!
-¿Cuánto más famoso serías si te acostaras conmigo?
-¿Disculpa? Creo que es un malentendido. A mí me interesas. - Se mostró sorprendido y evidentemente trató de sanar la situación.- ¿Por qué no me dejas aclarar ésto? Si quieres puedo invitarte a cenar.
-Lo siento pero declino la oferta, para mañana ya no estaré aquí. - Con una sonrisa de disculpa me alejé.
Realmente me dolió toda aquella situación, alguien podría pensar que mi autoestima estaba hecha trizas, que yo realmente pienso que no soy atractivo o interesante. Pero realmente no lo soy, no tanto como para atraer a hombres como Xander, Ryo o Yuki...pero mi fama sí es grande como atraer, al menos, a personas como Xander.
Estaba con la estilista preparándome para salir al escenario, cuando me permití tomar el tiempo para revisar mis redes sociales. Las notificaciones comenzaron a saltar, demasiadas como siempre. No tuve que bajar demasiado para ver la captura, como un Deja Vú que dejó de ser sorpresivo. Vieron a Yuki cenando con una mujer desconocida, alguien de las mesas continuas logró grabarlo sin que se diera cuenta. Me pregunto a mí mismo ¿Qué esperaba de él? ¿Fidelidad?¿Esperaba que estuviera como mojigato un año y medio?
-No quiero seguir con ésto.- Susurré.
-¿Qué?- Preguntó Hiro a mi lado, también se encontraba alistándose. Sin decir nada le mostré el celular y frunció el ceño.- ¿Qué piensas hacer?
-Vivir mi vida. Fue para eso que nos tomamos un tiempo ¿No?
-Te lo estás tomando muy bien.- Suguru se nos acercó y miró el celular que aún sostenía Hiro.
-No puedo creerlo.-dijo en shock.- Y tanto respeto que le tenía.
-No puedo salir corriendo a enfrentarlo ahora. Tengo que mostrar una sonrisa enorme a todo el mundo que esperó por nosotros durante años. Nunca tocamos en Londres.- Algo de melancolía me invadió.- Cuando volvamos a Japón... ya veremos.
Nos encontrábamos tras el telón viendo la presentación de Crimson Spiders. Charly la estaba teniendo difícil porque en ese país nadie las conocía, un grupo de gente pequeño de adelante saltaban y aplaudían pero tenía esa sensación de ser el precalentamiento. Miré a K unos segundos intentando ver su aprobación en dar una mano, solo quedaban dos canciones. Él sonrió y levantó los hombros, como si fuera mi decisión y entonces pedí un micrófono. Y me uní a ella en los primeros acordes de la última canción. Creo que hice bien, ella sintió el apoyo que no tenía ni siquiera de sus propias compañeras. La gente gritó cuando me vieron entrar y se animaron más.
Cuando terminó, volvimos detrás los escenarios.
-Gracias Shuichi.- Me dijo con una sonrisa enorme.
-No fue nada.
Casi de inmediato apareció el sonidista a felicitarla y la alejó de mí, tal vez fuera cosa mía pero reconocí celos. Me hizo sonreír por eso pero mientras los vi alejarse sentí también algo desolado. Cuando volví a mi cama esa noche entendí que sentía que había perdido más que una amiga, su "novio" o lo que fuera la absorvía todo el tiempo y...yo necesitaba contarle a alguien más lo que había pasado con Yuki. Por primera vez, apagué el celular para poder dormir.Comencé a pensar que si Yuki hacía lo que quería por su parte,entonces, no habría nada de malo que yo hiciera lo mismo. En palabras propias que dejé en claro "Era para que mis celos no me distrajeran" No era como si me fuera a casar con la primera persona con la que tuviera sexo. Pensar de esa forma me sacó la culpa que tenía acerca de sentirme atraída a otras personas, aunque culpo de eso a mi necesidad y frustración. Nadie dijo nada, ni del equipo, ni mis amigos cuando desaparecí por primera vez con una fan. Ella se insinuó pero yo no la detuve, no quería detenerla pero me aseguré que dejara su celular lejo de mi cara. Fue una experiencia que me dejó aturdido por días...yo pensé que era gay, nunca tuve problemas en admitir esa parte de mí. Pero me había sentido atraído, desesperado por el contacto de una mujer.
-Entonces, estás diciendo que no estás seguro de tu sexualidad.- Dijo Hiro pensativo.
-En realidad yo era gay por Yuki,nunca estuve enamorado de alguien más.
-¿No será solo por lo que hizo Yuki-san? Algún tipo de odio o resentimiento que te hace decir eso.
-Suguru, me sorprende que digas algo así siempre te tuve como el más listo de nosotros.- Le reclamé.- No creo que sea así, realmente lo disfruté.
-Bueno, tal vez seas bisexual y no homosexual como siempre creíste.
-Eso es lo que creo.
-Ok. Más oportunidades para encontrar a alguien.
-¿Y qué pasó con Charly?
-¿Qué pasa con ella?
-Vamos Shuichi, es obvio que le gustas. Aunque hace un tiempo que no los veo juntos.
-Charly está saliendo con uno de los sonidistas.
Les conté a ambos lo que había estado ocurriendo, pasó lo que esperaba que sugirieran, que saliera con ella.
-No chicos, jamás le haría eso a alguien que está enamorada de mí.
No, jamás haría algo así como probar si realmente soy gay o no con alguien que siente algo por mí. Quiero tomar el control de mi vida sin lastimar a nadie y éso fue exactamente lo que hice. Mi vida personal está controlada por mi mánager, desde mi dieta, mi forma de vestir, mi cabello, las horas que paso en el gimnasio hasta mi agenda de aquí a dos años en adelante. Pero ¿Qué queda de mi vida personal? Necesito tener el control de mi vida al menos en una aspecto de ella. Tuve una charla seria con K sobre eso cuando inevitablemente fui atrapado por algún que otro papparazzi. Primero me asusté, esperé un regaño que nunca llegó. Solo tuvimos una charla donde me pidió discreción y por sobretodo que si quería hacerlo que fuera con alguien que no tuviera adicción por los medios. Increíblemente, se ofreció también a conseguirme un lugar privado pero que no le ocultara nada. Yo sospeché que detrás de aquello estaba Thuoma pero no quise verlo, quería creer que si K tenía que elegir, me elegiría a mí. Porque somos amigos.
No había razones para preocuparse tanto, no sería ni el primer ni el último cantante con un escándalo en una gira. Además ésto podía ser un escándalo mínimo, en un país donde no éramos tan famosos. No saldría en primeras planas y ante cualquier duda, lo negaría.
Charly fue otro asunto. Estoy seguro que me evitaba, ella aún salía con el chico risueño ¿Por qué entonces tenía que soportar que me mirara de forma acusadora y haciéndome sentir culpable por buscar a alguien que aliviara mi soledad? Yo ya no veía de nuevo a esas chicas, en cambio, seguíamos compartiendo mucho tiempo con la banda. Y el ambiente tenso, contagiaba al resto con indirectas que nos dedicábamos ante todos. Ella por sus celos, yo porque sentía que me había dejado de lado y solo. Oh sí, ella no tenía pelo en la lengua,a veces, lo olvidaba.
-¿Quién te crees que eres para opinar sobre mi vida?- Terminé gritando.- Tú no eres mi novia.
Dije algo que era verdad pero se sintió mal decirlo...me sentí como Yuki. Ella se quedó sin palabras también, no lloró, pero respiró de forma entrecortada y se marchó a su camarín.
-¿Qué fue eso?- Preguntó Suguru tan desconcertado como todos.
-Mejor no preguntes.- Dijo Hiro señalando que era mejor ir a hablar con ella ahora.
Fui al camarín y entré sin golpear, al mirar al rededor supe que debía estar encerrada en el baño.
-Charly ¿Podemos hablar?
-No, vete.
-No me voy a ir, tenemos que arreglar ésto ahora.- Al no recibir respuesta continué.-Recuerda que nos vamos a seguir viendo las caras por unos meses más. No podemos evitarnos ¿Me escuchas?
-Tonto ¿Cómo no te voy a escuchar si estoy en el cubículo?
-Bueno, entonces sal de ahí que es horrible hablarle a una puerta. Déjame verte.
-No.
-¿Por qué?
-Porque estoy llorando.
Inspiré profundamente, si antes había sentido algo de enojo se esfumó en ese momento.
-Está bien ¿Puedes decirme qué pasó allí?
-No soporto verte con otra persona ¿Es tan difícil de entender? Sé que no tengo derecho a recriminarte nada pero ¿Por qué estás con otras personas si yo te quiero?
-No está bien eso Charly y lo sabes. Ponte en mi lugar ¿Cómo crees que me siento si empujas esos sentimientos románticos sobre mí? Yo tengo pareja, una a la que amo.
-No tienes sentimientos románticos por esas tipas tampoco y sin embargo estás ahí coqueteando delante de todos ¿No puedo pedir un poco de comprensión también?
-Charly, tú estás de novia. -Ella hizo una pausa antes de responder.
-Solo quería que te pusieras celoso.
-¿Qué?
-¡Solo quería que te pusieras celoso!-Repitió más alto.
-Eso no está bien Charly.
-Ya lo sé, no necesito que me lo digas y menos tú. - Dios mío, esto me estaba haciendo doler la cabeza.- Dices que amas a tu novio pero te pasa una falda por delante y te vas como un perro alzado.
-Voy a ignorar el insulto. Charly, no estoy seguro cómo decirte ésto pero Yuki y yo, nos dimos un tiempo. No terminamos, solo tomamos un tiempo. A eso...también se le suma la necesidad, me siento solo.
-Tienes a tus amigos.
-Sabes de lo que hablo, tener amigos no es tener una pareja.
-Yo puedo ser tu amante.
-No, no , no. Pésima idea.
-¿Por qué?
-Te aprecio mucho como para hacerte ésto.
-Estoy enamorada de ti, no soy idiota. Sé que tienes novio y no me importa ser tu amante. Necesito mostrarte lo que te estás perdiendo, cuando termine la gira puedes volver con él. No te voy a pedir nada, no te voy a reclamar nada solo déjame estar contigo.
Yo sabía que era mala idea, ella sabía que era mala idea. Pero aún así pasó, fue un día en el que yo la había pasado realmente mal. LLevábamos ocho meses de gira, el agotamiento era extremo, las exigencias no habían bajado. Yo me encontraba en el escenario y uno de los fans se subió, se supone que esas situaciones ellos quieren abrazarte y tocarte. El fan lo hizo de forma brusca, me revolvió el cabello arrancándolo y rasguñando mi rostro en el forcejeo por sacármelo de encima, me llevaba una cabeza de alto. Yo no entendía nada, tampoco entendía el idioma, cuando llegaron los de seguridad el daño ya estaba hecho. Yo estaba en una crisis que amenazaba con hacerme llegar al llanto. Mi rostro estaba rojo e hinchado, Hiro y Suguru siguieron tocando hasta el final de la canción y esperaron a que nuetro productor les diera el visto bueno para continuar. Yo no podía dejar de temblar, la gente me preguntaba cosas y yo no terminaba de entender, por qué mi ropa estaba rota. Charly fue una de las primeras en acercarse, se abrió lugar entre los que me rodeaban y me abrazó.
-Shuichi tienes que volver al escenario.
-¿Cómo que volver al escenario? ¿No puedes ver que su rostro está hinchado?- Gritaba ella a K.
-Tienes diez minutos.- Respondió mi mánager sin inmutarse mientras me acercaba una botella fría para ponerme en la cara.- Luego puedes marcharte.
Tomé del brazo de Charly y se lo acaricié.
-Está todo bien, solo faltan cuarenta minutos más y volveré.
-Shuichi no...
-Está bien, puedo hacerlo.
Cuando volví al escenario estaba distraído, Hiro reprendió al público por el comportamiento del fans desquiciado. Yo no hice mención alguna, no podía hablar y eso se transformó de a poco en enojo. Sino fuera por las coristas que tenía detrás puedo asegurar que me hubiera olvidado las letras de las canciones también. Me enojé porque Suguru y Hiro deberían haber estado conmigo y K debería haber supendido el show, pero me calmé después porque supe que obligaron a Hiro y Suguru a seguir tocando para luego entretener a la audiencia y que mi mánager tomó ese tiempo para excusarnos de todo evento posterior por esa noche. Pero quien me contuvo emocionalmente fue Charly, esa chica de aspecto bonito pero carácter rudo. Tan diferente de lo que se espera de una mujer japonesa y... que nunca se callaba.
Ella se convirtió en mi sostén emocional y no solo en ése momento, nos volvimos más pegados que antes y era común que todo el mundo nos vieran juntos. Se volvió indispensable en mi vida, una compañera con la que no solo compartíamos las mismas opiniones sino también la cama. Ella repetía "No soy una buena persona" y yo creí a que se refería a que le daba culpa ser "La otra", a veces también decía que sentía que se acostaba con una persona casada. Era difícil ignorar las malas vistas y los comentarios malintencionados de aquellos que sabían que mi pareja era Yuki. Pero ¿Cómo puedes hacerles entender a todos que tu relación estaba destruída desde antes que apareciera Charly? ¿Cómo puedes protegerla de todos los que se encuentran las 24hs contigo? Yuki me llamaba y ya no quería reponderle, me dolía la traición pero a veces, como si fuera un drogadicto lo llamaba a cualquier hora, le decía que lo extrañaba y que lo amaba...que no podía vivir sin él,después me largaba a llorar.
Charly intentaba acaparar mi atención todo el tiempo. Por supuesto que todo lo hacía con pocas ganas o cierta carga de melancolía pero eso no la desalentaba. Ella tomaba mi rostro y me besaba en cuanto podía, sus mejillas ya no se ponían rojas como en un principio, ella decía que lograría estar en mi corazón.
Ella decía que yo era el hombre de sus sueños y que algún día lograría ser mi esposa.
Puede sonar estúpido pero ella estaba tan convencida que realmente creí que era verdad, que ella lo lograría. Por un momento creí que el sueño de formar una familia podría convertirse en realidad.
Ella lo creía, yo también lo creí. Existen ciertas cosas que son secretas, tan así que ni siquiera te lo puedes confesar a ti mismo. En mi caso, mientras cantaba recordaba la dicha de ser amado. Tengo 25 años y recientemente conocí lo que es hacer el amor. Esto me tenía eufórico, tan así que no podía dejar pasar que el sentimiento me invadiera y me arrojara al público mientras cantaba. Ella se entregó a mí y estaba feliz por complacerme. Nunca imaginé que podría sentirme atraído por una mujer pero cuando vi que cada cosa que intentaba con ella funcionaba, comencé a creer que con el tiempo podría ser incluso mejor. Podría llegar a quererla. Charly me consolaba en esas noches que lloraba, no preguntaba, solo me abrazaba y me pedía si ella podía reemplazarlo. Si podía darle una oportunidad para la que yo no estaba preparado. Juré no mentirle jamás y así era como yo lo hacía.
Poco a poco dejamos de ocultar que estábamos juntos, es decir, era como un secreto a voces. Nos veían ser un poco más cercanos de lo normal pero no cariñosos. Nadie preguntaba realmente pero consideraban que éramos como novios.
No pude evitar pensar en lo feliz que podría ser si me enamorara de esta hermosa mujer y talentosa...alguien que me mirara a mí. No como un trofeo que se quita a Yuki Eiri como lo hacía Ryo. Ella me miraba y me quería a mí, por lo que soy yo.
Qué idiota fui al pensar que un clavo saca a otro clavo.
LLevábamos catorce meses de gira cuando Charly me dijo que estaba embarazada. Me asusté cómo nunca en mi vida, pensé ¿Qué le voy a decir a Yuki? Entré en pánico y no pensé en que ella estaba en una situación más delicada que la mía.
-¿Eso es lo único que te importa? - Me preguntó entre lágrimas.- ¡Shuichi estoy embarazada!
-¿Estás segura? -Ella asintió.- ¿De cuánto estás?
-No lo sé.
Era pronto para terminar con Yuki, mi lado cobarde quería negar todo, que ésto nunca había pasado. No me atreví a contarle nada a nadie, aunque todo el mundo insistía en que parecíamos raros, no lo contamos. La gira seguía su curso, la vida no paraba porque nosotros tuviéramos problemas. La cabeza me daba vueltas, sentía culpa y miedo. No podía dormir bien, Charly me miraba hasta con pena pero era tiempo de poner las cosas en su lugar. La situación estaba más que clara, sabía lo que tenía que hacer.
-Nada va a volver a ser igual.
Ella me mira con una tristeza inmensa, esa que te provoca un hueco en el estómago. Soy consciente de que la dejé sola en cierta forma, cargando con la culpa.
-Lo siento Charly.
-¿Por qué?
-Porque hasta ahora pretendí que esto no había pasado.
-Lo entiendo. No quieres perder a Yuki...
No tardé mucho en pedirle que fuera mi novia. Ahora que ella era mi novia...mi amante era Yuki Eiri, ése era el lugar que cada uno debía tener en mi vida, ese lugar que le correspondía a cada uno como prioridad.
Yo aún seguía con él y Charly nunca me recriminó, lo sabía perfectamente.
PD: Sí, aparezco y desaparezco pero jamás dejé de escribir. Antes de que alguien pregunte, sí, el bebé es de Shuichi. Nada de dudas acerca de su paternidad por favor. Las extrañé muchísimo!!!Dejen saludos aunque sea!!! KARCRIS