Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Reversión Yoonmin por mochipervertsan

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

lo siento por no subir en estos dias, aquí esta

Su cabeza, su abdomen, su pecho, sus patas, todo dolía un montón. Se sentía mareado y aún el maldito T.O.P seguía en pie, no parecía muy lejos de cómo lucía él. Ambos se observaban mientras gruñían, esperaban el momento justo para atacar

El primero en reaccionar fue la pantera y sus garras se clavaron en el lomo del tigre, de un zarpazo, YoonGi dañó la pata que tenía encima logrando alejar un poco a su enemigo, este se lamió la herida y las pupilas grises se enfocaron sobre él.

Lo siguiente fue una mordida por parte del tigre en la otra pata del felino haciendo que soltara un rugido lastimero pero este fue acallado al recibir unos dientes filosos en su garganta. Yoongi sentía el molesto dolor que se extendía por su cuerpo y fue obligado a retroceder

Joder, había prometido volver a ver a Jimin, no podía rendirse aquí, en manos de un imbécil pero su cuerpo no parecía pensar así, su vista comenzó a nublarse, pudo escuchar una risa tétrica de parte de su atacante, eso lo enojaba pero no podía hacer nada más

Sus ojos se fijaron en la puerta por la que momentos antes había salido el rubio omega.

Jimin

¿Qué le pasaría a ese pequeño ahora? Estaría solo y sin nadie que lo guie por las peligrosas calles de Daegu

Jimin

Vio una rubia cabeza que se acercaba a ellos, ¿ya estaba alucinando?

Unos ojos llorosos hicieron contacto con los suyos y no le agradó que hasta en su imaginación no pudiera verlo sonreir.

-sonríe – logró articular a la vez que sus párpados se cerraban y todo quedaba oscuro par el alfa

 

 

El omega al final decidió ir, entró por los mismos pasillos que antes había recorrido. A medida que se acercaba a la conocida puerta percibió un leve olor a sangre junto a menta y otro olor desconocido, al parecer leña quemada, muy desagradable por cierto. Hacía que le picara la nariz

Todo se volvía más intenso al quedar frente a la puerta, sin pensarlo bien la empujó con fuerza, lo que vio le horrorizó hasta el alma.

YoonGi estaba en su forma animal contra una pared, esta estaba manchada de sangre. Una mancha demasiado grande justo detrás del alfa. Otra bestia mordía con fuerza el cuello de su hyung, de allí salía la sangre, esta no paraba de brotar

Sintió su cuerpo agitarse, muchas emociones se juntaron: dolor, odio, miedo, angustia.

Sus manos se cerraron con fuerza, con un revoltijo en su mente casi corrió hasta donde estaban, sentía sus ojos inundarse poco a poco. Pudo ver la cara de YoonGi, sus ojos estaban perdidos y de sus labios temblorosos solo salió un sonríe, eso solo le daban deseos de llorar mucho más

Su mano agarró el pelaje negro de la pantera, esta al sentir el dolor soltó al tigre, este cayó contra la pared, al parecer inconsciente o eso quería pensar Jimin

Los ojos de la bestia lo miraron con furia pero en vez de sentir miedo tuvo una fuerte seguridad de lo que debía hacer a continuación

- Inye hauta le – esas palabras salieron de su boca sin entender por qué, al instante el animal soltó un aullido agudo y quedó totalmente inmóvil, se veía que respiraba pero era como si estuviera congelado.

Sin tiempo de pensar demasiado en lo que acababa de hacer pasó por el costado del estático alfa hasta quedar frente a YoonGi, sus rodillas chocaron contra el suelo duramente al dejarse caer ante el cuerpo del tigre blanco

Su hermoso pelaje estaba cubierto con mordidas, moretones y sangre, su estado era deplorable. Su respiración era pausada casi imperceptible.

Las pequeñas manos de Jimin temblorosas se posaron cuidadosamente sobre la herida de la garganta, esta era la más grave.

Por favor cúrate 

Nuevamente sintió una inexplicable sensación recorrerle todo el cuerpo, esta se concentraba mayormente en la palma de sus manos. Una luz amarillenta brotó de estas y comenzó a cubrir la herida, la cual poco a poco se fue haciendo mucho más pequeña hasta desaparecer en su totalidad

El enorme cuerpo del alfa blanquecino comenzó a mutar hasta quedar en forma humana, para el alivio de Jimin y su omega interno, YoonGi ya no parecía tener heridas de gravedad, solo pequeños rasguños.

Soltó un suspiro y de pronto una horrible punzada se instaló en su garganta, por instinto llevó su mano rapidamente a la zona adolorida haciendo presión. Dolía, dolía demasiado, era como si le estuvieran desgarrando la garganta. Una insistente tos lo atacó, tapó su boca con la otra mano y cuando apaciguó un poco la retiró. Unas manchas rojas adornaban su palma.

El miedo que no había sentido hasta ahora le invadió al distinguir lo que estaba machando su mano. Sangre

Se recostó contra la pared al lado de su Hyung, apoyó su cabeza contra la dura superficie y cerró sus ojos, el dolor estaba presente pero algo más moderado, tal vez si dormía se le pasaría un poco. Un recuerdo cursó su mente y sus orbes se abrieron rapidamente enfocándose al frente

Aquella pantera seguía allí, congelada en el tiempo, la única diferencia era que sus patas comenzaban a ponerse de un color gris. No tenía ni idea de cómo hizo eso hasta que las palabras de su madre le vinieron a la mente

Cuando sea el momento justo tus poderes aparecerán, Minie

Así que ese era su poder y al parecer también podía curar pero lo que no entendía era aquel dolor punzante en la garganta, justo donde estaba la herida del mayor. El dolor fue disminuyendo hasta desaparecer totalmente y con él el sueño invadió al joven omega híbrido

 

 

Sus ojos pesaban pero su cuerpo se sentía liviano, por lo menos una parte de él. Sus muslos estaban entumecidos, algo los estaba presionando cortando la circulación.

Sus párpados se fueron abriendo de a poco acostumbrándose a la claridad de la habitación, sacudió un poco su cabeza y luego se frotó el entrecejo. Varios recuerdos vinieron a su mente, la presencia de T.O.P, la discusión, la pelea, las heridas, la sangre brotando y por último…Jimin

Sus ojos terminaron de abrirse al recordar a Jimin llegando a donde estaba luchando, miró al frente y enfocó a T.O.P aún en su forma de pantera, pero no se movía, se mantenía totalmente quieto como hechizado.

Un pequeño movimiento se hizo presente en sus piernas, dirigió su vista hacia allí logrando ver una cabellera rubia esparcida por sus muslos. Era Jimin, al final no fue una alucinación, el pequeño omega había vuelto por él. Ese simple pensamiento hizo que su pecho se llenara de una agradable sensación. La respiración del menor era pausada, claramente estaba durmiendo profundamente. Su mejilla estaba presionada contra la tela del pantalón, sus manos estaban en sus rodillas y su cuerpo estaba horizontalmente a él con las piernas flexionadas como un bebé. Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios al verlo así

Su mano se movió sola hasta los mechones tomando suavemente unos cuantos entre sus dedos dejándolos escapar entre los mismos. El omega se removió un poco pero no se despertó, YoonGi notó en la perfecta piel del menor un horrible hematoma, justamente en la garganta.

En ese momento recordó que él debía tener esa herida, instintivamente llevó su mano izquierda a la zona que suponía, debía estar afectada pero solo sintió una diminuta cicatriz que posiblemente ni se notara a simple vista

Volvió a mirar el cuello del menor con preocupación, deslizó la mano hasta el hematoma y lo rozó con cuidado, Jimin dio un respingo adolorido y el alfa apartó la mano asustado. ¿Asustado? El gran Agust nunca tenía miedo pero entonces qué era eso que le oprimía el pecho al ver el estado del pequeño Jimin. ¿A quién engañaba? Obviamente se preocupaba por el omega, es decir, por su estado. Solamente por eso, solo porque era su deber entregarlo sano y salvo

Sus oscuros ojos se encontraron con los de miel del rubio, el menor le miraba con ojos brillantes y aliviados desde abajo. Un latido y otro y otro

Recuérdalo YoonGi, no debes…solo reprímelo

-YoonGi-Hyung… - fue un suave susurro que llegó a los oídos del mencionado

-hola bonito – las palabras salieron por su cuenta y el resultado fue un claro rubor en las mejillas ajenas - ¿estás bien?

Jimin intentó incorporase pero el dolor en su cuello se lo impidió, un quejido se le escapó y su mano fue directo al lugar pulsante. El alfa rápidamente lo sostuvo por los hombros ayudándolo a sentarse, visiblemente no estaba bien

Para YoonGi, Jimin era un chico demasiado blando al que su familia había sobreprotegido, un pequeño de casa, feliz, con sus amigos, divirtiéndose pero el destino le había arrancado todo eso, en estos momentos estaba escapando, herido y asustado, sin tener idea a dónde ir ni a quién recurrir.

-Hyung…duele – dijo adolorido aumentando la ansiedad en YoonGi y también en Suga, desde que se había percatado de la herida en el cuello, su tigre no paraba de arañar y dar vueltas en su interior, insistiéndole que hiciera algo al respecto pero él no tenía ni idea qué hacer en esa situación. Optó por sostener el hombro de Jimin firmemente mientras que con la otra mano acariciaba el dorso de la pequeña y delicada mano

-shh~ tranquilo bonito – comenzó a dibujar círculos en el pequeño dorso y pudo sentir como Jimin recostaba la cabeza en su hombro – eres muy valiente y fuerte Jiminie, sé que puedes con esto – el omega asintió débilmente – tenemos que salir ahora, te cargaré ¿de acuerdo?

-de acuerdo, Hyung – Jimin había esperado que el dolor apaciguara si dormía pero no lo había hecho y siendo sincero, estaba asustado, no le gustaban para nada las heridas ni el dolor pero había una cosa de la que no se retractaría, el haber salvado a Agust. El dolor no importaba si había logrado salvar a alguien que lo merecía

Las manos del mayor se colaron por debajo de sus rodillas y detrás de su espalda para luego levantarlo en peso contra su pecho, la cabeza de Jimin quedaba a la altura del cuello de YoonGi y el olor mentolado junto al de rocío ayudaba en demasía contra el malestar

YoonGi comenzó a caminar a paso rápido, mientras más pronto salieran de allí más pronto podría curar al omega y estarían a salvo.

Jimin era bastante liviano a decir verdad, en sus brazos parecía incluso más pequeño y frágil. La manera en que sus brazos estaban cruzados en su pecho junto a la expresión relajada en su cara le daba un aura angelical y pura. Por ese tipo de apariencia era que a YoonGi le era imposible no querer proteger al menor de cualquier cosa

Para cuando lo notó ya estaban fuera del lugar pero nada era tan fácil, a lo lejos se podían ver varios guardias, debían ser alfas ya que a los betas no los dejaban custodiar a las afueras debido a que su olfato no era tan sensible como en un alfa o un omega

Mierda, justo cuando más necesitaba escapar. La única manera posible de salir de esa era matarlos pero él era solo uno contra, alrededor de 10 guardias armados. Miró a Jimin, el pequeño estaba sudando mucho, sus cejas estaban algo fruncidas y sus labios parecían secos y pálidos

Una idea cruzó su mente, si no funcionaba estaba perdido. A como pudo activó el dispositivo en su oreja para llamar a Jin

Un pitido, dos, tres, cuatro…nada

Otra vez lo intentó, nuevamente ninguna respuesta. No se iba a rendir tan pronto, solo una vez más

Uno, dos, tres…

-vamos SeokJin, responde – miró a Jimin en sus brazos que había comenzado a temblar y a quejarse inconsciente

¿Qué pasó, YoonGi? Por Dios, dime que están bien, los guardias activaron las alarmas

-lo sé, lamento decirte que Jimi…

Por favor dime que está bien, te lo ruego

-está vivo pero tiene un extraño hematoma en la garganta – hizo una pausa tragando saliva – necesito que mandes a Darkness con un auto para sacar a Jimin, está muy grave y hay demasiados alfas guardianes armados

No se diga más, escóndanse en el viejo Whalien, él pasará en el auto de las mercancías, así podrán esconderse detrás

-Dios, gracias Hyung

Sé que no es el momento pero…¡¡No puedo creer que me dijeran Hyung!!

-solo cállate SeokJin – pudo sacar una risa al estar algo más tranquilo – muchísimas gracias, no puedo dejar que algo le pase

En serio, Jimin tenía que aparecer en tu vida para que recuperaras tu lado humano Min YoonGi

-tal vez…tengas razón – apretó un poco el cuerpo ajeno contra el suyo evitando que temblara tanto, Jin al otro lado de la línea pegó un grito y cuando iba a interrogar lo que dijo el alfa, este ya había colgado

Sostuvo mejor a Jimin y emprendió el nuevo rumbo a la base abandonada, allí trataría un poco al menor para que por lo menos dejara de temblar y recuperara el color

El viaje no fue nada fácil, a cada rato aparecían más guardias, no tuvo más opción que cubrir a ambos de lodo y tierra para bloquear sus olores, esto funcionó pero YoonGi estaba muy preocupado por la situación de Jimin, temía que pudiera empeorar

Luego de camuflar sus olores, el viaje les fue mucho menos complicado, en poco tiempo ya estaban en Whalien, se veía mucho más desgastada pero por dentro seguía siendo útil. Había algunos utensilios médicos y algo de comida. La contraseña seguía siendo la misma por suerte, al ingresar todo estaba como la última vez, justo como esa persona lo había dejado

No YoonGi, no es momento de recordar

Tienes razón, debemos curar a Jimin

Caminó con el omega en brazos hasta la cama metálica y cuidadosamente lo dejó allí, buscó unas mantas dentro de las gavetas de madera y con ellas tapó el tembloroso cuerpo del omega, al rato ya no tiritaba tanto. Eso era un avance, ahora solo quedaba ver cómo mejorarlo totalmente incluyendo encontrar la causa de ese horrible hematoma.

-solo espera pequeño, te mejorarás – le dijo desde el estante de los medicamentos como si Jimin pudiera escucharlo

 

 

Jin estaba muy preocupado, desde que YoonGi le llamó no paraba de tener un mal presentimiento con respecto a Jimin. Antes de la llamada de su amigo, el jefe lo había mandado a llamar para saber sobre el híbrido, a cómo pudo inventó la mejor excusa que se le ocurrió y agradeció saber actuar tan bien

-Jin, vas a cavar un agujero si sigues así

El omega volteó rápidamente encontrándose  con un alto hombre, con gorra negra y cubrebocas, además de ropa del mismo color. Por los bordes de la gorra se veían varios cabellos grises oscuros. Una de las manos salió del bolsillo de la sudadera y deslizó hasta el mentón su cubrebocas, mostrando una sonrisa acompañada de notables hoyuelos.

-mi piso, mi agujero- dijo acercándose al hombre, este mostró su blanca dentadura y elevó una ceja divertido

-¿vamos a empezar? -habló tranquilo, Jin respiró hondo cerrando los ojos

-tienes razón, no es momento - ambos se miraron con seriedad - Agust necesita ayuda, está refugiado en Whalien junto a otro chico que está herido - el beta se quedó pensativo por unos momentos, según recordaba Agust no era de llevar a nadie a la base

-bien, no llores por mí cuando me valla – habló seductor y Jin soltó un bufido con burla mientras miraba sus uñas

-sigue soñando Nam, sigue soñando – alzó su vista hacia el peligris con una ceja enarcada, el beta sonrió mostrando sus hoyuelos y comenzó a acercarse al omega

-¿contigo? Siempre – le susurró al oído y luego le depositó un suave beso en la mejilla para luego ponerse el cubrebocas y salir corriendo dejando al rubio colorado

Jin vio como la silueta del chico desaparecía de su campo de visión, fue entonces cuando llevó su mano al lugar donde habían estado los labios del beta

-cuídate Namjoon – susurró bajito mientras apretaba un puño en su pecho 

 

Namjoon había tomado varias provisiones y medicamentos, los cuales ya estaban en el auto con el que se dirigía a Whalien, ser el hijo del jefe para hacer estas cosas tenía sus ventajas, ningún guardia preguntaba a dónde iba y eso le facilitaba las cosas en demasía. Faltaba poco para llegar a la base y por suerte no había nadie a los alrededores, Agust tuvo suerte de no ser descubierto.

Detuvo el auto detrás de unos árboles gigantes para esconderlo, de todas formas no estaría mucho ahí. Tomó la bolsa de medicamentos que era la más importante por el momento y se adentró en el escondite. A medida que avanzaba podía distinguir una tenue luz que se colaba por debajo de una de las puertas, al instante se percató de cuál se trataba y se sorprendió. Agust, ¿qué haces en esta sala? Con un poco de presión en el pecho entró a la habitación encontrándose con YoonGi, quien estaba sentado en el borde de la cama metálica junto a un chico rubio, le estaba acariciando el cabello mientras que con la otra mano sostenía fuertemente la del joven. Con cautela se acercó a ellos pero YoonGi volteó la cabeza rápidamente ya que sin querer había pateado una mesita de madera haciéndola pedazos

-jejeje…ya estoy aquí – sonrió un poco apenado y se acercó al alfa para luego entregarle los medicamentos, YoonGi los aceptó rápidamente – Jin dice que son los indicados para él – apuntó con la mirada a Jimin y el alfa asintió sacando el contenido de la bolsa.     

Notas finales:

sigan este fic, en wattpad lo adelantaré un poco ya que lo tengo en el movil


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).