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Love's Way por Ari_123_love

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Notas del capitulo:

Hoy. Es. Lunes. :)

Sí, como 6 meses después de la última publicación, pero es lunes, y es lo que importa xd

Minho torció los labios al ver quién estaba acompañando a Taemin y los niños. Suspiró, tratando de disimularlo rápidamente. No importaba qué, no iba a arruinar su humor, este sería el primer día que saldría con los niños el solo. Había planeado un pequeño itinerario, para no cansarlos demasiado, además no pretendía alejarlos de Taemin por mucho tiempo, para que los niños no se sintieran incómodos, y por supuesto tampoco Taemin.

Le había tomado poco más de dos meses lograr dar ese paso, siendo muy ayudado por Taemin para llegar hasta ese punto. Poco a poco había empezado a tener algo más de responsabilidad sobre los niños al momento en que tenían sus usuales salidas familiares. Empezando con pocos minutos vigilándolos él solo mientras Taemin se ocupaba con alguna compra, o una consulta; había llegado hasta el grado en qué él activamente planeaba las salidas y los itinerarios, llevando a pasear a su par de bebés por toda la ciudad, mientras Taemin solo vigilaba que las cosas no fueran demasiado abrumadoras para los niños.  

Eso era algo que agradecía tanto, y mantenía un poco de su esperanza, toda la paciencia que Taemin había tenido con él, el apoyo que le había brindado para que se involucrara cada vez más con sus hijos, sin necesariamente mantenerse al margen. Hablar con Taemin ahora, era sencillo, aunque todavía no pudiera considerar que estaban en el nivel de amigos. Al menos esa distancia kilométrica que había antes ya no existía. Por eso mismo, habían platicado lo suficiente como para concordar que estaría más que bien que Minho tuviera una tarde para los niños por sí mismo.

Y ahí estaba, en el departamento de Taemin, esperando a que los niños salieran corriendo de la estancia donde normalmente estaban, a su encuentro. Trató de no verse tan incómodo ante la presencia del padrino de los mellizos ahí, no había que ser un genio para notar su intenso interés en Taemin. Una lástima, ya que él mismo también se encontraba interesado en Taemin, y su meta era lograr que Taemin volviera a enamorarse de él.

-¡Papá!- Aquella vocecilla dulce le sacó de sus pensamientos, sonriendo al ver a su hija correr a su encuentro. Ella no se detuvo en ningún momento, abrazándole por una pierna mientras reía.

-¡Papi!- Sangkyung había llegado segundos después que su hermana, haciendo exactamente lo mismo que ella, abrazándose a la otra pierna de Minho. -¡Ya llegaste!

-Hola mis amores.- Saludó a ambos, revolviéndoles el cabello suavemente. -¿Están listos?

Ambos niños asintieron, soltándole sólo para correr hacia Taemin. Él había salido de la estancia, con el par de mochilas que los mellizos usaban cuando salían a dar paseos largos. Taemin les ayudó a colgarse cada uno su propia mochila, arreglándoles el cabello una vez más.

-¿Han tomado todo lo que necesitan?- Les preguntó, viendo cómo cada uno a su manera pensaba duramente en si llevaban todo lo que necesitaban. Rio por lo bajo al ver como primero Eunkyung dijo que no, corriendo de regreso a la estancia, siendo seguida por Sangkyung. Probablemente lo que fueran a tomar sería totalmente innecesario para su paseo, pero Taemin nunca les había detenido de armar sus propias mochilas.

-¡Ya!- Ambos niños regresaron, tomados de las manos y listos para salir.

-Bien, vengan.- Taemin les dio un abrazo y un beso a cada uno, demorándose un poco más en la despedida. Se tuvo que recordar que no se irían por mucho rato, que estarían con su padre, que Minho les llevaría a casa sanos y salvos al finalizar la tarde, entonces pudo dejarles ir. -Minho…- Exhaló, mirándole.

-Lo sé, Taemin.- Minho asintió, sabía que era lo que Taemin le estaba diciendo con la mirada. Lo habían conversado ya varias veces, el miedo de Taemin de que les pasara algo a sus hijos, de no poder cuidarlos. -Estaremos de regreso pronto.- Entonces extendió las manos, para que ambos niños tomaran una.

-Adiós mamá, adió tío Jihoon.- Los mellizos se despidieron, jalando de Minho para poder salir de casa. Se encontraban tan emocionados en su expedición con su padre, que no pudieron notar el mohín triste que Taemin hizo al verlos salir y tener que cerrar la puerta.

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   .

Ambos niños brincaban escalón tras escalón, bajando las escaleras, hablando en voz alta acerca de lo emocionados que estaban, haciendo reír a Minho.

-Papi, ¿a dónde vamos?- Eunkyung lo notó primero, preguntándole a Minho.

-Esa es una muy buena pregunta, princesa.- Minho señaló. -Creo que habíamos hablado antes de ir a ver una película, ¿recuerdan?

-¡Leafy la gallina!- Sangkyung brincó el último escalón, colgándose apropósito de Minho para poder dar un salto más largo. -Iremos, iremos al cine y…y…¿dulces?- Terminó de comunicar sus ideas, sonriendo al último.

-No lo sé, mamá no deja que comamos muchos dulces.- Se aseguró de incluirse en la oración, riendo para sí mismo ante la imagen. Ya en varias ocasiones anteriores, cada vez que quería comprarles alguna golosina a los niños, Taemin le había regañado acerca de la dieta que los mellizos llevaban, y que incluso él debía de dejar de comer tantos dulces que parecía disfrutar siempre. Lo encontraba un poco irónico, ya que cada que visitaba a Taemin y los mellizos, podía notar el intenso aroma a café que había en el departamento, o Taemin por sí mismo. -Pero creo que uno no nos haría daño.

-¿Pastel?- Eunkyung preguntó, abriendo sus ojos de manera rogante y doblando su labio inferior en un puchero. 

Los tres salieron del edificio, caminando hasta la orilla de la cuadra, y deteniéndose en la intersección.

-Podemos comer una rebanada de pastel, pero sólo después de la cena. Deben comer su cena, ¿de acuerdo?- Trató de sonar firme, como Taemin siempre hacía, pero sabía en el fondo que si los mellizos le rogaban un poquito más, terminaría cediendo ante el par de ojos brillantes que le miraban con emoción por su salida.

En cuanto el semáforo les dio luz verde, cruzaron la acera, para poder llegar a la para de autobuses. En ningún momento los mellizos soltaron las de Minho, a pesar de empezar a aburrirse en la espera del autobús que les llevaría al centro comercial. Se balancearon de un lado a otro, Sangkyung contando en voz alta cada auto color negro que pasaba frente a él. Si tan sólo la mayoría de autos no fueran color negro. Minho sin embargo no se cansó de escucharle, corrigiéndole cada vez que se saltaba un número, o lo pronunciaba de manera equivocada. Eunkyung señalaba cada autobús que pasaba, preguntando si ese era el que debían tomar. No esperaron mucho realmente, Minho condujo a los niños a los asientos de atrás, para poder sentarlos juntos, pegados al costado del camión, él tomando el tercer asiento hacia el centro, así poder cubrirlos de ser necesario.

Les escuchó platicar durante el camino, sintiendo derretirse un poquito más cada vez que decían una imposibilidad. No habría nada que ese par de niños hiciera o dijera, para que Minho dejara de admirarles como lo hacía ahora. Eran sus bebés, y a veces todavía le costaba un poco creerlo. Era, simplemente inimaginable, sus pies pequeños, lo diminuto de sus uñas, incluso la mirada curiosa que tenían ante el mundo. Había pasado noches enteras revisando los álbumes fotográficos que Taemin le dio. No sólo les prestó los álbumes, sino que se tomó la molestia de duplicarlos para que así Minho pudiese tener consigo siempre todas esas fotografías de los niños. No le había tomado más de dos segundos amarlos luego de saber de su existencia, y cada día que pasaba los amaba un poco más.

Llegaron al cine eventualmente, Minho les guió mientras los niños jugaban a ser un trenecito, avanzando por el lugar hasta llegar a la fila de los boletos. Minho compró los boletos de la función para niños, indicándoles que la siguiente para era el área de dulces. No pretendía comprarles más que palomitas de maíz., aún y cuando pudiera ver la mala cara que Taemin normalmente pondría ante eso. Simplemente creía que las películas se debían de disfrutar con palomitas de maíz.

-Vamos niños, tomemos nuestros lugares.- Les indicó, siguiéndoles de cerca mientras los niños corrían con emoción hacia la fila donde estaban recogiendo los tickets. Les había dado sus respectivos boletos, sabiendo que les emocionaría el poder entregar su boleto a quien los revisaba. Era un poco de incentivo hacia su propia autonomía, permitiéndoles creer que eran lo suficiente responsables como para cuidar de su ticket, y por ende de su lugar para ver la película.

Ya una vez en sus lugares, y con la película corriendo, Minho pudo ver por primera vez lo que era una función para niños. Sabía que debían ser ruidosas, y que muchos niños eventualmente dejarían de ver la película, aun así terminó bastante sorprendido de todo el bullicio que podía ocurrir dentro de la sala. Era extraño, más no desagradable.

Cuando la película terminó seguía siendo algo temprano, sin embargo se decidió por llevarlos a cenar de una vez. Les llevó a una cafetería para niños, así tendrían tiempo de jugar un poco antes de la cena, y podrían tomarse el tiempo necesario en su comida. No se preocupó demasiado, animándoles a que dejaran sus mochilas en la mesa, mientras él las vigilaba, y así ellos podrían salir a jugar.

Ambos niños no lo dudaron, corrieron por el lugar, Eunkyung escalando el jungle gym para poder llegar a la parte alta y deslizarse por el resbaladero, Sangkyung corrió hasta la pared que era un pizarrón. Uno de los dependientes le ofreció una tiza, haciendo que el lado de tímido del niño saliera, agachando la cabeza un poco antes de asentir y aceptar la tiza para ponerse a dibujar. Cada cierto tiempo uno de los dos, o los dos corrían de regreso hacia Minho, diciéndole que los viera desde donde estaban, tratando de mostrar que tan alto llegaban en los columpios, el edificio que habían hecho con bloques, o incluso quien corría más rápido y llegaban al otro lado del salón. Después de un rato, el cansancio les llevó a regresar a la mesa, para sentarse y revisar que pedirían de cenar.

Minho no se sorprendió de ver que ambos niños sacaban de sus mochilas papel y crayolas, algo que probablemente siempre consideraban necesario en sus salidas, y siempre llevaban consigo. Minho también dibujó con ellos, esperando a que la cena llegara. Dibujó un pequeño niño, agregándole un tallo con una hoja sobre la cabeza, recordando que así Taemin solía representarse así mismo hacía un par de años, cuando todavía eran novios.

-Es mamá.- Sangkyung dijo, señalando el dibujo.

-¿Oh? Sí, ¿se parece no?- Sonrió, terminando de colorear las mejillas con un rosado, haciéndole ver ligeramente cachetón. -Taemin.

-¡Dibujaré una flor!- Eunkyung comentó alto, empezando a dibujar una flor a lado del dibujo de Minho. Una flor de seis pétalos largos, color rosa, con pistilos amarillos. No tuvo que adivinar demasiado qué flor dibujaba su hija, era un lirio. Los lirios eran los preferidos de Taemin.

-Que bonita. Tal vez debamos darle este dibujo a mamá, ¿no les parece?

-¡Sí!- Ambos niños respondieron.

-Dibujaré un pájaro aquí.- Sangkyung afirmó, empezando a dibujar en el extremo opuesto de la hoja.

-Wow, ahora el dibujo se ve mucho más bonito que antes.- Les animó a que siguieran dibujando.

Mientras los niños terminaban de dibujar, Minho ordenó una dos rebanadas de pastel. Le había prometido a Eunkyung que podrían comer pastel después de cenar, y cumpliría con esa promesa. Cuando llegaron, las cortó para dividirlas entre los tres, y así no comieran demasiado dulce siendo ya tarde. A los niños no les importó mucho, estaban más que felices por haber ido al cine y comer pastel en el mismo día.

Tan emocionante día para los niños logró hacer que su energía disminuyera casi por completo. Sólo porque Minho había practicado varias veces antes, fue capaz de cargar a ambos niños, ya somnolientos. Decidió que lo más sencillo simplemente sería detener un taxi y llevarlos de regreso a casa. Los trató de mantener despiertos, haciéndoles preguntas y escuchando lo que tenían por decir. Fue a penas lo suficiente, pero ambos niños bajaron por sí mismo del taxi, todavía teniendo las suficientes ganas como para caminar por si mismo las escaleras, hasta llegar a su piso. Minho les tomó de las manos, sabiendo que en cualquier momento caerían rendidos, y les animó a andar el último tramo hasta la puerta de su departamento. Entonces llamó a la puerta.

No esperó ver la molestia en la cara de Taemin, o cómo lo enmascaraba rápidamente en cuanto vio a los niños. Taemin había escondido todo detrás de una careta sonriente. No tenía idea de lo bien que Taemin podía hacerlo. No se sorprendió al entrar a casa y ver que el ex maestro de Taemin seguía ahí. Después de todo, por un motivo Taemin debía estar molesto.

-Mamá.- Eunkyung se talló la cara, bostezando. -Te hicimos un dibujo.

-¿De verdad princesa? Me encantaría verlo. ¿Qué tal si me lo muestras en lo que te preparamos para ir a dormir?- Le tomó en brazos, cargándole rápidamente. -Jihoon, ya es tarde.

-Entiendo, es hora de que me vaya.- Exhaló, alzando las manos en rendición. -Nos vemos después. Adiós Kyunggiennie,- se despidió de la niña primero, -adiós Kyunggie nah.- Terminó por despedirse del mellizo menor, para después irse.

-Minho, ¿me ayudas con los niños?- Taemin suspiró, luciendo por un segundo cansado. Y aunque no hubiera lucido así, Minho jamás hubiese dicho que no a tal petición. Quería ayudar a Taemin con los niños en todo, no se perdería de esta oportunidad.

-Por supuesto.- Le aseguró, cerrando la puerta detrás de sí y tomando también en brazos a Sangkyung. -Muéstrame el camino.- Señaló, esperando conocer la rutina de los niños para antes de dormir.

-No es difícil, sólo bañarlos, ponerlos en pijama y asegurarse que se hayan lavado los dientes antes de contarles un cuento.- Asintió, indicándole que le siguiera.

Minho lo hizo, mirando por primera vez más del departamento de Taemin. El lugar era grande, tenía dos pisos, y Minho no lograba todavía saber cómo es que Taemin podía rentar un lugar así. Tal vez esa sería una pregunta para luego, para cuando hablar de Taemin, de ellos, fuera un poco menos que terreno prohibido. Por ahora, lo principal eran sus hijos, y que debían ponerlos a dormir pronto.

Notas finales:

No se preocupen, sabremos más de la tarde de Taemin, la rutina de dormir de los niños, y cualquiera plática entre el 2min en el siguiente capítulo 


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