— BoGum no…
—¿Porque no? … es normal…que quiera besar a mi novio —Lo presiona un poco mas sobre la puerta de su auto. Lucha para poder besarle el cuello, pero TaeHyung , le empuja suavemente , no es como si fuera un rechazo evidente aunque si lo es, sutil, pero al fin rechazo.
—Alguien puede vernos … —Pretexta.
—No importa —Hunde su rostro en el cuello, aspira su aroma, lo quiere todo de el, todo, sin reservas, sin límites.
—Claro que importa, no toda la gente es tolerante, podría bajar un jefe y verme, por favor…no quiero perder mi trabajo.
BoGum suspira resignado, lo ama lo suficiente para entenderlo y separarse, pero también lo suficiente como para no querer soltarlo.
—Ok, vamos a tu departamento.
—Mmm hoy …creo que no…
—¿Por qué? —Es mas un reclamo que una pregunta, porque sabe la respuesta, pero quisiera que no la fuera, porque no puede evitar sentir celos.
—Ya te lo he dicho, mañana es mi cumpleaños y JungKook suele pasar el día anterior conmigo — Es la misma razón por la que TaeHyung no quiere permitir que su novio lo bese, teme ser atrapado infraganti en el estacionamiento, tal vez le de la sorpresa.
—No es justo, deberías pasar el día conmigo, soy tu pareja…mañana tampoco quieres estar conmigo.
Y es que desde que era niño, JungKook iba a su casa a pasar su cumpleaños con el y sus padres, era el encargado oficial de cantarle al presentar el pastel, con esa linda y melodiosa voz que posee, cuando ingresaron a la universidad, la costumbre se transformo en pasar de la tarde juntos haciendo cualquier cosa como comer, jugar video juegos, a la media noche era el primero en felicitarlo, bebían cervezas , estaban juntos hasta al amanecer, el día de su cumpleaños lo celebraba con sus padres y por supuesto el pelinegro era invitado asegurado. Al menos hasta antes de casarse, eso hace menos de un año.
—Entiende, mis padres me han invitado a comer.
—Podrías llevarme, a tu madre le agrado, no puedes negarlo —BoGum nuevamente pone sus manos en la cintura, lo hala juntando sus pelvis, se puede sentir el bulto.
—Será algo familiar. —La verdad es que tiene razón, le agrada a su madre, un día llego sin avisar a su apartamento, afortunadamente ellos solo veían una película en ese momento –una romántica por cierto- les hecho una rápida mirada, pero lo supo, su madre sabía, su excesiva amabilidad con el chico y la necesidad de BoGum por agradarle a ella, hizo que rápidamente hicieran migas. Cuando TaeHyung visitaba a sus padres, su madre le insistía llevara a su amigo, pero nunca le dijo la razón, sabía que al hacerlo, su madre se adentraría mas a su vida personal y no estaba aun muy seguro de ello, auqnue claro, nunca se lo dijo a BoGum. —Además es un viaje de una hora, te aburrirías.
—Claro que no, estando contigo, nada me aburre… tu madre sabe que tenemos algo, estoy seguro, ese día que la conocí lo noté, además tarde o temprano deberé convivir con tu familia, si vamos a pasar la vida juntos en un futuro, será inevitable.
Solo una tenue sonrisa es la respuesta al comentario de BoGum.
—Tenemos un futuro junto ¿no es así Tae?
Afortunadamente el sonido del celular interrumpe la incomoda conversación
—¿Si?
—Tae…lo siento…
No era necesario preguntar, sabia la razón.
—No te preocupes Kookie , no podrás esta vez… —Una mano invisible le oprime el corazón , es imposible no sentir.
—¡No es que no quiera!...hay auditoria y soy encargado, sabes que mi puesto tiene muchas responsabilidades… yo, simplemente no puedo irme, no se ni siquiera si podre irme a casa hoy…
—Si, claro…el próximo año.
—No…hablaré con JiEun …veré si puedo ir mañana contigo a casa de tus padres …la bebé ha estado un poquito molesta por sus vacunas pero… veré …
—No debes preocuparte, no pasa nada…en verdad tal vez el próximo año. —No puede evitar la nostalgia, todo ha cambiado, nada será igual, la decadencia y las ruinas consumen lo que ellos llamaban amistad, ni siquiera lo parece ahora. Escombros.
—¿Sabes que te quiero verdad?
No, no lo sabe, no lo siente, no al menos como el quisiera, a veces ni siquiera como amigos —Si…claro…bueno debo irme. —Sabe que si sigue hablando va a llorar y no es el mejor momento, no es el lugar. Se ha dado cuenta que no habrá sorpresa, no tiene nada que esperar, pese a no estar solo, se siente así.
BoGum no ha escuchado lo que le dijo JungKook pero por las respuestas de su novio infiere lo han abandonado y no puede evitar ironizar.
—Ya que te ha rechazado tu amigo, ¿vas a dejar que tu novio te conscienta?
—Vamos, no me ha rechazado.
—Quedaron de verse y no ha venido como prometió, te rechazo.
—Pero por trabajo…
—No importa, gano yo con ello, vamos a comer.
No hay mas porque esperar, acepta.
———0—0—0———-
JungKook se pasa las manos por la cara, el hecho de que TaeHyung le colgara lo descolocó, esperaba un reclamo, tal vez un comentario de molestia, incluso un insulto esperando que para el fuera importante su presencia, siente que a su mejor amigo le dio lo mismo pasar la tarde con el que con sus múltiples amigos con los que publica algunas fotos en Instagram, si bien no son tantas, ha visitado los IG de las personas que le comentan sobre las salidas que tienen –no porque lo espié- se ha dado cuenta que todas las veces que ellos no han podido verse, por su trabajo, por sus cenas familiares, por el nacimiento de su hija, por sus noches de desvelo, por tantas y tantas cosas, TaeHyung sale con otras personas, muchas, pero una en especial se repite constantemente, uno que en varias fotos –muchas para su gusto- sale cerca de el, no ha podido revisar su perfil porque lo tiene cerrado, pero no le agrada. Mucho menos le agrada saber que para Tae, el ya no es importante , que le da lo mismo verlo que no, que ya no es su prioridad como en antaño, como cuando niños, como adolescentes, como cuando estudiantes universitarios, ya no lo necesita, pero para el su sentir no ha cambiado, desde la vez que lo besó, desde que sintió su cuerpo bajo el suyo, no puede parar de desearlo, pero también de poder amarlo.
Como duele amar,
en especial cuando el otro no te corresponde,
en especial cuando en un “El”.
Se lava la cara en el lavamanos del sanitario donde se había encerrado a hablar por teléfono, buscando algo de privacidad por si tenia que discutir con TaeHyung pero fue innecesario, seca con toallas de papel y se dirige al servicio de café de la oficina , necesita mantenerse despierto ý alerta por todo lo que hará. Se dirige a la oficina para continuar con la auditoria con los contadores del servicio de staff que ha contratado.
Al entrar y comenzar con su trabajo a la oficina irrumpe su secretaria
—Señor Jeon, el señor Lee lo buscaba.
—Estoy algo ocupado, lo veré mas tarde — Se siente molesto por estar en la oficina trabajando y no junto a TaeHyung.
—Está bien, solo escuché que le iba a decir que podría irse a casa, que el señor Lee supervisaría la auditoria en su lugar.
———0—0—0———-
El restaurante es cálido, bastante intimo, no es algo raro, BoGum cada que lo invita a salir lo lleva a lugares un tanto cuanto lujosos, este lo es, pero aparte de ello, era un reservación, lo cual le indica que estaba muy seguro de que irían pese a los planes que tenia, es verdad que JungKook le ha cancelado a ultima hora, pero eso BoGum no lo sabia y no puede dejar de experimentar un dejo de molestia, pues siente que ha planeado sin respetar sus decisiones, pensando en que iba a convencerlo.
—Lindo ¿No?
—Si, claro.
—No te ves muy…cómodo.
—Lo siento, estoy un poco cansado.
—Pensabas pasar toda la noche con tu dizque “amigo” y no dijiste estar cansado. —Hace comillas con los dedos.
—Basta BoGum, eso no significa que estaría cansado. —Lo mira acusadoramente.
—Bueno comamos y luego podemos ir a tu departamento…
—BoGum… —Sabe lo que quiere, pero definitivamente no tiene humor, tiene ganas de estar solo y llorar sin restricciones.
—Solo una película y domir… tal vez sea buena idea que ahora sea yo quien te de la primer felicitación del día de cumpleaños.
Iba a protestar cuando su celular suena.
JungKook.
Su corazón da un vuelco.
—¿Si? —Siente ese hormigueo juvenil en sus manos.
—¡Podre salir temprano! , parece ser que mi suegro prefiere hacerse cargo de todo que dejarlo en mis manos… ¿Te veo en tu casa en media hora?...tengo algo planeado.
TaeHyung sabe que no debería aceptar, lo ha rechazado antes y ahora esta acompañado, se ha convertido en la segunda opción de JungKook, muchas veces han quedado de verse y le ha cancelado en ultimo momento, pero BoGum siempre lo ha preferido a el, nunca hay un no, es su prioridad. Deberia rechazarlo, debería.
—JungKook… ¡Si! —Al diablo todo, el quiere estar con su mejor amigo, no le importa nada, ni las tristezas pasadas, ni las lagrimas derramadas, hoy será como antes, como cuando solo eran el y JungKook. Cuando las dulces horas que pasaba a su lado, le hacían sentir que había algo, que aunque no lo era, su imaginación y las sonrisas que le daba le hacia creer que el sentimiento era mutuo, al menos por un día, al menos por unas pocas horas quería sentir a el le bastaba con tan poco.
—Ok, nos vemos en un momento —Le cuelga para darse prisa y recorrer la distancia del su oficina al departamento de TaeHyung.
— ¿Tu mejor amigo? —Una mirada dolida y palabras con un dejo de algo que no es amigable, le hace reaccionar sobre sus actos.
—Si…BoGum lo siento, pero el ha hecho un esfuerzo…de verdad lo siento…
—No es justo—Murmura— Solo comeremos y…
—No, lo siento tengo prisa, pagaré la cuenta y me iré.
—No es necesario, pagaré yo, llevaremos algo de la comida a tu departamento, lo que se pueda…
—No, BoGum… solo seremos JungKook y yo — Sabe que suena raro, sabe que es extraña la expresión, pero no puede razonar, se siente como adolescente sin poder controlar sus emociones como uno hormonado, solo es una salida de amigos, pero no puede evitar sentirse un poco alterado.
— Me bastara saber que la comerás tu. —BoGum se nota triste y la culpa lo invade.
Paga y TaeHyung siente que todo ocurre con lentitud, le urge llegar a casa.
———0—0—0———
—Te veo en media hora en tu casa. —Corta la llamada y piensa llamar a JiEun para avisarle que llegará muy tarde –al día siguiente- sabe que su hija apenas cumplirá dos meses y necesitan de el, pero desde que nació, cuando sale del trabajo se va directamente a casa , no sale con amigos, ni compañeros de oficina, mucho menos con TaeHyung, solo lo ha visto dos veces, una cuando ha llevado obsequios a la recién nacida y en otra ocasión para pasar a saludarlos, pero ellos ya no pasan tiempo juntos, esta seguro que su esposa entenderá.
Alguien toca la puerta de su oficina,
—Jeon, te he estado buscando.
—Señor gracias… — Quiere agradecer por no tener que quedarse, supone que prefiere supervisar todo personalmente, tiene mas experiencia.
—No tienes que agradecerme nada, en este momento es más importante que estés con mi hija y mi nieta.
—No entiendo…
—Mi esposa me ha llamado diciendo JiEun esta preocupada porque mi nieta ha estado molesta todo el día, ve con ellas, quiero que estén tranquilas, de saber que hoy tenia cita con el pediatra te hubiera dado el día. —
JungKook no puede evitar sentir un dejo de molestia, es verdad que su hija y esposa lo necesitan, pero no es como si su suegro tuviera que controlarlo diciendo lo que debe de hacer, solo es la molestia de la vacuna, ya ha pasado, el ha estado con ellas, pero se siente como en un juego de ajedrez una pieza mas que es manipulada en un juego donde no puede decidir.
—No es nada grave, la bebe esta totalmente sana, las acompañe en el horario de comida para aplicar su vacuna y hace una hora la llame y solo esta un poco inquieta, pero la bañara y dormirá la siesta…
—No importa, si es necesario que entre los dos le den la ducha, háganlo, mi esposa ya va a alcanzarla y le he dicho que ya te he mandado a casa, solo me sentiré tranquilo si estas con ellas, de ser necesario mañana no te presentes a trabajar.
JungKook no tiene nada que refutar, excepto que no habrá festejo de cumpleaños a la media noche. Se coloca el abrigo, sale con la molestia clavada en el estomago, no puede evitarlo, se despide, su suegro en una gran persona, sabe que le ofreció el trabajo pretextando necesitaba personal, casi como si fuera un favor, pero sabe que fue por JiEun, eran novios formales y querían un buen futuro para su hija, lo ascendieron después de la boda, le da un sueldo que esta seguro que sino fueran familia no ganaría ni la mitad, le han regalado la casa donde viven, pero …hay un vacio que no sabe como llenar, sabe que ese vacio tiene un nombre, uno que con palabras o sonrisas extrañas lo llenaba, con sus bromas y sus juegos y ya no lo hace, porque el no tiene tiempo, porque tiene un trabajo, esposa, una hija, familia política y pareciera que ya no tiene vida para si.
Cuando se sube al auto marca el número telefónico de TaeHyung. Al primer tono contesta.
—¿Ya has llegado? Lo siento , lo siento, dame tiempo, estoy atorado en el trafico, llegare…
—Tae… yo… lo siento…de nuevo… —No necesita decir mas, se entiende el mensaje.
—No digas que lo sientes, porque ¡MALDITAMENTE NO LO SIENTES JUNGKOOK! —Un ataque de ira le golpea…
JungKook quisiera explicarle, pero ¿Qué puede decir?, que no tiene voluntad, que no tiene tiempo, que se siente presionado, que no sabe como decir no pero que lo que mas quiere en este momento es pasar tiempo con el… ¿Qué puede hacer? Si tan solo tuviera una oportunidad al menos, se arriesgaría a soltar todo por el, pero ni siquiera existe la mas mínima posibilidad.
—Yo…como dije …mañana…
—¡METETE EL MAÑANA POR EL…! — En un arranque de enojo golpea el celular contra la puerta del auto rompiendo la pantalla , prefiere hacerlo a decir algo mas, la frustración se apodera de el y corre como un rio desbordándose por su ser, no necesita mas el teléfono , así perderán contacto total, ya no esperara una llamada los viernes por la tarde para confirmar una cita rota, no mirará el teléfono pensando en mandarle mensajes, no esperará que suene la notificación con el sonido que eligió para el, esperando que se acuerde de decirle buenos días, no quiere esperar algo que sabe no llegara. Así que decide irse a su departamento con el hombre que si lo ama y lo valora a esperar y disfrutar la llegada de su cumpleaños, dejándose amar y venerar como solo BoGum sabe hacerlo. Porque BoGum se esfuerza en complacerlo, en hacerlo vibrar, en buscar su disfrute como ninguno de sus amantes anteriores, porque sabe que ese chico, besa el piso por donde camina, que importa si cierra los ojos durante el sexo, imaginando que es JungKook, quien lo besa, quien lo acaricia y lo lleva al paraíso del placer, esta noche será mejor no pensar, esta noche ha decido soltar su pasado y empezar a dejar a BoGum entrar en su vida.
Pero eso JungKook no lo sabe.
Llega a casa, una casa que siente ni siquiera es de el, no la compró, no la eligió, cedió a todos los deseos de JiEun, ella estaba tan emocionada y enamorada que lo creyó justo, no podía corresponder con la misma intensidad ese amor, por lo menos la dejaría ser. Se descalza y deja las llaves del auto en un bowl en la entrada, uno muy bonito, regalo de bodas. La casa luce impecable, se dirige a la cocina huele a comida, casera, una que su esposa ha guisado especialmente para el. Como casi todos los días. La ve a ella, su figura menuda, su cabello perfectamente peinado, tan pulcra, al voltearse, la ve, tan hermosa, tan perfecta, cuidadosamente arreglada para el, solo por el.
Quisiera que fuera cruel, desobligada, intolerante, amargada, pero no lo es, ella solo es perfecta.
—¡Amor! Que bien has llegado, justo esta la cena caliente.
Le da un beso en los labios, ella es adicta a ellos, el le corresponde, como siempre. Ella ama estar en sus brazos.
—Anda lava tus manos, para que cenes.
—No, primero bañaré a nuestra hija.
—Oh…no es necesario, mamá lo esta haciendo ya, supuse que llegarías tarde y ella se ha ofrecido ayudarme para que yo terminara la cena.
Sabe que es mentira, sabe que ella ha pedido a su mamá abogue por ella con su padre para que lo dejaran salir temprano del trabajo, ella no lo haría, se sentiría avergonzada, pero el resultado es el mismo, ella quiere mas tiempo con el. Cuando eran novios, la universidad no les permitía ser tan unidos por sus clases, sus practicas deportivas y sus salidas con TaeHyung, luego cuando trabajaba, se veían pero sus padres eran estrictos con los horarios, nunca llegaban tarde y el trabajaba, así que era fácil tener una relación, incluso era agradable su vida sexual, esporádica, pero satisfactoria, pero ahora, era demasiado, no quería ser cruel, ella no lo merecía, ella deseaba tanto tener una vida en familia, pero sentía que lo asfixiaba.
—Igual iré a verla.
—Date prisa.
Camina a la habitación de la bebé, su suegra la ha bañado ya, la tiene envuelta en una toalla rosa.
Cuando la ve, le da una venia y estira sus brazos. —Démela, voy a cambiarla.
—Oh, no es necesario, yo lo hare, es mi nieta y puedo hacerlo mejor que tu.
—Soy su padre, puedo hacerlo. —La bruma, la pesadez, acidez.
—Anda, descansa, lo haré…
No termina la palabra, cuando de manera sutil JungKook, toma con suavidad a la bebé. —Trata de controlar su frustración y habla con amabilidad, sabe que la señora no ha querido ser molesta, les ha ayudado tanto a su esposa y a el, debe reconocerlo. —Quiero pasar tiempo con mi hija, le he extrañado en el trabajo, así que… voy a cambiarla.
La señora se ve un poco sorprendida, pero asiente — Bien, iré por su biberón. —La viste con delicadeza, le da el medicamento previniendo la fiebre, la alimenta después de que su suegra le ha traído el biberón, la mece y platica con ella, es lo mejor que le ha pasado en ese matrimonio, es lo que lo sostiene en esa caos, le canta suavemente, con dulzura, la menor inevitablemente se duerme, ya no esta irritada. La coloca en su cuna y sale a cenar.
Su esposa y su suegra platican, cuando lo ven , la señora se levanta.
—Bueno debo irme, ire donde tu papá para asegurarme que cene. —Se despide de ambos y sale, sonriendo con cierta complicidad a su hija.
—Vamos, calentaré la cena, se ha enfriado —Se levanta, pero JungKook la toma de la mano.
—No tengo hambre… y yo preferiría…
JiEun se sienta y lo observa.
—La niña está dormida, le he dado su medicamento, es evidente que ella está bien… Tae cumple años mañana y…
Ella sabe, lo han vivido cuando novios…
—Es tarde JungKook, no quisiera que salieras y te enfermaras, hace mucho frio. —Ella se retuerce las manos, sabe que no quiere soltarlo.
—Vamos, no soy un niño —No lo es, pero pareciera que pidiera permiso.
—Mi mamá ha dicho que mañana puedes no ir a trabajar, podemos ir juntos mañana a verlo.
—Mañana el se ira a casa de sus padres, lo sabes , te lo he contado —Sabe que no hay ninguna posibilidad de que TaeHyung acepte algo como eso, aun tiene reglas para ella , no perfumes, no visitas a casa de sus padres, no celebran su cumpleaños juntos, no vieojuegos juntos. Nunca se las ha dicho, pero parecían muy obvias. Sabe que lo común es que JungKook se vaya con el.
— Amor, no puedes ir mañana a casa de sus padres, papá puede necesitarte, nosotras podemos tener una emergencia, nuestra hija.
—Entiendo… por eso iré hoy… —Se levanta decidido.
—¡JungKook!...si nuestra hija tiene fiebre en la noche… ¿Qué hare yo sola? — Se levanta, tomándolo de la mano mientras JungKook lucha por ponerse el abrigo.
—Sabes que no será así, ya ha pasado antes, el medicamento no lo permitirá. Llámame si pasa algo ¿si?
—Si te necesito ¿volverás? —Eso es anuncio que lo llamará.
—Lo haré…pero solo si es necesario ¿Ok?
Ella asiente.
—¿Lo prometes? — Le muestra el dedo anular, donde tiene colocado el anillo de bodas, con el que prometieron fidelidad, pero también honestidad, un arma de doble filo, pero ella acepta.
—Si.
Sale con premura, quiera poder teletransportarse, estar cerca de el. Le marca una y otra vez, para irlo a ver donde quiera que esté, no contesta las llamadas, no aparece activo en KakaoTalk, se desespera, se frustra, imprudentemente revisa redes sociales mientras maneja, para ver si hay publicaciones de el festejando por su cumpleaños. Nada. Piensa que lo último que dijo, fue que estaba en el tráfico, decide ir a su departamento.
Lo conocen, no, lo reconocen pese a que tiene tiempo de no ir, el portero sabe que son amigos, le indica que si ha llegado, pero omiten decirle que llego con alguien, no es imprudencia, solo no lo creyó necesario, no sabe la naturaleza de la relación entre BoGum y TaeHyung, realmente lo ha llevado pocas veces.
El ascensor es lento, su corazón late embravecido, se siente eufórico, será un gran noche, de amigos, de grandes amigos, irán a beber, a cantar, le gustó la ultima vez que fueron al Karaoke, ya hace tiempo que pasó , pero será lindo, le daría el primer abrazo cuando ambos esperaran impacientemente por la llegada de la media noche viendo las manecillas del reloj , TaeHyung ignoraría los cientos de mensajes y llamadas que le llegaran —real eran cientos—por estar con JungKook, luego regresarán y mirarán el amanecer juntos , como muere la noche, las luces de la ciudad se apagan y el sol los ilumina mientras están en una tumbona en lo alto del edificio donde Tae vive, siempre le pareció romántico ver juntos el amanecer, el moreno solía tomarle la mano, en ese breve momento, aunque fuera solo fraterno, a veces le gustaba imaginar, que había algo mas.
Cuando llega a la puerta, toca el timbre, abre los brazos esperando ser recibido.
El silencio.
Toca nuevamente.
El silencio.
Tal ves TaeHyung esté enojado, definitivamente debe estarlo. Lo mejor será teclear la contaseña de su puerta que se sabe de memoria ý debería entrar.
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