El zorro caminó hacia Naruto, para Sasuke todo parecía en cámara lenta, el rubio se agachó para acariciar el mojado pelaje del zorrito, sin soltar el violín. Recordando el instrumento que tenía en la mano se levantó para ir donde Hinata y que ésta lo guardarse en su estuche.
- Cómo sabes que su nombre es Kurama – Preguntó tímida la Hyuga.
- Oh ¿De verdad se llama Kurama? – Naruto no lo podía creer.
- Pe…pero si lo nombras…te –
- Ah, eso es porque a todos los zorros le digo así, desde niño, mi abuelo tiene un libro de leyendas de grandes y antiguas bestias y aparece un zorro llamado Kurama y desde siempre me han obsesionado – Explicó.
Kurama estaba al lado de Naruto no lo había dejando en ningún momento.
- Ese viejo zorro tiene más edad que mis padres – Dijo Shikamaru – Todos aquí dicen que es un demonio con forma de zorro, por eso a nadie le gusta –
La risa de Naruto terminó de quebrar el ambiente tensó que el mismo había provocado al cantar y luego al llamar al zorro.
- Eres un chico bastante peculiar – Comentó asombrada Sakura.
- Una casa monstruosa, un zorro demonio, dónde están los fantasmas, las brujas y los asesinos en serie – Preguntó divertido – Os dije desde que era un bebé veo películas de terror, tuve mi propia película de terror, así que la verdad no le temo a nada –
- ¿Ni siquiera a morir? – Consultó Suigetsu, mientras sus amigos comenzaban a guardas las cosas por la lluvia para salir.
- No – Fue tajante en su respuesta – Por qué temerle a algo que es inevitable, además ya la enfrenté así que no temo algo que ya conozco – Terminó de decir serio.
- Vámonos antes de que la lluvia se intensifique – Sasuke miró con odio al zorro pero lo ignoró.
Todos aceptaron salir de la playa con rumbo a sus casas, Sakura caminó casi a la par de Sasuke, Naruto iba unos metros más adelante hablando de música con Hinata y Shikamaru.
- Interesante chico – Dijo cuando solo Sasuke pudo oírla.
- Lo es – Ni siquiera la miró.
- Al menos no teme morir – Sakura dijo con burla.
- No me provoques porque sabes que de los dos quién saldrá mal eres tú – Se paró para tomarla del brazo con fuerza mostrando sus ojos rojos.
- No me amenaces, te recuerdo que si eres capaz de moverte por donde te plazca es gracias a mí – Se deshizo del agarre molesta – Ese chico no es Ashura –
- No tienes que decírmelo, y yo no soy Indra – Apagó el carmín de sus ojos – Te recuerdo querida Sakura que tú tienes gran parte de responsabilidad de lo que está sucediendo ahora –
- No entiendo cómo una vez pude estar enamorada de ti – Dijo desolada la mujer.
- Corrección aún lo estás Sakura – Las palabras del Uchiha eran seguras – El problema es que nunca te pude amar de la misma manera, no eres Naruto…
*
Minato miró a Kushina, ya bañada y vestida con sus propias ropas ya que ella se negaba entrar a su habitación. Izumi y Madara habían preparado té para todos en el lugar, se encontraban en el comedor, nadie decía mucho, el sonido de la torrencial lluvia era el único sonido que inundaba el lugar.
Madara sentía que algo había ahí entre el matrimonio y quería saber qué sucedió en un lapsus de tiempo tan corto entre ellos, miró a Izumi quien parecía un ángel.
- Naruto está tardando – Kushina dijo afligida por la lluvia y lo vivido.
- Debe estar por llegar – Madara le tranquilizó – Mi sobrino está con él, no le pasará nada malo, se lo aseguro –
- Gracias – La risa amargada de Minato, la molestó – Qué –
- Qué – Repitió el rubio incrédulo – Ahora te preocupas por él, cuando prácticamente lo dejaste morir –
- Calla – Gritó la mujer angustiada.
- Huuuy cómo tu estúpido marido te va a exponer frente a los demás – Minato elevo la voz furioso sin poder contenerse más – Saben lo que hizo, dejó que su maldito amante secuestrara a nuestro hijo –
- Minato – Chilló desesperada por ocultar su pecado.
- Basta – La voz de Naruto los hizo callar a los dos – Basta, he tenido suficiente de sus peleas por lo que resta de vida –
- Hijo –
- No hables madre – Naruto había llegado minutos antes junto a Sasuke y al zorro que parecía no querer separarse del rubio, cuando comenzaron los gritos – Tuve una excelente noche, como hace mucho, incluso llegue a cantar, no quiero recordar que fue mi propia madre quien dejó que su amante y sus brabucones abusaran de mí todo por asqueroso dinero, sé que fuiste tú, lo sé desde siempre, crees que te odio por nada, sé tus pecados madre y no quiero escucharte pedir perdón ni nada, si estamos tanto mi padre como yo junto a ti es porque estamos atados a ti por tu maldita familia, y cuando digo maldita es porque lo está – Miró al zorro cuando dijo eso, fue entonces que Minato también lo vio.
- Dios Naruto qué hace ese zorro aquí – Se le crisparon aún más los nervioso.
- Cuando estaba encerrado dentro de ese ataúd, solo podía ver a un zorro, uno que me decía que no iba a morir ahí porque aún no era mi momento, ese zorro sostuvo mi último hilo de cordura, dijo que se llamaba Kurama, y mi sorpresa es verlo hoy en la playa y al llamarlo así todos me corroboraron que ese era su nombre, así que no quiero separarme de él – Dijo seguro.
- Bueno – Minato observó con reticencia al animal, bastante nervioso.
- Me dijeron que la casa está maldita – Naruto siguió – Que muchos murieron aquí, y que nosotros seremos los siguientes… yo no temo morir, no sé ustedes – Suspiro – Quién eres – Reparó en la chica sentada en el comedor.
- La nueva sirvienta Soy Izumi –
- Hola Izumi, bienvenida a este circo –
- Hijo – Kushina lloraba desolada por saber que Naruto lo sabía todo y que la odiaba.
- Mamá estoy bebido, empapado y por primera vez en mucho tiempo no tengo miedo, así que no quiero hablar más, iré a tomar un baño y luego a la cama – Explico.
- Naruto ya que estás valiente hoy te gustaría ir a dormir a casa de tu amigo – Minato propuso para la sorpresa de todos – Tu madre tuvo un episodio de terror en su cuarto y su baño clausurado, uso todo el baño de la tina, y no quiero estar con ella, solo hay dos habitaciones habitables –
- Sasuke ¿Puedo? –
- Por supuesto vamos por tus cosas – Sonrió feliz de tener más tiempo con Naruto aún si debía compartirlo con Kurama, ambos tendrían que hablar.
- Gracias –
- No hay nada que agradecer, Me gusta mucho su hijo –
*
Los jóvenes dejaron a los adultos y sus problemas, Naruto tomó lo que necesitaba y salieron por la habitación del menor y cruzaron el patio para llegar a la casa de Sasuke, el rubio apenas y miro la casa muy parecida en distribución y estilo a la suya propia, fue al baño a asearse, y fue el momento que tuvo el Uchiha de apretar al zorro para que hablara.
- Kurama qué mierda hiciste –
- Naruto es mi responsabilidad, es mi cachorro – El Zorro tomó aspecto de un hombre de cabellos cobrizos y ojos añiles carmín – Nunca había sentido una conexión tan especial con un Uzumaki, pero bueno él es de lo que no hay tiene sangre Uzumaki, Namikaze, Senju y hasta Uchiha aunque es la más diluida –
- ¿Uchiha? –
- Por eso es tu pareja ideal perro loco –
- Qué tiene que ver contigo –
- Oh Uchiha, tú lo necesitas muerto y yo lo necesito vivo, quién ganara – El zorro se burló – Como te dije nunca he tenido tanta conexión con un médium como él, en su casi lecho de muerte me convocó, sabes qué tan poderoso es, tanto como para llamar a la misma lluvia hoy, lo viste era el dios del viento mientras danzaba como poseído tocando el violín –
- Es mi pareja – Los ojos de Sasuke se tiñeron de carmín – Mía, y he esperado décadas por él, porqué te dejaría tenerlo –
- Veremos quién gana, te recomiendo que mantengas ese hocico cerrado leoncito –
- Deja las advertencias Kurama, cuando tenga a Naruto a mi lado, sabes que estás acabado como todos los demonios y espíritus en esta isla –
- Siempre he odiado a los Uchiha, pero a ti como ninguno, eres un maldito –
- Fue esta maldita isla quien me maldijo y me quitó a mi compañero – Dijo con dolor.
- Pero él volvió – Kurama – Naruto volvió –
- Hecho pedazos… ¿Sabes quienes fueron? –
- Ya me encargue de varios de ellos, y la mente maestra fue asesinado por la bruja –
- ¿También lo sentiste? –
Kurama soltó una exclamación antes de responder – Claro que lo sentí, esa mujer tiene un poder aterrador como Mito Uzumaki, hay que tener cuidado de ella –
- Lo sé – Sasuke rodó los ojos – Qué le hiciste al padre –
- Lo tomé – Sonrió socarronamente – Necesito alimentarme también y qué mejor que de un Namikaze Senju –
- Naruto te va a matar por tocar a su preciado padre, vi sus memorias, ama con locura a su progenitor te destripara –
- Creo que primero lo hará tu maldito tío – Kurama paró sus orejas – Viene Naruto – Volvió a la forma de un tierno zorrito haciendo que el Uchiha bufara.
-¿Me demoré mucho? – Naruto tenía una toalla sobre su cabeza secando su cabello, Sasuke se levantó para ayudarlo.
- No nada, iré a bañarme y llevaré a ese apestoso zorro a que se dé un baño, no dormirá en mi habitación apestando –
- Bueno – El rubio realmente se sentía bien cuando Sasuke lo tocaba no sabía la razón - ¿Tu hermano? –
- Durmiendo seguro – Le sonrió con tranquilidad a Naruto – Ponte cómodo, volveremos un unos minutos –
El rubio miro la habitación del Uchiha, tenía un poco más de cosas que él, lo que más había en el cuarto eran figuras de Shisa, como él que tenía el colgando en cuello, pero todas las figuritas iban de dos uno con la boca cerrada y otra la boca abierta, Sasuke tenía una extensa colección de distintos colores, materiales y tamaños.
El chico comenzó a cantar Smooth Criminal de Michael Jackson bajito casi en un susurro, lo hizo al ver un disco del cantante entre los vinilos que Sasuke tenía junto a un toca disco, también había una antigua máquina de escribir, Naruto sintió que la habitación era muy retro, quizás Sasuke era un Hipster pero no lo parecía.
- Qué no cantas Dobe – Sasuke sentía que era una delicia escucharlo cantar.
- De todo, de hecho mi vocal coach me dijo que tenía uno de los rangos más amplios dentro del espectro musical, y que tengo un oído absoluto, y puedo tocar muchos instrumentos musicales –
- Un virtuoso tengo en mi habitación – Sasuke sonrió de lado, se acercó a Naruto – Mi canción favorita es Billie Jean –
- People always told me be careful of what you do, And don't go around breaking young girls' hearts – Cantó imitando la voz de Jackson, bastante orgulloso de sí mismo.
- Eres impresionante – Sasuke acomodó el futón que era para dos personas sobre el tatami – Supongo que tienes algún tipo música preferida –
- Por supuesto ¿quién no lo tiene? – Naruto se dejó caer en el futón en el lado que el Uchiha le señaló como suyo – El rock – Dijo sonriendo – Amo los bajos, las baterías, el ritmo y el cambió de rango vocal de un momento a otro, pero soy bastante ecléctico con mi gusto en música, amo la opera y hasta el trap, si la melodía y el ritmo son interesantes más la letra, bebé soy todo suyo –
Sasuke lo vio sonreír zorrunamente, el chico era hermoso y maravilloso, aún no podía creer que pudiese estar de pie y tratando de salir delante después de ese terrible episodio.
- Las películas también te gustan las de terror –
- Un poco me gustan, bueno mucho – Naruto admitió – En América lo escondía, es una cultura extraña, te ponen etiquetas a todo, si te gusta el anime, si te gusta el color negro, o si te gustan las películas de terror, cada persona tiene un lugar al que debe pertenecer por obligación, odio las etiquetas, soy más que mis gustos, que mi físico, soy un mundo. Pero era mejor evitar a los bully sobre todo en una preparatoria de niños ricos – Explicó terminando de acomodarse en la cama – Me gustan las películas de acción, de la buena acción, los musicales del antiguo Hollywood y las películas de terror psicológicos –
- ¿Después de lo que te pasó no te da miedo verlas? –
- La única película que nunca he podido ver más de dos veces es el exorcista, me aterra esa niñita y sé que a papá tampoco le gusta mucho, aunque él es más de slasher y gore que otra cosa. La segunda vez que vi el exorcista fue cuando me salí del psiquiátrico, mi papá había guardado todo lo terrorífico que tenía en una habitación de huéspedes, pero fue en la habitación que me encerré no quería estar en la mía, por un momento me dije si soy capaz de verla es que estoy muerto, porque realmente detesto esa película –
- ¿Pudiste verla? –
- No, me acobardé en la parte de las escaleras y la saqué rápidamente, fue el día que lloré por primera vez desde el día que me desenterraron – Buscó su teléfono - ¿Te molesta su colocó música? –
- No, con qué me vas a deleitar, que no sea música de los ochentas por favor –
- El rock de los ochentas es muy bueno, pero no pondré eso, escuchemos a Deftones, mi papá es una horrible influencia, él es fanático del new metal cuando Chester Bennington se suicidó estuvo mal por meses dice que aún no puede escuchar a Linkin Park sin llorar –
- También me gustaban Crawling era mi tema favorito, sé que es In the End, pero el mío es Crawling –
- Crawling del disco Reanimation es precioso igual que pushing me away –
- ¿Passenger? – Sasuke se dejó caer al lado de Naruto, giró su cabeza para miralo, ambas miradas azul y negra chocaron pero ninguno fue capaz de mirar a otro lado.
- Sí lo es –
- White Pony es lejos uno de sus mejores discos, tiene canciones con las que haría el amor y fumaría un porro – Naruto lo miró divertido e incrédulo para luego reír abiertamente sorprendido - ¿Qué? –
- Cuál es tu canción para hacer el amor –
- Knife Party, Panssenger y change con ella obvio que me drogaría – La risa de Naruto aumento – Por qué te ríes tanto –
- Porque pienso lo mismo, exactamente igual y has escuchado Passenger de Mike Shinoda, con esa si dan ganas de hacer el amor – Buscó en su lista de reproducción de Spotify –Escucha –
La melodía de la canción inundó la habitación – Es muy Mike Shinoda – Aceptó el Uchiha esos arreglo solo podían ser de quién fuera el guitarrista y el rapero, segunda voz de Linkin Park – Es espectacular –
- Puedo dejarla en un bucle infinito de repetir una y otra vez – Susurró Naruto perdiéndose en las sensaciones que la canción le daba.
El Uchiha se acerco a Naruto peligrosamente estaba tan absorto en el rubio que olvidó que el detestable zorro estaba ahí – Qué piensas cuando te pierdes todas esas horas de la noche escuchándola – Susurró al oído del rubio.
- En que tengo una vida normal, en todo tengo alguien con quién hablar de música, a quién pueda tomarle la mano, con quien pueda pasar todo un día, olvidar por completo lo que vivi, con quien pueda besarme y hacer el amor sin tener un ataque de pánico, sin tener que tomar un montón de pastillas para mis angustias e insomnio, para olvidar el miedo que tengo a la oscuridad y que el hombre de ojos rojos que veo en mis sueños sea real … - Una lagrima cayó por el costado de su sien y antes de poder decir nada, sintió los labios del Uchiha presionando los suyos.
*
Minato miró a Madara, le pidió al Uchiha que se quedase con él esa noche, estaba bebido, consternado por todo lo de esa noche y no quería estar solo, pero no quería estar con Kushina, quien debía de estar dormida como piedra con los ansiolíticos que se tomó, y en todo caso Izumi estaba con ella en caso de cualquier cosa.
Madara Estaba vestido solo con bóxer, Minato tuvo que tragar duro el hombre tenía un cuerpo de atleta, sentía que en cualquier momento se le iba a caer la baba y no quería que eso sucediese y él estaba solo con una sudadera blanca y calzoncillos.
- ¿Estás bien? – Madara preguntó de pronto, ambos se encontraban acostado de frente al otro, una pequeña luz era su única compañía, el totoro espantacucus de Naruto.
- Me lo preguntas por mi casa maldita, porque mi hijo fue secuestrado por el amante de mi esposa o que mi hijo sabía de ello, o por lo que me pasó anoche – Paso sus manos con desesperación por su rostro – Qué diablos pasó anoche –
- No sé – Madara tenía una idea de lo que había pasado, quería ir contra el maldito zorro y hacerlo añicos – Qué haces cuando te encuentras estresado, cuando no puedes más con todo, en días como hoy –
- En día como hoy, esperaba que mi hijo se durmiera y escapaba a casa de mi amante o me iba a un bar gay y buscaba alguien con quien tener sexo desenfrenado y sucio tanto como fuera posible para olvidar todo lo que estoy viviendo – No tenía idea del porqué contestó tan sincero.
- Te puedo dar eso – Madara sonrió de lado – Debo aceptar que desde que te vi el día de ayer solo puedo pensar en estar dentro de ti – Llevo su mano a la mejilla sonrojada del Namikaze – Quiero comerte, hacerte agonizar de deseó, que me sientas en lo más profundo de tu ser, que no puedas concebir otra verga en tu interior que no sea la mía - De un movimiento estaba sobre Minato sus manos tomaron las piernas del rubio y las acomodó a un costado de su cadera, invistió al rubio así, ambos miembros chocaron entre sí, escuchó como el menor tragaba saliva y luego soltaba un gemido - ¿Quieres que te tomé? Te haré olvidar todo –
Minato solo fue capaz de asentir con la cabeza incapaz de decir algo, un beso apasionado ocurrió en un segundo y seguidos más su sudadera fue rota, con una fuerza bestial de parte del Uchiha.
Sus manos no estaban quietas, iban y venían por el cuerpo del otro, Minato tocó los glúteos de Madara eran duros, se pasearon por la gran espalda del hombre, arañó los omóplatos al sentir la boca del Uchiha sobre uno de sus pezones, dedos traviesos adentrándose a lo más profundo de su interior.
Trató de ahogar sus gemidos de placer, Madara no mentía cuando le dijo que lo haría olvidar todo, ya ni se acordaba de su nombre, estaba siendo verdaderamente devorado, su pene era succionado con maestría haciéndolo delirar de placer, ni siquiera pudo soprenderse de acabar pronto, pero apenas pudo recuperar el aliento, sus piernas fueron levantadas y colocodas sobre los hombres del Uchiha y de la nada fue penetrado de una gran estocada, certera y profunda que lo hizo gritar de placer, esperaba que nadie los oyera, pero la tormenta hacía lo suyo y las habitaciones estaban alejadas las unas de las otras.
El vaivén comenzó rápido, sentía que se ahogaba a cada movimiento, su cuerpo se movía al compás de las caderas del Uchiha, su cuerpo se sumergía en el infinito placer que recibía de ese hombre. Cambiaron de posición el quedó en cuatros mirando hacia la pared y volvió a ser penetrado, el sonido de dos cuerpos lujuriosos chocando entre sí y el sonido de la tormenta el viento azotando contra los arboles, el rugir de las olas, la lluvia chocando en el tejado, era como la mejor banda sonora para hacer el amor.
El dolor y el placer lo embargaron al sentir como Madara lo mordía en el cuello, estaba seguro que le sacó sangre y eso en vez de asustarlo elevó aún más su éxtasis. Fue tomado con fuerza por los cabellos y besado con urgencia y necesidad, parecía que Madara estuviese hambriento de él, por un segundo pensó ver los ojos del Uchiha rojos pero al cerrar y abrir sus ojos nuevamente eran negros.
Llegó al orgasmo solo por todo el placer que Madara le brindaba en su ano, había tenido un orgasmo seco y eso jamás le había pasado antes, había escuchado hablar de ellos, pero siempre necesito de masturbarse para llegar al placer pero esta vez no necesito de hacerlo, eso lo hizo delirar, pensó que los multiorgasmos en un hombre en solo un mito, pero ahí estaba sintiendo que su cabeza estaba a punto de estallar por no poder manejar tanto placer, su boca fue devorada una vez más y Minato simplemente se dejó llevar por las sensaciones únicas que estaba sintiendo en ese momento.
El Uchiha llegó al orgasmo estocadas después, sintió la misma gloria al sentir su miembro aprisionado por las paredes del rubio a causa del orgasmo, Minato parecía a punto de desmayarse y eso aumento su estima, quería que el rubio jamás olvidara la primera noche de muchas que iban a tener.
Madara sonrió al ver a Minato hecho nudo de miles de sanciones placenteras, y sonrió más al ver su cuello mordido, ahora ese rubio era solo de él.
A pesar de verlo sumergido en placer, él quería brindarle más, y quedaba toda la noche para hacerlo suyo.
*
Naruto se dejó llevar, sabía que si cerraba los ojos volvería a tener un ataque, pero si los mantenía abiertos podría ver al hombre que lo besaba dulcemente y él podría permitirle seguir haciéndolo.
Tuvo una que otra novia y novio en estados unidos, no le apenaba reconocer que tenía curiosidad sobre su sexualidad y le gustaba pensar en ser tocado por otros muchachos, pero también toquetear a las chicas, se definió como un bisexual, pero hasta quedó todo, luego de lo sucedido con su secuestro, y pensó que jamás iba a poder sentir las caricias de otro sobre su cuerpo pero ahí estaba siendo besado y manoseado por el Uchiha.
Gimió quedito aún con lengua de Sasuke en su boca, la mano del Uchiha y la suya al mismo compás subían y bajaban por los miembros de ambos masturbándose, suspiró pesadamente cuando el Uchiha dejó de besarlo solo para besar su cuello, su parte de la pijama estaba en algún lugar de la habitación y Sasuke comenzó a acariciar sus pezones con la mano desocupada y el otro era succionado por sus labios.
Tuvo que cerrar los ojos un segundo por inercia pero no se sintió mal, no pensó en sus captores como las otras veces que trató de masturbarse en la soledad de su habitación para sentirse libre de ellos, pero con Sasuke si podía olvidar todo, y solo concentrarse en él.
Dio un pequeño salto con el pulgar del Uchiha se colocó en la punta de su glande, gimió una y otra vez por el placer que estaba recibiendo y de pronto estalló en éxtasi puro y duro, Sasuke le siguió.
Trató de normalizar su respiración después de ese increíble orgasmo que tanto añoraba, sonrió tontamente, Sasuke lo volvió a besar dulce y amable.
- Quién eres para hacerme sentir así de normal y feliz – Murmuró quedito al Uchiha.
- Tu compañero, tu destino – Susurró en respuesta mostrando sus ojos rojos a Naruto quien lo miro sorprendido – Soy quién deseas que en las noches te abrace, y ahora que estás aquí, nunca te irás de mi lado amor mío…ahora duerme –
Naruto lucho con mantenerse despierto pero esa última orden del Uchiha lo hizo caer en la inconsciencia aun sosteniendo con su mano la mano de Sasuke.
El moreno sonrió satisfecho al fin, después de más de un siglo tenía a su compañero Shisa a su lado.