Hubo un minuto de silencio entre ellos.
"Hyung, yo...".
"Tú me... me gustas, Taehyungie", lo interrumpió Yoongi.
"Lo sé", rió el menor. Fue el turno del más joven de sonrojarse.
"¿En serio? ¿Cómo...?".
"Te delataste con el fanfic que vi sobre nosotros y... ¿crees que no me he dado cuenta de la forma en que me miras? Pero llegué a dudarlo porque nunca me has dicho un Te quiero".
"Oh, por Dios", Yoongi cubrió su rostro con sus manos por la vergüenza, "¿Soy tan obvio?".
Taehyung sólo se limitó a reírse.
Otro minuto de silencio.
"Tú también me gustas, hyung", confesó el menor, observando cómo Yoongi apartaba sus manos de su rostro para mirarlo. "¿Puedo besarte?".
Yoongi asintió con la cabeza, anonadado y con las mejillas rojas.
Taehyung acercó su rostro al del mayor lentamente, sus labios se rozaron y la piel de ambos se erizó. El más joven sacó su lengua para lamer los labios del otro chico. Yoongi, frustrado por la demora, tomó la iniciativa y fusionó sus labios.
El beso se intensificó cuando Taehyung introdujo su lengua en la cavidad bucal del otro, quien gimió por la sensación. Lo único que se escuchaba en la habitación eran los chasquidos húmedos.
Taehyung empujó a Yoongi sobre la cama y se colocó encima de él mientras continuaron besándose. A estas alturas sus penes ya estaban semi duros, y por la posición en la que estaban, se rozaban y los hacía gemir en medio del beso. El más joven movió sus caderas para crear más fricción a tal punto que Yoongi sintió que iba a correrse.
"Ah, Tae", gimió Yoongi.
"¿Puedo quitarte la playera?", le preguntó Taehyung. El mayor asintió.
Antes de retirarle la playera, Taehyung metió sus manos por debajo de ella y Yoongi arqueó la espalda ante el frío de las mismas. Agarró la orilla de la playera y la tiró hacia arriba, quitándola completamente por su cabeza.
Taehyung admiró por unos segundos el torso del chico.
"Tienes lindos pezones, rosados y pequeños", dijo acariciando su pezón derecho con el pugar. Yoongi gimió. Luego, acarició la entrepierna del mayor, haciéndolo retorcerse del placer y dolor. "¿Puedo?", sugirió tomando con sus dedos la orilla de su pantalón. Yoogi asintió de nuevo. El menor despojó al chico de su pantalón y su ropa interior, dejándolo completamente desnudo ante él.
"Lindo", lo halagó Taehyung, para posteriormente depositar besos por todo su cuello, pecho y abdomen.
"Taehyungie, por favor", suplicó Yoongi.
"¿Quieres llegar hasta el final, cariño?".
Yoongi asintió desesperado, casi llorando por el apodo.
Taehyung no perdió más tiempo y se quitó su ropa con la misma desesperación.
"Espera, no tengo condones", dijo preocupado.
"Yo... yo tengo. En el cajón de allá", señaló tímido.
Taehyung sonrió y fue por el condón, y de paso tomó el lubricante que se encontraba allí.
"¿Por qué tienes condones y lubricante en tu cajón?".
"Admití que me gusta ser el pasivo, ¿no? Así que también tengo algunos juguetes", confesó Yoongi.
"Demonios, Yoongi". En ese instante, Taehyung sintió que casi perdía el control al imaginar al mayor masturbándose. No pudo contenerse y lo besó de nuevo.
"Taehyungie, por favor", suplicó una vez más el pelinegro.
"Paciencia, bebé. Aún debo prepararte. Estás desesperado, ¿cierto? Apuesto a que has estado esperando esto por un largo tiempo como el pervertido que eres". De repente el castaño comenzó a hablarle sucio.
Taehyung bañó sus dedos en lubricante y presionó uno contra el agujero de Yoongi.
"Ah", se quejó el mayor.
"Relájate, cariño", murmuró el castaño.
Tres dedos necesitó Taehyung para estrechar al pobre chico que se encontraba debajo de él suplicando por ser follado.
"Lo voy a meter ya, ¿de acuerdo?", le preguntó Taehyung.
"Sí, sí, por favor, mételo ya".
El menor alineó su pene contra el agujero de Yoongi y empezó a introducirlo lentamente para no lastimarlo. Una vez que estuvo totalmente adentro, esperó unos minutos para que el chico se ajuste a su tamaño. Mientras, Taehyung depositó pequeños besos por todo su rostro y sus labios.
"Muévete", le ordenó Yoongi.
Y así lo hizo Taehyung. Sacó su pene del interior de Yoongi y volvió a empujar hacia dentro, haciendo que el mayor se queje de dolor y placer al mismo tiempo.
Unos movimientos más y Yoongi ya se había acostumbrado al tamaño del menor, por lo que le rogó que fuera más rápido.
"Di que me quieres, hyung", susurró Taehyung, manteniendo el ritmo lento de los movimientos.
Yoongi soltó un suspiro de frustración y vergüenza por tener que decirle Te quiero a alguien.
"N-No".
"Entonces, no puedo darte lo que quieres".
"No, por favor".
"Dímelo".
Taehyung seguía manteniendo el mismo ritmo de las embestidas.
Yoongi lloriqueó. Ni él mismo sabía si de placer o de vergüenza, o ambos.
"Te... Te quie- ", comenzó a decir. Pero no pudo terminar de articular las últimas palabras porque Taehyung había dado una fuerte estocada en su interior. "Ah, Taehyungie".
"No te escuche bien".
"Te quiero, Taehyungie", murmuró entre gemidos.
Las fuertes embestidas del menor se hicieron constantes. Era demasiado el placer para Yoongi que lloraba y temblaba. El pobre chico no sabía qué hacer con sus manos y sus gemidos no podía controlarlos. Pero en estos momentos, lo que menos le importaba es que lo escucharan.
"Me voy a correr, Taehyungie", dijo con su voz temblorosa.
"Hazlo, cariño".
Y así ocurrió. Yoongi manchó de blanco su abdomen y su pecho, y al contraer sus paredes por el orgasmo, Taehyung se corrió también.
El menor salió del interior del chico y retiró el condón. Abrazó a Yoongi, quien yacía en la cama con los ojos cerrados esperando a que los espasmos desaparecieran. Lo acurrucó y acarició su cabello y rostro.
"¿Estás bien?", le preguntó.
Yoongi asintió lentamente.
"De verdad te quiero", murmuró el mayor.
"Lo sé, cariño. Y yo a ti".
Esa noche Yoongi durmió con una sonrisa, porque lo que había leído en sus fanfiction se hizo realidad con el chico de sus sueños.