Capítulo 10.- Verdades que duelen
Steve dio un manotazo en la mesa de vidrio pero Tony ni siquiera se inmutó sino que tomó otra uva y se la llevó a la boca sin quitar su atención del crucigrama
- Por el hecho de que pretendas ignorarme Anthony no significa que voy a desaparecer – dijo el capitán, aunque gritarlo sería un mejor término
- Una palabra de 8 letras que literalmente significa que no puede ser explicado con palabras – Tony dijo esto y se llevó el bolígrafo a la boca, Steve estaba a punto de explotar, odiaba con pasión cuando Tony se ponía en ese plan
- Anthony!!!
- Ok., para que no digas que te ignoro, ¿Qué puta quieres ahora Steve? – Tony se sacó los anteojos y los dejó sobre la mesa, se puso de pie y caminó por la cocina rodeando el mesón hasta la máquina de café
- Te dije a lo que venía y te encuentro… te encuentro con ese niño, ¿estás loco Tony?
- Me encontraste desayunando con el niño, yo te encontré en la cama con Barnes, hay una diferencia ahí, ¿no lo crees? – Tony se sirvió una taza de café y se arrimó al counter
- ¿Es siquiera legal?
- ¿El niño? – Tony sonrió muy divertido al preguntar esto, es que Peter si parecía aún más joven de lo que realmente era, dioses…
- ¿Todo es gracioso para ti? – Steve en cambio estaba ofendido por la actitud de Tony, no que no lo hubiera visto antes en él pero… igual estaba ofendido
- No… solo las cosas graciosas me parecen graciosas
- Basta Tony, así no vamos a poder hablar
- Ya ya ya, claro que el niño es legal Steve, no que tenga que explicártelo pero es alumno del MIT y está trabajando conmigo en un proyecto, es muy inteligente y por primera vez en años puedo tener una conversación con alguien que no revuelva solamente en aviones y cosas militares, eso ha sido… refrescante – Tony sonrió por la verdad en sus palabras, le tomó un tiempo puntualizar que era lo que más le gustaba de Peter y si, era el hecho de que le era fácil hablar con él de una diversidad de temas que iban desde lo tecnológico, lo teórico, lo práctico de la ciencia aplicada y muchas cosas más, Peter no era solo una cara bonita con un trasero espectacular, no… esas eran ventajas adicionales a su criterio
- ¿Es un genio como tú? – Steve frunció el ceño, ese si era un golpe bajo a su ego porque la mitad del tiempo Tony hablaba de cosas que él no entendía, pero ese niño… no tenía facha de ser nadie importante, era un muchachito como hay muchos pero con lo que Tony estaba diciendo ahora, diablos…
- Nadie es un genio como yo, pero me ganó en ajedrez y con eso te digo todo, el niño barrería contigo con una mano atada a la espalda o con migraña, tú entiendes – Tony bebió un sorbo de su café y cerró los ojos al respirar profundamente, estaba tratando de mantenerse en calma pero Steve no estaba ayudando
- Está bien, es un niño inteligente y no te lo voy a discutir si tú lo dices, ¿pero en los demás aspectos?, ¿crees que un muchachito como aquel va a llenar tus expectativas?
- Mis expectativas… wow… ni siquiera sé cómo eso suena – Tony resintió las palabras de Steve, odiaba esa pose de superioridad que a veces tomaba sobre él y sobre todo el mundo la verdad
- No te hagas el inocente Tony que no te queda, tú eres por demás exigente y quisquilloso en muchas cosas, la comida, la bebida, la ropa, los modales, el comportamiento, es imposible complacerte en la mayoría de situaciones y tú lo sabes
- ¿Te estás interesando por mi vida sentimental?, ¿en serio? – Tony tomó otra uva del platón y miró a Steve con incredulidad
- Sé que el terminar una relación como la que nosotros tuvimos ha sido duro para ti porque también ha sido duro para mí, sé que tienes necesidades varias y por eso estás jugando con ese muchachito, lo que quiero saber es qué tanto estás jugando con él
- Para ahí Steve y déjame puntualizarte algunas cosas, primera, te repito… bájate de la nube de dignidad en la que andas subido y deja de tratar de ponerte en mi lugar o entender lo que tú crees que siento o pienso porque no… no le vas a atinar nunca en la vida, segundo, ¿quién te dijo a ti que yo solamente estoy jugando con el niño?, tercera, tú no eres todo lo que piensas que eres, me vives diciendo a mí que soy egocéntrico y narcisista pero déjame decirte que para reconocer a uno se necesita otro, así que Steve, cariño, tú no eres lo mejor que me ha pasado en la vida, no me estoy muriendo en tu ausencia porque el sol no sale por tu culo todas las mañanas, eres reemplazable como todos lo somos y ese niño… ese niño es mucho más que tú en varios sentidos, además… el que rompió las cosas fui yo, el que está buscando volver eres tú, y no… yo no quiero volver contigo, no sé quién te dijo a ti que yo quiero seguir discutiendo esto, estoy harto de que te aparezcas en mis propiedades sin avisar, ya no eres parte de mi vida, supéralo
- No no no Tony, las relaciones son de dos, no puedes decidir por mí en esto – el rubio dio un paso hacia el castaño que no se movió de donde estaba pero si levantó la mano para indicar que el otro no debería acercarse más y terminantemente dijo:
- No estoy decidiendo por ti, estoy decidiendo por mí, yo ya no quiero estar contigo, es tan simple como eso
- No puedo creer que seas tan duro que no puedas perdonar un desliz que tuve y que no significa realmente nada para mí – Steve sonaba frustrado, Tony estaba cerrado cual ostra y lo demostró cuando simplemente contestó:
- Claro… no significa realmente nada para ti y han vivido juntos todo este tiempo
- Tú estás involucrado con ese niño Tony – el rubio reclamo ofendido, es que en verdad si le ofendía que lo hubieran reemplazado por un chiquillo cualquiera sin gracia
- Soy libre de involucrarme con quien yo quiera, como yo quiera, cuando quiera y donde quiera, el niño es libre y yo también, así como tú eres libre para seguir con Barnes o con cualquier otro que te plazca, es un país libre hasta donde sabía y yo no tengo nada que me ate a ti – estas palabras calaron fondo en el capitán y se notó en su rostro, pocas semanas antes de la debacle ellos habían estado hablando de formalizar su relación pero había sido precisamente él mismo el que le estaba dando largas al asunto, si no lo hubiera hecho… nada de esto hubiera pasado, ahora Tony sería su esposo… mierda…
- Yo no quiero a nadie más, te quiero a ti Tony – Steve bajó el volumen de su voz y dio un paso más acercándose al castaño que no impidió sus avances, así que dio otro paso y puso la mano en su cintura, hizo moción para acariciarle la mejilla pero Tony levantó la mano, lo empujó y lo rodeó saliendo de su metro cuadrado de espacio aéreo al tiempo que dijo:
- Eso debiste pensarlo antes de acostarte con Barnes
- ¿Eso es lo que no puedes perdonar?, ¿Qué me acosté con otro?, ¿tú me fuiste completamente fiel?, ¿tengo que recordarte la fiesta de navidad de hace dos años y el incidente con esa puta? – Steve se adelantó y tomó a Tony del brazo, lo volteó para mirarlo a los ojos y lo sujetó con la otra mano también, Tony se soltó del fuerte agarre de su ex y dijo:
- No… el que te acostaras con otro es perdonable porque yo no soy ningún santo, nunca he pretendido serlo tampoco, pero con Barnes no fue sexo una sola vez, tú tienes una relación con él, no es solo sexo casual, hay todo de por medio Steve y realmente insultas mi inteligencia viniendo a asegurarme de que las cosas son diferentes, la vez anterior me dijiste que lo botas si yo así te lo pedía
- Y es la verdad, si tú quieres yo lo termino todo con él y regreso a tu lado – Steve cubrió las distancias hasta Tony pero él no se dejó tocar y dolido contestó:
- Asumo que lo mismo le dijiste a él antes, y ese es el punto… ¿no lo entiendes?
- Tony… está bien… admito que me equivoqué en toda esta situación pero, las cosas pueden volver a ser lo que antes eran, dejarlo todo atrás, no tiremos a la basura estos tres años de nuestras vidas, hemos pasado por tantas cosas, nos hemos apoyado en tantos escenarios, nos hemos sacado adelante mutuamente, ¿vas a abandonar todo por este impase?
- Si… eso es lo que te estoy diciendo, voy a dejarlo todo a un lado por este “impase” como tú lo llamas
- ¿Y vas a seguir adelante con ese niño?, ¿ese niño? – Steve entrecerró los ojos y señaló la puerta por la que Peter había salido hacía unos minutos
- Si… ese niño – Tony sonrió de lado y suspiró, eso le llegó al alma a Steve que dijo:
- Vas a fracasar Tony, tú no sabes cómo ser feliz y mucho menos cómo hacer feliz a alguien, vas a destrozar a ese pobre chiquillo que no tiene idea en el relajo en el que se ha metido al iniciar una relación contigo, lo vas a destrozar y lo desecharás de tu vida como desechas todo lo demás
- ¿Te refieres a ti? – preguntó Tony molesto, por primera vez en toda esta discusión se mostró afectado por las palabras de su ex
- No solo a mí, tú sabes muy bien lo que eres y cómo eres, ese muchachito sin duda está deslumbrado por ti pero aún no te conoce, no sabe de tus demonios, no sabe de lo que eres capaz, por su propio bien deberías dejarlo ahora, luego será muy tarde
- Gracias por los consejos pero por favor vete, tengo cosas que hacer, ahhh… y antes de que lo olvide, deja tu reloj por favor, tu invitación a mi residencia ha sido revocada
- Quédate con todo, qué me importa – Steve se sacó el reloj de la muñeca y se lo lanzó a Tony que solo se hizo a un lado dejando que el reloj se estrelle contra el ventanal, el rubio atravesó el salón hecho una furia y se quedó de pie frente al elevador, Tony lo abrió remotamente y vio impasible como aquel hombre que significó tanto en su vida en el pasado se iba de su departamento, esta vez para no volver…
Peter llegó al departamento de May con una bolsita que tenía dos bagles, su tía había llegado hacía poco más de veinte minutos por lo que aún estaba en la ducha, Peter hizo café y al ella salir él ya estaba paseándose por la casa
- Ohhh Peter… sabía que por algo te extrañaba tanto – dijo la mujer tomando el jarro de café que su sobrino le daba
- ¿Solo por el café? – preguntó divertido
- No… no solo por el café, no me agrada hablar contigo por teléfono únicamente – May abrazó a Peter pero notó algo raro en él por lo que preguntó: - Peter… ¿estás usando loción?
- ¿Loción? – Peter olió sus manos y no olió nada extraño, luego olió el cuello de su buso y si… esa era la loción de Tony
- Ajá… ven acá… - May lo jaló y lo volvió a oler, Peter trató de quitársela de encima pero no lo logró
- No no May… suéltame no… - Peter reía porque su tía no lo soltaba y lo estaba oliendo juguetonamente
- Tienes novio nuevo, o es que Wade vino a verte anoche – preguntó la mujer caminando hasta el counter de la cocina para tomar su bagle
- No no no, nada con Wade
- Porque no creas que no me di cuenta que no dormiste aquí ayer, ¿con quién pasaste la noche Peter?, dale cuéntame… ¿no me tienes confianza?
- No es eso, es solo que es… nuevo… estamos empezando a salir y… todavía no sé cómo van a ir las cosas
- ¿Están empezando a salir y ya te quedas a dormir con él? – preguntó May arqueando una ceja
- Ayyy May, no me preguntes que me da vergüenza – Peter se dejó caer en la silla y escondió la cara tras sus manos
- Si no te pregunto yo, ¿quién te pregunta?, dale cuéntame, ¿va a tu escuela?
- No…
- ¿Dónde lo conociste entonces?
- Bueno… te conté que mi proyecto lo financió las industrias Stark y…
- Ohhhh… ¿trabaja allí?
- No exactamente, es medio complicado May – Peter no sabía cómo explicarse o si quería explicarse o no la verdad
- Ok., ok., ya no te pregunto, cuando me quieras contar me contarás, solo dime… ¿es bueno contigo?
- Hasta ahora sí, es todo muy nuevo y eso es en serio, vamos a ver cómo se dan las cosas
- ¿Y es más sexy que Wade? – eso preguntó May porque Peter le había dicho alguna vez que Wade era el hombre más sexy de la vida y la verdad a ella le parecía guapo por las fotografías que había visto
- Ohhhh May… no tienes una idea… - Peter sonrió y hasta se sonrojó un poquito, eso fue lo que más le extrañó a la castaña que sonrió divertida, los líos amorosos de su sobrino eran siempre entretenidos, Peter no era muy enamoradizo y no le duraban mucho los novios, solo Wade había sobresalido de los demás, habría que ver como avanzaba la relación del nuevo novio de Peter
- Hasta que me lo presentes quiero fotos
- No tengo ninguna la verdad – respondió Peter pensando que se sentiría ridículo pidiéndole una foto a Tony, ohhh… eso puso muchas cosas en perspectiva
- Pues tómale una y me la envías
- Ok., ok., ¿qué quieres hacer antes de que me vaya?, ¿a qué hora es tu turno hoy?
- Entro a las siete, ¿a qué hora sale tu tren?
- A las diez, creo… - Peter no quedó en una hora con Tony para volver a Boston, ya lo llamaría… más tarde… uyyyyyyy
Peter pasó la mañana en casa, May durmió un par de horas pero luego fueron a comer en uno de los restaurantes favoritos de Peter, la tarde cayó y May regresó al hospital dejando a Peter camino al hangar en donde estaba el avión privado de Tony, habían quedado en encontrarse allí a las 8, el muchacho llegó puntualmente y no tuvo que esperar mucho al castaño que llegó quince minutos más tarde
- Hey… pensé que ya no llegabas… - Peter lucía un poco nervioso
- ¿Por qué?, no me tardé tanto, ¿o sí? – Tony miró su reloj y frunció el ceño
- No… no es eso… es… olvídalo, me alegra que ya hayas llegado – el muchacho no sabía si acercarse más o no, las azafatas estaban por ahí, al que no vio fue a Happy, Tony se sacó los anteojos y sonrió al cubrir las distancias que lo separaban del menor para tomarlo en sus brazos y besarlo como los dioses mandan
- Lastimosamente la puntualidad no es una de mis virtudes niño, pero hice lo posible para llegar pronto a ti, ¿disfrutaste el día con tu tía? – el mayor acarició la mejilla del joven y le señaló los sillones en los que habían viajado la vez anterior
- Si… me hizo mucho bien verla, la extraño mucho y a veces me siento solo en el campus, Ned tiene a su familia cerca pero yo… yo no mucho… ohhh gracias… - una de las azafatas se acercó con una charola que tenía toallas calientes, Peter tomó una con una sonrisa al igual que Tony
- Estamos listos para partir cuando usted disponga señor – la muchacha miró a Tony al decir esto, el castaño respondió:
- Podemos hacerlo entonces, estamos completos – respondió Tony haciendo una seña con la mano
- ¿Y Happy?, ¿no viene con nosotros?
- No, Happy viene mañana con el auto, lo que es bueno porque tenemos la cabina para los dos solos, ¿qué te parece? – Tony puso la mano en el muslo de Peter al tiempo que la azafata salía de la cabina y cerraba las cortinas tras de sí
- Me parece genial pero… yo quería hablar primero – Peter tomó la mano de Tony y entrelazaron sus dedos
- Ok., ¿de qué quieres hablar?
- ¿Qué pasó en la mañana?, con Rogers me refiero
- ¿No que no te acordabas su apellido?, eso me encantó por cierto – Tony sonrió y abrochó su cinturón de seguridad, Peter lo imitó y se agarró de los apoyabrazos del asiento, ya estaban despegando así que Tony siguió hablando para distraer a su joven amante, su miedo a volar le parecía dulce y mantenerlo hablando reduciría sus nervios
- Que bueno que te haya gustado, yo no estaba seguro pero… si quieres que te sea muy sincero, no me agradó la forma en la que entró o como te habló a ti o a mí, es un idiota – Tony sonrió a esto, esa mañana Peter no le sonó celoso pero ahora sí, así que respondió:
- Pues sí, pero ya no te preocupes más por él, ya no tiene acceso a mis propiedades, no tendremos que cruzarnos más con él
- ¿En serio?
- Si… en serio
- Ok., las noticias no dijeron las razones de la ruptura de ustedes, pero yo sí quiero saber, sé que no debo preguntar pero… - Peter dijo esto algo cohibido, a la final estaba pidiendo explicaciones de algo que él había notado incomodaba a Tony, pero el mayor se encogió de hombros y dijo:
- No… está bien, tú me contaste toda la historia con Wade y Vanessa, lastimosamente mi caso fue algo parecido a lo que ocurrió contigo, Steve se acostó con su mejor amigo de toda la vida pero no fue solo eso realmente
- ¿Hizo algo más además de engañarte? – a Peter le parecía bastante inverosímil que alguien pudiera engañar a Tony
- Si… ellos viven juntos ahora, tienen una relación que la empezaron mucho antes de que la nuestra terminara, entonces como comprenderás las cosas tenían que acabarse – contestó Tony en un tono bastante impersonal
- Pero él te quiere de vuelta – esta no era pregunta, era afirmación
- Eso es lo que él dice pero… a mí ya no me interesa, eso quedó en el pasado donde pertenece, mi vida es diferente ahora, ¿más tranquilo? – Tony le sonrió al chico que asintió y respiró con un poco más de soltura al ver que la luz del tablero se había apagado, así que zafó su cinturón de seguridad y se estiró de mejor manera
- Si, el tema de los ex es siempre complicado, ¿tienes muchos ex de los que deba preocuparme?
- No… realmente he tenido dos relaciones importantes en mi vida, la una tristemente es Rogers y la otra es Pepper, así que tranquilo
- ¿Pepper era tu novia?
- Me iba a casar con ella la verdad, pero por obvias razones eso no funcionó, terminamos el compromiso pero no lo hicimos de mala manera, ella se quedó trabajando en mis empresas y ahora es mi jefa, ha estado a mi lado más años de los que me gustaría admitir, es a buenas cuentas mi mejor amiga, la que mejor me conoce, la que me ha visto en mis mejores y peores momentos y para su crédito sigue a mi lado
- La quieres mucho – eso tampoco era pregunta pero a Peter le tranquilizó la manera en la que Tony hablaba de Pepper, era familiaridad y cariño lo que se notaba en él, no había amor romántico de por medio y eso siempre era bueno saber
- Si, podría decirse que sí, mira niño… no te voy a mentir, yo soy complicado, tengo muchas manías y fallas de carácter, no soy fácil de tratar peor aún de comprender, tengo pocos amigos reales, Pepper, Rhody, Happy, Bruce, y ahí se acaba mi lista, estoy saliendo de una relación de tres años en la que así me cueste admitirlo si quedé afectado de varias maneras y no… prefiero no hablar de ello porque lo quiero dejar atrás, mi vida es siempre un caos, soy malgenio, adicto al trabajo y usualmente no puedo dormir en las noches
- ¿Me quieres asustar Tony?
- No… solo te digo las cosas como son, yo no soy lo que tú crees que soy – Tony miró hacia la ventana del avión, lo que le había dicho Steve en la mañana le había molestado el día entero, sin proponérselo efectivamente podría destruir a Peter y eso era lo que no quería hacer, Peter era puro a sus ojos, la vida aún no lo había vuelto un sínico como él sí lo era y eso… era otra de las cosas que le gustama mucho de Peter, el menor se acunclilló delante de Tony entre sus piernas, tomó una de sus manos y con la otra le acarició la mejilla para llamar su atención al decir:
- No no no, mírame… nadie es lo que aparenta ser, estamos empezando esto y tú tampoco me conoces muy bien a mí, pero tenemos tiempo para cambiar eso, ¿no lo crees?
- No quiero empezar con el pie izquierdo, nos saltamos muchas etapas de un romance normal
- ¿Quién te dijo a ti que existe un flujograma para un romance?, cada quien tiene la relación que quiere como puede, lo que se aplica para otros no se aplica para nosotros, y lo que pasó antes con quien sea que haya estado contigo, no tiene que volver a pasar ahora que estás conmigo, y viceversa
- Wow… la juventud hace que veas las cosas tan fáciles
- Es que son fáciles, no te estreses antes de hora y no hables de juventud como si tú no fueras joven
- Soy mayor a ti niño
- ¿Y eso qué?
- Ven acá… dame un beso – Tony jaló al menor que se sentó en su regazo con las piernas abiertas a los lados para poder abrazarse y besarse de mejor manera, se unieron en un suave beso que fue profundizándose poco a poco, Peter enredó sus dedos en la negra cabellera mientras el mayor acariciaba con soltura su espalda por dentro de su ropa
- ¿Sensible? – preguntó el mayor mientras besaba el cuello de su amante que había saltado al sentir el toque de los dedos de Tony en sus pezones
- Un poco… espera… así está mejor… - Peter bajó el cierre de su sudadera con capucha y se la quitó quedando solo con una camiseta puesta, Tony lo tomó del cuello e hizo que se agachara para reclamar sus labios otra vez, el menor de zafó los botones de su camisa y le acarició descaradamente el pecho
- ¿Lo has hecho en un avión niño? – preguntó el mayor mientras sus manos se paseaban por las caderas y el trasero de su amante
- No… pero nos pueden ver… - Peter se volteó y vio la cortina cerrada, ellos estaban solos en la cabina pero eso no impedía que las azafatas y demás personal entrara y los encontrara a ellos en los romances
- ¿Y qué si nos ven?
- No no no, que vergüenza
- Nadie va a entrar, concéntrate niño… bésame… eso es… - Tony llamó la atención de Peter y lo besó nuevamente mientras zafaba el botón de sus jeans
Tony accionó el botón para reclinar el asiento y Peter perdió el equilibrio cuando el asiento se movió y cayó de bruces sobre Tony que lo abrazó y ambos rieron con ganas, una de las azafatas abrió un poquito la cortina y vio a la pareja que reía y se acomodaba nuevamente en el asiento entre besos, esta no era ni la primera y tampoco sería la última vez que el señor Stark tuviera sexo en el avión, al capitán Rogers no le agradaba mucho hacerlo pero de vez en cuando cedía a las peticiones del pelinegro, ahora este muchachito parecía más que dispuesto a complacerlo
Tony zafó el botón del pantalón de su amante para poder acariciarlo con propiedad, Peter estaba medio duro en ese punto, el castaño igual zafó los pantalones del mayor y sin mayores demoras metió una mano y empezó a frotarle el miembro
- Señor Parker, sus manos están frías… - Tony hizo lo propio acariciando el miembro del menor que gimió y se contorsionó sobre él
- Lo siento mucho señor Stark
- Te perdono, sácate los pantalones… ahora… - el mayor le palmoteó suavemente el trasero al muchacho que se incorporó y rápidamente se sacó los pantalones, Tony hizo lo mismo, se sacó la camisa también y recibió a su niño que volvió a sentarse en su regazo con las piernas abiertas a los lados, ahora podían besarse y acariciarse sin la molesta ropa de por medio
- ¿Tienes lubricante aquí? – preguntó Peter que estaba ocupado moviendo las caderas haciendo que sus miembros se rosaran juntos uno contra el otro entre sus estómagos
- ¿Con quién crees que hablas niño?, yo lo tengo todo, bésame chiquito… eso es…
- Ohhh Señor Stark…
Peter hizo su cabeza hacia atrás permitiendo que el mayor llenara de besos su cuello, las expertas y callosas manos recorrían su espalda y su trasero, las manos de Tony siempre estaban cálidas al tacto y se sentían muy bien sobre su piel, el más joven gimió y con ganas cuando Tony empezó a chupar y morder suavemente sus pezones mientras le acariciaba los muslos
- Despacio Tony… despacio… - Peter dijo esto en un susurro ahogado
- ¿Te hice daño? – preguntó el mayor que había introducido un dedo en la intimidad del muchacho que se contorsionaba sobre su cuerpo, el dedo de Tony encontró fácilmente su punto sensible pero había entrado algo rápido para su gusto
- No… solo… más despacio… ahhhh Tony… - Peter volvió a gemir porque los movimientos circulares del mayor que buscaba dilatarlo le estaban haciendo ver estrellas
- ¿Así está mejor?
- Si… dioses… - Peter suspiraba y gemía, Tony era muy hábil en lo que hacía y al introducir un segundo dedo, Peter ni siquiera se quejó sino que entró sin mayor resistencia, el mayor amaba la disposición del más joven que gemía y lo abrazaba con pasión, por eso cuando sacó sus dedos, Peter se impulsó para dejar caer su cuerpo sobre la erecta hombría del mayor que se estaba colocando un condón
- Ya cariño… haz lo tuyo… - dijo el mayor ayudando a Peter a encontrar el camino para introducir su duro miembro en su cuerpo, ambos gimieron cuando Peter fue penetrado y en medio de apasionados besos se empezaron a mover juntos en el sillón
Peter estaba apoyado en el pecho del mayor que sostenía sus nalgas ayudándolo a subir y bajar, en esta posición Tony se deleitaba al ver el rostro de su joven amante y sus deliciosas expresiones de placer, podía acariciar su pecho también, no era tan definido como el suyo propio pero Peter tenía lo suyo, su silueta delgada y su tono tan hermoso de piel volvía loco al ingeniero que lo tomaba con pasión, además el menor podía controlar de mejor manera la profundidad de las penetraciones y el ritmo, esto fue alucinante para la pareja que se dedicó a besarse y acariciarse mientras hacían el amor
Peter mordió el cuello del mayor cuando se vino, Tony lo sostuvo en posición hasta con un par de movimientos de cadera más él también se vino, para luego desplomarse en el sillón, ambos tenían la respiración entre cortada y amplias sonrisas de satisfacción
- Bienvenido al club de altura niño – dijo el mayor cuando tuvo el aliento suficiente para moverse en algo
- ¿El qué?
- Así es como le dicen cuando tienes sexo en un avión a muchas millas de altura, bienvenido al club
- Ohhhh… yay… ¿me dan un regalo o algo?
- ¿Quieres algo además del placer de acostarte conmigo? – preguntó Tony divertido y palmoteando el trasero del menor que sonrió y contestó:
- No le diría que no a una cobija, tengo frío
- Ok., ok., ten… ya te traigo una… - el mayor le dio un paquetito de toallitas húmedas al castaño que lo tomó y empezó a asearse, Tony fue desnudo por la cabina y al parecer entró al pequeño baño, cuando salió estaba aseado pero igual seguía desnudo aunque tenía una cobija en sus manos
- Gracias – Peter la tomó pero también tomó su ropa y se empezó a vestir, Tony hizo lo mismo, para luego limpiar el asiento de cualquier residuo que pudo haber quedado, y acomodarse nuevamente atrayendo a Peter que se acurrucó en su pecho y los tapó a ambos por la cobija. Tony lo abrazó y al poco tiempo sintió su respiración acompasada, Peter se había dormido