Capítulo 13.- Castillos de arena
El capitán estaba caminando entre la gente que había venido a la EXPO, él había asistido por muchos años por lo que un sentido de familiaridad se apoderó de él, vio impasible a Tony dar su discurso, el ingeniero se veía regio en su traje negro con corbata de laso, sus palabras eran inspiradoras y eso le recordaron a Steve el amor que Tony sentía hacia la ciencia y al desarrollo de tecnología, como se emocionaba cuando podía encontrar soluciones nuevas a problemas antiguos, esa necesidad que Tony tenía de probarse a sí mismo lo que nunca le pudo probar a su padre era tóxica pero a la vez tan humana
- ¿Tienes hambre?, hay una pizzería espectacular un par de cuadras de aquí, su queso es especial porque ellos mismo lo hacen y el pan de ajo es para morirse – Steve apretó la mano de Bucky que estaba sorprendido por el cambio de actitud de su amante desde esa mañana en la que casi lo terminan todo, Steve se había mostrado mucho más receptivo
- Pizza suena bien
- Vamos entonces – Steve besó a Bucky en los labios y salieron tomados de la mano de la EXPO, Rhody les había aconsejado ir cuando pudieran porque se iban a exponer cosas nuevas en las que Tony había estado trabajando y aún no tenían aplicaciones militares, Bucky pensó que Steve se negaría a ir pero… no, se mostró ambivalente con ese hecho, más bien sugirió ir a comer luego de la EXPO y al parecer estaba cumpliendo sus promesas
En medio de la comida, la puerta del local se abrió y Steve vio a Happy entrar aunque el chofer no lo vio a él, estaba entretenido mirando su teléfono celular, el rubio frunció el ceño porque el chofer de Tony simplemente llegó, pagó, esperó impacientemente por cinco minutos y tomó una pizza para llevar, eso era muy extraño, las tradiciones con respecto a la EXPO eran seriamente respetadas por Tony, no que fuera supersticioso, no…, Tony era más bien sentimental y una de esas tradiciones que cumplía era la pizza de esa particular pizzería, Steve le había sugerido más de una vez comprar la pizza e ir a comerla en otro lado porque ese lugar era acogedor y eso era innegable, pero no estaba a la categoría de lo que estaban acostumbrados, vaya… al parecer el niño logró convencerlo de alterar las tradiciones, ¿sería eso?, no… algo más debía haber pasado, si… algo más…
- ¿Pensativo? – preguntó Bucky volteándose para ver a dónde estaba mirando Steve
- No… la verdad no
- Te quedaste con la pizza medio camino, ¿por qué no sales a ver si el amor de tu vida está en la limosina que está afuera?, digo… desde aquí no puedes hacerlo, ¿o sí? – el tono de Bucky no pudo enmascarar la rabia que lo llenó entero
- ¿De qué estás hablando? – Steve regresó su atención al pelinegro que tomó una servilleta, la pasó delicadamente por sus labios y la lanzó a la mesa al ponerse de pie y decir:
- De todas las pizzerías el Queens tú quisiste venir a esta que la verdad no tiene nada de interesante, y coincidencialmente llega el chofer de Stark a llevar una pizza, dime Steve, ¿qué tan estúpido crees que soy?
- Bucky… ¿en serio crees que yo sabía que Happy iba a venir aquí?
- Sabes… por mucho tiempo te creí absolutamente en todo lo que me decías, creí en ti porque pensé que conservabas la integridad que te caracterizaba, quise creer en tu amor y por eso me aferraba a ello pero… me doy cuenta que eso fue un error, has cambiado diametralmente Steve, no eres la persona que alguna vez conocí, ciertamente no eres de quien me enamoré, ya no te conozco, realmente ya no te conozco
- Buck… - Steve miró al pelinegro y en verdad que sus palabras le habían pegado de la peor manera, él no se veía así, claro que no…
- Me trajiste a este lugar porque sabías que él vendría, o por lo menos esperabas que lo hiciera, aunque no esperabas a su chofer, lo esperabas a él… lo esperabas a él…
- No Buck, yo no esperaba a nadie
- Ok., respóndeme una cosa, ¿me trajiste para tratar de darle celos o para intentar verlo y hablar con él?, no no no, mejor no me respondas porque la verdad no sé qué opción me ofende más – Bucky tomó su chaqueta y se la puso, él no estaba gritando pero no le faltaban ganas, no quería hacer escándalos
- Las cosas no son así Bucky
- Bien… como sea… he llegado a mi límite Steve, con esto me he dado cuenta de dos cosas fundamentales, la primera es que tú no me amas, nunca lo hiciste porque si lo hubieras hecho alguna vez no me humillarías como lo has hecho, y la segunda es que me engañaste en todo lo que tiene que ver con Stark
- Yo nunca te he engañado Bucky, yo te conté todo lo que pasó con él – Steve se llevó una mano al pecho y se mostró ofendido
- Bueno… discúlpame si me niego a permitir que sigas insultando mi inteligencia, el hombre que dio la bienvenida a la EXPO hoy en la noche se vio muy saludable, completamente sobrio y sin ningún instinto suicida, yo lo vi animado, emocionado al hablar de ciencia y de sus proyectos, sus palabras fueron inspiradoras, me pareció egocéntrico si… pero no lo vi al borde de ninguna crisis existencial ni nada por el estilo
- Tú no lo conoces, Tony es buenísimo para fingir, es un alcohólico funcional y por eso puede engañar a todo el mundo y…
- Basta Steve, no quiero seguir hablando de Stark, no quiero hablar de ti y de mí, no quiero ya nada más, lo que fue claro para mí es que esta noche pretendiste utilizarme, eso no haces a alguien que dices amar, y lo más triste de todo es que como te vi tan racional este par de días yo… yo quería darnos una segunda oportunidad pero veo que no hay caso, no voy a seguir arando en el mar así que… espero que te marches de mi casa lo antes posible, vuelve con Stark si es que te recibe claro está…
- Buck… espera… - El rubio se levantó y tomó del brazo a su amante que no se movió y solo lo miró, la mirada en sus ojos desarmó a Steve por completo, Bucky lo miró con dolor y decepción, así que no pudo hacer más que soltarlo y ver como se marchó de la pizzería, esa noche resultó ser un fiasco total, su vida había tomado un giro para peor de la manera más horrible posible
Bucky caminó por muchas horas luego de salir de ese maldito lugar, al inicio la respiración le faltaba y se quería morir, le dolía el pecho y los brazos, le dolía el alma, eso era lo que le estaba pasando, se sentía mal en muchos niveles, se había traicionado a sí mismo al rebajarse a ser su amante y esa era una de las cosas que lo comían por dentro, lo había pensado mucho y en verdad que le gustaría hablar con Stark y aclarar la situación pero… no… eso solo lo empeoraría, no tenía forma de acercarse a él y eso era lo que igual estaba matando a Steve, él tampoco podía acercarse a Stark y por eso esa noche lo fue a esperar en la pizzería, eso hizo que otra idea macabra le martillara el cerebro, Steve no botó a Stark, seguramente las cosas fueron a la inversa, por eso Steve lo seguía buscando porque él estaba seguro que lo seguía buscando, pero bueno… eso ya había dejado de ser su problema.
La noche era fría y en varias cafeterías compró bebidas calientes y seguía caminando, no quería detenerse porque si lo hacía su mundo se iba a derrumbar, no quería parar, quería escapar pero no podía, él tenía obligaciones que cumplir y responder, debía dejar de atormentarse, él odiaba la pose de víctima, en todo esto él no era inocente pero ya no debía martirizarse por eso, debía hacerle caso a Sam, si… eso era lo que tenía que hacer, y hablando de Sam…
Un golpeteo en la puerta sonó y despertó a Sam que buscó un buso y se lo puso antes de caminar descalzo por la estancia, vio por el ojo de pescado de la puerta y enseguida la abrió
- Es extremadamente temprano o extremadamente tarde, ¿cuál de las dos? – preguntó el dueño de casa abriendo la puerta para dejar entrar a su helado compañero de armas
- Yo creo que extremadamente tarde, no tenía a dónde ir y pensé en ti, ¿está eso bien? – preguntó Bucky, su nariz estaba roja del frío que tenía
- Claro que está bien, ven… tenemos que hacerte entrar en calor
- ¿Y qué sugieres?
- Un baño caliente primero, la frazada que tejió mi abuelita después, un chocolate caliente con un poco de picante, ven… no queremos que mueras de hipotermia – el dueño de casa frotó sus manos en los brazos de su invitado para empezar con la tarea de hacerle entrar en calor
- Gracias Sam, eres muy bueno conmigo – respondió Bucky caminando lentamente por el acogedor departamento de Sam, que sonrió levemente al responder:
- Somos amigos Buck
- ¿Amigos?, ¿dónde quedó todo lo que me dijiste en el portaviones? – Bucky se quedó estático en medio del pasillo, Sam sonrió y simplemente contestó:
- Eso queda para un día en donde no necesites un amigo, hoy lo que necesitas es un amigo, un lugar donde dormir y un hombro en el que apoyarte, ya cuando necesites un amante también serás bien recibido pero… vamos despacio que tenemos prisa
- Estás loco Sam
- Eso es lo que mi abuelita solía decir
***
Tony llegó al hotel a las 10 de la noche, el programa de inauguración estaba previsto hasta la media noche pero él nunca se quedaba hasta el final, usualmente daba las palabras de inicio, iba al coctel de bienvenida, iba a comer pizza y a casa, en teoría debía dormir temprano pero ese nunca era el caso, y menos ahora que estaba en una suite de hotel. La pizza llegó pero el mayor no la comió, sino que se desnudó y se puso una bata, miró su reloj y suspiró, 10:30, caminó un poco más por la habitación, encendió el televisor y surfeó por los canales sin encontrar nada interesante que ver y estaba a punto de apagarlo todo cuando la puerta de su habitación se abrió y Peter entró, el muchacho cerró la puerta y prácticamente se lanzó a los brazos del mayor que lo abrazó de vuelta besándolo en los labios con pasión
- Siento la… demora… May… no se dormía…
- Por eso arreglé… cuartos separados…
- Si pero… ella estaba en el mío… aprovechando el tiempo para hablar… ya sabes cómo es… - a Peter no le parecía prudente contarle a Tony sobre la plática de corazón a corazón que tuvo con May considerando lo que le había hecho prometer
- Lo importante es que ya estás aquí… ven… vamos a bañarnos… esta habitación tiene un yacusi
- ¿Más grande que el de tu pent-house? – Peter si estaba angustiado pero el estar entre los brazos de su amante le mejoraba el humor en un 100%
- No… pero es bastante bueno… ¿cómo viste la inauguración? – el mayor caminó hacia el cuarto de baño y abrió las llaves de agua hasta temperarla, Peter se empezó a desnudar hasta que quedó solamente con los boxers puestos
- Estuvo genial, me gustó tu discurso inaugural, fue corto, conciso y muy pasional, los fuegos artificiales estuvieron espectaculares, el coctel igual, sabes que escuché a los técnicos hablar del destino de los proyectos y decían que es muy probable que tengamos ofertas por nuestro equipo, que eso siempre es emocionante
- Si… es lo más probable, al promover nuestros equipos y aplicaciones tecnológicas siempre tenemos compradores, lo óptimo es maximizar nuestra distribución o en su defecto lo masificamos por nosotros mismos, eso depende de nuestros estudios de mercado y demás cosas aburridas que no necesariamente te interesan saber – Tony se encogió de hombros al decir esto, Peter si se interesaba por los negocios pero le gustaba saber la parte técnica, la económica no le llamaba mucho la atención, esa era una de las cosas que Tony amaba de él, Peter no tenía concepto del dinero y no le interesaba su fortuna
- Yo pensé que no podríamos venderle nuestro equipo a nadie más, como tú financiaste nuestro proyecto, ¿no significa eso que eres propietario de los derechos del equipo?
- Porcentualmente sí, ustedes son copropietarios de los derechos pero la mayor parte accionaria es mía por decirlo de alguna manera, por eso el que decide el destino de su investigación soy yo, siempre puedo venderlo, archivarlo, desaparecerlo o producirlo en masa, todo depende cariño… todo depende…
- ¿De qué?
- De los usos y aplicaciones que se puedan obtener de nuestros inventos, mira… hace tiempo uno de mis ingenieros desarrolló un aparato espectacular que paraliza a tu atacante y fue diseñado para autodefensa, lo logramos hacer del tamaño de un pulsador, lo puedes poner como adorno en tu llavero y los audífonos pueden adaptarse a los audífonos normales que usas al escuchar música mientras caminas, entonces al presionar el botón, todo ser viviente en un radio de un metro cuadrado de espacio aéreo se quedaría completamente paralizado, consciente, capaz de sentir dolor pero sin poder moverse
- Eso suena genial – Peter sonrió pero Tony hizo una mueca con pesadez al responder:
- Suena genial porque fue pensado en proteger, fue creado como un escudo pero… un escudo puede ser usado como un arma de ataque
- No entiendo…
- Este dispositivo fue creado pensando en proteger al desvalido, nuestro técnico tenía en mente a una muchacha que camine sola en la oscuridad de un parqueadero, débil, vulnerable, tú entiendes, pero… ¿qué crees que pasaría si es el atacante el que compra nuestro invento en la tienda de aparatos electrónicos más cercana a su casa?
- Ohhhh… - Peter entendió la expresión de Tony
- Entonces lo archivamos, el técnico que diseñó el aparato, al hacerlo pensó en su hermana que fue asesinada en un callejón de Brooklyn, y cuando yo le expliqué esto a él, se horrorizó, la ciencia es pura, y los que amamos la ciencia lo entendemos así, pero tenemos que estar conscientes de los alcances de lo que creamos, la mayoría de cosas que se desarrollan desde una perspectiva específica terminan siendo violados y transformados en armas, ¿entiendes ahora?
- ¿Por eso cerraste la división de armas de tus Industrias? – preguntó Peter, este tema había causado furor en noticias y redes sociales hacía algunos años
- Si, por eso la cerré, ahora ya no fabricamos armas, desarrollamos tecnología variada aplicable en un espectro mucho más amplio, nos ha costado sangre, sudor y lágrimas volver a tener los niveles de ingresos que teníamos hace años pero… en teoría debería poder dormir mejor, no duermo pero no es esta razón, ¿me explico?
- Si, si te explicas, aunque… es una pena la verdad
- ¿Qué cosa?
- Que la naturaleza humana sea violenta, que sea tan fácil destruir y tan complejo construir
- Pues sí, pero ahora no pensemos en eso… pensemos en la noche que tenemos por delante, tengo pizza, no me digas que ya comiste – Tony tomó la mano de Peter y lo jaló haciendo que se siente en sus piernas, él estaba sentado en el filito del yacusi con una mano en el agua buscando temperarla
- No he comido nada aún y me muero de hambre – el menor rodeó el cuello de su amante con los brazos y dijo esto con una sonrisa pícara
- Mejor, baño primero, comida después
- Trato hecho
Tony y Peter disfrutaron el yacusi en más sentidos que en uno, el mayor tomaba al dulce muchacho que compartía sus noches y su cama, que lo escuchaba y no lo juzgaba, al sexy muchacho que ahora se estaba apoyando en sus hombros mientras movía sus caderas de arriba hacia abajo llenándolos a ambos de placer, ellos habían tenido sexo en la bañera del departamento de Boston pero esta noche estaban inspirados aparentemente porque lo estaban disfrutando como nunca, Tony estrechaba el cuerpo de Peter que se contraía al momento que su orgasmo lo atravesaba entero, esto era siempre delicioso y Tony abrazó a su joven amante cuando se vino y se desplomó sobre su cuerpo
- Vuelve a mi… - susurró Tony besando el cuello de Peter y acariciando su espalda
- Nunca me fui, estoy aquí… - contestó Peter con un susurró apenas moviéndose, él estaba muy cómodo hundido en el agua caliente sentado en el regazo de Tony
- No… si te vas, te pierdes por unos momentos cuando estas por venirte o cuando te vienes, es muy sexy la verdad, es como si nada más existiera en la vida, solo tú y yo…
- ¿Y no es así? – Peter se incorporó un poco y besó a Tony en los labios, el mayor le acarició la mejilla, asintió y dijo:
- Claro que es así, ¿no tienes hambre?, podemos calentar la pizza
- No eres muy amante de las pizzas, ¿te dio antojo? – preguntó el muchacho con curiosidad, Tony amaba las hamburguesas con queso mas no la pizza, y esta era la segunda vez en la noche que insistía en comerla
- Algo así, es una pizza especial – respondió el mayor con un susurro
- ¿Por qué?
- Porque… hasta cuando tuve siete años viví con mis padres y tengo recuerdos vagos sobre esa pizzería y la Stark EXPO, de lo que me han contado mi padre solía llevarnos a comer allí luego de la inauguración, he visto fotos y en verdad que algo de eso recuerdo, por eso cuando me hice cargo de la empresa y continué con la Stark EXPO, hice costumbre ir a comer pizza en esa pizzería específica, a decir verdad este es el primer año que la mando a pedir y no voy directamente allá
- ¿Por qué no fuiste?
- Quería comer contigo y sabía que se te dificultaría salir entonces… traje la pizza, no quería perder la tradición pero tampoco quería comer solo, a veces hay que hacer compromisos niño
- Ohhh… bueno, tenemos que aprovecharla entonces el próximo año si podremos ir a la pizzería
- ¿Ah sí?
- Claro que sí, el año que viene a estas alturas ya me habré graduado, espero tener un trabajo de preferencia en esta ciudad, aunque a May le gustaría que viva con ella en Queens eternamente
- ¿Y la maestría que querías estudiar?
- Hay muchas universidades aquí, bien puedo estudiar en una de ellas, con eso puedo trabajar, estudiar, salir contigo, podemos hacerlo todo, ¿qué tal suena?
- Suena genial, pero por ahora tengo hambre, vamos…
Peter durmió esa noche en los brazos de Tony que si logró conciliar el sueño pero no durmió la noche entera, esta era una de esas noches en las que le hubiera gustado estar en su propio pent-house para poder bajar a su laboratorio y trabajar, le gustaba sentir la calidez del cuerpo de Peter a su lado pero… sus problemas de insomnio no podrían curarse mágicamente, así que contempló a su niño dormir por lo que parecieron horas, hasta que la alarma en el teléfono de Peter sonó a las 5:30 de la mañana
- Dioses… - Peter se movió en la cama y apagó la alarma pesadamente
- ¿A dónde vas a las 5:30? – preguntó el ingeniero abriendo los ojos mirando la hora pero sin moverse en lo más mínimo
- A correr con May, luego vamos a ir a desayunar, ¿vas a ir a la explanada hoy? – Peter se volteó en la cama y acarició la mejilla del mayor que sin abrir los ojos contestó:
- Si, al medio día más o menos
- Ok., nos vemos ahí, Tony… - Peter lucía algo inseguro e incómodo, Tony no abrió los ojos y ni siquiera enunció palabras, solo hizo un sonido a manera de pregunta:
- ¿Mmmm?
- Nada… nos vemos al medio día, bye – Peter se agachó y le dio un piquito en los labios, el mayor suspiró sin abrir los ojos y abrazó la almohada que hasta ese momento Peter había estado ocupando, el muchacho se vistió y con todo el sigilo del caso salió de la habitación, bajó por el ascensor a su piso y entró a su propio cuarto, se cambió de ropa, destendió la cama y espero que May lo viniera a buscar, luego con cara de sueño salió a correr
Tony se levantó, se duchó, se vistió y fue a hacer una ronda de entrevistas, tuvo una presentación en un programa de televisión matutino por lo que a eso de las 10 de la mañana llegó a la explanada de la EXPO, tuvo dos reuniones con potenciales inversionistas y eso lo mantuvo bastante ocupado, era cierto que Pepper era la CEO de las Industrias Stark pero él seguía siendo la cara de las empresas, y además siempre inspiraba confianza hablar con el director creativo de todo, y ese era Tony
Peter pasó sumamente ocupado la mañana, esta exposición fue mucho más de lo que pudo haber pensado, hizo las demostraciones de su equipo varias veces ante los varios espectadores que se acercaron a inspeccionarlo, el jefe de piso estaba muy complacido con ello porque el equipo de los muchachos estaba despertando el interés de varias firmas de manufactura y farmacéuticas, Ned y Peter estaban contentos porque no pensaron que las cosas se darían así, pero la sonrisa se le fue del rostro cuando vio al ex de Tony caminando despreocupadamente mirándolo todo
- Parker, el famoso Peter Parker, no te sorprendas mucho muchacho porque yo lo sé todo lo que hay que saber sobre ti, por si acaso sigas sin acordarte mi apellido déjame recordártelo, es Rogers pero puedes llamarme Capitán
- Mejor no, ¿necesita algo? – Peter se cruzó de brazos y miró tranquilamente al rubio, estaba fingiendo calma así su corazón estuviera latiendo con violencia, las veces pasadas habían estado otras personas, esta vez estaba prácticamente solo porque Ned no era cuenta para una pelea, diablos… ¿por qué tenía este tipo que ser tan alto y musculoso?, indudablemente le podría romper el cuello sin ponerle mucho empeño
- No… solo vine a ver tu pequeño proyecto, ya he visto cosas similares antes, nada innovador si me lo preguntas
- Es una suerte que no te lo esté preguntando
- Vaya… veo que el sarcasmo de Tony es contagioso
- Solo un poco, ¿quieres ver una demostración de nuestro equipo?, la podemos hacer con gusto, no sé hasta qué punto te sea útil pero… siempre lo podemos hacer
- No es necesario, no es al equipo al que vine a ver – Steve miró de arriba abajo al jovencito, su objetivo era hacer sentir mal a Peter y lo estaba consiguiendo porque la mirada de Steve era analítica y dura, desdén se podía apreciar claramente
- Puedes tomarme una foto si eso te hace sentir mejor – dijo Peter molesto, Ned alzó la mirada y casi se atraganta, él había estado calibrando el equipo y no se había dado cuenta que el capitán Rogers se había acercado a ellos y por lo tenso del ambiente fue obvio para Ned que él sabía de la relación de Peter con el señor Stark
- No estás tan mal para ser un muchachito salido de algún arrabal y venido a más, sigo sin verte la gracia y por más que te miro… no lo entiendo, a Tony siempre le gustaron las muchachas delgadas, bajitas y bellas, siempre se ha rodeado de la compañía de actrices y modelos famosas, pudiera entender si fueras alguna estrella de algún deporte o algo de eso pero no eres más que un ratón de laboratorio, yo creo que… le atinaste a bajito, es todo lo que puedo decir – el tono de Steve era por demás displicente, eso le llegó a Peter a la médula porque sin poder contenerse respondió:
- Tú no le atinaste a nada, y henos aquí
- Pobre muchachito iluso, ¿crees que conoces en algo a Tony?, ¿crees que te toma en serio en lo más mínimo?, tú aún no entiendes tu papel en todo esto – el tono de Steve era despectivo, no estaba levantando la voz porque no necesariamente quería atraer atención
- ¿Ah sí?, ¿y cuál es mi papel en todo esto según tú? – Peter se cruzó de brazos al preguntar esto y no bajó la mirada, estaba intimidado pero no quería dejarlo notar
- Tú eres su pasatiempo, su juguete sexual, eres insignificante en su vida porque él no podría estar satisfecho con alguien como tú, muchachitos como tú han pasado muchos por su cama así que no te creas especial, él necesita un verdadero hombre entre las piernas, no un sumiso que le dé gusto en todo lo que a él se le ocurra porque pronto se aburrirá si lo haces, él jugará contigo hasta destrozarte y luego te botará de su vida
- ¿Cómo te botó a ti?
- Ahí es donde te equivocas, él no me botó, nos dimos un tiempo y créeme… cuando se canse de jugar contigo volverá a mis brazos y a mi cama porque así él trate de ocultarlo y de convencerte de lo contrario, el hombre de la vida de Tony soy yo, él es mío y siempre lo será, es orgulloso y por eso estamos en este predicamento pero lo nuestro se resolverá como todo se ha resuelto antes, él me ama y siempre me amará, así que… por lo pronto disfruta unas semanas más y deja que siga pagándote por tener sexo con él, si algo se puede decir de Tony es que es generoso pero toma en cuenta que lo que te da no constituyen ni migajas de su real fortuna
- ¿Estás loco?, Tony no me paga por tener sexo con él – Peter sonó sumamente ofendido
- ¿Y cómo llamas a esto?, ¿y a tu ropa cara?, ¿y a ese reloj de diseñador?, ¿y a todas las demás cosas que seguramente te compró? – Steve primero señalo el equipo de Peter, y luego lo señaló a él completo
- Yo no le he pedido que me compre nada – contestó el castaño algo incómodo, él no quería dejarse ver incomodo pero así era como se sentía, las palabras de Steve si eran pesadas
- Eso es inconsecuente, es pago por sexo y caíste redondito en eso
- ¿Hablas por experiencia propia?
- ¿Te crees muy listo niño? – Steve tomó a Peter de las solapas de su blanca bata y lo zarandeó en el aire, el muchacho simplemente dijo:
- Por lo menos soy más listo que tú – Peter lo pateó en la canilla lo que hizo que el mayor lo soltara, Peter cayó al piso, trató de incorporarse pero no lo logró, solo sintió que lo levantaban nuevamente de su bata y lo arrojaban con fuerza por los aires, sintió como se golpeó con violencia contra uno de los pilares y escuchó un sonoro crack, luego todo fue oscuridad…