Capítulo 17.- Decisiones…
Peter subía en el elevador de la torre Stark de Manhattan acompañado de Happy y Rhody, el vuelo había sido algo silencioso y bastante tenso, los mayores le dijeron lo que habían visto de Tony en esas semanas, Peter no lo podía creer, el solo pensar que un hombre que parecía tan fuerte e íntegro como Tony Stark se hubiera dejado vencer por sus adicciones le parecía inverosímil, pero fue ahí que Happy le aclaró un poco el panorama cuando le habló de la difícil relación que tuvo siempre Tony con su padre, de lo hambriento de cariño que Tony siempre fue y que su máscara de autosuficiencia cubría extraordinariamente, le dijo también que Tony podría parecer fío pero que en realidad no era así, que cuando él amaba lo hacía sin reservas, y que él estaba convencido de que Tony amaba a Peter, mucho más de lo que pudo haber amado a Steve, con todo esto el muchacho estaba nervioso y su corazón latía con fuerza, no solo porque estaba camino a ver a Tony sino porque el panorama que le habían pintado no era nada alentador
La campanilla del elevador sonó y las puertas se abrieron dando paso a una lúgubre estancia, el sol aún brillaba afuera pero todo estaba en penumbra, Tony había cerrado las persianas aparentemente, había un olor nada agradable en el pent-house que no era muy fuerte pero estaba definitivamente presente, Peter no tuvo que buscar mucho para ver a Tony que estaba sentado en el suelo apoyado en uno de los muebles de la sala, tenía varias botellas vacías junto a él y una a medias en la mano, estaba dormido, no estaba usando zapatos, ni camisa, solo pantalones flojos de pijama y el cabello revuelto, su barba no estaba cuidada, Tony parecía 10 años mayor a lo que realmente era
- Dioses Tony… - Peter se acunclilló frente a él y le acarició suavemente la mejilla, el pelinegro no se movió en lo más mínimo
- ¿Lo llevamos arriba? – preguntó Rhody meneando la cabeza, esta no era una visión nueva pero si era algo que esperó no volver a ver jamás
- Yo creo que sí, de paso lo bañamos – dijo Happy sacándose el saco
- ¿Necesitan ayuda con eso? – preguntó Peter mirando como Hapy y Rhody cargaron en peso a Tony lo llevaban por la estancia
- Yo creo que no… enseguida bajamos – contestó Rhody caminando de retro con Tony a cuestas
Peter se quedó de pie en la sala y miró el desastre en la mesita, así que recogió los vasos que estaban por ahí y los llevó al lavandín de la cocina, fue a los ventanales y abrió las persianas, programó el sistema de aireación del pent-house y en poco tiempo se sintió fresco una vez más, recogió las botellas vacías y las llevó al tacho de la basura, realmente se sorprendió por la cantidad de botellas que encontró por el estudio, la terracita, la alacena, la cocina, la sala… en fin… habían botellas vacías por todas partes, tomó la botella que estaba a medias en la mesita de centro y la iba a devolver a la licorera pero lo pensó mejor, caminó hasta el lavandín y la abrió
- No la botes, es un coñac carísimo – Happy venía bajando las escaleras y dijo esto al aire aparentemente porque Peter hizo caso omiso y vació el contenido de la botella en el lavandín, el chofer dijo: - Tony se va a enojar
- No me importa si se enoja o no, ¿ves la cantidad de botellas?, ¿quería matarse acaso?, ¿una sola persona puede beber tanto? – Peter estaba indignado, Happy solo suspiró y dijo:
- No es la primera vez que lo hace, esperemos que esta vez sea la última
- ¿Está loco?
- Si… si lo está, pero así es él… llamé al servicio de limpieza no tienes que hacer lo que estás haciendo, ya lo bañamos y lo acostamos, no creo que reviva en algunas horas porque en verdad que está ebrio, mañana tal vez despierte
- Ok., yo me voy a quedar aquí por si despierta en la noche
- Gracias Peter… en serio gracias – Happy estrechó su mano y lo miró como nunca lo había hecho, Peter tenía la impresión de que no necesariamente le agradaba a Happy, hasta esta tarde que pudo ver el cambio en él
- En serio te preocupas por él, ¿verdad? – preguntó el muchacho
- Claro que si, no es solo mi jefe, es mi amigo… mi familia… la única que tengo, él es un hombre brillante que a veces no toma las mejores decisiones, lo he visto rodearse de personas que no le convienen porque solamente quieren cosas de él, no lo quieren a él, sé que el caso contigo es diferente – Happy contestó mirando a Peter a los ojos, el muchacho sonrió al decir:
- No te preocupes que yo lo cuido, ahora… si no quieres que vacíe el resto de esas botellas, necesito que te las lleves de aquí, no puede haber licor en todo el pent-house cuando despierte – dijo Peter señalando la licorera que aún estaba a medias, Happy asintió y luego con la ayuda de Rhody buscaron por la casa entera y sacaron muchas botellas de whisky, vino, coñac y tequila, Rhody se las llevó y casi a las diez de la noche Peter se quedó completamente solo, las muchachas de la limpieza hicieron su trabajo y ahora el pent-house entero olía a fresco limón, como antes… como antes…
Peter entró a la habitación de Tony y lo vio acurrucado de ladito, abrazaba una almohada y no necesariamente se movía, solo su acompasada respiración era lo que rompía el silencio, el muchacho abrió el armario y chequeó los cajones, fue por el baño, por todos los lugares en los que se le ocurrió que Tony podría tener botellas escondidas y encontró una bajo la cama, estaba media vacía… con santa paciencia la tomo y la vació en el lavandín del baño, suspiró al mirarse al espejo y al salir vio a Tony voltearse dormido, Peter lo acomodó de lado nuevamente y se sentó en el sillón de la habitación, se tapó con una cobija y lo miró dormir por varias horas
Tony despertó y no sabía en dónde estaba, su cuarto estaba a oscuras pero una luz le brillaba de alguna parte, trató de moverse y ahí fue cuando se dio cuenta que estaba en una cama, ¿cómo llegó a su cuarto?, ¿era este su cuarto?, en este punto no sabía y no le importaba, buscó a su alrededor por la botella que estaba seguro tenía en sus manos pero no la encontró, lanzó una de las almohadas al suelo y sin poder evitarlo él también cayó por falla de cálculo, estaba enredado en las sábanas aparentemente
- Hey… tranquilo… deja de moverte y enfócate, ¿me puedes ver? – Peter se incorporó de un salto cuando Tony cayó al suelo
- Peter… no no no… eso es cruel… tú no estás aquí… - dijo Tony arrastrando las palabras y cerrando los ojos nuevamente
- Si estoy aquí, ven incorpórate porque no te puedo cargar – Peter jaló a Tony que no necesariamente estaba poniendo de su parte y no se estaba moviendo
- Hueles divino… como él olía… lo extraño mucho sabes… pero se fue… me dejó por un muchachito del MIT, yo me gradué en el MIT, ¿te lo conté alguna vez? – Tony no estaba enfocando la mirada y Peter no estaba seguro de si lo reconocía o no
- Si me lo contaste… ven… apóyate en mi… vamos a la cama…
- No… no quiero ir a la cama contigo, solo lo quiero a él… Peter… solo lo quiero a él… nunca se lo prometí, él no me hizo prometerlo pero no es necesario, no podría tocar a nadie más, Peter… mi Peter… solo lo quiero a él… solo a él…
- ¿En serio? – Peter arqueó una ceja y meneó la cabeza con un toque de incredulidad, él sabía perfectamente de la reputación de Tony y escucharle decir lo que estaba diciendo, lo desubicó, no había otro término
- No te ofendas pero… no quiero otro… él es todo… es perfecto… es un ángel… Peter… mi Peter…
- Vaya… vamos Tony ayúdame… - Peter estaba intentando jalar al mayor para subirlo a la cama pero Tony seguía botado en el suelo sin moverse
- Me recuerdas a él… no podría acostarme contigo… pero… ¿me abrazarías?, Peter solía abrazarme y acariciarme el cabello, ¿tú lo harías?
- No… estás borracho…
- Si es cierto… estoy borracho pero me recuerdas a él, solo un poquito, su rostro es difuso… quiero olvidarlo… quiero olvidarlo pero no puedo… Peter es tan hermoso y lo necesito, lo quiero a mi lado, me hace mucha falta, extraño su sonrisa pero él me dejó por un muchachito del MIT, yo soy muy viejo para él… él es joven como tú, puro, limpio, yo soy un cínico y no lo merezco, soy un estúpido porque nunca se lo dije, ¿se lo dirías por mí? – Tony jaló a Peter de su buso y le dijo todo esto con desesperación, sus ojos no estaban enfocados, claramente no sabía con quién estaba hablando
- Yo le digo todo lo que quieras, eso es… sube… así está mejor… - Tony se impulsó torpemente y se trepó a la cama, quedó acostado boca abajo y no se movió más, Peter hizo todo lo posible por acomodarlo de mejor manera en la mitad de la cama pero Tony era muy pesado, lo rodeó de almohadas y miró el reloj, eran las cuatro de la mañana pero por lo menos Tony se había vuelto a dormir
Cuando Peter se despertó ya había aclarado el día, Tony seguía durmiendo así que el muchacho se levantó y fue a la cocina, buscó y gracias a todos los dioses encontró café, echó a andar la máquina y en eso estaba entretenido cuando escuchó ruidos en la planta alta, un improperio, un insulto, un golpe sordo porque seguramente Tony se había caído, Peter iba a ir a verlo pero decidió que no, esperaba que ya se le hubiera bajado un poco la borrachera, esa no fue una visión nada alentadora la verdad
- Apaga esa máquina infernal Happy, el solo aroma del café me da nauseas, ¿dónde está mi botella de coñac?, ¿y la de whisky que tenía acá arriba?, cierra esas persianas por favor… es en serio… - Tony venía por el pasillo del piso de arriba y se estaba sosteniendo de la pared mientras caminaba, igual estaba descalzo y vestía solo pantalones de pijama, venía cubriéndose los ojos con una mano, la luz le molestaba
- Happy aún no viene, no es tan temprano pero tampoco tan tarde, son las nueve – dijo Peter con una taza de café en las manos, Tony se quedó en medio de la escalera y trató de ver pero no lo logró así que el muchacho cerró parcialmente las persianas para que Tony pudiera enfocarse mejor, y cuando lo hizo dijo simplemente:
- Peter… yo… te soné… - dijo Tony, sus recuerdos de las últimas semanas estaban completamente fraccionados, no había tenido muchos momentos sobrios, y en muchas ocasiones estaba convencido de que había visto o hablado con Peter, pero no… nada de eso fue real hasta esta mañana que estaba crudo y el muchacho en verdad estaba allí
- No me soñaste, ayer vine con Happy y Rhody, limpiamos un poco todo, redecoramos aunque no… la redecoración la hice solo yo – el muchacho señaló el bar y el pelinegro vio con horror como sus botellas de colección ya no estaban
- Esas botellas cuestan más que toda tu beca de la universidad – Tony acabó de bajar las gradas y caminó lentamente por el salón, Peter consideró ir hasta allá y ayudarlo a caminar pero decidió no hacerlo, Tony era demasiado orgulloso para permitirlo
- Si bueno… Happy no me dejó botarlas, están guardadas, ¿café? – Peter sirvió otra taza y se la acercó a Tony que se sentó en el sillón, tomó la taza y miró a Peter sentarse en uno de los sillones opuesto a él
- ¿Qué haces aquí Peter?
- Ohhh… y yo que pensé que te alegrarías de verme – Peter sonrió y se levantó para ir hasta la cocina, abrió los gabinetes hasta que encontró lo que estaba buscando, regresó y le dio un par de pastillas a Tony que las vio en la palma de su mano, eran aspirinas, Peter dijo: - May dice que no hay nada mejor para la resaca, ¿cómo te sientes?
- Fantástico… - respondió Tony con todo el sarcasmo del que fue capaz
- ¿Que más puedes esperar si te bebiste la vida este último tiempo?
- ¿Viniste a burlarte de mi niño? – Tony estaba mal genio porque necesitaba un trago con urgencia y se le partía la cabeza de dolor
- Claro que no, vine porque quería verte
- ¿Y quién te dijo que yo quería verte a ti?, me devolviste el reloj y ni siquiera me dejaste explicarte las cosas, me hiciste a un lado y ni siquiera me escuchaste, ¿qué te hace pensar que quiero escucharte a ti o que quiero que me escuches?, ¿quién te dijo que yo quería verte? – Tony sonó algo agresivo aunque no fuera su intención, él estaba mal dormido, le dolía todo, le molestaba la luz pero más que nada el hecho de que Peter lo estuviera viendo en este estado deplorable… eso es lo que le estaba comiendo el alma, él sabía cómo lucía y no… nada que ver con la imagen que hasta esos momentos Peter tenía de él, diablos…
- Hablas dormido Tony… ¿alguna vez te lo dije? – preguntó Peter con una ligera sonrisa sin hacer caso del reclamo del mayor
- No… nadie me lo había dicho – respondió Tony estirándose y tomando una manta que estaba doblada al pie del sillón y envolviéndose en ella
- Es que duermes muy poco pero… yo también… por eso te he escuchado hablar dormido muchas veces y ha sido algo perturbador si quieres que sea muy sincero contigo – dijo Peter y tomó su taza de café, su tono era sereno
- Ok., hablo dormido, ¿te he dado las claves de mis cuentas bancarias? – preguntó Tony animándose a tomarse las pastillas, las pasó con el café que estaba caliente y casi se muere, le cayó como bomba, odiaba estar crudo, necesitaba un trago con urgencia
- Ohhhh no, eso hubiera sido divertido pero no… desde que empezamos a dormir juntos, noche tras noche, realmente por semanas te escuché llamarlo a él en tus sueños – Peter levantó la mirada y sus ojos se encontraron con los de Tony, al mayor se le estrujó el corazón, eso no lo sabía, Peter no se lo había dicho hasta ahora, la mirada del muchacho era muy significativa
- Peter no…
- Tú me dijiste que no hiciera caso en lo que sea que Steve me haya dicho, y me hubiera encantado creerlo pero… ¿cómo creerlo si yo te escuchaba llamarlo en sueños constantemente?, ¿cómo en serio creer que ya no lo querías si yo te escuchaba decirle muchas cosas mientras dormías?
- ¿Qué te dijo Steve en la EXPO? – preguntó Tony, eso se lo había preguntado muchas veces estas últimas semanas
- Me dijo muchas cosas que no valen la pena repetir, no es importante… en eso tenías razón a la final
- Ok., pero entonces, ¿por qué no me dejaste explicarte?, ¿por qué me apartaste así de tu lado?
- Porque pensé que no me querías, que yo era solo tu pasatiempo, que me botarías en cuanto Steve tronara los dedos y te dijera que quiere volver contigo
- Ok., esa es una de las cosas más estúpidas que te he escuchado decir Peter – Tony se frotó la cara con las manos y suspiró, quería caminar por la sala pero sentía sus piernas como si fueran de gelatina o algo peor
- No me puedes culpar por creerlo, Steve es todo lo que yo no soy
- Pues si, gracias a todos los dioses – Tony dijo esto y bebió un poco más de su café, le supo horrible, todo le sabía horrible cuando estaba crudo
- Eso no fue lo que yo pensé, tienes que entender Tony que… ok… yo soy un nerd, siempre lo he sido, no he tenido suerte en las relaciones porque siempre me ven la cara de tonto, asumo que es porque tengo la cara de tonto entonces… ¿cómo alguien como tú se va a fijar en alguien como yo si no es solo para jugar?, tomando en cuenta a tu ex – cuando dijo esto Peter hizo señas con las manos, indicando que Steve era mucho más alto y robusto que él, Tony se apoyó completamente en el respaldar del sillón y bufó al decir:
- Steve no tiene nada que ver con nosotros… no sé cómo decírtelo, aunque la vez anterior no me dejaste hacerlo
- La vez anterior estaba dolido porque los escuché hablar y lo que en verdad me llegó es que tú no defendiste nuestra relación ante él, no le dijiste nada… nada… - Peter dijo esto con voz baja, al recordar la expresión de Peter cuando Tony lo vio de pie en el pasillo, se le estrujó el corazón otra vez, Peter lució tan dolido e indefenso, esa era la expresión en el rostro de Peter que perseguía a Tony en todas sus borracheras, eso era lo que quería borrar de su mente y no podía, y eso eventualmente lo enfurecía
- Entiende niño, no tengo por qué explicarme ante nadie, mucho menos ante él – dijo Tony algo molesto, él nunca entendió las dudas de Peter, ahora lo estaba comprendiendo
- Eso es lo que dices pero mira las cosas desde mi perspectiva solo por un minuto, si yo tuviera un ex todo sexy, varonil y guapísimo, ¿no te sentirías un poco intimidado?, diablos… a quién le pegunto, claro que no te sentirías intimidado – Peter meneó la cabeza y suspiró arrimándose al sillón
- Si tienes un ex todo sexy, aunque no sé si es tu ex – respondió Tony frunciendo el ceño
- Si es mi ex, Happy me contó lo que pasó en el campus y…
- No me digas que necesito mejores lentes, los vi besándose Peter – dijo Tony poniéndose de pie y caminando lentamente hasta la cocina, abrió las puertas de los gabinetes bajos pero no encontró lo que estaba buscando, Peter encontró esas botellas y las desapareció la noche anterior
- No… Wade me besó que no es lo mismo, luego me quitó la mochila, lo que asumo que no viste es la patada en la canilla que pude darle, recuperé mi maleta y lo golpeé con ella, yo no apoyo la violencia pero a veces Wade se pasa, cree que porque fue mi novio puede seguir buscándome, pero no… yo no he vuelto con él ni mucho menos, solo me molesta de vez en cuando, Tony… mírame… yo no tengo nada con Wade – Peter había caminado hasta Tony y tomó su mano para llamar su atención, con este leve roce el corazón del mayor latió con fuerza
- Ok., no tienes nada con Wade, ¿entonces por qué…?, olvídalo… - el mayor se apoyó con ambas manos en el mesón de la cocina, el platón de frutas estaba allí pero vacío, Tony tenía hambre pero el solo pensar en comida le daba nausea
- No… no vamos a olvidar nada, tenemos que aclarar muchas cosas y este es el momento – Peter puso la mano sobre la mano de Tony que lo miró y preguntó:
- ¿Entonces por qué mantener nuestra relación en secreto?, comprendo que al verme ahora como estoy te avergüences de mí, pero antes no tenías motivo… eso es lo que no entiendo… - el tono de Tony era algo que Peter no había escuchado antes, ¿era dolor lo que sentía?
- ¿Sabías que el profesor Stevens está demandando a la universidad?, ¿no te contó eso tu amigo el rector?
- No me cambies de tema
- No lo estoy haciendo, pero esa era una de las razones por las que no era conveniente de que nadie se enterara de lo nuestro, si los abogados de la defensa del profesor Stevens se entera que el que movió todo el avispero fuiste tú y que lo hiciste por mí, ¿te imaginas lo que pasaría?, la defensa lo usaría al decir que mi amante que es muy amigo del rector presionó tanto por tráfico de influencias como monetariamente para enlodar el nombre de un miembro respetado de la facultad, entraríamos a investigación, yo no me graduaría y ese imbécil tendría carta abierta para seguir abusando de la gente así como haría todo lo posible para amargarme a mí la existencia – Peter explicó esto con vehemencia, de esto ya habían hablado antes pero de manera muy superficial, Tony hizo una mueca porque no estaba del todo convencido por lo que preguntó:
- Ok., ¿y tu tía?
- May ya lo sabe, Ned también por cierto, si tuviera más amigos se los hubiera contado pero no… soy antisocial Tony, Ned representa mi círculo de amigos
- Sé que tu tía ya lo sabe, y me odia por cierto, me lo dejó muy en claro cuando me devolvió el reloj
- Tienes que disculpar a May, ella es sumamente sobreprotectora conmigo, soy el hijo que no tiene y cree que soy un indefenso pusilánime, que ok., aceptémoslo… a veces si lo soy, pero ella solo peca de quererme y me vio ese día en el hospital, yo estaba todo mareado y pálido, se me iban las lágrimas entonces ella pensó que me hiciste algo, pero por ella no te preocupes que la manejo yo, no está del todo complacida con esto pero… las cosas ya están dadas, podemos cambiar todo menos el pasado, llegará el día en que lo acepte
- ¿Y si no lo acepta? – preguntó Tony, esa era una de las cosas que en verdad le preocupaban, Peter le había dejado muy en claro la importancia de May en su vida, en que hacía todo para no decepcionarla, en lo mucho que la amaba, y el mayor si temía que dado el caso y May se opusiera a su relación, Peter podría terminarlo todo para complacer a su tía
- Bueno… si no lo acepta tendrá que tolerarte, como toleró a Wade y como yo he tolerado a los pretendientes que ha tenido, eso es la familia, ella me quiere así la decepcione, ella me apoya así no esté de acuerdo en lo que haga, ella está ahí para mí como hubiera estado mi madre, te lo repito, por May no te preocupes – Peter aseguró, Tony lo miró y preguntó en un tono un poco más relajado:
- Ok., ¿entonces ya no soy tu sucio secretito?
- Para el mundo sí, pero para las personas cercanas a nosotros pues ya no, porque todos lo saben, y eso está bien… además ya finalizamos el proyecto que eso era otra de las cosas que me preocupaba, Ned me dijo que tú lo compraste
- Si… yo lo compré, por cierto… ¿Qué hiciste con el dinero de la compra?
- Nada aún, pensé en pagar un poco de mis deudas aunque estaba chequeando programas de maestrías, no lo sé todavía – Peter se encogió de hombros, él no quería ni ver ese dinero porque cuando lo recibió, su ruptura con Tony le supo a “definitivo”, el cheque fue extremadamente generoso y Peter aún no sabía si considerarlo como un insulto o no, aunque conociendo a Tony no sería ese el caso
- ¿Qué dice May?
- Que me vaya por un tour a Europa – Peter se encogió de hombros, a él no le parecía esa una buena forma de gastar ese dinero, por lo menos no por el momento
- ¿Ah sí?, esa es una buena idea
- Hey… es bueno saber que ustedes dos están de acuerdo al algo – Peter sonrió y se arrimó de mejor manera al mesón de la cocina, Tony tomó su mano y la besó, luego lo jaló y lo abrazó, al tenerlo entre sus brazos, el vacío en el alma que había sentido los últimos meses se estaba diluyendo
Estuvieron abrazados en la cocina por algún tiempo, pero cuando Peter sintió los labios de Tony en su cuello, el menor se revolvió sobre sí mismo y lo empujó suavemente al decir:
- No Tony… no es para eso que estoy aquí
- Lo sé… pero aún no hemos quedado en nada – dijo el mayor acomodando la cobija que estaba sobre sus hombros, él seguía con frío y temblaba ligeramente, le temblaban las manos, dios… esto era horrible
- ¿Cómo que no quedamos en nada?, quedamos en que Wade si es mi ex y que no hay motivo para que te pongas celoso
- Yo no me pongo celoso niño
- Ok., no te pones celoso, quedamos también en que Steve ya no es importante para ti, creo que son buenos acuerdos
- Pues si… pero respóndeme una cosa, si antes no me creíste, ¿Qué hizo que creyeras ahora?, no que no sea cierto, si es cierto pero…
- ¿Cómo me convenciste? – preguntó Peter con una débil sonrisa
- Si… ¿cómo te convencí?
- Bueno, hablando de ironías de la vida, lo que me hizo dudar es lo mismo que me confirmó lo que tú me habías dicho – Peter miró a Tony que le devolvió la mirada sin entender, el muchacho clarificó: - Hablas dormido Tony, y ayer me llamaste a mí en tus sueños, me llamaste la noche entera, un rato que estabas medio consciente me dijiste que yo era un ángel y que me extrañabas, que tú también te graduaste del MIT, que te alegrabas tanto de que estuviera aquí, y muchas muchas cosas más
- ¿En serio no te di los códigos de mis cuentas de banco? – preguntó Tony con una ligera sonrisa
- También me los diste, entonces… así no me lo hayas dicho sobrio, sé que ya no lo amas, eso es suficiente para mí
- No… no es suficiente, Peter… yo te amo… y quisiera gritarlo porque no tolero ser tu sucio secretito, quiero ir de tu mano por la calle, quiero ir a comer contigo y presentarte como lo que eres – Tony dijo todo esto con pasión y eso complació a Peter más de lo que pudo haber pensado jamás, pero intrigado preguntó:
- ¿Lo que soy?
- Mi pareja, mi novio, como tú quieras llamarte a ti mismo eso es inconsecuente, quiero que el mundo sepa que eres mío como tuyo soy, es bastante simple
- Wow… junto a la definición del término “posesivo” en el diccionario debería estar una foto tuya, pero está bien, lo acepto y me agrada, porque yo también te amo – Peter miró a Tony a los ojos al decir esto, esta era la primera vez que ellos se decían que se amaban, fue algo cargado de sentimiento
- Ohhh que genial… - Tony abrazó a Peter y lo besó en el cuello, el muchacho se volvió a revolver en sí mismo separándose del mayor al decir:
- Te dije que no vine para eso
- Ok., pero si ya lo aclaramos todo, ¿cuál es el problema?
- El problema es que yo aún no me gradúo, el profesor Stevens sigue demandando al MIT, y tú necesitas cuidarte a ti mismo y ponerte sobrio
- Dame un par de días y estaré fresco como una lechuga, en cuanto me pase este dolor de cabeza insoportable
- No… no creo que necesites sólo un par de días, entonces te propongo algo, no sé hasta qué punto creas o estés de acuerdo en buscar ayuda profesional para superar esto, no sé si hayas ido antes a una clínica de rehabilitación, o a alcohólicos anónimos
- Me niego a ir a alcohólicos anónimos, a clínicas de rehabilitación he ido toda la vida, las odio
- Bien, me parece genial que las odies, pero… ¿irías a una esta vez?
- ¿Quieres que vaya a una?
- Quiero que mejores, quiero que dejes de beber y seas la mejor versión de ti mismo, el cómo lo hagas depende de ti, a mí solo me interesa que lo hagas – Peter acarició la mejilla del pelinegro que besó su mano y suspiró al decir:
- Ok., ok., iré a una… haré los arreglos necesarios…
- No te molestes, Happy lo está haciendo y viene por ti al medio día
- Genial… - contestó Tony con todo el sarcasmo de la vida
- Yo me quedo contigo hasta que Happy venga a llevarte y luego me regreso a Boston, aún tengo clases y cosas, ¿me llamarás cuándo estés sobrio?
- ¿Puedo llamarte antes?
- No…
- ¿Entonces sigues terminando conmigo?
- Bueno… me gustaría pensar que nosotros no estamos rotos, solo golpeados pero en un futuro no muy lejano podemos aprender a enamorarnos otra vez, ¿qué tal suena?
- Suena a que van a ser los peores tres meses de mi vida – respondió Tony derrotado, las experiencias por rehabilitación siempre eran horrorosas, necesarias pero horrorosas
- ¿Tres meses?
- Si, los programas de rehabilitación usualmente duran de 30 a 60 días, asumo que necesito el de 60, luego necesito un mes más para retomar mi vida en el mejor sentido de la palabra, esos son tres meses y, ¿a ti te faltan cuántos para graduarte?
- Cinco…
- Ok., dos meses que podemos jugar a llamarnos por teléfono y escribirnos cartas cursis, pero eso me va a dar una luz al final del túnel, esto… es un infierno… - al decir Tony se señaló a sí mismo, era obvio que se refería al estado en el que estaba y el salir de él iba a ser infinitamente peor, pero estaba dispuesto a hacerlo, por Peter…
- ¿Nos vemos en mi graduación entonces?
- Si… nos vemos en tu graduación, ¿te vas a tomar una fotografía conmigo?
- Solo si usas traje
- Trato hecho…
Tony volvió a abrazar a Peter y besó su frente, luego de eso la pareja se acomodó en el sillón y estuvieron abrazados por mucho rato, hasta que ya fue cerca del tiempo en el que Happy llegaría a recoger a Tony, así que el mayor fue a su habitación, se duchó, se vistió, Peter le ayudó a armar una maleta y esperó listo con todo a Happy que llegó puntualmente por él
- No me quiero ir – susurró Tony abrazando a Peter que lo apretaba con fuerza
- Es por tu bien y lo sabes
- Si pero igual… no me quiero ir… eso de estar incomunicado es terrible
- ¿Tienes días de visita verdad?
- No el primer mes
- Ok., el quinto fin de semana yo voy a estar ahí, te lo prometo
- Cumple tus promesas niño, ¿me das un beso? – Tony aflojó su abrazo al preguntar esto, Peter lo volvió a abrazar y se besaron suavemente, se volvieron a abrazar y el mayor puso en la mano del muchacho el reloj que antes ya le había dado
- Tony…
- Es tuyo, siempre lo fue, espero verte en cinco semanas
- Es una promesa – el mayor entró al elevador y se puso sus lentes de sol, la cabeza se le partía en dos y la luz le molestaba, estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para no desvanecerse, Happy a su lado no dijo nada, simplemente lo ayudó a subir a su auto y arrancó perdiéndose entre las calles de Manhattan, el viaje fue silencioso hasta que el pelinegro preguntó:
- ¿Fue tu idea la de buscar al niño?
- Pepper
- Claro… Pepper… cuando salga de ese agujero del infierno recuérdame comprarle algo hermoso
- Ya lo hizo señor
- ¿Y es bonito?
- Me dijo que usted tiene excelente gusto señor
- Eso si… hazme un favor Happy, en mi ausencia cuida a Peter
- Lo haré señor
- Gracias Happy… por todo lo que haces por mí…
- Es un gusto señor
Tony fue ingresado a uno de los centro de rehabilitación más exclusivos de New York, y en verdad que su experiencia fue un completo infierno, fue peor que la vez anterior que estuvo en ese horrendo lugar, pero la diferencia de todo era la ilusión que tenía de salir para volver a ver a su niño… Peter… su Peter…