–¡Mierda!– TaeMin se lanza a la cama, pataleando un poco como un niño .
– Vaya, alguien está de mal humor.
– ¡No es justo!... el gerente me odia.
– Yo creo que ama tu trasero y hasta que no se lo des, no va a tratarte bien.
– Primero muerto.
TaeMin bufa y rueda por la cama para quedar boca abajo, toma una almohada y grita en ella, de frustración. Leeteuk le ha hecho los últimos turnos demasiado pesados.
– Quiere darme los turnos de la mañana y ya le he explicado que solo puedo tomar los de la segunda tarde, pero insiste que no tiene cupo ¡Se supone que mis turnos son de estudiante!, los turnos de la mañana son para quienes pueden tener trabajos normales y los estudiantes en los últimos, además de aquí así se ahorra dinero pues no nos paga salarios normales el tacaño del dueño.
– Consigue otro trabajo y ya.
– Como si pudiera con este maldito horario – TaeMin trabaja el último turno de una tienda de pollo frito incluyendo los fines de semana, al menos tiene los viernes libres, no se los pagan pero le permite descansar un poco.
– Pues déjalo
– Sabes que no puedo, es difícil encontrar un trabajo de horas que se ajuste a mi horario de clases, además Naeun va a matarme, ya sabes como es ella.
JongIn rueda los ojos – Pues yo le tendría mas miedo a usar ese estúpido gorro de pollo que a ella.
– No la has escuchado enojada … además estoy estresado, debo estudiar , mi tutor ha dicho, que si mis notas bajan voy a perder la beca, no se que haré sin el subsidio – Patalea nuevamente.
– Estas muerto – JongIn lo mira con un poco de lastima.
– No se que voy a hacer…dame un buen consejo, eres mi mejor amigo – Se levanta un poco de la cama para verlo con ojos esperanzadores.
– Necesitas follar, eso ayudaría mucho – JongIn le señala con un dedo mientras asiente con la cabeza y le da una sonrisa maliciosa.
– No quiero saber nada de hombres…necesito descansar no pensar en una relación– TaeMin se recuesta nuevamente, se pregunta como le pide consejos a un amigo que solo piensa en follar y follar.
– No hablo de una relación, solo echar un polvo, desahogarte…¿Hace cuanto no lo haces?
– Creo que sabes con exactitud hace cuantos meses…
– No, eso no cuenta, fue un accidente, me refiero a sexo real, donde hayas gritado como pe…
– ¡Ya entendí Jongin! No necesitas ser tan especifico… no sé, unos meses antes de…ya sabes con el idiota – Se acomoda y abraza a la almohada como si fuera una persona en la que se pudiera refugiar. La verdad es que TaeMin había experimentado, no demasiado, pero si lo suficiente como para desalentarse, había pensado lo importante que era no cerrarse después de la ruptura con MinHo. No es que tampoco se haya vuelto promiscuo, porque distaba de serlo, había tenido, algunas muchas citas, algunas relaciones, con algunos incluso tuvo intimidad , pero la verdad es que había sido bastante decepcionante.
– Vamos, no te entristezcas, no tienes que ser tan serio, puedes pasar un buen rato, solo será cosa de una noche, eso si, solo debes protegerte– JongIn se siente en su cama acariciándole la espalda – Somos jóvenes debemos disfrutar la vida.
Con la cabeza aun enterrada en la almohada – Tu si que sabes disfrutarla.
– Eso de ser popular y guapo – Pareciera que bromeara, pero lo dice en serio, no es que sea engreído, pero vaya se sabe que tiene atractivo – Bueno iré a bañarme – Le dio una nalgada y se levantó, seguro iría a alguna fiesta, saldría con alguien o dormiría con algo. Siempre tenía planes.
Mi vida amorosa o sexual era un asco.
Piensa TaeMin y eso que solo en una ocasión tuvo sexo ocasional y fue con KyuHyun , una vez que fue a de vacaciones a su casa Angang , JongIn lo había convencido de ir a una fiesta de ex alumnos de su antiguo instituto en Gyenjgou, coincidió con el en la fiesta y después de platicar pretextando que no se escuchaba muy bien, salieron a caminar y en una calle oscura y tranquila, Kyu lo beso y al calor de unos cuantos besos , se dio el momento , era indudable que Kyu había mejorado bastante en sus modales mostrándose mas amable y atento, tal vez había cambiado, se dijo que podría intentar pasar un buen rato y porque no, tal vez después de eso tal vez podría para darle una segunda oportunidad, al menos eso pareció razonable considerando la cantidad de alcohol en su sangre y cerebro.
Salieron para irse juntos a la casa de KyuHyun, sus padres habían salido y bueno era obvio lo que podía pasar , estando en la recamara del chico se dio cuenta de algo, de lo que podía ser escandaloso Kyu mientras estaba en cuatro, había sido horrible, no entendía porque carajos no se había negado, pero el calor del alcohol, las ganas de experimentar y una polla dura y un poco adolorida le ganó a el pensamiento racional , pero definitivamente se dio cuenta que su lugar era estar abajo, ser tratado bonito, con delicadeza y a veces por que no , con furia, que le hicieran gritar cuando se la empujaban, no ser el quien tuviera que esforzarse en generarle placer a alguien. Había sido totalmente agotador y no de buena manera.
Afortunadamente el alcohol se había ido un poco de su sistema –aunado a que ayudó el sacar un poco del componente de su estomago contribuyendo a la decoración en el lavamanos del baño de KyuHyun– Cuando este le pidió su numero para volver a verse le dijo no tener, lo cual era una mentira muy evidente, pero cuando insistió que podía irlo a ver un fin de semana, inventó tener novio, jamás repetiría algo así. No fue algo bueno, pero como siempre se saca algo positivo de algo negativo, se dio cuenta que las aventuras de una noche, definitivamente no iban con el.
Tuvo dos novios formales o al menos de titulo, con uno sentía bien, era muy atento y formal, lo llevaba a citas, lo acompañaba a veces a la facultad o lo iba a traer, parecía perfecto…casi, porque el sexo era totalmente insípido, no había esa pasión que le envolviera como torbellino, donde se ven estrellas y le hiciera gritar como pe… bueno como decía JongIn. Tal vez si hubiera estado enamorado, el mal sexo no hubiera importado.
El segundo fue mejor, era atractivo y el sexo bastante genial , los orgasmos eran grandiosos, pero el tipo lo engaño hasta el cansancio, siempre negaba todo, los mensajes amorosos y llamadas a altas horas de la noche, olor de perfumes ajenos, le decía que era un celoso obsesivo y aunque a veces no creía que lo fuera pero por experiencias pasadas, sabía que los celos eran cosas inaceptables, así que optaba por evitar pelear y hacía como que creía todo aunque a veces realmente podría asegurar que esas marcas en el cuello el no las dejaba, afortunadamente nunca pudo convencer a TaeMin de hacerlo sin protección, porque este por mucho que le gustara no quería pescar alguna enfermedad. Al final, terminó por darle lo mismo, parecía que todo estaba basado en lo físico , estaba cansado de no avanzar, ni siquiera hablaron para terminar, solo el tipo se dio cuenta que la relación terminó cuando TaeMin no contestó sus mensajes, pero para TaeMin fue mas claro cuando un día vio a Ravi pasar con otro chico con risas bastante evidentes, el que no estuviera enamorado de el no significaba que no le doliera un poco, porque si le hizo sentir como que tal vez el no era suficiente, afortunadamente estaba con JongIn que le tomó de la mano para llevárselo de ahí. Ravi solo corrió para decirle que entendiera que eran demasiado jóvenes como para tomar las cosas tan en serio, que si quería podían verse cuando quisieran para pasar el rato , le alzó las cejas en una clara invitación sexual, mientras el otro chico lo esperaba con los brazos cruzados y mirando con el ceño fruncido a TaeMin, pero afortunadamente un golpe en la nariz por JongIn le borró la sonrisa cinca, al menos por un momento, pero como damisela herida el chico corrió a ver a su príncipe encantador ¡El se lo regalaba, esa cosa el no la quería!
Las demás historias no fueron de los mas importante, ni significativas, no es que no tuviera enamorados, los tenía , pero con la mayoría de los chicos que acepto salir no llegaban ni siquiera a tener citas que pudiera contar con mas de una mano. El sexo había quedado clausurado desde Ravi.
JongIn salió del baño para terminar de arreglarse, era bastante normal en el, era sábado y el solo tenía como compañía sus libros y un bloque donde tenía notas de lo que seria un ensayo a entregar mañana.
– Vamos, Tae acompáñame , voy a una fiesta , te presentare a alguien…
– Estoy cansado y con tareas, aun debo bañarme para quitarme toda la grasa de encima y no creo tener ánimos.
– No te encierres, te espero, toma una ducha y arréglate, date la oportunidad, uno nunca sabe a quien puede conocer en una fiesta.
TaeMin pensó en MinHo y como lo había conocido en una fiesta. Dio un suspiro muy fuerte, sino se hubiera encontrado con su hermano y cuñada, tal vez no pensaría en el, seguro.
– No JongIn, prefiero hacer mi tareas y dormir no tan tarde.
– Te llamaré después por si te animas, abra chicos lindos y altos y morenos…
– Tengo apagado el celular, para evitar las llamadas de Naeun, al menos hoy no quiero lidiar con ella.
– Te lo pierdes.
Cuando iba a salir, sintió la necesidad de decirle– JongIn tu deberías…
– No debería nada, dijimos que la universidad era para divertirse.
Habían ya pasado años de diversión– Claro, solo cuídate.
JongIn le tiró un beso volado, que TaeMin rechazo con la mano. Su amigo tenía una vida llena de amores pasajeros, cuando una relación se empezaba a poner un poco seria o duraba mas de dos meses, inmediatamente la concluía, decía no querer ni necesitar enamorarse, no era necesario ser muy inteligente para saber la causa. Ellos estaban marcados.
TaeMin se dirigió al baño, tardándose lo suficiente para quitarse la grasa acumulada en el cabello, manos y sabe Dios donde mas.
Se puso una albornoz y se dedicó un rato a consentirse. Crema suavizante de manos , humectante para la cara, algo de tónico capilar, algo de loción, debía sentirse cómodo consigo mismo antes de ponerse a hacer tareas.
Cuando termina se sienta frente al escritorio y abre su portátil con la firme decisión de terminar su ensayo , cuando escucha la puerta sonar, piensa que de seguro JongIn a olvidado algo. Se levanta molesto, realmente a ese ritmo nunca va a poder acabar su trabajo.
Al abrir la puerta no puede dejar de sorprenderse
– Hola.
–¿Qué haces aquí MinHo?