El tranvía paso bloqueando la vista al demonio, el cual busco con la mirada la rubia figura pero ya no estaba, Itachi camino donde minutos antes estaba Deidara, pero solo encontró una cajetilla de cerillos —Juraría que era el— murmuro miro a los lado queriendo dar con Deidara pero no había rastro de el, a un lado de Itachi estaba un hombre sentado leyendo el periódico
—Disculpe caballero, me puede decir en que fecha estamos— pregunto Itachi, el joven lo miro para después ver su periódico — Es el primero de enero del tigre amarillo — respondió, Itachi agradeció mientras hacia cálculos en su mente "El tigre amarillo fue en el año 1938, el murió en el conejo amarillo, estoy un año antes de su muerte" estas palabras estaban en la cabeza del Uchiha que tenia en su mano la cajetilla de cerillos con una dirección.
Gaara se adentro en uno de los salones de baile de la industria Uchiha detrás de el entro Matsuri mirando el lugar con curiosidad intentando recordad algo, el lugar era un salón para los ensayos rodeado de espejos —¿Puedes recordar algo?— pregunto Gaara
Matsuri recorrió con la mirada el lugar —Solo siento mucha nostalgia — informo la castaña, Gaara resoplo — Iré a buscar otra esfera de energía, haber si así recuerdas algo — dijo para salir del lugar dejando sola a la zombie
Matsuri acerco su mano a uno de los espejos el tacto activo uno de sus recuerdos, donde ella bailaba de una forma muy energética, se movía con gracia y estilo —Yo bailaba así cuando estaba viva— se cuestiono mirando su reflejo.
El sonido de unos pasos llamo su atención, una joven vestida con ropa deportiva entro al lugar, la miro como si fuera algún bicho —¿Qué haces aquí? — dijo de forma despectiva — ¿Eres nueva?— pregunto Matsuri miro a su alrededor sin contestar moviendo su cabeza de forma extraña —Te estoy hablando — exclamo molesta, al ver que la joven no iba a hablar la chica dijo — No debes estar aquí, estoy muy cansada, deberías irte, ah y ten — aventó su botella de agua que callo en las manos de Matsuri — Saca la basura — al pasar por un lado de la castaña hizo una mueca — Apestas— gruño molesta
Matsuri saco su botella de perfume y comenzo a rosearlo antes de decir — Lo siento
La Chica gruño molesta —Deja eso, no puedes hacer eso aquí, eres solo una principiante deberías irte maldito engendro — la joven de cabellos rojos fuego manoteo a Matsuri tirando su perfume que se quebró en el suelo
Matsuri la miro molesta para decir —Vuelve a tocarme y te iras conmigo al maldito infierno— amenazo
La pelirroja se burlo — Eres solo una maldita principiante, no deberías estar aquí— dijo para empujarla, la zombie no controlaba del todo bien su cuerpo por lo cual perdió el equilibrio quedando tirada en el suelo inmóvil
—Hey no bromees— hablo asustada la otra joven pateando ligeramente uno de los pies de la zombie la cual no tuvo reacción, se acerco hasta ella tomando su pulso, su rostro se puso blanco al no sentirlo
—Matsuri, mira lo que encontré — entro Gaara con una esfera rojo brillante
—Gaara — exclamo la chica
— Melty ¿Qué haces aquí?— cuestiono el de ojos jade
— Yo, solo la empuje un poco, ni siquiera lo hice tan fuerte — decía la joven alterada
— Melty calma — pidió Gaara intentando controlar a la histérica chica, como un muerto salido de la tumba Matsuri se levanto sacando un grito a la pelirroja que ante el susto cayo desmallada
—Matsuri no deberías asustar así a la gente — reprendió Gaara
— Ella es una maleducada hace enojar hasta a los muertos — informo de forma molesta la zombie
Gaara soltó un suspiro — Ahora que hacemos— pregunto mirando a la pelirroja en sus brazos, Matsuri se encogió de hombros
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Se encontraban en el bar de Hinata, la pelirroja de nombre Melty estaba recostada en una de las mesas mientras Hinata limpiaba las copas del bar.
—Ya se que voy hacer — informo Gaara — Diré que vinimos todos a tomar unos tragos y ella se desmayo.
Hinata miro a la zombie cuando pregunto —¿Matsuri ya recordaste algo de cuando estabas viva?
La zombie miro al hada para decir —Recuerdo que estaba bailando frente a unos espejos, quizás era una bailarina —
—Preguntare a ver si hay alguna bailarina desaparecida — menciono Gaara dando un trago a su vaso
Matsuri lo pensó un poco antes de decir arrastrando la voz — ¿Por qué abre muerto? — Gaara se burlo — Dudo que tuvieras una muerte bonita, tu no moriste fuiste asesinada tu muerte no fue algo natural, eso me hace preguntarme si será correcto que recuerdes, podrás soportar esos recuerdos.
La castaña hizo un puchero, sus ojos se aguadaron —Gaara eres un maldito mapache muy malo— reprendió Hinata intento tocar a la castaña pero esta se levanto lo mas rápido que pudo —Yo tomare algo de aire fresco— dijo con voz quebrada
—Fuiste muy cruel — exclamo molesta el hada
—Hina a veces necesitas oír las cosas como son— contesto Gaara para tomar su vaso de un trago
Matsuri caminaba en la oscuridad de la noche intentando no derramar las lagrimas —No voy a llorar— se decía mientras secaba las pequeñas lagrimas que se salían de sus ojos — Eso lo are cuando mi ataúd este cerrado— intentaba animarse cuando su cuerpo se paralizo, frente a ella dos hombres que reconoció a su mente los recuerdos de cuando despertó llegaron a su mente, como esos dos hombres querían esconder su cuerpo entonces las palabras de Gaara tuvieron mas peso "Dudo que tuvieras una muerte bonita"
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Sasuke siguió investigando en el museo, hasta que llego al peinador que empezó todo, el mueble era de un color rojo brillante cuidado por los años, aun lado del mueble estaba un cartel con la información de la familia que dono el articulo — Oye perrito— llamo Sasuke a la rubia la cual se acerco —Este es el peinador — pregunto apuntando el objeto
Temari rodo los ojos para contestar —Si, este es el peinador que cuidaba la niña.
—Si la niña tenia como 8 años, eso quiere decir que ha esa edad murió— menciono — Si eso es así quien es ella— apunto a la foto de la anciana la cual la información era la única dueña de ese peinador, Temari miro a la mujer para después buscar la foto del dibujo que había hecho para Itachi —Es la misma — dijo con sorpresa
—Si esa niña creció hasta convertirse en adulta ¿Quién es la pequeña que resguarda el peinador?
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Naruto camino por las calles del lugar hasta dar con una casa enorme, en sus manos llevaba un trozo de papel el cual tenia la dirección de esa casa, en la tienda de Kimonos habían dicho que la pequeña de esa casa, había pedido un kimono rojo, se adentro a la casa con cautela mirando a sus alrededores aun con el papel en mano.
Una sirvienta se planto frente a Naruto preguntando —¿Usted que hace aquí? — Naruto buscaba una escusa cuando la sirvienta miro el trozo de papel en su mano — Oh disculpe señorita, usted viene a tomar el te.
Naruto frunció un poco el ceño, sonrio forzadamente antes de asentir —Por favor sígame— pidió la joven caminando dentro de la casa, Naruto la siguió un paso atrás de ella —Usted es la hija del conde Nakamura, ustedes también recibieron una medalla del emperador — pregunto la mujer a lo que Naruto solo asintió, la joven sirvienta hablaba mientras el rubio solo asentía mirando todo a su alrededor antes de llegar a su destino Naruto pregunto — ¿En su familia tienen una pequeña de 8 años? creo que usa un kimono rojo.
La mujer sonrio —Habla de la señorita Aiko, últimamente suele jugar a las escondidas — la joven abrió la puerta donde había un grupo de personas, se adentro e informo a una de las personas dentro del lugar, Naruto sintió desconfianza de estar ahí, la sirvienta se acerco de nuevo a Naruto —Los señores le esperan— dijo
El de ojos azules sonrio con pena para decir —Puedo usar su baño— la mujer lo miro de forma extraña — Tocador— repitió Naruto sin tener éxito —Servicio, sanitario— la joven pareció entender y le dio la indicación de donde estaba el tocador, Naruto camino por la casa buscando a la pequeña.
Una pequeña vestida con un kimono rojo comenzo a correr por la casa, Naruto comenzo a correr detrás de ella llamándola de vez en vez — Aiko.
La noche se asia mas oscura, en un bar de la ciudad un docel vestido de mujer caminaba como si fuera un muerto en vida, sus largos cabellos rubios caían por su cara, estaba frente aquel bar que en letras de colores resaltaba su nombre "Bar Sakura"
Sus manos temblaban esperando el momento adecuado, un carruaje llego bajando de el a dos personas, un hombre alto de cabellos negros acompañado de una joven mujer de castaños cabellos, los empleados del bar salieron a saludar a los recién llegados —Jefe bienvenido— dijeron al unísono
Con un grito el rubio desenfundo su navaja para intentar clavarla en el cuerpo del hombre, que volteo para tumbarlo de un fuerte golpe que le abrió el labio —Maldita vieja loca— exclamo el hombre
—Tu asesinaste a mi esposo e hijo, y yo los voy a vengar —exclamo el rubio con lagrimas en los ojos para intentar matar al hombre pero de nueva cuenta fue golpeado de tal forma que callo al suelo.
—Eres una maldita perra— gruño el hombre con la intención de golpearlo de nuevo, Itachi no soporto ver mas, lo detuvo del cuello alzándolo sobre sus pies, para arrojarlo lejos al de ojos azules, los guaruras de aquel hombre se abalanzaron frente a Itachi quien uso sus poderes demoniacos para dañar a los matones, los alzo unos metros sobre su cabeza para dejarlos caer, la gente se amontonaba para ver como un solo hombre hacia frente a esa pandilla que los atemorizaba.
Los ojos de Itachi estaban rojos tanto que asusto a los presentes, volteo a ver al rubio que aun estaba en el suelo, el dolor de ambas miradas el miedo en los ojos azules, la tristeza en los ahora negros de Itachi, con miedo Itachi se acerco hasta el rubio para ponerse a su nivel ayudando a levantarse, sus manos se tocaron trayendo un sinfín de emociones para el de cabellos negros, que con el paso del tiempo la tristeza se reflejaba mas en su mirada.
—Ven vamos a curarte— dijo al estar los dos de pies, el docel lo siguió aun sorprendido por lo que había pasado, Itachi lo llevo a una cafetería un poco lejos del bar, al entrar tomaron una de las mesas del fondo, el rubio se sentó con dificultad, su cuerpo tenia algunas laceraciones.
—Toma— ofreció Itachi su pañuelo, el de ojos azules lo tomo envolviendo su muñeca en una mueca de dolor —¿Quién es usted?— pregunto sin verlo el rubio — Sabes quien soy yo, no interfiera o lo matare — amenazo sacando una cajetilla de cigarros para llevarlo a su boca
La tristeza estaba reflejada en el rostro del demonio, quien metió su mano a la chaqueta para sacar la cajetilla de cerillos que había encontrado en la mañana —Estos son de mi tienda— dijo sorprendido el rubio, Itachi no podía mas con ese dolor, tanto que sus ojos comenzaron a derramar lagrimas.
Deidara se puso de pie para marcharse, pero las manos de Itachi lo detuvieron —En algún punto tu podrás matarlo, pero ellos te encontraran y te mataran— dijo Itachi con miedo a soltarlo las lagrimas salían de sus ojos sin control la tristeza estaba en su voz
—Lo se, igual hago esto para morir — fue lo ultimo que dijo Deidara antes de irse, Itachi lo vio partir junto con su corazón.