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Memorias de Christopher y de como conoció a Eric Sammet por AyameKiryu

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Notas del capitulo:

disculpen la ausensia, me enferme de ya saben que, luego me cure y tuve que salir de la ciudad y finalmente me deprimi, no he tocado la compu en semanas, en fin, gracias por leer espero que quede alguien

------Chris----

Luego de que todos me regañaron en el bar pase de camino a casa a la tienda para comprar lo que me hacía falta con el dinero que me dio Dag, cuando llegue a casa Eric estaba parado ahí afuera, era obvio que Cedric ya no vivía conmigo aunque si venía casi a diario para ayudarme y cuidaba de nosotros, Eric estaba esperando a que llegara, me miró con una tímida sonrisa, yo esquive su mirada.

-¿Dónde estabas?

-Fui a comprar mi cena y unos pañales

-Te ves hermoso-sonrió

-No empieces-rodé los ojos, abrí la puerta y me metí, lo dudé unos segundos antes de invitarlo a pasar-¿quieres entrar?-se sorprendió un poco al escucharme, asintió ligeramente y entró detrás de mí.

-¿Por qué no regresas conmigo a casa?, los dos, tu y mi hijo, los quiero en un buen ambiente y lo más importante, en mi vida.

-No hay que confundirnos Eric, todavía no te perdono, si te tengo cerca es por protección ya que Alain sigue suelto y porque necesito dinero, ya no quiero y ahorita no debo vender mi cuerpo y necesito comer y comprarle cosas al niño.

-No voy a permitir que Alain te haga daño.

-Shhh...déjame terminar, si me voy contigo ahora, ¿quién me asegura que el día de mañana no vas a recoger a otro culo bonito y lo meteras a casa y a mi me echarás de una patada?

-Ya te dije que eso no volverá a pasar, Chris fui un idiota contigo, Mark jamás significó nada para mí, entiende que te amó, abrí mi corazon para ti cosa que nunca había pasado y dudo que vuelva a pasar, quiero ser parte de tu vida y de la de mi hijo, dame una última oportunidad, nunca le he rogado a nadie pero si tengo que empezar esta es una buena oportunidad-se acercó lentamente para besarme, ambos lo necesitábamos, mi corazón se agito fuertemente pero antes de que nuestros labios se juntaran Gared comenzó a llorar, de inmediato me separe de Eric, lo vi decepcionado y tuve que reprimir una risa.

Me acomode bien en el sofá.

-¿Por qué llora?

-Tiene hambre, quiere leche-me levanté la playera y acomode al bebé, aún tenía vendas en las costillas lo cual hacía bien incomodo todo el proceso de alimentar al niño-te amo Eric pero ya no eres el centro de mi universo y jamás volverás a serlo.

-No, se invirtió ese papel, tu eres el centro del mio ahora, pídeme lo que sea pero vuelve a mi.

-Yo...Eric, si tu eres un bastardo inmortal quisiera que me regalaras una vida-no sabia como expresarme, un par de lágrimas bajaron por mis mejillas, una por Eric y otra porque no saben cuan doloroso era amamantar al bebé-joder, siempre soy yo quien termina llorando, yo ya no me prostituyo Eric, y cuando estuve con Cedric sólo tenía sexo con él porque eramos pareja, a lo que me refiero es aunque bueno, tu te burlaste de mi cuando te lo pedí, pero soy humano, me pongo celoso y enojado cuando te burlas de mi, quiero que ya no tengas sexo con nadie que no sea yo, mucho menos con esas putas del bar, y si lo haces-sonreí de medio lado-porque te conozco, no quiero que me lo digas y te burles de mí o me compares con que este otro chico es mejor, solo mantenlo en secreto-Eric me abrazó cuidando no aplastar a Gared y me beso la frente, luego limpió mis lágrimas

-No volveré a lastimarte Chris-me beso, esta vez en los labios, suave, tierno-no voy a lastimarte y no me interesa mantener relaciones sexuales con alguien que no sea Christopher Sammet, nadie te llega a los talones, eres el unico para mi-ahora fui yo quien lo beso, sentir sus labios contra los míos me hacia sentir que todo estaba bien, no habia tono sarcástico o altanero en su voz, más bien era suave y sincero y eso hacia a mi corazon sentir paz, parecía incluso otra persona, pero no, era obvio que ese era Eric, mi Eric.

Lo dije antes para que no piensen que estaba siendo muy blando con él, yo ya había perdonado a Eric desde el momento que vi cómo le arrancaron el ojo a sabiendas de que ya no lo iba a recuperar aunque gracias a Cedric lo hizo, mi amor resurgio por él en ese momento,a pero no por eso la confianza había regresado, yo le tenía aún algo de miedo y ademas queria que sintiera lo que es estar rogando por amor.

-Eric, no es por correrte, pero estoy cansado, quiero dormir.

-Deja que me quede...o ven conmigo-me besó de nuevo y no podía rechazar esos besos aunque quisiera-vamos a casa

-Esa no es mi casa, tengo tengo malos recuerdos ahí y no quiero volver

-Ok, entonces te comprare una casa nueva en la ciudad, donde mi hijo pueda crecer feliz y tranquilo-me reí, él se puso serio pero es que no podía evitar sorprenderme al ver esa actitud tan diferente en él, era increíble verlo tan impaciente pero dócil-no te rías de mi mocoso, hablo muy en serio.

-Es que nadie en su sano juicio te creeria ni la mitad de este cambio….-se entristeció-para tu suerte jamás he estado en mi sano juicio-sonrió y me beso la mejilla





----Eric-----

Chris seguía diciendo que no me había perdonado, pero la verdad es que no me alejaba de él y se veía bastante feliz de que estuviéramos juntos, eso sí, también se veía agotado; encendió el televisor, ambos estábamos en el sofá, apague la luz y se recargo en mi hombro, yo me entretuve bastante mirando una película mientras el amamantaba al niño, cuando termino de comer Chris ya estaba dormido y Gared se removía incómodo en sus brazos, me levanté con cuidado y le quite al niño, de inmediato se acomodó bien abrazando un cojín y continuó dormido, yo estuve caminando con el bebé cargado de un lado a otro durante un rato.

-Así que eres mi hijo-acaricie su cara, él con su pequeña manita tomó uno de mis dedos y sonrió, yo también lo hice, Gared era un bebé precioso-intentaré ser un buen padre-comenzó a quedarse dormido lentamente lo cual era grandioso, significaba que estaba seco, yo no tenía ni la más remota idea de como cambiar un pañal, osea aun me parecia increible el hecho de que estaba cargando realmente a un hijo mío, debía tener un par regados por ahi pero jamas me habia cruzado por la mente criar a un niño, y ahora con tal de ver a Chris feliz estaba dispuesto a cualquier cosa y mi hijo estaba incluido en el paquete, un hijo nacido de ese flaco y débil cuerpo-¿en que me estoy convirtiendo?-sonreí y bese la frente del niño, camine hasta la habitación y lo acomode con cuidado en la pequeña cuna junto a la cama-mirame, cuidando de dos niños, ¿quien lo diría?-el bebé dormía, regrese a lado de Chris y me agache para cargarlo, lo lleve a la cama y le saque la ropa, solo asi abrio los ojos aun somnoliento y sonrió.

-¿Que haces cerdo?-se cubrió el pecho con las manos, me giré para buscar una camiseta limpia.

-Poniéndote cómodo-sonrío de nuevo, le puse la prenda, luego me deshice de mis pantalones y me metí a la cama con él, se acercó a mí y se acurruco entre mis brazos, tan cariñoso como no lo sentía en meses y eso me devolvió toda la paz que jamás he tenido.

-¿No tienes cosas que hacer?

-Soy el jefe, ahora estoy dando prioridad a lo que me pude hacer feliz-solo sonrió y casi de inmediato se quedó dormido.

Era la primer noche que pasaba junto a Chris de manera normal desde que parió, y rápidamente pude darme cuenta del porqué de sus enormes ojeras y su permanente cara de cansancio y es que ser madre no es para nada fácil, ahora súmale la cortísima edad de Christopher, las costillas rotas, que el bebé había sido prematuro, los fuertes dolores de cabeza que tuvo que aguantar en su estadía en el hospital y la presión que le causamos nosotros rodeandolo todo el tiempo, era obvio su estado físico y mental.

Cómo a la hora de haberse quedado dormido, Gared despertó llorando con fuerza, antes de que yo pudiera siquiera moverme Chris lo hizo, se echó el cabello hacia atrás y se levantó despacio, con pesadez, parecia que habia olvidado mi presencia, estaba mas dormido que despierto, tomo al niño en brazos y se fue a sentar al borde de la cama, solo así recordó que esa noche yo lo acompañaba.

 

-Quita tus pies Eric-obedeci, se sentó y se quitó parcialmente la playera solo dejando su cabeza dentro para descubrirse el pecho, luego bajó un poco las vendas lo suficiente para que no le estorbaran al niño y se acomodo al bebé, estaba obscuro pero yo podía ver a la perfección y veía claramente como Chris lagrimeaba, me senté a su lado para que pudiera recargarse en mi y le bese la cabeza.

-Shhh, tranquilo, ¿qué pasa?

-No me estoy quejando, pero estoy cansado y me duele mucho cuando le doy de comer-Chris al ser un chico solo producía la leche exacta para su cría, ni más ni menos, además al ser varón la lactancia era mucho más dolorosa para el que para cualquier mujer, o era lo que yo tenia entendido, eso y si le sumamos los huesos rotos era obvio que sufriera y se frustrara, además ya hablamos de su cansancio físico.

-¿porque no compras fórmula?

-Me necesita…yo puedo aguantar bien-se limpio las lagrimas-es solo que no puedo evitar sentirme cansado-de nuevo bese su cabeza

-Si, pero si le dieras formula seria mas facil para mi poder ayudarte, o si te sacaras la leche

-Después veré eso...tengo que preguntar

-Bien-Chris terminó de darle de comer, luego le cambio el pañal y lo acostó en su cuna, luego se acostó él y en cuestión de segundos se volvió a dormir, yo había puesto atención a lo que había hecho, pensé que sería buena idea ponerle una enfermera pero por supuesto él no querría así que lo descarté de inmediato.

-Te estas esforzando mucho-bese su frente y me volví a acostar con él, era gracioso, ni Chris ni yo habíamos tenido una familia nunca y ahora él a sus 16 años estaba cuidando lo mejor que podía de un bebé, y yo, yo era totalmente nuevo en el asunto de ser padre, la relación más cercana a ser una figura "buena" de autoridad fue mi relación con Leiv y eran casos totalmente distintos aun asi, ah, ¿que teníamos los putos vampiros, o por lo menos Dag y yo para enamorarnos de chiquillos tristes y problemáticos?.

Durante toda la noche pude aprender mucho de Chris en ese nueva etapa, no renegó ni una vez, tomaba en sus brazos con devoción al bebé y le hablaba despacio para calmarlo, tuvo que levantarse 3 veces más durante la noche, terminó por acomodarle entre su cuerpo y el mío, cuando amaneció y una vez más tuvo que darle de comer al niño yo lo cargue al terminar, Chris seguía cansado y Gared no se durmió de inmediato, me salí de la habitación con él en brazos y Chris pudo dormir en paz por lo menos 3 horas más a sus anchas, agradecí que en la pequeña sala si es que así se le podía llamar, no entraban los rayos del sol por lo que pude estar tranquilo, por supuesto como a las 10am mis hemorragias habían aparecido.

Como a las 11:30 finalmente Chris se levantó, se veía aun somnoliento pero alterado, pues claro, me lleve al niño sin avisar.

-¡Mierda Eric!

-Perdón, quería dejarte dormir un poco, te veías muy cansado aún-me senté en el sofá, Chris se acercó y con un pañuelo me embarro la sangre en la cara al intentar limpiarla

-Vas a ensuciarlo, odio verte sangrar...siento como si te doliera

-No, estoy bien, ¿Por lo menos descansaste?-me quito al niño y asintió, luego me dio un corto beso en los labios

-Ve a dormir Eric

-¿Que te importa?-solo quería mostrarle mi interés-solo ve a dormir

-Bien





-----Chris



Eric se fue para mi habitación, cómo mi cama estaba pegada a la ventana fue y se sentó en una esquina donde no le llegaba la luz y se durmió, no pude evitar sonreír, él ¿en serio iba a intentar cambiar un poco sus hábitos para pasar tiempo conmigo?, bueno, ambos teníamos que modificar muchas cosas de nuestras vidas; me acerque y bese su mejilla antes de tomar su billetera y cubrirlo con una manta.

-Te amo Eric-quería ir a comprar un par de cosas que me faltaban en la nevera y también estaba pensando en comprar la mentada fórmula, quizás no era tan mala idea.

Le di de comer al bebé y desayune yo, luego me medio limpie, le cambie los pañales y lo cargué con uno de esos canguros que permiten tener al bebé acostado, me facilitaba mucho el trabajo con mis costillas, despues sali de casa.

-¡Mocoso!-me tope con la vecina-hasta que se me hizo verte, aunque ya no es extraño que te desaparezcas

-Ah, hola, llevo mas de una semana aquí, la que desapareció fuiste tu ¿no?

-Si, fui a la ciudad un par de días, a visitar a un familiar enfermo

-Ya veo

-No sabia que ya habías parido

-Por eso mismo desapareci, nació prematuro pero ya ha cumplido el mes, está mucho mejor, también tuve un accidente y estuve hospitalizado.

-¿Y estas bien?-creo que era más el chisme que la preocupación.

-Sí, supongo

-¿Puedo verlo?-se acercó curiosa, Dietter nos observaba y no había dicho ni una palabra; descubrí al bebé dándole visión a él, no estaba dormido pero estaba tranquilo, se agacho a mi altura y tocó su cabeza y sus manitas, mi solecito sonrió-Chris, es precioso, se parece tanto a ti, ¡mira sus ojos!, que hermoso, ¿y el padre?, el debe estar feliz, es aquel hombre pelinegro ¿no?

-No...ya supe bien quien es el papá, es Eric Sammet, el vampiro-se sorprendió-¡Ey tu!, ¿no piensas saludarme?-me dirigí al molesto mocoso.

-Hola-dijo a regañadientes.

-¿Estas molesto?, ¿no quieres ver a mi bebé?

-¡No!, yo te dije que cuando fuera mayor sería tu novio, entonces si tú querías tener un bebé yo lo tendría contigo-su madre le dio un golpe en la cabeza, él comenzó a llorar.

-Lo siento Chris-se disculpó ella

-¡Joder!, escucha Dietter, tu vas a crecer y vas a encontrar a alguien de tu edad maravilloso a quien podras cuidar y cuidara de ti no a alguien como yo que no vale la pena ¿entiendes?

-¡Yo te quería solo a ti!, dije que esperaras y ¡ahora te casarás con el vampiro!

-El único hombre importante en mi vida es este bebé, yo no me voy a casar con nadie ¿entiendes?-me agache un poco-tu y yo podemos ser amigos, ven-se acercó a ver a mi bebé

-¿Cómo se llama?

-Gared-por fin sonrío

-Se parece a ti-le acarició delicadamente el cabello

-¿Es lindo verdad?, yo te vi cuando eras de este tamaño-sonrio aun mas

-Yo...yo puedo ayudarte a cuidarlo después

-Claro, ahora debo ir a comprar unas cosas

-Anda Dietter, entra a casa-me despedí con la mano de ambos y seguí mi camino, al parecer no le disgustó la idea a su mamá lo cual significaba que ya no me veía como a un sucio drogadicto alcohólico y eso me hacía sentir mejor conmigo mismo.

A pesar de que yo estaba feliz y orgulloso de cargar a mi bebé, las miradas en la calle no se podían evitar, algunas eran de curiosidad otras de lástima y la mayoría de desprecio, la gente me juzgaba, me señalaban y los que me ubicaban murmuraban a mis espaldas, y yo, yo caminaba erguido con una sonrisa en el rostro y la frente bien en alto aunque por dentro dolía.

Llegué a la tienda y agarre una canasta, necesitaba varias cosas como para cargarlas con mis manos sin molestar al bebé, el encargado se me quedo viendo sorprendido, si, ya les había hablado de ese chico ¿no?, el gay de closet del minisuper a quien no había visto desde tiempo atrás.

-Hola Bill-lo salude con algo de timidez gracias a la mirada de sorpresa que me echaba, las veces que llegué a ir a su tienda ya embarazado seguramente él creyó que solo estaba engordando.

-Chris...ho...hola, tenia mucho que no te veía-desvío la mirada de mi persona y se sonrojo

-Si, bastante-contesté en voz baja, esta vez miró a Gared y nuevamente a mi con una expresión interrogante que me causó bastante gracia.

-Es mio, ¿tan sorprendente es?

-Lo siento-rascó su mejilla y sonrió avergonzado-felicidades Chris, es muy lindo

-Gracias-le devolví el gesto y entre a la tienda, sentí su mirada sobre mi un poco más pero luego la apartó con vergüenza, no era un mal tipo solo necesitaba ser honesto y fijarse en un chico de su edad.

Había poca gente en la tienda por lo que pude hacer mis compras a gusto, Gared estaba tranquilo aunque no dejaba de moverme para arrullarlo más que nada por costumbre, bien, empecé a meter mis cosas a la canasta y después como un deja vu, cuando gire en un pasillo para ir hacia un estante, choque con alguien, causando que Gared comenzará a llorar de inmediato

-¡Estupido!

-¡Lo siento!-y si, un maldito dejavu porque era él mismo estúpido de antes osea el examante de Eric, el puto Mark.

-Shhh solo callate-baje la canasta y cargue bien a Gared para intentar calmarlo, él se me quedo viendo como el estúpido que era.

-Tu eres Chris ¿verdad?

-¿Y a ti que?-se agacho

-Yo lo siento, desde hace tiempo quiero decirlo

-Solo cállate, te paras frente a mi como si tuvieras buenas intenciones, si en verdad lo sientes no te vuelvas a acercar a él, shhh...shhh tranquilo amor-mesi a Gared, no se calmaba-como puedes ver yo le di un hijo, tu no eres nada, no te quiere, me quiere a mi-a pesar de que Eric estaba siendo lindo conmigo y ya me había prometido que yo sería el único, mis inseguridades me seguían atormentando.

-Lo se-sonrió con tristeza-me quedó claro cuándo me echó de su casa, el nunca me quiso como tu piensas-¿porque me lo decía?, se escuchaba sincero pero escucharlo me daba mucha rabia si no hubiera llevado al niño le hubiera reventado la boca, me molestaba su cara perfecta, su piel lisa, sin ojeras, sin manchas, su cuerpo tenia una linda figura, vestia mejor que yo, hablaba mas refinado y estaba educado, como esos niños ricos de la televisión, me hacia sentir muy inferior, yo era un pedazo de mierda a su lado y mi cabeza no dejaba de repetirmelo, el encajaba mas para estar a lado de un hombre como Eric y no Chris la puta, el borracho que a veces dormia en la calle sobre su propia suciedad, el drogata agresivo, dios, estar cerca de el me hacia sentir enfermo-solo te quiere a ti.

-¿Qué quieres?, ¿me tienes lastima?, ¡solo dejame y dejalo a el!, ya no me lo van a quitar-habia calmado un poco a Gared pero por mis gritos lo asuste y de nuevo lloro fuerte y a mi su llanto me devolvió a la tierra y me salvó de un ataque de histeria, se acercó como preocupado-no te nos acerques-yo ya habia dejado atras mi miserable vida y estaba dispuesto a cambiar por Gared...no iba a ser inferior, poco a poco lo alcanzaría.

-No lo haré, solo que en serio deseaba disculparme, el señor Samme me salvo yo no intentaba seducirlo, me alejare-desvie la mirada-enserio lo siento-yo jamás me hubiera disculpado, de nuevo los pensamientos negativos vinieron a mí, alguien bueno como Mark quizas haria cambiar a Eric, podría aportarle algo y no como yo que era igual que él, me sentía ansioso, un par de lágrimas se escaparon de mis ojos.

-Solo no te vuelvas a acercar a mi-baje la voz, tome mi canasta y me aleje rápido para pagar, el solo asintió, me quede con muy mal sabor de boca.

Salí de la tienda y me senté en una jardinera para poder calmar a Gared, lo logre despues de un rato, luego fui a dejar mis cosas a la casa y a arreglar una pañalera para Gared, quería ir a ver a Annet para no estar solo en casa pensando tonterías.

Cuándo por fin llegue y toque la puerta quien me abrió fue Atsushi, me alegré de verlo, le sonrei con picardía

-vaya vaya

-Hola mocoso, ¿Qué haces aquí?-ignoro por completo mi insinuación.

-Me sentía solo en casa y vine a saludar, ¿y usted?-se agacho para cargar a Gared

-Yo vine a despedirme asi que que bueno que te veo-me mordí el labio inferior y agache la mirada-no hagas pucheros niño, por ti llevo aquí más de 2 meses extras de lo que planeaba quedarme-asenti.

-Ya lo se, pero no puedo evitar ponerme triste ¿si?, lléveme y hágase cargo de mi y del bebé-se rió y me revolvió el cabello.

-Ni que estuviera yo loco-tienes que cuidarte mucho Chris

-Lo se, no se preocupe…¿oiga Atsushi?

-Dime

-¿Usted piensa que Eric a cambiado aunque sea un poco por mi?, digo, ¿cree que deba darle otra oportunidad?-se burló

-Mira Chris, Eric es un mafioso, por muy bueno que sea con su gente sigue siendo alguien que no está dentro de la ley, un villano, pero dentro de su propio mundo si, creo que ha cambiado, le has podido moldear un poco a tu manera, creo que ahora lo tolero un poco más, pero el que más ha cambiado eres tú, has madurado muchísimo, no vayas a hechar a perder a esa criatura-negué-cuidate y aunque ese zoquete esté cambiando vete con cuidado con su relación, tu sabes bien que desde el principio su relación no fue algo normal o sana, tu tenias 13 años Chris y él, bueno, los años que tenga, por donde lo veas aunque su concepción del tiempo sea distinta y las épocas que ha vivido concebian ese tipo de relaciones, no es lo más correcto que digamos.

-Lo sé...lo sé, no lo mencioné, se que es cierto pero vamos, desde el inicio yo solito fui quien buscó tener contacto sexual con él...cuando lo conocí ya estaba dañado y no lo justifico, ha sido una mierda conmigo, pero de los abusadores que he tenido por lo menos en el ámbito sexual el no ha sido malo conmigo...y ahora creo que ya puedo decidir que hacer ¿no?

-No tengo idea de que pasa aún por tu cabeza Chris, aun necesitas mucha ayuda-suspire y asentí, quería gritarle que no era cierto pero a Atsushi lo respetaba demasiado, escuchar lo que uno no quiere siempre enoja y yo quería convencerme que ya estaba bien, lo que ocurrió con Mark horas antes era una muestra de que no era así, claro que aún necesitaba ayuda-en fin, cuidate y cuida de este niño-lo levanto un poco para besarle la frente y luego me lo devolvió-vendré el próximo año ¿bien?-asentí, sonrió y de nuevo me desordeno el cabello, luego se marchó, Annet nos veía desde la sala, cuando cerró la puerta Atsushi ahora si entre y me senté con ella

-¿Pero qué preguntas haces mocoso?-me recargue en su hombro-nos haz moldeado a tu pinche conveniencia a todos no solo al vampiro-me reí, era verdad, me sentía cómodo con ellos y con Jade, se habían acoplado a mi a la fuerza, también extrañaba mucho a la señora Julia, gracias a ella yo pude conocer el amor de una madre por un rato y también por ella fue que por primera vez me imaginé a mi mismo cargando a un bebé, deseaba verla enserio aunque me doleria muchisimo que ella se enterara de todo lo que había pasado en el tiempo después de estar en su casa, mis recaídas horribles y todo lo que tuvo que ocurrir hasta llegar a tener un bebé, obviamente también deseaba ver al contador, esa bella pareja fueron los adultos que por primera vez me miraron como lo que yo era, un niño y no con desprecio o asco, no me miraron como a un pobre diablo, un niño mugroso de la calle, un ladrón o un agujero con patas, ellos me miraron con amor y todo gracias a Eric, no de la mejor forma pero por él conocí a personas que aunque a veces mi cabeza me hiciera creer lo contrario, me querían sinceramente, se lo agradecía de corazon, casi hacia que también valiera la pena todo lo malo por lo que me hizo pasar.

Y bueno, me pase toda la tarde en casa de Annet, comimos juntos, miramos películas, me ayudó con el bebé un rato y pude  tomar una siesta, casi pude olvidarme del encuentro que tuve con el estúpido Mark, ya no lo odiaba por estar con Eric, ahora lo hacia porque queria ser como él, no dar verguenza, lastima ni asco, me molestaba mucho darle vueltas a eso pero enserio queria estar junto a Eric pareciendo alguien listo, un chico digno de ser la pareja de un importante hombre de negocios y cabeza de la mafia y no ser conocido solamente como "la puta que tiene Eric Sammet", queria ser su pareja en todo el sentido de la palabra; no le comente nada a Annet, habia ido a descansar y olvidar no a quejarme.

Cuando salí de su casa ya eran las 6:30pm, estaba bajando la temperatura así que me prestó otra manta a parte de la que yo ya llevaba para proteger a Gared del frio.

Caminé hacia la avenida principal para poder tomar un taxi pero entonces me tomaron por los hombros, me asuste hasta que escuche la voz.

-No te asustes chulo

-Estupido-se burló, era Eric, de agachó a besarme los labios, correspondi.

-¿Qué haces aquí?-me quito la pañalera.

-Vine a ver a Annet obvio, ¿y tú?

-Vine por mi auto, vamos-me sujete de su brazo

-Ambos parecemos tus hijos

-No me veo lo suficientemente viejo para haberte engendrado a ti.

-¿Qué haces hasta acá solo?, ¿no viene tu niñera contigo?

-No le digas así-se refería a Cedric, llegamos al auto, él subió rápido por sus llaves, luego subimos al auto-pues nada, vine a visitar a Annet, estaba aburrido, comí con ella, cuido a Gared un rato y pude dormir un poco, además le pregunté por la fórmula y me dijo que estaba bien y cuál debería comprar.

-Bien, entonces puedo ayudarte con eso durante la noche, así podrás dormir más-asentí aunque era tan rara la idea de pensar en el ayudandome enserio-se que es difícil creer en mí.

-Lo es

-Quiero hacer las cosas bien, ya no voy a lastimarte.

-Lo siento pero es que en serio me cuesta mucho creerte-me reí- pareces otro tipo-suspiro

-Vamos, te llevaré a casa, luego iré al bar y pasaré a comprar la leche que te dijeron.

-No tienes porque avisarme..¿Eric?

-Dime

-Sobre la casa-me escuchó atento- mira, yo no quiero que Gared crezca infeliz viendo como su madre es señalado por todos, y quiero que pueda tener espacio para jugar y un lugar bonito, me quería aferrara mi casa porque es lo único que tengo y por que de ahi nadie me puede sacar, pero no quiero ser egoísta, quiero comenzar de nuevo de 0 en otro lugar.

-Lo que quieras Chris, busca el lugar que te guste en la ciudad y lo comprare para ti-se acercó para besarme, le correspondi-¿de acuerdo?-asentí

-Gracias Eric

El resto del camino fue un poco silencioso, pero cómodo, ¿porque no fue así desde el principio?, ¿porque le perdonaba todo?, ah Eric te amaba y te amo tanto.

Llegamos y me dispuse a entrar a la casa.

-Cuando me desocupe volveré

-Da igual, ya estaré dormido si tengo suerte

-¿Vas a ser así de frío ya?

-¿Que se siente culero?-se bajó del auto, se acercó y me beso-¿Creías que te iba a dejar acercarse a mí sin restricciones? ¡Pues no cabron!

-Lo estás haciendo-me abrazo por la cintura y de nuevo me beso, me reí porque era cierto, no estaba poniendo casi resistencia a él aunque todos me decían que lo hiciera, sabía que era riesgoso, pero lo amaba demasiado, quería creer en él una vez más, suspire y correspondi bien el beso, ¿que importaba?, de todas maneras él no iba a dejarme en paz y bueno, la verdad si queria que Gared tuviera un papá; lo mordí para que cortara el besó.

-¡Hey!-¿no tenías que irte ya?

-Chris-suspiró en mi cuello y me beso,, no me le iba a poner en bandeja de plata, porque por más dócil que Eric estuviera conmigo y me jurara amor eterno, él tambien quería hacer la reconciliación "oficial", osea que quería tener sexo conmigo se veia algo frustrado en ese momento, pero la verdad yo no tenia ni una pizca de interez en coger por el momento, muestra de su interes fue que despues del beso en el cuello puso una de sus manos en el borde de mis pantalones y deslizo los dedos en el interior tocando mi piel, retrocedi un pasó para alejarlo.

-Adiós-se acercó una vez más pero lo volví a alejar molesto-si sólo estás caliente buscate a otro.

-Ya, ya, lo siento-se separo de mi con cara de decepción y me causó un poco de gracia-me voy.

-Eric, solo has lo que tengas que hacer, no quiero saber cada segundo donde estas o que haces solo se honesto.

-Ok…

-¿Recuerdas ese día en el mar?

-Si

-Ese Eric me gusta, seguías siendo tú, pero eras amable conmigo

-Así será entonces-sonrió y me beso la frente, luego se marchó.




----Eric-----

Chris no era nada tonto, era xierto que andaba de queda bken, pero es que ya no queria cagarla y volver a arruinar todo, cada que me veia al espejo y veia mi ojo en su lugar tambien veia a Christopher llorando y gritando mientras Alain lo sujetaba en sus crueles manos, veia a la muerte acercandose a él, arrebatandomelo, no queria saber como era la vida sin él, era la primera vez que enserio experimentaba ese sentimiento desde que perdí a Alain, podia entender mejor a Dag y lo que sufrió al perder a su amado Leiv y no sabia como comportarme frente a Chris más aun cuando la habia cagado tanto.

Cómo sea, regrese al bar, no tenía prisa por ponerme a trabajar asi que entré por la puerta principal, antes de siquiera abrir la puerta del despacho me percaté de que Dag no estaba sólo, Atsushi se encontraba con el, según yo era su ultimo dia en el país, bueno, estaba a punto de entrar pero no se, por curiosidad escuche un poco detrás de la puerta agudizando el oído ¡y vaya puta conversación que me encontré".

-¿Entonces en la madrugada se va?-preguntó Dag

-A las 5am sale mi vuelo, solo vine a despedirme y a dejar estos papeles que me pidió Eric, Dan ya esta nuevamente al frente de la clínica y lo que ya todos sabemos, el mocoso va a estar bien siempre y cuando se cuide y se alimente bien-rieron yo sonreí.

-Hasta usted calló por ese crío

-No te atrevas a comparar el afecto que yo tengo por Christopher con los enfermizos sentimientos que tienen ustedes par de monstruos

-Ya, ya, no empiece con eso

-¿Tu también te irás o no?

-Si, ese es mi plan, estoy feliz por Chris y el pequeño, pero me cuesta trabajo verlos juntos-eso lo sabía más que bien, obvio le dolía pero tener a Dag a mi lado me era de mucha utilidad, bien, segui escuchando un poco más y al parecer Dag estaba tan distraido que no había sentido aun mi presencia.

-Ya deja de atormentarte, él no recordaba nada, estaba en tiempo fuera-Atsushi se burló

-Aun así no debí tocarlo

-Si me lo preguntas preferiría que tu lo cuidaras en vez de Eric, eres más estable.

-No, no se lo pregunte, ese niño ya tenia dueño-apreté los puños, en un segundo mi humor había cambiado y estaba muy enojado-aunque el me insistió yo debi alejarlo, fui muy debil

-¿Te arrepientes?-pregunto Atsushi pero yo no di tiempo a que respondiera, antes de que abriera la boca yo ya había entrado y lo había derribado contra el suelo con mis manos en su cuello.

-Anda Dag, responde la pinche pregunta de la cual ya conozco la respuesta para poder ¡arrancarte la cabeza!-desvió la mirada-¡¿De todo el pinche mundo tenias que meterte con él?!, el ha estado con muchos malditos tipos, ¡pero el único que me molesta eres tú!, creí que lo respetabas, y a mi.

-Buenas noches bastardos-Atsushi se despidió y salió rápido de la habitación.

-No me voy a justificar, se me insinuó, pude detenerme pero no lo hice, no tuve fuerza de voluntad ¿ok?, ¿que mas quieres que diga? Lo deseaba, por su condición no pude llegar al final pero si hubiera podido claro que lo hubiera hecho, estoy avergonzado, te fallé, pero no me arrepiento y si fuera su deseo nuevamente lo haría con tal de verlo feliz, lo siento pero es la verdad-golpee su rostro 3 veces con furia llegando a romperle y deformar un poco su cráneo, ni siquiera pueden imaginar lo enojado que me sentía y lo mucho que tuve que contenerme para no lastimarlo mas, como deben suponer lo de su cara tenía arregló, luego del último golpe me levante, me sentía herido y traicionado, asi como lo fue Leiv, Chris era un símbolo de lealtad y un límite para ambos de que algunas cosas no se comparten, pero bueno, era verdad también que amaba a Dag por encima de muchas cosas así que no iba a prolongar mi enojo por mucho, le perdone ahí mismo y extendí mi mano hacia su persona, me miró como un perro cuando sabe que ha obrado mal y la tomo.

-Estamos en paz hermano-ya de pie lo jale hacia mi y nos abrazamos un par de segundos-si es por esto tu decisión de marcharte estate tranquilo, no tienes porque irte...solo alejate de Chris de esa manera-asintió sin responder, su boca y nariz sangraba, el tabique y la quijada no estaban en su lugar, pero no estaba tan mal, Dag era fuerte, de un tirón se acomodó la quijada y después la nariz, por fin contestó verbalmente.

-Me lo pensaré entonces...estamos en paz-hizo una mueca de dolor-cabron-ambos reímos.







-----Aizen------

Desperté gracias a los estridentes gritos de mi hermano y también porque abrió las cortinas haciendo que la luz golpeara mi rostro.

-¡Buenos días hermanito!, ¿como amaneciste

-¡No grites!-se sentó al borde de la cama, aún estaba adormilado y me dolia un poco la cabeza

-¿Quien era?-cambio su expresión a una más sería en cuestión de segundos.

-¿Ah?

-No pongas esa cara-me jalo la oreja con fuerza-un hombre te trajo a noche, los escuche entrar, ¿durmieron juntos?

-¿Que?, ¡No!-Por un momento olvide lo que había ocurrido, me sonroje al recordar-solo vino a traerme, bebí un poco.

-¡No me mientas mocoso!

-¡Es verdad!, yo…-baje la voz-le pedi que tuviéramos sexo pero el se negó.

-¡Aizen!, yo no soy papá pero estoy a cargo de ti, de por si no me encanta ese lugar para que trabajes pero date a respetar, a mi no me importa que seas homosexual, pero no traigas a cualquier pelafustan que encuentres por ahí, no debes dejar que cualquier tipo asqueroso te tenga-me abrazo con cariño y exagerando, solo hizo que me apenara más, lo empuje.

-¿Y tu que?, ya soy mayor de edad ¿no crees?...ademas tu eres un mujeriego de lo peor

-Yo soy a parte, mi deber es cuidar de ti

-Ya te dije que no hizo nada...solo me trajo

-Vale, confío en ti hermanito-me revolvió el cabello y luego salió corriendo de la habitación

-Tch-me cubri con la cobija hasta la cabeza, aun no tenia ganas de levantarme, comence a deprimirme al recordar lo que ocurrio en la noche, ¿como iba a ver a Dag a la cara luego de vomitar ensima de sus zapatos?, y luego lo que hice en la cama ¡por dios!, estaba tan avergonzado que me daban ganas de llorar, seguramente creia que era un estupido, me puse en charola de plata para él y no me tocó ni un poquito, eso significaba que no le gustaba ni un poquito, mi cuerpo no le habia gustado, no era suficiente para el o mas bien no queria lidiar con un estupido virgen, joder, alcoholizado o no yo ya habia tomado la decicion de dejarme comer por el vampiro y que me haya rechazado me hacia sentir muy inseguro.

-¿Que tiene ese niño que no tenga yo?-me pregunté a mi mismo, luego se me vino una frase que dijo en la noche antes de irse y me sentí un poco mejor "no voy a abusar a un chiquillo borracho", supongo que eso hablaba bien de él, no era tan malo como parecía ¿verdad?, dios, me gustaba muchísimo, quería pensar en él como en un buen tipo, Dag estaba tan guapo, su sonrisa melancolica me parecia bellísima, sus ojos verdes que tenían distintas tonalidades gracias quien sabe que fuerza, sus expresiones, bueno, todo el me gustaba era tan masculino y atractivo; ahí mismo bajo las cobijas dirigí mi mano hasta mi entrepierna dentro de mi pantalón y empecé a acariciarme-Dag-susurre, me empecé a masturbar imaginandolo frente a mí, era patético pero necesitaba desahogarme aunque fuera un poco, deseaba mucho a ese hombre y nadie tenía porque enterarse de mis intimidades.

Luego de un rato logré correrme manchando mi ropa interior y no me atreví a salir de abajo de las cobijas.

-Dag, quiero que tu me toques-susurre de nuevo, no quería ser ruidoso para que mi hermano no me molestara, pero si me sentia mas relajado, aprete un poco las piernas seguía caliente pero no había mas que hacer, también estaba apenado, no sabia como lo vería a la cara otra vez.

 

Más tarde cuando escuche que mi hermano salio de la casa por fin me digne a levantarme, él trabajaba de 11am a 6pm y yo de 7pm hasta la madrugada dependiendo el dia, vivíamos solamente los dos y yo era quien hacía los quehaceres, él cocinaba, asi habia sido desde que yo tenía 8 años, mis padres murieron y él se hizo cargo de mí así que era como un padre y por eso me avergonzaba el hecho de que creyera que había estado haciendo cosas sucias con Dag en casa.

El dia se me pasó volando y yo no quería que llegara la hora de ir al trabajo pero inevitablemente así fue, en cuanto llegue Charles se me fue encima con preguntas.

-¿Que paso?-me agarró de las manos-¿lo hicieron?

-No-suspire y me pase del lado de la barra donde estaba él para empezar a ordenar-¡fue desastroso!, no debiste emborracharme-se burló

-Lo siento, lo siento

-¿Pero qué pasó?

-Me llevo cargando pero me sentí mal y vomité frente a el-me cubrí el rostro-después me llevo a casa y le confesé que me gustaba luego de hacer el ridículo.

-¿Y qué te dijo?

-Qué hablariamos cuando no estuviera ebrio, fue tan vergonzoso...le pedí que lo hiciéramos pero él se negó y se marchó-¿qué hay de malo en mi?-me queje y apoye la frente en la mesa, Charles palmeo mi espalda y soltó una risilla.

-Aizen bebé, ya te dije que eres muy guapo pero no sabes como llegarle

-Ese es el problema, no se que hacer, ademas quizas no le gusto porque no tengo experiencia y cree que soy un estupido y no quiere estar con un virgen-de nuevo se burló y lo mire mal.

-Lo que yo creo es que ya te obsesionaste con eso Aizen, parece que se volvió un complejo muy fuerte, todos hemos sido inexpertos, solo se tú mismo y ve por tu hombre-suspire.

-Ni siquiera se si es buena idea, él es alguien peligroso.

-¿Y qué?... Es guapo, rico, simpático, ¿que importa que sea lo que sea si te trata bien a ti?, insisto que si yo no tuviera novio y no lo amara como lo amo yo ya me lo hubiera cogido

-Callate-ambos reímos

-Ya, ya, es tuyo lo sé-me guiño el ojo

Cuándo por fin llego Dag y lo vi cruzar el salón, sentí el calor subir a mi rostro, ni siquiera volteo a verme, fue directo a meterse al despacho con dos hombres trajeados, estaba ocupado y por un lado lo agradecí, no sabía que decirle, seguramente yo no le interesaba y me iba a rechazar y aun no estaba listo para eso, ¡ah, qué frustración!

Pronto comenzamos a trabajar, mi vista todo el tiempo estuvo fija en la puerta del despacho, los hombres salieron del despacho y llegó otro que se me hizo conocido, era un médico, me resigne, al parecer esa noche no iba a ver a Dag, me sentía muy ansioso; suspire.

Más tarde, pasando ya de medianoche me salí al estacionamiento para fumarme un cigarrillo y tomar un poco de aire, me senté en el cofre de un auto y estuve tonteando un poco en el celular, después de un rato y ahora sin esperarmelo vi a Dag salir por la puerta trasera, de inmediato mi corazón se aceleró, camino hasta una parte oscura del lado contrario a mi, estaba agachado y sujetaba su rostro, me puse de pie y me acerque a él, lo que vi me asustó un poco, el cubría su boca y esta estaba sangrando

-¡Dag!, ¿estas bien?, joder-grite, tenia sangre seca en toda la cara y su cabeza se veia medio deforme, como aplastada de un lado, me dio un poco de horror.

-Si, si, estoy bien bebé, no te acerques, mi cara está mal y te asustaras florecita-contradiciendo me acerqué más para verle mejor.

-¡¿Que demonios te paso?!-rodó los ojos y dio media vuelta para darme la cara con su perfil bueno

-Ya te dije que no es nada

-¿quien te hizo esto?-una vez más pase de el, me acerque y tome su cara entre mis manos para verlo de frente, casi me desmayó, el golpe si se veia bastante aparatoso, debía tener huesos rotos si o si, su mandíbula también se veia medio chueca.

-No seas morboso-me dio un manotazo para apartarme.

-¿Quien pudo dejarte así?

-¡Eric!, ¿Contento?, tch...en unas horas o un par de días esto se verá como si nada, ahora vuelve a tu trabajo-su boca estaba entre abiertas y pude apreciar por primera vez sus colmillos, esa era su verdadera naturaleza, Dag era un vampiro real y no solo un rumor, era la primera vez que en serio pensaba a detalle en eso.

-¿Que tanto me miras?, te di una orden, no estoy de humor

-Para recuperarte necesitas sangre ¿verdad?-no pensé mucho lo que dije, me temblaban las manos, solo no quería que se fuera-bebe de mi-jale el cuello de la camiseta exponiendo el mio-no me respondió, obvio la necesitaba, sus ojos brillaron como los de un depredador y en menos de un segundo y antes de poder reaccionar sentí como los dos pequeños trozos de hueso afilado traspasaron mi piel, fue una experiencia increíble, oía el flujo de mi sangre y como él la tragaba, sorpresivamente so estaba asustado, al contrario me quedé en mucha calma y luego nada, perdí el conocimiento.




----Dag----

Me pase un poquito con Aizen, bebí más de la cuenta e hice que se desmayara, pero también, pinche niño, mis heridas necesitaba ser aliviadas y va y me ofrece su sangre como si fuera limonada, cuando sentí que había quedado inconsciente de inmediato me separe de él antes de que ocurriera algo malo.

-Demonios Aizen-lo tomé en brazos y me lo llevé a la casa de Eric, lo subí a una de las habitaciones y lo recoste en la cama.

Me quedé en la habitación con él leyendo cualquier cosa que encontré en el librero, luego salí a cazar porque aún necesitaba más sangre para poder curarme rapido, y regrese de nuevo a lado del mocoso, después de un par de horas mi rostro comenzó a sanar, como dije, no había sido nada grave ya que no me había cortado nada de piel más que la herida de mi cabeza mis huesos tardarían poco en acomodarse, si soy sincero me esperaba mucho más de la ira de Eric, tiende a ser mucho más violento e impulsivo cuando está enojado, pero contuvo bastante su fuerza lo que me hacía sentir más culpable por lo que había hecho aunque tambien me sentia aliviado de que me hubiera perdonado.

-Dag-despertó lentamente, le toque la frente, estaba pálido.

-Hola-sonreí un poco, no podía portarme como un soquete cuando le provoque un desmayo y además ya me sentía mejor.

-¿Que pasa?-miró a su alrededor-¿dónde estoy?

-En mi cama pastelito, me ofreciste tu sangre y creo que me pase un poco-le acaricie el cabello, de inmediato se sonrojo, buena señal de que estaba bien, Aizen era bastante lindo y luego del espectáculo de la noche pasada lo creía aún más.

-¿Cómo están tus heridas?-agacho la mirada, estaba preocupado por mi, y yo me sorprendí un poco de que no gritara de horror cuando vio mi cara deformada y la sangre-¿porque te golpeo?

-Porque ensucie algo que le pertenece y se enojó-suspire-pero ya estoy mucho mejor, ¿no es impresionante?, con poca fuerza logró romperme el cráneo-me reí-pero gracias a tu sangre me siento mucho mejor, pero creo que me pase un poco-a su sangre y a la de otros 3 pobres diablos.

-No importa, me siento bien

-Ajá-se veía pálido como ya mencioné y probablemente estaba mareado.

-¿Dag?-el sonrojo se intensificó.

-¿Si?

-Lo de ayer

-!Ah!, lo recuerdas, vomitaste mis zapatos, con esto estamos a mano-solo quería avergonzarlo más, se veía lindo cuando lo hacía y a mi me gustaba molestarlo.

-Lo siento….pero déjame hablar Dag, me gustas-agacho la mirada-sal conmigo,me gustas mucho-le acaricie la cara

-Aizen…

-¿No te gusto ni un poco?, ¿Qué hay de malo conmigo?-comenzó a llorar, por la falta de sangre estaba igual que cuando estaba borracho pero un poquito más cuerdo creo y sin probabilidad de que me vomitara.

-No hay nada malo contigo bombón, el problema soy yo, soy un patán, no te convengo.

-Con ese niño no eres un patán, solo quiereme-me senté frente a él y le limpie las lágrimas.

-¿sabes a qué me dedico?

-Masomenos-agacho la mirada.

-Vamos a dejar de lado eso ¿bien?-asintió-concentrate en como trabajo, tu ves como coqueteo con personas en el bar, les hablo bonito, los besó, bien, es parte de mi trabajo, ¿te agrada?

-No...claro que no, pero si tu dices que me quieres no me importara más.

-Yo sé que eso es mentira, me doy cuenta de cómo me miras con enojo cuando estoy con otras personas, eres un buen chico, no deberías buscar liarte con gente como yo.

-Es que no es algo que pueda evitar-de nuevo le limpie las lagrimas.

-No me gustaría herirte, me agradas Aizen pero si tu estas enamorado solo voy a lastimarte.

-Es porque te gusta ese otro ¿verdad?, no me quieres porque soy un estupido virgen-no pude evitar reirme, no burlarme, solo que se me hacía tierno, por la pérdida de sangre era como si nuevamente estuviera borracho y decia puras cosas que en sus 5 sentidos lo avergonzarian demasiado-¡no te rías de mí!-me dio un golpe en el hombro.

-Es que no es por eso bebé, a mi no me interesa tu vida sexual

-Entonces sal conmigo-se hinco en la cama frente a mi, me agarró del cuello un poco tosco y me beso los labios.

-Tranquilo, hasta ayer yo crei que me odiabas y de la nada me saltas ensima y pides sexo, ¿Que ocurre?-quería indagar un poco mas, no queria romper su xorazon xuando el mio lo estaba-¿Que me ves?, en nuestros primeros encuentros dejaste claro que no me soportabas.

-Eso fue porque cuando fui a pedir trabajo tu estabas con esos estupidos bailarines-me abrazo-si quieres me portare como ellos...te portabas tan diferente.

-¿Diferente a que?-lo mire curioso-esa fue la primera vez que me viste

-No, no es así, cuando encontré el letrero que solicitaba personal yo te vi, te veías diferente-sus mejillas de nuevo se encendieron y agacho la mirada.

-¿Estas bien?, estas mareado por la pérdida de sangre 

-¡No!, bueno si, pero ese dia te veías triste y muy sólo y yo quería acercarme, no tenías esa mirada de zoquete de siempre, estabas pensativo ...me gustaste en cuanto te vi.

-¿Que?, ¿o sea que te atrajo mi cara triste?, ¿eres algún tipo de sádico?

-Quieres desviar el tema, ¿verdad?-frunció el ceño

-Que listo

-¿Que te tiene asi Dag?, quiero conocerte, quiero descubrir que hay dentro de ese enorme hombre fuerte y sarcástico-se acurruco en mi pecho, no me molestaba hablar de mi pasado pero si me dolía y ese chiquillo ni siquiera era cercano a mi-despues de ver esa expresión triste en tu rostro 2 veces sé que la máscara es la de patán y no esa-me rei y le acaricie la espalda.

-¿Que quieres Aizen?, ¿empatizar?, tu también tienes algo que te hace daño ¿no es así?

-¿Me contarás?

-Cuentame tu entonces-quería escucharlo un poco mientras ordenaba mis ideas, ¿que me tenía tan triste aun?, la pérdida de Leiv era algo que llevaba muchos años atormentandome pero que poco a poco había superado, me daba miedo amar a un humano sabiendo que lo iba a perder, y luego aparece Christopher y me enamoro profundamente de él sabiendo que es un amor imposible para mi y eso me tenía un poco destruido, ¿debía contarle eso a cualquiera?, no, Aizen no era cualquiera, era parte de ese pequeño puñado de seres humanos ingenuos que me parecían interesantes, como Chris, como Mark, me gustaba el mocoso, pero por eso mismo no quería herirlo con otros amores que tenia atorados aun-tenemos tiempo, me acosté a su lado y nos cubrí con una manta, la apretó entre sus manos.

-Yo también me siento sólo...cuando vi tu mirada en el cielo pensé en mi mismo...tú también perdiste algo importante ¿no es así?-asentí-yo fui criado por mi hermano, mis padres murieron en un accidente cuando yo era muy pequeño y yo me volví una carga para él, intento ser lo mejor que puedo...pero sin mí quizás él sería más feliz y estaría más tranquilo, me dolió mucho perder a nuestros padres, pero el era mas grande, debió afectarle mucho más que a mi, cuando era más pequeño ocasionalmente lo encontraba llorando o mirando a la nada y eso me partía el corazón, aún lo hace...y tu mirada es igual a la de él en esos momentos, así que yo no quería ver a alguien mas sufrir de esa manera en silencio...el me tiene a mí pero no deja demostrar sus emociones abiertamente enfrente mío, y tu eres igual...yo quisiera ser tu apoyo-sin darse cuenta sus palabras eran duras, pero me sentí en calma, los vampiros no somos más que humanos muy viejos, a ellos tambien les duele demaciado la pérdida, pero por lo menos con la muerte lo superan, yo aun sentía ese vacío enorme en el pecho y si Chris moría ese hueco se agrandaria y así sucesivamente si me atrevía a seguir amando una y otra vez, yo solo quería dejar de sentir dolor, mi vida solitaria había sido más placentera aunque llena de recuerdos, comprendía un poco a Eric y al porque se negó tanto tiempo a tener otro vínculo amoroso; las manos de Aizen sobre mi cara me sacaron de mis pensamientos-ahí está otra vez, esa cara...cuéntamelo.

-Veras...Chris prefirió a Eric antes que a mi-intente bromear

-No...no es eso…-agacho la mirada, le acaricie el cabello y me rei.

-Amo a Christopher, pero si me enamore de él principalmente fue porque su cara es bastante parecida al amor de mi vida, con quien compartí una vida entera, la suya claro, por primera vez, un chico de mi pasado que al igual que a Chris sigo y seguire amando por la eternidad, el murio, ¿contento?, esa es la pérdida que me atormenta, él fue mi amante humano por más de 50 años, ya han pasado más de 120 años desde que lo conoci-se sorprendió por el tiempo mencionado-te has enamorado de un viejo, ¿eso está bien?

-No me importa

-Que necio

-¿Cómo se llamaba?

-Leiv

-Aun lo amas entonces? -se deprimió

-Hasta el dia que alguien o algo logre matarme el estara en mi corazón-no quería lastimarlo y por eso estaba siendo claro desde el principio, a Leiv jamás sería capaz de negarlo.

-¿Y a Chris?

-También tiene un lugar importante en mi corazón, sin embargo Chris jamás podrá ser mío, no me pertenece y nunca lo hará-un par de lágrimas nuevas resbalaron por sus mejillas, no me hacía feliz lastimarlo pero ¿para qué mentirle?, si fuéramos a coger y ya, todo estaba bien pero si estaba enamorado no sería justo; me sorprendí mucho cuando levanto la vista hacia mí y sonrío.

-Eso quiere decir que haz superado el pasado ¿no?, puedes amar a otras personas-como digo, no es que estuviera obcesionado con el recuerdo de Leiv, es solo qie preferia no volverme a enamorar y evitarme mas dolor prolongado al perder seres amados, claro eso y el hecho de que al cerrarme un poco no habia conocido a nadie que realmente me interezara, eran puros chicos huecos interezados en mi fisico, en la droga y en el sexo, hasta Chris no me habia interezado en nadie romanticamente y hasta Aizen nadie se habia acercado a mi  mas alla del sexo-si pudiste enamorarte de ese niño, hare que te enamores de mi

-Que terco eres-mire al techo y sonreí, él se abrazó a mi brazo.

-¿Que tengo que hacer para conquistarte Dag?

-Nada bebé, eres encantador tal y como eres, no eres tu el problema.

-Mentiroso-estando en sus 5 sentidos no sería tan directo, era bastante tímido con los sentimientos y lo canalizaba siendo un poquito agresivo, así apendejado era mucho más honesto pero ambos lados me parecían adorables.

-Tengo que pensarlo ¿bien?, no quiero jugar con tus sentimientos ni que tu odies a Chris por mi culpa-me levante-ahora descansa un poco.

-¡No lo odiare!, dame una oportunidad-le acaricie el cabello

-Descansa otro poco caramelo y luego hablamos.

-No Dag, ayer me dijiste lo mismo

-No me ha tocado verte en tus 5 sentidos

-No soy idiota, no me siento mal, entiendo cada palabra-me acerque y le di un beso para callarlo.

-Duerme un poco, voy a conseguirte algo de comer y regresaré con una respuesta, ¿ok? Lo prometo-asintió y me dio la espalda volviendo a acostarse en la cama, luego me fui.

Como dije, fui a conseguirle algo de comer, no podía llevarlo todo anémico a su casa y hacer que el hermano se preocupara, además enserio lo estaba pensando, Chris jamas seria para mi y quizás ya era hora de tener algo serio con alguien otra vez, digo, yo seguiría amando a Leiv y a Christopher pero eso no significaba que no podía enamorarme de otra persona que si me amaba a mi y ser feliz;  con eso dando vueltas en mi cabeza termine parado afuera de la ventana del cuarto de Chris y ahí iba yo con preguntas que no le incumbian al pobre mocoso; toque la ventana insistentemente hasta que me abrió.

-¡Chingada madre! , ¿Que?, ¿que quieren?-se asomo aun somnoliento y notablemente irritado-Dag…¿que quieres?, dejame dormir-me reí

-Perdón-salió por la ventana y se sentó en el marco, yo a su lado.

-¿Es en serio guapo?, es la 1:30am, estoy muy cansado, Gared lleva solo una hora dormido y muero de sueño, ¿Que necesitas de mi?

-No lo se...realmente no se que hago aquí-suspire, Chris se recargo en mi hombro-¿Volviste con Eric?

-Pues se puede decir que si

-Lo amas-afirme

-Estas raro, ¿quieres pasar?

-No creo que sea buena idea, Eric ya se enteró de lo que te hice cuando tenías amnesia y me metió una chinga que bueno…

-Lo siento

-No pasa nada, tarde o temprano se iba a enterar, como sea, nunca tuve una oportunidad contigo ¿verdad?, digo, Cedric tampoco la tuvo, tu amas a Eric y yo tampoco lo volvería a traicionar-Chris me tomo de las manos sacándome de mi ensimismamiento que solo me hacía parecer un loco, me miro a los ojos.

-Perdon Dag pero no, amo a Eric a pesar de todo, es el papá de mi bebé y espero que en el futuro si esto funciona me de mas hijos, te amo y amo a Cedric con todo mi corazón pero no de la manera en que lo amo a él, me duele lastimarlos pero mis sentimientos no van a cambiar.

-Lo se, lo se-de nuevo rei, como dolia

-Entonces ¿qué pasa?, estás muy raro

-Nada, es solo que tengo a un chico virgen sobre la cama ahora mismo que dice quererme esperando que le diga si quiero o no una relación con él y no se que decir.

-¡¿Ah?!, ¡ya sé!, el bartender ¿no?-se emocionó y asentí-se abrazó de nuevo a mi brazo-él creó que me odia un poco pero pienso que es muy lindo.

-Ayer se alcoholizo y me confezo sus sentimientos, luego se arrojo a mi creyendo que con sexo me iba a conquistar y me ofrecio su cuerpo.

-¿No te gusta?, ¿no quieres?

-Como hombre claro que quiero, desde que lo conocí hay tensión sexual y obviamente me quería acostar con él-Chris se burló-pero no quiero lastimarlo, él no es como toda la gentuza con quien me meto, es un niño de casa.

-Y tu un caballero...Dag eres increíble, Eric no hubiera dudado en aprovecharse.

-No me conoces bien mi amor-mire al cielo-tu solo conoces mi lado bueno, soy igual que Eric.

-No lo creo...y bueno ¿a todo esto que?, ¿vienes a pedirme permiso?

-Tch, ¿permiso de un mocoso que huele a pipi? ¿Que va?, vengo a convencerme de que jamás podré tenerte y que andar detrás de ti es estupido si no hay futuro.

-Me haces sentir mal 

-Que bueno

-Y no huelo a pipi hijo de puta-ambos nos reímos-como sea, Dag, amó con todo mi corazón a Eric Sammet y jamás de los jamases seré tuyo.

-Auch

-Date la oportunidad con ese chico, no tienes nada que perder, ¿te gusta?

-Si, se me hace lindo y es interesante, me gusta molestarlo y si soy honesto antes de que se me confesara le traía muchísimas ganas.

-¡Ahi esta!, ahora lo tienes a tus pies y no se, quizas pueda darse algo mas, deberias darte la oportunidad de amar de nuevo...no a mí, alguien que te corresponda de esa manera, estoy seguro de que Leiv estará feliz  y obvio más feliz saber que eres correspondido

-Eres cruel

-Me pediste honestidad...y yo tambien estare feliz de verte feliz Dag, yo nunca quise hacerte daño, te quiero y desee muchas veces haberme enamorado de ti y no de Eric, pero asi no funciona, ahora quiero que encuentres a alguien que sí pueda hacerte feliz, la pérdida de Leiv fue dolorosa pero ¿no disfrutaste la vida a su lado?

-Cada segundo

-Ahi lo tienes, tu lo hiciste feliz a él, tienes derecho de volver a encontrarte con el amor asi que deja de ser un puto cobarde e intentalo, tienes mi permiso-se burlo.

-Callate Chris

-A eso venias aunque lo niegues, si Eric que esta mas pinche traumado que yo puede seguir avanzando tu tambien puedes-asentí-ven-me jalo y nos abrazamos de frente-¿quieres verme feliz?

-Sabes que si mi vida-le heche un mechón de cabello hacia atrás

-Pues yo también quiero lo mejor para ti...y que me dejes dormir-ambos nos reímos

-Vale...voy a intentarlo con ese mocoso-suspire pesadamente.

-Sólo no seas cruel...no pienses en mi

-Lo intentare-rei-te falta mucho para poder entendernos bebé-ninguno aflojamos el abrazó-yo puedo llegar a amar a Aizen o a algun otro tanto como te amo a ti o como amo a Leiv pero no por eso voy a reemplazar mis sentimientos por ustedes, solo será otra persona a la que ame.

-Lo entiendo un poco...Eric me ama, pero también sigue amando a Alain y a ti...y esta bien, creo que es difícil pero puedo empezar a entenderlos.

-Gracias Chris

-Cuando quieras...pero de ser posible antes de las 12 ¿si?-me reí

-Vale-nos separamos y no pude evitar tomarlo suavemente del mentón y acercarme a besarle la boca un par de segundos, no me dijo nada, sonrió, luego nos separamos, él entró a casa y yo me marche, ah Chris mi niño, había madurado tanto, con 17 años se estaba poniendo realmente hermoso en todos los ámbitos.

Regresé a casa de Eric, subí a mi habitación y ahí estaba Aizen mirando por la ventana claramente nervioso, no se percató de mi presencia hasta que me senté en la cama, dio un pequeño brinquito del susto.

-¡Dios!, no hiciste nada de ruido

-Come-le entregué un contenedor desechable con pasta caliente y un vaso térmico con café.

-Es de madrugada, ¿donde conseguiste comida?-comenzó a comer

-Yo puedo conseguir lo que sea a cualquier hora

-¿Y entonces?-dio un bocado y ese bonito color rosa volvió a sus mejillas

-¿Entonces qué?

-¡Tu respuesta!, deja de burlarte de mi

-No me burlo-suspire-no me voy a hacer del rogar ¿ok? Pero vamos a dejar las cosas bien claras Aizen, me gustas, me agradas y si quieres podemos intentar tener una relación, no me voy a acostar con nadie, pero necesito que tu entiendas que estar cerca de la gente es parte de mi trabajo y…-no me dejo terminar, dejo a un lado su comida y se acercó para abrazarme, no pude evitar sonreír.

-¿En serio?, ¿vas a salir conmigo?, ¿como un novio?-también lo abrace y acaricie su cabello.

-Déjame acabar

-Si, ya entendí, seguirás de perro con tus clientes pero no me engañarás

-No es andar de perro, yo soy un gancho-asintió-y sobre todo Aizen, no quiero problemas con Eric, si te llegas a topar con Christopher, que no lo creo porque tiene bebé y supongo que ya no irá al bar, no quiero que lo veas feo, ni le hables de manera grosera ¿ok?, el y yo somos amigos, en ningún momento tuve una relación con el asi que no tienes porque ponerte celoso ni encabronarte-asintió haciendo un puchero medio triste, levanté su rostro y le di un besito-Aizen, estoy siendo honesto contigo, me gustas pero el no dejara de gustarme de la noche a la mañana ¿ok?

-Si...ya sé, lo acepto y si dices que te gusto con eso me conformare...hare que te olvides de él-apreté su labio inferior con mi pulgar y mi índice y lo jale.

-No, tampoco digas que te estás conformando mocoso, no eres un reemplazo ¿ok? Si digo que me gustas solo debes hacer que me enamore de ti-me reí, él se quejó con el apretón-y él seguirá siendo importante para mí-asintió y me di un manotazo.

-Entonces…¿quieres tener sexo conmigo?-iba a ser divertido salir con ese niño, no pude evitar reír por el comentario.

-¡Joder!, tu no estas listo para eso niño

-No soy un niño, tengo 22 años

-Y llevas 2 minutos saliendo conmigo, no me pidas sexo o me decepsionaras.

-¿No es lo que quieres?

-Al inicio sí, pero no te voy a presionar para nada, mis necesidades fisiológicas no me dominan asi que sacate esa idea de la cabeza, sabes, pareces un poco acomplejado

-No quiero que pienses que soy un aburrido-quiero ser de tu tipo-me hinque en la cama para poder correr las cortinas del cortinero, gruesas de terciopelo para no permitir entrar la luz en la mañana, luego el se paso para el lado de la ventana y me acosté junto a él.

-Eres de todo menos aburrido Aizen, ademas, que tipo de persona crees que es de "mi tipo", no quiero un ninfomano si es lo que piensas-apague la luz y encendí la lámpara del buró, su ritmo cardíaco aumento.

-No lo se…¿bailarinas?, ¿prostitutas?, ¿menores de edad?

-¿Que?, ¡no!, ¿Qué tipo de persona imaginas que fue mi amante?

-¿El que mencionaste?

-Si, el resto solo han sido compañeros sexuales, el fue mi pareja-Aizen sonrío y su mirada se iluminó.

-No lo sé, dímelo tú, ¿si digo prostituto te enojaras?

-No tengo porque, hay gente valiosa entre los prostitutos, pero no, Leiv no era prostituto, cuando lo conocí era un precioso chico de 17 años, el chico mas inocente que he conocido en toda mi vida, y cómo sacado de un cuento de hadas yo lo recaste de su encierro-me miro con duda, sonreí-su padre abusaba de él y lo tenía encerrado, nos encontramos por casualidad una noche que el escapo para pasear por el jardín y lo rescate, me enamore de el perdidamente casi de inmediato y el de mi de una manera inocente y limpia, el era mudo jamás pude escuchar su voz pero el sabia bien como expresar su amor sin palabras, junto a él cualquiera es un maldito pervertido-rei-y para que lo sepas tarde meses antes de tocarle un solo cabello.

-Entonces mi primera impresión no fue equivocada

-¿Cuál fue?

-Todo lo contrario a un patán- me abrazo

-Lo soy, pero creo que te tocó conocer mi lado bueno

-Estoy feliz

¿por qué?

-Conozco ambos lados entonces-me rei

-Ya duérmete Aizen

-¿Dormirás conmigo?

-Si, vamos a dormir juntos pero por la mañana me marcharé ¿si?

-¿Porqué?

-No quiero que despiertes junto a un cadáver

-No me importa-me agarró de la mano-estoy enamorado de ti Dag-sonreí y le di un beso, se durmió rápido, yo me quedé contemplando su rostro pensando aún si era o no buena idea, enserio no quería herir a nadie, pero me sentía muy feliz.






----Eric-----

Termine mis compromisos como a las 2:30am y regrese a casa de Chris, aun estaba molesto por lo que ocurrió con Dag, recordaba un día en que el llego al despacho apestando al aroma corporal de Chris, seguramente había sido ese dia pero en fin, suspire antes de entrar a la casa, tenía que controlarme si no quería cagarla.

Chris estaba profundamente dormido, había puesto cojines en la orilla de la cama para evitar que Gared se cayera, lo tenía junto a él, ambos eran adorables, de repente Gared despertó haciendo ruiditos y moviendo sus pequeñas manos en busca de los brazos de Chris, me acerque y fui yo quien lo alzó, Chris continuó durmiendo, saque al niño del cuarto.

-¿Tienes hambre?-lo mesi, estaba quieto mirándome con ese par de hermosos ojos azules, sonreí y bese su frente, con poco más de un mes se veia mucho mas saludable, mi hijo, que extraño era llamarle así, mi bebé Gared, luego de un segundo a otro, de la nada comenzó a llorar con fuerza, lo mesi sin resultado alguno, aún no tenía ni puta idea de como preparar yo solo la leche ni de como cambiar pañales, regrese a la habitación viendo como Chris tentaba la cama desorientado buscando al bebé y luego como despertaba de golpe asustado al no encontrarlo.

-Lo tengo yo, tranquilo

-¡Por dios!, ¡me quieren matar!, damelo

-Si-le pase al niño de inmediato

-Si lo acosté conmigo es para tenerlo cerca y no tener que levantarme tantas veces, casi me de un infarto, ¡avisame!-me miró con enojo mientras se acomodaba en la cama para darle leche al niño.

-Ya, ya lo siento-me senté a su lado, Gared de inmediato comenzó a mamar, el cerró los ojos

-¿Ves?, asi es mas fácil darle de comer, aunque hoy no estoy tan cansado, Annet me ayudo con él y pude dormir por la tarde un ratito-solo sonreí, verlo con el bebé me calmaba.

-Dejame la leche preparada y yo puedo darle de comer si despierta de madrugada

-¿El gran Eric Sammet dándole de comer a un bebé?, no, no, mejor aun, cambiando pañales quisiera verlo-se burló

-Lo harás, intentaré ser un buen padre ¿vale?

-Ok-desde que entré a la habitación sentí el aroma de Dag en Chris pero no quise armar un escándalo pero me era imposible ignorarlo después de lo que había pasado muchas horas atrás.

-Hoy vi a Dag

-¿Ah si?, yo también-no intentó ocultarlo, bueno no tenía por qué.

-¿Vino a verte?-mi ira regreso

-Si, vino a contarme de un chico que quiere con el pero ya sabes, estaba confundido por el hecho de estar enamorado de mi y el pasado, vino a aclarar su mente...tu y el quizas son mas parecidos de lo que piensan

-¿Y cual te gusta más?

-No seas mamon, ¿tu que crees?, sigo contigo a pesar de todo lo que me has hecho.

-Se que te acostaste con él

-Si, también me lo contó, eres bruto, ¿porque lo golpeaste?

-¡No pude evitarlo!

-Shhh-mesio al niño evitando que comenzara a llorar.

-Lo siento pero, ¿Querías que lo dejara pasar?, me da rabia

-No tienes derecho a enojarte y en cualquier caso no tuvimos sexo...nos tocamos un poco...el me ayudo a masturbarme y yo le di una mamada

-¡No necesito saberlo!-hice que Gared llorara, me hervía la sangre de imaginarlo.

-Quita esa cara de enojo, mira lo que has provocado...ya, ya calma mi amor… shhh-se levantó con cuidado y comenzó a pasear de un lado a otro al bebé hasta conseguir calmarlo-yo no estaba saliendo con nadie en ese momento, es más ni los recordaba y fui yo quien le insistió para intimar, no tenias porque pegarle y te repito, no tienes porque reclamarme cabron, y si vas a estar gritando mejor largate.

-No...lo siento-suavice mi tono de voz-no te reclamare nada, pero no puedo evitar estar enojado, entiende

-Tch...ademas aunque yo no tuve sexo con él con esto quedamos a mano.

-¿Ah?

-Si, tu tuviste relaciones con ese estupido niño (Mark) aun sabiendo que lo odiaba y yo con tu hermano, olvidalo y yo lo olvidare

-Esta bien-dije a regañadientes, obvio no estaba de acuerdo pero él tenía razón yo menos que nadie podía reclamar algo así y no quería pelear.

-Siéntate-le hice caso, después el se acomodo a mi lado quedando acostado de lado con la cabeza en mis piernas y el niño contra el pecho, ya no estaba lactando pero seguía ahí sintiendo el calor y el aroma de Chris-le acaricie el cabello.

-Que envidia-dije para cambiar el tema y no soltar el veneno contra Dag que traía atorado.

-¿Mmmh?

-Al bebé-puse mi mano en su hombro y suavemente con 2 dedos roce su pezón libre, hizo una mueca, los tenía sensibles

-No Eric, me duelen-me contestó tranquilo, volví a pasar mis dedos y esta vez lo sujete un poco entre ellos, sin apretarlo, no quería lastimarlo.

-Te extraño- se enojó y me dio un manotazo

-¡Que me duelen!, ¡escuchame!

-Ya, perdón, perdón.

-Atsushi me dijo que tenía que esperar minimo 2 semanas antes de volver a abrirle las piernas a alguien-que sutil-y aunque no fuera así no tengo ganas, me gusta estar contigo pero no quiero coger, aun me duele el vientre, también mis costillas y estoy cansado, si tantas ganas tienes de meter tu cosa en algo comprate una muñeca o yo que se.

-Que asco-hice una mueca-lo siento, no te presionare, es solo que desde que me curaste del envenenamiento-acaricie su cabeza-no he tenido relaciones sexuales con nadie

-Me cuesta mucho creer eso-habían pasado como 9 meses

-Lo se pero es la verdad

-Uy pobrecito-dijo con sarcasmo y burla-debes estar bien acumulado

-Tch...callate

-Ese no es mi problema Eric, ya te dije que no tengo ganas, mi cuerpo esta cansado, mi energía es para mi hijo...además esto significa que me 

sigues viendo como a un objeto sexual.

-Claro que no...no volveré a insistir hasta que tu me lo pidas-se alzó un poco en su brazo y yo me agache para darnos un beso.

-Gracias Eric...y si en serio me estas siendo fiel me haces feliz.

-Me lo pediste alguna vez

-Si, y te burlaste de mi-suspiro-me gustaría que fuéramos normales-cerró los ojos

-¿A qué te refieres?-peine su cabello con mis dedos

-Convivir contigo por las mañanas, ser mayor de edad para que no nos observen ni me juzguen.

-No se puede Chris

-Ya se, pero ¿no te gustaría ser humano?

-No recuerdo que se siente ser humano-mire mis pálidas manos con esas venas que se veían a través de mi traslúcida piel-hablando de lo físico y en cuanto a mi vida humana fue corta, la mitad está borrosa, y siendo vampiro aunque mis inicios fueron duros y tristes me la he pasado muy bien.

-Fue una pregunta estupida, solo pensaba en mi

-Shhh… deja que termine de hablar, ahora después de todo lo que ha ocurrido los últimos casi 4 años, y más específicamente después de ese amanecer que vimos juntos y la puesta de sol ¿lo recuerdas?

-No podría olvidarlo

-Bueno después de eso...me deprimi y por eso te aleje, desde ese momento he pensado que si volviera a ser humano seria feliz-aprete mi propia pierna, aun me costaba hablar de mis sentimientos pero con Chris era fácil-vivir contigo y hacer cosas de parejas normales, ver crecer al niño-mire a Gared-y si, morir-sonrei, yo supongo que en algún punto cualquier inmortal desea la muerte, algunos enloquesemos y recobramos la razon con el paso del tiempo, la muerte nos seduce y nos llama pero no todos sucumbimos tan rapido, en mi caso suicidarme seria de cobardes y dejarme matar de debiles, pero la muerte era algo que siempre estaba ahi ronddando en algun rincon de mi mente, todo tenia un siclo y yo era solo un depredador agregado a la cadena alimenticia sin ningun beneficio, la inmortalidad me parecia dolorosa y muy solitaria; Chris me miraba con sorpresa, le acaricie los labios con mi pulgar-no te sorprendas por escuchar que me gustaria morir, es solo que asi podria cumplir mi siclo a tu lado, asi pasara lo que con Dag, te perdere y no podre hacer nada, solo ver en silencio como el tiempo va acabando contigo-rei-y asi un nuevo trauma me perseguira durante otros 500 años, en cambio si estuviera vivo moririamos como un par de ansianos, como debe ser mi vida, si, eso me haria feliz.

-La vida es poética pero la inmortalidad no

-Así es-guardamos silencio durante varios segundos



------Chris-------




-Tu me lo dijiste alguna vez-fui yo quien rompió el silencio

-¿En serio?

-Si, pero no imaginaba que pensaras así-se encogió de hombros-es triste

-No creo que sea el término, como ya te dije me la he pasado bastante bien, pero si, de cierta manera es triste-alce a Gared y se lo di a Eric

-Palmea su espalda con cuidado, tiene que sacar el aire después de comer-me hizo caso, se levantó y se acomodo al bebe en el hombro para hacerlo, a continuación ocurrió justo lo que yo esperaba, al hacer eso Gared vómito la espalda de Eric, me reí y él hizo una mueca-que chistosito Chris

-Era una probabilidad, yo no tengo la culpa-se acomodo a Gared de nuevo en brazos y este sonrió como si supiera lo que hacía, me rei mas.

-Si me has vomitado tu, ¿crees que él vomito de el me va a dar asco?, es pura leche-me devolvió al bebé y después se sacó la camisa, ah, era fantástico, después de muchísimo tiempo podía ver de nuevo el torso desnudo de Eric, digo, no queria coger ni ponerme cariñoso ñero ver no estaba para nada mal, me encantaba su cuerpo; revolvió mi pequeño closet en busca de alguna camisa, y si afortunadamente aún conservaba una o dos prendas suyas...o de Cedric, aca entre nos no sabia de quien era, en fin se puso la playera y de nuevo me quitó al niño.

-Limpialo

-¿Con que?-señale el pequeño mueble cajonero que él mismo había llevado para mí, había toallas húmedas para bebé, lo acostó en el espacio donde se cambiaban los pañales, luego tomó una toalla y le limpio la boquita, luego le desabrocho la playerita que llevaba puesta y se la quitó con cuidado, luego sacó una limpia y de la misma forma se la coloco, yo me estaba quedando dormido de nuevo ahí recostado en el borde de la cama, me relajaba verlos, Eric se veía muy guapo de papá-ya duermete-bostece.

-Mmmh-negué, ya me estaba acoplando a la rutina de Gared, a pesar de que ya había cumplido el mes su ciclo de comida aún no era tan espaciado, supongo que por haber sido prematuro, al principio comia cada hora, en ese momento ya dormía un poquito mas y tenia que amamantarlo cada 3 horas masomenos y luego de 15 minutos tenia que cambiarle el pañal antes de volvernos a dormir; me levante con muchísima flojera y fui a cargar a mi niño-tengo que cambiarle el pañal, las enfermeras me dijeron que no lo deje sucio mucho tiempo.

Me lleve al bebé a la cama, sentía que era más cómodo que arriba del cajonero, Eric se acostó junto a él, observando y jugando con sus manitas, Gared también lo veía con atención, le empecé a cambiar los pañales y Eric parecía muy interesado me parecía tierno que pusiera atención, sonrío.

-¿Qué?-le devolví el gesto

-No sé, sigue siendo extraño verte siendo tan cuidadoso, nunca te imaginé así, ambos hemos cambiado mucho.

-Supongo que si-termine de cambiarlo y volví a arroparlo, agradecí al cielo que no se mojara y no me mojara a mi, ya me habia pasado que al estarlo cambiando por el frío me orinara y tenia que cambiarlo a él por completo y yo también, por eso Dag me había dicho antes que olia a pipi, ser madre no era tan fácil como yo me había imaginado, ya cambiado y alimentado una vez más le entregue a Eric al bebé y yo por fin volví a la cama.

-¿Eric?

-¿Mmh?-No sabía por qué pero una idea acerca de Mark se me había metido en mi cabeza, quizás por el reciente encuentro.

-Si yo fuera menos mal hablado...y me vistiera mejor, digamos, como el estupido Mark, ¿te gustaria mas?, ¿no te averguenzo?-mis ojos se estaban cerrando de sueño, le decía lo que sentía y no lo que quería.

-No seas tonto, Mark es lindo, es listo y educado, amable, pero no estoy enamorado de el, lo estoy de ti, en conjunto, tu personalidad, la falsa y la real, tu forma de vestir y de hablar, el era interezante pero simplemente no es lo que busco.

-Me alegra saberlo, no te gusta la gente buena

-No es eso bebé, tu eres bueno-sonreí

-Me lo han dicho tantos pero aun asi me siento una porqueria

-No lo eres...eres bueno aferrandote por fingir que eres malo y yo buscaba eso, gente rota y mala para pasar el rato, pero no eras malo y me interesé más en ti, estabas destrozado mi amor pero aun así seguías siendo noble y no lastimabas a nadie, y yo quise llevarte al límite haciéndote pedacitos-se acercó y me acarició el cabello, su honestidad seguía doliendo mucho

 

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