Es TAN necesario el comprar algo de ropa Isabelle?-
-Obviamente... Alec, a ti puede no importarte pero, si vas a salir con un chico como él, debes aparentar una mejor imagen... Y...-
-Y...?-
-Nadie puede verse mucho mas guapo que mi hermano-
La gente los miraba, asombrados de que tanto él como ella, fueran tan bien parecidos... Se encontraban en el Centro Comercial, con una Izzy corriendo de un lado a otro, con un Alec no muy feliz de una tienda a otra... El sólo se limitaba a probarse lo que la chica le pasaba, pero con total desagrado al mirarse en el espejo y saber que así no era él...
Después de TRES horrendas horas (Donde Isabelle apenas y le había dejado probar una hamburguesa de un muy conocido restaurante de comida rápida) la chica en cuestión, encontró un conjunto que, a los ojos de Alec, era excesivamente costoso, pero para ella no...
-Izzy, es absurdo que esa camisa cueste eso...-
-No lo es... Y se te ve increíble... Debemos llevarla- Lo decía mientras tomaba un pantalón y un saco a juego... Era un conjunto casual pero lucía sumamente elegante... Y resaltaba la belleza natural del chico...
-Que hace tan especial a este chico como para que de verdad, hasta tú me estés casi obligando a salir con él?-
-Aparte de ese sensual cuerpo que se carga? Pues... Que es la primera vez que te veo interesado de verdad... Y se ve que el tipo arrastra más que el edredón por ti...-
Alec sólo pudo ponerse feliz y sonrojado ante los comentarios de su hermana... Ella siempre era así... En fin... Ya estaba cambiado, pero había un par de cosas que le incomodaban... Una de ellas, que Isabelle casi lo había obligado a usar el dije que el otro le había obsequiado y dos, verlo tan pronto y después de un par de bochornosas situaciones, no le daban mucha oportunidad para pensar...
Es decir, no le disgustaban ni la atención ni los detalles recibidos, pero... Su corazón estaba en contradicción con el "mal de amores" por su hermano y por la euforia de este Romeo... Despues de comprar la ropa y tomar un café como descanso, Izzy lo dejo cerca del restaurante y esto porque ella debía ir por Max a la escuela...
Se despidieron y Alec pensó en perder un poco más el tiempo antes de la comida... Cerca de donde se encontraba, pudo vislumbrar una librería, pero al caminar hacia ella, encontró una joyería... Que casualmente, era de la marca del obsequio que le había sido entregado... Alec no era alguien superficial pero, le había entrado la curiosa necesidad de saber cuánto podría estar despilfarrando el tipo ese sin su consentimiento... Entró en la tienda (que de módica nada tenía) admirando muchas joyas pero ninguna tenía ese gusto ni la sencillez que distinguía al dije que portaba...
Casi se va de cara al ver algunos de los precios que había... El más humilde claro, rebasando los $350 dólares... Casi rogando porque no fuese verdad, se acercó a una de las encargadas con solo una clara intención...
-Por favor, puede decirme si esto fue comprado aquí?- Le decía a la chica que solo se limitaba a sonreír y verificar la pieza que el chico (claramente avergonzado) le mostraba...
-Efectivamente... Esa pieza fue comprada hace no más de dos días, piezas únicas de oro blanco con baño en platino y brillantes y zafiros... Excelente elección del caballero...-
-... No quiero sonar grosero, pero... Un aproximado de lo que costó...?-
-Su prometido me advirtió que podía venir a preguntar eso y nos ha prohibido el decirle...-
-M-Mi que?- Alec no podía estar mas avergonzado que en esos momentos...
-Pero... le diré que rebasa los $1,000 pero no excede los $10,000...- Alec casi escupe el corazón al escuchar eso... La chica en ese momento fue llamada por quien podría ser su supervisor, por lo que Alec se quedó solo y con una cara de incredulidad máxima... Sin embargo... Habia felicidad en ello...
Por su lado, Magnus estaba con una cara de imbécil que no podía con ella... No esperaba la llamada del ojiazul y mucho menos el que esté le invitara a comer... Terminó cuanto antes la cita con el socio (mejor dicho, lo corrió, pero al estar embobado con la bella sonrisa y los ojos iluminados del moreno ni se molestó en preguntar) llamó a su asistente para cancelar cualquier cosa pendiente y le ordenó expresamente no recibir ni una llamada esa tarde...
Era temprano, pero debía salir a comprar ropa para verse irresistible... Bueno, ya lo era pero... Necesitaba sacar artillería pesada para ese inesperado movimiento del menor...
Iba paseando de una tienda a otra, siendo seguido por varios y varias chicas que estaban encantados con el guapo asiático... Y mas aun al ver lo bien vestido que iba... Pero justamente cuando se había resignado que ese dia no existía nada que pudiera impresionar al otro, en medio de dos enormes tiendas, entró a una considerablemente más pequeña, pero con un conjunto que decía: "Magnus Bane, debes tenerme"...
Pareció broma, pero casi voló hasta donde se encontraba una chica planchando ese traje que casi se le metía por los ojos y le salía por la boca... La mencionada en cuestión, estaba asombrada de que el exótico chico gustara de tan peculiar modelo...
-NECESITO ESE TRAJE- Le decía Magnus a la pobre chica que no sabía si reír o llorar...
-L-Lamento mucho esto señor, pero, ya está vendido... -B-Bueno... Esta casi pagado... Puedo ofrecerle otros...-
-Por favor, dime que me lo puedo probar...- Y Magnus no sabía que cara es la que había puesto, pero la chica se limitó a quitar el traje de donde lo tenía para entregárselo (aunque a leguas se miraba que ella sólo buscaba no la vieran sus jefes)... Pasó a Magnus a un vestidor entonces...
Magnus le rezaba a todos los dioses que conocia... DEBIA TENER ESE TRAJE... ERA... ERA EL EN TELA!!...
-Señor?-
-Por favor... No hay nada que pueda hacer para que me vendan esta magnífica pieza que se ve aún mejor en mi?- Magnus salió del vestidor sólo para enseñarle a la chica el como lucía y, ella, admirada de tan guapo comprador sólo asentía... Salió disparada con sus jefes y al volver, lo hacía con un chico que al ver al otro, se sonrojo al instante... Gracias Dios!! Ese era una de sus conquistas...
-M-Mucho gusto señor... Me han dicho que está interesado en esta pieza-
-Hola, cuanto tiempo lindura... Me enamoré de este traje y me informan que no está pagado por completo... Crees poder vendérmelo, claro, pagando una generosa bonificación?- Magnus sonreía galante y hermoso en su nuevo traje... NO lo iba a dejar ir...
-L-Lamento...-
-Por favor...- Magnus le miraba tan determinado que cualquiera que lo viera pensaría que se comería vivo al otro...
-Señor... El apartado vence el día de mañana... No podemos hacer una excepción? Luce mucho mejor en el joven a decir verdad...- La chica intentaba adular a su jefe, quien no podía con la vergüenza de que ese tipo en especial hubiese llorado por el traje...
-Hazle la nota... Y aplica un 10% de descuento...- El chico sólo se dio media vuelta y se fue... No quería ver al egocéntrico moreno en su vida (aunque no negaría le encantó verlo en su cama)
-Por favor señor, acompáñeme- La chica le sonreía como si hubiese hecho una travesura...
-Oh querida... Te has ganado el cielo...- Magnus al pagar, le dio su tarjeta a la chica que lo miraba incrédula... Nunca se hubiese imaginado que el fuera tan importante diseñador... -Ve a mi oficina cuando quieras, o llama al teléfono... Este favor te lo devolveré con creces...-
Magnus salía entonces muy sonriente con el traje puesto... Obviamente, ahora que Alexander estaba en su vida, no repetiría errores pasados... El necesitaba a ese chico... Por el haría lo que fuera... Regreso al pent house sólo a dejar la ropa sobrante y por alguno de sus dos autos... Ambos idénticos a el... Finos, elegantes, ostentosos y, sobre todo... Brillosos...
Magnus condujo hasta el restaurante donde Alec lo había citado, dando al ballet sus llaves, y acercándose al host que lo miraba embelezado...
-Buenos tardes... Tengo reservación por parte del señor Alexander Lightwood o Magnus Bane-
-S-Señor, por este lado... Esta a nombre del señor Alexander Gideon Lightwood... Es la mesa VIP-
-Encantado... Y más si el dueño está en el menú...-
Magnus entraba y caminaba por el restaurante, siendo admirado, desnudado y violado por muchos y muchas, pero nada lo podía distraer... El iba tras el hermoso chico que se encontraba en la mesa, jugando con sus manos y que se notaba totalmente perdido entre esa gente... La mesa en cuestión, estaba alejado de todo, pero se escuchaba la música suavemente...
Alexander al verlo, se paro de inmediato de su lugar, dejando que el otro observara lo arrasador que se veía... Pantalón y sacó negro mate, con una camisa de estampado de peonías en colores pastel... El mismo diseño que el de su traje... Eso se llamaba destino... Se veía encantador... Y mas aun al saberse observado por el menor de forma tan detallada...
Alec por si lado, estaba más que ansioso... Más al ver entrar a Magnus que lucía increíble... En un nada discreto traje, con el mismo estampado que su camisa, lleno de peonías de colores pastel y fondo negro... Con sus ojos verde amarillento delineados de purpurinas negras y leves destellos plata... Pendientes discretos y uno en especial con una rosa en color palo* y anillos que adornaban de fina manera sus manos... Se levantó de inmediato para recibirlo, con una sonrisa que se pinto sola y acomodándose junto a la silla para que Magnus se sentara...
-Es trampa que descubrieras varios de mis gustos por la cena de anoche Alexander...- Magnus se sentía encantado con aquello... Ese lado de su inocente niño le estaba gustando...
-Luces increíble Magnus...- Alec le sonreía tan amplio que podía jurar dolían sus mejillas... Pero no le importó en ese momento...
-Lo mismo digo cariño... Te ves fresco pero... Muy galante...- Magnus le decía esto a la vez que le guiñaba el ojo y pedía una copa de vino al camarero...
-Que es lo que desean ordenar?-
-El chico frente a mi, en término medio por favor- Magnus soltó aquel comentario sin mayor preámbulo y con una risa,. mientras que el ojiazul sólo se sonrojaba y pedía a la tierra que se lo tragase... -Pero como debo cenar con él, creo que debo pedir algo mas...-
-Lo que tu pidas estará perfecto para mi- Alec trataba de zafarse de aquel incómodo momento pero Magnus volvió a hablar.
-Eso nos hará parecer... Más gays- Y ambos comenzaron a reír mientras el camarero sólo tomaba la orden cuando decidieron dejar sus "homosexualidades"... Despues de eso, comenzaron a platicar más cómodamente, Alec sonriendo en todo momento, disfrutando de la compañía de aquel chico que... Bueno, odiaba admitirlo, pero si, su sola presencia le fascinaba y le encantaba, lo hacía sentirse cómodo consigo mismo, sincero y sin fingimientos*... -Estás molesto por...- Magnus se animó entonces a preguntar...
-No... Si lo estuve, pero... Ahora mismo lo había olvidado... Aunque debo admitir que se nota, eres un mujeriego...-
-Bisexual espontáneo y libre pensador cariño- Alec casi escupe el vino...
-Por favor, si alguna vez nos ven mis padres, jura que no dirás eso- Alec se puso blanco ante el comentario y Magnus por su lado comenzó a reír...
-Justo anoche me dijiste algo muy similar...-
La charla continuaba, entre la vida de Alec y las exigencias de sus padres y las anécdotas de Magnus en sus viajes... Compartían información... Sólo eran amigos con miradas... Más discretas... La tarde pareciera de en sueño...
-Magnus Bane... Cuanto tiempo sin verte cariño...- Y cual felino, a este se le erizó la piel al escuchar su nombre y esa voz...
-...- El moreno sólo se limitó a mirar en dirección donde se encontraba la propietaria de esa fémina voz... Pero con una mirada que Alec, por primera vez veía...
-Mira ese rostro... Tan galante como siempre... Aunque, cada vez usas mas maquillaje amor mío...- Y eso fue una espinita en el corazón de Alec y al parecer, una enorme molestia en el.otro, quien se levantó de su asiento... -Y que tenemos aquí...- Decía mientras miraba a Alec -Un precioso muñeco, de rostro de ojos azules y cabello azabache...- Soltó una risotada antes de que el de ojos felinos tomará el brazo de esta y le mirara inquisitivamente... -Es tu nuevo juguete?... Porque si es así... Te enseñé a escoger muy bien...-
-Perdóname, debo retirarme un momento... Ya vuelvo...- Alec se asustó ante la voz tan seria y profunda del otro, pero se limitó a asentir con la cabeza...
-Mucho gusto Nephilim... Soy Camille Belcourt y soy la prometida de Magnus...-
-Cállate si no quieres que te mate-
Alec no sabia que hacer... La chica no parecía tener vergüenza alguna y se reía ante las palabras del otro... Pero... Lo que dijo, ahora le carcomería el alma...
No se tentó el corazón y jalo a la chica fuera de su espacio, escuchando Alec, el como ahora le ordenaba soltarla, pero Magnus firme sólo desapareció...
La chica era sin duda hermosa... Sus cabellos eran dorados, naturales a leguas pero con luces en color chocolate, que con un flequillo enmarcaban unos ojos verdes preciosos... Pero frívolos y déspotas, nada parecidos a los de Magnus... Su piel era blanca, tal y como si una muñeca de porcelana se tratara, con un cuerpo delgado pero bonito... Engalanada de un vestido rojo y un abrigo de plumas que la hacia lucir aún más exquisita... Pero esa belleza se iba al demonio, con todo lo dicho al mayor, que parecía dirigido con nada más que hiel...
Y nuevamente... Temía salir herido...
Tal vez...