Ignora el estruendoso sonido de la charola puesta frente a él y se limita a seguir perdido en sus pensamientos, desde esa mañana no tenía ánimos de absolutamente nada y agradecía que su hermano no lo fuese a fastidiar ese día tan insistentemente como toda la semana, quizá porque ayer le vio llegar con la mirada perdida y un aire de melancolía recorriendo todo su cuerpo fue que se condolió un poco.
- Amigo si de algo sirve siempre creí que ese tipo era un completo idiota - palmea su espalda en un gesto amigable, Deidara - además siempre olía a neumático descompuesto -
Itachi apenas y forma una ligera sonrisa de lo más forzada, entendía los esfuerzos de sus amigos por reanimarlo pero no podía simplemente ignorar el hecho de que se entrego por tanto tiempo a una persona que solo lo quería para calentar su cama.
- Ve el lado bueno de esto, ya no tienes que repartir tu tiempo en tantas cosas - apoya Kisame, tomando de su refresco -
- ¡Exacto! ahora ya puedes pasar más tiempo con nosotros - exclama emocionado el rubio, levantándose de su asiento - Esto no debería ser un momento triste, venga ya Ita, hagamos una fiesta en mi casa está noche -
- Muchas gracias chicos, de verdad apreció mucho que estén conmigo ahora pero no creo que eso sea una buena idea - habla por fin luego de un rato de estar sumergido en sus pensamientos-
-Tonterías ¿cuánto lleva que no vas a una fiesta? -
- Bueno en realidad.... -
- ¡Por favor! estoy seguro de que va más de 1 año y medio, no puedes sumergirte en una espiral de depresión y menos por un tremendo hijo de puta -
- Deidara creo que Itachi tiene razón, lo que menos necesita ahora es ir a una de tus reuniones que ya todos sabemos terminara con marihuana por aquí y por allá, más bien necesita un tiempo a solas ¿no es así? - voltea a su al pelilargo que solo sonríe, Kisame le comprendía mejor que nadie -
-¡Juro que no habrá drogas! - se puso la mano al pecho en pose de militar -
- ¡Qué cabeza dura eres! - revolotea los ojos y mira al pelilargo que parecía mejorar su estado de animo -
- Está bien, pero será en cuanto termine mi turno en la cafetería -
- ¡Se arma la fiesta! - grita feliz tomando todas sus cosas, tenía varías cosas que arreglar en casa para la reunión de está noche -
Itachi intenta formar una sonrisa, la verdad que no tenía ánimos de salir a ningún lado pero puede que sus amigos tengan razón, distraerse le vendrá bien y si algo no podía negar era que llevaba un buen rato sin ir a fiestas.
- Deidara - llama antes de que esté se esfume por los pasillos del colegio - una reunión pequeña - advierte señalándole desde su asiento -
- ¡Oye! si a mi me apodan el señor discreción - bromea yéndose a su siguiente clase -
Sería un largo día.
Temari sonreía encantada escuchando la hermosa voz de Shisui a través de los audífonos, estaban terminando de grabar su tercer álbum y justo esa canción sería el promocional en todas las pancartas y plataformas digitales, había sido un tema escrito y compuesto por Shisui, como la mayoría del álbum, era un tema que hacía alusión al maltrato psicológico durante la niñez. Temari estaba sumamente orgullosa de él porque sabía toda el alma que había puesto Shisui en ese álbum, prácticamente desnudaba sus sentimientos ante el público, era un tema íntimo que no solo lo lastimaba emocional y psicológicamente sino que tuvieron que parar en más de 2 ocasiones la grabación cuando la rubia notaba como la voz del menor se quebraba de momentos, pero luego le miraba y esté se mantenía firme, como si contuviera todo ese dolor.
Soy ese niño que tu ves
al que siempre le hablas mal
y que no quieres recordar
pues te apena ver quien es
pero sigue aquí
luchando por esa voz que susurra
que ya no da más
/Coro/
Yo soy la fuerza entre el dolor
el grito en medio de la guerra
El agua en el desierto y que
tu necesitas ver por fin
que sus alas rotas nunca estarán
porque inquebrantable es
/
No lo veías, tu estabas enojado con la vida
pero él no te odiaba, no, no, no
Brincos daba para ser visto
tu no escuchabas, no querías verle más
un payaso eso es lo que era
pero él estaba bien así
¿porqué tú no?
¿qué más podrías desear que amor?
dicen que el amor resuelve las penas más duras
pero no, a ti eso no te va
solo intentalo
no es tan difícil decir lo siento
/Coro/
Yo soy la fuerza entre el dolor
el grito en medio de la guerra
El agua en el desierto y que
tu necesitas ver por fin
que sus alas rotas nunca estarán
porque inquebrantable es
Termina eso último con una ligera nota prolongada que se cierra con los toques de piano formando una melodía melancólica pero bella al oído. Mira a través del cristal a Temari y los demás del equipo sonriéndole complacidos con su trabajo, y él no puede hacer más que bajar la mirada apenado, no es que fuese ajeno a los halagos pues los recibía día con día en todas sus redes sociales y conciertos, pero en está música tan íntima se sentía por completo vulnerable pues tocaba un tema muy delicado en su vida.
- Muy bien, Shisui, si las cosas marchan bien esperamos poder subirla a plataformas esté fin de semana a más tardar, mientras procura hacer señales en tus redes de un posible estreno pero no delates por completo el proyecto, que sea más una sorpresa, imagino que tú también quieres que tus fans se asombren con tu trabajo que desde ya te digo que es estupendo - le anima Temari apoyando una mano en su hombro - solo falta afinar algunos detalles de la música y estará listo para su estreno -
- Bien, está noche subiré un post por instagram -
- Por cierto, note que te sigue Usagi Tsukino, sería bueno que le hablarás por privado - le sonríe coqueta -
- Olvídalo Temari, no voy a prestarme para esas tonterías - se aparta de ella para ir por una de las botellas de agua en los estantes -
- No te he dicho que salgas con ella para que los periodistas curiosamente los fotografíen y entonces ambos se promuevan mutuamente - juguetea con sus dedos -
- Eso es exactamente lo que quieres que haga y créeme, no pasará - da un sorbo a su botella y sale del estudio -
- P-pero es una buena oportunidad tanto para ti como para ella de llevar sus trabajos a niveles más internacionales - le persigue ansiosa - además no me negaras que es una niña linda, ha tenido el puesto número 1 de Radio Konoha y ganado más de 11 premios, apenas tiene 1 año de su revelación -
- Bien por ella. -
La rubia bufa resignada y se mete nuevamente al estudio, ya tendría tiempo de convencerlo.
Por su parte Shisui no estaba del todo interesado en crecer a base de escándalos y farándulas absurdas, si bien hace 1 año y medio tuvo un percance con un paparazzi que intento seguirle hasta dentro de su domicilio y fue un problema total que le costo aparecer en la portada de muchas revisas locales como un tipo prepotente al solo anexar los medios cuando jaloneaba con el paparazzi por sacarlo de su casa, amaba mucho su trabajo pero tenía que aceptar que muchas veces la gente dejaba de tratarlo como humano y solo lo veían como una especie de objeto que todos pueden tocar y todos pueden lastimar sin importar nada, excusándose con el típico "es figura pública, tiene que aguantar". imbéciles.
Además hace tiempo que no tenía pareja, había salido y coqueteado con lindas chicas para pasar la noche, pero solo eso, si bien no buscaba a nadie en esos momentos aunque a su mente llegaran las imágenes de ese lindo chico en la cafetería, y cada que su mente maquilaba como sabrían esos apetitosos labios o que tan suaves serían esos cabellos tan largos, estos pensamientos se esfumaban cuando ante él se presentaba la imagen repulsiva de ese peliplata robándole un beso al chico.
Rehuye de esos pensamientos, tenía que olvidarse de ese chico, ahora más que nada tenía que pensar en su carrera, instintivamente mira su celular donde aún está abierta la app de instagram.
Usagi Tsukino, todos la conocían como Sailor Moon
Lo pensaría, tal vez.
Revolotea los ojos dando un trago al vaso de ponche que le dio Kisame, sabía que algo así ocurriría y no se podía molestar ni quejarse en voz alta entre tanta gente amontonada por la casa no creía que su voz fuese a ser escuchada por Deidara que se estaba atiborrando del tequila y el vodka en la barra de bebidas, incluso temía que su ponche tuviese algún tipo de droga, pero ya daba lo mismo, solo que no se imaginaba pasar su supuesto día de relajación y distracción ante su reciente ruptura, sentado en una silla viendo como sus amigos conversan con demás gente y él se encuentra completamente solo.
Saca su móvil y empieza a tontear un rato en sus redes, le había dicho a su madre que llegaría algo tarde, si las cosas continuaban así no tendría más remedio que regresar y cuidar a Sasuke mientras su progenitora veía la televisión.
Mira sus últimas actualizaciones en FB, no era mucho de actualizar ninguna de sus redes, era más como un espectador fantasma, se metía para ver post divertidos o simplemente mirar las publicaciones de sus amigos en las que lo etiquetaban. Su última publicación fue una junto a Hidan en la dichosa convención de dinosaurios a la que le arrastro, se les veía muy felices abrazados, aún recuerda como Hidan pidió a un chico que les tomase la foto mientras le pedía que hicieran un gesto de tiranosaurio.
Sonríe melancólicamente, la había pasado muy bien.
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Cambio de estado
*es complicado
Guarda nuevamente el celular en los bolsillos del pantalón, se había prometido que se divertiría pero los innegables recuerdos de Hidan no lo dejaban esa noche y suponía que así sería por unos días más.
- ¡Itachi, amigo! ¿cómo las estás pasando? - el estruendoso grito cerca de su oído le sobresaltan y mira al rubio sudoroso y algo rojizo. estaba drogado -
- Estaría mejor si tu y Kisame se sentaran un rato conmigo - gruñe enfadado -
- Lo sé, esto se pone cada vez mejor - continua gritando, parecía no atender a nada de lo que le dijera, efectos del alcohol y droga ingerida -
El pelinegro solo voltea los ojos y se levanta para ir al baño y mojarse la cara
Serenidad y paciencia, se repetía como un mantra para no perder la paciencia y tomar sus cosas para largarse cuanto antes de ahí. Una vez que sale del cuarto de baño tiene que taparse la nariz y la boca pues el fuerte aroma a marihuana le inundan la cabeza, tanto que empieza a toser sin control, ahogándose con el humo infestando toda la casa
Con las mangas de su hoodie se cubre la nariz hasta salir al jardín principal, apoyando las manos en una de las jardineras e intentando recobrar el aliento, nunca había sido fumador, de hecho desde niño siempre tuvo ese problema con el cigarro y su estruendoso aroma, era como si los bronquios se le cerraran automáticamente.
Una vez regulada su respiración se sienta en la jardinera y cierra un momento los ojos, se sentía cansado.
- No pareces estar en el mismo mood que todos - una gruesa voz le despierta y mira al frente de donde proviene tan profundo registro vocal, chocando con esos grandes ojos carmesí -
Abre ligeramente los labios soltando un pequeño e imperceptible suspiro.
Su acompañante suelta una ligera risa
- Eres tan transparente con tus expresiones - menciona divertido, metiendo las manos en sus bolsillos del pantalón -
- Marihuana - logra articular -
- ¿Eh? -
- Adentro, están fumando marihuana - baja la mirada apenado -
- oh ya - se rasca atrás de la nuca - si, eso es muy normal en esté tipo de fiestas -
Hasta ahí parecía haber quedado la conversación, tampoco es que a Itachi se le diera mucho eso de conversar con nadie, nunca había sigo alguien de muchos amigos debido a eso, siempre que intentaba hacer amistades estos se aburrían de su tema de conversación o sencillamente él no encajaba en ese circulo.
Ahora poniéndolo con alguien que le llamaba la atención era caso perdido, de hecho Hidan fue quien se acerco en primer estancia a él y ha pretenderlo porque de no haber sido así dudaba mucho que pudiese contarle a alguien que tuvo pareja alguna vez.
Reacciona en cuanto ve al pelinegro tomar asiento a lado suyo, dejando una distancia prudente entre ambos pero que aún así inquietaban al pelilargo.
- ¿Qué estás haciendo? - cuestiona avergonzado -
- Haciéndote compañía - se encoge de hombros como si fuese muy evidente -
- Estoy bien -
- No lo pareces, además tus amigos te dejaron so... -
- No necesito compañía, estoy bien, puedes irte - interrumpe sin haber querido sonar tan brusco pero la situación de por si era incomoda y sumando que no había tenido un inicio muy bueno con él -
El pelinegro le mira por unos minutos sin decir ni una palabra. Joder. solo esperaba no haberlo ofendido.
Luego de unos minutos se levanta e Itachi por unos segundos se siente mal de haber sido tan tosco en su trato, por eso cuando piensa que esté se retirara no lo detiene pues sabe que se merecía su rechazo
Pero lo que ocurrió no fue lo que maquilo su cabeza, sino que el ojirojo le extendió su mano en una expresión indescifrable
Tarda unos segundos en reaccionar cuando ve la mano tendida frente suya
- ¿Qué.... - quiere preguntar pero el otro solo insiste en que tome su mano - No... - susurra con toque inseguro -
- No es nada malo, te llevaré a mi coche, aquí afuera está haciendo un frío infernal y me estoy congelando -
No es sino hasta ese momento que cae en cuenta de eso, sus manos están heladas y las piernas le tiemblan
- Venga, pondré la calefacción - insiste -
- Estoy bien. - responde abrazándose a si mismo -
- Vaya que eres terco - dice este un poco más irritado, tocándose el puente de la nariz con los dedos - bueno al menos déjame traerte un café o algo, estás temblando - sin esperar por su respuesta ve al pelinegro desaparecer dentro de la casa entre toda la multitud -
Itachi siente un revuelo en su estomago y solo puede morderse el labio inferior mientras siente un ligero calorcito instalarse en su pecho. Puede que no haya sido tan mala idea asistir a está fiesta.