Día 8. Desazón
Mabel se subió y se sentó en la encimera de la cocina, miró por la ventana. Afuera estaban Stan y Bill besándose sobre el cofre del auto.
=Creo que no deberíamos intervenir con esto.
-Mabel, ese tema ya se discutió- Dipper, leía, cambió de página.
Ella siguió callada y preocupada. Cansado de sus suspiros Dipper se incorporó y dejó el periódico sobre la mesa.
-¿Quiéres pruebas de que Bill trama algo?, ¡Sígueme!-
Salieron de la casa, Dipper se plantó frente a la pareja, tras dominarse para no vomitar, carraspeo hasta que consiguió su atención. Cuando Stan se dio cuenta de que los niños estaban allí soltó a Bill, casi se cae, cuando recuperó el equilibrio recogió la caja de herramientas que tenía allí junto tirando todo el contenido. Tomó una llave al azar.
-¡Niños!, Yo sólo, ¡Estamos reparando el auto!- Bill cruzó los brazos y se apartó flotando con ceño fruncido.
-¿Qué había en el baúl?
-¿Baúl, de qué baúl hablan?- Stan se aflojó el cuello de la camisa, se sentía avergonzado.
-¡El baúl que nos hizo enterrar Bill!- Acusó Dipper. Stan miró a Bill contrariado. El demonio fastidiado, tronó los dedos. El baúl salió de la tierra impulsado por una fuerza sobrenatural.
-Creí que estaba en el ático- Comentó Stan. Bruscamente se abrió dejando ver su contenido.
-¿Ahora lo ven? ¡Se está preparando para asesinarnos!- Contenía cuchillos, picahielos, hojas de afeitar y todo lo que pudiera ser usado como arma punzocortante.
-Estaba buscando este- Stan se agachó para sacar un abrecartas.
-¿Algo que decir Bill?- Siguió Dipper. Y aunque si era perturbador mirar el contenido del baúl, no significaba nada.
-Estoy confundido- Stan miró a Bill en busca de una explicación. Este suspiró. Se acercó al hombre y se recargó contra él.
-Luego te explico- Regresó a la casa.
Dipper caminaba en círculos, seguía sin entender porque su hermana y tío no veían lo que él. El hombre y la niña discutían al respecto.
-Si yo fuera a utilizar todo eso para lastimar a alguien no lo enterraría; lo tendría a la vista, en donde pudiera tomarlo cuando lo necesitara.
=A menos que ya lo hubiera usado- Apuntó Mabel- Ocultar la evidencia.
-¡No, no, no! ¡Se están distrayendo!- Siguió Dipper.-¡Olvídenlo! Lo que hizo Bill está mal, eso prueba que trama algo.
-Oh niño, te lo aseguro. Lo único que Bill trama es el margarita perfecto-
…………….............................................
=A menos que lo ocultara después de usarlo, pero lo tenía a la mano antes de guardarlo en el baúl…
-¡Mabel mira!
=¡Es Carla!
-¡Sí vino!-
La mujer caminaba apoyada de su bastón. Tenía un aspecto sereno y llegaba muy arreglada. La reconocieron por su aspecto hippie.
Dipper la escoltó, la chica se apresuró en atender a los clientes, cuando el recorrido del misterio acabó, llevaron a Stan a la tienda y una vez dentro los dejaron solos.
Acomodaron el letrero.
“Regreso en 60 minutos”
-Solo hay que esperar a que la química del cerebro haga su trabajo. ¡Ánimo Mabel!-
Esperaron afuera de la tienda. Se alejaron un poco.
=¡Dipper!=
Bill había salido de la casa, llevaba una canasta consigo y flotaba en dirección a ellos. Instintivamente se ocultaron entre los árboles aledaños.
=¿Qué hacemos?= Por lo bajo=¡El tío Stan!=
Pero Dipper se quedó mudo, nunca esperó que Bill dejara la casa, en todo este tiempo nunca se acercó a la Nueva cabaña ¿Por qué precisamente hoy?
Cuando el demonio llegó hasta la puerta de la tienda, cantó a la par que giraba el pomo.
-¡STAAAAN! Es hora de un OLD - fashioned -roman…-
Bill se calló, y habría hecho algo para interrumpir la escena de no ser porque estaba muy impactado. Cuando quiso aumentar su talla no fue capaz, algo se lo impidió. De hecho se desvaneció brevemente, cuando pudo reaccionar, salió a prisa, no se dio cuenta que dejó caer el cesto que llevaba. Miró el bosque y decidió flotar hacia allí, lo hizo rápido.
-¡Sí!- Clamó con éxito Dipper. Se acercaron a la entrada de la tienda.
=¿No te parece extraña la forma en que se fue?= Dipper comenzó a inspeccionar el cesto que dejó caer Bill hacía unos momentos, lo vació poniendo el contenido en el suelo.
-Sólo huyó porque sabe que su plan se arruinó. No lo veremos más. Apuesto a que usó esto para engañar al tío Stan, debe ser un tipo de poción- Dipper inspeccionó la botella.
-Parece solo vino. Dipper creo que preparó esto en serio- Para Dipper sólo eran cosas al azar, pero en su conjunto Mabel comprendió que se trataba de un almuerzo perfecto para tomar a la puesta del sol con tu enamorado.
-Vino malvado. Tranquila Mabel, esto es bueno. Sí Carla y Stan se gustan tal vez tengamos una tía abuela normal muy pronto-
Regresaron a la casa, Dipper esperaba buenas noticias. No pasó mucho para que Stan volviera.
-¿Tío Stan qué haces aquí?
-Decidí que cerraría temprano hoy.
-¿Por qué hiciste eso? ¿Acaso no conociste a una persona muy interesante hoy?
-¡Sólo clientes difíciles! Estoy cansado-Mentía, los chicos supieron enseguida que lo que pasó en la tienda no fue del agrado de Stan- ¿Dónde está Bill?
-Dijo que iría al bosque por...ingredientes. ¡Sí! Iría al bosque por unos ingredientes.
-¡Que bien!, me está dando hambre-
Tras tomar un refresco del refrigerador se sentó en la sala y encendió el televisor. Luego, conforme pasaron los minutos, y así una hora Stan se angustió. Esto no era normal.
-¡Tío Stan! ¡En serio debe de estar bien! Bill es un ser omnisciente ¡Él solo puede manejar sus problemas!
-No lo sé niños, no es normal que se vaya por tanto tiempo. Sólo daré una vuelta, ustedes quédense aquí por sí regresa. No me tardo-
=¡Tío Stan!=El hombre abordó su vehículo y se marchó. =¡Dipper!, el tío Stan está muy preocupado deberíamos decirle=
Pero el chico insistió que esto era bueno, que Stan estaría más tranquilo cuando el efecto del control mental de Bill se le pasara.
¿Mabel? desesperada. Quería reparar esto y para eso necesitaba la ayuda de Dipper. Y para convencerlo haría lo que fuera necesario. Dudo un poco, y tras tomar aire entró al dormitorio del tío Stan.
-¡Mabel No! ¡No entres allí! ¡No lo hagas! ¡Que asco!-
Nadie, en su sano juicio entraría a esa espantosa habitación. Pero la chica no podía con la culpa. Dipper pudo escuchar como y sin cuidado la niña tiró la habitación de cabeza.
-¡MABEL!
=¡Lo encontré!=
Regresó con Dipper y tras inspeccionar el libro le mostró.
=¡Mira!=
-¡Mabel! ¡Sólo es un tonto albúm de fotos!- Si no estaban en problemas, ahora lo estarían por desordenar la habitación.- ¿Esto qué prueba? Todas son fotos de Stan.
=No todas. ¡Mira bien!= En algunas, por la postura y el comportamiento, el que posaba no es Stan, era…
-¡Bill!
=El tío Stan dijo que él y Bill se casaron en Las Vegas. Pero eso no es posible, Bill no puede abandonar el pueblo, a menos que...
-A menos que lo haga en su forma astral.
=Fantasmal iba a decir. ¿Lo ves? Bill ya hizo un trato con nuestro tío, y no lo usó para cometer algún crimen, o salirse con la suya, usó el tiempo dentro de la mente del tío Stan para casarse con él ¡Por qué lo ama! ¡Y nosotros lo arruinamos!
-¡No tiene sentido!
=Lo tiene, lo que pasa es que sigues sin estar de acuerdo. Por eso el tío Stan no quería decirnos, ¡Sabía que no lo aceptaríamos!
-Suponiendo que tienes razón- Dipper comenzaba a sentir un poco de culpa- ¡De todos modos no está bien! Bill es una pésima influencia para mi tío.
= Dipper, Stan es una pésima influencia para cualquiera. Él y Bill juntos son como dinamita en una cristalería, pero mira todo lo que han hecho siendo un equipo, tienen esta casa, trabajan la Nueva cabaña del misterio. Las personas hablan bien de ellos. Entonces ¿Es tan malo que estén juntos?
-Sigo sin estar de acuerdo, pero bueno. Por un instante imaginemos que lo que dices es cierto ¿Qué sigue?- Le llevaría tiempo asimilarlo, pero comenzaba a creer que su hermana tenía razón.
=¡Debemos traer de vuelta a Bill!
-¿Es necesario?
=¿Quieres verlo despechado? Yo lo prefiero odiandonos en silencio-