Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El primer amor por Sora Hatake

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Kakashi estaba haciendo las compras, tenía un plan perfecto en mente para su cita con Tenzō. Le prepararía una cena de lujo, luego charlarían un poco mientras bebían un poco de vino, y sacaría el tema de las parejas, entonces haría de forma casual la pregunta sobre si ya se sentía listo para lo siguiente. Si se negaba, no había problema, seguiría con sus muestras de cariño sutiles para darle más confianza, pero si aceptaba, entonces le haría la pregunta decisiva, lo había estado ensayando durante toda la mañana mientras se alistaba para ir a trabajar porque quería que todo saliera a la perfección, eso le daba confianza a él.

Compro todo lo que necesitaba, se aseguró más de una vez en llevar todo lo que había anotado en una lista, no quería estar a última hora con prisas.

Paso a la residencia Uchiha, debía recoger a Naruto, quien ya lo estaba esperando en la entrada.

— ¡Nos vemos mañana Sasuke! —exclamó despidiéndose de su amigo para subir al auto

— ¿Vendrás mañana de nuevo? —preguntó Kakashi

—No, es solo que tenemos que hacer un trabajo juntos —contestó Naruto colocándose el cinturón de seguridad

— ¿Seguro de no quieres venir?

—No lo haremos aquí, además de que sus padres salieron de viaje así que no hay problema

—Entiendo, entonces está bien. ¿Aunque no se supone que mañana tienes que ir con Iruka?

—Ya hable con él y me dijo que no había problema

—Bueno, entonces todo bien  —Kakashi se estaciono frente a su casa

—Sí, solo que necesito que mañana nos lleves a la ciudad

—Claro, no hay problema…—Kakashi apago el auto para luego darse cuenta de lo que dijo Naruto y girarse a verlo—Espera, ¿qué? ¿Mañana? ¿Llevarte a la ciudad? ¿Mañana?

—Dijiste mañana dos veces —comentó Naruto viéndolo

— ¿Qué necesitas en la ciudad?

—Ah, es que debemos de realizar un trabajo para artes, es un ensayo sobre una exposición que está actualmente allá. Iría yo solo con Sasuke, pero mi tobillo todavía no está bien para viajar  parado en tren y tú tienes auto, no hay problema, ¿verdad viejo?

—Eh, pues yo—Kakashi vio a Naruto quien le sonrió—No, no hay problema, yo los llevo

— ¡Gracias! ¡Sabía que podía contar contigo! Primero le dijimos a Itachi pero no pudo, así que le dije a Sasuke que no se preocupara porque de seguro tú si podías. ¿Por qué hay muchas compras? —preguntó percatándose de las bolsas en la parte trasera

—Son cosas para la casa

—Oh, te ayudo a bajarlas viejo —Naruto bajo primero para llevar las bolsas dentro

Kakashi soltó un suspiro, no había problema, solo debía hablar con Tenzō y cambiar su cita para el domingo, sin problemas, sabía que él lo entendería. Bajo del auto para ir hacia la casa del castaño y tocar la puerta

—Kakashi-senpai, justo estaba esperando a que llegaras

—Ah, ¿en serio? ¿Paso algo?

—Pues me surgió un compromiso así que debo cambiar nuestra cita, lo lamento —dijo Yamato para hacer una leve reverencia

—No, no, no te preocupes —Kakashi negó con las manos—. Yo venía a lo mismo

— ¿Ah, sí? ¿Y tú por qué?

—Pues debo llevar a Naruto a la ciudad para algo de su escuela

— ¿En serio? Que causalidad, yo debo llevar a Sai

Era cierto, los tres iban en la misma clase así que tendrían que ir a lo mismo

—Pues los llevo entonces, así podremos pasar el día juntos

—Me parece perfecto senpai —Yamato le dedico una sonrisa, al final lo que ambos querían era lo mismo, pasar el día juntos.

 —Nos vemos mañana entonces —dijo Kakashi para ir de regreso a su casa

—Sí que compraste muchas cosas viejo —dijo Naruto mientras husmeaba en las bolsas—Vino, carne Premium, hace mucho que no comemos de esta, recuerdo que a papá no le gustaba porque es cara, aunque a mí sí me gusta,  ¿qué planeabas hacer con esto? —Preguntó arqueando una ceja—es como si fueras a hacer una cena romántica cliché —soltó una risita para luego darse cuenta de lo obvio — ¡Ah! ¡Planeabas hacer una cena romántica con Yamato-san!

—Sí, pero creo que será otro día —dijo Kakashi acercándose para acomodar las cosas en su lugar

—Lamento arruinar tus planes —Naruto le iba pasando los alimentos

—Tú no arruinas nada, recuerda, mi prioridad eres tú

—Oh, bueno viejo —Naruto vio el paquete de carne

— ¿Quieres que comamos eso ahora? —pregunto Kakashi viéndolo

—Pero… ¿no lo guardaras para tú cita?

—Ya comprare más después, voy a prepararla y haré una rica comida

— ¿Te puedo ayudar? —pregunto Naruto entregándole el paquete

— ¿Quieres hacer eso? Pensaba que no te gustaba cocinar —Kakashi lo vio curioso por el repentino interés

—No me gusta hacerlo, pero me gustaría hacerlo como tú, siempre cocinas muy rico viejo, enséñame o viviré toda mi vida comiendo sopas instantáneas

—Vamos, te voy a enseñar desde lo más básico hasta lo más difícil —dijo Kakashi que no iba a poder vivir sabiendo que su retoño solo sabía preparar comida nada sana.

.

.

.

—Ayer comimos tanto que aún me siento lleno —le decía Naruto a Sasuke, ambos ya estaban en el auto, solo esperaban Sai.

—De una vez te aviso que no habrá paradas al baño —le dijo Kakashi viéndolo por el retrovisor

—Ah, eso es injusto viejo

—Perdón por la demora —dijo Sai para subir al auto al igual que Tenzō

— ¿Paso algo? ¿No te dejaban venir? —le preguntó Naruto preocupado

—No, es solo que cuando mi alarma sonó la apague sin querer y se me hizo tarde  —contestó Sai viéndolo mientras se ponía el cinturón de seguridad

—Pues bien, si ya estamos todos entonces vámonos —dijo Kakashi para arrancar el auto

—Papá me está enseñando a cocinar, así que les prepare algo de comer para el camino —dijo Naruto emocionado sacando un tupper con comida. —Pruébenlo para que me digan que tal me quedo

—Huele bien —comento Sai

—Deben probarlo ya para que me digan que tal esta —los apuro Naruto

—Mira, yo traje una manzana para ti —Kakashi estiro un poco su brazo para ponerla sobre las manos de Tenzō

—Oh, gracias senpai, es un lindo detalle —habló Tenzō, sabía bien que aquello era más que nada una broma de Kakashi, pero le agradaba que siempre pensará en él, o al menos eso le parecía, si le hacia esas bromitas era porque lo tenía presente en sus pensamientos, ¿no?

El camino a la ciudad era algo largo, pero se hizo tan ameno para todos mientras charlaban uno con otros. Los chicos iban hablando sobre cuándo fue la última vez que habían salido del lugar donde Vivian, Naruto les contó que fue en un cumpleaños suyo, que sus papás lo llevaron a un enorme parque de diversiones en la ciudad, Iruka y él miraban asustados la enorme montaña rusa, pero después de que Kakashi subió junto a él, su miedo se desvaneció y subió otra dos veces para revivir la emoción. Sasuke salía a veces por las aburridas reuniones de su padre, y Sai solo salía en las excursiones escolares por lo que no podía ocultar que estaba emocionado de hacer ese viaje, incluso si de igual manera era algo escolar, lo quería hacer porque iba junto a sus amigos.

Por su parte, Kakashi y Yamato iban teniendo platicas más “adultas”, sobre cómo había cambiado el paisaje a lo largo de tiempo, llenándose de edificios enormes y modernos. Tenzō le iba dando toda una cátedra a Kakashi sobre esos edificios, sobre como su estructura se había modernizado; Kakashi iba atento al camino, pero también a cada palabra que decía el castaño, amaba como hablaba de las cosas que le apasionaban así que disfrutaba mucho escuchar esa charla.

— ¿Es este el lugar? —pregunto Kakashi parado frente a un museo, afuera mostraba un cartel indicando sobre la nueva exposición que había en el lugar

—Sí, justo esta es, vamos viejo —dijo Naruto para adentrarse al lugar seguido de sus amigos

—No había escuchado de este artista antes —dijo Yamato leyendo el nombre del autor de la exposición

—Debe ser alguien emergente —respondió Kakashi para luego extender su mano hacia el castaño —Vamos, hay que estar cerca de esos niños o romperán algo —tardo en darse cuenta del gesto que hizo inconscientemente, era algo que hacia siempre cuando salía a algún lugar con Tenzō en su juventud, en aquel entonces el pequeño Tenzō siempre estaba dudoso antes de huir de la clases y entrar a los lugares a los que lo llevaba su senpai,  y de esa forma Kakashi le daba confianza antes de entrar a cualquier lugar, estirando su mano y esperando pacientemente a que la tomará, pero las cosas, al igual que el paisaje que vieron en su viaje, habían cambiado mucho, Yamato ya no era un chico temeroso a la represarías, era todo un adulto, y es por eso que Kakashi se sorprendió cuando sintió el calor de la mano del castaño.

—Vamos senpai —esta vez fue Yamato quien lo jalo sacándolo del trance mental en el que se encontraba

Si bien toda la cena romántica que había planeado no podía hacerse ahora, igual, podía aprovechar para sutilmente preguntarle si estaba listo a dar el siguiente paso, ¿no? Sabía que debía ser paciente a los sentimientos de Tenzō, pero por dentro se moría de ganas de que fuera suyo ya.

—No entiendo nada de esto —comento Naruto viendo las extrañas piezas de arte que se exhibían

—El artista es bastante curioso respecto a sus obras, es un concepto raro, pero me gusta —dijo Sai

— ¿Lo entiendes? —cuestiono Naruto

—Bueno, creo que el artista da un mensaje, pero a la vez lo deja a la interpretación

Naruto rasco su cabeza, se giró a ver a Sasuke quien anotaba cosas en su cuaderno, parece que él también estaba entendiendo aquello, luego vio a Sai quien de igual forma escribía. Camino un poco para ver más de las obras pero simplemente no entendía nada, se detuvo frente a una, era una araña tallada en arcilla sobre un par de arcilla rota, podía ver que eran pequeñas arañitas que habían sido destrozadas, ¿Por qué el artista destruía sus propias obras? Eso era lo que no entendía.

— ¿Necesitas ayuda? —le preguntó Yamato acercándose

—No, ya casi lo tengo —dijo Naruto, no quería parecer como un tonto

—Bueno, si te interesa, creo que el artista nos muestra un arte que es efímero, a diferencia de otros que buscan preservar su arte, él mismo los destruye, en un momento estuvo ahí, y al otro se deshizo de él, pero aun así lo sigue considerando arte —explico Yamato

— ¿Por qué? Si es su arte, ¿no sería mejor conservarlo?

—Bueno, creo que él no lo percibe así, velo como nosotros los humanos, no podemos ser eternos, en un momento estamos y al otro no

—Ah, así si tiene sentido —dijo Naruto para comenzar a escribir las ideas sobre la exposición que tenía, después debía ordenarlas para escribir bien su ensayo, pero no quería olvidar nada de lo que acababa de comprender.

—Tus alumnos me dijeron que eras un poco estricto, se me hizo raro escuchar eso porque cuando le ayudaste a Naruto lo hiciste muy bien —comentó Kakashi acercándose a un costado del castaño

—Bueno, ellos son universitarios, hay que ser estrictos o se confían, con Naruto es distinto, es listo pero le cuesta trabajo entender las cosas a veces, hay que explicarle de diferentes maneras hasta que logre entenderlo

—Justo así es con mi pequeño solecito —Kakashi se giró a ver a Naruto que ahora rondaba por el lugar viendo el resto de obras—Hay que tener paciencia para explicarle y por lo visto tú la tienes

—El de la enorme paciencia eres tú senpai, a mi… a veces me enseñaron las cosas a gritos y no me gustaría ser así

—Te entiendo, mi padre nunca me levantó la mano, incluso cuando hacia travesuras él solo suspiraba y se sentaba a hablar conmigo, así que me prometí que si tenía un hijo haría lo mismo con él, sin gritos, ni golpes, Iruka era un poco más explosivo, y tuvimos muchas discusiones por eso, no me gustaba nada que le gritara a Naruto sabiendo de sus problemas de atención, y ahora entiendo que fue mi culpa por dejarle eso a él cuando bien podía hacerlo yo

—Vaya, te diste cuenta de tus errores y los estas remediando, eres increíble senpai

—No creo que eso sea increíble, es lo mínimo que puedo hacer

—Para mí lo es

—Para ti todo lo que haga es increíble —Kakashi se giró a verlo, Yamato de inmediato desvió la mirada

—No es cierto —dijo sonrojado, porque claro que lo era, todo lo que hiciera su senpai le parecía increíble

—Bueno, creo que debo serlo, ser un buen ejemplo para mi pequeño kōhai, ¿no? —dijo en un tono juguetón mientras lo despeinaba.

—Mejor hablemos de otra cosa —dijo Yamato intentando desviar el tema

—Me parece bien, porque hay algo sobre lo que quiero hablar contigo —Kakashi se puso serio, ese era el momento perfecto para tocar el tema

—Te escucho senpai

—Tenzō, estos últimos días creo que la hemos pasado muy bien, ¿tú te has sentido a gusto con todo esto?

Yamato se giró a verlo un poco confundido, ¿a qué venia eso de repente? —Pues sí, yo siempre la paso bien junto a senpai

—Pues…entonces…tú —a Kakashi le estaba costando formular correctamente lo que quería decir, y Yamato que había aprendido a leerlo sabía bien que estaba nervioso, lo cual significaba que aquello que no podía hablar era algo serio, era raro que su senpai se pusiera así de nervioso, y creía saber el porqué, así que de nuevo sujeto las manos del Hatake quien lo vio fijamente

—Estos días me los he pasado muy bien senpai, creo que las cosas no volverán a ser como antes cuando éramos jóvenes —Kakashi estaba a punto de bajar la cabeza desanimado, ¿lo estaba rechazando? ¿Aún no estaba listo? —, porque creo que ahora serán mejor, hemos madurado y ahora podemos hacerlo bien

Los ojos de Kakashi vieron fijamente a los enormes y brillantes ojos de Yamato, sabía que significaba eso, pero aun así quería confirmarlo.

—Tenzō, ¿estás listo para dar el siguiente paso?

—Si senpai, me siento listo para hacerlo, solo estoy esperando a que lo digas

No era la increíble cena romántica que tenía en mente, pero no estaba mal pedirlo en un museo, con una figura extraña de arcilla enfrente, ¿verdad? Kakashi de nuevo estaba procesando las palabras que diría, pero Yamato estaba listo para tomar la delantera una vez más y pedírselo.

—Kakashi, yo-

— ¡Kakashi! Que gusto verte —Obito se acercó, y al ver a los hombres tomados de la mano y a su amigo increíblemente nervioso entendió lo que significaba—. Yo, he creo que iré a ver esa cosa de allá

—Ya lo arruinaste, ya quédate —dijo Kakashi para soltar un suspiro

Yamato le dio una palmada en el hombro a Kakashi—Está bien, sigamos con esto después senpai

—Perdón, es solo que no esperaba verte por aquí —dijo Obito sonriendo de forma nerviosa por arruinarle el momento a su amigo

—Ni yo a ti, ¿qué haces aquí? —pregunto Kakashi

—Vine a ver la exhibición

—No pensé que te gustarán este tipo de cosas

— ¿Por qué? Me gusta el arte, y esta es la exhibición de mi artista favorito —habló Obito acercándose más a ellos para luego girarse a ver Yamato quien se había ocultado tras Kakashi mientras hablaban. — ¿Y tú que tienes?

—Perdón —murmuro Yamato—Perdón por lo de tu auto

—Culpa, eso tiene —respondió Kakashi girándose a ver al avergonzado castaño

—Iré con los chicos, en serio, en serio lo lamento —Yamato hizo un par de reverencias a Obito antes de huir

—Espero un día poder llevarme bien con tu novio —dijo Obito viéndolo irse

—No es mi novio…aún —contestó Kakashi

—Dime que eso no fue lo que interrumpí —habló Obito, Kakashi solo asintió —Lo lamento mucho

—Ya lo haré después, sirve que me preparo mentalmente para hacerlo. Pero bueno, yo pensé que tú estarías con Rin

—Ella se fue a seguir con el trabajo, y yo me tome unos días, no quiero estar cerca de ella después de la grosería que te hizo —dijo Obito para negar con la cabeza recordándolo

—No te preocupes por eso, con el tiempo me he acostumbrado a escuchar ese tipo de cosas, pero ya que estamos otra vez juntos, mejor hablemos de otra cosa. ¿Qué era eso tan importante que querías decirme?

—Ah, sí, ¡me voy a casar Kakashi! —exclamo Obito alegremente—. Quiero que estés ahí, y puedes llevar a Yamato, pero de una vez te digo que no le daremos nada de alcohol

—Felicidades —dijo de forma un poco seca, pero la noticia lo tomo por sorpresa—me alegro mucho por ti, ¿quién es la afortunada?

—Bueno… no es afortunada, es un afortunado, y él está aquí

— ¿Ah, sí? ¿Dónde? —pregunto Kakashi

—Ahí viene —Obito señalo a un chico rubio acercándose—Mi artista favorito

—Él… ¿no es el autor de esta exhibición? —pregunto Kakashi recordando haber visto su rostro en el cartel del inicio

—Si lo es, ¿no es increíble? Es su tercera exhibición —decía Obito con orgullo

—Estoy listo para irnos —dijo el rubio cuando llego al lado de Obito

—Deidara, mira él es mi amigo Kakashi, del que te hable —lo presento el Uchiha

—Un placer —dijo Kakashi extendiendo su mano

—El placer es mío, Obito me ha contado mucho sobre ti —Deidara correspondió el apretón

—Espero que hayan sido cosas buenas

—Algunas —bromeo el rubio

—Vine por Deidara para salir a comer, ¿vienes? —dijo Obito

—Oh, pues debo reunir a mis chicos y ver si ya terminaron su trabajo

— ¿Qué trabajo? —cuestiono Deidara curioso

—Pues vinieron aquí para hacer un ensayo sobe la exposición para su escuela —respondió Kakashi

— ¿En serio? Entonces deben estar encantados con todo lo que hay aquí —dijo Deidara mientras sonreía con regocijo de que sus obras fueran estudiadas

— ¿Ya nos vamos? Me aburro aquí —dijo Sasuke acercándose a Kakashi acompañado de Naruto y Sai

— ¿Qué? —Deidara se giró molesto a verlo

— ¿Tío Obito? —pregunto el azabache sorprendido

—Sasuke, mírate, ya estas enorme —Obito se acercó de inmediato. —Vamos, vamos a comer, yo invito, sí que es una sorpresa verte —El Uchiha mayor los guio hacia la salida

— ¿En serio podemos comer lo que queramos? —preguntó Naruto emocionado al ver tanta comida en el lugar a donde los habían llevado

—Claro, es un bufet, tú sírvete —le respondió Obito

—Quiero todo —Naruto tomo un plato y se acercó a servirse

—Es lindo tu hijo —comentó el Uchiha viendo a Naruto comer ansioso después de llenar su plato 

—Si lo es, mucho

—Y veo que se lleva muy bien con mi sobrino

—Sí, son muy buenos amigos

—Estoy muy feliz por eso, al menos Sasuke no va a crecer con los pensamientos tontos de nuestra familia —decía Obito mientras comenzaba a comer

—Pues…parece que han tenido un par de problemas con eso, por eso me sorprendió un poco la noticia de tu boda, yo…pensaba que terminarías con Rin

—Claro que no, después de salir contigo me di cuenta de lo que me gusta en verdad, y bueno, cuando conocí a Deidara en la universidad lo confirme aún más, así que me fui de casa, fue difícil pero valió totalmente la pena —dijo viendo el anillo de compromiso en su mano

Kakashi vio a Obito y recordó lo que Yamato le había dicho, su amigo también había madurado, y era increíble la forma en la que lo había hecho, dejar todo atrás no debió de ser fácil, pero ahora se veía tan feliz con su prometido, verlos así hizo que le dieran ganas de poner un anillo en el dedo de Yamato en ese mismo instante pero debía ser paciente.

—De nuevo estoy tan lleno —se quejaba Naruto después de arrasar con la comida

—Vayamos a dar un paseo a las tiendas para que se te baje un poco la comida —le dijo Sasuke

—Sí, quiero hacer eso —Naruto recargo su cabeza en el hombro de su amigo cuando noto que el Uchiha mayor los veía por lo que se apartó rápidamente—Lo lamento

— ¿Por qué? —preguntó Obito para luego darse cuenta del porque —Ah, no, no, no te preocupes, yo no tengo problemas con eso

—Tío Obito, tú… ¿te fuiste de casa por esto? —pregunto Sasuke

—Sí, y fue difícil al inicio, pero los tiempos cambian Sasuke, sé que para ti no será tan difícil como lo fue para mí, tú tienes a Itachi, y a mí —dijo Obito sonriéndole de forma amable. En su corta vida Sasuke entendió que cuando una persona le sonreía así podía confiar en ella; Su madre le sonreía, su hermano mayor lo hacía, y claro, Naruto también le sonreía de esa forma, un gesto simple, pero que en un mundo reprimido como en el que vivía gracias a su apellido, le daba confianza.

—Que rápido pasa el tiempo cuando uno come —comentó Obito

—Y que lo diga —Naruto acariciaba su barriga haciendo reír al Uchiha

—Nosotros debemos irnos, mi artista debe descansar —Obito tomo la mano de Deidara. —Después te envió la información sobre la fecha y hora de mi boda, ¡todos vengan! Le diré a Itachi que te lleve Sasuke, y ese niño pálido de ahí también puede venir

Sai estaba a punto de degustar su postre para girarse a ver a Obito — ¿Eh?

—Yo me encargo de llevarlos —contestó Kakashi

—Bien, nos vemos entonces

—Suerte en su trabajo niños —dijo Deidara para despedirse con la mano

Yamato salió del restaurante, el tiempo pasaba realmente tan rápido que lo primero que sintió al salir fue el frio de la noche que le provoco temblar un poco.

— ¿Quieres ir por un café para calentarte? —le preguntó Kakashi

—No, estoy bien así, quizá ya deberíamos irnos —respondió Tenzō

—Dile eso a ellos —Kakashi movió su cabeza señalando a los chicos

— ¡Papá! Danos monedas, queremos ir a las máquinas de peluches a sacar algo —dijo Naruto acercándose a Kakashi para señalar un puesto de maquinas  

—Ya es tarde, debemos volver a casa —habló Yamato

—Sacamos un peluche y nos vamos, por favor —Naruto vio a Yamato con sus enormes y brillantes ojos azules, no le podía decir que no a ese rostro parecido a un zorro tierno.

—No traigo más —dijo Kakashi dándole un par de monedas a Naruto

— ¡Vamos! ¡Sasuke siempre los saca rápido! —Naruto tomo la mano del Uchiha para correr hacia las maquinas

—Yo quiero un oso —dijo Sai intentando seguirle el ritmo a su rubio amigo

—Es imposible decirle que no cuando eso, ¿verdad? —le dijo Kakashi

Yamato soltó un suspiro, le daba toda la razón a su senpai. Sintió como Kakashi tomo la mano para meterla a la bolsa de su pantalón.

—Te ayudo a calentarte —dijo mientras le sonreía

—Gracias senpai, eres muy amable

—Sabes Tenzō, lo que dijiste en el museo… realmente me llego —decía Kakashi, el castaño se giró a verlo para prestarle atención. —Lo que dijiste sobre cómo hemos madurado, yo…estoy realmente feliz de estar de nuevo contigo, porque entre los dos podemos darles un futuro mejor a esos niños, así como lo dijo Obito, incluso si las cosas fueron difíciles para nosotros, ellos nos tienen para que hagamos que las cosas no sean malas y no les pase lo mismo que nos ocurrió.

—Ser un lugar seguro para ellos, me agrada la idea —comentó Yamato

—Pero, eso es algo que me gustaría hacer a tu lado, porque para mí lo eres, tú eres mi lugar seguro Tenzō, desde que te conocí lo has sido. —Kakashi respiro hondo, apretó la mano de Yamato que tenía en su pantalón y levanto la mirada. —Tenzō, la luna esta hermosa hoy, ¿no crees?

Yamato estaba procesando todo, su senpai le acababa de decir que él era su lugar seguro, y ahora, lo que dijo, sabía que Kakashi era algo tímido para expresar abiertamente sus sentimientos, pero esa frase, era una forma especial de declararse. Pudo sentir sus mejillas sonrojadas, y sonrió.

Kakashi sentía los nervios en su estómago, ¿esas eran las maripositas revoloteando? Sentía que las vomitaría en cualquier momento.

Se giró a ver a Yamato puso su mano disponible sobre la mejilla de Kakashi, y se fue acercando a su rostro hasta tocar los labios de su senpai. Al sentirlo, los nervios de Kakashi se desvanecieron, cerró los ojos para dejarse llevar por el momento. Los besos de Yamato siempre eran suaves, mostrando aún la inexperiencia del menor, pero eso no quitaba que fueran agradables, que le hicieran recordar porque amaba tanto a aquel castaño que era un inexperto atrevido.

Yamato se apartó un momento, Kakashi abrió los ojos para encontrarse con la mirada del castaño.

—Senpai, te amo…creo que puedo morir en paz

Kakashi no pudo evitar sonrojarse al sonreír por obtener la respuesta que deseaba; se abrazó a Yamato, desearía regresar al pasado, decirle a su yo de antes que no importaba lo dolorosa que fue su despedida tras su primer beso, porque al final iba a regresar a los brazos de su lugar seguro, de su primer amor.

El camino de regreso a casa fue callado y tranquilo, en la parte de atrás del auto los tres menores iban durmiendo. Había sido un día largo y lleno de sorpresas agradables, Kakashi estaba seguro de que todos la habían pasado bien, incluso si fue un viaje inesperado para hacer un trabajo escolar, hasta él lo disfruto. Vio de reojo a su copiloto, Yamato llevaba su mano sobre la de Kakashi que iba en la palanca del auto.

La razón por las que esa noche era tan hermosa y brillante, era por ellos, no por las estrellas.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).