A la mañana siguiente, martes, Naruto se levantó mas temprano que de costumbre. Casi a las cuatro am, no hubo horribles pesadillas la noche anterior pero para su mala suerte se sentía inquieto. No le dio mayor importancia y se paró para comenzar su día, como siempre en Fénix amanecía nublado y con una ligera llovizna que bailaba al compás de la brisa fría.
Fue un buen día. Tente y Konohamaru no se despegaron de su lado cumpliendo su labor como guías, en trigonometría y español le fue muy bien, y gimnasia fue su toque de cordura, su vía especial para descargar el montó de adrenalina que lo recorría sin parar, fue al comienzo de la pubertad cuando empezó a suceder.
Si seguía así se podría convertir en el capitán del equipo de basquet. Algo que no estaba mal pero que tampoco deseaba si queria mantener un bajo perfil.
No vio al Uchiha en toda la mañana. Y en el almuerzo sus hermanos estaban en su mesa habitual pero el no, lo que confirmaba los cotilleos de las demás personas, Sasuke es raro. El rubio no le dio demasiado interés al asunto así que lo pasó por alto.Gastó un par de bromas con los chicos respecto a gigante vestimenta, cortesía de Yahiko, y el aroma tan varonil de esta, aunque solo accedió a colocarse las camisas sin mangas de este con tal de quitarle la espinita de inseguridad a su "hermanito", solo por esa semana.
Los días siguieron pasando y Naruto no volvió a ver a Sasuke. Así que se sentaba solo en Biología, a diario se preguntaba si la desaparición del Uchiha tenía que ver con el, aunque eso fuera adsurdo ese chico lo odia a muerte por..¿existir? ¿aparecer? No lo sabe. Y eso solo aumentaba su curiosidad por saber cual era su problema con el.
El sábado por la tarde, Naruto acompañó a Dan al supermercado de Odaiba, quedaba algo lejos. Fuera de la reserva, al sur por la autopista, ambos se llevaban muy bien y el menor le tenia confianza así que las compras no fueron incomodas como pudieron haber sido si fuera ido con Minato. El mercado de la semana se basó en muchos kilos de carne y cochino que Naruto imaginó serían para alimentar a un batallón, a menos que Minato y Dan comieran asi,y los vegetales para el. Tsunade es vegetariana así que el también se mantuvo a bases de ensaladas y comidas sencillas ya que por alguna razón que desconoce tiene prohibido el consumo de carne.
Volvieron a casa antes del anochecer.
Naruto desempaco el resto de sus maletas, no había tenido la oportunidad menos el tiempo. Apiló unos ocho libros en su mesita de noche cuando escuchó varias voces desconocidas provenientes de la sala. Se colocó su jogger favorito y una camisa sin mangas para bajar. Yahiko, Minato y Dan estaban alrededor del comedor y con ellos una chica de cabello corto azulado claro, ojos ámbar, el otro era de cabello rubio largo atado a una coleta y uno de sus mechónes tapaba su ojo azul claro, todos en shores y sin camisa, excepto la chica que usaba crop top.
-Naru -Minato fue el primero en correr a los brazos de su hijo, estrechándolo con fuerza-¿Como has estado?
-Bien -dijo aceptando la calidez del mayor.
-Me alegró. Niños -dijo dirigiéndose a los presentes- este es mi hijo Naruto- el rubio que podría ser hermano del menor por el parecido le sonrío con cierta emoción, en cambio la chica se mostraba irritada- Hijo te presentó a...tus...primos lejanos Deidara IV Namikaze y Konan Senju.
-¡Por fin te conocemos! -exclamo Deidara- Creímos que nunca vendrias a vivir a la reserva hombre- Konan asintió a modo de saludo con sus brazos cruzados.
El aludido sonrió- Un gusto. No creí que tuviera primos lejanos. - todos se miraron entre si ante la acusación.
-Ahh..bueno te faltan muchas cosas por saber -añadio Yahiko que se acercó dándole un beso en la mejilla.
-Asi que ..¿estudias con los cara pálida? -pincho Konan. Naruto se encogió de hombros con un si, los Uchiha eran famosos en ese pueblo por lo visto, el ambiente se tornó tensó bajando un par de grados.- ¿Por que? ¿La escuela de la reserva no es suficiente para ti?
-Konan - dijeron al unisonó Minato y Yahiko en tono de advertencia.
- Perdón.
Naruto fruncio el ceño, ahora recuerda con claridad a la chica, es una de las enamoradas del pelinaranja, siempre le mandaba mensajes coqueteandole y diciendole de su espera por el- No. En realidad fue una condición impuesta por mi abuela, y dejame recordarte que yo no crecí aquí, por eso el nacionalismo no me sienta - Era bien sabido que nadie de la reserva estudiaba fuera de esta, su raza su mismo entorno.
-¡Carajo! Disculpala Naruto, a veces puede ser muy tosca - dijo Deidara dándole un codazo, la chica rodó los ojos.
-Dejen de atosigar a Naruto-intervino Dan- Por favor quedense a cenar tenemos mucho espacio en la mesa.
- ¡Claro! -contesto Yahiko- Fuimos a buscar tu motocicleta al aeropuerto- informó meloso halándolo hacía la cochera sin esperar respuesta. Las risitas disimuladas resonaron junto al portazo de Konan al retirarse molesta.
-¡Oh bebé! -chillo contento el ojiazul, su preciosa Yamaha yzfr6 negra posaba en la esquina de la cochera, su entusiasmó contagio a Yahiko que lo abrazó alzándolo un poco- Gracias, la vieja no me dijo que llegaría antes- el amor a las motocicletas lo adquirió de el, ya que el pelinaranja es un buen mecánico y restauró la suya el solo.
- De nada- pego su frente a la del rubio inhalando su aroma, con su pulgar acarició sus labios- Te quiero.
-Lo se.
-No lo sabes, crees que..
-No somos niños, se que te gusto. Yahi -suspiro- Eso está mal somos como hermanos.
-¡No! He sido lo que tu necesitas, pero ahora quiero que tu seas lo que yo necesito. Ya me quieres y pronto me amarás no te preocupes.
-Yahi.. - no terminó, estampó sus labios con los del rubio en un beso demandante, dulce, lleno de esperanzas y...espera, una larga y jodida espera.
Luego de la cena Naruto y Yahiko salieron. El pelinaranja aprovechó para mostrarle la reserva y presentarlo ante todos como el hijo del jefe. La casa de Minato era la mas apartada de las otras cabañas de la tribu como ellos la llamaban. Es como un complejo privado, rústico y antiguo donde solo vivían los descendientes de sus ante-pasados. Fue un largo trecho y tomaron el camino de tierra, no serian mas de siete kilómetros, pasaron rápido por el bordeado de árboles de tilo. El aire era tan limpio y puro que el rubio se olvidó del por que de su odio a ese estado. El frondoso y espeso bosque relucía, se podría adaptar fácilmente a esto, conociendo paso a paso sus raíces y su gente, casi no quería admitirlo por temor a sonar melodramático pero su personalidad era así, exótica salvaje, ese fue el motivo de su amor a Florida y sus olas rompe huesos y ahora Fénix se ajusta.
~
En el transcurso de la noche cayó una extensa capa de nieve tapando todo a su alrededor.
Naruto no utilizó su motocicleta esa mañana. Sus neumáticos no eran los adecuados, no tenía los de nieve y gracias a un presentimiento milagroso su padre cambio los de la vieja Chevy, tendría que utilizarla por un par de días mas, la camioneta había sido un regalo de Minato que no aceptó. Por que ya tenia su propio transporte que le regalo por mero capricho su abuela por ser su consentido.
Fenix High.
- ¿Que te parece si hago la cola para la comida y tu vas a la mesa? - propuso Tente que caminaba al lado del rubio agotados por la sección de deportes.
-Bueno.- entraron y fue a la mesa del fondo, ahí notó la presencia de los cinco Uchiha. Tente llegó y Naruto tomo solo el agua y algo de fruta, se sentó y sacó su libro para concentrarse en otra cosa que no fuera el escrutinio de los azabaches hacia su persona, como una especie de escala de ánimos desde la mirada asesina de la barbie, la cálida del tal Shisui, la sería de Itachi y el modo despreocupado y burlón del fortachón Óbito.
-Hey!! - Konohamaru corrió a acompañarlos- Miren empezó a nevar - les señalo el ventanal exterior, los copos de nieve se pegaban al vidrio y el frío se colaba por ellas.
-Sasuke Uchiha no a dejado de mirarte -comento en un susurro la castaña- Joder así quisiera que me mirará a mi.
Naruto alzó levemente la vista para corroborar y así era. Se le quedaba viendo como si estuviera memorizando cada una de sus facciones, -¿Sigue mirándome? - pregunto centradose en su lectura, prefirió seguir ignorando la mirada de ese engreído "ángel"
-Si -siseo.
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¿Como tratar con la tentación frente a frente?
Algo realmente difícil si lo analizas desde la perspectiva de un vampiro. Con la ponzoña quemandote la garganta es doloroso razonar y entender que si destrozas a un humano, mejor dicho a ese humano, traeras la catástrofe a los tuyos y la punzada de culpabilidad es inevitable para Sasuke.
¿Tendrian que vigilarlo como lo hacen con Itachi? ¿hasta ese punto iba a llegar?
Sasuke negó con la cabeza.
El es mas fuerte de lo que quiere creer por eso regresó de ser de otro modo jamas hubiera pisado Fénix. Tiene la suficiente fuerza de voluntad para nadar y no "morir" en el intento, y lo irónico y afilado de la situación es que prefería ahogarse en ese mar que en su mente es rojizo y del aroma de Naruto Namikaze.
Trillo los dientes. Y el "no" retumbó en su subconsciente.
La bestia que habitaba en el es el que prefería esa salida amarga y codiciosa, Sasuke no. Por eso se alimentó lo suficiente, para mantener esos pensamientos en simples y morbosas fantasías ¡nada mas! La poca humanidad construida a la que se quiere aferrar sabe que tan solo es un niño. Uno que tiene sueños y aspiraciones en la vida.
-"Bueno..no debe aspirar a mucho si pretende encerrarse en la reserva con un perro que nisiquiera tiene camisas"-penso Sasuke.
Bufo.
El lavado mental de Shisui sobre la visión que no quiere recordar le dejo terroríficas secuelas. A el no le importa en lo mas mínimo si aceptaba esa mano al final del altar o si decide dedicarle todas y cada una de sus sonrisas a el, y que el perro pueda disfrutar de sus abrazos cálidos y llenos de vida sin correr riesgos por mostrar su cuello.
Lo puede imaginar..y duele.
-"Naruto, si el papi papi de Sasuke me mirara de esa forma ya me tendria en su cama." - pensó Tente.
Hasta ese momento el azabache se dio cuenta que lo estudiaba con cuidado, esos orbes azul cielo se mostraban recelosos y curiosos. Fingiendo una interesante indiferencia.
¡Maravilloso! Una refrescante sensación lo llenó, sus pensamientos todavía son un misterio.
-"¿Por que eres diferente a los demás mortales? ¿Por que me esclavizas a la angustia de no saber que pasa por tu cabecita humana? -penso Sasuke.
-Podrian dejar la competencia de miradas con el joven y actuar como humanos- reprochó Itachi desde su puesto en la mesa- Debe pensar que somos raros .
-¿Raros? -repitio Óbito afianzando a Izumi en su regazo- Yo creo que el raro es el ¿quien en sus cinco sentidos se fija en alguien tan intimidante como Sasu?- preguntó burlón.
La belleza de los Uchiha es exquisita, pero esos adonis de voz aterciopelada y piel de mármol dan cierto miedo, ¡si señores! Hacen que las personas se alejen. Y la visión de Shisui sumándole el evidente escape de Sasuke hizo que la gran noticia de un posible romance con un humano se esparciera como pólvora en su aquelarre. Claro, cada uno con opiniónes distintas.
Shuisui se río- ¿ Óbito no te has visto en un espejo? - ambos estallaron en carcajadas.
-"Debería aplaudirte idiota"- la mente ácida de Izumi frenó las divagaciones de Sasuke- "Un humano como pareja- ironizó- que bajo has caído".
Sasuke la ignoró. El plano de visión de Shisui se abrió, la perturbación de la que era víctima el aludido llamo su atención concentrándose en el, adsorto por una visión en blanco que solo se volvió gris por tratar de ver algo mas.
-¿Que fue eso?- preguntó Sasuke.
-Tu futuro - reveló consternado- Algo cambio, lo siento, el camino ya no es el mismo.- le dio un suave apretón en el hombro.
~
En Biología el profesor Iruka repartió unos microscopios junto a una caja de laminillas. Faltaban solo diez minutos para comenzar la clase cuando Naruto saco sus cuadernos.
-Hola - saludó con el magnetismo de su dulce voz, el rubio encarnó una ceja incrédulo, parecía mentira que el azabache le estuviera hablando, se sentó lo mas lejos que le permitía la mesa, el banquito le quedaba ridículamente pequeño ante su tamaño y apoyo los codos viendo en su dirección, sus ojos resplandecían en un color ámbar claro y ya no tenia ojeras lilas, su sonrisa torcida te derretía hasta las ideas- Me llamo Sasuke Uchiha- prosiguió- no tuve la oportunidad de presentarme la semana pasada. Tu eres Namikaze Naruto.
-Si -"Uff que bipolar".
-"No respires, no respires" - Mucho gusto.
-Igual Uchiha.
Debían trabajar en pareja para ordenar las fases de la mitosis celular de la punta de una raíz de cebolla, los ganadores se llevan la cebolla dorada.
¡Aburrido!
-"Nada, ni un pensamiento incoherente, a menos que.."- Tu primero- Sasuke le cedió el microscopio.
-Profase- aseguró Naruto.
-¿Te importa si miró? -pregunto con interés.
-¿Eres de esos que piensan que los rubios somos torpes? -replico, Sasuke para evitar que retirará la laminilla tomó su mano, Naruto la quitó de inmediato por la reacción de su interior, como si algo se removiera inquieto, sus dedos eran fríos como el hielo.
-Lo siento- musitó- Profase-dijo después de confirmar.
- Lo que dije- dijo haciendo un puchero, Sasuke anotó y siguió con las demas.
-Anafase ¿quieres ver?-Naruto negó. Terminaron de primeros, se quedaron un rato largo en silencio incapaces de hallar nada que pudiesen expresar, el rubio se limitó a garabatear en su cuaderno, Sasuke decidió hablar para romper la tensión.
-Sigue nevando.
Naruto desecho la idea de ser grosero. Apreciando el esfuerzo de este por sacar conversación.- Lindo ¿no? Es agradable -sonrio con la mirada fija en el.
-"Su rostro parece estar iluminado de una nobleza moral, extraña y perfecta ¿como es que alguien así se fijaría en un demonio como yo? Ah..claro, encantos de vampiro"- ¿te gusta el frió?
-Si, aunque estaba acostumbrado al calor y el sol brillante- con la punta del lápiz dio golpecitos al cuaderno.
- ¿Es tu primera vez en Fénix?- asintió- ¿y que haces aquí?- Naruto se sorprendió, aparte de lo obvio de la pregunta abarcaba algo mas. Nadie lo había preguntado de esa manera tan directa, bufo sin querer- -¿He sido poco delicado? -inquirio- si fue así disculpa, no quise que sonará de esa manera.-"ya que no suelo interactuar con humanos"
- Es..complicado- media clase permanecía atentos. Ya que el Uchiha no entablaba conversación con nadie que no fuera profesor o sus hermanos.
-Creo que podria entenderte -empujo Sasuke.
-Vine a buscar respuestas sobre mi pasado -confeso- la mujer que me crío se caso y me aproveche de ese hecho, lo use como excusa para vivir con mi padre que me exilió sin razón.
Eso no lo esperaba Sasuke ni en mil años.- Las encontrarás, mereces.. todas y cada una de las respuestas y explicaciones.
Naruto no pudo evitar el sonrojo que se extendio desde su cuello hasta sus mejillas, eso es lo que el necesitaba escuchar, pero se nego y deseando cambiar el rumbo de la tematica pregunto otra cosa -¿Usas lentes de contacto? -observo con detenimiento como el azabache crispó la mano.
-No.
-Si tu lo dices. Eran negros cuando me trataste como la peste- a el rubio no se le va a olvidar ese trato.
-Lo se, es la fluorescencia - contesto, cuando sonó el timbre y se perdió con total sigilo.
El estacionamiento del instituto se abarrotó por los alumnos que se disponían a ir a sus hogares. Naruto maldijo en voz baja por tener que esperar a que la cola mermará, metió su bolso en el asiento del copiloto, en su camino de regreso se detuvo para cerrar la parte trasera de la camioneta --Mierda-- musitó, la manga de su sudadera naranja quedo atascada en el cierre imposibilitandole el zafarse, dio un par de tirones pero no funcionó.
Un sonido de un traqueteo agudo y punzante lastimó sus oidos a medida que se acercaba --se volteó-- quedó quieto en su sitio y su corazón bombeó mas rápido de lo normal.
Sasuke estaba a seis carros de distancia con cara de horror por la furgoneta que patinaba con las llantas lisas, los frenos servían de adorno ya que el conductor trataba de controlarlo sin éxito alguno, giró y se deslizó de lado, su destino era golpear la esquina trasera de la Chevy,--justo donde esta el ojiazul--.
¡Manera de morir 144 aplastado por una camioneta! ¡Las películas lo engañaron! ¡No es tan divertido cuando vives la experiencia!
-"¡DESPIERTA! -gruño la voz de sus pesadillas.
Su manga se destrozó de la muñeca hasta el hombro. Sintio que volaba y su cabeza se golpeo contra el frío asfalto cuando una mano fría lo apartó y cayó en linea recta, el crujido estrepitoso de la van doblando la caja hizo que abriera del tiro sus ojos. Sasuke Uchiha lo inmovilizo aún con la mano en su pecho, y sus piernas a cada lado, la furgoneta reaccionó en equilibrio por el golpe del hombro del azabache, balanceándose, y se iba a ir de lado para volcarse contra ellos --No-- la mano de Sasuke detuvo la acción y paro a 30 cm con una abolladura profunda del tamaño de su mano, el chirrido de la carrocería erizo los vellos de su cuerpo --el metal rayando-- la camioneta se sacudió, los vidrios llovieron por el impacto hasta que quedo derecha.
Todo paso en segundos.
-¡Saquen a Chouji de la camioneta! -chillo alguien, el caos reino.
-¡Necesitamos a un doctor y a la policía! ¡Corran! -exigio el director.
El flujo de sangre de Naruto se elevo por la adrenalina saturando cada particula de aire puro. Sasuke lo soltó con cuidado, la piel del rubio ardía -¿Como...hiciste eso? -su voz era un murmullo dolido, todo le daba vueltas.
El azabache tragó con dificultad y su expresión cambio a una sombría- No se de que hablas- saltando atravez de la chatarra se esfumó.
Los gritos seguían y su nombre brotó de la boca de más de uno, las sirenas de la ambulancia sonaron, la actividad fue similar a las de las hormigas cuando encuentran azúcar, seis técnicos de emergencias y los dos profesores de gimnasia ayudaron a mover la van.
-¡Naruto!- grito Iruka entrando en el espacio de la abertura, Naruto no aguantó y se sumergió al mundo de los sueños, sintiendo que la fiebre calcinaba sus horganos y su respiración fallaba, solo empeoró cuando Dan llego a la escena con lágrimas en sus ojos desesperado.
Continuará..