Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Pumpkin Spice • Fictober 2020 por borisgarc_

[Reviews - 21]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

• Pareja: Remus Lupin x Severus Snape •


- ¡Harry, Theo ya esta aquí! — Había gritado Remus desde la planta baja y rápidamente se escucharon los pasos del de gafas que muy alegremente se lanzó contra su novio para besarlo


- Ya nos vamos, no nos esperen. — Les dijo Harry jaloneando a su novio a la chimenea para llegar a la fiesta en la casa de Pansy.


- Los vamos a esperar aunque no quieras niño, lleguen temprano o tendré que ir por ustedes de las orejas.— Severus como siempre con ese tono tan amenazante que Harry sabía de primera mano que nunca iba en serio, su tío Severus jamás lo regañaría por nada.


- Hasta luego, buenas noches.— Theo logró decir antes de desaparecer en las llamas, siempre con esos modales inculcados desde su casa.


Harry se estaba quedando unos días con ellos, Sirius y James estaban en su segunda luna de miel y aunque Harry les había insistido que ya estaba lo suficiente grande para quedarse solo, sus papás no le confiaron eso y lo mandaron con sus tíos.


Remus le sonreía a su esposo, le encantaba verlo en modo protector con su sobrino, amaba a ese hombre, le encantaba compartir su vida con él, no se imaginaba a alguien más ocupando ese lugar.


- Ya que Harry se fue de fiesta y Teddy está en una pijamada ¿qué te parece si nosotros hacemos lo mismo?— Remus se acercó a su esposo para robarle un beso apasionado, era verdad que ninguno iba a dormir esa noche, ¿por qué no aprovecharla?


- ¿Qué tienes en mente? — Le decía Severus mientras lo apretaba más en sus brazos.


Remus se separó un momento de él y se dirigió a la cocina por una botella de vino y unas copas, al volver a la sala sonrío complacido, su esposo había encendido unas velas aromáticas.


Tomaron un poco, casi nada de hecho, los besos pasaron de cero a apasionados en dos segundos, la ropa empezaba a sobrar y las caricias quemaban de una manera tan placentera.


Seguían acostados en el sofá en un enredo de piernas y brazos, habían tenido dos rondas para poder turnarse, si había algo que les encantaba era hacer eso, complacerse uno al otro al máximo y después dejarse complacer.


Remus tenia la cara oculta en el cuello de su esposo, le encantaba su olor, una mezcla de vainilla y pociones, amaba que oliera a pociones, después de todo su primer beso fue en ese salón.


Había sido en su quinto año de escuela, después de que el chico de Ravenclaw los siguiera a él ya sus amigos través del sauce boxeador hasta la casa de los gritos.


Severus había sentido que se desmayaba al ver la transformación de Remus, su cuerpo no le respondía y de la nada sitio como Sirius Black lo jalaba para sacarlo de ahí, iban saliendo de la casa por el bosque, usar el pasadizo no era una opción, el lobo no podía llegar a los terrenos de la escuela.


Sentía que Remus los seguía y era verdad, el lobo al parecer estaba enojado, giró la mirada por un segundo y vio a Potter transformarse en un ciervo que intentaba distraer al lobo, eso les dio tiempo de alejarse un poco más.


Lamentablemente no lo conseguía y opto por lanzarlo con sus astas, Severus paró en secó, por su culpa estaban lastimándose entre ellos.


- Snape, no hay tiempo, tengo que sacarte de aquí… —Sirius no pudo terminar la frase, James no podía solo contra el lobo y podían llegar a lastimarse en serio.— Escóndete y cuando puedas huye al colegio, no te quedes.


Severus seguía en shock, vio a Black transformarse en un perro enorme, que llegó de lleno contra su mejor amigo.


Se había escondido en las ramas de un árbol, los lobos no trepan arboles ¿o si? tenía miedo, podía oír la pelea entre esos tres, ¿por qué había tenido que seguirlos? no sabia ni por qué se hacia esa pregunta, quería saber por qué Remus siempre se veía así de decaído cada mes, tenia sospechas pero no creyó que fueran reales.


Le gustaba ese chico tímido que contrastaba tanto con sus amigos y al mismo tiempo encajaba perfectamente con ellos, Remus siempre había sido amable con él, Los Black y Potter también, pero era diferente, Regulus, el gemelo de Sirius, y él habían quedado en Ravenclaw, aunque era una buena casa ninguno de los dos se llevaba con sus compañeros.


Ambos pasaban el tiempo juntos desde que se presentaron en el comedor el primero de septiembre, se hicieron mejores amigos y es así como había conocido a esos tres Gryffindor y al chico que lo eclipso por completo.


- Ojalá Regulus estuviera aquí, él sabría que hacer.— Snape se decía a si mismo, enserio necesitaba a su mejor amigo, pero el chico estaba tan enfrascado en una poción “secreta” que le había dicho que no lo acompañaría a dar una vuelta.


Ahora lo entendía, si le hubiera dicho a donde iba seguro Black lo hubiera detenido ¿y si esa poción era para…? ya le preguntaría después, si es que esos tres no le borraban la memoria, que para ser sincero no se molestaría, había puesto en riesgo la vida de todos, ojalá también borren la de Remus, no merecía saber que Snape le hizo pasar una mala noche.


Tenía mucho sentido que Regulus lo supiera, Sirius y él se contaban todo, lo sabia porque un día el Gryffindor había llegado con un remedio para la infección estomacal, infección de la que se supone solo conocía su amigo y no el hermano de éste, le agradeció avergonzado y aceptó el remedio, seguro le ayudaría.


La luna se había ido y con ella la forma animal de los Gryffindor, Severus había hecho caso y cuando dejo de oír la pelea corrió hasta su habitación, llegó muy alterado y Regulus sin preguntarle nada lo había abrazado, Black sabía que su amigo había lastimado al chico que menos quería herir en el mundo.


Se sentía con miedo, debía disculparse con Remus, quería buscarlo y pedirle perdón, decirle que no había sido su intención hacerlo sentir así, lo conocía, el chico se sentiría temeroso de que alguien más supiera su secreto.


Iba bastante decaído por un pasillo cuando Sirius y James se acercaron a él, creyó que lo hechizarían, amenazarían o que le borraran la memoria, pero nada de eso pasó, ambos se veían preocupados, cansados y demacrados.


- ¿Estas bien? lamento haberte dejado solo ayer.— Sirius le había dicho con una sonrisa lastimera.


- Si, no te preocupes, entiendo ¿ustedes… él cómo esta? — Tenia que saberlo.


- Esta descansando, tal vez salga en un rato del cuarto, ya tomó sus pociones, no te preocupes. — no sabia cómo sentirse con las palabras del de gafas.— Él no te va a odiar, Remus no puede odiar a nadie es incapaz, ya no te atormentes.


- No quise…


- Ven.— Sirius se acercó para abrazarlo y Severus lloró nuevamente.


Ese mismo día Severus y Regulus estaban en el aula de pociones, el profesor Slughorn siempre los dejaba usar su salón para cualquier cosa que necesitaran, después de todo eran sus mejores alumnos.


Ahora que Regulus le había confesado que efectivamente, la poción era para ayudar a Remus, lo tomó como algo personal, él junto con su amigo harían la mejor poción matalobos y no iba descansar hasta conseguir una que realmente ayudara a los hombres lobo y no solo los drogara.


Estaba tan concentrado que no escuchó a la persona que se aproximaba a ellos.


- Ahora vengo.— Regulus se había levantado de su asiento al ver a Remus y Severus desconcertado volteo la mirada para encontrarse con esos ojos mieles llenos de lagrimas derramadas por su culpa.


- Por favor perdóname.— Remus le había dicho en un susurro. — Nunca quise lastimarte, yo no lo controlo, ojalá lo hiciera, no quise asustarte ni que tuvieras que verme así, por favor.


Severus no podía creer el gran ser humano que era Remus, le pedía perdón, cuando tenia que ser al revés, él tenia que estarle rogando por una segunda oportunidad para no perder su confianza.


Decidido se levanto a abrazar a un Remus Lupin que no dejaba de llorar y temblar, éste se aferró a Severus como si su vida dependiera de ello, el Ravenclaw no supo en qué momento había empezado a llorar, pero no quería soltar a Remus nunca, iba a cuidarlo siempre, era una promesa.


- Yo soy el que debería pedirte perdón, yo fui el que provocó todo esto, tu no tienes que sentirte culpable por nada.


- Odio ser esto, me odio.


- No digas eso por favor, te prometo que pronto acabara, te lo prometo Remus.


Después de ese día se había hecho muy unido a Remus, mucho más que antes hasta que un día de luna llena había llegado, ambos estaban en el salón de pociones, Remus era el conejillo de indias para la poción de Regulus y Severus, confiaba plenamente en ellos para tomar lo que sea que hicieran.


Severus le ofreció la botella para beberla y después poder irse a la casa de los gritos, James y Sirius observaban a Remus para saber si había avances o retrocesos con las pociones.


Ese día Remus le dio la gracias y tímidamente se acercó a Severus y dejó un tierno beso en sus labios y le pidió una cita para ese fin de semana, el Ravenclaw aceptó encantado, tendría una cita con el chico de sus sueños.


Pasaron los años y por fin Regulus y él habían logrado una poción que lograba que el lobo estuviera consciente con su raciocinio humano, era inevitable la transformación, pero ahora solo era un “animago” más.


Remus y él se habían mudado juntos al salir de Hogwarts, Severus abrió una tienda de pociones junto con Regulus y Remus una de artículos mágicos inventados por él y sus dos amigos.


Llevaba una vida increíble con su esposo, fue el hombre más feliz cuando Remus le propuso matrimonio y no recuerda haber visto tan emocionado a Remus como cuando le dijo que estaba embarazado.


- Deberíamos subir, si Harry llega nos va a ver aquí.— Remus le había dicho mientras acariciaba su pecho.


- ¿Crees que te puedas poner ese conjunto que tanto me gusta?.— Remus no había respondido verbalmente, pero el beso que le había dado a su esposo era definitivamente una afirmación.


Tomaron las copas y la botella de vino, limpiaron un poco y fueron directo a su habitación, la noche era joven y no había niños en casa.


Severus había cumplido todas sus promesas y no dejaría de hacerlo nunca, siempre iba a seguir cuidando de Remus.

Notas finales:

Hoy llego a mi cabeza lo divertido que seria que Regulus y Sirius fueran gemelos. 

Me imagino su forma de ser y es muy parecida entre super alocados y misteriosos.

Siempre me hago preguntas cuando salen más personajes en un fic, así que aquí les contesto unas cuantas.

Regulus esta casado con Charlie y viven en Rumania, su tienda de pociones creció mucho y Regulus se llevó una franquicia para estar con ese chico que lo volvió loco en cuanto lo vio.

Teddy tiene 11 y Harry 16, es por eso que se siente muy grande ya y Teddy fue a la casa de su mejor amigo, es verano y ese año entró a Hogwarts.

No sé que me pasa con Progsfoot/Starbucks/ James x Sirius, pero me gustan juntos, btw fueron a Hawaii de segunda luna de miel.

Espero que les haya gustado, nos leemos mañana.

- Boris.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).