Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Ojos Cerrados por lizergchan

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Disclaimer: Los personajes de Marvel no me pertenecen, sino a Marver Estudios, Disney y a Stan Lee. Este fic lo hice sólo y únicamente como diversión. Créditos a los autores de las imágenes de portada en turno.

Personajes: Tony Stark/Steve Roger (pasado), Tony Stark/Stephen Strange, Bucky/Steve Rogers.

Aclaraciones y advertencia: Romance, angustia, omegaverse, mpreg, violación a menores, y lo que se me vaya ocurriendo, kesesesese.

 

Resumen: Morgan testigo de un hecho atroz. Le cuenta a Stephen lo que vio, y esto desata una pesadilla que podría destruir la tranquilidad y la sanidad mental, de más de un miembro de la familia Stark-Strange.

Beta Reader:

 

—d

 

 OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoO

 

 

 

 

Ojos Cerrados

 

 

Capítulo 3.- Culpa…

 

 

Tony está cansado, el dolor de cabeza lo está matando y todo lo que quiere ahora es ir a casa y pasar tiempo con su familia, olvidarse de los idiotas con los que tenía reunión durante todo ese maldito día.

Lleva horas en su oficina, cuando se supone que debía estar en casa, con su ardiente esposo y sus adorables hijos, pero, por supuesto, tiene que estar ahí, escuchando tonterías de unos pomposos petulantes que se creían superiores a los demás.

 

Pepper lo ha hecho trabajar mucho últimamente «tú castigo por saltarte todas las reuniones en el último mes». Suspira.

 

Tony está sentado en su escritorio, revisando los últimos documentos que tiene antes de poder irse a casa, cuando alguien golpea la puerta de su oficina.

 

—Adelante —dijo Stark, levantó la mirada Stephen entra. Su excitación se desvaneció casi al instante.

 

Su esposo usaba unos pans negros, una sudadera blanca de manga larga y el cabello desordenado, Stephen no usaba esa clase de vestimenta fuera de casa, mucho menos cuando lo visitaba en la empresa.

 

El ceño fruncido que cruza su rostro no le gustó nada, ¿estaba en problemas?

 

¿Habría olvidado su aniversario? Esperaba que no, la última vez que lo hizo, Stephen lo obligó a dormir en la casa del perro, ¡y ni siquiera tenían uno!

Pero desechó la idea al contemplar mejor a su esposo. El omega veía tenso, cauteloso, como si algo horrible hubiera sucedido y Tony instantáneamente se preocupa.

 

—Oye —dice Tony, tratando de no vomitar cuando su corazón comienza a latir con fuerza. Tiene un desagradable presentimiento —¿Qué estás haciendo aquí?

 

La mirada en los ojos de Stephen solo solidifica los temores del alfa y siente que se le cierra la garganta, dificultándole respirar. Mil escenarios pasan por su mente, cada uno de ellos peor que el anterior, y el miedo comienza a asentarse en la boca de su estómago.

 

—Cariño, ¿Qué ocurre? —Tony pregunta, cejas fruncidas por la preocupación. —¿Estás bien? ¿Están bien los niños? Stephen, ¿qué diablos te pasa?

 

Strange suspira y se sienta en la silla frente a él. Se desploma como si estuviera cargando un gran peso; la preocupación de Tony crece más.

 

El aroma agrio a omega triste de Stephen pone señales de advertencia en su cabeza y Tony ahora está agarrando los brazos de su silla con más fuerza de lo que nunca había agarrado nada.

 

—Antes de que te lo diga —Stephen habla, por fin, y la presión arterial de Tony ya se está disparando —. Necesito que me prometas que mantendrás la calma.

 

Tony se muerde el labio.

 

—Stephen, cariño, estás comenzando a ponerme nervioso —Stark junta las manos con fuerza. —Dime lo que pasó.

 

El omega hace una pausa, tratando de encontrar la mejor forma de contarle a su esposo lo que sabía, pero, ¿acaso existía?

 

—Recogí a los niños de casa de Steve hoy —comienza lento, tratando de guardar la calma y que su voz no temblara —y algo parecía ... fuera de lugar. Morgan no era ella misma. Estaba callada y retraída, se encerró en su habitación a penas llegar.

 

Stephen le contó de los dibujos; oscuros, furiosos y tan ajenos a los tiernos y coloridos que la niña solía hacer. Se detiene allí, lucha con la angustia que oprime su pecho; sus ojos se ponen cristalinos, está a punto de llorar y Tony tiene el peor sentimiento en este momento.

 

—Finalmente conseguí que me contara lo que pasó —Strange se detiene. Aprieta las manos, tan fuerte que sus uñas se quedan marcadas en la piel, su voz se quiebra, aun así, Tony ve un destello de furia cruzar sus ojos y eso solo hace que se preocupe más.

 

Ha visto a Stephen enojado, pero nunca antes así. Tiene fuego en sus ojos y Tony puede ver la rabia apenas contenida en el omega.

 

—¿Stephen?

—Hoy vio a Barnes lastimar a Peter —hizo una pausa. Miró a Tony a los ojos —. No sé qué tan lejos fue, o qué le hizo exactamente, pero ella lo vio tocarlo. Honestamente, no creo que ella realmente entienda lo que sucedió, pero eso es lo que me describió.

 

Tony está congelado, no puede moverse. La idea de Bucky abusando sexualmente de su hijo jamás hubiese pasado por su mente, ni en sus peores pesadillas, y de repente está ahí, tan terriblemente real que siente ganas de vomitar.

 

La idea de alguien tocando a su hijo de esa manera, tocando a su hijo frente a su hermana de esa manera, peor aún, que fuese alguien quien se supone debe protegerlos; hace que su furia crezca.

 

—¿James tocó a mi hijo? —dijo Tony con la voz tan fría como el hielo. Está haciendo todo lo posible por mantener la calma, mantener sus feromonas bajo control para no afectar a Stephen más de lo que, seguramente ya está, pero le cuesta mucho, siente que fallará en cualquier momento.

 

El omega asiente y él se levanta de su silla en segundos. Se dirige a la puerta a grandes zancadas antes de que Stephen se levante de la silla. Tony está decidido a encontrar a Bucky, decidido a mandarlo lejos, a un lugar del que no pudiera regresar. Es millonario, con un ejercito de abogados que fácilmente se podrían encargar de que jamás pisara la cárcel por asesinato, así que encontraría a ese hijo de puta y lo haría arrepentirse de haber nacido.

 

Nadie lastima a sus cachorros, absolutamente nadie.

 

—Tony —el omega se interpone entre su esposo y la puerta, adivinando los deseos homicidas de su alfa, —Cariño, detente. Tienes que mantener la calma —toma sus manos para tratar de apaciguarlo, pero es en vano.

—Apártate de mi camino, Stephen —gruñe Tony, apretando los dientes, casi al límite de su autocontrol. Intenta liberarse del fuerte agarre de Stephen —Te amo más que a mi vida, pero si te interpones en mi camino, te dejaré inconsciente.

 

Tony en verdad ama a su omega, haría cualquier cosa por él, pero no va a dudar en noquearlo si eso es lo que tiene que hacer para llegar a Bucky.

 

—No —Stephen se mantiene firme, empujando a Tony hacia atrás. —Entiendo lo que estás sintiendo, ¡Dios!, estoy sintiendo lo mismo. Ese bastardo tocó a nuestro cachorro, probablemente lo ha estado haciendo durante un par de meses y mi piel está picando con la necesidad de llegar a él y usar mi bisturí para algo diferente a curar.

 

Tony no lo duda. Ha visto la furia fría en los ojos de Stephen desde el momento en que entró por la puerta, y finalmente entiende por qué estaba tan enojado.

 

—Pero ese no es el camino a seguir —continúa, con voz tranquila. —Quieres que Barnes pague; yo también, pero Peter nos va a necesitar a los dos para poder superar esto. No estarás con él, si te encierran por asesinato.

—Soy el dueño de Industrias Stark, no me encerraran —Stephen frunce el ceño. Sabe que tiene razón, por más horrible que suene, aún así, no puede permitir que Tony se manche las manos de sangre, no por él, sabe que ninguno podría manejar la culpa.

—¿Qué hay de los niños?, ¿crees que Peter y Morgan se sentirían felices al saber que su padre se convirtió en un asesino por culpa suya?

—Ellos no son culpables —ambos sabían que ese no era el punto.

—Nuestros hijos merecen el derecho de ver a su papá todos los días sin pensar que se convirtió en un asesino porque ellos no pudieron mantener la boca cerrada. No podemos permitirnos el lujo de arruinar esto, no voy a dejar que tú lo arruines —dijo Stephen, tan serio que logró tranquilizar a Tony, al menos un poco, muy poco.

—Barnes ha estado tocando a nuestro hijo, lo ha hecho frente a su hermana pequeña, ¿y quieres que me quede quieto? —Stark se sentía impotente, no le gustaba.

—Sí—Stephen es inflexible —Peter te necesita, nos necesita Tony, y no voy a dejar que hagas algo drástico que le impida tenerte en su vida. Tenemos que hacer esto bien, por nuestro bebé, debemos asegurarnos que Barnes pague por esto.

 

Tony asintió, derrotado. No quería aceptar la realidad, pero sabía que Stephen (como siempre), tenía razón.

 

—¿Qué sugieres hacer? —cuestionó con voz baja, de repente, toda la energía lo había abandonado. Se sentía tan cansado.

—Primero tenemos que hablar con Peter, obtener los hechos directamente de él, y luego iremos a la policía para que arresten a ese bastardo y nuestros abogados se encargaran de que jamás vea la luz del sol —responde con seriedad —. Eso es lo que tenemos que hacer. Barnes tiene una larga vida de sufrimiento, en lugar de una muerte rápida, y Peter y Morgan no se sentirán culpables porque su papá se convirtió en asesino.

 

Stephen pone sus manos en las mejillas de su esposo.

 

—Peter tiene que estar sufriendo, y ahora mismo te necesita más que nunca —el omega abrazó a su esposo, ocultando el rostro en el cuello de éste —. No podemos dejar que siga soportando esto solo, que se sienta que tiene la culpa por lo que le hizo Barnes, ni que se sienta avergonzado de contarnos o crea que nos enojaremos o peor aún, que no le vamos a creer.

 

Tony suspiró y abraza a su esposo, brindándole un poco de consuelo sin que parezca que siente lástima por él. A su omega nunca le gustó que lo trataran como si fuese una figurilla de cristal que se podría romper con facilidad.

El pasado de Stephen no es agradable, habían tenido largas conversaciones sobre toda la mierda que le hizo su tío, con quien había vivido la mayor parte de su vida, luego del fallecimiento de sus padres, y aunque nunca fue abusado de esa manera, era el único de los dos que tenía alguna idea por lo que estaba pasando Peter en este momento.

Comprende el sentir de Stephen, realmente lo hace, pero no puede evitar la sensación que tiene. Cada nervio dentro de él le está diciendo que vaya tras Bucky, y ya es bastante difícil para él permanecer en su lugar.

La mente de Tony está corriendo, jugando con cada escenario en su cabeza. No le gusta, pero debe que admitir que Stephen tiene razón. Lo que Peter necesita más que cualquier otra cosa en este momento es saber que tiene una familia que lo ama, y Tony no puede mostrárselo si está enredado en un tedioso juicio y solo haría que su hijo se sintiera culpable.

No le gusta, desearía poder hacer algo más, pero ahora mismo tiene que dejar que la ley se cumpla.

—No quiero que un desconocido lleve el caso —dijo Tony, comenzando a caminar por la habitación. —No quiero a un extraño mirando a mi hijo, creando ideas estúpidas de nosotros o peor aún, de Peter.

 

Tony puede sentir los ojos de Stephen sobre él, mirándolo caminar de un lado a otro.

 

—Yo solo… no puedo creer que Bucky hiciera algo como esto —Stark se revuelve los cabellos —. El tipo es un idiota petulante y no lo soporto, pero nunca lo catalogaría como un abusador de menores. Siempre ha amado a Peter y Morgan, los ha tratado como si fueran suyos. ¿Por qué haría algo como esto? —Tony pregunta, volviéndose hacia Stephen. No es que no les crea a sus hijos, ¡les creería si le dijeran que hay un mapache espacial que habla y tiene un árbol parlante como amigo!

No va a ser uno de esos padres imbéciles, con la cabeza en el culo que no creen cuando sus hijos les dicen que ha sucedido algo horrible.

 

—¿Por qué alguien hace algo? —Stephen mira a Tony. Está apoyado contra la puerta, probablemente temeroso de que Tony intente salir de nuevo. —Dudo mucho que alguna vez sepamos por qué ha hecho lo que ha hecho, pero eso no importa. Ahora, nuestra prioridad es asegurarnos de que pague por lo que hizo.

 

Tony suspira y se pasa una mano por la cara.

 

—¿Cómo no supimos esto? —dijo Tony con voz lastimera, deteniéndose para girarse y mirar a Strange. —¿Cómo no pudimos notar que algo como esto estaba pasando? ¡Es nuestro hijo! Se supone que debemos saber cuándo algo malo les sucede.

 

En perspectiva, las señales estaban ahí, tan claras que lo aterraban. Ha estado de mal humor, sus calificaciones bajaron, se ha metido en peleas en la escuela, no ha querido ir a casa de Steve y se ha apartado de ellos. Tony no cree que alguna vez se perdone a sí mismo por no haberlo notado antes.

Stephen cruza la habitación y se detiene frente a Tony.

 

—Peter es bueno para ocultarlo, Tony, nunca lo hubiéramos descubierto a menos que él mismo nos lo dijera —aunque ambos tratan de convencerse, Stark puede notar la culpa en la voz de Stephen —. El viernes, cuando dejé a los niños en la casa de Rogers, me di cuenta de que algo andaba mal —admite con un nudo en la garganta —. Debería haber hablado con él, exigido que me dijera lo que pasaba, así Morgan no hubiese tenido que verse implicada en todo esto.

—Tienes razón —Strange baja la mirada, sin atreverse a encarar a su marido, ¿lo odiará por esto?

Tony atrae a Stephen en un abrazo. Suspira, apoyando la frente en el hombro del omega.

 

—Puede que ni siquiera lo haya dicho, no puedes culparte por esto —Stephen gruñe, encogiéndose de hombros.

—Tal vez sí, tal vez no.

 

Tony no lo presiona. Ambos se iban a culpar a sí mismos, probablemente siempre lo harían, y nada de lo que el otro dijera ahora iba a cambiar eso.

 

—Estoy preocupado por Peter —dijo Tony después de unos segundos de silencio. —Ha estado pasando por un infierno estos últimos meses y no nos dimos cuenta.

 

Stephen apoya una mano en la parte posterior de la cabeza de Tony, pasando sus dedos por su cabello.

 

—Él estará bien, nos aseguraremos de ello —el alfa asiente, esperaba que todo saliera bien.

 

 

Continuará…

 

 

 

 

 

Bueno, espero les guste el capítulo, nos vemos en la siguiente.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).