Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Como un demonio por Silence Tsepesh de Lenfet

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola!!

Les paso a compartir el nuevo capitulo de esta historia. Espero les guste.

O como librarse de las disputas entre demonios.

 

Debería sentirme feliz por cómo ha cambiado mi vida en los últimos días: He pasado de vivir en un vecindario viejo y con mala reputación a una casa enorme y lujosa en una de las zonas más caras de la ciudad y no tengo que levantarme tan temprano para ir a las clases, aunque no he ido en días, queda mucho más cerca. Ya no barro y lavo los pisos de un pequeño restaurant, si no que estoy en una oficina con aire acondicionado y muebles de madera, revisando documentos de empleados y con planes de hacer más cosas junto a la directora de departamento. Sin duda, son cambios buenos y por lo que me debería sentir muy feliz, pero no estoy nada feliz.

— Michael ¿estás bien?— Azrael como siempre parece notar todo. Niego con la cabeza. Estoy haciendo trampa. Así es justo como me siento, todo esto que tengo no es mío, yo no lo gane y tampoco es un premio precisamente— ¿Qué te molesta?— Uff, no creo tener señas suficientes para poder expresarlo. Él sonríe— ¿para qué te quería Cyan esta tarde? regresaste antes de la oficina.  

Quería que cuidara a Jade, no sé por qué. Y que comprara comida.

Por eso pase a mi anterior trabajo, aproveche para decirles que por el momento no podría seguir trabajando allí. Mentí un poco y dije que se había presentado una oportunidad por parte de la universidad y que no podía decir que no. ellos entendieron y no cuestionaron, incluso cuando me disculpe por lo repentino de la situación.  Mentir me hizo sentir mal, yo no miento, no necesito mentir.

— ¿Jade está bien? debió quedarse en casa si está enfermo.

Se veía un poco pálido pero está bien. Jugamos cartas en la tarde.

Me preocupe cuando Cyan me dijo que viniera. Nunca he cuidado de alguien enfermo, solo de mí mismo. Creo que el cuidar de alguien no sería el problema, pero si se complica y me pongo nervioso podría tener problemas para comunicarme. Aunque conociéndome sé que haría todo lo posible por tener todo en orden.

¿Cómo hare para volver a la escuela?

— podría haber una forma…— ¿si dijo eso? ¿Por qué ya no habla? Ni siquiera me está mirando. No necesito mirar para saber que ha llegado alguien. A veces puedo sentir la presencia de alguien cuando entra al mismo espacio que yo, es como un sexto sentido si le quiero llamar de algún modo; con el demonio de cabello azul me di cuenta de que puedo sentirle perfectamente. Es como si tuviera una energía única y muy fuerte. Y si, allí esta. Pasa de largo sin hablarnos o mirarnos, a pesar de que Azrael le dijo algo, le vi mover los labios. No entiendo cómo es que están viviendo en el mismo lugar, lo entiendo de Jade pero ¿Por qué un ángel estaría con un demonio? hay muchas cosas que aún no se— Ah, entonces…— el suelo está temblando ¿un terremoto?

¿Qué está pasando?

— No lo sé— Azrael no parece alarmado.

Debemos ir afuera. No es seguro quedarnos.

— estaremos bien— de nuevo le veo mirar la entrada, así que también volteo.  No hay nada allí, y ha dejado de temblar. Cyan aparece en la entrada de la sala, y está molesto… ¿Y porque me está mirando a mí? Yo no he hecho nada. Me levanto, pero antes de que pueda llegar a Azrael, me alcanza y ya no puedo moverme. Me sujeta de los hombros con mucha fuerza y me sacude, haciéndome perder el equilibrio.

— ¿Dónde está?— pronuncia con lentitud, pero no puedo responderle, apenas puedo levantar las manos para repetir no sé, no sé. Azrael interviene, apartándome de Cyan. Me siento tonto ocultándome detrás de alguien, pero la situación lo amerita.   

— si no dejas que te responda no sabrás que paso— les veo hablar pero no entiendo lo que dicen. Luego Cyan vuelve a mirarme.

— ¿Dónde está Jade?— hago las señas rápido, tal vez me equivoque.

—  dice que no lo sabe. Jade estaba aquí cuando llegue, pero se ha ido hace un rato y nos dijo a donde ¿Te dijo algo, Michael?

Solo que quería divertirse.  No me dijo nada más.

Cuando Azrael lo repite, Cyan solo se queda unos momentos antes de desaparecer, solo así, se esfuma. Ah, ojalá no hicieran cosas como esas, así es difícil fingir que todo es normal. Creo que en el fondo aún estoy esperando despertar en mi habitación y que todo sea un sueño del que me reiré.

— creo que ha ido por Jade— eso es bastante obvio. Creo que puedo aceptar la existencia de ángeles y demonios, creo que en el bien y en el mal y ellos son como una representación de ello, no logro entender como es la relación entre Jade y Cyan. Jade me agradaba… agrada, no lo tengo claro ahora, no me ha hecho nada y ha sido amable conmigo.  Solo que no parece ser así entre más paso tiempo con él. Azrael mueve la mano frente a mí, cuando nota que le pongo atención, hace señas. No. te. Preocupes. Cyan. Siempre. Cuida. A. Jade. Están. Bien.    

No estoy preocupado por ellos. Estoy pensando en porque están juntos.   

— el trato, jade te lo ha explicado— ah, me está preguntando.

Me lo explico, pero aun así, Cyan es muy diferente ¿Por qué permite todo esto?

— es un demonio… o lo era… él está exiliado, pero no se lo digas porque se molesta mucho si se lo recuerdas— vale, no es que se lo pueda decir a la cara, o mejor, puedo decírselo a la cara y no me va a entender, como sea, no quiero enfrentarme a su enojo— los demonios tienen que seguir ordenes, hacer su trabajo condenando almas o llevándolas al infierno. Responden a diversas jerarquías y eso es lo que hacen toda su existencia. Ahora Cyan no forma parte de eso,  pero tiene hábitos muy arraigados.    

Entonces se comporta así porque así lo ha hecho por mucho tiempo.

— Sí… ¿Te importa quedarte solo unos momentos? debo asearme.

No me importa. Y no voy a escaparme.

—  está bien, confió en ti— Pero nada de presión. Aunque pudiera irme ahora no lo haría, no hasta saber cómo evitar al otro demonio. Estuve leyendo en internet sobre los demonios, hay cosas muy interesantes y cosas muy absurdas y sensacionalistas, lo único claro que saque de todo eso es que yo no invoque a ninguno así que no estoy en peligro y que debería ir a una iglesia. No le he querido preguntar a nadie por eso, en caso de quieran detenerme. No conozco ninguna iglesia cerca ¿es a propósito?  Ojalá esto fuera un sueño…

No me siento cómodo en la casa, no tanto como para hacer… bueno, es el problema, no sé qué hacer aquí.  No tengo trabajos para entregar porque no he ido a las clases y hasta ahora no se me ocurrió preguntarles a mis compañeros.  Ver televisión no es tan entretenido para mí y me da miedo ponerme a buscar en la casa, a saber que me puedo encontrar por aquí. Como no tengo nada más que hacer que esperar y lo único que me atrevo a tocar son los libros, buscare uno interesante. Los libreros son lo único que no me incomoda tocar porque a pesar de estar limpios no parece que los toquen mucho.

Algo bueno de ser sordo es que no me molestan los ruidos cuando estoy leyendo. Elegí un libro sobre detectives, estoy tan atento al libro que no noto que ya no estoy solo. Cyan y Jade están aquí, aunque no creo que me hayan visto. Están… ¿Tal vez están gritando? Jade parece estar gritando. 

— cómo pudiste hacer eso, solo estaba pasando el rato— eso le entiendo a Jade, pero habla tan rápido que no estoy tan seguro.

— sé muy bien como son tu momento de pasar el rato.

— no estaba haciendo nada malo.

— imprudente.

— exagerado.

— además, sentí a Bel en el mismo lugar. Estabas hablando con él— Bel. Pensar en él me da escalofríos. Jade no parece arrepentido ni asustado de encontrarse con él— de que estaban hablando— ah, es una pregunta ¿Se encontró con Bel?  Cada vez entiendo menos a Jade ¿Por qué hablaría con otro demonio?

 — cosas sin ignorancia— eh, creo que es importancia. No veo que más dice, porque me da la espalda, pero sigue hablando con Cyan… o peleando. Jade avanza hacia él, como si fuera a golpearlo. Va a golpearlo, esto va a ponerse muy mal si… ¿¡lo besa!?  

Una mano me brincar del susto cuando me toca. Azrael está a mi lado, mirándome. Cuando vuelvo a mirar a Jade y Cyan, parece que están discutiendo de nuevo. Azrael llama mi atención de nuevo. Estas. Bien.

Sí, yo estoy bien. Ellos están… ¿Qué hacen?

— discuten— pues vaya que discusión han tenido— no te preocupes, por lo que he podido observar, hacen eso muy seguido y nunca ha sido nada grave.

¿Qué relación tienen?

— ¿Umm? Pues Cyan cumple lo que Jade pide, o algo así. No conozco los términos de su contrato, solo que a cambio Cyan ha salvado a Jade de la muerte— ¿él no lo sabe tampoco? También los vi besándose cuando estaba buscando mi teléfono, solo que entonces no sabía en qué me iba a meter— parece que está pasando algo grave— ¿de qué me perdí?  Cyan está hablando por el teléfono, por como Jade intenta arrebatárselo debe ser su teléfono ¿Cyan tiene uno?  Los veo desaparecer.

¿Qué paso?

— No lo sé, no entendí gran cosa— algo me hace girar. No es algo, es alguien: Cyan. Me hace sentir como un animal pequeño a punto de ser devorado.

— diré esto solo una vez. Jade no sale de esta casa esta noche, sí sé que pone un pie fuera tu pagaras las consecuencias— ¿Qué? Espera…— te hago directamente responsable esta noche— Hey yo no quiero… ¡Se ha ido! ¿Qué demonios ha sido eso? ¿Por qué tengo que ser yo quien vigile a Jade? ¡Se supone que el que va a irse soy yo! me giro hacia Azrael, aun sin creer lo que acaba de pasar.

¿Qué fue lo que dijo?

— que no dejes que Jade salga de la casa— maldita sea.  No puede ser, no puede ser. Me lleva…

¿Qué voy a hacer?

— evitar que Jade salga— nunca he sentido ganas de matar a nadie, hasta ahora— Deberías apresurarte, Jade está por salir de la habitación— ¿Acaso dios me odia? Pregunto antes de salir corriendo hasta la habitación de Jade. Él está saliendo de la habitación, justo a tiempo. Me detengo, poniendo mis manos en el marco de la puerta, una a cada lado para impedirle salir.

— ¿Qué te pasa?— tengo que usar mis manos para explicarlo, tanto si lo escribo como si hago señas, así que mejor cierro la puerta— Hey, ¿te volviste loco? Y aun no entiendo bien las señas, no pierdas el tiempo— Uso mi teléfono para escribir.

No saldrás.

 — ¿ah? ¿Y eso quien lo dice?

Cyan. Me amenazo, tú no saldrás.

—No lo tomes en serio, Cyan no te hará nada— pues yo no quiero arriesgarme— Vamos, no va a darse cuenta— no, no pienso hacer nada que me ponga en la mira de un demonio. No entiendo lo que Jade dice, solo que está molestándose porque no le dejo salir, le bloqueo el paso cada que se mueve— Quítate— no me voy a mover. Ya me esperaba que Jade se arrojara contra mí, no me sorprende cuando lo hace. Nos empujamos, pero Jade no es muy fuerte y puedo contenerlo con algo de esfuerzo. No sé dónde quedo mi teléfono, apenas puedo dar una mirada para buscarlo cuando Jade se vuelve a arrojar contra mí, empujamos y jalamos, moviéndonos por toda la habitación, sigo siendo más fuerte… hasta que él se cuelga de mí, haciéndonos caer sobre la cama ¿Qué le pasa? ¡Eso me asusto, es peligroso! Aun siento la sangre helada— La fuerza no siempre es la mejor solución— mueve los labios despacio, y es fácil verlo porque estamos muy cerca, tan cerca que aún estoy viendo sus labios moverse cuando me besa: Sus manos me atraen, impidiéndome alejarme aunque quiero hacerlo. Estoy luchando por soltarme, cuando su rodilla me golpea muy cerca de la ingle y me empuja, haciéndome caer de la cama antes de salir corriendo y abrir la puerta. Ay, maldita sea ¿Por qué?

Me levanto y corro, resbalando y tropezando con las cosas ¿A dónde fue? Solo sé que hay una salida ¿tendrán una puerta trasera? No sé a dónde ir… bien, será la entrada principal porque no sé dónde está la puerta de atrás.

¡Allí esta!

Lo alcanzo antes de que abra la puerta,  no sé qué hago, solo sé que no quiero que salga y que de pronto estamos otra vez en el suelo, ahora yo soy quien nos hace rodar, alejándonos de la entrada. Me detengo solo cuando ya no siento resistencia de Jade.  Los dos estamos en el piso, solo que él está tirado y jadeando. Azrael nos está mirando desde la entrada de la cocina.

¿Me iría al infierno si lo ato con una cuerda?

— eso sería complicado— creo que dice. Luego mueve las manos. Te. Esta. Sangrando. La. Nariz.

Me llevo la mano a la nariz, y si, hay una mancha roja en mis dedos. Debí lastimarme cuando peleaba con Jade. Una mano me sujeta con fuerza del mentón, Jade. Hace una mueca y me suelta.

— harás un desastre— le alcanzo a entender antes de que se levante. Casi le arrastro de regreso al suelo al ver que se mueve, pero no va a la puerta. Azrael me ayuda a pararme mientras intento contener la sangre presionándome la nariz.

¿A dónde fue Jade?

— ya regresa, quédate sentado— le veo hablar en otra dirección, solo espero que Jade no esté yéndose o no sé qué hare. Ah, aquí esta... trae un botiquín y parece estar discutiendo con Azrael ¿Por qué parece que siempre está discutiendo? Azrael se va…

—  ¿Te duele?— niego con la cabeza. Hace que baje la mano, me toca la nariz, presionando ¿acaso piensa que está rota? No me duele nada— está bien, no se rompió— y me da una bolita de algodón— Azrael fue por hielo… no era mi intención lastimarte.  No hubiera pasado esto si estuviera tan débil por pasar la noche con Cyan ¿Sabías que tener sexo con un demonio te deja sin energía?

¿Qué? ¿Disculpa, podrías repetirlo?

— sexo— él ha… ¿¡Es una broma!? Jade se burla, es fácil saber cuándo alguien está riendo a carcajadas aunque no pueda escucharlo— deberías ver tu cara. Realmente eres más divertido de lo que pareces.

¿Tú y Cyan...?

— Si, así fue— se lleva el dedo a los labios, en la seña universal de silencio— no le digas a Azrael— me guiña el ojo, y luego veo a Azrael trayendo el hielo— si no te lo pones, se te pondrá morado el ojo— creo que nunca voy a entender del todo a Jade. El hielo me hace sentir mejor, aunque no sentía el dolor.

¿Seguirás intentando salir?

— sí, buena pregunta, Jade. Si te vas meterás en problemas a Michael con Cyan.

— le dije que no se preocupará por eso, Cyan no le hará daño— y yo dije que no quiero averiguarlo por las malas—. Pero no, esta carrera me ha dejado agotado y sin ánimos para nada.

¿Qué paso? Cyan se fue muy rápido, parecía que tiene problemas.

— solo problemas menores. Al parecer hubo un reporte de alcohol adulterado en el bar— le veo mover los labios rápido, casi sin despegarlos— podre hacer muchas cosas, pero vender alcohol malo jamás— ¿Es un chiste? En fin, no tiene caso esforzarme mucho dándole vueltas a todo lo que diga porque además tengo otros asuntos.  Nos quedamos en la sala, Jade enciende la televisión y esperamos. Apenas despego la vista de Jade, en caso de que se le ocurra salir corriendo.

— ¿se quedarán aquí?— Azrael pregunta, está mirándome a mi así que tal vez pregunto si me quedaría yo.

Me dormiré en su habitación si es necesario.

—  ¿Qué dijo?— ¡No! ¡No le digas! Muevo las manos, llamando su atención, cuando veo que no dice nada, pregunto.

Pregúntale si puedo volver a mis clases. Esto demuestra que soy de confianza. 

— Quiere saber si puede ir a clases.

— yo no tengo problemas con eso, pero no sé cómo podríamos llevarte.

Puedo ir solo, se usar el autobús y el tren.

— solo queda el asunto de Bel— sí, ese asunto. No quiero vivir con miedo a que se aparezca cada que este en la calle, seria agotador estar alerta todo el tiempo más de lo que ya tengo que estar para poder estar lo más cerca de la normalidad que puedo. Mientras les explico eso, la sombra de Cyan aparece en la sala. Está detrás de mí y me da escalofríos sentirle aparecer así. No tengo la paciencia para ponerle atención a todo lo que comienzan a hablar, que de seguro ha resuelto con solo pestañear.  Yo quiero resolver mi asunto y de preferencia antes de irnos a dormir o lo que sea que quieran hacer en sus habitaciones. Ni Jade ni Cyan me ponen atención cuando intento hacer que me miren y como Azrael me queda más cerca, puedo tocarle el brazo y le vuelvo a preguntar lo mismo.

— si te vas por tu cuenta no me importa lo que otros demonios te hagan— eso es muy malo también.

— no quiero tener que preocuparme por eso todo el tiempo— Y empiezan a hablar entre ellos. Es muy molesto que siempre parezca que se olviden de mi— ¿Y si le das uno de esos amuletos? Yo tengo uno.

— no le servirá, solo llamará más la atención— no se dé que amuleto habla, pero me interesa si puede librarme de los demonios— y no voy a arriesgarme por un humano que no me beneficia en nada— bien, era demasiado lindo para ser verdad.

Yo no quiero beneficiarle tampoco.

— entonces volvemos a lo mismo— Los dos, Cyan y Jade voltean de pronto, no me ven a mí, están viendo a Azrael.

¿Dijiste algo?

— yo podría hacerlo, aunque no es un amuleto.

¿De qué estás hablando? ¿Tú puedes ayudarme?

Es un poco molesto pensar que después de todo si había una solución que no involucrara a los demonios, a estas alturas ya no me importa lo que sea. Me he perdido de otro momento de conversación por estar pensando en cosas. 

 ¿Qué vas a hacer?

— solo es…— protección. Todos. Los. Ángeles. Podemos. Hacerlo. Pero. La. Persona. Tiene. Qué. Ser. Especial.

— ¿de qué está hablando?— Capto la pregunta de Jade porque se adelanta, intentando descifrar lo que Azrael me está diciendo. No lo entiendo del todo.

— ¿Harás eso? la cosa— ¿Qué? no sé si estoy entendiendo bien— Los ángeles pueden dar su bendición a los humanos, si lo hace estaría protegido— entonces ¿Solo es eso? ¿Una bendición? Qué bien estaba preocupándome por si era algo mucho más complicado. Azrael asiente, dando por buenas las palabras de Cyan.

¿Funciona?

— claro que funciona. 

— hace bastante que no veo a un humano con una bendición. Los requisitos son más duros… o tal vez los humanos las merecen menos— eso no pinta bien. No puedo tomar de las manos a Azrael para pedirlo, pero me paro frente a él.

¿Puedo tenerla? ¿Lo harías por mí?

— ¿Lo has hecho alguna vez?

— nunca lo he hecho, pero no es complicado.

¿Qué debo hacer? ¿Hay condiciones o restricciones?

Azrael niega con la cabeza, da unos pasos hacia mí y extiende sus manos para sujetarme el rostro. Creo que dice algo, porque veo sus labios moverse pero estamos tan cerca que no logro entender lo que dice. Luego me besa en la frente y se aleja. No siento nada diferente, no pasó nada extraño, si acaso me parece notar un olor a flores. Jade parece igual de confundido que yo, Cyan tiene una mueca de asco.

¿Eso es todo?

— Si, no debería haber problema ahora— tengo la sensación de que se están burlando de mí, pero como ya no tengo que vigilar a Jade, prefiero irme a dormir y comprobar mañana.

******

 

Las clases me parecen tan normales que me hace preguntarme si volveré a ver las cosas comunes como antes. Me toma un buen rato ponerme al corriente con los días que no asistí, y para mi mala suerte pronto tendré exámenes. Ah, ¿Cómo todo puede seguir tan normal después de haber pasado tanto? Yo aún tengo que ir al casino para trabajar después de salir de clases, tal vez podría preguntar si puedo salir temprano para poder ponerme al día con los trabajos y poder estudiar. También tengo que pedir prestados los apuntes y sacar fotocopias, también llamar a mi tía, porque pronto lo hará y yo no tengo una excusa para contarle porque me mude. Alguien me impide pasar, parándose frente a mí.     

— Hola Michael— doy algunos pasos hacia atrás, alejándome de Bel. Con todo lo que tengo que hacer casi me olvido de él. Esta mañana me dieron un montón de indicaciones antes de salir de casa, aunque siento que la mayoría de las cosas que Jade dijo fueron para asustarme. Estuve intentando creer que lo que Azrael hizo funciona, pero es difícil cuando no me siento nada diferente. Me doy la vuelta, alejándome de la estación de autobuses, mejor tomo un taxi— no me ignores— Bel camina a mi lado, asegurándose de que pueda verle y leerle los labios— puedo llevarte.

No, gracias.

— vamos, demos un paseo.

Tengo trabajo.

— ¿Aun siegues con ellos? Mira, olvídalo— se adelanta, cortándome el paso otra vez— me di cuenta de mi error la otra vez— realmente quiero irme corriendo de aquí— ya que no quieres nada, lo acepto, pero podrías ayudarme— no, definitivamente no.

Se me hace tarde.

— no te pediré nada difícil. Estas viviendo con Cyan, en la misma casa ¿Quisieras ser mis ojos en ese lugar? ¿Cuál es el contrato que tienen? Alguna debilidad que tengan o algo que sea diferente entre ellos… cosas como esas— la extraña relación que tienen, pienso en lo que vi en la noche, en como Jade lo quiere mantener en secreto— ¿Hay algo?— Bel me mira, uy, me quede pensando demasiado, ahora me veré sospechoso.

Se me hace tarde.

— hay algo allí,  dímelo.

 No sé nada.

— mira, solo es…— me toca, o lo intenta, porque apenas pone su mano en mi brazo, lo retira como si le hubiera quemado… no, le ha quemado de verdad. Le veo decir un montón de groserías y maldiciones y hasta me parece ver que sale humo de la mano con que me toco. Parece que al final lo que hizo Azrael si funciona. Vale, es ahora o nunca, me largo de aquí. Bel se aparece frente a mí— Así que por eso han dejado que salgas solo— me mira, como esperando ver algo más— aun así puedes ayudarme ¿lo harás?  Seré bueno y dejare que lo pienses, no vas a deshacerte de mí tan fácil— si no puede tocarme creo lidiar con él será más sencillo— Y no deberías celebrar tan pronto. Yo que tu no estaría tan complacido por tener la bendición del ángel de la muerte— ¿Qué?

En un parpadeo Bel ya no está y un taxi se detiene a mi lado.

Notas finales:

Gracias por leer! Hasta la próxima semana


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).