Tony y Steve veían a Peter jugar en las olas muy feliz junto a sus amigos mientras que ellos tomaban el sol a un lado de la privada playa que tenía el castaño, otro regalo de su excéntrico padre para la pequeña familia.
Se suponía que serían unas vacaciones solamente de ellos tres, pero cuando Tony se lo dijo a Peter estaban sus amigos en casa y eso hizo que todos se emocionarán y terminarán en esta salida familiar junto a Wade, Ned, Harry, Gwen y M.J;
-me alegro de que hayan podido venir todos- soltó Steve en un suspiro acariciando su pequeña curvita de tres meses y viendo a su esposo hacer un puchero
-yo quería que fuéramos solo nosotros cuatro y no tener a un batallón de niños aquí- contestó el moreno oyendo a su esposo reír
-sabes que los niños se irán mañana y tendremos los dos últimos días para nosotros cuatro
-no me gusta que te vean
- ¿por eso me obligas a usar esta enorme camiseta? - el rubio jaló la prenda que llevaba puesta, una que era casi tres veces su tamaño
-sí. - contestó el otro mirando a los niños -No me gusta que te vean esos alfitas lujuriosos
-el único lujurioso aquí está tomando un cóctel a mi lado- susurró el omega subiendo su enorme camisa y acariciando de nuevo su aun medio plana pancita ante la mirada ofendida del otro
- ¿dijiste algo?
-nada
- ¡papá! ¡Mami! - oyeron al niño y lo vieron acercarse junto a sus amigos
- ¿qué pasa cariño? - preguntó Steve acomodándose mejor ante la mirada del pequeño
-queríamos saber si podíamos quedarnos acampando en la playa hoy, ya que será el último día de mis amigos- preguntó Peter con un sonrojo en su rostro
-claro que sí. - contestó Tony tomando un trago de su vaso -Hay una tienda enorme, mantas y todas esas cosas para acampar en la bodega. La llave está junto a la puerta
- ¡gracias, papá!
- ¡gracias, señor Stark! - soltaron los demás yéndose en carrera junto con su amigo.
Cuando ya los perdieron de vista, Steve le miró sorprendido;
-no pensé que les dieras permiso- dijo cuando el otro lo volteó a ver con esa sonrisa perversa que no auguraba nada bueno
-obvio les daría permiso, cariño. Así puedo enseñarte a ti que puede hacer este alfa lujurioso a solas- le guiño un ojo y volvió a su vaso ante la mirada del otro
-te dije que nada de sexo estando aquí y menos con los niños cerca
-estarán en la playa, la habitación tiene paredes insonoras y si pasa algo, JARVIS nos avisará
-dije que no. - negó el otro sintiendo la mano de su esposo sobre su muslo -Tony...
- ¿que? Solo acaricio la muy cubierta pierna de mi esposo
-voy a ir a nadar un poco- comentó el otro poniéndose de pie y empezando a quitarse la enorme camisa cuando el alfa se puso de pie y jaló las faldas de está cubriendo al omega de nuevo - ¿qué demonios?
-dije que no te puedes quitar esto, Steve- dijo aun sosteniendo la camisa haciendo al rubio rodar los ojos
-estas celoso de unos cachorros... ¡Es el colmo!
- ¡no estoy celoso!
-entonces déjame quitarme la camisa, tengo calor y quiero nadar
-no- hizo un puchero y miró hacia los niños que se divertían comenzando a armar su campamento sin siquiera notar a los adultos
-Tony, suéltame
-ve al jacuzzi si tienes calor. No quiero que nadie vea tu cuerpo- el rubio volvió a girar los ojos y agachándose hasta el rostro del otro le sonrió
-si me dejas ir al mar un rato, podrás hacérmelo en el jacuzzi más tarde, hasta que quedes satisfecho- el ingeniero lo vio embobado y con un hilillo de saliva saliendo de su boca - ¿me sueltas? - Tony asintió y soltándolo, lo dejó desvestirse e irse hacia el mar sin dejar de ver ninguno de sus movimientos
"siempre funciona" pensó Steve riéndose bajito para luego meterse a un lado del mar y nadar un poco junto a Peter y Gwen quienes se acercaron al verlo entrar al agua.
. . .
Esa noche, Tony iba entrando en su habitación después de darle una vuelta a los niños que contaban historias de terror en la playa, cuando un fuerte olor a fresas con caramelo golpeó fuertemente su nariz haciendo que sus piernas temblaran y sus colmillos picaran.
El olor de atracción de Steve era increíble y más por el leve dulzón que había en él por el futuro bebé;
- ¿Steve? - preguntó al aire sintiendo al momento unos finos labios sobre su cuello y unas traviesas manos bajando por sus costados hasta llegar al borde de su pantalón
-hola, alfa- comentó este besando la mejilla del moreno quien estaba estático en su sitio
-no es que me queje... Pero... ¿Qué haces? - suspiró el moreno cuando sintió como era guiado hasta la cama y recostado sobre está
-Solo quiero... Consentirte- comentó el rubio subiéndose sobre él y tomándolo con un beso apasionado mientras que iba quitando las ropas del otro
-pen-pensé que habías di... - intentaba hablar entre besos -sin sexo
-cambie de opinión. - Steve comenzó a dejar un camino de besos sobre el cuello de su esposo. Bajando por su hombro, pecho, estómago y llegando hasta su cintura dónde dio un pequeño mordisquito sintiendo el leve gemido del otro, haciendo que sonriera -Vamos a jugar, Tony- susurró tomando el falo ya despierto del alfa y comenzando a lamerlo, sintiendo las manos del otro sobre su cabeza.
El rubio continúo lamiendo toda la extensión del miembro del alfa, hasta que se lo metió todo a la boca comenzando a succionar dejando escuchar en el lugar los sonidos sucios y los jadeos del moreno;
-Steve- suspiró Tony, hasta que sintió como dos largos dedos entraban en su boca, obligándolo a lamerlos con desespero mientras la mamada que le hacían lo hacía delirar.
Unos minutos después, los dedos del otro abandonaron su boca haciendo que Tony soltará un respingo cuando los sintió en su entrada;
-que demo...
-shhhh- le calló Steve comenzando a jugar con la entrada del otro
-Steve... ¿Qué estás...? - se removió incómodo, hasta que vio el rostro del rubio enfrente del suyo. Este le sonrió con malicia
-una vez me dijiste… que, si me lo ganaba… me dejarías hacerte mío y dejarme entrar en ti para hacerte ver las estrellas como haces conmigo
- ¡¿que?! Yo no....
- ¿Ya lo olvidaste, alfa? - preguntó el omega con un puchero - ¿Ya no me amas?
-claro que te amo... Cariño, no llores- soltó el otro cuando vio como cambiaba la expresión del que tenía enfrente y unas lagrimitas se acumulaban en sus ojos azules
-entonces disfruta- exclamó el oji azul poniendo una sonrisa metiendo uno de sus dedos dentro del apretado agujero del otro mientras que comenzaba un fuerte beso y una batalla de lenguas entre ambos.
Unos minutos después, el segundo dedo entró y luego el tercero, haciendo que Tony diera un saltito;
-Steve...
-tranquilo, cariño. Te prepararé muy bien y solo dolerá un poquito... Relájate
-bi-bien.
Tony se aferró a las sábanas aun acostumbrándose a la intromisión de los muy hábiles dedos del omega, era obvio como este había aprendido a hacer eso después de tocarse tantas veces, algo que excitó de sobremanera al moreno y le hizo soltar un fuerte aroma a lujuria haciendo sonreír al otro;
-estas en lo correcto. - soltó el otro con su sonrisa mientras se acomodaba entre las piernas del alfa, quien soltó un suspiro al sentirse vacío -Sé cómo hacer eso porque así es como me tocaba yo cuando estaba en celo o cuando me alistaba para ti
-me gustaría verte tocar... ¡Ah! - gritó el alfa cuando Steve entró de golpe en él - ¡Por Odín!
-estas... Tan estrecho... - Steve se mantuvo quieto esperando que el otro se acostumbrara. Sabía que por ser alfa costaría un poco más que se acostumbrara a su intromisión -Avísame... Cuando.... Tony...
-es… incomodo- el alfa sintió dolor en su espalda baja y cadera
-shhhh- tranquilo, ya pasara
-Steve muévete... Mierda muévete de una vez- exclamó él moreno sintiendo como el otro comenzaba un lento vaivén de caderas, que poco a poco fue aumentando, dejando escuchar en la habitación los gemidos, gruñidos y jadeos de los dos
-Tony... Se siente...
- ¡demonios! No sabía que esto se sentía tan bien
- ¡ah!... Estás tan... Me aprietas...
- ¡mierda! Más rápido Steve
-Te... Ah... ¿Gusta?
-mngh... Si... Odín, ¡ahí! - gritó arqueando su espalda cuando el rubio llegó hasta aquel punto dulce que lo hacía delirar - ¡más fuerte, Rogers!
- ¡si! ¡Ah!
- ¡Odín! ¡Párteme en dos Steve!
- ¡como órdenes! - rio el otro comenzando a embestir más duro, hasta que comenzó a sentir su clímax cerca
-Tony... Yo... ¡Ah!
-yo también... Más
- ¡Tony!
- ¡Steve!
Ambos corearon el nombre del otro cuando su semilla comenzó a salir, llenando así la de Tony ambos estómagos y la de Steve el interior del otro.
El omega salió de su esposo y se quedó a un lado intentando calmar su respiración
-eso fue... - intentaba decir Tony oyendo la risita del otro
-aun no acabamos- soltó el rubio levantándose y dándole vuelta al moreno quien solo se sorprendió al ver la dura erección de su esposo de nuevo.
. . .
Tony despertó de golpe y algo agitado al oír las risas de los niños que estaban afuera.
Inmediatamente, levantó las cobijas viendo con asombro que se encontraba vestido con su ropa de pijama;
- ¿qué demonios? - dijo al aire y se volteó hacia Steve, quién estaba de espaldas a él y dormía plácidamente -Steve... Steve- dijo moviéndolo levemente, hasta que escuchó un gemido
-Tony... Dije que nada de sexo hasta que volvamos a casa- dijo adormilado para volverse a acurrucar
- ¡¿qué dices?! ¡¡Si acabas de follarme como si fueras un puto conejo!!
-lenguaje… - soltó de nuevo -Además... Lo único que hicimos fue tocarnos... - bostezo -Y dije que no habría más, alfa lujurioso
-e-espera, entonces... Tu no... - el rubio se volteó y le miró molesto
-yo no ¿qué?
"¿Fue un sueño? ¿Mi culo aún es virgen?" pensó algo aliviado
-tu no... ¿Me la metiste?
- ¡¿qué dices?!- soltó sonrojado - ¡claro que no! Aunque no digo que no me gustaría intentar alguna vez
-no gracias...
-ya disté la idea, alfa. - sonrió el rubio lazándose sobre su alfa -Esta noche serás mío entonces
- ¡cla-claro que no! - soltó el otro alejándose y yéndose hacia la puerta - ¡Dijiste sin sexo, omega lujurioso! ¡Dormiré en el taller! - soltó para salir corriendo ante el chasquido de lengua del otro
-bueno, lo intentaré luego. Descansa bebé, tenemos la cama para nosotros dos solitos- soltó el rubio acomodándose en el centro de la cama y durmiéndose de nuevo.