No sé en qué mágico momento acepte venir, pero heme aquí en una cena familiar de la chica que tengo a mi lado izquierdo (okey, no es una chica, es una hermosa joven mujer de 28) en donde se suponía era algo muy íntimo, familiar y sencillo; pero detalle, me voy enterando que son de clase social alta, así que lo sencillo no entra dentro de mi concepto, afortunadamente vine decentemente vestida y me encuentro más que nerviosa.
Su abuela está sentada a la cabecera de la mesa rodeada en esta enorme mesa de sus hijos, nietos y bisnietos, donde todos me presumen que la nieta preferida es aquella chica que… repito… está sentada a mi lado izquierdo y me ha presentado como su novia ante toda la familia después de 3 meses de estar siendo formalmente novias.
Ya sabrán mis nervios, entre preguntas aquí, preguntas allá, yo viendo la “sencilla” comida que sirven (un corte de carne que por cierto esta delicioso), tratando de no llamar la atención (como si eso fuera posible) y comiendo lento, hambreada pero tratando de siempre tener bocado en la boca para no dar chance a que me pregunten nada, ¡porque Dios! ¿Cómo desperdiciar estos sagrados alimentos y más porque son mi perfecta excusa para que no me pregunten? En eso, suena la voz de aquella mujer mayor que es firme y gruesa pero que delatan los años llamando la atención de todos, haciendo que el silencio se haga presente.
- ¿Y bien?- pregunta fuerte, todos voltean, yo solo veo de reojo, ni de chiste me meto en asuntos ajenos- ¿para cuándo la boda?- dice segura y yo solo pienso (ah, habrá buena fiesta seguro, ¿Quién se casará?) Los volteo a ver para saber quiénes son los afortunados, pero lo raro es que ellos me ven también, mmm algo como que no anda tan bien.
- Abuela- alcanza a decir mi novia, entonces si volteo a ver qué está pasando
- Niña no te pregunte a ti si no a tu novia- ¿han sentido que escupen todo lo que traen en la boca al momento? Pues digamos que poco me falto para eso y casi ahogándome, digo casi porque de nada me salve de eso, tomé agua de mi vaso con toda tranquilidad al mundo exterior, porque bien dicen que “no muestres tus miedos al cazador” ya que en el interior estaba hecha un manojo de nervios, subí mi vista a la Sra. abuela, sonreí amablemente y dije:
- Perdón, creo que me perdí- en un tono tranquilo y aun no creyendo lo que pasaba, que la voz me sonara tranquila y no titubeara
- Te pregunte qué ¿para cuándo la boda con mi nieta?- risa interna de nervios, esta señora si va directo al grano, sin pelos en la lengua y enterrando el cuchillo más fuerte en la yugular
- Ah, pues, apenas llevamos tres meses, ese es un tema del que aún no hemos hablado- ¿Quién en su sano juicio habla de boda a los tres meses con alguien? Ok, si conozco a mucha gente, pero digamos que no me había tocado y es un tema que tampoco hemos hablado- pero cuando lo hablemos y sepamos esa información para responder, con mucho gusto la sabrá- tono moderado aunque claro mis piernas me tiemblan y el apetito lo perdí, a lo cual lloro porque la comida estaba muy buena y odio desperdiciar los sagrados alimentos.
- Pues deberían pensarlo bien y pronto- repuso firme, presión al mil
- Mmmm- trato de tranquilizarme, porque claro, lo que menos quiero es ofender a una persona mayor por metiche, agregándole que es la abuela de mi novia- creo que esos temas son delicados y solo se hablan en pareja, ya que exclusivamente esas dos personas sabrán a donde quieran ir debido a que serán las que estén juntas el resto del tiempo, por lo tanto no creo que se deba tratar a la ligera ni en una reunión social o familiar- ahora siento las miradas de todos sobre mí y no sé si dije algo mal o no, ella me toma la mano, me da una media sonrisa y voltea a ver a su abuela
- Basta por favor- dijo tranquila pero se le escuchaba la firmeza, la Sra. abuelita hizo una media sonrisa y mi suegro hizo un brindis por la familia para cambiar el ambiente.
En eso siento como mi celular empieza a vibrar y sonar bajito, me disculpo, me paro, voy para contestar porque son mis padres y a ellos si se les contesta.
En lo que hago todo ese movimiento y con todo el pavor de lo previo me pregunto a mí misma ¿Cómo es que llegué a aceptar venir aquí?
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Diciembre
- Maestra- me dice el alumno Alex
- ¿sí?- lo atiendo entrando al salón y poniéndome la bata pues llegué a las justas
- Mi tía vendrá hoy por mí – me cuenta emocionado
- ¡Oh! Que padre!- le digo sobándole el cabello- ¿te agrada que ella venga por ti?- tomo el material con el que vamos a trabajar hoy, bueno más bien con el que daré instrucciones
- Si, ella es muy divertida- dice brincando de un lado a otro- ahorita va a estar en las clases de mi hermana con el ballet- su sonrisa es hermosa, todo un travieso que me cae bien.
- Me da gusto, tu hermana es buena bailarina- termino de poner todo, veo el reloj y da el tiempo para empezar la clase- anda ve a sentarte
- Sip- corre a su lugar
- Espero traigan el dibujo de su súper héroe- veo a los 10 niños de 10 años asentir emocionados- ¿y el resto del material?- escucho sus risas
- También lo traemos maestra- suelta el comentario una niña risueña
- Me parece perfecto, entonces, recordemos que hoy vamos a calcar- comienzo a darles las indicaciones, mi clase es la de dibujo.
Afortunadamente son niños tranquilos y les agrada la clase, bueno en teoría el niño que me dijo de su tía es muy inquieto nunca ha terminado un curso de talleres, pero conmigo va bien, espero siga así.
Ellos trabajaron muy bien y avanzaron lo suficiente; ahora tomo la Tablet para ver que, quien venga por ellos este en el sistema y que no haya ningún problema con quien recogió a que niño por seguridad y legalidad. Me acerco a la puerta después de dar indicaciones de que guarden todo.
- Buenas tardes maestra- la voz femenina es dulce y no tan aguda, me llama mucho la atención, subo la vista y veo unos preciosos ojos cafés claros que podría jurar son una mezcla de miel y café, con facciones femeninas, una nariz recta preciosa, pestañas largas, cabello castaño bastante claro, amarrado con un chongo en lo alto que se le ve sensacional, tez apiñonada yendo más hacia el blanco y unos labios…
- Buenas tardes- digo deteniendo mis pensamientos pero con una sonrisa de amabilidad porque así tengo que recibir a todos y bueno con ella me fue más fácil- ¿por quién viene?- pregunto para verificar la información en la Tablet
- Por Alex- dice risueña y solo pienso “ese escuincle tiene suerte”
- ¿Cuál es su nombre?- espero para verificar la información, no vaya ser que esta hermosura no sea buena persona
- Renata- dice dulcemente, corroboro que esté en los datos
- En seguida le llamo- sonrío tratando que no se me note lo pen… perpleja que me dejó, volteo a llamar a Alex pero el niño ya se la había aventado a su tía a los brazos y ella con una sonrisa lo recibe, sale de un lado Vanesa, la hermanita de Alex
- Miss mire que linda me veo- dice la nena dándose la vuelta presumiendo su tutu
- Sin duda estas preciosa
- ¿va a venir a ver la presentación?- pregunta emocionada
- Claro, me avisas para estar en primera fila- imito su tono de emoción y ella salta topándose con su tía quien ahora que la veo bien, viene en ropas de ballet viéndose MUY linda y por lo visto no me ha quitado la mirada en todo el rato lo cual me hizo ponerme nerviosa
- ¿Se portó bien?- pregunta refiriéndose a Alex que lo ve “seria”, supongo así juegan o se llevan
- Siempre se porta bien conmigo- le respondo regalándole una sonrisa para que tenga paz y volteo a ver al niño- ¿verdad campeón?- el choca los 5 conmigo
- Me da gusto- comenta mostrándome esa sonrisa Colgate que muchos quisieran tener en su dentadura o claramente en frente de ellos como yo tengo la fortuna en estos momentos- con su permiso me los llevo, linda tarde- solo vi cómo se perdían en el pasillo en lo que llegaba el resto de los padres por los niños que ya reconozco un poco mejor sin ningún inconveniente.
Doy clases de “talleres” en la tarde en una escuela para personas de clase social alta diario pero en diferentes horarios porque son para diferentes edades, desde niños de 6 años hasta adultos (los papás de los mismos niños) que quieran tomar algún taller que la escuela ofrezca.
Termino de recoger todo, me quito y acomodo la bata en su lugar, salgo cerrando la puerta, entregando la llave a dirección y con la imagen de la bailarina pensando en poder dibujarla y tomarle fotos para un proyecto como con aquellos modelos que también eran bailarines, esos fueron buenos momentos porque se pudo sacar mucho trabajo para representarlo posteriormente. Enciendo la moto, me pongo la chamarra de cuero y el casco, salgo con precaución hacia el departamento.
- ¿Qué tal te fue hoy?- me pregunta Sara la chica psicóloga que vive conmigo, en lo que abre el refrigerador para sacar algo
- Bien, trabajaron bien los chaparros- sonrío de recordar su emoción
- ¿Que los pusiste a hacer ahora?- va hacia la estufa
- Empezamos a hacer súper héroes- le sonrío cual niña haciendo travesuras
- ¿Los harás en colores?- saca un satén y prende la estufa
- Sí, pero lo estamos haciendo en tamaño de media cartulina- veo como empieza a preparar- les ayudé con la base, pero quiero que ellos se explayen- huele bien
- Me agrada- alzo una ceja ¿tenía que agradarle?- ¿qué harás con los jóvenes y adultos?
- Pufff, con los chavos haré lo mismo pero les complicaré la existencia- hago media sonrisa- y con los adultos no serán sus héroes pero si sus hijos disfrazados de héroes y así gano con todos- sonrío triunfante y ella se ríe
- No tienes remedio- voltea a sacar dos platos y divide lo que cocinó en dos porciones para que comamos
- Gracias- digo emocionada y hambrienta, no es que cocine muy rico, pero rico y comible si es.
- De nada- se sienta a empezar a comer- pensé que irías al taller después de las clases
- No- digo cansada- es que no puedo avanzar hasta que seque un poco la arcilla- eso me frustra algo
- Bueno, bueno, ya mañana le avanzas- sonríe
- ¿Vendrá tu amigo no novio?- le sonrío pícaramente
- Jajajaja curiosa, pero no, hoy no viene, así que tendrás la casa en silencio- se burla de mi
- Es bueno que dormiré sin ruidos fantasmales – le sigo el juego, donde que esa vez tuve que dormir con los audífonos puestos y la música a un volumen considerable, cuando me despertaron con su “fiesta” particular ni cómo salir del cuarto a decir que le bajaran, yo no quería ver la escena, no me quedó más que dormir incomoda con los audífonos.
Principios de Enero
Llego a la escuela y veo como hablan Alex, Brandon y Lucía en lo que empezamos la clase, no soy de meterme mucho, sé que tengo cámaras que vigilan, así que lo mejor es mantenerse al margen, pero empiezo mi clase
- Eso es algo incorrecto- se queja Brandon acaloradamente
- No veo porque es incorrecto- Lucía se enoja
- A las niñas solo le deben gustar los niños- casi lo grita
- Claro que no, a mi tía le gustan las niñas y a mi mami papá- dice Alex poniéndose entre Lucía y Brandon
- Eso no está bien, eso es malo- dice empujando a Alex y antes de que pase a mayores ya que TODA la clase se enteró los detengo y los acomodo en sus lugares
- Pongan atención- empiezo firme y ahora la pregunta es ¿Cómo pongo esto en un punto donde les diga que no está mal sin echarme a los papás encima? Tomo dos dibujos míos uno realista y uno abstracto para pegarlos en el pintarrón- ¿les gustan?- ellos gritan que si (eso es bueno, que si no el ejemplo no funcionaría)- ¿Cuál les gusta más?- unos señalan a un lado y otros a otro lado- bueno es lo mismo con los gustos de las personas- le clavo la mirada a esos tres- pero no nos vamos a enojar porque a unos les guste este- señalo uno de los dibujos- y a otros este- ahora señalo el otro- ¿o sí?- pregunto con una sonrisa y guiñándoles el ojo, todos responden que no- entonces sigamos haciendo dibujos bonitos- ellos siguen con el trabajo. Me acerco a esos tres y con voz suave digo- de todos modos esos son temas de mayores y/o que deben tratar con sus papás- les guiño el ojo- ¿ok?- y ellos asienten
Pasó el rato y la clase acabó, “ahora tendré que hacer un reporte de lo sucedido” pienso con molestia en lo que entrego a los niños con una sonrisa de cortesía.
- Buenas tardes maestra- esa voz de nuevo con esa hermosa sonrisa, muy buena forma de empezar la semana
- Muy buenas tardes- le contesto con la misma sonrisa, volteo y llamo a Alex- ya viene
- Gracias que amable- su voz tersa me distrae y hago mil esfuerzo para que mi mente no comience a divagar
- Maestra- Alex, creo que ahora te amo por no dejar que mi mente vuele en estos momentos- ¿cuándo sea mi fiesta de cumpleaños va a ir?- me pone esa carita que es imposible decirle que no
- ¡Claro!, será un honor- le sonrío a lo que el salta festejando
- Bien, luego le doy la invitación entonces- si les dijera cuantas veces me han dicho eso los niños y cuantas invitaciones en papel he recibido se sorprenderían porque solo a las de mi sobrino he ido y a esas mi hermana nunca me ha hecho llegar una invitación, solo dice “tal día en tal lugar”
- Vámonos- le dice la tía con una sonrisa aún más grande y yo no supe que fue, a lo mejor le llegó mensaje en el cel., la veo alejarse y me percato que trae traje de oficina, la cual lleva falda y le queda bastante bien, se ve muy linda y femenina.
Espero un rato más con “Lucy Lucía”, que al parecer a su mamá se le hizo algo tarde
- Disculpe maestra- llega apenada la mujer
- No se preocupe a veces pasa- le contesto con voz suave para que esté tranquila en lo que llamo a Lucy que está cabizbaja
- Maestra ¿ha notado algo extraño en la niña?- pregunta con temor y pues tuve que contarle el pequeño percance que no paso a mayores- gracias- dice casi al llanto y juro no dije nada malo o por lo menos que yo recuerde - es que vera, mi esposo y yo nos estamos divorciando- habla con pesar y la niña llega
- Nena, ¿Qué tal si juegas un poco con los legos?- le propongo a la pequeña con una sonrisa en lo que hago pasar a la mamá para que se siente
- Gracias de nuevo- me da esa sonrisa de agradecimiento pero de esas que sabes que todo se la está yendo a la fregada o carajo como quieran verlo- él es gay- suelta pesado y abro los ojos, no porque me moleste, sino porque ¿Cómo lo estará manejando Lucy?- en si siempre lo supe, pero él conoció a alguien y yo también- suelta una risa nasal irónica- pero es una ella
- ¿Están yendo a alguna terapia?- le pregunto suave pero viendo a Lucy, haciendo que ella entienda que es por preocupación de la nena, aunque la terapia también les vendría bien a ellos para afrontar las cosas d ela mejor manera en este supongo “nuevo cambio”.
- Aun no, pensaba ir a la de aquí- dice con cierto pesar
- Aun esta, ¿Por qué no la acompaño?- ella me mira confundida- puede hacer una cita de una vez y ver qué es lo mejor, además aún es temprano- llamo a Lucy, cierro todo y las acompaño
- No dijo nada de mi situación- suelta con cierto asombro en el camino
- No tengo nada que decir, no es fácil y lo que se puede hacer es que ella y ustedes pueda pasar este proceso de la mejor manera como ustedes- hablo con una sonrisa deteniéndome en la entrada de donde está la psicóloga dejando que entren
- Resolviste bien Helena- escucho la voz de la directora, sude frío del susto que me pegó porque ni la oí venir
- ¿resolví?- pregunto para ponerme al tema y comprobar que hablamos del mismo
- Lo de los niños y lo de la señora- me dice invitándome a sentarme
- Ah, pues no me metí- la sigo a los sillones de espera, en eso sale Lucy de la oficina- vente- le hago seña para que se siente
- Me gusta tu trabajo- veo como esa mujer seria se pone de pie para que me quede con la niña, ¬¬ sacona
- ¿todo bien princesa?- le pregunto
- Si es que…- no sabe que decir
- ¡Aquí estas!- escucho el grito del niño que viene corriendo- ¡le traje la invitación!- me da risa, Alex me acaba de cerrar la boca y su tía viene detrás sin correr pero si caminando bastante rápido ¿Cómo le harán con esos tacones? Yo doy tres pasos a esa velocidad y seguro me estampo en el suelo, en eso escuchamos como se suelta un hermoso aguacero- mira Lucy, también tengo la tuya- se la entrega
- Perdone las molestias maestra- dice la tía acercándose con la pequeña Vanesa
- No se preocupe, siéntese- ella se sienta a mi lado y los niños se ponen a jugar, me divierte mucho ver jugar a los niños, cuando entran a ese lugar mágico de la imaginación donde todo es posible
- Espero verla ese día- me saca de mis pensamiento, señala la invitación y me sorprendo
- Como dije, será un honor- veo la invitación- solo espero no perderme – le digo en broma, pero no tanto porque soy nueva en la ciudad y me muevo con el GPS, que déjenme decirles a veces es un traidor del mal que solo me enreda
- Jajajaja pues si se pierde me llama- toma la invitación en sus manos, saca un lapicero escribiendo un número telefónico y me lo entrega- así no habrá problema
- Gracias que linda- digo sintiendo un no sé qué, pero en eso sale la mamá de Lucy, todos nos disponemos a salir del lugar y yo agradezco el haber dejado la pieza de arcilla bien cubierta para que no se seque ni humedezca más y mañana poder seguirla trabajando.
Voy al locker guardo la invitación en mi mochila y saco mi mochila fosfo (fosforescente), para ir a la entrada donde esta Alex y compañía
- ¿y tú carro?- pregunta Alex a su tía
- En el taller, por eso viene tu chofer, solo que fue a hacer un mandado en lo que entregábamos la invitación.
- Tardaste en llamarlo- ella ríe negando con la cabeza, se ve tierna hablando con sus sobrinos
- ¿Maestra la llevamos o acercamos a algún lugar?- veo al frente y ya no llueve
- No gracias, traigo moto- le enseño el caso y ella abre los ojos sorprendida o tal vez aterrada, que raro
- ¿me da una vuelta?- preguntan los niños a la par, volteo a ver a la tía por su aprobación o negación
- Una vuelta chiquita ¿okey?- les digo viendo la aprobación.
Literal solo fue una vuelta chiquita y donde ella podía vernos, se los entregué, llegó su carro y se fueron.
- Uff ya no hay taxis- se queja la mamá de Lucy llegando, ¿en dónde estaban? Pensé que ya se habían ido
- ¿si quieren las acerco a algún lugar?- le pregunto
- ¿No es mucha molestia?- yo niego con la cabeza- seria a la empresa Q…
- ¿Qué tal si me pasa la dirección, la ponemos en el GPS y listo?- le hago seña para que se vaya subiendo- la niña en medio de las dos- tomo su bolso y le doy mi mochila, ella se me queda viendo feo- la mochila dice que estamos en camino y así los carros no pueden decir que no nos vieron, mis manos van al volante así que no le puedo hacer nada a su bolso- ella ríe, le paso el casco mientras me acomodo la chamarra, hago que se agarren bien y salimos camino al lugar solicitado, ellas se bajan me entregan mis cosas y yo las suyas
- Gracias maestra- dice la Sra.
- No se preocupe, ¿ayudó hablar con ella?- realmente me preocupa la niña, además me cae bien
- Tendré que buscar aparte, pero estarán dándole la atención requerida
- Tome- le entrego la tarjeta de mi amiga Sara- es buena- la mujer me abraza y me vuelve a agradecer, salgo de ahí para llegar al departamento y por fin poder dormir.
Llegué tarde, mojada porque la lluvia se hizo presente nuevamente y aunque me encante mojarme, no me gusta que mi mochila lo haga, afortunadamente lo de adentro no se moja, pero bueno, ustedes entienden, los objetos (sobre todo papeles y tecnología) si se dañan si se llegaran a mojar y no me puedo dar el lujo de gastar en tecnología y mucho menos perder mis preciados bocetos o dibujos que me piden y vendo.
Me fui a bañar porque ideas que te meten de que “si no te bañas te enfermas” y bueno no sé si es psicosomático o no, pero así pasa, una friega de alcohol, humectar bien mi piel con crema que le funcione a mi bien y payasa piel que no toda crema es lo suyo y no porque te salgan ronchas si no porque dice “ah esta crema no te humecta mira a los 5 minutos para verse horrible” o “¡ve nada más! Parezco el cebo andando”, entonces es andar buscando cual es la que la nena piel quiere, le gusta y se le antoja; ponerme una ropa cómoda porque hoy me toca cocinar la cena.
- Vaya, ya pensaba yo que me ibas a deber el hacer la cena- dice Sara viéndome salir del baño
- Lo siento, se me hizo tarde y luego la lluvia- digo viéndola reírse de mi desgracia en lo que me ve acercarme a la cocina- ¿algo que se te antoje?- porque sabrán que aquí la señorita es doña antojos
- Nop, luego compro para que me complazcas- dice seductoramente y esa mirada de “te voy a comer” yomi yomi que en vez de sonrojarme o molestarme me da risa
- Aún sigo pensando que tus comentarios nos van a meter en líos con alguna pareja- niego con la cabeza riéndome de sus ocurrencias para asomarme al refrigerador y ver que hay, ¿Qué será mejor, pollo o vaca?
- ¿alguna pareja tuya o mía?- dice divertida- Que sea pollo- lo saco, lo bueno es que no tenía antojos- con papas y les pones la mantequilla y la pimienta así como tú sabes- ¡¿ven lo que digo?!
- Tuya, yo tengo años sin tener y las que tuve no creo que se pueda clasificar como una- saco pollo del refri, para ir a buscar la cazuela, el sartén, pasta y demás
- ¿No te piensas enamorar?- mmm empezó a usar el método psicólogo
- Yo no dije eso, si llega llegará, pero si no, no importa- alzo los hombros para quitarle la importancia
- ¿Acaso no te gustaría alguien que te haga compañía y sentir mariposas vomitantes en el estómago?- me dice con cierta burla- ¿tanto te hirieron?- como si yo no supiera que está tratando de hacer, en lo que platicamos empiezo a cortar la cebolla, parto las papas a la mitad para ponerlas a cocer, condimento la carne, pongo a calentar el agua para la pasta.
- ¿y a quien no le gustaría?- le contesto preguntando, para ser honesta estas conversaciones con ella me divierten, porque intenta molestarme pero sin presionar, solo para ver que reacciones tengo- por lo que te conté en aquella única borrachera sabes que no me rompieron el corazón para tanto, porque siempre he sido bastante distante con mis relaciones- mmm creo que comeré poco, sobrará, supongo lo puedo llevar de itacate
- Cierto, cierto- se ríe
- Cierto- la veo feo utilizando tono irónico- si esa vez también me psicoanalizaste no te hagas- corto las cosas y empieza la magia de la estufa
- Claro que no- se hace la ofendida- estaba igual de ebria o más que tu- se ataca de la risa contagiándome, es una cínica, pero la pobre si estaba ahogada en alcohol- lo que no entiendo es ¿Cómo yo me estaba muriendo de la cruda y tu como si nada?- respira profundo oliendo lo que va de la comida
- Se llama beber con inteligencia- me mofo de ella y me ve con un “mientes”- la edad es sabiduría niña- la señalo con la palita continuando la burla y ella entrecierra los ojos
- Niña tú, porque te vez como una- se queja
- Jajajaja, bueno el vodka no me da cruda fea ni el tequila, pero no tomo tequila, malas experiencias, además si tuve, me la pase bebiendo suero y refresquito de manzana- le digo mimada
- Bueno ¿y tú secreto de la eterna juventud licenciada?- se levanta a sacar el agua que afortunadamente ella hace de limón
- Solo es la cara, además la complexión y lo que sigue es genética- pruebo si le falta algo y como siempre es sal a lo cual le agrego, abro las papas y les pongo la mantequilla para agregarle las especias y taparlas, ponerlas en el sartén y voila la cena esta lista- ya has visto a mi familia- agarro los platos para servir y ponerlos en el desayunador- sabes que no miento
La cena estuvo amena, ella me molestaba y yo a ella sin invadir temas que no o faltarnos al respeto. Terminando ella tomó los platos y demás para lavarlos
- Gracias- dije
- A ti, cocinas bien- dice sonriente
- Sazón familiar, es la ventaja- le paso los vasos y guardo la jarra
- Bueno ¿Por qué tan tarde hoy? ¿te regresaste al taller?- está enfocada en lo que hace
- No, paso un detalle con unos niños y entre una cosa, la lluvia y demás, salí tarde- me siento para acompañarla
- ¿todo bien?- pregunta curiosa
- Si- le platico el suceso- le di tu tarjeta, así que a lo mejor te hablan
- Gracias- pasa ahora a las cazuelas
- Ah y me invitaron a un cumpleaños- me divierte el recuerdo, saco la invitación
- ¿Guapo?- pregunta viéndome con una sonrisa
- Supongo que lo será cuando crezca, los niños pequeños no son lo mío- me río, voltea, ve la invitación y se ríe
- Ah vaya- hace cara chistosa pero tierna, se seca las manos y se acerca para verla- es un lugar nice, ¿sabes llegar a esa parte de Santa Fe?- me ve curiosa examinando la invitación
- El GPS me dirá como- le restó importancia
- ¿y el número? ¿es de la mamá, el papá?- me mira inquisitiva.
- De la tía por si me pierdo- le comento para que no ande con sus ideas de que me meto en relaciones, ella me entrega la invitación con cierta mirada de que está maquilando algo y eso a veces en ella me da miedo, más cuando soy la única en la misma habitación que ella
- Que amable la tía- usa ese tono para molestar, yo niego con la cabeza- ¿soltera?- destape su curiosidad
- No sé, no he hablado con ella, solo para recoger al niño y ya- meto la invitación a la mochila- y como en dos ocasiones.
- ¿Cómo es?- se sienta en el sillón para prender la tele en un programa en el que claramente ninguna de las dos pondrá atención y me invita al sillón
- Es un poquito más alta que yo,- con eso queda claro que alta no es- cabello castaño claro, ojos cafés claros,- demasiado bonitos- se ve amable- digo viéndola- mejor pregunta directo
- Ok, ok- se ríe- ¿está linda?
- Si lo está- voy a poner la tetera se me antojo un té y conociéndola también le hago uno porque querrá probar del mío
- ¿Estéticamente?- dice viéndome hacer las cosas
- Tiene bonito cuerpo si
- ¿Cómo sabes?
- La primera vez que recogió a Alex traía vestimenta de ballet porque le ayudó a su sobrina, los rasgos se le hacían notar más, además hoy llevaba traje de ejecutiva- pongo los tés en las tazas
- ¿Falda o pantalón?
- Falda
- ¿Qué color?
- Gris- le agrego el azúcar
- ¿Blusa?
- Era una rosa pálido que le ceñía bien
- ¿zapatos? Que sea en la taza grande- ven, la conozco, saco las tazas grandes
- Tacón de aguja no muy altos como 5 cm o más, ya sabes que de esos no sé, rosas del mismo tono de la blusa
- ¿maquillaje?
- Sencillo, bastante sencillo- trato de recordar, no soy de fijarme mucho en eso- traía un labial rosa que le quedaba muy bien
- Ah- dijo recibiendo la taza en lo que yo me acomodaba en el sillón- ¿y cómo es que llegó a darte el número?
- Pues porque yo comenté que “a ver si no me perdía”- le di el primer sorbo al te, rico sin duda
- ¿Cómo estaba peinada?
- Cabello suelto hacia alado izquierdo, con un prendedor plateado, mas no me acuerdo
- ¿Femenina?
- Bastante- digo con una sonrisa
- Amiga mía, estas en el hoyo- la veo horrible- ¿desde cuándo te fijas en tantos detalles en alguien?
- No entiendo- cruzo las cejas
- Digamos que para ver que alguien más tiene interés en otra persona eres un haz, pero en lo personal tienes unos problemas serios, vives en una negación o de verdad no te das idea
- ¿a qué viene esto?- ¿y ahora que le pico a esta?
- Nada nada
- Hablando de amores, ¿qué tal con…?- sonrío
- Ahí va, ahí va- dice cambiándole de canal y un poco juguetona
- ¿acaso a la niña si le gusta este?- me toca molestarla
- Puede ser- dice en tonito medio cantado
- ¿cómo los besotes que te dio ayer?- jajajaja su cara
- Osh, ya pues, ya andamos- se queja
- Me da gusto, se ve que el fulano, es buena gente y sobre todo babea por ti
- ¿quieres que te lleve?- me niego, regresa al tema de la fiesta con tal de que no la moleste
- Con la moto puedo, no te preocupes
Día de la fiesta
- Gracias por traerme Rebe- salgo del carro de mi amiga
- De nada, que lástima lo de tu moto y que Sara se ocupó- se burla descaradamente de mí, si Sara es cínica Rebe le dice “quítate que ahí te voy”
- Tan linda tu como siempre- la veo feo en lo que me despido de ella y tomo el regalo
- Qué bueno que te pusiste fresa- dice viendo el lugar- me avisas para recogerte, estaré cerca- me da el adiós con la mano para arrancar sin esperar mi respuesta
Voy hacia la entrada donde se encuentra un monillo con traje quien ve la invitación y me deja entrar
- Buenas tardes maestra- me saluda la tía de Alex sorprendiéndome, no la vi, también se ve bien en jeans oscuros ajustados, más informal de ese traje pero igual de bella la mujer
- Buenas tardes- le sonrío- ¿y el cumpleañero?- giro la vista para buscarlo
- ¡Miss!- grita el niño que corre hacia a mi dándome un fuerte y brusco abrazo- viniste- está todo emocionado
- Dije que vendría-me río y le acaricio el cabello (lo sé, es una manía pero con él se me da muy natural, en si no lo hago con todos los niños y no sé explicar porque)- mira te traje un regalo espero te guste- le entrego la caja- oh y me falta esto- saco un sobre grande de mi portafolio mientras le guiño el ojo cuando se lo doy (mi portafolio es fresa debo aceptar, alguien me lo regalo, es un Mario Hernández, para mi gusto solo lo conocen en su casa, pero bueno, lo uso porque me gusta)
- Gracias- dice ansioso por abrir el paquete
- Acuérdate que dijo tu mamá, que se abren los reglaos hasta a la casa- le advierte la tía
- Está bien- el niño hace puchero, va, deja los regalos en una mesa y vuelve a jugar con los demás niños
- Qué bueno que pudo llegar sin problemas de perderse, quien la trajo podía quedarse- me dice en lo que me guía para sentarnos en una de las mesitas
- Oh no, ella tenía una cita con su novio o algo así- me siento y en cuanto alzo la vista la veo con una enorme sonrisa, que linda se ve con esa sonrisa, bueno en general hoy se ve preciosa
- Oh vaya- hace tono de sorpresa, pienso que esto es raro- creí que vendría en su moto
- La moto tuvo un pequeño percance- le sonrío, moto traidora
- ¿tuvo un accidente?- pregunta preocupada
- ¿eh? Ah no- muevo mis manos- solo la llanta se ponchó en la noche y hoy no me daba tiempo de cambiarla para llegar puntual- la verdad es que Jorgito el novio de Sara es quien me ayudará, porque no soy muy diestra en eso, pero no le voy a contar detalles de mi vida personal
- Ah que lástima- sería creíble lo que dice si no tuviera esa sonrisa de satisfacción, “mi bella motito” (lloro por dentro)
- Linda fiesta- digo viendo el salón con paredes blancas, lo cual hace que la luz se refleje de manera adecuada; techo alto que no se logra a ver mucho porque está adornado de telas de colores con globos, nuestra mesa tenía mantel de súper héroes (una combinación de “les vale un cacahuate” porque había de la liga de la justicia, x-men, avengers y otros que no conozco”) al igual que a las demás mesas donde hay más gente de supongo la edad y que no estamos con ellos ¿Por qué no estamos con ellos? Los niños corriendo, saltando y jugando en los juegos de diferentes índoles en el lugar (cama elástica, trampolines, tubos, videojuegos y mejor paro de enumerar porque son demasiados).
- Sí, mi hermana le invierte bien a las fiestas de mis sobrinos- me habla con esa hermosa sonrisa, creo que estoy teniendo una pequeña obsesión por su sonrisa- ¿gusta algo de tomar o comida?
- Por favor- respondo y veo donde están las cosas suponiendo que puedo acompañarla al lugar por ello, pero ella hace una seña y se acerca un mesero
- ¿alguna bebida en especial?- mi cara de “¿what?”, en mi rancho o bueno hasta en donde vivo ahora según yo, a la vida, ¿Cómo contratan meseros para una fiesta infantil? ¡Que manchados!
- Hay cerveza, vodka, tequila…- mis ojos se van abriendo más “¿Qué no es una fiesta de niños?” En lo que él sigue enumerando las bebidas
- ¿y sin alcohol?- pregunto sintiendo como ella no me quita la vista de encima, lo cual me pone un poco nerviosa y no sé porque, ya que, normalmente ignoro esas cosas
- Refresco del sabor que guste y aguas de sabor Jamaica, horchata, limón y naranja
- Agua de limón por favor- el asiente y voltea a verla
- ¿le traigo la bebida?- le pregunta amable y cortés
- Sí, pero también agua de Jamaica, nos traes algo para degustar también- eso fue una orden y el obedece, me sentí como si estuviera en un restaurante
La fiesta fue agradable para los niños, Alex fue por mí para darse el gusto de subirme a los juegos en los que podía entrar junto con su hermanita y demás niños, además de los videojuegos del lugar donde los niños gozaban ganándome, hasta que Renata nos acompañó jugando un poco, llegó la hora donde se comió, partió el pastel y la piñata, afortunadamente fueron por mí (eso me hizo sentirme como niña pequeña esperando a que sus papás vayan a recogerla), después de que Rebe ignoró mis mensajes en cuanto cortaron el pastel y no quiero ni pensar que estaba haciendo para ignorarme
- Fue un gusto el poder venir- le digo a Renata y a Alex en lo que me despido, la mamá de Alex fue cortés y amable, pero le dejó a Renata para que mi estadía fuera cómoda en lo que ella estaba con las demás mamás demasiado fresas para mi gusto y sus pláticas sin un contenido interesante, así que honestamente agradecí eso.
- Gracias- dice el niño para correr a jugar nuevamente, al pobre lo hicieron venir a despedirme
- El gusto fue nuestro por acompañarnos- me dice ella, negando con la cabeza el comportamiento de su sobrino y a mí que me divierte lo libre que es- ojalá podamos ir a platicar alguna vez a algún café- saca eso de la nada, volteo a verla, esa no la vi venir, pero la verdad es que me sentí muy a gusto platicando con ella, la conversación fluía demasiado bien, tanto que me sorprendí porque no soy de platicar mucho con personas nuevas.
- Ah, claro sin inconveniente- la veo sintiéndome extrañamente cómoda
- Entonces me comunico contigo para ponernos de acuerdo- veo el carro de Rebeca llegar, en donde el fastidioso de su novio es el que maneja, casi estoy que le digo que se vaya y mejor me voy en taxi aunque me cueste lo que gano en la escuela esta semana
- Muy bien- le digo
- Aunque para eso necesitaría tener tu número- la frase me detiene, ella señala el celular
- Cierto- me rio nerviosa por mi distracción, le doy el número y entro al carro saludando cortésmente, pero el ambiente es tan denso que mejor ignoro todo.
Semanas han pasado desde la fiesta, Alex estaba muy contento con su juguete y el dibujo que le hice de su súper héroe. De mi moto, para cuando llegué Jorgito ya le había arreglado la llanta y ahora puedo ir y venir alegremente en ella.
- Qué día ¿no?- volteo a verla
- Si, de locos- me río en lo que pongo más arcilla en la pieza- las marchas han estado con todo hoy
- Llevas buen avance- dice observándome la mujer de cabello corto castaño oscuro y con bastante presencia- ¿Cuántas piezas tiene el proyecto?
- 20 aproximadamente en escultura y pude agregar unas en pintura- sonríe satisfecha
- Bien, será bueno para la exposición que tengo planeada para cuando se termine el tiempo del proyecto de la beca.
- Muchas gracias por tomar mi proyecto para asesorarme- digo agradecida de verdad, sé que es una artista bastante cotizada
- Nada que agradecer, te ganaste el puesto y esta beca no es fácil- aun me observa la pieza que hago y las que ya están terminadas, en proceso de secado o pintura- las becas no son fáciles, tu trabajo habla bien de ti y de tu compromiso
- Aun así gracias- como si yo no supiera que pudo ignorarme todo este tiempo pero me ayudó, asesoró y me contactó con personas incluyendo donde estoy dando las clases
- ¿creés terminarlo para julio?- pregunta aun con duda
- Si, voy a buen ritmo y la ventaja es que no tengo que preocuparme por más cosas, puedo estar de lleno en esto- cierro la pieza por fin
- Excelente- en eso suena mi celular
- Disculpe- digo contestándolo aunque se llenó de arcilla- ¿bueno?- no conozco el numero
- Maestra buenos días habla Renata la tía de Alex
- Hola Renata ¿qué tal?- veo como me dejan sola en el taller (una bodega bastante grande que nos permite trabajar a varios a la vez en diferentes materiales sin dañar o intervenir el trabajo de alguien más)
- Todo bien ¿y usted?
- También bien gracias, ¿en qué le puedo ayudar?
- ¿Quería ver si le interesa tomar un café hoy a las 6?- veo la hora y son las 3, con razón me dejaron sola es tiempo de comer
- Claro, ¿en dónde?
- ¿Qué le parece si paso por usted después de sus clases?
- Cierto, tengo clases- creo que tendré que comprar una torta para llegar con tiempo- ok le espero- una torta cubana sería buena, pero la última vez se me quedaron viendo feo por pedir sin ciertos ingredientes ¬¬
- De tu por favor, después de todo eres más grande que yo- por alguna extraña sensación sé que está sonriendo- en el clima dijeron que lloverá así que tal vez la moto no sea una buena idea- salgo a ver el cielo y efectivamente está muy gris
- Puede ser- repaso mentalmente si traje el impermeable o no- ¿A dónde iremos?
- Es una sorpresa- no me gustan las sorpresas, en realidad las odio
- Mmm – creo que ya no quiero ir- ¿y cómo regresaré a mi casa si no llevo transporte?- perfecta excusa de la que me voy a agarrar
- Si me permite la puedo llevar a su casa – dice rápido
- Creo que lo veo difícil- aunque ella no me da mala espina, prefiero ahorrarme malos ratos, las cosas van raro y eso no me gusta
- O puedo regresarla a la escuela para que se vaya en su moto- contestó aún más rápido
- O puedes decirme a donde iremos y llego directo- con esto se cancela todo, puedo llegar a dormir en lo que Sara cocina algo o Jorge, porque ya se incluye en los días de cocinar
- O puede seguirme en la moto a donde queda el café- touche
- Me parece, le veo a las 6 entonces, linda tarde- cuelgo sintiendo una extraña pero no mala sensación en mi estómago, seguro es hambre.
Tapo la pieza, limpio el material, acomodo las cosas, escucho como ruge la tripa, tomo mis cosas, veo mi ropa y es un desastre a pesar de haber utilizado el mandil, miro mi celular y está lleno de arcilla, doy un soplido con pesadez, lo limpio lo más que se puede y salgo a comer a la cocina corrida que está cerca del taller, sé que tengo el tiempo contado para poder llegar bien a dar las clases.
Las clases fueron productivas, hoy me tocaba con los adolescentes “ligadores”, no falta el que pide alguna cita y al que bateo con el “mayor de los dulces sarcasmos”, creo que eso ya se convirtió en un juego entre ellos y yo, pero bueno, hasta eso son buenos chicos. Lo mejor de todo es que con ellos no tengo que ver quien vino por ellos, estos salen solos.
Coloco las cosas en su lugar, me quito la bata cierro la puerta y me topo con una hermosura en falda.
- ¿Lista para el café?- me pregunta con cierta emoción que me saca una sensación de calosfríos por el cuerpo, creo que me dará gripa
- Si- ahora me da un poco de vergüenza porque ella está toda bien linda bonita y yo pues vengo del taller, ya se imaginarán que no es que ande tan correcta
- ¿viene del taller?- pregunta con una sonrisa coqueta encantadora y esos hermosos ojos
- Efectivamente, tuve un día productivo- tomo mis cosas para subir a la moto
- ¿usa modelos?- “¿te podría usar a ti? Tsss ¡Helena!”, me regaño
- Para este proyecto no- no le doy importancia, porque así es, no me importan los modelos como para usarlos de excusa a cada rato
- ¿me sigue entonces?- asiento con la cabeza y ella sube a su carro que si se cual es porque me gusta, es un mini cooper blanco muy bonito, hasta estoy pensando en irme mejor con ella, pero como no sé si es tipo secuestro, mando mi ubicación a Sara y la sigo.