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Azkaban por Liss83

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Habían pasado seis meses desde que Fenrir había llegado a Estambul, su centro de operaciones para su red de prostitución masculina en toda Europa. Movía hombres como se mueve fichas de ajedrez, y tal como en Azkaban cada noche podía escoger con quien pasar la noche, sin embargo desde que lo había visto en aquel escenario siendo ultrajado, había tomado a George para él. El detective estaba desnudo y encadenado a la cama, siempre dispuesto a complacerlo. Más de una vez lo había llamado Fred durante sus innumerables noches de pasión. No permitía que el pelirrojo hiciera absolutamente nada, excepto complacerlo en la cama. Lo único bueno, por decirlo de alguna manera, era que no lo obligaban a estar con otros hombres ni lo subían a la tarima. Solo debía estar sentado en las piernas de su Alfa y dejar que él lo acariciase durante sus largas reuniones de negocios, tal como se acaricia a un perro o a un gato

Sin embargo cierto día, Fenrir salió de  viaje y él quedo encadenado en la cama, le llevaban comida, podía disfrutar plenamente de la habitación de su amo, solo fueron tres días pero a él le supieron a gloria. La soledad lo hizo descansar lo suficiente para recobrar las fuerzas y pensar en un plan para escapar de ese infierno, o eso era lo que él creía

 

 

 

La puerta se abrió y uno de los guardias entró cargando a alguien dormido. Lo deposito en un sofá cercano al balcón y salió del lugar. George solo podía ver la espalda del chico. Una nueva ofrenda al gran Alfa. No era la primera vez que le llevaban hombres para que Fenrir los desvirgara y al día siguiente estuvieran a disposición del público

 

 

 

-          Listo para divertirnos, mi princesa – dijo Fenrir entrando a la habitación –. Esta noche será especial para todos – George se acomodó en una esquina dispuesto a dejar escapar su mente mientras su Alfa violaba a gusto a su nuevo juguete – nada de eso cachorrita – dijo poniéndolo de pie – esta noche tú serás la protagonista – y le cubrió los ojos completamente con una venda para después desvestirlo – ¡Por Dios! ¡Eres tan hermoso! – y lo beso lentamente mientras le rodeaba la cintura – Te prometo que después de hoy nada será igual en tu mundo – sus manos bajaron hasta sus glúteos y un dedo se deslizo entre sus glúteos hacia su interior – sabes lo que debes hacer – le susurró al oído mordiéndole el lóbulo de la oreja y un jadeo salió de los labios de George – Eso es cachorrita. Muéstrale a tu Alfa lo feliz que te hace estar entre sus brazos. Vamos – dijo levantándolo en brazos – Hora de subir al cielo

 

 

 

Lo llevo hasta la cama y lo acomodo par que quedase apoyado sobre las palma de sus manos y rodillas. George temblaba ligeramente, no quería que ese hombre sintiera su miedo, ya lo habían castigado por ello. Una vez un cliente se había quejado de que mucho temblaba durante el acto, y hasta ese día sentía aun sentía la paliza que le habían cuando cerraba los ojos

 

 

 

-          Inclínate y abre la boca – fue la orden directa que obedeció sin dudar – buena niña – sintió como su boca era ocupa por algo grueso mientras separaban sus rodillas un poco más – ya sabes que hacer preciosa – y George comenzó a lamer y succionar – pase lo que pase no te detengas o te castigare donde más te duele

 

 

 

Y George pensó que eso era imposible. Lo que más amaba estaba a miles de kilómetros de ese lugar.

Se concentró el chupar, lamer y escuchar los gemidos del otro hombre. Era obvio que no era su amo, había aprendido a reconocer sus gemidos de los de otros clientes

 

 

 

-          Muy buena niña – dijo Fenrir mientras empezaba a besarle el trasero – si vieras lo hermosa que te ves así

 

 

 

George sintió como su cintura era rodeada, al parecer por un par de piernas, y tirados un poco hacia abajo. La punta de su órgano viril entro en algo angosto, se sentía apretado, después de mucho tiempo ejercía la función de hombre en un acto sexual. ¿Acaso él estaba…? No. Era imposible. A su amo le encantaba dominar. Jamás se rebajaría así

 

 

 

-          Eso  cachorrita – le dijo la voz de su amo, pero se escuchaba detrás suyo – ahora voy yo – y sintió como sus glúteos eran abiertas – relájate y sigue el ritmo que yo te marque

 

 

 

Mordida bajaron por su cuello y espalda. Un brazo se añadió a las piernas que rodeaban su cintura atrayéndolo en direcciones opuestas. Él estaba en medio de un trio. Quería parar, pero simplemente no podía. Sus testículos empezaron a ser estimulados. Se sentía tan bien, que no pudo esperar la orden y se vino dentro de la persona con un grito triunfal mientras su Alfa bañaba sus propias entrañas.

Su cabeza fue inclinada y unos labios hambrientos asaltaron su boca, por lo que él respondió sin titubear. Eran suaves y dulces, igual que un durazno maduro. No soporto la tentación y los mordió, arrancándole un nuevo gemido a su dueño y ganando otra embestida de su amo.

Estaba preso en medio de esa enredadera de brazos y piernas. No sentía placer, pero debía fingir que sí. Ya era un experto en ese tema. La venda cayo de sus ojos junto con su alma y la poca dignidad que le quedaba. Bajo su cuerpo, desnudo y contorsionado de placer estaba la última persona que esperaba ver.

 

 

 

-          ¡Fred! – dijo George deteniéndose por la impresión – ¡no! ¡No puede ser! ¡Tú no!

-          Shhh – le susurro Fenrir al oído se hundía mas en él – solo disfruta. Desde hoy serás tratado como la princesa que eres

 

 

 

Sus labios fueron capturados nuevamente por los de su gemelo, mientras Fenrir mordía su cuello. Sabía que no debía, pero sería tan fácil dejarse llevar

 

 

 

-          Hazlo – dijo Fred sonriendo – hazlo. Deja de pensar y disfrútame por primera de millones de veces que lo harás

-          ¡Fred! – grito George mientras sus entrañas eran bañadas

 

 

 

 

 

George miraba la luna mientras sus lágrimas caían, mientras su hermano dormía abrazado a Fenrir como si de eso dependiese su vida. Sabía de sobra que no podía huir así que ni siquiera lo intento. Había sido secuestrado, dado por muerto, prostituido y ahora lo habían convertido en esclavo sexual de su hermano y su… amo. Era enfermiza la manera en la que Fred se sometía a ese monstruo. ¿Cómo podía aceptar  esa situación de manera tan cómoda?

 

 

 

 

-          Porque al final del día – dijo Fred rodeando su cintura – tú eres mi recompensa – y le mordió suavemente el cuello

-          Somos hermanos, Fred – sollozo George –. Esto está mal

-          No pensabas eso mientras me deseabas todos estos años – dijo Fred y su mano bajo por el vientre de su hermano

-          ¡Fred… – jadeo cerrando los ojos y echando la cabeza para atrás –, no es correcto! – pero este lo hizo girar

-          Pero que bien se siente – dijo su gemelo inclinándose para besarlo apasionadamente

-          Tenemos que salir de aquí – jadeo George

-          George –  su hermano dijo sonriendo – ¿en  verdad quieres irte? Aquí no tenemos el peso de ser hermanos. Aquí solo somos  dos hombres que se han deseado desde niños

-          Fred – gimió el pelirrojo

-          Concéntrate en tener feliz a Fenrir y seremos dioses – dijo este – con libertad plena para amarnos como siempre hemos querido

-          No sabes lo que es vivir aquí – dijo George

-          Y tú no sabes sacarle a este cuerpo esculpido por los dioses – dijo Fred agarrándole los glúteos –, pero yo te enseñare. Confía en mí. Desde hoy nuestras vidas cambiaran para siempre

-          Ahí están traviesas – dijo Fenrir sentado en la cama –. Vengan aquí  par de malcriadas – y Fred lanzo una carcajada

-          Tengo una idea mucho mejor – dijo Fred – ¿mi amo sabía que George es un gran actor?

-          ¿Lo dices por los show que montaba? – dijo Fenrir

-          No – dijo Fred sonriendo –, déjeme y le muestro – y miro a su gemelo – ¿cierto bebe?

 

 

 

George lo miro y sonrió con malicia. Fred tenía razón. No tenía a donde volver, y menos si su gemelo elegía esa vida. Él era un esclavo sexual en Dios sabía dónde. Pero su amo no era el hombre que lo había secuestrado, su verdadera prisión eran los más bajos instintos que Fred provocaba en él, y viceversa

 

 

 


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