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Lunas de enero por Silence Tsepesh de Lenfet

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El piso esta frio, me ayuda a despertar más rápido. Rowan sigue durmiendo en la cama, me da envidia verle dormir tan cómodamente pero al menos hoy si logre levarme de la cama antes de que alguien más tuviera que despertarme.  Por gracia divina no he tenido que atender emergencias en la noche y los animales que quedan en supervisión no requieren vigilancia constante. Rowan llego por la madrugada, muy tarde. Hemos estado en una rutina un tanto extraña desde que pasamos de tontear a tener algo con la etiqueta de novios.


— Buenos días, Eddie.


— Gabriela.


— Fabien estaba estacionando, llega temprano.


— Will salió, de seguro va a quejarse de que se quedó solo en casa. Me sorprende que no me pidiera quedarse.


— yo no me quejo por eso. Además, no es como que ahora pudiera pedírtelo— le miro, extrañado— no te daré esto— levanta una caja con tres vasos de café con el logo de una de las pocas cafeterías que nos gustan. Gabriela no pierde el tiempo y le quita uno. Apenas estamos terminando el café cuando comenzamos con el trabajo. Es bastante relajante seguir una rutina normal después de lo anormal que se volvió mi vida. No solo fue ser secuestrado y luego ser casi comido por Rita, después de eso todo ha sido estar involucrado a más no poder, como una extraña ley de la atracción. Desde que regrese de la casa de mis padres, todos ellos vienen aquí a pasar un rato. Ayer fui a comer con Kevin, Beau sigue viniendo como si nada. Jane viene y se queda un rato hablando conmigo y con Gabriela, Rita sigue invitándome junto con Baruch a salidas espontaneas a bares o centros nocturnos que terminan con los dos casi ebrios. Liam viene sin decir nada y se queda haciendo sus trabajos escolares en las sillas de la sala de espera. Lon viene a ayudar diario, aunque no haya nada que hacer. Murray vino una vez y estuvo curioseando por la clínica. Tarik viene todos los días en la tarde para hablarme sobre su día y lo emocionado que esta por tener una manada. Mi veterinaria se ha convertido en un desfile o algo así.  Todos son muy aficionados del contacto físico, así que los abrazos o las palmadas no faltan.


— Necesito las suturas.


— aquí— Fabien me las pasa— ¿no dijiste que hoy llegan las cosas para Jimmy?


— las traerán por paquetería— encontré una oferta para el terrario de Jimmy, no puedo tenerlo en una jaula todo el tiempo. Necesita un mejor ambiente. Terminamos la operación, mientras Fabien acomoda al gato en una jaula cómoda, yo comienzo a limpiar.


— ¿Cómo esta Rowan?  


— durmiendo. Es tarde, debería bajar pronto— murmuro.


— ya veo. Me alegro de que estés feliz. Estas más animado desde que se mudó— le miro, arrojando los guantes a la basura.


— no se ha mudado.


—… ¿no? oh… es que bueno…se queda aquí y pensé que ya…. Como sea— me quedo mirando a la nada, pensando en cuantos días Rowan se ha quedado aquí, como siempre llega para comer, o cenar, en sus cosas que poco a poco se han ido acomodando en mi casa— ¿Eddie? Espera ¿A dónde vas?


— dame un momento— subo las escaleras de dos en dos, la puerta está abierta pero empujo con fuerza la puerta de mi habitación, donde Rowan sigue en la cama— ¿Cómo es que te has mudado a mi casa sin preguntarme?— escucho un sonido como de risa contenida desde las escaleras— ¿lo has hecho?


— gracias por notarlo. Llevo viviendo aquí dos semanas— abro la boca, incrédulo ¿ha pasado tanto? ¿Y cómo demonios no lo note?  


— Rowan tienes tu propia casa.


— así es— él se da la vuelta para mirarme— pero no tienes idea de cómo es vivir con todos.


— pero…


— y no parecía molestarte. No mencionaste nada, estaba seguro de que estabas de acuerdo. Jamás pensé que no lo habías notado— sonríe, está burlándose de mí y la cara me arde de vergüenza— si lo pides me iré.


— básicamente solo estamos durmiendo aquí— murmuro— yo tengo mi trabajo y tú el tuyo, no es…  yo solo me sorprendí por eso— ni siquiera es lo que quiero decir. Y es vergonzoso notar que alguien está viviendo conmigo después de dos semanas— en mi defensa también vas con los demás y no te quedas aquí todo el día cuando regresas del trabajo y que te quedes a dormir aquí no es problema para mí, por eso no lo note— por eso y por el sexo.   


— entiendo. Ven aquí— me acerco a la cama, me abraza y pone su cabeza en mi abdomen— hueles a sangre.


— estuve en una cirugía. Tengo que regresar, deje comida para ti en la estufa.


— gracias— ignoro la burla de su sonrisa. No me sorprende que pasara esto, me sorprende la rápida resignación que siento ¿producto de las cosas sobrenaturales? No me molesta que Rowan esté aquí. Tal vez me sentía un poco solitario sin darme cuenta y tener la presencia de alguien más aquí es agradable. Que me hubiera gustado una consulta primero, sí. Que igualmente hubiéramos terminado viviendo juntos, sí.


— ¿todo bien?— Fabien intenta lucir serio, pero es evidente que escucho lo que dije.    


— sí. Tenía que aclarar algunas cosas.


— necesitas sacar la cabeza de tu trabajo— me da unas palmaditas en la cabeza— y Rowan de algún modo logra hacer que lo hagas— me pregunto qué diría si le contara que de hecho, es como atender a un montón de cachorros que requieren atención las veinticuatro horas del día los siete días de la semana y que es como seguir en mi trabajo— bueno, no solo Rowan. Este lugar es más animado cuando viene la familia de Rowan.


— hoy quede de comer con Kalila ¿vienes? Siempre me hace sentir que no como suficiente.


— ¿se turnan para invitarte a comer?— ¿lo hacen? No tengo idea. Fabien se ríe al ver mi expresión— deberías ver tu cara.


— es que no lo sé, no lo había notado— pero no me sorprendería que lo hicieran. Debo preguntarles— se comportan raro desde que salgo con Rowan— sé porque lo hacen pero Fabien no y es mejor fingir que también me parece raro que de pronto se la pasen aquí— no es algo malo pero es raro.


— son muy cercanos. Y les gustas ¿podría ser su manera de aceptarte?— ah, mi Fabien no está nada equivocado. Me encojo de hombros— ¿Cómo podrías no gustarle a alguien?— me abraza de pronto, apretándome con fuerza y sacudiéndome. Me toma por sorpresa así que me siento como un trapo agitando por todos lados. Le escucho reír mientas intento librarme. Luego veo los zapatos de Rowan. Me quedo inmóvil, recordando lo que paso con Tarik. Levanto la cabeza lo suficiente para verle, y al mismo tiempo Fabien me suelta— Buenos días, Rowan.  


— Fabien—está sonriendo. Y no tiene nada de amenazante. 


— Will organiza una comida el fin de semana ¿Por qué no vienes con Eddie?— me enderezo, mirando incrédulo a Fabien ¿Por qué hace eso? su casa es mi refugio seguro. Rowan parece interesado y emocionado.


— ¿Qué día? tengo trabajo pero podría intentar cambiar mi día libre— y Fabien sonríe. Creo que este es su modo de decirme que él también acepta a Rowan.   


 


Beau y Lon están aquí cuando llega mi pedido. Beau casi salta sobre el repartidor, lleva días esperando el pedido más que yo y tuve girarme para no reírme de la analogía del cartero y el perro.


— es grande, muy grande.


— creo que Jimmy crecerá un poco más, y no podría tenerla en algo tan pequeño como una pecera.


— ¿puedo abrirlo, puedo?


— claro.


— deja te ayudo— increíble, Lon finge no estar emocionado pero es obvio que lo está. No finge muy bien que también quiere armar el terrario— ¿Dónde lo vas a poner?


— aquí, supongo… arriba no tengo espacio para ponerlo. Moveré esas sillas, y ese archivador ya no lo utilizo— tardamos un rato moviendo cosas, dejo que ellos se encarguen de sacar las cosas y comenzar a armar.


— Baruch quiere que nos reunamos de nuevo. En el bosque.


— ¿Baruch?


— es que Rowan no estaba— sonríe, a nadie en realidad pero me hace sentir avergonzado. El hábitat de las boas es cálido, necesitan poco alimento y crecen durante toda su vida…— ¿Eddie?


— Jimmy necesitara un foco especial en invierno— si pienso en cosas diferentes tal vez no se note que sé porque Rowan no está en su casa.  Vale, sé que a estas alturas todos lo saben pero prefiero ignorar eso— ¿Qué decías sobre Baruch?


— que quiere que vayamos de nuevo al bosque. No a cazar. Los nuevos, creo que están… mejorando. Rita tardo mucho, pero Murray y Bradley… y Jennifer ha dejado de temer. Es extraordinario ¿sabes?


— no, no lo sé— Beau no dice nada, Lon alza la mirada: Gabriela está agendando citas para nosotros, y Fabien está en su consultorio.


— Los lobos recién convertidos son… peligrosos e inestables. Suelen perderse en su estado salvaje— contengo un escalofrió al recordar a Rita persiguiéndome en la calle, de no ser porque Beau…— exacto. Es muy raro que sobrevivan o se integren en una manada. Y aquí hay cuatro.


— Baruch está preocupado por eso también— añade Beau— Rowan no le da importancia a eso, solo a que no se salgan de control.


— sería un interesante estudio— saber sobre las variaciones, lo que hace que unos pierdan por completo el control y otros no— pero eso es algo bueno, cuando se encuentra un método para recuperar la población de una especie amenazada se tiene que…—parpadeo y sacudo la cabeza. Beau está sonriendo, Lon suelta una carcajada— lo siento, a veces olvido que no solo son lobos.


— lo sabemos. Aún no sabemos que pasara, no hemos hablado mucho. Podría ser algo bueno si funciona con otros o podrían no creernos— me sigue pareciendo incongruente que digan ser tan libres y a la vez sigan tantas reglas hechas por quien sabe quién, quien sabe cuándo.


— y… ¿Por qué tienen que seguir eso?— pregunto, la puerta se abre y un chico entra, con un enorme gran danés. Cuando termino su consulta, Tarik ha llegado y también está ayudando con el terrario, ya casi terminado. Ninguno está muy entusiasmado con acercarse a la serpiente ¿Cuál es su problema con ella? es inofensiva. Son hombres lobo, por favor, son muchísimo más peligrosos que una boa.


— ¿Cómo conectamos la luz?


— el foco está en mi escritorio— regreso a mi consultorio.  Tarik es quien finalmente pone el foco y yo voy por Jimmy. Ninguno entendió que la llame Jimmy por el guitarrista. Todo parece bien, el terrario alejado del piso para que los niños no molesten, parece funcionar bien también. A Jimmy parece gustarle, o al menos, parece que esta relajada— chicos, pueden adelantarse, tengo algunos asuntos con Fabien— es mentira, y no me avergüenza mentir para no tener que salir al bosque esta noche.  Ahora entiendo perfectamente porque Rowan siempre viene aquí… o venia, antes de mudarse. Sé que cualquier cosa importante me lo dirán, porque lo único que veré será como fingen pelear.  


— sí, tardaremos un poco— Podría llorarle de rodillas a Fabien solo por eso. Esta atardeciendo, pronto cerraremos. Si alguno de ellos nota la mentira, que espero que no lo hicieran, no dicen nada y se van. Parecen entusiasmados por cómo van las cosas, el entusiasmo de que no apareciera ningún lobo, que los nuevos se estén integrando bien con la manada… en fin, ese entusiasmo aún no se va pero yo sigo siendo un humano que quiere dormir y no puede seguir su ritmo.


— Fabien, invítame a cenar, a tu casa o a donde sea.


— hecho ¿Gabriela, vienes?


— tengo planes, la próxima vez que Eddie quiera huir los acompaño— solo nos quedamos un rato más antes de cerrar e irnos. Pasamos a comprar algo para comer y luego vamos a la casa de Fabien.


— entonces, no me has dicho porque estas escondiéndote ahora.


— no sé porque asumes que cada que vengo a tu casa es porque me estoy escondiendo… pero necesito un descanso de sus salidas. Son muy intensas y siempre se las arreglan para que yo acepte.


— solo tienes que decir no, siempre te cuesta decir que no— posiblemente si dijera que no me ahorraría muchos problemas. Envió un mensaje a Rowan diciéndole que mi asunto con Fabien se alargó y que no podré llegar hoy.


— Aunque sea con una mentira estoy negándome a ir. Además, pasar tiempo contigo es importante y cualquiera que me conozca lo sabe.


— También te quiero. Haría cualquier cosa por ti porque eres mi alma gemela— me rio, dándole una patada bajo la mesa.


— creí que ese era Will, si te escucha decir eso…


— ah, es que tú eres mi alma gemela pero él es el amor de mi vida— inclina su vaso a mí en un brindis que solo nos hace reír más. Son casi las once cuando decido irme, Will llego hace un rato y hemos estado bebiendo y hablando sobre la comida del fin de semana. Los dos me acompañan fuera cuando llega el taxi que pedí. Me siento demasiado relajado como para preocuparme por algo más ahora mismo.


La clínica esta oscura cuando llego, no he recibido llamadas de emergencia. La luz del terrario de Jimmy me recibe cuando abro la puerta. Es un gran terrario.


— Hola ¿has estado bien?— Jimmy mueve la cabeza, deslizándose un poco para enrollarse en una rama. Esta más activa desde que llego aquí lo que es una buena señal solo espero que no crezca mucho o tendré un problema con el espacio. Apago la luz y solo me aseguro de que el aparato de la temperatura este funcionado antes de subir y dormir ya que no hay ninguna revisión. Subo despacio, intentando ver con la poca luz de la pantalla de mi teléfono. Todo esta tan oscuro…


— así que, asuntos con Fabien— doy una violenta sacudida debido a la sorpresa que intento disimular cerrando la puerta.


— maldita sea, Rowan, enciende la luz como una persona normal— tanteo en la pared para encender la luz— casi salto de regreso por las escaleras— Rowan no dice nada ¿está molesto porque no fui con ellos? con todo olvide que Rowan está viviendo aquí ahora, esperaba no verlo hasta mañana.


— ¿Qué clase de asuntos incluyen alcohol?


— quería pasar un rato con Fabien. Luego llego Will— me encojo de hombros— no se me ocurrió que decirles para escaparme un rato— se ríe, su brazo me hace una seña para que me acerque, cosa que hago— lamento haberte juzgado cuando escapabas.


— puedes hablar con ellos. Solo diles que necesitas pasar tiempo con tus amigos humanos y lo entenderán.


— no vendrían tanto a mi si alguien tuviera su puesto de líder mejor cuidado ¿sabes?— otra risa que es como un ladrido, apoya la cabeza en mi hombro. Suspiro— ¿hablaron de algo importante? ahora me siento un poco culpable por no asistir— es como saber que eres responsable de algo y lo dejaste de lado. La mano de Rowan busca la mía.


— nada que no sepas ya. Descuida.


— quiero dormir.


— yo no sé si puedo dormir con ese monstruo abajo— ¿monstruo? ¿Hay otro hombre lobo? ¿Uno que se ha perdido y no puede ser humano? ¿Otra cosa…? Espera— Jimmy no es un monstruo ¡EY!— Rowan me levanta con mucha facilidad, me aferro a su cuello hasta que siento que no va a dejarme caer— hare que te disculpes con Jimmy, no te ha hecho ningún daño.


— dudo que quiera mis disculpas— cierro los ojos, me siento demasiado bien para preocuparme. Rowan camina y como no bajamos escaleras deduzco que me lleva a la habitación. Siento que se inclina y toco el colchón, suelto mis brazos y no abro los ojos. Me quita lo zapatos, también siento que se acuesta a mi lado, el calor de la cobija…


Hay luz en la ventana cuando abro los ojos. Me siento demasiado relajado y descansado, Rowan duerme todavía. Me levanto haciendo el menor ruido posible más por costumbre ¿tiene caso intentar ser silencioso si igualmente él me escucha?  No lo creo.  Como sea, Rowan no se levanta hasta que comienzo a hacer el desayuno.


— iba a despertarte en un rato, trabajas al medio día hoy ¿no?— si no le han cambiado los horarios.


— sí… ¿la invitación de tu amigo aún está vigente? Necesito comprobar los horarios y saber si le pediré a alguien un par de horas.


— Will habla en serio, está entusiasmado por conocerte— no entiendo ese entusiasmo.— Fabien debería hablar menos de nosotros.


— me agrado,  la noche que vino a hacer de chaperón.


— Rowan, la casa de ellos es mi refugio seguro, a donde… puedo ir cuando todo es demasiado. No estoy intentando convencerte de no ir pero espero que lo entiendas. También estoy nervioso porque creo que esa comida es como formalizar— Rowan hace un ruidito ahogado— ¿Qué?


— ¿estás diciéndome que mi propuesta no fue tomada en serio?— ¿Cómo que no…? oh… siento que la cara me arde, con la boca abierta, no sé qué decir.


— no…— la risa se me escapa— lo siento, no quise decirlo así— Rowan me sonríe— ¡Sonó fatal!— apenas puedo seguir sus movimientos cuando se acerca a mí— espera, lo siento, lo siento…— me abraza, estrujándome.


— cruel humano.


— ¡Bájame! Rowan, no, no— chillo, sin importarme la vergüenza. Es ridícula la forma en que puede cargarme sin esfuerzo.


— estoy pensando que hablaban en serio sobre que tenía que llevarte a disneyland para que me tomes en serio— no me suelta cuando se tira al sofá, vuelvo a chillar cuando caemos— puedo organizar uno de esos musicales con baile, casi en todas las películas lo hacen, cantan y bailan. Obligare a los demás a hacer una coreografía, no podrán decir que no— la imagen de eso me hace llorar de la risa. Me quedo un buen rato retorciéndome en carcajadas en el sofá mientras Rowan me sigue abrazando— hablo en serio.


— no lo hagas, estoy llorando de la risa solo de pensarlo— inhalo— mis costillas…— también me duelen las mejillas— no abuses de tu poder por cosas como esas.


— es algo importante— su mano comienza acariciarme el cabello, se siente tan relajante que no me muevo.


— algunos tendrán muchas objeciones a eso, mejor no lo hagas. No necesito una coreografía en medio de la calle cuando vaya de compras para saber que…— no sigas.


— ¿para saber qué?— aprieto los labios— Eddie…— su mano se desliza bajo mi camisa. Su toque es helado, suave… hasta que llega a mis costillas y hace que me retuerza de nuevo.


— ¡Eso es bajo!— hablo entre risas— para, para… lo diré— las cosquillas se detienen pero la mano de Rowan sigue allí— sé lo que sientes por mí, no necesito ningún baile o canciones porque ya lo sé. Aunque ya sabes, si es una canción de rock no me opondría.


— ¿rock? Eso no es romántico— resoplo, divertido ¿en qué mundo vive este hombre? Necesita aprender mucho todavía. Estiro mi mano para acariciarle la mejilla, un gesto más de lástima que románico.


— te sorprenderías, Rowan— me incorporo un poco y le beso.


— ¡Eddie, buenos días!— el habitual saludo de Gabriela me hace saltar de sorpresa. Miro el reloj, ni siquiera he hecho el desayuno. Me levanto, mirando a rededor sin saber que hacer. Rowan se ríe.


— Ve, preparare algo para comer y te lo llevare cuando esté listo— su mano me sujeta antes de que baje las escaleras— Sobre lo de la casa de tu amigo, lo entiendo. No te molestare cuando vayas allí, y si alguno de los demás se entera le diré lo mismo así que no tienes que preocuparte— le sonrió. Ahora siento que a pesar de estar saliendo me he comportado un poco indiferente con él. 


— Gracias— escucho la voz de Fabien quejándose de algo abajo, me giro y bajo las escaleras.


 


La casa de Fabien y Will no tiene un patio pero cuando abren la puerta del balcón, el lugar da la impresión de ser más amplio. Llegamos más temprano de lo que tenía pensado porque Rowan no paro de insistir y apresurarme, incluso hizo que nos detuviéramos para comprar un pastel. La sensación de que estoy presentando a Rowan a mis padres sigue… no, no creo que sea tan terrible con mis padres. Creo que a ellos les agradaría mucho Rowan. 


—  ¿en qué piensas?— Una botella de cerveza aparece frente a mí, y Fabien se sienta, estirando los brazos— estas muy serio.


— nada en particular. Es un poco raro estar en tu casa con Rowan.


—  ya no hay vuelta atrás ¿eh?


— lo hiciste apropósito, invitarlo— ni siquiera lo pregunto.


— a veces es lo que necesitas, un empujón para dar el siguiente paso o nunca lo harás.


— a veces me gustaría que mis amigos no fueran tan entrometidos con lo que hago— Fabien se ríe, no escucho la puerta pero Gabriela aparece de la mano de un chico que he visto unas pocas veces en la clínica, ella lo presenta como Kai, su novio.


Esta atardeciendo cuando salgo al balcón, después de comer y reír, necesito un poco de aire. En algún momento ha dejado de ser raro y resulta agradable: de algún modo todos aquí tenemos química. Siento la presencia de alguien a mi lado, ahora podría reconocer a Rowan donde sea. Se para a mi lado, muy cerca.


— ¿estas cansando? trabajaste mucho.


— estoy bien. Pensaba en que parece que nos estamos llevando muy bien aquí todos— le escucho reír, y no puedo evitar reclinarme en él.


— me agradan. Entiendo porque vienes aquí, aunque lo imaginaba porque Fabien es así siempre y me siento más tranquilo de saber que estarás aquí cuando huyas— resoplo, e intento darle un codazo que evita abrazándome y pegándome tanto a él que no puedo moverme— es lo que necesitaba.


— ¿Qué?


— quiero vivir tranquilamente, tener amigos,  no preocuparme por mis asuntos. No quiero ponerte en peligro. Iré a reunirme con Leyre, le diré todo lo que sabemos… y tal vez le diga sobre ti ¿estás de acuerdo? Eso podría ser un poco peligroso, pero no quiero que haya más malentendidos.


— lo entiendo. Si es lo que quieres, entonces estoy de acuerdo— también me gustaría algo de calma y no tener que estar preocupado cada que se acerca la luna llena.


— si no son culpables, les pediré ayuda.


— vaya, te estas comportando tan responsable ahora— Rowan se ríe y me gano otro estrujón que me deja sin aire.


— ustedes, dejen de ponerse románticos en un lugar que no es su casa— nos reímos, Rowan me besa la cabeza y me toma de la mano para entrar. estoy un poco preocupado por lo que dijo, pero a la vez estoy emocionado de que todo vaya a terminar.


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