¿El destino?[MM1]
Jueves, 7 de diciembre 2017
Dicen que el mundo es incierto, pero esto, esto es demasiado.
Comenzaba a olvidar el encuentro que había tenido con su exnovio, volvía a tener la emoción del primer día por su boda, extrañaba más que nunca a su adorado marimo, al cual no veía, ni hablaban mucho, no es que se sintiera celoso ni nada, pero envidiaba a Tashigi-san la compañera y amiga del musgo por pasar más tiempo con él, maldición que el sería el esposo y ni aun así tenían tiempo juntos, extrañaba sus tardes libres de ocio acurrucados juntos.
Pero volviendo al punto ese día el rubio salió feliz de la sastrería, había encontrado el atuendo perfecto que resaltaba su bien trabajado cuerpo y que sabía volvería loco a más de uno, principalmente a uno que tenía un curioso cabello verde.
Siempre volvía a pensar en su alga, se avergonzaba de lo enamorado que sabía estaba, se tapó el rostro al reconocer su enamoramiento, llevaba años con él y aun sentía que vivía en un cuento de hada, pero como en todo cuento siempre hay un momento o hay un alguien que te hace dudar.
Tan ensimismado estaba en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando tropezó con alguien.
-Oye idiota ten cuidado- Dijo colérico.
-Fue tu cul… Sanji que casualidad- Escucho decir lo cual le sorprendió.
- ¡Law! No pensé encontrarte- Y lo decía de corazón, no pensó volver a encontrárselo.
-Debe ser el destino- Pensó y susurro, le encantaba esos encuentros inesperados con el rubio.
Sanji escucho perfectamente lo que había dicho su acompañante, pero decidió ignorar el comentario.
-Es una casualidad ¿Qué haces por aquí? No me digas que vives cerca.
-Más o menos, en estos momentos estoy viviendo con Penguin que vive por aquí.
- ¿Y cómo esta él? - Pregunto con genuino interés.
-Muy bien, a decir verdad, el único inconveniente es su pareja, me siento un intruso al robarles su tiempo a solas.
-No creo que el piense lo mismo. Pero.... ¿Y tu casa?
-Tuve unos problemas y no creo poder volver- Recordó con tristeza a su ahora ¿ex?
-Oh entiendo- Tenia curiosidad por saber que podría haber pasado para que decidiera dejar su hogar, pero decidió no ahondar en el tema.
-En estos momentos iba a comer algo ¿Quisieras acompañarme y platicar un momento?
-Yo... eh... Está bien- Solo sería una simple platica nada podría salir mal de ello pensaba para intentar convencerse de que no estaba haciendo nada malo.
-Excelente, conozco un excelente restaurante, aunque supongo no se comparara con el tuyo- Le guiño para luego comenzar a caminar.
El comentario no debió afectarle como lo hizo, pero no podía evitarlo. Se sentía increíble que halagaran su trabajo y el restaurante que tanto le costó, por lo que tampoco pudo evitar el pequeño sonrojo que invadió su rostro.
-Nada se compara con All blue- Dijo con tono orgulloso.
-Sé que no- Observo con deleite las reacciones de Sanji, sentía que seguía siendo el mismo Sanji de siempre.
El día transcurrió entre plática y bromas, se sentían tan cómodos pasando el tiempo juntos que se olvidaban de todo lo demás.
- ¿Entonces nos vemos otro día? - Pregunto Trafalgar al momento de despedirse del cocinero.
-Si…- Contesto no muy seguro, no entendía porque se sentía como que estuviera cometiendo una locura cuando no estaba haciendo nada malo, es verdad que Law era su ex pero ya eran adultos, nada malo pasaría- Te anoto mi número para que estemos en contacto, fue bueno volver a verte Law.
-Lo mismo digo Sanji- Le sonrió.
Luego de intercambiar números cada uno tomo su camino.
Y era verdad, el prestigioso dueño de un aclamado restaurante no estaba haciendo nada malo, el simplemente se estaba comportando cordial con su ex, y tal vez quisiera entablar una amistad. Lo malo radicaba en que el contrario no pensaba en una amistad y de cierta manera estaba influyendo al rubio en seguir sus planes.
Al llegar al hogar de su amigo Penguin, Trafalgar se encontró con la pareja de este.
-Buenas tardes Killer-ya- Killer, el mejor amigo de su aun no oficial exesposo le miro para luego sonreírle.
-Oh Trafalgar estás de vuelta, Penguin me dijo que te entregara estos documentos de uno de sus pacientes. Bueno yo me retiro, quedas en tu casa- Se despidió cordial, ellos se agradaban más nunca tuvieron una conversación muy profunda o de muchas palabras.
-Gracias-
Y el que lo tratara tan cordial era lo que lo incomodaba, estaba seguro de que el rubio creía que en cualquier momento volvería con Kid, parecía que aún no sabía el porqué de su separación, como podría darle la cara cuando este se enterara de la verdad, cuando supiera como había lastimado a su mejor amigo, a su hermano.
Kid y Killer no tenían más familia que ellos, se conocieron en la calle, ambos se dieron apoyo y cobijo, ambos lucharon desde muy jóvenes para poder tener un poco de lo que tenían hoy. Y ambos trabajaban juntos como mecánicos, por lo cual no comprendía como era posible que Killer no lo haya echado de su hogar (y de Penguin) todavía.
Casa de Sanji
Sanji por el contrario se sentía contrariado, se sentía feliz y ansioso.
Amaba a Zoro de eso estaba seguro, pero el conversar con Law de aquella manera hacía que muy en el fondo comenzara a dudar de la veracidad de sus sentimientos. Pero apartaba esa pequeña loca idea y se auto convencía que solo eran ideas suyas, que en realidad lo que estaba sintiendo era camaradería por el azabache.
-No pienses tonterías Sanji, tú te casaras pronto y no puedes estar…
- ¿Estar que cejillas? Estas pensando en dejar a tu amado en el altar- Le tomo por la cintura. Tomando desprevenido al rubio.
-No seas tonto- Le dio un casto beso en los labios- Solo estoy un poco nervioso.
-No tienes por qué estar nervioso- Apoyo su cabeza en su hombro- ¿O es que ahora me temes? No tienes por qué temerme, no muerdo- Le beso el cuello- A menos que tú quieras- Hizo la simulación de una pequeña mordida en el mismo punto que con anterioridad había besado sacándole un suspiro a su pareja.
-Como… podría… temerle ah… un alga como tú- Le encantaban las atenciones que tenía el contrario para con su cuello.
-Muy bien cocinero tú te lo buscaste- Le levanto de las piernas para arrastrarlo hacia la cama del rubio. No vivían juntos, pero era como si lo hicieran, Zoro tenía una llave que Sanji le había regalado para que cada que quisieran poder dormir juntos, que era casi todo el tiempo y de igual manera el rubio tenía una del departamento de Roronoa, pero este insistía que la casa de Sanji era mejor. Nunca admitiría que era porque esta poseía impregnada la calidez y aroma de Sanji- Me encantas- Le susurro al rubio una vez ambos estaban sobre la cama, con el abogado encima de Sanji.
-Y tú a mí- Le beso con pasión.
Esa noche ambos se entregaron como hacía mucho no lo hacían, donde dejaron todo atrás y se centraron únicamente en ellos.
Viernes, 15 de diciembre 2017
Aunque Sanji estuviera concentrado en planear su boda y dirigir su cocina había mantenido una continua comunicación con el de cabellos azabaches en la cual según el rubio habían entablado una pequeña amistad; pero para el azabache era otra historia, se sentía más animado que nunca con respecto a su relación con el rubio.
No se habían vuelto a encontrar por los horarios de ambos, pero un día sin querer esperar más tiempo el doctor invito al rubio a almorzar y este para desestresarse acepto sin más.
Decidieron que el lugar de su encuentro seria en un café que estaba en la zona central.
-Me alegra verte de nuevo Sanji-ya
-A mí también me alegra volver a hablar contigo. - Menciono con total sinceridad.
-Y dime ¿Qué tienes planeado para mañana? - Pregunto sintiendo mucho interés, quería que esas salidas fortuitas fueran más frecuentes.
-En realidad no mucho, el trabajo en All Blue a estado un poco más ajetreado de lo normal por lo que no me permite tener la vida social que me gustaría si te puedo ser sincero- Rio ante lo complicada que puede ser la vida de un adulto.
-Te comprendo totalmente igual mi trabajo no me permite tener una vida tan activa socialmente, en algunos momentos lo único que puedes desear es acurrucarte en el sofá junto a una persona que sea especial para ti- Tomo por un momento la mano del rubio, no la habría soltado de no ser por el recuerdo de él junto a Kid disfrutando de sus noches de pizza y de absurdas películas románticas de la cual ambos se burlaban por lo cliché que podían llegar a ser.
Sanji internamente agradeció el gesto de que Law soltara su mano, se sintió terriblemente mal al sentirlo como un gesto muy íntimo para el tipo de amistad que quería forjar con Trafalgar.
-Es un sentimiento muy hermoso- Concordó, de solo pensar en el junto a su futuro esposo un sentimiento de acogedor le llenaba por dentro.
Law miro al rubio hacer esa mirada llena de sentimientos tan cálidos que algo dentro de él quiso verlo por más tiempo. Quiso tener una cámara para retratarlo y poder conservar aquel momento eternamente.
Para cualquier persona externa que los viera pensarían que eran una pareja que estaba hablando de planes a futuro o de algún hermoso recuerdo compartido. Ambos tenían una mirada enamorada, para Zoro que se encontraba en aquel restaurante junto a un socio fue grande su sorpresa al ver a su rubio siendo tomado de la mano por otro hombre que él no conocía. No le habría tomado tanta importancia a ese leve toque si no fuera por aquellas miradas, sentía que algo no estaba bien de todo aquello.