Angry era tímido, aunque su rostro se mostraba enojado, era todo lo contrario, era una sorpresa para quien lo conocía que una persona como el estuviera en ese mundo.
Souya veía como Draken fue aceptado en el grupo de Takemichi, cuando interrumpió el baile, el de ojos azules salio de la fuente, lo acompañaron a cambiarse de ropa, Chifu lo siguió a una distancia prudente el se quedó atrás, llegó a la fuente tomando algunas plumas.
Takemichi fue alimentado por la tarde, los chicos llevaron comida que creyeron le gustaría, desde comida sofisticada hasta comida chatarra.
Kazutora llevo frutas, mientras Draken llevo algunas comidas costosas, Baji optó por llevar comida chatarra.
La cara de Takemichi al probar las papas fritas fue sublime, como agradecimiento por la comida que le gustó demaciado dió un beso pequeño en su mejilla.
Causando que se hiciera una leve competencia por ver quién le daba algo que le encantará, de esa forma recibir el premio.
Angry seguía observando de lejos, quiso acercarse pero el pajarillo al verlo se alejaba, su expresión de enojo causaba miedo.
Acaricio las plumas que robó de la fuente, acariciando con ternura.
Aún temblando Takemichi se acercó al chico de cabello azul con miedo pregunto —¿De dónde la tomaste ?
Souya salto del susto, tartamudeo —Yo, bueno, tu. — como auto reflejo las escondió, sus ojos reflejaron temor de que se las quitará —Dejame tenerlas — rogó
Para Takemichi la nueve azul parecía enojada, el miedo que daba su rostro como si lo fuera a golpear en cualquier momento, pero lo ha estado observando desde hace rato, tanto como para darse cuenta que tenía un par de plumas.
Ladeo la cabeza sus cabellos negros se movieron ligeramente, el rostro frente a el decía palabras calidad mientras mostraba una expresión de enojo.
Takemichi acercó su mano, presionando el ceño que se fruncía —Puedes tenerlas — sonrió
El rojo llegó al Kawata menor, que como auto reflejo cubrió su rostro sonrojado, Takemichi estaba curioso, la persona frente a el, se mostraba de una forma cuando por dentro era otra.
Tocó la cara roja, delineo la mejilla cercas de los ojos, con curiosidad su mano se cerró en la esponja que era su cabello.
Souya miro detrás de Takemichi dónde los chicos lo miraban enojado, el estaba teniendo más atencion de lo que ellos tuvieron.
Takemichi manosea su cabello curioso, primero con una mano, luego con los dos —Es suave — susurra cerca de su rostro el aliento llegó a su boca, Souya relambio sus labios con un adorable sonrojo.
Fue suficiente para Draken quien tomo el brazo del pelinegro los ojos azules le miraron curiosos —Puedes incomodar a Angry — dijo
—Oh lo siento— se disculpo Takemichi
El Kawata miro enojado a Draken, sabiendo lo que había hecho.
—¿No estabas haciendo algo? — Pregunto Kazutora
Souya hizo un puchero que se veía gracioso en un rostro enojado —Nos vemos Take — susurró —Y gracias— Souya aún tenía las plumas ocultas en su mano, la cual llevo a su rostro dando un pequeño beso que hizo temblar y sonrojar al pajarillo.
Todos lo miraron sin saber que era exactamente lo que hizo para dejar al pajarillo así.
Pero alguien que estaba vigilando de lejos si lo sabía y eso lo enfureció, solo el podía causar esa reacción en el pájaro-sirena.
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Smiler curioso vio llegar a su hermano un poco más sereno, una sonrisa se le había colado en la cara cuando miro aquellas plumas azules.
—¿Tienes una mascota?— pregunto Nahoya
Angry nego, ignoro a su hermano, poniéndose a trabajar con las plumas
Las cuales convirtió en unos aretes preciosos.
Smiler quiso tocarlos pero Angry no lo dejo —No se tocan — dijo, eran como un tesoro que solo el podía poseer
Esto dejo intrigado y curiosos al de la sonrisa en su rostro.
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Takemichi fue escoltado a su habitación en la tarde, dejando a Kazutora cuidando a Takemichi, para desgracia de Baji y Draken.
El Hanagaki se paseo por el lugar había logrado recolectar gran parte de sus plumas y ahora estaban en su cama, pero aún faltaban algunas cosas, quería sentirse seguro.
Por lo regular los pájaros-sirena recolectaban las plumas de sus personas más cercas, como padres para la seguridad, amigos para no sentirse solos y pareja para estar en armonía.
Takemichi suspiro, sus padres hace mucho que habían partido, sus amigos estaban lejos y pareja no tenía.
Lo más cercanos a seguridad que tenía era aquellos quienes había encantado con su voz.
Pero si quería dormir, debía darle seguridad a su nido, abrió la puerta donde Kazutora estaba de pie aun lado.
Al ver la abertura pregunto —¿Pasa algo, Takemitchy?
El de cabellos negros observó a su compañero, Kazutora tenia el cabello corto cor algunos mechones rubios, vestía una chaqueta blanca con una camisa negra de bajo, pantalones de mezclilla del mismo color.
Tímido por lo que iba a pedir Takemichi hablo —¿Yo puedo tener tu chaqueta?— pregunto
Kazutora se sorprendió ante la petición, pero se quitó la prenda y la entrego.
A diferencia de los pájaros-sirenas el olor de los humanos era muy tenue, por lo que Takemichi tenía que ver si la prenda servía para su nido.
Tomo la chaqueta entre sus manos, la llevo a su nariz aspirando el aroma que estaba mezclado con otro.
El rostro de Tora se sonrojo ante la acción, pero al ver cómo arrugaba su nariz en forma de desagrado lo hizo sentir triste.
—¿Huele mal?— cuestiono
Takemichi no respondió dió dos pasos acercándose al del tatuaje del tigre, soltó la chaqueta y olisqueo la camisa, la nariz del de ojos azules se dentro en el cuello, el olor al perfume era tenue pero se sentia más el aroma natural debido al sudor.
De puntillas y con las manos en el pecho, Takemichi quería tomar más del olor del Hanemiya.
Kazutora estaba como una gelatina, temblando, sonrojado desde la punta de sus dedos hasta las orejas.
—Takemichi — hablo con voz ronca el Hanagaki ni siquiera era consiente de lo que estaba provocando.
—La camisa — dijo al separarse Takemichi como si nada, dejando a Hora exitado y confundido.
—Quiero tu camisa — repitió haciendo un puchero —¿Puedo tenerla?—pregunto el pajarillo
Oh sí Takemichi le hubiera pedido el cielo, las estrellas y el mundo entero Kazutora se lo hubiera dado.
Sin pensar se sacó la camisa para entregarla a Takemichi quien sonrió complacido al tenerla.
—¿Puedo preguntar para que la quieres?— cuestión Kazutora
—La voy ha usar para poder dormir— respondió eso sonó muy existente para el.
Mikey quien discutía con Draken el porque el no podía estar custodiando al pajarillo vio la escena.
—Quiero custodiar su puerta— exigió Draken con molestia, si el hubiera estado ahí, podría ser el quien tuviera ese acercamineto y no el imbécil de Tora.
—Te pedí que usarás, tapones cuando te acercarse a el — se quejo Mikey
—Quiero escucharlo cantar — sentenció Draken