Si llegar en “cochecito” a la sala y su “sonoro accidente estomacal” lo puso completamente rojo, que Draco lo sacara del carro, lo acostara en la colchoneta con dibujos de Bob Esponja y le cambiara el pañal sin dejar de conversar con su amiga sobre marcas de ropa de bebe como si estuviesen sentados el café Alain Ducasse del hotel “The Dorchester” en lado oeste de Londres lo único que logro es que se le escaparan lágrimas de vergüenza. Pero desgraciadamente eso estaba lejos de detenerse.
Draco estaba a punto de cerrar el pañal cuando su amiga pregunto de manera casual:
- Draco, ¿Roncito no usara plug?
- No sé si buena idea ponérselo aun – contesto el rubio pensativo
- ¿No lo hablaste con tu bombón asesino? – pregunto la chica
- No lo llames así – reprocho Draco – y la verdad es que… no
- Pero les ayudaría bastante ¿o no? – dijo Pansy limpiándole la boca a Luna ¿acaso lo blanco de los labios de la chica era leche materna real?
- Bueno… si – dijo Draco pensativo mirando al pelirrojo que lo miraba aterrado – pero… ¿no es muy pronto?
- ¿para qué esperar? – dijo ella acomodando a una dormida Luna en la alfombra
- Tienes razón – dijo sonriendo mientras se ponía de pie – así estará más que listo para… ya sabes
- Picaron – dijo Pansy con burla – ¿Te mueres por algo de acción, no?
- Cállate tarada – dijo Draco desde algún punto de la habitación en el que Ron no lo alcanza a ver
- Mejor me voy. Quiero… acostar a Lunita
- Déjala dormir – dijo Draco mientras Pansy se ponía de pie y tomando a la otra chica en brazos salía lo más aprisa que podía – si la usas ahora aun la puedes lastimar. ¡Tía Pashy nunta me escuta! – le dijo a Ron haciéndole gestos como si en verdad fuese un bebe – pero la verdad es que si tiene razón, cuando papá llegue querrá que juguemos los tres
- ¿judemos? – pregunto Ron con miedo – ño entendo – pero sin responderle Draco le abrocho el pañal y se levantó para colocarlo en el cochecito
Temblaba de pies a cabeza cuando “su mamá” abrió la puerta de su recamara y entraron. Con delicadeza lo saco del cochecito y lo coloco en mitad de la cama. “¡Maldición!” otra vez llamaba a su secuestrador así en su mente. Miro hacia todos lados, pero esa imposible, ¡No podía escapar!
Escuchó como corría el agua en la tina unos momentos y después se silenció. Draco regreso a la habitación quitándose la ropa y besándole el cabello lo tomo e brazos para llevarlo al cuarto de baño.
Ronald no vio nada raro pero aun así seguía temblando cuando entraron en la tina y Draco lo acomodo en su pecho. Le daba beso en la frente y mejillas mientras lo bañaba. La verdad es que fue bastante relajante y estaba por quedarse dormido cuando sintió que el rubio se levantaba dejándolo a él acostado sobre un flotador especial que dejaba su rostro fuera del agua
- Amor, toma tu chupón – dijo colocándoselo mientras él lo recibía con gusto – quiero que te relajes y nunca, nunca olvides que mamá te ama por sobre todas las cosas y jamás te haría daño, ¿Shi? Te va doler un poquito pero va ser un momento, lo prometo – y más por instinto que otra cosa Ron hizo ruido con su chupete – después te daré comidita y veremos la sirenita. ¿Quieres?
Ronald quiso llorar, odiaba ese dibujo animado pero Blaise insistía en ponérselo mientras estuvo en el hospital, diciendo que él era Ariel. Draco salió de la tina llevándolo consigo hasta la cama, donde lo acostó para secarlo entre juegos.
Sin embargo su piel se le erizo cuando sintió como Draco colocaba un armazón de fierro debajo suyo y lo ajusto a la altura de sus brazos, torso y muslos, dejándolo apoyado en la cama en sus manos y rodillas, con sus glúteos totalmente expuesto. ¿Qué cosa le iba a hacer?
De pronto recordó lo que Pansy había dicho en el salón de juegos “Draco, ¿Roncito no usara plugin?” “así estará más que listo para… ya sabes” y entendió lo que iba a pasar. Él definitivamente no quería eso. No quería que lo violasen. No quería ser un bebe, ni menos el juguete sexual de un par degenerados que se aprovecharían de su vulnerabilidad física, porque si había algo que tenía muy claro en ese juego de enfermos era que Draco tenía pareja, y que en algún momento llegaría para ocupar el puesto de “su papá”
- Ño quedo – dijo dejando caer el chupón y revolviéndose – ño do hagaah po favo, ño quedo
- Tranquilo mi amor – dijo Draco acariciándole la espalda y bajando hacia sus glúteos. Sintió como algo frio caía sobre el nacimiento de sus glúteos y se colaba hacia su ano, mientras un aroma suave inundaba el lugar ¿Le estaba hechando aceite de bebe en su ano? – shhhh… tranquilito. Recuerda lo que te dije, mamá te ama por sobre todas las cosas y jamás te haría daño
- Ño po favo, ño. Te dide mama. obedeshede – lloraba desesperado tratando de alejarse sin llegar a lograrlo mientras el primer dedo del ex preparador físico entraba por su ano
Lloraba. Gritaba. Suplicaba. Intentaba revolverse, pero era imposible. Nada detenía la entrada lenta y dolorosa de ese dedo, que aunque sabía que era delgado, en esos momentos a él le parecía que media kilómetro de diámetro mientras se abría pasó circularmente en su interior. Sentía que la garganta le iba sangrar de tanto gritar, pero nadie venia en su ayuda, a pesar del escándalo.
Una vez el dedo no tuvo más espacio para lastimarlo más, tal como entro fue saliendo, de manera circular. Su rostro estaba empapado le dolía todo su cuerpo. Ya no podía más, y una erección descomunal se estaba formando entre sus piernas. Fue entonces que lo sintió. El dedo no había salido completamente de él, solo lo había hecho lo suficiente para que un segundo dedo se le uniera en su macabro paseo por su interior. Y luego otro, y otro más. Todos girando dentro suyo en su cruel intento de llegar a su próstata.
- Dedajeshe e amo de mamá – dijo Draco en su oído simulando ser un niño al hablar – dedajeshe pa que ña no dueda
- Bashta – suplicaba Ron llorando desesperadamente – ño quedo, ño quedo.
- Tranquilo – dijo el rubio a pesar que Ron se movía con más fuerza – ya va pasar. Papá y yo somos bastante grandes y no queremos lastimarte al jugar contigo - ¿Qué no lo querían lastimar? Pensó Ron. Lo habían secuestrado, violado con un juguete para adultos, y anunciado que apenas estaban empezando ¿Y le decía que no lo querían lastimar? ¡Llamar enferma a esa gente era decirle un cumplido!
Después de varios minutos los dedos salieron completamente de él para ser remplazado por algo frio que se volvía a hundir en él, solo que esta vez no hubo intensión de salir. Draco lo libero de sus ataduras y movió el armazón fuera de la cama. Él volvió a quedar sobre el pecho del rubio que le masajeaba la espalda bajando hasta sus glúteos y volviendo a subir. No tenía fuerzas para nada. Ni siquiera para llorar ya. Malfoy aprovecho eso y movió su mano para tomar ambos miembros al mismo tiempo y con solo un par de caricias logro que ambos se corriesen al mismo tiempo
- Eres el bebé más hermoso que existe, mi cielo – le dijo besando su frente mientras lo aferraba más contra su pecho – hiciste muy feliz a mamá. Te ganaste una comida extra – y moviendo su mano acerco se tetilla a la boca del pelirrojo que empezó a succionar por inercia hasta quedar dormido. De nada ya le servía pelear
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No sabía qué hora era, pero el sol ya iluminaba toda la habitación cuando él abrió los ojos. Estaba acostado en la cama grande, sobre el pecho de Malfoy, quien solo vestía un bóxer. Él en cambio estaba completamente vestido con su ya inseparable pañal y un mameluco verde esmeralda. El rubio pasaba perezosamente su mano por su espalda y cada tanto le besaba el pelo. Quiso moverse pero un recuerdo lo detuvo instantáneamente. Draco le había colocado un plugin el día anterior a modo de “preparación para cuando llegase papá”. Y sin poder volverlo a evitar lloró nuevamente. Ahora estaba seguro. No podía caer más bajo.
- Anoche alguien se durmió y no vimos la sirenita – dijo Draco besándole el cabello – ¿quieres verla ahora? Es domingo y podemos quedarnos en cama. ¿quieres jugar? – dijo y su mano bajo hasta su espalda baja
- Ño quedo – dijo Ron – quedo i a casha, po favo – suplico
- Bueno – dijo el rubio respirando – es hora de hablar. Sé que tienes preguntas y mamá dispuesta es dispuesta a responderlas
- ¿Chodas? – pregunto Ron
- Todas – dijo Draco con una sonrisa
- ¿Qué e eshte luga? – dijo Ron y sintió al rubio respiro hondo – dishiste chodas
- Dije todas, y serán todas – dijo el rubio.
- ¿Qué e… ete luga?
- Este lugar… es un lugar… para dar segundas oportunidades – contesto Draco mirando a su alrededor
- ¿shegunda opotuñidade? – pregunto Ron intrigado mientras se hacía pipi en el pañal y cerró los ojos por vergüenza
- Veras cielo – continuo Draco – yo amo… mucho a una persona. nos casamos, somos felices. Pero no podemos tener bebes…
- ¿po qué? – dijo Ron
- Porque la naturaleza no quiso – dijo Draco con la mirada perdida y acariciándole la espalda
- ¿Po que eshto quí? – pregunto Ron