Capítulo 8.- Nuevos inicios
Un nuevo día, un nuevo destino, un nuevo vuelo…
Julián caminaba por el aeropuerto y por primera vez en mucho tiempo se encontraba feliz de estar a punto de subir a un avión, tenía una semana libre, los chicos volvían a casa para navidad, pero a él le resultaba mejor ir a Grecia a visitar a su familia, su hermano vivía en Los Ángeles pero por sus apretadas agendas no tenían tiempo de verse como les gustaría, hacía más de tres años que no iba a Grecia, y su hermano también estaría allí, en contra de todo pronóstico, lo extrañaba, al igual que a sus primos, su madre había dicho que estaba organizando una gran cena familiar para festejar su visita
- Hey, pensé que ya todos se fueron – Julián entró a la sala privada de espera y se encontró con Milo que bebía un café arrimado al bar, negó con la cabeza al responder:
- Estoy de niñero, vamos a Grecia, ¿a dónde vas tú? – Milo señaló el sillón en donde Seiya estaba acostado hecho bolita profundamente dormido
- A Grecia, a visitar a mi familia, ohhhhh el abuelo de Seiya vive en Grecia, ¿verdad? – preguntó Julián recordando algo que Seiya le había dicho
- Si, me dijo que no quiere ver a su padre, así que en lugar de ir a casa para navidad, su madre y su hermana van a Grecia también
- ¿Y no te molesta no poder ir a casa para navidad? – preguntó Julián interesado
- La verdad… no… de los cinco chicos, Seiya es el más fresco de todos, Ikky y Shun también lo son, y eso que son los hijos de Shion, Hyoga es algo temperamental y Shyru… no me agrada mucho Shyru
- ¿Ah sí?, ¿por qué?
- No me hagas caso, solo no me agrada – Milo miró a Seiya cuando dijo esto
- Si quieres que te sea brutalmente sincero, a mí tampoco me agrada mucho, sé y entiendo que la vida de los chicos es compleja, que viven bajo el microscopio, y Seiya es precisamente el que más atacado se ha sentido y ha tenido más ataques de ira, pero es Shyru el que siempre está fastidiado por todo, ¿o es solo mi idea?
- No, no es tu idea, de un tiempo para acá las cosas han cambiado en el grupo, es lógico, los chicos están exhaustos, los itinerarios son matadores, el primero que cayó fue Seiya, pero yo lo veo mejor, por lo menos lo veo comer, dormir, lo he visto un poco más animado estas últimas semanas, le gusta escribir y componer contigo
- No estamos componiendo nada, solo hacemos un poco de música para aliviar la tensión, nada importante – Julián se encogió de hombros cuando dijo esto
- No… si es importante, él mismo me lo dijo, y es bueno que le guardes el secreto, eso habla bien de ti
- ¿Te lo dijo?, me dijo que no se lo había dicho a nadie
- Yo no cuento, él sabe que lo sé todo, y que guardo sus secretos, he estado a su lado desde el inicio, lo conozco muy bien y lo aprecio mucho
- Es bueno que tenga a alguien en su esquina
- Si, él está en la mía, yo estoy en la suya
En ese momento se anunció la salida del vuelo de Julián, que miró su reloj y se puso de pie, Milo hizo lo mismo y lo miró al preguntar:
- Shaka hizo tus arreglos de vuelo, ¿verdad?
- Supongo que si
- Entonces estamos juntos, solo despierto a Seiya y nos vamos – Milo se acercó al castaño y lo movió suavemente del hombro, Seiya gruñó y susurró:
- Cinco minutos más Shun…
- No es Shun, soy yo, y vamos que ya nos están llamando – Milo ayudó a que Seiya se incorpore, tenía el cabello revuelto y no abría los ojos, el peliazul le puso su gorrito en la cabeza
- ¿A dónde estamos yendo? – Seiya se puso de pie con la ayuda de Milo y cargó su mochila
- A casa de tu abuelo, ¿recuerdas?
- Ohhhh sí, ok., casa de mi abuelo, es navidad, ok., ok., ¿tú también vas a la casa de mi abuelo? – Seiya miró a Julián y lució confundido por un momento
- No, yo voy a la casa de mi madre, que coincidencialmente igual está en Grecia, así que creo que vamos en el mismo avión, ¿te ayudo con eso? – preguntó el peliazul señalando la mochila del castaño
- No te molestes, si lo logro, solo estoy medio dormido aún, cárgame Milo
- Ni muerto, camina mocoso – contestó Milo en tono divertido, Seiya se acomodó de mejor manera su gorrito y caminó entre su guardaespaldas y su guitarrista
El vuelo a Grecia pasó sin eventualidades, Seiya viajó con Milo y durmió la mayor parte del camino, al llegar a Atenas, se despidieron en el andén, dispuestos a descansar y visitar a sus familias
Los días que siguieron fueron bastante tranquilos, el abuelo de Seiya, Sísifo, tenía una compañía naviera, por lo que llevó a sus nietos de pesca una mañana, los llevó por sus empresas otro día, fueron a sitios turísticos que ya habían visitado cuando eran niños, fue una estadía sumamente relajada en la que el joven castaño pudo disfrutar de la paz y la tranquilidad del patio de la casa de su abuelo, de la compañía y mimos de su mamá, de las bromas de su hermana y las conversaciones profundas con su abuelo, eso es lo que más extrañaba y lo que más disfrutó
Ese fin de semana se pudo abrir hasta cierto punto con su familia, sobre lo que en verdad le estaba pasando, no les podía contar la realidad total de la situación porque no les había dicho que su corazón estaba roto por la ruptura que tuvo con otro chico, Seiya había tenido novias en el pasado, él creía que era bisexual, pero en este punto no estaba seguro tampoco, estaba en etapa de experimentación solía decir, Seika le dijo que algo así ella pensó que le pasaba, pero que eso no explicaba sus razones para dejar la banda, Seiya les dijo que se sentía exhausto, que lo que quería era descansar, viajar, salir del ojo público, que estaba harto de que su vida sea analizada en todos los aspectos, que lo que había pasado con Saori era un ejemplo patético de lo que tenía que enfrentar a diario
Navidad llegó y pasó, los días le volaron al castaño que estaba entretenido pescando, nadando, paseando en bicicleta con su hermana, fueron días que le devolvieron la alegría, eso fue claro para todos, especialmente para su madre, ella extrañaba mucho a su hijo y al parecer el sentimiento era mutuo, Seiya podría ser todo lo que sea, pero seguía siendo su hijo bebé, que se acurrucaba en su regazo y se quedaba dormido, eso no había cambiado en él
La noche de año nuevo, el abuelo de Seiya organizaba una fiesta a la que invitaba a todo su personal, y a los demás empresarios, las fiestas de Sísifo eran legendarias, así que esa noche en el amplio patio de su casa, que estaba decorado con linternas, carpas, luces, calefactores y demás, al menos ciento cincuenta invitados empezaron a llegar, a Seiya no le gustaban mucho las fiestas tan grandes, pero su abuelo la había organizado con mucho esmero, y más fue el hecho de que su hija estuviera ahí, al igual que sus nietos, así que el castaño estaba caminando por el salón, su abuelo le había presentado a muchas personas de las que por su vida no se acordaría el nombre, y ahora que su abuelo se había entretenido con uno de sus clientes, él se acercó a la mesa de los bocaditos y sonrió al ver una cara conocida
- Wow Julián, te vez muy bien con traje
- Si a eso vamos, tú también, no te había visto con traje antes – el peliazul sonrió al abrazar familiarmente a Seiya que le devolvió el abrazo y le sonrió
- No sabía que tu familia iba a venir, ¿vinieron todos verdad? – preguntó el castaño
- Claro que sí, mi padre y tu abuelo son viejos amigos, se mueven en los mismos círculos, mi familia también tiene una compañía naviera
- ¿En serio?, deben amar el hecho de que seas guitarrista – Seiya iba a tomar una copa de champagne que uno de los meseros trajo pero se arrepintió y amablemente pidió: - ¿Me podrías conseguir algo sin alcohol?, no sé, cidra de manzana, jugo, agua, lo que tengan en la cocina por favor – el camarero asintió, Julián si tomó una copa y preguntó:
- ¿Ni siquiera champagne vas a tomar?
- No, me arde el estómago, he pasado bastante bien esta semana, mi mamá cocinó para mí, hacía tanto tiempo que no comía así de bien – Seiya comió un bocadillo y tomó otro
- Mi mamá igual, es lo que amo de volver a casa
- Eso y que solo aquí nos vemos, hola, soy Hades, hermano de Julián – un pelinegro muy atractivo se acercó y le estrechó la mano a Seiya luego de palmotear la espalda de Julián
- Hola, soy Seiya
- Es un gusto conocerte, mi hermano favorito habla mucho de todos ustedes, especialmente de ti
- ¿En serio?, nada es cierto, todo es mentira – dijo Seiya con una sonrisa en los labios
- Seguro que si, por cierto, recibí una llamada de mi oficina hoy en la tarde y me olvidé de decirte, llegamos ya a un acuerdo con el abogado de la banda y tu contrato ya está listo, ¿a dónde es que vas de aquí? – preguntó Hades a Julián que respondió:
- A México
- Genial, te hago llegar los papeles para que me los devuelvas firmados, se cambiaron todas las cláusulas que se propusieron y todo está bien, hablé con June ayer, y se hicieron los acuerdos con sus abogados también, todo sobre ruedas hermanito
- Genial, te debo una
- Ok., solo eso venía a decirte, bueno, a robarme un bocadito también
- Espera, ¿a qué te refieres con que tu contrato está listo?, ¿no tenías contrato? – preguntó Seiya frunciendo el ceño
- Si pero no, tenía uno estándar que propuso tu padre, pero… no era conveniente para mí, Shion ata de muchas maneras a los músicos, y ni que decir de los contratos de ustedes, así que con la ayuda de mi hermano, propuse cambios y los aceptaron, Hades es abogado – aclaró Julián al ver la cara de confusión de Seiya
- ¿Tienes un abogado propio además de mi padre?
- Claro… - Julián se encogió de hombros al decir esto
- Aquí donde me ves, soy abogado de las estrellas, en el ámbito musical June es mi clienta también, de ahí trabajo principalmente con actores de cine y televisión – dijo Hades con una ligera sonrisa en el rostro
- ¿Eres abogado de todos ellos?
- No… solo de June
- ¿Se puede hacer eso? – Seiya preguntó sorprendido
- Claro que sí, ¿no tienes tú un abogado?, ohhh claro… tu padre es tu abogado, he tratado a tu padre en algunos círculos, es una fiera – dijo Hades levantando un poco su copa, su comentario no era mal intencionado, él admiraba a Aioros, era un abogado respetado en el medio
- Y ese es precisamente mi problema, Hades… ¿tengo posibilidad de salirme de mi contrato? – preguntó Seiya mirando al pelinegro fijamente
- No lo sé, tendría que analizar tu contrato y ver las condiciones que se establecen, luego de eso se podría ver las opciones que tienes, si es que quieres ver opciones, claro está
- Eso sería genial – dijo el castaño, no se le había ocurrido esa posibilidad hasta que no se le cruzó en la fiesta de su abuelo, Hades sacó su billetera y escribió sus números personales en la parte trasera de una tarjeta y se la entregó a Seiya al decir:
- Hazme llegar una copia de tu contrato, yo lo analizo y podemos concertar una cita en mi oficina si gustas, aunque si estás de gira, lo podemos hacer por teléfono o videoconferencia, como te sea más fácil, los amigos de mi hermano son mis amigos, ahora si me voy, mi esposa me está llamando – Hades les sonrió y atravesó el salón entero hasta llegar donde una hermosa mujer de largos cabellos negros lo recibió con una sonrisa
- ¿Para qué quieres un abogado Seiya? – preguntó Julián intrigado
- Si tu hermano es abogado de June, debe ser bueno, ¿verdad?
- Bueno… en términos profesionales, Hades es otra fiera, se lanzó el bufete de abogados de la disquera de June encima, pero le consiguió mejores condiciones, mejores regalías y hasta lo último que supe, consiguió terminar de mutuo acuerdo su contrato, June se va a cambiar a la disquera de ustedes, Shion está trabajando en un proyecto con el nuevo manager de June, quiere hacer una gira conjunta
- ¿June tiene nuevo manager?
- Va a tener nuevo manager, va a despedir al actual, todo eso viene con el cambio de disquera
- Y eso se lo consiguió tu hermano
- Si… ¿qué quieres hacer Seiya?, ¿para qué necesitas un abogado? – las preguntas de Seiya a Hades fueron bastante específicas, algo ya se olía Julián pero Seiya estaba siendo por demás obvio, en especial porque ante la muy directa pregunta se mostró evasivo y no encontraba las palabras para responder:
- Yo… es que yo…
- ¿Quieres dejar la banda? – completó Julián, Seiya se mostró un tanto irritado al preguntar retóricamente:
- ¿Soy tan transparente?
- Solo un poco, hey… ¿quieres caminar un ratito?
- Ok., - Seiya tomó otro bocadillo para discretamente salir de la carpa con Julián y fueron a las escalinatas que bajaban al muelle, al inicio no estaban hablando, luego Seiya empezó a hablar de cuando era niño, de los viajes que hacía con sus abuelos en su barco, de las vacaciones que había pasado en este lugar, cuando llegaron al muelle, el castaño se arrimó a la baranda y respiró profundamente cerrando los ojos al decir: - Amo este lugar
- Se nota, aunque creo que a ti te puede pasar lo que me pasa a mí, es en parte el lugar, pero es más la familia
- Si, eso sí, mi abuelo es genial, he disfrutado mucho en el bote con él, hacía meses que quería venir, pero tuve problemas técnicos, dejémoslo así, no quieres oír mis tristes historias – Seiya suspiró y se volteó para ver el agua, Julián se apoyó a la baranda de espaldas de forma que si Seiya se volteaba un poquito se podían ver cara a cara
- Eso me has dicho muchas veces, pero así no lo creas, si quiero escuchar tus tristes historias, en parte porque algo sé de todo lo que te pasa, tus letras son bastante explicativas – Julián se acercó a Seiya y lo empujó suavemente hombro con hombro
- Eso es otra cosa
- Yo creo que es lo mismo, soy adivino, una cosa puede ser consecuencia de la otra, ¿me vas a contar por qué quieres dejar la banda?
- No…
- Ok., ya sabes que te guardo los secretos
- Si, eso sí, pero… esos son problemas con mi papá, que yo espero tu hermano pueda ayudar a resolver
- Hay una cosa con Hades, o te ayuda a resolverlo pacíficamente o va a guerra contra tu padre arrastrándote con él, a mi hermano no le gusta perder y no hay medias tintas con él, salvo que estés seguro de querer mandar al diablo la relación con tu padre, llámalo, mira que te lo estoy advirtiendo
- Mi relación con mi papá está muerta, el punto de no retorno lo pasamos hace tiempo, eso no es lo que me preocupa, yo solo quiero… yo quiero…
- ¿Ser libre?
- Diablos… en serio eres adivino
- Y muy bueno solía decir mi abuela, hey… no quiero verte triste – Julián se volteó para mirar directamente a Seiya que también se había volteado un poquito, el mayor le acarició suavemente la mejilla al decir esto
- ¿Sabes?, siempre he odiado a los artistas que salen en televisión y se quejan de lo deprimentes que son sus vidas, y ahora el deprimido soy yo – Seiya dijo esto sin hacerse el quite así que Julián se volteó y puso su mano en la cintura, Seiya le puso ambas manos en el pecho al susurrar: - No
- ¿Por qué no?, un beso puede ayudar a la depresión, ¿no lo crees?
- Todo empieza con un beso – Seiya intentó dar un paso hacia atrás, pero Julián no necesariamente lo soltó, sino que se acercó un poquito más y se agachó para decirle al oído:
- Nada está empezando si tu no quieres, es solo un beso – Julián tenía su mano en el cuello de Seiya y le acarició la mejilla con el pulgar, Seiya soltó el aire que estaba conteniendo y dejó que Julián lo acariciara, dejó que Julián se acercara un poco más, y dejó que Julián lo besara suavemente en los labios en el frío de la noche
- Tu vida no debería ser deprimente en lo más mínimo – susurró Julián en el oído de Seiya cuando el beso se rompió y lo abrazó de mejor manera
- ¿Y cómo arreglo eso? – Seiya levantó la mirada y volvió a ver en los ojos de Julián lo que ya había visto antes, preocupación por él, pero eso no era todo, había algo más
- Disfrutando cada día y dejando ir lo que no te traiga felicidad
- ¿Tus besos por ejemplo?
- Ohhh yo beso muy rico – Julián sostuvo de mejor manera a Seiya de la cintura pegándolo a su cuerpo y acariciando de nuevo su mejilla, el castaño puso una mano en el cuello de Julián y se impulsó solo un poquito uniéndose en un nuevo beso, más profundo esta vez
Hacía mucho tiempo que Seiya no besaba como lo estaba haciendo ahora, los besos que compartió con Saori fueron bastante dulces y suaves, Julián lo estaba besando con pasión hasta dejarle sin aliento, la forma que tenía el peliazul de masajear su lengua fue por demás placentera, no se diga la forma como lo sostenía y acariciaba suavemente su espalda, el castaño no pudo evitar recordar a Shyru, la verdad no se acordaba la última vez que se habían besado así, con pasión, con deseo, no… esto era algo nuevo, por eso cuando el beso se rompió, juntaron sus frentes y sonrieron
- ¿Cómo supiste que no soy del todo hetero?
- No lo sabía, a ciencia cierta, por lo menos no hasta esta noche, si fueras del todo hetero me habrías empujado, me alegra que no lo seas – Julián besó suavemente a Seiya en los labios otra vez, pero en ese momento el castaño rompió el beso porque su teléfono vibró en su bolsillo, leyó el mensaje y dijo:
- Tenemos que volver, mi hermana me está buscando, uno no puede perderse ni un ratito
- Gajes del oficio, hey… esto fue genial – Julián tomó la mano de Seiya y lo jaló de nuevo para abrazarlo, el castaño sonrió, pero se soltó del agarre del mayor al decir:
- Si, fue genial, pero tenemos que volver, que mi abuelo me necesita para algo, pero no sé para qué, la comida es mas tarde, creo… no sé… - Seiya lució confundido y miró su reloj, eran las 10 de la noche, era temprano aún, pero caminó con Julián hasta entrar a la carpa nuevamente, ahí su abuelo caminó directo hasta él y le dijo al oído:
- Hijito, la verdad no tenía pensado pedirte algo así, pero muchos de mis invitados me pidieron que cantes, ¿podrías hacerlo?, acompañamiento musical tendrías, no sé, una canción o dos – Sísifo lucía entre emocionado y avergonzado, a Seiya esto le tomó completamente por sorpresa, pero luego se volteó y tomó a Julián de la mano al decir:
- ¿Podríamos improvisar algo?, él es el guitarrista del grupo abuelo, Julián, conoce a mi abuelo – Seiya hizo las presentaciones del caso, el abuelo de Seiya no pudo sonreír más porque no le dio el rostro, el peliazul saludó muy amablemente y asintió, no podía negarse a una petición de esas
- Gracias hijito, gracias, ¿qué le digo a la banda?
- Dame unos diez minutos para pensar lo que vamos a cantar, y te aviso, ven… vamos a ver a la banda, asumo que si nos prestan un par de guitarras, ¿verdad?
- Claro hijo – Sísifo fue con Seiya y con Julián hasta la banda que su abuelo había contratado para su fiesta, y Julián sugirió que tocaran dos baladas, eso era lo más fácil de improvisar, y Seiya estuvo de acuerdo, así que quince minutos después su abuelo hizo el anuncio
Todo fue bastante sencillo, Julián y Seiya estaban sentados en banquitos, ambos tenían guitarras acústicas y micrófonos, habían calibrado la amplificación y todo estaba listo, Seiya saludó a todos, dijo que Grecia era su lugar favorito en el mundo porque tenía muchas memorias de cuando era niño y la casa de sus abuelos, en donde estaban ahora, y que le dedicaba estas canciones a su abuelo y a su familia, y que les deseaba a todos un feliz año nuevo, el salón entero aplaudió y el improvisado dúo empezó a tocar
La primera canción que tocaron fue: “Always”, de Bon Jovi, y luego tocaron: “More tan words” de Extreme, Seiya miraba a Julián mientras tocaban la guitarra y cantaban, siempre le pareció sexy, de eso no había duda, pero no lo había considerado como algo más que eso, primero porque no pensó que fuera gay, o bi, o lo que sea Julián, pero ese día que él estaba tan molesto y Julián lo abrazó tratando de tranquilizarlo, se puso a dudar, básicamente por la forma en la que lo abrazó y le puso las manos en el cuello para llamar su atención y hacer que lo mire, claro que en ese momento Hyoga llegó y los interrumpió, aunque él estaba tan molesto en esos momentos, que luego lo pudo racionalizar todo, vaya…
Mientras estaban en el escenario, sus miradas se encontraron varias veces, ambos vieron algo que no habían visto en el otro antes, Julián sonreía de una manera muy especial, como con anticipación, eso no le había pasado a Seiya en mucho tiempo, sus fans en los conciertos y en las entrevistas eran caso aparte, pero Shyru no lo miraba así, no lo había mirado así en meses, y una verdad le pegó a Seiya en ese momento, Shyru ya se lo había dicho pero él se resistía a creerlo, ahora le parecía más claro que el agua, el pelinegro no lo amaba, no lo deseaba, ya no lo deseaba, pero, las palabras de Julián cobraron un poco de sentido, debía dejar ir lo que le hacía daño y hacer las cosas que le hicieran feliz… si… eso tenía que hacer, es lo que estaba tratando de hacer por meses
Cuando las dos canciones terminaron, Seiya agradeció los aplausos y abrazó a Julián antes de devolver las guitarras y bajar del pequeño escenario, ahí caminó con Julián al bar, pidieron un par de bebidas y en eso estaban cuando Seiya jaló al peliazul para que se agachara un poquito y le dijo:
- ¿Estás muriendo de hambre?
- No… particularmente no, ¿por qué?
- ¿Quieres un tour por la casa?
- ¿Es tu forma elegante de llevarme a tu habitación?
- Si
- Muéstrame todo lo que quieras – Julián pasó un dedo por el pecho de Seiya y se detuvo en la pretina de su pantalón, el castaño le guiñó un ojo y lo tomó del brazo para sacarlo de la carpa y llevarlo a la casa, entraron por la puerta de servicio y subieron las escaleras hasta el tercer piso, caminaron hasta la habitación del fondo y entraron a un habitación que tenía todas las luces apagadas, Seiya le pasó el cerrojo a la puerta y Julián no esperó mucho para tomarlo en sus brazos, acorralarlo contra la puerta y besarlo con pasión
Julián era mucho más alto que Seiya así que lo levantó de las axilas e hizo que le rodeara la cintura con las piernas, el peliazul lo sostenía de las nalgas y cuando el beso se rompió, Seiya hizo hacia atrás su cabeza permitiendo que Julián recorriera su cuello llenándolo de besos y mordidas, sus respiraciones se agitaron y la ropa empezaba a incomodar, Seiya se dio modos y se sacó el saco, trató de sacar el de Julián pero no necesariamente pudo hacerlo por la posición en la que estaban, así que entre besos, Julián llegó a la cama y cayeron juntos en ella, allí con propiedad se fueron sacando la ropa con prisas hasta quedar desnudos sobre el edredón
- Espera… espera… - susurró Seiya arqueándose en la cama, Julián estaba entretenido mordiendo su pecho y encontró el camino a sus pezones, el castaño era bastante sensible y no pudo evitar gemir, en especial porque Julián estimulaba su ya erecto miembro
- ¿No quieres hacerlo?
- Si quiero… condones… - Seiya se incorporó un poquito y señaló el armario, Julián se incorporó dejando que Seiya se levante, camine hasta allá, abriera una mochila y sacara preservativos y lubricante, el peliazul se sentó en la cama y recibió gustoso al castaño que puso los implementos en sus manos y sentándose sobre su regazo con las piernas abiertas, lo besó con pasión
- ¿Cómo quieres hacerlo? – preguntó Julián besando el cuello del castaño y acariciando sus redonditas nalgas
- Te quiero dentro y me gusta estar arriba, justo así – Seiya buscó los labios de su nuevo amante que le acarició la espalda y abrió el tubo de lubricante, el castaño gimió cuando un invasor dedo entró en él
- ¿Hace cuánto no lo haces?
- Un par de meses… despacio… eso es… ohhhh Julián… - Seiya abrazó al peliazul y gimió en su oreja, eso le resultaba por demás sexy al mayor que sonrió y le chupó el lóbulo de la oreja al decir:
- Me encanta tu piel, es como un lienzo… relájate… eso es… relájate… - Julián acomodó de mejor manera a Seiya para poder dilatarlo, y mientras lo hacía, lo besaba en donde podía, porque el menor no se quedaba quieto, eso también le encantó
Cuando lo sintió listo, se acomodaron de mejor manera en la cama y apoyándose en los hombros de Julián, Seiya dejó caer lentamente sus caderas introduciendo el miembro del mayor en su interior, al hacerlo gimió nuevamente, Julián estaba bien dotado y eso resultó un tanto incómodo, pero cuando empezaron a moverse juntos, toda huella de incomodidad desapareció, dando paso a una sensación divina de placer
A Julián le encantó la visión de Seiya moviendo rítmicamente sus caderas, el pequeño se mordía los labios y gemía llamándolo por su nombre, tenía los ojos cerrados al principio, pero Julián le acarició el rostro y le dijo:
- Abre los ojos… mírame… eso es… mírame… - Seiya lo miró y sonrió, el rostro de Julián era un poema, se notaba que lo estaba disfrutando también, le encantó la manera en la que lo sostenía y lo acariciaba, porque el mayor recorrió su cuerpo entero sin pudor alguno, sus cálidas manos se sentían muy bien sobre su piel, sus besos eran pausados y profundos, le gustaba morderlo también, eso fue nuevo pero placentero
- Ohhh… mmmm… me vengo Julián… Julián… - Seiya abrazó al peliazul y le mordió el hombro, llevó una de sus manos a su miembro pero Julián tomó su mano suavemente y le dijo:
- No… yo quiero hacerlo… mírame pequeño… mírame… - Julián frotó el erecto miembro de su amante y se miraron a los ojos hasta que Seiya gimió y cerró los ojos al venirse, Julián lo tomó de la cintura y cambiaron posiciones en la cama, recostó a Seiya sobre su espalda y salió de su cuerpo, se acomodó entre sus piernas y se acarició a si mismo hasta venirse también, luego se desplomó sobre el pecho del castaño que aún tenía los ojos cerrados pero sonreía levemente
- Eso fue… diferente… - dijo Seiya finalmente acariciando los largos cabellos del mayor que estaba acostado sobre su pecho escuchando los latidos de su corazón
- ¿Ah sí?, ¿diferente en bien o en mal?
- Solo digamos que el vuelo de mañana va a ser interesante, me voy a tener que sentar de ladito o algo de eso, lo bueno es que ambos vamos en primera clase
- Ohhhh cierto, mañana volamos a México – Julián se incorporó en la cama acostándose de costado para poder mirar a Seiya que abrió los ojos y suspiró al decir:
- Si… las vacaciones nos duraron poco, especialmente si consideramos que yo quiero venir a vivir aquí, amo esta casa, a mi abuelo, y pescar, yo debí ser pescador no cantante
- No lo creo, salvo que le cantes a los peces
- Ahí sería un sireno
- Y al volver, ¿cómo quedamos tú y yo?
- ¿A qué te refieres?
- Esto… esta noche tan genial que hemos pasado aquí, jugamos a lo que pasó en Grecia se queda en Grecia o… podría seguir pasando en donde sea que estemos en la gira – Julián entrelazó sus dedos con los de Seiya que sonrió y dijo:
- Eso solo aplica para Las Vegas, ¿o quieres dejarlo así?
- La verdad no… me encantó hacer el amor contigo – Julián le acarició la mejilla al castaño que sonrió complacido, hacía mucho tiempo que nadie lo había mirado con deseo y ansia como Julián lo estaba haciendo ahora
- A mí me encantó hacerlo contigo, pero no necesariamente estoy buscando una relación formal, lo de que quiero ser libre es en serio, me he sentido atado por mucho tiempo, quiero poder respirar, ¿sería eso un problema?
- No… podemos ser libres juntos, eso me gusta, ¿volvemos a la fiesta?
- Ohhhh cierto, lo olvidé
- Vamos pues… en este punto ya tengo hambre – Julián besó en los labios a Seiya una vez más y ambos se levantaron de la cama, se asearon, se vistieron y bajaron a la carpa, la cena estaba por servirse así que nadie se dio cuenta de su ausencia, bueno nadie no, Milo los miró y meneó la cabeza, aquí vamos de nuevo…