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Fragmentos Del Amor Inocente (ShaMu) ShaMuTober2022 por AMMU TEIKOKU YUDAINA

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Notas del capitulo:

Mis terrones de Amor Yaoi, ¿Se encuentran bien?

No han comentando nada, ¿Están bien?

Creo que siento lo mismo que ustedes han sentido cuando no me aparezco...

Me tienen preocupada, por favor... Algún terrón repórtese...

Bueno mis terrones, el siguiente capitulo al fin llego y espero lo disfruten.

La pregunta del día de hoy...

Si ustedes pudieran escoger a un dorado para que sea su maestro, (Que no sea obviamente de su signo).

Creo que... Yo escogería a... Aioros, sipi creo que me vendría ver ser entrenada por el caballero de sagitario... Nos llevaríamos muy bien y siempre he tenido ganas de aprender a usar el arco y flecha... Creo que igual, seria genial como un hermano mayor y siempre quise tener una o un hermano mayor jajaja se me cumpliría el deseo jajajajaja, salvo que... Convivir con Aioria seria muy terrible.

Espero sus opiniones.

Bueno, voy a poner las advertencias de una vez.

Advertencia: Contenido yaoi, lemon... Mucho Lemon se tiene aquí... Con toques de dulzura, pero igual existe bastante lujuria, personas sensible sa estos temas y menores de edad abstenganse de leer este contenido.

Día 25.- Sausserea Obvallata: Flor del Tibet o del Himalaya. Característica por su uso medicinal, como el hecho de florecer cada cierto tiempo,estando en peligro de extinción. Igual se puede tomar en cuenta a la confusión que existe por los diversos nombres y creencias que rondan alrededor de esta flor.

Espero que disfruten el contenido, y repórtense los de Amor Yaoi, por que de plano ya me preocuparon mucho.

Después de aquella ceremonia, donde se dedicaron sus más sinceros y puros sentimientos, recibiendo la bendición de aquellos Dioses de los Lemurianos.

Saber y sentir que al fin ambos se pertenecen, que son uno en corazón, pensamiento y alma…

Siendo aceptados por los allí presentes, ya que demostraron ser capaces de defender, procurar y resistir en su decisión y sentimientos.

Un pequeño banquete, en donde la comida principal consiste en vegetales y carnes exclusivamente preparados para este momento…

De donde el olor invitaba a todos a sentarse a la mesa para degustar esa deliciosa comida, las frescas frutas como un pequeño postre…

Ya que para esta pequeña celebración, no hace falta tanta ceremonia formal, pero igual todo se mantiene tranquilo y discreto por parte de ambos jóvenes e recién casados, que se sonrojan a simple contacto visual y que intentan no soltar sus manos por nada del mundo.

Por momentos, Mu admiraba el anillo que el rubio le ha dado como otra muestra de su amor, acariciaba dicho objeto con cuidado, incluso hubo quienes lo querían ver, diciéndole que era un hermoso regalo de matrimonio.

Ese joven Lemuriano de cabellera lila no solo se ha casado con un hombre sumamente guapo  maravilloso, que ahora ya no figura como un simple extranjero ante los ojos de los demás, sino que al demostrar lo fuerte, valeroso y dedicado que es y será como marido, se ganó la aprobación de todos… Sin duda uno de los mejores partidos para el pelilila.

Shaka, se sentía avergonzado por la atención que ha llamado, pero al estar al lado del Lemuriano de bella sonrisa y mirada preciosa, lo hace sentir que allí pertenece sin duda…

Aunque claramente, no podía evitar sentir la mirada de cierto disgusto del abuelo del pelilila, pero este término felicitándolos a ambos, y con una petición de por medio.

-Cuídalo con tu vida de ahora en adelante, ¿Lo entiendes bien, Shaka?-

-Sí, de eso no tenga la menor duda-

Fue solo un momento en que Mu estaba siendo admirado por su belleza, en donde Hakurei aprovecho para hablar con Shaka, sabiendo que de ahora en adelante, su nieto tendría otro lugar a donde ir, pues esa noche y las demás… Ya no lo vera en su hogar, sino en el que formara con este rubio. Por lo tanto debe dejarle en claro a ese joven, que se lleva lo más valioso e importante de su vida, por lo cual, cuidarlo con todo su corazón es su nuevo deber.

Claro que Shaka, sin falta protegerá a su Mu con su vida misma si llegara a ser necesario.

Se da cuenta de que perderse en aquella montaña dé su mundo, fue lo mejor que le ha pasado, ya que gracias a esto conoció a donde su corazón pertenece.

Música con instrumentos típicos, bailes tradicionales, comida deliciosa, todo sin duda fue sencillamente hermoso, discreto y fabuloso, pero… Ya es el momento en que todo acabe… Y la joven pareja se debe retirar a su nuevo hogar…

Ese caminar será a solas, entre ambos, hasta llegar a su nuevo y pequeño hogar. Shaka tomara la mano de Mu, y lo guiara en cada uno de sus pasos hacia donde la cabaña que hizo para él se encuentra…

El pelilila va confiado, sujetando esa cálida mano, sintiéndose tan seguro entre la noche, pasando por algunas zonas entre arbustos, que conoce tan bien de día. Sin embargo es diferente este caminar… Van juntos, sitiándose tan acompañados y a salvos a lado de quien aman.

La noche, la luna, y estrellas son los testigos de que ambos van a donde su amor se fundirá en un inmenso calor que ninguno podrá extinguir, solo controlar porque sus sentimientos son tan poderosos que solo basto poco tiempo para darse cuenta que se necesitan tanto.

Ninguno se cansa de decirle al otro su gran amor, que es maravillosa esta vida a su lado, que todo es perfecto y que serán tan felices juntos.

Sonrisas, suaves caricias y besos, sus corazones laten tan rápido que se puede sentir contra su pecho…

Sonrojados y ansiosos por solo ver que tan maravillosa y perfecta es la cabaña que es su nuevo hogar…

Y justo al llegar, el presentarla como su hogar, Shaka se fija en la expresión del Lemuriano, el saber su opinión y conocer la reacción que tendrá al verla de frente.

Sus ojos brillan, su boquita se abre en son de sorpresa, se sonroja, y lleva su mano derecha hacia su pecho, deslumbrado por que ese hogar, es suyo…

-Qué bonita- Puede ver que aunque sea sencilla, es muy acogedora por fuera…

Madera muy bien lijada, acomodados cada troncos de manera meticulosa, bueno lo mejor que pudo el rubio, claro la esta, la puerta del mismo macizo material, pero es fácil de mover por las bisagras que hizo desde cero, a como su mente le dio entendimiento de realizar, algunas ventanas, cubiertas por telas frescas, para proteger de cualquier vista indiscreta.

A un lado el jardín que preparo con cultivos para el consumo a futuro, e igual algunas flores que fue capaz de plantar a escondidas pues sabe que Mu las adora…

Cerca de un rio, todo para que tengan las mejores comodidades que su mundo les puede otorgar.

-¿Te gusta de verdad?- Pregunta, sujetando esa delicada mano, sintiéndose agradecido de que él disfrute lo que ha hecho solo para él.

-Sí, es muy linda, es… Simplemente perfecta…- Mira al rubio, con sus mejillas ruborizadas, y una encantadora sonrisa en sus labios –Porque la hiciste para nosotros- Encantado se encuentra el corazón del Lemuriano por tan hermoso detalle.

-La hice por ti y para ti… Y…- Se sonroja de solo pensarlo, pero respira hondo y se siente calmado para hablar con toda la sinceridad posible –Para nuestra familia…- Se atreve de manera rápida a robar un beso de los labios de su ahora marido.

Ya no puede esperar para darle miles de besos, todos los posibles, pues necesita que Mu sea solo suyo, aunque debe esperar un momento más…

Al igual como tuvo que esperar para darle esos dulces besos hasta ahora, todo para que el respeto por la cultura y tradición de los Lemurianos no se viera afectada por sus deseo mundanos, además  Mu es a quien más respeta y ama en este mundo, el suyo y en los que siguen.

Se sorprende por ese beso tan suave y tímido, notando el contraste y contexto que lleva, un deseo e ilusión que sin duda también necesita realizar.

Sabe muy bien lo que sigue después de la ceremonia que bendice su unión, y lo acepta tan gustoso. Su cuerpo y corazón solo deben pertenecerles al rubio hombre que lo sujeta y mira con una inmensa ternura y cierta lujuria mezclada.

-Nuestra familia…- No puede resistir ver esos intensos zafiros, sonrojarse por ellos, sonreírle, los nervios invaden su cuerpo, asiente, y decidido abraza al Hindú de manera fugaz, pues esta tan ansioso por lo que continuara –Si… Eso me encantaría… Digo, me gusta la idea…- Su lengua lo traiciona, pero está bien, pues está al lado de quién más confía.

No pudo corresponder ese abrazo, pues sucedió tan rápido que su reacción fue lenta a comparación, aun así nada puede evitar que le deposite un beso en la frente, para seguir guiándolo hasta llegar a la puerta…

Tal vez ahora mismo no pueda ver por completo los detalles externos de su nuevo hogar, sobre todo la bonita cosecha que tendrán, ya que la capacidad de esa tierra fértil dará frutos muy pronto. Al igual que ese amor que necesita consumarse.

El estar delante de esa linda y artesanal puerta de madera, claro que tiene detalles que necesitan perfeccionarse, pero son mínimos, es linda, se puede abrir fácilmente, pero igual contiene su propia seguridad, una pequeña maña que el mismo rubio entiende y deberá enseñar a su ahora esposo.

La puerta es abierta, pero Shaka no dejara que Mu se adentre de una manera tan simple…

-¿Puedo hacer algo de mi mundo?- Le pide permiso, sin soltar la izquierda del pelilila.

Ladea su cabeza levemente, confundió, pero mostrando una linda y tenue sonrisa de nervios, con tintes rojizos en sus mejillas –Claro que si- Sabe que nada malo vendrá de parte de su amado.

Tiene luz verde para lo que desea hacer. Sabe lo que un matrimonio significa en su mundo y los procesos son casi similares en algunos aspectos… Dar a entender a la familia que es capaz de proporcionar alimentó, bienestar, estabilidad económica y emocional…. Pero las tradiciones de los Lemurianos son aún más especiales, pues estas demuestran que estas dispuestos a hacer todo por tu persona amada, mucho más de lo que el dinero puede comprar.

Siendo esto último algo de suma importancia.

Suelta esa gentil mano de forma rápida, ahora ya teniendo más fuerzas que antes, carga al pelilila, al estilo conocido como princesa, donde su brazo izquierdo pasa por debajo de las piernas del Lemuriano y la diestra sujeta con firmeza la espalda hasta tocar el hombro de su amado.

-¡¡¡¿QUÉ HACES?!!!- Se asusta un poco por esto, sujetándose con todas sus fuerzas del cuello del rubio, sintiéndose algo temeroso por la sorpresa y rapidez de Shaka.

Estos repentinos impulsos del pelilila por sujetarse más fuerte lo destantea un poco, sin embargo ahora es lo suficientemente fuerte para sostener con firmeza a quien ama con todo su corazón, pues jamás permitirá que caiga –Es… Algo que se hace en mi mundo- Intenta explicar, mientras pasa con sumo cuidado por el portal de madera –Una costumbre… De quien tenga… Bueno, el papel de novio o marido… Cargar a quien tiene el…- No desea decir como tal mujer, pues su Mu no es una, pero se puede mencionar que tendrá el papel de dar vida, como él de ser quien reciba al rubio en su interior, muy posiblemente esta noche.

-No sería novia… Si no… Tu esposo- Sonríe, intentando entender algo de esa rara costumbre, mientras siente como su cuerpo se pega al del rubio y escucha ese corazón latir a mil por hora –Te amo Shaka, y… Me gustan tus curiosas tradiciones…-

Le parece lindo ese hecho, aunque le gustaría saber por qué es esto, no lo entiende mucho, pero le parece agradable, y sumamente bonito…

Sin embargo, no puede preguntar nada, pues… Al entrar, observa la cabaña en su esplendor, lo que por fuera no se llegaba a ver… Quedando por completo con la boca abierta.

Shaka no se sorprende en lo más mínimo, ya que él ha sido la mente que tramo esto, por concejo y tradición.

-Espero que te guste…- Le susurra, mientras se acercan hacia donde está el espectáculo mayor, y a su vez baja con sumo cuidado el cuerpo del pelilila, dejándolo de pie delante de todo.

-Son… Pétalos de Saussurea Obvllata- Su sorpresa es grande, elevando sus manitas hasta su boca, sujetando las amplias manga de sus prendas, pues la imagen tan linda de verlos esparcidos por todo el piso, principalmente donde pieles suaves de color blanco y cafés se encuentran, siendo un lecho bastante amplio y cómodo para que dos persona puedan descansar plácidamente.

El calor y sonrojo sube por su rostro y cuerpo, casi como si un vapor curioso saliera por su cabeza, pues conoce el significado de esta flor, y el papel tan importante que juega en esta noche especial.

-Tu abuelo me dijo que debía hacer esto, al igual que dejar velas encendidas alrededor… Claro que en zonas altas de la cabaña alejadas de cualquier objeto que pueda provocar un incendio- Da una breve explicación, sintiéndose igual de avergonzado que el Lemuriano, pues también sería su primera vez en el sentido sexual, por lo cual todo debe ser perfecto y único…  Las velas protegidas por lámparas de metal, para intensificar una atmosfera romántica y sin duda dedicada a su función.

El apasionado color de aquellas llamas, ese calor que ilumina la cabaña tenuemente, notando que aunque sea sencilla y no se tenga casi nada, es suficiente para comenzar, para iniciar de cero una vida a lado de la persona que ama.

-¿Por eso te despareciste unos momentos?- Le pregunta, girándose para ver los hermosos zafiros, tan sonriente, siendo levemente iluminado por la luz que se cuela de las velas.

-Perdóname por eso…- Murmura esto al tener tan cerca al precioso Lemuriano de sus sueños, dando también unos pequeños pasos hacia su lado –Prometo no volver a dejarte solo nunca más…-

-Está bien… Me gusta esta sorpresa mucho… Todas… Me gustan…- Sabe que no debe bajar la cabeza, solo desvía la mirada de su esposo un poco y sonríe con inocente vergüenza y timidez. Sus manos juegan nerviosamente con los dedos, está ansioso por lo que iniciará.

-Hare lo que sea por siempre hacerte feliz, Mu… Te amo tanto que no me importa nada más que ver tu preciosa sonrisa todos los días de mi vida…- Su corazón ya no soporta tenerlo lejos, sus manos necesitan sentirlo, abrazar ese tibio y frágil cuerpo. Realiza dicha acción, atrayéndolo a él, para que con solo un beso todo pueda iniciar.

-¿Shaka?- Pronuncia aquel nombre en son de duda, sorprendido por sus acciones, pero aceptando todo, porque igual es su deseo.

-Mu… ¿Sabes que sucederá esta noche?- Le pregunta primero pues considera a Mu un ser tan inocente y puro, sin ninguna pisca de perversión o malicia, que teme corromperlo por sus deseos codiciosos.

Abrazado contra el pecho del rubio, eleva su vista un poco para ver el rostro del Hindú, nota el rojo en esas mejillas, asiente, con una tenue sonrisa, sus largas pestañas lo hacen lucir más hermoso, tanto que lo ayudan a ocultar sus ojos un poco –Si, seré tuyo y está bien… Quiero serlo…- Se atreve también a indicar sus mayores deseos, pues contiene muchos de ellos, solo que no creía que fuera importante decirlos abiertamente –Solo… Te pido…- Baja su mirada un poco, no sabe si sea correcto hacerlo, pero sabe que debe confiar en él ciegamente –Se gentil… Tengo un poco de miedo, pero… Sé que no me lastimaras- Alza su mirar apenado, posando sus manos sobre el pecho del rubio.

Deja de sujetarlo con una mano, rodea esa estrecha cintura con la derecha, para acariciar ese precioso rostro con la zurda, y así pueda sentir una parte de su amor –Jamás haría algo para herirte, primero preferiría morir antes de que tu sufras…- Le habla desde el corazón, decidido y preocupado porque esta noche pueda no ser tan perfecta como la planeo –Mu… Sí sientes que no estás listo para esto… Podemos… Esperar…- Le propone, pues puede sentir como tiembla el Lemuriano entre sus manos.

Rápidamente niega con la cabeza, acercándose más a ese rostro que siempre vera a su lado –No, Shaka… No es necesario esperar… Yo… Deseo ser tuyo completamente…- Esta tan decidido en sus palabras, que las esmeraldas se fijan en los delgados labios del contrario, para por primera vez, ser él quien inicie algo tan atrevido entre ambos.

Un beso, uno que el mismo Lemuriano roba, en donde no tiene pudor alguno para posar sus labios e intentar abrir tanto su boca como la ajena, y si su lengua invité a la otra a entrar en contacto…

Shaka siente este tacto tan sorprendente, pues… Con solo pedirlo de esta manera su ahora esposo, lo obedece, su boca sigue las ordenes. Los zafiros se abren de par en par por la sorpresa, pero… A la vez esta tan fascinado por que Mu le esté diciendo sin palabra alguna que lo desea también… Lo hace sumamente feliz…

Vuelve a rodear ese delicado cuerpo con ambas manos, atrayéndolo para profundizar lo más posible ese beso.

Ambos cierran sus ojos, para por fin iniciar la última parte de su matrimonio por esta noche…

Ese beso, es completamente diferente a los que se habían dado poco antes, sube la temperatura de a poco, entregándose a un sabor, a un placer que nunca han conocido antes…

Es verdaderamente embriagante un solo beso, sus lenguas exploran la cavidad bucal del otro, Mu poco a poco empieza a sentir cohibido por esta nueva experiencia, pues siente como su propio cuerpo reacciona, sus manos tiemblan levemente, casi queriendo retraerlas a su pecho, separarse de ese instante mágica… Pero, Shaka no se lo va a permitir.

El rubio invade esa boca que se vuelve pequeña por los nervios, le excita saber que Mu es suyo, que lo será de muchas más formas posibles, no es capaz de expresar todas las emociones y sensaciones que su cuerpo tiene en este momento, pero lo único que entiende es que deberá hacer sentir muy bien al Lemuriano de su corazón.

La mano derecha sigue rodeando la estrecha cintura, atrayéndolo tanto a él como sea posible, que sienta como su ser reacciona ante él… La izquierda primero sujeta con cuidado la nuca del pelilila, sintiendo los sedosos cabellos, que con el simple tacto le dice que es lo más seductor en este momento, sabe que necesita y pide más sentirlo.

Rompen apenas el beso por la falta de aire, pero… Al estar ambos ya entregados a estas nuevas sensaciones, en el momento de separarse, sus labios siguen unidos por un hilo de saliva. El calor que emana de sus cuerpos se puede ver con el jadeo que expiden, los zafiros miran esas lindas esmeraldas, ambos hipnotizados ya por el otro…

Shaka es quien ahora vuelve a tomar esos labios, sujetando con tenue fuerza la mandíbula del Lemuriano, para darle tantos besos como le sean posibles, cada uno más profundo y necesitado que el anterior…

El pelilila, también lo está necesitando, la timidez sigue en sus mejillas, pero en su cuerpo está cada vez desvaneciéndose al atreverse a acercarse tanto que sus cuerpos se pegan y rozan sus miembros erectos que aún están bajo las prendas ceremoniales.

Es excitante y estimulante como se siente esto, ninguno antes había experimentado algo como eso, pero esta noche existirá más que solo besos y caricias, sus anatomías aun cubiertas serán expuestas para la persona que aman.

La necesidad de tomar su piel, de sentirlo tan cerca, le exige que haga el siguiente paso, el necesario para que Mu le pertenezca por completo, como él lo será del Lemuriano.

Con cuidado, de manera calmada y gentil, la mano que sujetaba aquel delicado mentón, se desliza hasta la cintura, justamente al nivel donde la abertura de las telas blancas, para que sea fácil quitarlas en este momento…

Las va descorriendo con cuidado, subiéndolas, para que ese pálido cuerpo se vaya mostrando.

Un jadeo contra su boca siente, el beso se rompe, al sentir la mano del rubio ir tocando su piel directamente, sus esmeraldas dejan escapar lágrimas, por la emoción que siente, ya que no es posible resistirse en lo más mínimo.

-Aaaaah… Sha… Ka…- La boca ligeramente abierta, mira hacia lo zafiros, su corazón late demasiado rápido, sus manos sujetan esos brazos, pero no para impedir que siga, sino para sostenerse por la enorme sensación que invade su cuerpo.

-Está bien, Mu… Yo seré gentil contigo… Te amo mucho y… No voy a herirte…- Le regala un beso en la frente al Lemuriano, para reconfortarlo y tranquilizarlo, de que nada malo le ocurrirá, siempre procurara su bienestar antes que cualquier otra cosa. Su mano se sigue desliando, elevando esas prendas, para de a poco descubrir el cuerpo más hermoso de todos.

Eleva sus brazos, ser ayudado al desvestirse es muy extraño, pero reconfortable, su corazón se acalora al igual que su cuerpo aunque este sin prenda alguna. Ya solo una tela cubre su parte intima, dejando ver su miembro erecto, lastimándole un poco por el roce y la humedad.

La primera reacción del joven de tikas, es cubrir su pecho… Le simple idea de que alguien pueda ver sus pezones rosas es vergonzoso, a pesar de que Shaka sea quien lo esté apreciando, su ahora marido, su amado y adorado rubio…

Solo queda en su cuerpo las sandalias y la prenda que cubre su hombría, que igual en algún punto serán desprendidas de él, pero…

El hombre rubio que no pertenencia antes a este mundo, se ha quedado anonadado por esa inocente belleza, tan pura, tan suave, y exquisita, un joven que jamás pensó que pudiera ser así de hermoso, que despertara en él los más bajos instintos, pero… Es todo porque se trata de Mu, porque es él quien está delante suyo, desnudo, sonrojado, avergonzado, tan seductor como lindo.

¿De verdad este hecho es una realidad?

Un sueño en donde un precioso joven, un ángel, un ser mítico, será suyo…

¿Lo puede tocar de esta manera?

¿Lo puede mirar sin car en el pecado de la lujaría?

Sus zafiros brillan, destellando el deseo de tocar, de ver más allá y sentir todo lo que pueda.

-Mu… Eres tan hermoso…- No puede evitar decir esto, dejando esas prendas en el suelo, acercándose para volver a rodear con sus brazos ese delicado cuerpo.

-No digas eso… Es muy vergonzoso…- Cierra sus ojos, intentando a la vez cubrir su rostro con sus manos por la enorme pena que siente, pero al ser abrazado por su encantador rubio, lo empieza a calmar un poco.

-No puedo evitarlo, me siento feliz de verte, de saber que… Me amas, y que eres solo mío…- Eleva ese rostro, quiere verlo por más tiempo, nota que está muy sonrojado, que tiembla, necesita trasmitirle que todo estará bien, que nada malo ocurrirá –Gracias por elegirme a mi…- Le agradece su suerte… Porque sí el Lemuriano jamás le hubiera correspondido, posiblemente su vida sería completamente un infierno.

Escucha aquellas dulces palabras, siente como los dedos de su rubio acarician su espalda, bajando por la curvatura y rodeando la cintura, son grandiosas esas simples sensaciones, las cuales erizan su piel –Gracias a ti, por ser lindo conmigo…- No sabe cómo expresar lo que en su corazón se encierra, pero se deja guiar de nuevo, se supone que eso está bien.

Otro beso más, igual de apasionado, pero esta vez, sus pasos se van dirigiendo con cuidado a su objetivo, Shaka cuida de que Mu no tropiece… Pues se van encaminando hacia el lecho que compartirán en esta primera pero no última noche…

Poco a poco, sobre los pétalos blancos con tonos levemente rosas pastel en la base, y una línea de un tono rojizo en el contorno… Esa flor es tan escasa, siendo utilizada como medicina para los Lemurianos, florece cada cierto tiempo, principalmente en la noche… Solo algunos son conocedores de su rotación de lunas para encontrarla.

En el caso del significado en el matrimonio, es un símbolo para que la primera noche de ambos jóvenes enamorados que estén bendecidos por los dioses… Experimenten un profundo y excitante amor, en donde puede que el secreto mítico de los Lemurianos para concebir se dé al solo oler su débil aroma que aún se encuentra impregnada en los pétalos…

El cuerpo de Mu es colocado sobre esas pieles suaves, sobre los pétalos que tocan su ser. Claramente para Shaka, aquellas muestras de flores no son comparación en suavidad para Mu…

Recostado, inocente, por completo a su merced, lo mira con devoción, con profundos deseos, y un inmenso amor… Solo quiere tocarlo… Probar el dulce sabor que debe tener por cada centímetro de su piel.

Sigue protegiendo su pecho, sintiendo como su cuerpo se eriza, por la simple vista de aquellos zafiros, avergonzado tiembla, reacciona ante todo lo que esta noche significara, y es sumamente excitante para él.

Muerde sus labios, ya no puede resistir por mucho tiempo…

Su desesperación es enorme, actúa por mero instinto… Sus manos van desprendiendo cada una de sus prendas para quedar en las mismas condiciones que el Lemuriano, para que así no este apenado por estar desnudo, lo calmara como sea posible.

Así como el rubio quedo impactado por la belleza de su esposo, Mu queda encantado y casi babeando por el cuerpo del hombre a su lado, recuerda bien que al principio, no por que quiso, sino para ayudarlo, debió ver su cuerpo semidesnudo… Sin embargo, en el tiempo que ha trabajado junto a él la tierra los laves domésticos, las pruebas para el sagrado matrimonio y demás… Lo ha hecho trabajar muy bien el físico… Puede que estén casi en las mismas condiciones de musculatura ahora.

Sin embargo, la diferencia de tener la capacidad de dar vida, tiende a hacer que su anatomía sea un poco más suave que la del rubio, solo por ese mero detalle en sí.

-Espero… Te parezca atractivo…- También está algo cohibido por mostrarse por completo desnudo, agregando que el calor lo inunda su cuerpo peligrosamente.

-Si… Si… Mu… Cho...- Los labios del Lemuriano son mordidos por sí mismo, se siente extasiado por verlo de esta manera, tan caliente, con una cierta humedad en su parte baja, está completamente abrigado por su excitación…

Tímidamente, Mu alza su mano izquierda en dirección del rubio que aún sigue de pie, para dedicarle una sonrisa, mientras la derecha cubre delicadamente su pecho –Por favor… Ven, acompáñeme…- Lo invita a ir con él, para estar en esa cama sencilla a su lado.

Tiene luz verde, puede llegar hasta el final, es posible que todo lo que ha estado imaginado ocurra en esta mágica noche…

-Como ordene, mi amado Mu…- Toma la mano del Lemuriano, para darle un beso, justamente en donde el anillo que le hizo se encuentra, y así uniéndose a él en ese lecho suave y cómodo.

Entre besos que van subiendo en intensidad, como los toques en sus cuerpos que ya no contienen pudor alguno, sino solo deseo, lujaría, amor y excitación…

Las sandalias quedaron fuera de sus pies, al igual que esas prendas interiores, dejan ver la anatomía por completo de ambos, esos miembros duros y viriles, lo cuales gotean y se rozan por los profundos besos que se dan cada uno y la cercanía que no rompen.

Shaka no puede tener suficiente de esa pequeña y suave boca, la necesita, quiere probar más ese delicioso dulce exótico que le pertenece ahora…

Sus manos tocan la piel de manera delicada, no quiere lastimarlo por nada del mundo. Con suaves y lentos círculos, acaricia el pezón derecho, provocando que se endurezca, y de paso escuchar sonoros gemidos de placer, que le indican gozo por parte del pelilila.

Se pude decir que a simple vista ambos son torpes e inocentes, saben que para entregarse mutuamente lo que deben hacer, por lo cual no conocen más juegos previos que no sean los besos y caricias. Ninguno se había interesado tanto en este tema, antes de conocer a la persona que despertó un deseo nunca antes conocido para ellos.

Tal vez los pétalos de esa rara y curiosa flor, si estén haciendo su trabajo como un afrodisiaco natural, pero también es el mismo amor que los envuelve en el placer único de tenerse por primera vez.

Después de disfrutar un sin de besos, sus bocas se alejan, rompiendo un hilo de saliva, Shaka jadea roncamente, mirando con ese brillo único a su adorado Lemuriano, tocándolo, sus manos y dedos no se sienten dignos de un ser tan puro como lo es él, pero sabe que no puede, ni quiere dar marcha atrás…

-Te amo… Tanto Mu… Como no tienes una idea…- Jadea sus palabras, acariciando ese precioso rostro.

-Igual yo, Shaka… Te amo con todo mi corazón… Quiero… Ser tuyo por siempre…- Los brazos del más joven son elevadas y flexionadas por los codos, quedando al nivel de su cabeza, dejando que el rubio haga lo que desee con él.

Una sonrisa de lujuria y felicidad en esos labios se dibuja, mirando con suma ternura a ese hermoso ser a su lado –Por siempre seremos uno, Mu… Yo igual te voy a pertenecer…- Un delicado beso en la frente le deposita, lo trata con suma ternura, como si fuera una delicada figura de cristal, y así seguirá siendo de ahora en más.

Explora aún más ese cuerpo, va dejando un camino de besos desde la punta de la barbilla del Lemuriano, pasando por el cuello, pecho, para bajar por su vientre plano…

En donde entiende, que en ese lugar, en ese vientre, llegara a ver una pequeña vida de ambos, al momento de censurar su amor, tal vez no esta noche, ni la siguiente, pero si en el futuro…

Bueno… La protección conocida como tal de su mundo, no existe como tal en este lugar, los preservativos y métodos anticonceptivos no son algo que se conozca como tal, la mujeres son las únicas que pueden tener un cuidado más de esto, pues existe el conocer los días fértiles e infértiles, tienen esa enorme ventaja por sobre los hombres que igual pueden dar vida. Por ende existe la posibilidad de que esos dos jóvenes no solo lleguen a tener un hijo, sino varios, pero… Eso solo el tiempo lo dirá.

Reacciona arqueando su espalda, su voz de excitación exclama el enorme placer que tiene, puede sentir como su marido se detiene en su vientre, para dedicarle un sinfín de besos y caricias…

Los gemidos tímidos de Mu son música para los oídos del rubio, el mayor éxtasis que existe en este planeta es escuchar a su esposo pronunciar su nombre con esa linda voz, que le indica que está disfrutando lo que le hace.

Continua, su boca baja… Y ve el miembro del Lemuriano, esta duro, es muy sensible… Lo toma cuidado con sus manos, le parece bastante lindo. Al comparar a ambos, se nota un poco la diferencia por sus edades, no es mucha, pero… Es adorable a su ver…

Simplemente lo acaricia, lo toca con cuidado, quiere darle una experiencia única…

Una donde le enseña más de lo que puede saber…

Mu se estremece por ese toque, el que su pene sea acariciado de esa forma, de arriba abajo, sus piernas por instinto se desean cruzar, pero Shaka no se lo permite, prefiere que estén abiertas ante él…

Esta perdido por esa hermosa imagen de seducción plena.

-Tranquilo… Es normal, que desee hacerte sentir bien… Te estoy masturbando…- Le explica suavemente, mientras sigue su ritmo de arriba abajo, atento a las reacciones de placer del Lemuriano.

-Pero… Oohgmmm… Se… Nngg… Se siente… Muy… Ahhg… Raro…- Es la primera vez que su cuerpo es tocado de esta forma, su pene jamás había sentido algo así, ni siquiera por él mismo, demasiado inocente, pero ardiente…

-Te sentirás bien… Además…- Baja su mano izquierda… Buscando el punto por donde profanara ese inocente cuerpo, necesita que esté listo. Cuando al fin lo encuentra, puede sentirlo tan húmedo, lo cual le sorprende un poco, pero no deja que eso le impida seguir sus instintos carnales. -Debo prepararte bien, si no lo haces… Te podría lastimar y no quiero eso…- Entrecortado habla, está lleno de deseos, que ya no puede soportarlo.

El tiempo ha avanzado, aun no consuman su amor, pues sienten que deben ir de manera cautelosa, delicada, para que ninguno se asuste, ni lastime, debe ser un momento completamente placentero para ambos

Sin embargo, en el instante que Shaka acaricia con su dedo el ano del Lemuriano, en donde se va moviendo en círculos para dilatarlo…

Mu cierra sus ojos... Arqueando su espalda, para incorporarse un poco, y negar con la cabeza –No, espera... No lo hagas…- Su voz sale un poco firme, casi en un grito ahogado, quiere impedir que esto así sigua.

Cosa que sorprende al Hindú, que lo deja completamente estático, pensando que tal vez está yendo demasiado rápido –Mu… Lo siento, si no…- Apenado, piensa que en efecto se ha dejado llevar demasiado por su necesidad de ese delicado cuerpo… Suspira, retirando su mano de esa entrada y del pene Lemuriano –Perdóname, estoy yendo demasiado rápido… Debí pensar que… Entender, que no debo ir tan rápido… Yo…-

-No, no es eso- Niega con la cabeza rápidamente, sentándose sobre las pieles y mira al rubio, ambos están sudados, avergonzados y muy rojos de las mejillas, como el hecho que sus pechos se elevan y bajan por la sobreexcitación –Es que…- Desvía su mirada, posando una mano sobre su boca, pues no sabe cómo continuar pero entiendo que debe expresar su sentir –No quiero… Que tu dedo sea… Lo… Pri… Primero… Que… Entre…- Baja su vista, por la enorme vergüenza, aprieta un poco sus piernas, sin lastimarse, solo pensando que fue demasiado rápido en su declaración.

Si, estaba antes rojo, ahora se puso mucho peor, casi al grado del fuego por esas dulces palabras del Lemuriano, sus manos quedando a sus laterales, sobre las pieles arrodillado, con las piernas abiertas, para su mayor apoyo –Pero… Si no… Lo hago… Te podría… Herir…- Intenta dar su explicación, sabe que esa parte no está hecha para ser penetrada o que al menos en su mundo no es así.

-Está bien…- Mira directamente ese rostro, acercándose a él, para posar sus manos sobre el pecho del rubio, sintiéndose tan avergonzado por su atrevimiento, pero no tiene de otra, quiere hacerle entender lo que siente y necesita de él –Mi cuerpo está preparado para hacerlo, para recibirte… Sentirte en mi…- Le deja en claro lo que significa este hecho, su parte baja esta humedecida, los fluido salen por la excitación y para preparar la zona para hacer la penetración mucho más cómoda y llevadera. Entiende la precaución del rubio, quiere demostrarle que confía en él y que todo estará bien de esa forma –Sigue… Quiero que lo hagamos, quiero sentirte en mi interior- Seductoramente baja su mano izquierda hacia su vientre bajo cerca de su pene –Quiero que mi cuerpo sea solo tuyo, y tú mío… Por favor… No tengas miedo, no me vas a herir… Porque sé que nunca lo harás…- Una sonrisa, adornada con gotas de sudor, y perlas de sal cayendo de sus pestañas, feliz porque su amado sea dulce con él y tan atento, pero igual quiere poner su deseo primero.

Toma la mano que está sobre su pecho, e igual sigue a la que esta sobe ese vientre bajo, ambas extremidades juntas, denotando que están sumamente unidos no solo por el profundo amor que se tienen, sino… Por la enorme felicidad que tienen ambos en su ser.

-Te juro que te hare muy feliz, y que esta noche será la mejor de todas… Para los dos…- Un beso fugaz en sus labios, una sonrisa por parte de ambos al hacerlo, otro de nuevo en los labios, para que seguir expresando sonrisas rápidas, hasta que… De manera lenta y tranquila, ambos cuerpos se recuesten nuevamente sobre las pieles, y esta vez… Para continuar su deseo carnal…

Con cuidado separa esas blancas y torneadas piernas, que se dirigen a sus laterales, coloca su miembro en la rosada entrada virginal… Se siente demasiado caliente y excitado, respira hondo y profundo, sabe que de este punto no existirá macha atrás…

Su pelvis va contra el pelilila, empujando en su interior el miembro del rubio, que es capaz de profanar un templo sagrado, que vuelve suyo en el instante que lo penetra…

Ambos sienten el placer del sexo, de hacer el amor por primera vez… Una sensación única y excitando, donde no cabe nada más que su profundo deseo de ser uno.

Está tan apretado ese interior, es normal, nunca nada había tocado esa zona íntima…

La espalda del Lemuriano se arquea una vez más, unas lágrimas de dolor y placer se escapan de sus ojos que cierra después de la sorpresa de esa grandiosa sensación, cayendo hacia sus cabellos lilas que han quedado completamente desordenados, dándole un toque único y exquisito…

Sus manos se aferran a las pieles, es demasiado bueno, su interior se siente lleno solo con recibir el duro pene de su pareja…

Shaka ve la expresión de Mu, se siente preocupado, por haber sido tan bruto de meterla de una –Lo… Ohhh… O siento… Mu… ¿Estas… Bien?- Pregunta con angustia… Aunque, su cuerpo necesita moverse, no lo hará hasta que crea está listo su amante.

Sus brazos estirados, apoyándose igual en las pieles, para poder tener control de sus movimientos, tan cerca de ese rostro, de la piel del Lemuriano.

-Si… Nngh Estoy bien… Solo… Que… Eres… Más… Grande de lo que… Pese…- Pronuncia su declaración, mientras se aferra a las pieles, pues es un éxtasis nunca antes experimentado y sabe que puede ser peligroso para él, pero poco le importa esto.

No sabe si debe tomar las palabras del pelilila como un halago o no, pero… Entiende que puede ser un poco atrevido en esto, inclinándose sobre él, para introducirse un poco más en ese interior…

-Aaaaahh… Sha… Ka… Nghh…- Lo siente más profundo de su ser, significa que aún no era todo, sus lágrimas escurren de sus ojos por el enorme placer, su saliva sale de las comisuras de su boca –Es… Pera…-

-Creo que… Debo mostrarte que soy… Más grande de lo que esperabas- Una sonrisa de triunfo se dibuja en el Hindú, al ver disfrutar de esta manera a su amado es completamente sublime –Argggh, ¿Puedo… Moverme?- Le pide autorización, como todo en lo que piensa realizar de ahora en adelante y para siempre, Mu tendrá la opción de escoger lo que desee y Shaka siempre se lo respetará.

Esta aprisionado, su cuerpo contra la cama improvisada y el cuerpo desnudo de su ahora marido, es fascinante y agradable, sabe que no tiene a donde escapar y solo poder seguir adelante en el acto del placer de su primera vez.

-Si…- Sonríe ante este hecho, con las mejillas rojas, estira sus brazos hacia el frente, para que el rubio lo abrace…

Con la aprobación, Shaka no soporta más y corresponde el abrazo, pasa sus brazos por debajo de los de Mu, para que esté lo sujete la espalda y mientras el rubio pueda apoyarse por completo en la cama mientras sujeta a su amado y sigue penetrándolo…

Las piernas del Lemuriano se cruzan por la cadera del Hindú, por instinto, por comodidad y necesidad de sentirse tan unidos como sea posible…

Las penetraciones son profundas y agradables, son lentas pero intensas a la vez, completamente sublime, se siente abrumado por tan placenteras sensaciones que invaden su cuerpo…

El sudor de ambos se combinan en sus pieles, los gemidos y jadeos se vuelven la música de esta noche, para perderse en la fascinación de sus cuerpos sin duda se complementan tan bien… Cada estocada en ese interior se va haciendo profunda, es excitante sentirse penetrado por el rubio, que no le da tregua alguna, pero no lo hiere tampoco, no lastima más allá de lo que una primera vez significa, lo inunda en placer, para seguir provocándolo…

No deben ir rápido, solo disfrutar de su amor, de entregare, de volverse uno, como lo desearon tanto… La noche será sin duda larga para ambos, por lo tanto disfrutaran todo el placer posible.

Los fluidos escurren… Se combinan en el interior de Mu…

-Shaka… Espera… Es… Ooh… No… Yo…- Necesita advertir que su cuerpo esta sensible, que tendrá pronto su eyaculación, que se vendrá pronto. Siente que no resistirá al ser sobre estimulado… -Nngh… Necesito… Algo… Va… A salir algo… Yo…- Muestra su inocencia e inmadurez en estos temas… Aferrándose más a esa espalda, sintiendo que sus uñas se encajan en la piel de aquel hombre que adora.

-Es… Normal… Agrhhh… Que… Sientas… Algo que salga de tu pene… No pasara nada…- Se lo intenta explicar, pues está concentrado en seguir penetrando a ese joven, que necesita seguir haciendo suyo…

-Pero… Creo que… Anggg… Ngghht…- No pudo soportar más, su cabeza es echada para atrás, aferrándose tanto al rubio como puede, experimenta su primera venida, que se queda entre ambos abdómenes… No sabe que se podía sentir así de bien, pero ha sido maravilloso sin duda…

El líquido caliente que ha salido del Lemuriano, lo siente en su piel y es feliz por saber que logro hacer que llegara a su clímax, solo con penetrarlo, sin tocar más allá que una masturbación previa…

Las embestidas se han vuelto un poco más rápidas, porque igual siente que está en su límite, se aferra más a ese delicado cuerpo… Se concentra solo para seguir provocándole todo el placer necesario, ya sabe que cuando su última estocada se dé, terminara en ese cálido interior….

Pero, ¿Debería hacerlo?

-Mu… ¿Estas bien, con que… Mngg, corra dentro?- Cada cosa que realiza, que cree puede molestar al pelilila, le pide su autorización, así es como Shaka actuaría en cualquier momento, es atento, es noble, amoroso y sumamente cariñoso, pero solo puede llegar hacer así con Mu.

-Si…- Su voz se ha vuelto más suave, un poco más relajada, sus esmeraldas están llenas de placer, el brillo particular que están dando es curioso, envuelto en el deseo que Shaka le ha proporcionado.

Sabe que ese tono de voz es diferente a lo normal, pero no le presta tanta atención, sino que desea terminar por completo en ese apretado ano, para poder derramar su semilla dentro de Mu y así abrazarlo, llenarlo de besos sin fin.

Una estocada más, dos o tres y… Sucede, el clímax del rubio llena al pelilila, Shaka se aferra a ese delicado cuerpo e introduce más profundamente su pene, para que su semen sea derramado por completo…

Las respiraciones de ambos están agitadas, aunque la de Shaka es más profunda al igual que su jadeo, y sus ojos llenos de placer…

Siente una corrida llena de placer, tiene el cuerpo de su amado para complacerse e igual complacerlo a él… Se levanta un poco para ver ese ruborizado rostro… Para depositarle un beso en la frente y sonreírle…

-Mu, te amo…- No puede evitar decirle sus más sinceros sentimientos a cada rato.

-También… Te amo…- Le susurra, el tono sigue siendo sensual y diferente… Las lágrimas caen por el enorme placer, el sudor se ha combinado en sus pieles, siendo manchados por los fluidos de cada uno.

No desea salir, pero sabe que es el momento… Con cuidado lo hace, pues quiere abrazar de manera diferente a su amado, pero… En cuanto su miembro está afuera de esa entrada que profano, de donde escurre parte de su semen… Se desea acomodar, para recostarse a un lado del pelilila para reconfortarlo…

Mu parece ya no ser por completo él mismo… Tembloroso por haber sido penetrado, sus caderas y cintura están algo adoloridas, pero el deseo aun no… De inmediato se pone en cuatro, su cara directamente en el pene manchado de semen… Sus esmeraldas brillan con lujuria, guiándose por sus instintos primitivos, lo introduce en su boca…

La sorpresa en los zafiros es evidente, pues no pensaba que esto lo llegaría hacer su lindo e inocente Mu en esta noche, incluso pensaba que esto no podría seguir para una segunda ronda…

-¿Mu? ¿Qué Estas…?- Aprieta sus labios, esa delicada boca y labios hacen un excelente trabajo.

-Más… Quiero más… De ti…- Habla entre cortado, mientras su boca de manera torpe mete y saca el miembro que lo profano como si fuera un delicioso dulce de miel, no le molesta el sabor del mene o que estuviera en su interior, esa zona estaba limpia, se había preparado adecuadamente para ello, gracias a los concejos que recibió de aquellos que lo han hecho antes…

Sorprendido por esto, no sabe qué hacer ante esto… Pues pensaba en llenarlo de mimos y cariños después de hacerlo suyo. Pero, al parecer Mu, está preparado para seguir esta apasionada noche.

Provoca que el pene del rubio de nuevo se ponga erecto… Con la humedad lengua y el interior caliente de esa boca…

-Pero… Ahhhg… ¿No estas… Cansado..?- Le pregunta, no entiende cómo es que su dulce Lemuriano, está reaccionando de esta manera.

-No… Quiero más… Shaka… Quiero más de ti…- Habla aun teniendo ese trozo de carne en su boca, intenta de manera desesperada darle todo el placer posible.

Es fascinante como todo está sucediendo de manera inesperada…

Esta muy sensible, sabe que una segunda eyaculación pronto vendrá… Ya que Mu no lo dejo ni siquiera respirar un poco, pero está bien…

Sentir como la piel del pene se crispa… Tocar con la punta de su lengua los testículos de su rubio… Explorar a su ahora marido tanto como puede, es sumamente fascinante… Pero no quiere que acabe así…

-¿También… Salda… Algo de ti?- Pregunta con un mezcla e inocencia y seducción, como de  torpeza en sus palabras…

-Si… AHg… Mu… Ve despacio…- Le advierte… Mientras caricia esos suaves cabellos lilas…

Besa con delicadeza la cabeza del pene, para mirar hacia arriba al Hindú y darle una señal muy atrevida de lo que necesita –No, no aquí…-

-¿Eh?- Se acerca tanto a Shaka, para que sus cuerpos se peguen lo más posible.

-En mí… Ponlo dentro en mi otra vez y allí…- Levemente se impulsa con sus piernas, para flexionarlas, provocando que el rubio se quede sentado con las rodillas de apoyo, y el Lemuriano sobre él… Para que el miembro caliente, húmedo y duro de su marido se vaya adentrando en su interior… -Te necesito más… Quiero más…- Repite su deseo… Perdido en completo placer…

Una mueca de gozo y deseo se proyecta en el más joven, gotas de sudor caen de su pálida piel, sus caballos desordenados le dan un aspecto demasiado sexy, su boca jadeante, mientras deja escapar pequeñas perlas de sal de sus esmeraldas, rodeando el cuello del contrario, apoyándose sobe él, para ir marcando el ritmo de cada embestida.

Shaka, no puede creer que Mu sea quien haya iniciado una segunda ronda, ya que no va con su dulce e inocente personalidad. Esto lo sorprende, pero no le desagrada en lo más mínimo, le excita que sea así, pero no entiende en sí que está pasando con su amado Lemuriano…

¿Acaso hay algo en el ambiente, que le provoca este actuar?

¿Serán esas flores las culpables?

Y es allí que recuerda algo que leyó en uno de los pergaminos, relacionados con el placer sexual, las reacciones y sensaciones abrumadoras que rodean a los Lemurianos al experimentar esto en su primera y en cada encuentro con su pareja destinada.

“-Lo Lemurianos tienen un enorme apetito sexual, tan grande, que su pareja debe ser capaz de seguirles el paso. Ellos no estarán satisfechos con solo una vez, sus instintos reproductivos parecen activarse al estar en contacto con su pareja de forma intima… Ambos Lemuriano perderán el control y seguirán haciéndolo hasta que ambos estén complacidos y no puedan más-“

“-Posiblemente, con alcanzar el climas dos o tres veces o incluso más, pueden llegar a sentirse muy bien. Sin embargo algunos jóvenes necesitan mucha más estimulación, más de la que podría soportar sus propios cuerpos-“

Con eso encuentra la respuesta de sus dudas. Por ende, esto significa que Mu encestara más que solo una corrida para calmar su intenso calor, deberá hacer que se pierda en el placer carnal.

Está bien, va a satisfacer a su amado todo lo necesario.

Claramente, Shaka no estaba aún satisfecho, pero pensaba que debía ser prudente no un bruto…

Pero esto cambia las cosas, para un mayor disfrute sexual en ambos.

Sí Mu, la persona que ama, lo está seduciendo de esta forma, dejando que su cuerpo le pertenezca de esta manera tan picara y atrevida, pidiéndole que continúe, que lo siga haciendo suyo, que lo penetre, que lo ame, lo complazca enteramente, pues... Igual el rubio no ha tenido suficiente del perfecto Lemuriano de sus sueños.

Cada estocada, produce una especie de electricidad en el cuerpo del pelilila, indicándole que su segunda corrida llegara pronto, aprieta sus labios y dientes, deja escapar un hilo de saliva de su comisura derecha, mientras sus ojos expresan el intenso placer que lo envuelve, se aferra tanto como puede a los hombros del rubio, jadea sonoramente, respirando profundamente…

Shaka no se pueda quedar atrás en esto, también necesita más de ese precioso cuerpo, aferra sus manos a esa anchas caderas, que suben y bajan a un ritmo que ahora es él quien lo marca, es un poco más tosco en esta posición, va muy profundo, entrando y saliendo con un tanto de rapidez, escuchando en su oído como le piden más, que desea su esposo que vaya más rápido y claro que cada palabra del Lemuriano son órdenes para él.

Al verse a los ojos, sus bocas conectan, besándose profusamente, en el instante en que sus cuerpos siguen reaccionando a su deseo carnal, la lucha de sus lenguas procede a intensificarse, cediendo esta vez el rubio ante el pelilila, siente como las uñas de este se clavan en sus hombros, por la rapidez y la manera en que se han sincronizado.

Ambos escuchan como el choque de sus pieles se intensifica, produciendo sonidos tan obscenos como excitantes para cada uno que los envuelven en un terrible calor sin precedentes para ellos.

-De… Nue… Vo…Yo…- Le habla entre los besos, sintiendo necesidad de avisar que su eyaculación viene pronto…

No se corta el beso, no se detiene para nada, al contrario… Sí el de ojos esmeraldas quiere correrse que lo haga, que manche ambos abdómenes, pues él igual está a nada de venirse dentro de ese cuerpo, inundando esa intima zona con su segundo clímax.

Pasaron unos instantes más, Mu se aferra tanto, sus cuerpos se crispa, la cabeza levemente echada hacia atrás, por la sensación tan agradable y agobiante del orgasmos, sin embargo no pudo alejarse tanto, ya que Shaka reclama desesperadamente poseer esos labios, siendo algo demandante y poco gentil, el Lemuriano acepta ese trato con sumo gusto.

Sigue siendo penetrado sin tregua alguna, disfrutando que cada estocada va tan profundo en él, provocándole que aun después de su segunda venida, otras olas de placer surjan.

No tarda mucho para que Shaka también alcance su clímax por segunda vez, inundando ese cuerpo desnudo que le pertenece…

Esta vez, por la presión tan fuerte que ejerce, ha dejado marcados sus dedos en esa pálida piel, e igualmente Mu dejo líneas enrojecidas en la espalda y hombros del rubio provocadas por sus uñas, el enorme deseo de aferrarse a él por el terrible placer que ha experimentado.

Entre jadeos, se pierde entre los dulces besos de su marido, los gemidos de placer son suficientes para sentir que vuelve a tocar el mismo paraíso en esta noche…

En el instante que necesitan ambos aire, se rompe el beso, la lengua de Mu levemente queda en un profundo jadeo, sus ojos con algunas lágrimas cayendo de ellos, brillan con ese destello tan lujurioso y seductor, que Shaka no puede dejar pasar… Pues igual él presenta ese deseo en sus orbes…

Sus cuerpos sudorosos, manchados por los fluidos de ambos, de la entrada de Mu, escurre el semen que se ha acumulado, al igual que un tono rojizo se llega a ver combinado por esa corrida, pero ningún se ha dado cuenta aun…

Los pétalos de esa singular flor se han pegado a sus cuerpos, enredados en sus cabellos, dándoles un toque bastante adorable como profano, por estar tan perdidos en el mismo placer.

Shaka aún tiene la conciencia de no herir o lastimar al Lemuriano por nada del mundo, sin embargo Mu comienza a mover sus caderas de manera circular, sabiendo que el rubio está dentro aun, es una provocación de su parte.

-Sha… Ka… Te amo… De nuevo… Quie… Ro… Mas…- Su ruego, su deseo se empieza a sentir más necesitado y lastimero, además que presenta un temblor en su cuerpo, pero ese rostro es demasiado caliente como para limitarse en solo dos corridas.

-Mu… ¿Estás… Seguro?- Necesita preguntar antes de nuevo comenzar una tercera ronda, pues cree que puede estar sobrepasando el límite del Lemuriano, no es que quiera provocar que se desmaye, después de todo… Aunque ambos hagan un esfuerzo por complacerse más, es Mu quien recibe a un intruso en su interior, debe ser doloroso pues es su primera vez en ser penetrado y deben tomarlo con calma –Tomemos… Un pequeño descanso… Creo que… Arggt…-

Debió ser más rápido, aún está dentro del precioso y atrevido Lemuriano, esta vez sigue estando erecto en ese cálido interior. Por su propia cuenta y aun con las piernas temblorosas con pocas energías, es Mu quien hace fuerza para subir y bajar lentamente… Mientras se pega más a ese fuerte cuerpo, para que su miembro se frote contra ese abdomen…

Sin duda… Mu pareciera estar en un celo, los Lemurianos están tan conectados a sus instintos, que en la privacidad de amor, con su pareja amada y destinada, dan rienda suelta al deseo.

-Por favor… Marido mío… Más… Más… Quiero más…- Ruega con codicia, y a la vez en una súplica no muy inocente, posee un encanto sexual demasiado grande como para controlarse…

El Hindú simplemente no puede decirle no a Mu, sabe que perderá ante estos ruegos…

-Esta... Ahgn… Bien… Pero…- Sujeta esas muñecas, sonríe maliciosamente, para acercar su cara al Lemuriano –Lo haremos ahora como yo quiero…- Dicho esto, lo deposita sutilmente sobre la cama, para salir de su cuerpo… Le dedica una sonrisa, extasiado por el desastre en que se ha convertido su amado, pues estando manchado de semen, sudado y cansado, aun le ruega por mas amor, suplicándole que no se aleje de él…

-Shaka… No… Ven...- Estira sus manos, le ruega su cercanía.

-Mu, date la vuelta… Y ponte en cuatro, sí quieres que te haga el amor de nuevo- Una orden que da, la primera de esta noche, y solo serán dictadas en las noches de intimidad apasionada.

De inmediato el pelilila le hace caso, aunque su cuerpo este agotándose, aún tiene una enorme libido y fuerza para continuar… El rubio no se queda atrás, aún está deseoso de ese joven Lemuriano.

Mu no puede acatar por completo esa orden, sus brazos ceden, solo alcanza a poyarse con las palmas de sus manos, su rostro también toca las suaves pieles de su lecho, mientras la cadera se eleva, dando una vista preciosa de su entrada levemente abierta, de donde escurre el semen que se ha acumulado y a la vez sangre, por haber sido penetrado un poco brusco la segunda vez…

Ver ese tono, lo saca rápido de su excitación, sorprendiéndose por esto, incuso alarmándose, pues esto no debió pasar… Esto significa que se atrevió a lastimarlo y eso no lo puede permitir.

-No podemos hacerlo más… Ya es suficiente…- Le habla con calma, con todo el amor y cuidado del mundo, mientras su mano acaricia la espalda del pelilila –Mu, te lastime… Es mejor que descansemos-

Pero el Lemuriano no quiere eso en lo más mínimo –No… No quiero… Descansar, te quiero a ti…- Su ruego y un meneo de su parte posterior para pedirle en suplica al otro que sigua su deber como su compañero de vida en esta noche, sin duda esta perdido en el éxtasis que su cuerpo ha experimentado por primera vez y despertó en él un instinto primitivo insensible –Por favor… No me duele… No importa, quiero más…-

No pueden seguir, sin embargo… Claro que lo seduce esa carita de ruego, la voz lastimera y sensual, con el riego de que siga haciéndolo suyo, como si no pudiera darse cuenta que en este momento su cuerpo está en las últimas, pues tiembla de pleno placer y cansancio.

Shaka, desde luego entiende, que demasiado de algo sea tan bueno como el amor o malo, es peligroso para la salud de cualquiera, y más si se trata de la primera vez de ambos… Al menos un descanso antes de otra ronda deberían tomarse, pero su intención es que Mu se calme y pueda dormir un poco para que no piense más en eso… Ya lo ha lastimado, y eso es algo que no se perdonara nunca, mas sabe que ahora mismo lo principal es reconfortarlo.

Se acomoda a un lado del pelilila, abrazándolo, haciendo que esa postura que le ordeno se despeje, para que ahora lo tenga contra su pecho, intentando que ese calor abrumador de ambos baje –Mu, no tienes que sobre exigirte tanto… Si lo seguimos haciendo- Aprieta su mandíbula, tensándola y frunciendo el ceño algo molesto -Te voy lastimar peor, y eso nunca me lo podría perdonar nunca… Te amo demasiado como para hacerte daño, más de lo que ya te provoque- Se siente realmente culpable por este hecho, por eso entiende que debe desistir de una tercera ronda.

-Pero… No duele… Te amo, te quiero en mí… Mas, Shaka ¿Me amas?- Esos instintos carnales y primitivos, combinados con un revuelo de emociones, provocan que su actuar sea algo diferente a lo usual, tanto que eleva su rostro rojo, y lleno de lágrimas, para seguir suplicándole a su amado rubio su deseo.

-Claro que te amo… ¿Por qué lo preguntas?- No entiende que significa ese herido rostro que le dedica el pelilila, le provoca una enorme preocupación en su corazón.

-Si me amas tanto… Seguirías complaciéndome… No pondrías peros para ya no desearme…- Habla entre sollozos, pues sus lágrimas escurren por sus rojizas mejillas, acurrucándose contra el pecho desnudo del rubio, sintiéndose realmente mal por ese pensamiento cruel.

Simplemente para el hindú, esas palabras no tienen ningún sentido –Te deseo mucho Mu, tanto, más de lo que tú piensas e imaginas… Pero…- Su rostro se vuelve serio, pero a la vez comprensivo –También demostrarte mi amor, es saber cuando parar de algo aunque sea tan maravilloso como hermoso, ya que te eh hecho daño. Eso es lo que el amor sabe que debe evitar sin importar que, herir a la persona que más amas en este mundo como en los demás y próximos, es algo que nadie debe hacer de formo intencional- Rodea ese frágil cuerpo con sus brazos, atrayéndolo a él con cuidado, para que pueda escuchar su latir -¿Puedes oírlo?-

Confundido el pelilila, no entiende por qué ahora le hace esto, pero esas palabras al escucharlas, reconfortan una parte de él –Si…-

-Mi corazón solo late de esa forma por ti, por tenerte a mi lado… Estoy feliz porque eres mío y solo mío, al igual que yo soy tuyo, solo te pertenezco a ti…- Niega con cuidado con la cabeza –Y no voy a herirte más, fue suficiente… Sabes muy bien como yo, que demostrarnos el amor no solo se reduje en estas acciones, sino también con hablar, contemplar nuestros ojos, darnos besos, o incluso compartir nuestros mayores secretos y miedos cualquier cosa que hagamos juntos, ya es parte de demostrarnos nuestro profundo amor- Allí están las enseñanzas que tuvieron en ese último mes, le sirven al rubio para hacer entrar en razón un poco al Lemuriano, poseyendo esa suave y comprensiva voz para darle todo el confort del mundo –Podemos hacer el amor de diferentes maneras, no todas tienen que ser así- Un beso en la cabeza, contempla con ternura a ese hermoso joven, quiere solo escucha su respuesta ante lo que le ha dedicado, pero… Cuando apenas sí se fija bien, nota que sus esmeraldas están cerradas…

Mu se ha quedado profundamente dormido… Puede que el lívido en los Lemurianos sea muy alto, pero el cansancio también ha cobrado factura, agregando que ambos son unos inexpertos… Pero eso no niega de haber disfrutado y experimentando tanto placer. El pelilila bien pudo tener una o dos corridas más, Shaka sí que lo deseaba también, pero debía ser quien pusiera un alto a todo esto.

Se siente un poco más tranquilo de que Mu descanse al fin, la noche ya ha trascurrido mucho, hasta entrada la madrugada. Para ese virginal cuerpo fue suficiente acción por esta vez, aunque pudieran haber soportado mas, ver que broto un poco de sangre de esa zona no lo pudo resistir, no volvería a permitir que algo así ocurra de nuevo…

Su corazón no soportaría el causarle dolor o lastimadura a Mu… Incluso si por un tiempo debe negarse de ese placer recién conocido, lo hará con tal de ver bien recuperado a su amado…

Ese si es un muy buen principio del amor, poner la seguridad y bienestar de tu pareja, ante todo, incluso antes que los placeres de la carne.

Sus cabellos desordenados sobre esas cómodas pieles, enredados el lila y amarillo, Shaka rodeando el exquisito cuerpo de su esposo, acomodándolo tan cerca para que así puedan dormir plácidamente… No se alejará de él, no importa como duerma, siempre y cuando pueda tenerlo a su lado, solo para él, estará bien, porque ser sumamente feliz.

-Descansa, mi dulce y amado Mu, mañana prometo que te dejare descansar tanto como quieras, y te entregare mi amor de diferentes maneras…- Besa esa perlada frente, regala unos toques a las tikas, acracia levemente esa espalda, inhalando por sus fosas nasales ese aroma tan encantando y seductor del Lemuriano, para también entregar su conciencia al sueño, y así poder acompañar en este momento a su amado esposo.

Desde luego está sumamente cansado, pero claro que también podría tener más corridas, sin embargo no se va a atrever a tocar a Mu en este estado, aunque su mente lo pensó por breves segundos, puede más el respeto por su lindo pelilila.

Después de todo, mañana al amanecer, cuando despierte, sin duda Mu sentirá las consecuencias de tanto deseo carnal, además de que recodará lo que paso esta noche… Y bueno, deberán cambiar su lecho, pues, han quedado pegajosas, sin contar que de la entrada de Mu el semen aún está escurriendo, pues desde un inicio quedo su vientre muy lleno. Shaka debe estar muy orgulloso de que en sus dos descargas, fueran con una buena cantidad, sin duda tendrán efectos muy pronto.

Tal vez… En su futuro no muy lejanos, la ilusión de ambos de forma una muy linda familia se haga realidad, pero por mientras, por esta noche, en donde la pasaron uno de los mejores momentos de sus vidas, el amor, el respeto y la calma cuando debió ha reinado, se han consumado perfectamente todos estos sentimientos y valores, sus almas y corazones se volvieron uno.

Y así como recibieron la bendición de los Dioses de los Lemurianos y el anillo de esmeralda que descansa en el dedo anular de la mano izquierda del pelilila, son los símbolos de su profundo amor, uno que sin importar que pertenezcan a diferentes mundos, eso no impidió conocerse.

Si, ese es el verdadero amor, ser capaz de encontrarlo donde menos lo piensas, renuncias a una vieja vida o aceptar algo tan diferente y desconocido, comprender que la paciencia es una virtud que todos deben comprender, saber que una sonrisa puede encantar el corazón de alguien un poco frio y reservado, una mirada inocente cautivar el alma, y un ser simplemente único, perfecto y maravilloso.

Esa es la mayor aventura que puedes escoger para el resto de tu vida, experimentar tu mayor deseo y felicidad… Pues no se necesita mas que ser feliz a lado de la persona que amas en esta vida, complementarse en lo que necesiten y apoyarse para tener un maravilloso felices para siempre.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?

No olviden responder la pregunta, y bueno...

Espero que terrones se reporten pronto, la neta me tienen preocupada los de Amor Yaoi...

En fin, me paso a despedir, no sin antes decirles que adoro el capitulo de hoy escribir, aunque tarde como cinco días jajajaja.

Disfruten que al fin tienen algo lemon que leer, terrones atrevidos jajajjaa.

Gracias por leer.

Cuídense mucho.

No se expongan de mas.

Manténganse a salvo.

Los mega quiero a todos.

Ammu se va.


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