Capitulo 3 El lazo que nos une.
1.1 El Fuego y Viento se encuentran
El grupo de Naruto viajaba tranquilamente por el bosque, faltaba poco para que dejaran los territorios de las amazonas.
-No entiendo porque Hipólita te envió -dijo Shikamaru mirando a la rubia amazona
-Mi reina me envió para asegurarse que en verdad protegieras al joven Naruto
-Que mujer mas problemática
-Velo de esta manera, no es que la reina Hipólita no confié en ti, solo no te tiene confianza -dijo el Pegaso divertido
-Yo si confió en ti papá Shikamaru -dijo el rubio sonriendo, el castaño le devolvió el gesto.
De pronto, la amazona se detuvo
-¿Qué sucede Ino? -le pregunto Naruto.
-El final del bosque esta cerca -dijo mientras señalaba una hilera de árboles por donde se colaban los rayos del sol
-Es verdad -menciono el equino alado -Pronto dejaremos los dominios de Artemisa
-Naruto será mejor que te pongas esto -dijo entregándole una banda de color café para la frente
-¿Para es esto Dattebayo? -como respuesta la rubia señalo su propia frente, asiendo que el rubio tocara la propia por inercia, y ahí, se encontraba una pequeña joya de color blanco que comenzaba a surgir
-En este bosque estabas protegido por las bondades de la diosa Artemisa, por eso no había peligro alguno de que te descubrieran, pero estamos por dejar esta seguridad y por tanto cualquier signo que te delate como uno de los cuatro te pondría en serio peligro.
Naruto asintió mientras se colocaba la banda.
-¿Cómo haremos para encontrar a los otros Dattebayo?
-Cada pilar tiene una lazo con los otros, pero posee una conexión aun mas fuerte con uno de ellos, ese pilar es su debilidad y ala vez su fortaleza, los dos unidos se complementan -le respondió Shikamaru -Tu eres el pilar del norte y tu elemento es el viento, por tanto, con quien mas conexión tienes es con el pilar del sur, aquel cuyo elemento es el fuego, es el a quien seguramente encontraremos primero
-¿Pero como sabré encontrarlo?
-De la misma forma que sentiste a los demás, será como un llamado, una sensación, solo confía en eso y encontraremos a los otros
-Esta bien Dattebayo
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-Sasuke y Kaseiyo iban cabalando a toda velocidad, cuando de pronto, ambos se detuvieron, pues frente a ellos había dos seres, el primero, era un centauro, su parte humana era musculosa, tenia el cabello naranja y ojos dorados, su parte bestia tenia el pelaje naranja, la otra era una mujer, sus ojos eran de color rojo (el iris de una tonalidad rojo claro y la pupila de un rojo mas fuerte), su cabello era rojo con tonalidades en naranja y amarillo, dando la sensación de fuego, su cuerpo estaba totalmente cubierto por una capa.
-Chicos -saludo el rubio
-Sasuke, Kaseiyo -dijo la mujer sonriendo -Hace tiempo que no los veíamos n-n
-Se tardaron demasiado en aparecer -dijo molesto el pelinegro
-A nosotros también nos da gusto verte -le dijo el centauro
-Quirón, Sasuke -los llamo -No inicien una pelea ahora que tenemos mucho camino por delante
-Fénix tiene razón -la apoyo el rubio -Así que andando.
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-Ya me duele el trasero de viajar así -se quejo Itachi
-Creo que la caravana se detendrá pronto -menciono Nefertina -Ra ya esta descendiendo al otro mundo
-Hubiera sido mas fácil viajar solos -se quejo el pelirrojo
Los tres iban montados en camellos, adornados con las mas exquisitas joyas y metales precioso, todo digno de un faraón.
-Lo lamento -se disculpo la esfinge -Debí aceptar la oferta del Faraón...
-No, no, no, Nefertina -dijo el pelinegro inmediatamente -Con los camellos, el sequito real y la embarcación que nos saco de Egipto es mas que suficiente -La esfinge le sonrió como agradecimiento a sus palabras
-Me sorprende que el Faraón no enviara al mejor de sus ejércitos para protegerte -menciono Gaara
-Soy la hija de Horus y Bastet, yo no necesito de la protección del Faraón
-Tienes razón Nefertina, ¿Quién en su sano juicio querría meterse con la hija del dios vengador? -dijo Itachi divertido -Nadie en su sano juicio -los dos soltaron una pequeña risita mientras Gaara los miraba con cara de "¿Qué hice para merecer esta tortura?"
De pronto la caravana se detuvo, indicando que por hoy el viaje terminaba.
-Les he traído algo de comer mis señores -dijo uno de los miembros del sequito real
-Gracias -dijo la Esfinge para luego tomar lo ofrecido y dárselo a sus compañeros, pues ella no necesitaba de comer o beber
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El grupo de sasuke continuaba viajando cuando, de pronto, el Centauro se detuvo.
-¿Sucede algo? -le pregunto Sasuke
-Escuche algo -le respondió el pelinaranja
-¿Qué fue lo que escuchaste? -le pregunto el Rubio
-Voces -respondió la pelirroja -Hay que tener cuidado, esta pradera es campo abierto y somos blancos fáciles.
-Además de que este es territorio de esas zorras -dijo molesto.
-¿Zorras?
-Amazonas -respondió el rubio -Ellas y los centauros son enemigos a muerte.
-Así es.
-Pues tendrás que resignarte Quirón ya que siento que algo me esta llamando.
-Es la conexión que tienes con el pilar del viento -le respondió Kaseiyo con una sonrisa, pues estaba seguro de que pronto vería -le respondió Kaseiyo con una sonrisa, pues estaba seguro que pronto vería a su hermano.
-¿Y quieres son los pilares actuales Kaseiyo? -le pregunto la mujer
-¿Actuales? -repitió Quirón -Fénix , tu conociste a los antiguos pilares?
-Si, conocí a los primeros pilares incluido el quinto.
-¿Tu sabes porque el quinto hizo todo esto?
-No lo se Sasuke, yo tan solo conocí al primero
-¿Sabes porque el quinto se volvió malo?
-No lo se -le respondió la mujer -Eso es algo que solo los pilares de ese entonces saben
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-¿Una pradera? -dijo el rubio
-Ya ha pasado mucho tiempo desde que vimos algo verde -comento el Pegaso -Desde hace dos semanas solo hemos visto rocas, piedras y mas rocas -se quejo -Ya era hora de ver algo verde
-¿Sucede algo Ino? -le pregunto Shikamaru ala amazona al notarla un poco inquieta
-No es nada... Solo creí escuchar algo
-¿Qué cosa Dattebayo?
-El sonido de tambores... Mandando un mensaje
-¿Puedes interpretarlo?
-Si, dice que hay intrusos -le respondió el rubio -habla de nosotros, pero también hablan de otro grupo, dos hombres, una mujer y un centauro -dijo esto ultimo con molestia
-¿Qué hay que hacer? -le pregunto el Pegaso
-Ir a donde se escuchan los tambores y presentarnos ante ellas
-¿Ellas? -repitió el castaño
-Amazonas -dijo Naruto
-No esperaba encontrar amazonas por estos lugares
-Mamá Hipólita dijo que no solo había amazonas en Grecia y aun seguimos en esta Dattebayo
-Vasta de platicas debemos movernos, es peligroso quedarnos a campo abierto, podrían confundirnos con el enemigo -los regaño Ino
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El grupo de Sasuke se mantenía oculto, mientras miraba a un grupo de Amazonas hablar con el rubio y sus acompañantes
-Es Shikamaru -dijo el rubio sorprendido
-¿Lo conoces? -pregunto Sasuke
-Si, e es la persona ala que mi madre dejo como guardián de mi hermano
-Entonces ese rubio es...
-Mi hermano, el pilar del norte -le respondió Kaseiyo
-Hay que ir a rescatarlos -dijo Sasuke
-Espera un momento Sasuke -le dijo Fénix en tono de orden
-¿Qué te sucede mujer? -gruño el centauro -¿No vez que esos dos están en peligro?
-Por si no se han dado cuenta par de retrazados -aquello le gano una mirada de odio de los dos -Esos dos están hablando con ellas y no veo ninguna muestra de agresión por ninguna de las dos partes
-¿Qué hacemos entonces? -le pregunto el rubio
-Esperar...
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-Así que tu eres aquel al que Hipólita protege -dijo una de las amazonas, una mujer de cabello corto color verde y piel clara, estaba vestida con un mini polo de piel, y un taparrabos conversación, traía un arco largo ala espalda al igual que una carcasa de flechas
-Así es hermana -le respondió Ino
-Bien entonces los ayudaremos mientras estén en nuestro territorio...
-Alguien nos esta observando -dijo el rubio de pronto
-Veo que Hipólita te a entrenado niño -dijo la peliverde -En efecto nos están observando, son cuatro en total
La peliverde levanto una meno y las amazonas que la acompañaban asintieron
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-Se han dado cuenta de nuestra presencia -dijo Quirón
-Hay que movernos -hablo Kaseiyo
-Yo no movería un músculo si fuera ustedes -para la sorpresa de los cuatro, ya se encontraban rodeados por un grupo de amazonas
-Pero miren nada mas lo que el viento nos trajo -dijo una de ellas -Dos hombres, una bestia y una mujer
-Hay que llevarlos ante nuestra reina...
-Primero muerto que dejarme llevar por unas zorras -dijo el centauro
-Se puede arreglar... Bestia
-Iremos con ustedes -hablo Fénix
-Como toda mujer... Inteligente y sabia -dijo otra amazona
Quirón gruño por lo bajo, pero se dejo hacer, no era bueno contradecir ala pelirroja, o terminaría siendo "Centauro ala barbacoa2 (XDU), los ataron y llevaron a su tribu, en la que ya se encontraba el rubio y compañía.
-Así que ustedes son los que se atrevieron a invadir nuestro territorio -dijo la peliverde quien era la líder de esa tribu
-No es de tu incumbencia... perra -le respondió el Centauro, solo para recibir un fuerte golpe por parte de las dos amazonas que lo tenían aprisionado.
-Tu eres una mujer, por tanto una de las nuestras, eres libre -le dijo ala pelirroja -En cuanto a ellos... Mátenlos
-Si....
-Melanipa no lo hagas -pidió el joven rubio, los cuatro lo miraron asombrados, ninguno de ellos se había dado cuenta de su presencia -No los lastimes
-Naruto -dijo la aludida con cierto recelo en su voz -La ley de las Amazonas es absoluta, ellos son hombres y por tanto han de morir
El pelinegro miro al rubio, algo parecía decirle que el era a quien buscaba con tanto ahínco.
-Tu debes de ser el pirar del norte -dijo la pelirroja, Naruto asintió -¿No te das cuenta quien es este joven?
La peliverde miro a ambos muchachos, después de unos segundos se acerco al pelinegro quitándole la cinta que llevaba en la frente, revelando una pequeña joya de un tono rojizo
-Eres uno de ellos -dijo mas para si que para los demás -Desátenlos -ordeno.
-Ya era hora maldita lunática -dilo el Centauro
-Menos a el -dijo mirando al pelinaranja -Enciérrenlo en las caballerizas, donde deben estar los de su especie
-¡Maldita perra deja que me libere y veraz lo que es bueno! -dijo molesto
-Será mejor que lo calme -anuncio la pelirroja para luego seguir a su compañero y a sus "celadoras"
-Así que tu eres como yo Dattebayo -dijo el rubio sonriendo zorrunamente, encantadoramente, lo que ocasiono un sonrojo por parte del pelinegro quien desvió la mirada.
-¿No te habías dado cuenta Usuratonkashi?
-¡No me llames así Teme1 -dijo molesto mientras inflaba sus mejillas de manera infantil
-Naruto.... -lo llamo el rubio mayor
-Tu te pareces a mi Dattebayo
-Eso es porque el es tu hermano -le respondió el castillo que acababa de entrar en compañía de Ino
-Shikamaru -dijo el mayor sonriendo
-Es un gusto volver a verlo majestad -dijo para luego hacer una reverencia
-¿Majestad? -repitieron los dos pilares ala vez
-¿No te lo dije Sasuke? -dijo Kaseiyo en tono inocente -Mi padre era uno de los dos reyes de Atlántida y yo su sucesor, al igual que tu hermano.
-¿Mi hermano?
-Si n-n
-¿Entonces tu eres mi hermano Dattebayo?
-Así es Naruto -le respondió el mayor con una sonrisa
-Pueden permanecer aquí un tiempo -dijo Melanipa -Ustedes y la mujer pueden pasear libremente pero el Centauro se queda donde esta -sentencio la peliverde
-Pero Quirón....
-Es mejor que no le lleve la contraria majestad, ellas son muy problemáticas cuando se enojan -.- -le dijo Shikamaru al oído
-Eh, esta bien -le respondió sudando gotita
-Es mejor que partamos cuanto antes -hablo Ino -Mientras mas rápido encontremos a los otros será mejor
-Es verdad, no debemos darle la oportunidad al "el" que nos descubra -dijo Kaseiyo
-Bien, en ese caso -hablo la peliverde -Les daré una sugerencia, cuando logren encontrar a los otros dos, viajen a Ponto* ahí encontraras ala mujer de ojos y cabello blanco de la que te hablo mi hermana -le dijo a Naruto
-Gracias Dattebayo n.n
-Es hora de irnos -dijo Sasuke
-Gracias por todo Melanipa -le dijo sonriendo el rubio
-Eh, ¿Podría dejar en libertad a Quirón? -le pidió Kaseiyo
-Bien, pero en cuanto este libre se irán
-Si -dijeron todos
Continuara...
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Youko_Saiyo: bieno aquí termina el capitulo 3 espero sea de su agrado
Ponto (Griego: Πa2;ντος, Mar) era el nombre dado en la antigüedad a las vastas extensiones de tierra del noreste de Asia Menor (la actual Turquía) que bordeaban el Ponto Euxino (Mar Negro), llamado con frecuencia por los griegos simplemente Pontos, que sería la forma corrompida del nombre original Pontôi (en el Ponto). La importancia real de este nombre puramente territorial varió enormemente a lo largo del tiempo. Los griegos lo aplicaron con ligereza a diversas partes de las costas del Euxino, hasta que con la conformación del Reino del Ponto el término se relacionó directamente con la zona ya mencionada, e incluso hasta nuestros días, el nombre perdura en el griego moderno, a pesar que la zona hoy sea parte del territorio de Turquía. El primero en nombrar a ésta zona sería Jenofonte en su Anábasis.