Un Gatito Para Mí
Capítulo 10: De Malvadas Comadrejas y sus planes frustrados Parte II y De Padre e hijos parte I.
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Les dejo con la lista de los fics que siguen en votación y en algunos de ellos con los votos que han llegado para los mismos. Aquí está la lista (y recuerden que será uno de Harry Potter, otro de crossover y de otra serie, escribiendo de tres en tres hasta terminarlos todos, OK) así mismo para que no tengan la presión de votar por solo uno, la votación será así, es decir, en un gatito solo aparecerán los fics de Harry Potter para que voten por los mismos mientras que en Bailamos aparecerán los de otras series y en Ángeles V, los crossover de tal manera que tan solo votaran por alguno de los ahí mencionados ¿De acuerdo? Espero que esto no les cause confusión, así mismo les informo que este es el último mes para votar por sus fics, pues en la siguiente actualización (Mes de Mayo) daré a conocer como quedaran las actualizaciones una vez terminados estos tres fics, así que ya saben ¡A VOTAR!:
HARRY POTTER
*CORAZON DE SOMBRA Y LUZ actualmente con 1 voto a favor
*ETERNAMENTE MDMD Tiene 1 Voto hasta ahora.
*VEELAS: PELIGRO DE AMOR Tiene 2 Votos, también.
Muchas gracias por sus comentarios, aquí les dejo la lista de quienes me escribieron. Gracias.
*Mesic *gblogger *frokwears *mila22 *Murtilla *AnataYume *meirich *ros potter *la rosa *Yami_Jake
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Y sin que ninguno de los dos se diese cuenta de que por una ventana entreabierta un par de personas les estaban escuchando, sumamente impresionados…….
-¿Planes, que planes? Y ¿De qué se supone que están hablando mamá y Ron? ¿Qué quieren hacerle a Harry?-dijo muy bajito uno de los oyentes, volviéndose hacia su acompañante.
-¡No tengo ni la menor idea! Pero quizás lo más conveniente es que sigamos escuchando y haber que averiguamos ¿No te parece?-sugirió, también, en voz bajita el segundo de los oyentes.
-¿Qué están haciendo ustedes dos aquí, tan en secretito?-se escucho una picara voz, curiosamente en tono bajo como si se secreteara con los ahí presentes.
-¿Acaso quieren ponerse “románticos”?-dijo sugerente una segunda voz, e igual que la primera también tenía un ligero tono de picardía que no pasaba desapercibido.
-¡Guarden silencio los dos y déjense de tonterías!-exclamo una de las primeras voces, imponiendo silencio con un gesto de su mano a los recién llegados.
-Pero… ¿Qué pasa?-cuestionaron extrañados los recién llegados, mas antes de que pudiesen reclamar nada la severa mirada del segundo hombre, les hizo guardar silencio.
-Una vez que encontremos a Potter, hay que ver la manera de hacerlo tomar la poción de deseo para que se acueste con Ginebra, lo antes posible y que así se embarace; pudiendo finalmente librarnos de él, en cuanto podamos. Pues ya no puedo soportarlo más ¡Es tan estúpido y mojigato que desespera! Además ya me urge poner las manos en su dinero, este año será la graduación y no quiero asistir a la ceremonia vistiendo túnicas viejas, mamá-dijo Ron exasperado.
-¡Calma, Ronald! En cuanto encontremos a Potter, te encargaras de administrarle la poción del deseo para que se acueste con Ginebra, mientras yo le doy a tu hermana la poción de fertilidad para que se quede embarazada, así como al mismo tiempo le administramos la tercera poción (Necesito un nombre para esta poción, así que ¡AYUDA!) para que su magia empiece a debilitarse y entonces podremos deshacernos definitivamente de ese mocoso: pero por ahora tenemos que tener paciencia pues si nos precipitamos podríamos perder lo que hemos ganado y eso no nos lo podemos permitir, ya que con el embarazo de Ginny así como la posterior muerte de Potter, depende nuestro futuro y será esplendoroso pues tendremos a nuestra disposición todo lo que le pertenece al chico que vivió y mucho mas-dijo ambiciosa Molly, mientras le sonreía con malicia a Ron.
-¡Lo sé, mamá! Aunque antes de que Potter muera, lo haré mío y no sabes cómo lo voy a gozar, jajá jajá-reía Ron con maldad y tal cara de pervertido que los que oían y observaban estaban que no se lo creían, pues lo que estaban descubriendo era realmente terrible y sus expresiones de asombro así lo demostraban.
-¡Yo que tú quitaba esa cara de sádico pervertido, Ronald; no vaya a ser que papá o el resto de nuestros hermanos te vean y piensen que estás loco! Obvio que lo estas ¿verdad? Pero tampoco podemos permitir que por tus perversiones nuestros planes se vengan abajo ¡Ah, buenos días, mamá!-saludo Ginny dándole un beso en la mejilla a Molly, al mismo tiempo que le sonreía con sorna a su hermano.
-¡Cállate Ginebra; que no tengo cara de pervertido! Además si a esas vamos, tú eres peor que yo, puesto que te la vives añorando las caricias de Harry, suspirando como una boba, una y otra vez; ¡No tienes nada de dignidad! Y solo porque él no te hace caso, terminaste acostándote con Deán Thomas ¡Y no vale que digas que era tu novio! Bien sabes que eso es tan solo una excusa para irte de coscolina, por lo que no me vengas con tonterías pues se muchas cosas de ti y si se me fuera la lengua y se lo dijera a Potter ¡Estate por segura de que ahora sí, no te haría ningún caso! Así que no me busques o me encuentras y si nos tenemos que aguantar es solo porque nos conviene a nuestros planes, pero eso no significa que me agrades; seremos hermanos /para mi desgracia/ pero la verdad es que eres una cuzca perdida que no solo se acostó a la primera de cambios con Thomas sino que también lo hiciste con Goldstein y Mc Millan, en varias ocasiones, obligándome a hechizarlos para tapar tus idioteces, puesto que no podemos permitir que Potter se entere de que no eres virgen, ya que no nos ayudaría en nada para conseguir nuestros objetivos ¡Así que no me sermonees, pues perderías “hermanita”!-dijo con veneno Ron mientras veía con desprecio a Ginny, la cual obviamente no se iba a quedar callada.
-¡Como te atreves, eres un ……!-comenzó Ginny molesta pero antes de poder acabar fue silenciada por Molly.
-¡Basta, ustedes dos y compórtense! Así que deja en paz a tu hermana, Ronald y mejor ayúdenme a preparar el desayuno o de lo contrario no estará listo-dijo la matrona pelirroja con firmeza, a la vez que sacaba lo que necesitaban para el desayuno, no quedándoles más remedio a los pelirrojos que obedecerla.
Por otro lado, en silencio y antes de que alguna de las comadrejas reparasen en sus presencias, los cuatros “espías” se fueron alejando hasta llegar a una colina no muy lejana de la casa, pero si lo suficiente como para que no los vieran, ni escucharon aquellos traidores y una vez ahí……
-¿Te encuentras bien, Charlie? ¡Luces muy pálido!-dijo una de la voces, preocupado por uno de ellos.
-¡Estoy bi..!-comenzó Charlie (va uno de los espías, jajajá) mas antes de poder terminar, una repentina sensación de asco le invadió provocando así que un repugnante vomito escapara de su boca, haciendo retroceder a los presentes.
-¡No, definitivamente no estás bien, creo que lo mejor es que vayamos debajo de aquel árbol, quizás con lo fresco de la sombra te sientas mucho mejor!-dijo con calma otra de las voces.
-¡Tu hermano tiene razón, Charles, vamos!-dijo con rotundez otro de los presentes.
-¡Te he dicho muchas veces que no me llames, Charles, Severus; sino Charlie y la verdad me siento bien! Creo que lo de hace poco ha sido una reacción de repugnancia por lo que hemos descubierto de “ellos”-dijo Charlie con apatía, evitando a propósito nombrar a los otros tres pelirrojos, pero que todos sabían a quienes se referían.
-¡Bien, como digas, Charlie!-dijo serio Severus (la segunda voz ¿A que no se lo esperaban, verdad?)
-¿Qué se supone que vamos hacer con “ellos”? ¡Nunca pensé que fueran tan ambiciosos y tan malvados! Y ahora que lo sé, la verdad es que hasta agradezco que Harry haya desaparecido-dijo uno de ellos.
-¡Lo sé, son realmente malvados! ¿Cómo pueden hablar de esa manera de Harry? ¡Es un misterio! Y lo peor de todo es que no se lo merece, George-dijo otro mas (Ya imaginaran quienes, para este momento ¿Cierto?)
-¡No se qué vamos hacer, pero de lo que estoy seguro es que no podemos permitir que se salgan con la suya; Harry ya ha pasado por mucho como para que encima le quieran hacer algo como eso! Por lo que lo mejor será mantenernos al pendiente y de ser posible debemos encontrar Harry antes que alguno de ellos lo haga-dijo Charlie con decisión.
-¡Me parece bien! Y por cierto ¿Sabe de qué pociones hablaban, profesor Snape?-George tranquilo a Severus (la tercera voz, sorpresa ¡Esta vivo!)
-¡Tengo una idea de cuales son! Pero si realmente lo son /y lo siento por ustedes, chicos pues son su familia/ ¡De verdad que quieren deshacerse de Potter, además de ser sumamente peligrosas y de cierta índole oscura!-dijo Severus con tal seriedad /mucho más de lo habitual/ que a ninguno de los pelirrojos les gusto nadita lo que estaban oyendo.
-¿Tan peligrosas son?-cuestiono Fred preocupado (Así es la cuarta voz, taran; y ya están todos ¿Cierto?) pues de verdad que no le estaba gustando lo que oía.
-¡Si son las que estoy pensado, SI LO SON! Hay diversas pociones de deseo, así como de fertilidad /generalmente estas últimas solo se suministran cuando la pareja es del mismo sexo o en caso donde haya algún trastorno medico –físico o de otra índole- que baje la reproductividad fértil de una pareja/ y por ello su eficacia es de acuerdo al tipo de poción; y de la tercera mejor ni les hablo, pues si se trata de la que en verdad creo ¡Potter esta frito y eso es lo de menos por lo que tiene que preocuparse!-dijo Severus pensativo.
-¿Y hay forma de contrarrestarlas? ¿Hay algún antídoto?-pregunto anonadado Charlie.
-¡Dos de tres, tienen antídoto, como casi todas las pociones de ese tipo! Pero la tercera /la más peligrosa de ellas/ necesitaría forzosamente una muestra para analizarla pues solo así estaría seguro de cual es y por lo tanto fabricar su antídoto, aunque si es la que pienso, quizás no tenga antídoto alguno-dijo Severus tranquilamente, pues no le convenía alterarse ya suficientemente lo estaban los pelirrojos como para que también perdiese los nervios.
-¡Entonces realmente buscan hacerle daño a Harry! Pues si lo que dices es cierto /que no tengo duda de ello/ en verdad que son malvados y por lo tanto no podemos permitir que se salgan con la suya /por muy familia que sean, nuestra/ y por eso ¡Tenemos que encontrar a Harry, antes que ellos y evitar así que caiga en sus manos!-dijo Charlie con decisión.
-¡Muy bien! Creo que en eso, todos estamos de acuerdo, ahora la pregunta es ¿Cómo? Y por ¿Dónde empezamos?-dijo Fred con calma y seriedad, para el asombro de Severus.
-¡Lo primero será conseguir un poco de esas pociones para que el profesor Snape las pueda analizar y crear un antídoto! Después hay que encontrar a Harry para ponerlo a salvo, lo siguiente seria averiguar en ¿Quiénes podemos confiar? Pues así como estos tres ha resultado ser unos malvados, bien podría haber más alrededor de nuestro amigo ¿No les parece?-dijo George tan serio como su hermano.
-¡Bien, entonces comenzaremos por ahí!-dijo Charlie con calma, mientras junto con los gemelos y Severus /este último no del todo convencido, pues salvar a Potter venía siendo ya una costumbre pues así era desde que entro en Hogwarts ¿En verdad creía que ese año será diferente? ¡Por supuesto que no! Así que no le quedaba de otra que ayudar al moreno y a su pareja, pues si no lo hacía por las buenas de todas maneras, terminaría haciéndolo por las malas/ fueron trazando sus propios planes para evitar que aquellas comadrejas tuviesen suerte en sus propósitos.
Mientras tanto en la mansión Malfoy, y luego de tomar un buen baño relajante, tras darse cuenta de la desaparición de Émeraude, Draco lucia de nueva cuenta vestido con un cómodo conjunto, es decir un elegante pantalón de algodón de color crema, así como una fina camisa de seda azul claro y por encima un delgado suéter azul marino pues con todo y ser verano, la mansión era algo fresca interiormente, así que más valía no enfermarse pues no sería agradable.
-¡Mimy, ven!-dijo Draco al aire mientras terminaba de peinar su cabello y al terminar de decir aquellas palabras un pop se dejo escuchar.
-¿Mando llamar, señorito Draco?-cuestiono una elfina domestica, mientras hacia una ligera reverencia al rubio.
-¡Si, Mimy! Sabes ¿Dónde se alojo, Remus?-pregunto Draco, sin dejar de peinarse en ningún momento.
-¡El amo nuevo, se ha alojado en la habitación azul, señorito!-respondió la elfina como si nada.
-¡Bien, puedes marcharte, Mimy!-dijo Draco, despidiendo a la elfina con un gesto de su mano.
-¡Como diga, señorito Draco!-dijo la elfina respetuosa, desapareciendo con un sonoro pop.
-¡Muy bien, antes de buscar a Émeraude; debo hablar con Remus! Hay muchas cosas que aclarar entre los dos-pensaba Draco decidido, terminando de arreglarse, luego de lo cual salió de la habitación.
Y al cabo de unos minutos llego ante la puerta de la habitación de Remus, y con algo de inseguridad, llamo a la misma….
-¡He dicho que no quiero hablar contigo, Lucius!-exclamo molesto Remus mientras abría de golpe la puerta para encarar al insistente rubio, solo que no era quien creía.
-¿Draco?-cuestiono Remus extrañado al darse cuenta de quién era en realidad, volteando a uno y otro lado del pasillo, asegurándose de que el rubio mayor no se encontraba por ahí, sino solo el joven dragón.
-¡Mmm...…. Si soy yo…. Este Remus….!-comenzó Draco un poco nervioso, así como extrañado por el comportamiento del castaño, quien siempre era muy tranquilo y sosegado pero por lo que veía con todo lo acontecido hasta él había perdido la compostura, algo que no era de extrañar.
-¡Lamento mi comportamiento, Draco! Pero es que Lucius me tiene harto, con tanto insistir que no me cambiara de habitación que por un momento he pensado que se trataba de él; pero ¿Qué estás haciendo aquí? ¿Quieres algo?-pregunto Remus más calmado, mientras veía al joven asentir.
-¡Así es! ¿Podríamos hablar, por favor?-dijo Draco con nerviosa calma, viendo como el castaño ponía una expresión aun más seria que antes.
-¡Por supuesto, adelante!-dijo Remus seriamente, mientras se hacía a un lado para darle paso al rubio, quien no tardo en entrar a la habitación y una vez dentro….
-¡Toma asiento, Draco!-dijo Remus amablemente, señalando un cómodo sillón, cerca del gran ventanal, a la vez que él mismo tomaba asiento sobre el borde de la cama, quedando a un lado pero aun así podía ver perfectamente al rubio, dándose cuenta de lo nervioso que se encontraba, a pesar de esforzarse bastante porque no se le notara.
-¡Gracias!-susurro apenas audible, el rubio mientras se sentaba donde el castaño le había dicho, anteriormente.
-¿De qué quieres hablar, Draco?-cuestiono Remus tranquilo, aunque intuía de que era de lo que el joven deseaba charlar.
-¡No se…. Por dónde empezar… tal vez….. Debería de por….. Pedirte disculpas….. Por lo que sucedió….. En mi habitación!-dijo Draco nervioso e inseguro, sin atreverse a ver al castaño directamente, excepto de reojo, igual a como él lo hacía con su persona.
-¡Ya veo! Pero no es necesario que me pidas disculpas, por el contrario ya que también yo debería de pedírtelas puesto que mi comportamiento hacia ti, no fue en lo absoluto, correcto; especialmente porque intentaba ayudarte y casi acabe por “seducirte”-dijo Remus calmado, viendo como el rubio se sonrojaba levemente ante sus palabras.
-¡Lo sé! Así como sé que no fue correcto, el comportamiento de ninguno de los dos y por ello es que pido disculpas; pues se supone que quería ayuda y solo conseguí liarnos a los dos, de tal manera que si padre no hubiese entrado, en estos momentos….. Tú y yo….. Bueno creo…. Que me comprendes ¿Cierto?-dijo Draco un poco más sereno, aunque no del todo por lo que el castaño podía apreciar.
-¡Si, perfectamente Draco! Y si Lucius no hubiese entrado……-susurro Remus con suavidad pues no quería continuar incomodando al joven.
Creándose un silencio entre ambos, aunque no era incomodo, más bien por el contrario era como si buscaran una manera de continuar con aquella charla sin que esta resultara aun mas incomoda de lo que ya estaba siendo. Por lo que al cabo de algunos minutos……
-Y a propósito de eso ¿Es verdad? ¿Eres mi padre?-cuestiono Draco, curioso, volteando a ver al castaño, esta vez de manera directa.
-¡Es posible! No creo que Lucius se inventara una mentira como esa; tu padre será todo lo que puedas imaginar, un orgulloso, arrogante, engreído, egocéntrico, vanidoso, manipulador, y un montón de mas “lindísimos defectos” /que para él pueden parecer virtudes/ que has de conocer mucho mejor que yo, así que para que continuar citándolos todos ¿No te parece? El hecho es que mentir no es algo que se le dé bien, al menos no una mentira tan elaborada y mucho menos en un situación como en la que nos hallo, en donde perdió todo su glamour y auto control; y dado el hecho de que hace mas de 19 años fuimos pareja ¡Si puedes serlo, Draco!-dijo Remus con calma.
-¡OH! Y ¿Hay manera de confirmarlo? No es que me desagrade la idea de que puedas ser mi padre, sino todo lo contrario ¡Me encantaría que realmente lo fueras y no solo fueran invenciones de mi padre Lucius! Pero siendo honesto de verdad quisiera estar seguro de que lo soy, te he tomado cariño /como la pareja de Lucius, pero quisiera poder llamarte papá/ pero me gustaría ¡No se… ser algo más!-dijo Draco inseguro de estarse expresando correctamente.
-Entiendo lo que tratas de decir, así como comprendo que te cueste expresarte y respondiendo a tu duda ¡Si, hay una manera de confirmarlo!-dijo Remus de manera serena y segura, tratando de brindarle confianza al rubio.
-¿Cuál es…. Remus?-pregunto Draco curioso y un poco más calmado al notar la calma del castaño.
-¡Te lo mostrare, pero primero tienes que levantarte y no te preocupes no te dolerá, ni nada por el estilo!-dijo Remus con una franca sonrisa, mientras se incorporaba y sacaba su varita, esperando que el rubio le hiciera caso y se levantara también, lo cual no tardo en ocurrir y una vez que ambos estuvieron de pie……
Remus comenzó a recitar un conjuro, al mismo tiempo que señalaba de él a Draco y viceversa, de tal manera que al terminar un par de lazos se comenzaron a formar alrededor de las muñecas izquierdas de ambos.
-¿Qué estas haciendo, Remus?-pregunto curioso Draco, pues no entendió lo que el castaño decía, pues sonó algo así: “ Vader –señalándose a si mismo (Remus)- Filio –señalando a Draco- Lazum Paternis Mostrare” creándose –al terminar- el par de lazos trenzados, siendo en el caso de Remus, uno de color completamente dorado, mientras que en el de Draco era un lazo de color plateado así como dorado y los cuales no tardaron en enlazarse de tal manera que era imposible reconocer cual era el de Remus y cual el de Draco.
-¿Qué significa esto, Remus?-dijo mas que curioso, extrañado Draco al ver aquello.
-¡Que eres hijo mío! Es decir, los colores del lazo filial, son únicos de una familia, así pues si existe algún parentesco entre ambos, los colores se muestran de alguna manera por ejemplo en mi caso cuando tus abuelos se casaron, ambos llevan los colores de sus familias pero al formar la propia dichos colores se mezclaron hasta formar el dorado de mi lazo, por lo que solo aquellos Lupin’s con algún tipo de familiaridad llevan dicho color, por lo que al llevarlo tú, Draco, significa que eres un Lupin y por la intensidad del dorado, lo eres de manera directa o sea, un hijo; pues si fuese alguno otro parentesco el brillo seria algo mas apagado pero en tu caso es exacto al mío, así que eres mi cachorro-explico Remus, con calma, tratando de ser claro aunque sabia que su cachorro tendría algunas dudas importantes.
Y así……
Continuara……
Notas finales: Espero les guste este capítulo, así mismo les dejo con algunas ideas para el siguiente capitulo, por lo que nos veremos para el 21 de mayo con la próxima actualización.
Ideas del próximo capitulo.
*Lucius por su parte también hará planes para reconquistar a su castaño y para ello ira con Severus pues su ayuda será decisiva para su éxito.
*Émeraude será testigo de todo esto, así como de la llegada de las comadrejas a la mansión -pero no será descubierto, todavía, al menos no por los pelirrojos pero si por Remus-
*Con la ayuda de Moony, Harry volverá aparecer pero solo por unos instantes, pues decidiera permanecer como Émeraude por mucho mas.
Luzy Snape.
PD: ¡No olviden votar por sus fics favoritos pues la votación se cerrara en próximo mes!
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