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Cuidado con el amor por Higary

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Notas del capitulo:

Holi hola, gente bonita!! Muchas gracias por los reviews recibidos en el primer capi n_n son muy importantes para mí porque es el primer fic donde pongo a Naru con alguien que no sea el vengador favorito de las lectoras ¬¬ Aquí les traigo el dos, la verdad ya tiene casi una semana que terminé este capi, pero no tenía tiempo de transcribirlo, pero ahora sí. Perdonen por no haber respondido sus comentarios, pero ando corta de tiempo, sin embargo prometo que para el viernes estarán todos contestados XD Bueno, creo que es todo de momento, sin más les dejo para que disfruten la historia, ah, y no se pierdan "El rincón del tío Kyuubi!: ¡¡a leer!!

Aclaraciones: Toda la historia del fic se desarrollará a lo largo de tres años, para que no se les haga raro que en un capi estén en determinada fecha y al siguiente ya ha pasado un mes.

Disclaimer: Naruto no me pertenece, es propiedad del maldito Uchiha abandona zorritos, y éste a su vez es propiedad del yaoi fan de clóset conocido como Kishi-sensei.

CAPÍTULO 1.2: EL NOVIO DE MI HERMANO

 

Una semana había pasado desde que Naruto le contó a Sasuke que era el novio de Itachi. Después de aquél día, se llevaban mejor, pero el rubio sentía que el azabache siempre evitaba quedarse a solas con él.

 

Aquél día ya se encontraban en el descanso. En los pasillos se oían gritos y exclamaciones de admiración.

-Para tanto alboroto ya se imaginarán quién es, ¿verdad? -comentó Sai

Sasuke bufó molesto. Segundos después, Itachi y sus fieles amigos, Kisame y Tobi, ingresaban al salón.

-¡Kyyyyaaaa!

-¡Hola, Itachi-sama!

-¡Qué guapo!

-¡Hola, Kisame-sempai, Tobi-sempai!

-¡¡Naru-chan!! -el pelinegro mayor abrazaba posesivamente al ojiazul- Ya que tú no vas a mí, tu príncipe viene a tu encuentro.

-Pero Ita-chan, fuiste tú quien me dijo que no fuera a donde están los de quinto y sexto, a menos que fuera contigo, Kisa-chan o Tobi-kun.

-Ah, es verdad. Jejejeje, es que no quiero arriesgarme a que alguien me robe a mí Naru-chan -restregaba su mejilla con la del rubio

Ante tal escena, Sasuke se puso de pie y fue hasta la puerta del salón.

-¿A dónde vas, Sasu-chan? –le preguntó su hermano

-No te importa –contestó

Sai y Shino se miraron, suspiraron y decidieron seguirlo.

-Como que Sasuke-kun está rato últimamente, ¿no? -preguntó Ino

-Él siempre es raro -contestó Kiba

Chouji y Shika asintieron a lo dicho por el castaño.

 

-Oye, Naru, es una pena que no quisieras entrar al club de karate -dijo Kisame

-¡Sí! Ita-chan estaría muy feliz si hubieses ido –añadió Tobi

-Pero ustedes saben que estoy ocupado en las tardes.

-No importa. Igual tengo a Naru-chan para mí, jajajaja –reía el moreno

Algunos miraban al rubio con envidia, las yaoi fans miraban la escena con corazones en los ojos y agradecían estar en el mismo salón que el novio del chico más popular de la escuela.

 

-No sé qué le ve Itachi-sama a ése mocoso -decía cierta pelirosa con celos-. Si parece un monstruo con esas marcas en la cara.

-Seguro que se le ofreció descaradamente -respondió la pelirroja-. Recuerdo que en secundaria Itachi-sama salía con muchas personas, pero nunca andaba seriamente con alguien.

 

Esa era la opinión dividida. Después de la enorme sorpresa que los alumnos de la preparatoria se habían llevado al saber que Uchiha Itachi tenía novio, y que éste era nada más y nada menos que el lindo rubio ojiazul de primer semestre, todos comenzaron a preguntarse cómo es que acabaron siendo pareja.

 

En otra parte, Sasuke estaba sentado bajo un árbol lejos de las miradas curiosas. Se sentía molesto y frustrado.

-¿Qué te ocurre, Sasu-bastardo?

Bufó al descubrir a sus dos amigos ahí.

-Nada que te importe, pintor barato.

-Pues nos dio la impresión de que volviste a huir por ver juntos a Naruto e Itachi-san -dijo Shino

-... Es que son tan empalagosos que no lo soporto.

-Mmm... ¿Es por eso? -el Uchiha arqueó una ceja- Sasuke, yo siempre te molesto, pero tú sabes que te estimo mucho por todo lo que has hecho por mí. Eres un baka amargado, pero hace una semana vi que estabas inusualmente feliz, hasta que Itachi volvió y Naruto te dijo que son pareja.

-Él te gusta, ¿verdad, Sasuke? -preguntó el Aburame

El otro no respondió, sólo les dio la espalda.

-No te culpo, Naru-chan es muy lindo y amable, pero no está libre, así que olvídate de él. Seguramente podrían llegar a ser muy buenos amigos.

-Lo sé -murmuró-. Eso ya lo sé... No necesitas recordármelo.

Sasuke entonces decidió trazar un nuevo plan: ver al rubio sólo como un amigo, eso era todo.

 

Las inscripciones para los clubes estaban a punto de terminar, así que los que aún no decidían, contaban con poco tiempo.

-¿Entrarás a algún club, Sasuke?

Naruto quería aliviar la tensión que últimamente se formaba entre ellos, después de todo el azabache le agradaba pese a lo prepotente y orgulloso que podía llegar a ser.

-No, prefiero tener tiempo libre. Oye, dobe, ¿trabajas medio tiempo?

-Sí, soy mesero en un café llamado Akatsuki.

-Oh, yo lo he visto -intervino Sai-, pero no he entrado porque el dueño me da miedo. Siempre que paso por ahí trata de que me integre a su religión.

-Ah, sí. Hidan-san es así.

-Yo he visto al otro sujeto que parece obsesionado con el dinero -dijo el de lentes

-Jejeje, ése es Kakuzu-san.

-Con razón eres así, teniendo jefes tan locos.

-Ja ja, qué gracioso, teme.

 

Sakura y Karin seguían sintiendo celos de que en tan poco tiempo aquél rubio se pudiera acercar tanto a Sasuke.

-Oye, niño -lo llamó la basura-, deja de andar de ofrecido.

-No tienes descaro. Coqueteas con Sasuke-kun a pesar de ser novio de Itachi-sama.

Sasuke apretó los puños con furia.

-Como son mujeres no les había dicho nada, pero -la expresión del rubio se tornó muy seria y atemorizante-... Yo también tengo mi límite, y más les vale que no lo sobrepasen.

Aquellas dos no eran tan tontas como parecían, así que bufaron molestas y fueron a sus asientos.

-¡Wuau! Naru-chan, te mirabas muy peligroso -dijo Sai con asombro

-Perdonen que tuvieran que ver eso. Auch -se sobó la cabeza al recibir un golpe de su amigo-, Kiba, me dolió.

-Te lo mereces -bajó el tono de voz-. No seas baka, ¿o acaso quieres que sepan lo de "Kyuubi"? Se armaría un gran escándalo.

-Tienes razón. Y también seguro harían preguntas sobre "Shukaku".

-¿Qué tanto cuchichean ustedes dos? -preguntó el pintor

-Nada.

 

Las clases terminaron y los que se habían unido a algún club iban rumbo a sus actividades. Kiba se encontraba en el campo de fútbol soccer, y a unos metros de él miró a su compañero que siempre usaba gafas oscuras.

-¿Eh? Ho-Hola, Shino -se le acercó con nerviosismo-. No sabía que también estarías aquí.

-Hn, apenas lo decidí hoy -respondió

-¿Uh?, ¿y eso por qué?

-… -volteó la cara hacia otro lado

-… Perdón, eso no es de mi incumbencia.

El otro negó, restándole importancia.

-Este... ¿y en secundaria estabas en el equipo de fútbol?

Volvió a negar.

-Ahhh -ya no tenía idea de qué decirle- <<Estoy nervioso. Este tipo es muy extraño, y el que habla con él en clases es Naruto, no yo>>

 

Ahora vayamos a otro campo, donde se hallaban las porristas, y en la cancha de al lado estaba el club de voleibol femenil.

-Pero mira qué tenemos aquí, Karin -dijo la pelos de chicle-, nada más y nada menos que a Ino-cerda.

-¿En serio piensas estar aquí, cerda? Deberías pensarlo mejor antes de que te dejemos en ridículo.

-¿Por qué no van a molestar a alguien más? Frentona, Karin-zorra... No, espera, no puedes ser zorra. Naruto parece un zorrito y es muy lindo, y como tú no eres nada similar a él, pues no puedes ser zorra. Mmm... Ya sé, serás Karin-víbora.

Algunas chicas que escuchaban la discusión, rieron en voz baja.

-¡¿Cómo te atreves a compararme con ese mocoso ofrecido?! ¡Yo soy mejor que él!

-¡¡No llames así a Naruto!! -rugió la rubia

-¿Naruto? -murmuró una chica- ¿Uzumaki Naruto?

-¿Qué no es el novio de Itachi-sama?

-No pueden hablar así del novio de Itachi-sama.

-¡Ya basta! -ordenó una voz

Todas voltearon encontrándose con una chica de cabello castaño recogido en dos chonguitos.

-¡Capitana!

-¡Tenten-san!

-A las nuevas, les aviso que no quiero problemas o las echaré del club sin titubear -luego sonrió-. Bueno, dicho eso, me presento: Soy Tenten, la capitana y entrenadora del equipo de porristas, estoy en quinto semestre y espero que todas den su mejor esfuerzo.

-¡Sí!

-¡Están distrayendo a mis chicas! ¡Largo de aquí!

Voltearon a la cancha de junto y vieron a una rubia que gritaba a varios jóvenes que se encontraban allí.

-Pero Temari-chan...

-Sal conmigo.

-No, conmigo.

La chica ya tenía un tic en el ojo.

-Si saben lo que les conviene -sonrió malévolamente-... ¡Más les vale que huyan o no responderé!

-Waaaaaaaaa -salieron corriendo asustados

-Temari-chan -llamó la castaña-, siempre es lo mismo. No armes escándalo que distraes a todos.

-Jejeje, discúlpeme, senpai -dio media vuelta y regresó a su entrenamiento

-¡Sabaku-senpai es tan bella! -comentaban

-Sí, es una de las más populares.

-Es extraño que aún no tenga novio.

-Vaya -murmuró Ino-, no sabía que Temari fuera tan impresionante.

-Estamos de acuerdo.

La chica se asustó al oír esas voces tan cerca de ella. Volteó rápidamente y respiró aliviada al ver a sus dos amigos.

-Chouji, Shikamaru, no vuelvan a asustarme de esa manera -los regañó-. Por cierto, ¿qué hacen aquí?

-Olvidaste esto -dijo el flojo pasándole un cuaderno

-Eres demasiado despistada con tus cosas, Ino.

-Jejeje, lo siento, no lo volveré a hacer.

Vio al Nara, pero notó que los ojos de éste se desviaban hacia una de las canchas.

-¿Shikamaru? -lo llamó con desconcierto

-… Ah, sí, ya no vamos.

-Hasta mañana, Ino.

-… Sí, claro, hasta mañana.

Sus amigos se marcharon y de nuevo ella dirigió su mirada hacia las canchas. Era el lugar donde estaba entrenando el club de voleibol femenil.

-¿Acaso Shikamaru...? No, deben ser imaginaciones mías.

Pero Shikamaru no había sido el único en mirar furtivamente a alguien, porque la rubia de cuatro coletas también se percató de que aquél joven estaba cerca.

-¿Por qué sonríe, Temari-senpai?

-Jajaja, por nada.

 

Sasuke ya se marchaba a casa, y solo. Sai había decidido entrar al club de arte, y Shino extrañamente dijo que iría al de fútbol. Además también estaba libre de las molestas Sakura y Karin. Caminaba con tranquilidad hasta que pasó por el pequeño dojyo del club de karate, donde muchas chicas miraban desde la puerta.

-¡Kyyaaaa! ¡Itachi-sama es lo máximo!

-¡Es el mejor, Itachi-sama!

El pelinegro les guiñó el ojo, provocando que gritaran aún más emocionadas, y despertando molestia en Sasuke.

-<<¿No se supone qué está saliendo con Naruto?, ¿entonces por qué les coquetea a ésas?>>

-¡Otouto! -gritó yendo a abrazarlo. Sí, Itachi tenía vista de águila cuando se trataba de su hermano o de su novio- ¿Ya te vas a casa, otouto-baka?, ¿por qué no entrenas un rato con nosotros?

-No tengo ganas.

-Mmm... Otouto, tal vez sea mi imaginación, pero me da la impresión de que estos días me has estado evitando.

-.... No digas tonterías, aniki. Sólo es que eres igual de molesto que Sai.

-Jajaja, ¿en serio? Entonces pensaré seriamente en adoptarlo. De todos modos ya se parece a ti físicamente.

-Eso nunca. Te veo en casa, aniki.

-Claro, aunque quizá me tarde un poco más en llegar. Quiero ir a ver a Naru al café al menos un rato.

Sin más se alejó de Sasuke, por lo que no se percató de que éste apretó sus puños con impotencia.

 

El azabache caminaba de nuevo a paso rápido hacia su casa, pero a medio camino tomó otro rumbo hasta detenerse frente a un local donde se leía: "Akatsuki café". (Higary: Qué original mi nombre, ¿verdad? ¬¬) (Kyuu: Mejor le hubieras puesto el mío ¬¬) (Higary: No, zorrito, el tuyo lo ocupo para otra cosa n.n) Cofcof, volviendo a la historia, el Uchiha ahora se debatía el por qué estaba allí y si debía entrar o huir.

-<<Bueno... ya estoy aquí, así que entraré por un café. SÓLO vine por el café>> - (Higary: Claro, Sasu, te creemos ¬¬)

-¡Bienvenido! -escuchó el saludo al entrar- Ah, hola, Sasuke.

Quien lo recibió era Naruto. Lucía muy adorable con aquél traje de mesero.

-Eh... hola -desvió la mirada.

En ese momento sólo habían 6 clientes dentro del café, una pareja de enamorados, 3 colegialas que parecían estar coqueteándole (ignoró eso), y un rubio que escribía en su laptop mientras otro mesero, pero con cabello rosa, le servía una taza de café y un pedazo de pastel. (Kyuu: Adivinen quiénes son ¬¬ Que no les extrañe de repente ver a personajes de otras series, es por falta de elenco)

-Oh, cliente nuevo. Anda, Naru, llévalo a una mesa.

Junto a ellos había aparecido un tipo que tenía la parte baja de su cara cubierta con una especie de máscara. Le recordaba vagamente a Kakashi.

-Sí, Kakuzu-san. Por aquí, Sasuke.

-¿Lo conoces, Naru? -los detuvo

-Sí, somos amigos y además estamos en el mismo salón de clases –explicó sonriendo

-Ya veo, jojojo. ¿Por qué no te tomas unos minutos de descanso? -el rubio se desconcertó, por lo que su jefe le susurró- Se nota que es un amargado, hazlo adicto a nuestro café –dijo con avaricia

-Me suponía algo así –suspiró- ¿Pero no habrá problema? Porque Shuichi-senpai ya está embobado con su cliente favorito.

-Nah, no te preocupes. Yuki-san nos hará ricos con todo el dinero que a diario gasta en café y pastel sólo para ver a Shu. Le diré a Hidan que se encargue de recibir a los clientes.

-¡Está bien! -jaló al azabache hasta sentarlo en una mesa algo oculta de los demás- Aquí estarás a salvo –vio a Sasuke alzar una ceja-. No te gustó que esas chicas casi te comieran con los ojos, ¿verdad? -sonrió al decirlo

-¿Lo notaste?

-Sí. Eres un poco difícil de leer porque siempre estás serio, pero hay veces que haces gestos que te delatan.

Otra vez algo brincó dentro de su corazón. Miró intensamente al chico frente a él, hasta que el propio ojiazul desvió la mirada.

-Ehm... V-Voy a traerte un café, espera un momento -se levantó aún con nerviosismo- <<La mirada de Sasuke era tan penetrantes que... -sacudió su cabeza- No, no pienses en eso, Naruto>>

Una vez solo en la mesa, el Uchiha suspiró y su expresión se tornó melancólica.

-<<Naruto... si fueras de cualquier otro no me importaría arrebatarte, pero... ¿por qué tuviste que elegir precisamente a mi aniki?>>

-¡¡Alaben al dios Hashin!! ¡¡Él es el verdadero camino a la felicidad!!

Aún con sobresalto, el ojinegro miró como un peligris acosaba a dos chicas que estaban en la entrada.

-¡Hidan! ¡Te he dicho que no espantes a los clientes con tus cosas religiosas! -el otro dueño del café lo golpeó en la cabeza

-Auch, eso duele, Kaku-chan. ¡A Hashin no le gusta que los esposos peleen! -gritó abrazándolo

-¡Baka, suéltame! ¡Y para empezar todavía no estamos casados! -luchaba por liberarse de sus garras, pero era imposible

-¡Si quieres nos casamos ahora mismo, Kaku-chan!

-¡Hidan, quítate!

-Eh... jejeje, perdón - se disculpaba el mesero pelirosa con las clientas-. Adelante, pasen -les sonrió provocando que ellas se sonrojaran, y de paso se ganaran una mirada de odio de parte del rubio escritor por haberle quitado la atención del chico

Naruto regresó ya con el café y miró el espectáculo que sus jefes estaban dando.

-Así son ellos, que no te extrañe –sonreía con nerviosismo

-Este lugar es tan loco como me imaginé –comentó el otro

-¡Naru, Shu, ahora sí oficialmente serán nuestros hijos! -seguía gritando el peligris- Jajajajaja.

Valía la pena ir al café sólo para ver las locuras que hacían aquellos dos hombres. (Higary: Creo que Hidan me salió más infantil que Tobi -_-0)

Sasuke miró su reloj, no faltaba mucho para que el entrenamiento del club de karate terminara y como sabía que su hermano corre muy rápido, decidió marcharse. Pagó el café y se dirigió a la salida.

-Gracias por venir. Nos vemos mañana, Sasuke.

-Hn.

-¡Y recuerda seguir las enseñanzas de Hashin!

-Cállate ya –espetó su pareja y sonrió al azabache-. Esperamos verte de nuevo por aquí.

 

Un nuevo día comenzó. Sasuke llegó a clases en compañía de Sai, porque Shino se había adelantado por unos asuntos del club. Más adelante de ellos vieron a la pareja más conocida de la escuela, platicando bajo unos árboles con Kisame, Tobi y Temari. Inmediatamente Sai volteó a ver a Sasuke para analizar los gestos que pondría, pero se sorprendió cuando éste siguió caminando como si nada, ignorando totalmente a aquél grupito. El timbre sonó y todos tomaron sus asientos para esperar a Zabusa-sensei, su profesor de Matemáticas.

-¡Hola, chicos! -los saludó Naruto llegando

-Buenos días, Naru-chan.

-Buenos días -saludó Shino

-Dobe, te quería preguntar, ¿quién es ese tal dios Hashin al que tu jefe tanto adora?

-Ah, jejeje, ni idea. Cuando empecé a trabajar en el café ya decía todo eso.

-Sasu-bastardo, ¿fuiste a la cafetería donde trabaja Naru-chan?

-Ayer. Es que tenía ganas de comprar un café -volvió a ver al rubio-. Ah, y otra cosa, ¿a tus jefes no les importa que el mesero de cabello rosa esté con el rubio aquél? Se nota que le lleva varios años.

-Pues sólo le lleva cuatro –notó el desconcierto del otro, por lo que decidió explicarle-. Aunque no lo creas, Shuichi-senpai tiene diecinueve años, y Yuki-san tiene veintitrés.

-Yo pensaba que tenía tu misma edad, unos quince o dieciséis.

-Ellos dos parecen amigos de la infancia -miró al pintor-. Sai, ¿qué pasa?

-Shino, en el receso necesito hablar a solas con Sasuke, ¿de acuerdo?

-Me mantendré alejado.

 

En el descanso, Sai llevó al Uchiha hacia el patio más alejado.

-¿Qué quieres, Sai?  Tengo hambre.

-Sasuke, somos amigos, por lo tanto pienso que es mí deber decírtelo: Por favor, olvídate de Naruto.

Sasuke lo miró escéptico.

-No te entiendo. Ayer me dijiste que él y yo podríamos llegar a ser buenos amigos, y eso es lo que estoy intentando. Ya no me digas tonterías sin importancia -dio media vuelta y se marchó

De unos árboles, apareció Shino y se detuvo junto al pelinegro.

-¿Por qué tienes esa expresión tan angustiada? -le preguntó

-Porque... es cierto que lo está tratando de ver como a un amigo, pero... lo está haciendo para no verlo como el novio de su hermano. Y la verdad me preocupa que esto pueda acabar mal para él.

-Si eso ocurre será por decisión del propio Sasuke. Lo único que podemos hacer es permanecer a su lado.

-Es triste, pero tienes razón. Aún así quisiera poder hacer algo para evitarle sufrir. Se lo debo... por todo lo que hizo por mí.

 

Aunque dudo que exista una forma en que podamos estar cerca… sin que ello cause dolor… 

 

 

El rincón del tío Kyuubi

Kyuu: Hola n_n La verdad no pensé que tendríamos tan buena respuesta por esta sección, pero me da mucho gusto. Su tío favorito les agradece sus mensajes, así que comencemos.

 

Querido tío Kyuubi:

Es bien sabido que la comida preferida de Naruto es el ramen, pero ¿cuál es la comida favorita de Sasuke? o.O No me preguntes dónde, pero por ahí escuché que le gustaban los tomates. Si es eso cierto, ¿a qué se debe?

Estudiante de cocina fracasada

 

Respuesta del tío Kyuubi:

Querida Estudiante de cocina fracasada: Es cierto, déjame decirte cómo comenzó. Cuando él era un bebé, un día sus padres tuvieron que salir y lo dejaron al cuidado de su hermano mayor. El pequeño comenzó a llorar e Itachi no sabía qué hacer para callarlo. Lo intentó de todo, pero ya en el último momento, y completamente desesperado, le dio un tomate y el bebé felizmente se lo comió. Desde ahí se aficionó a los tomates.

 

Querido tío Kyuubi:

¿Por qué la gallina cruzó la calle?

Curioso chicken

 

Respuesta del tío Kyuubi:

Querido Curioso chicken: Porque ni modo que la calle cruzara a la gallina ¬¬

 

Querido tío Kyuubi:

¿Qué contiene la leche en polvo? Dicen que la leche en polvo es peligrosísima, así que quiero saber qué tiene.

Chica del barrio

 

Respuesta del tío Kyuubi:

Querida Chica del barrio: Tengo un sobre y revisé sus ingredientes, pero yo no le hallé nada peligroso. Pero seguiré investigando, y si descubro algo nuevo, te informaré n.n

 

Querido tío Kyuubi:

¿Tienes muchos hermanos? Lo digo porque al parecer tienes muchos sobrinos perdidos, y me incluyo entre ellos ^o^

Sobrino perdido del tío Kyuubi

 

Respuesta del tío Kyuubi:

Querido Sobrino perdido del tío Kyuubi: Esa es una muy buena pregunta. No tengo idea de exactamente cuántos sobrinos tengo, pero pues podríamos decir que los otros ocho bijuus son algo así como mis hermanos.

 

Querido tío Kyuubi:

¿Cómo puedo hacer para que un posesivo pelirrojo me deje en paz por un tiempo y así conocer más personas, como por ejemplo un bello zorrito?

Amante de la arena

 

Respuesta del tío Kyuubi:

Querido Amante de la arena: Kazekage amorcito mío *¬*  Cofcof, digo, no te preocupes por eso, yo te libero para que estés con ese bello zorrito *u*

 

Kyuu: Gaara *¬* Ehem, eso es todo por hoy, queridos sobrinos. Seguiré esperando sus mensajes, nos vemos en la siguiente emisión n.n

El rincón del tío Kyuubi, off

Notas finales:

HIGARY NOTAS:

Eso es todo, queridas lectoras. Como ya dije arriba, pronto responderé a sus reviews tan lindos. Ah, antes de que se me olvide, quienes hayan leído alguno de mis otros fics largos, verán que usualmente escribo preguntas con respecto al siguiente capi, o hasta su nombre, pero con esta historia haré esa excepción para que todo sea sorpresa, jujuju. Para que vean que no soy tan mala, les diré que en el próximo habrá más roces sasunarutescos, además de que hará su aparición Gaarita (Kyuu: Mi sexy pelirrojo *o*). Ahora sí, me despido, recuerden que espero sus críticas, amenazas, flores, regaños, felicitaciones, consejos, pedradas, saludos, jitomatazos y demás. (Kyuu: Y mensajes para su tío consentido n_n). Se me cuidan mucho y bye byeeee!! XD


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