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Mercy rain por kozzha

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Notas del capitulo:

Hola!!

Como va todo?

Yo Bien, no me puedo quejar. Ya es Viernes!!!! wujú!

´Después de disfrutar escribir y leer mi extra jejeje. Si, soy una loca que hago fics de mis fics. Pufff si vieran cuantos tengo!!!

Bueno ya.

Éste cap va dedicado a mi querida hermana Letuá, quién saber q soy una fujoshi de hueso colorado y aún así me quiere y me acepta tal cuál soy.

De hecho les comparto un post que me puso en mi fb después de ir a ver a Super Junior.

"nena me dio mucho gusto verte tan feliz ayer saliendo de tu concierto, tu carita tan contenta, así quisiera verte más seguido, pero como tus chinitos no pueden venir diario aunque sea escuchalos para que siempre tengas esa sonrisa en tu cara, te quiero mucho!!!!"

Así o mas linda??? La amo!!!! Por eso éste capi va dedicado a ella. A parte de que casi todas las anécdotas que puseaquí fueron de ella, una que otra de mi tío, algunas de mi comadre y otras fueron ideas de Kira namida ;).

Bueno, pues referente al capi:

Yuki compró casa nueva!!!! wujú!!!

Hiromi y Shu hablan.

Hisoka divaga jajaja y casi expresa sus sentimientos a Tat, ouch >.<.

Tatsuha sufre de dos hemorragias nasales, pq???

Nuevo personaje, aún no tiene nombre jajajaaj.

Invitación a la fiesta de Mika O.O

Quién es el nuevo manager de Suguru y Hiro??

Delerium participa en el programa "Trapitos al sol" jajajaja.

Eso y muchas cosas más verán en éste capítulo.

Por cierto, el auto rojo de Tat regresó, lo aclaro pq eirishuichi estaba con pendiente de él -.-

Por cierto, alguién le gustaría compartir sus momentos vergonzosos??? Se lo agradecería :D

Disfruten del cap.

 

 

Hisoka y Tamaki salieron de la disquera pasadas de las nueve de la noche.

-Espero y mi amor haya podido animar a Hiromi-dijo Tamaki para después lanzar un bostezo.

-Eso espero.

-Hisoka-la voz de Tatsuha los hizo detenerse. El aludido frunció el ceño y siguió su camino, halando al señor Hiroki-Espera…necesito hablar contigo-dijo el monje, siguiéndolos.

-No quiero escucharte, si es algo referente a un pollo…no.

-Perdón, no era mi intención hacerte enojar, sólo creí que sería algo lindo.

-¿Lindo?-Ono detuvo su andar y encaró al mayor-te burlaste de mí…jugaste con mis…-calló al darse cuenta de lo que iba a decir-Agh…olvídalo-se giró y continuó con su camino.

Tamaki miró a Tatsuha y negó con la cabeza.

-Espera Hiyoko…que diga…Hisoka…

 

 

Capítulo 46.

Unos trapitos al sol.

 

 

Miró la prueba de embarazo por enésima vez, ahora  más que nada deseaba tener a ese bebé y no porque precisamente lo deseara; para nada, simplemente porque no podía quedarse atrás, no ahora que Ayaka estaba embarazada. 

-¿Ya estás lista?-la madre de Tooru entro sin aviso a la habitación de la joven.

-¡Madre!-exclamó la joven, escondiendo la prueba.

-¿Aún no te has vestido?-le dijo la señora con la ceja arqueada.

-Lo siento, ahora mismo me alisto-la jovencita guardó la prueba en un cajón del gran tocador, fingió buscar algo para después negar con la cabeza y ponerse de pie de la silla. Se fue hacia su vestidor y buscó algo que ponerse.

La mujer miró con suspicacia el cajón y con sigilo lo abrió y buscó lo que su hija había escondido, apretó la mandíbula cuando encontró la prueba de embarazo que le indicaba que sería abuela.

-No entiendo por qué yo soy la que tengo que ir a Tokio-se quejó-Él es el que debe de venir a verme a Kioto, como todo un caballero.-al no recibir respuesta Tooru asomó la cabeza y miró a su madre que ceñuda no despegaba los ojos de  la prueba-¿Madre?

-¿Cómo pudiste?-farfulló la mujer.

Tooru salió del vestidor en ropa interior y miró confundida a su mamá.

-¿A qué te refieres?-inmediatamente lanzó un grito ahogado al ver lo que su mayor tenía en las manos-Yo puedo explicarlo…-se apresuró en decir.

-Maldita mocosa-la mujer abofeteó a su hija-Has deshonrado a la familia, tú…mi  única hija, eres igual de promiscua que tu padre-y le miró con desdén.

Tooru se llevó una  mano  a la mejilla herida y apretó la mandíbula.

-De seguro que es de un hombre insignificante, eso te pasa por seguir siendo amiga de Usami, siguiendo su mismo camino. ¿También es músico?

-No tengo por qué responderte-masculló la joven.

La mujer entrecerró los ojos y miró con desdén a su hija.

-Apúrate en vestirte, ahora mismo iremos al doctor…yo no pienso tener un nieto bastardo. ¿Entiendes?

-Me niego…-dijo con firmeza Tooru-No pienso deshacerme de éste bebé-y se acarició el vientre-Este bebé llevará el apellido Uesugi.

-Ja…¿Piensas que Uesugi aceptará a ese bebé?

-Lo hará-y sonrió con seguridad-Yo me encargaré de que Tatsuha crea que es suyo.

 

 

Yuki y Shuichi  estaban dándose una merecida ducha, el cantante se encontraba a espaldas del rubio-para ser más exacta-Yuki había terminado de ducharse, mientras que Shu aún le faltaba enjuagarse el  cuerpo.

El rubio ya llevaba  una semana viviendo en el apartamento de Shuichi, después de su reconciliación, éste había ido por sus valijas a la casa de su amiga Kana.

-Te veo en la habitación-le dijo Yuki a Shu.  En un movimiento rápido quiso salir de la ducha, pero por el escaso espacio que había ahí terminó dándole un codazo en el rostro a su novio. Se giró de inmediato para ver cómo estaba el menor, provocando que volviera a golpear a Shu y de paso él se pegara en uno de sus hombros-¡Maldita sea!-gritó furibundo-No soporto más esto-vociferó y salió de la ducha. Sin secarse se enredó una toalla en la cintura-Hoy mismo busco una casa-abrió la puerta y se golpeó la frente con el marco de la puerta-¡Agh!-se encorvó para poder salir. Dio un portazo en muestra de que estaba encabritado.

-Pero, ¿Por qué se enoja?-dijo Shu sobándose la cara-Yo fui el que se lastimó más.

Desayunaron en silencio, Shu observaba a su amante, quién se mensajeaba con Kana y Karma.

-¿En serio te vas  a ir?-preguntó Shu, dejando su tazón de arroz sobre la mesa.

-Por supuesto, el estar en un espacio tan pequeño me estresa-dijo el rubio, sin despegar la mirada de su celular.

Shindo frunció el ceño y pegó en la mesa.

-Vaya…sigues siendo el mismo.

-¿Eh?-Yuki le miró con desconcierto.

-Después de saciar tu apetito sexual por una semana, me dejas.-le espetó-Increíble.

-¿Saciar mi apetito? Bueno…es obvio ¿No? Más de dos años sin tener sexo contigo…

-Agh, como me enfurece todo esto-apretó los puños.-Jugando con mi corazón…y yo que creí que si me amabas.

-Hey…espera…-Yuki le señaló ceñudo-No sé qué carajos quieres decirme…

-¡Que no entiendes!-exclamó Shu, indignado-Estoy furioso porque  quieres abandonarme de nuevo-le gritó.

-¡Abandonarte!-alzó la voz también Yuki-¿De qué carajos hablas?

-De comprarte una casa.

-Pues sí, quiero comprarme una casa, una muy grande para que los dos vivamos ahí.-musitó ceñudo.

-¿Cómo?-Shu parpadeó-¿Quieres que viva contigo?

-Pues claro-bufó -Le acabo de pedir a Kana que busque una casa con la bañera más  grande para que podamos bañarnos juntos-se sonrojó-y no te lastime más-desvió la mirada de la de su novio.

-Oh…Yuki…-el enojó desapareció y de paso surgió el sentimiento de felicidad.

-Cuantas veces tengo que decirte que me digas por mi nombre-musitó.

-Te amo-y abrazó con fuerza al rubio.

-Yo también…-acarició el cabello negro del menor.

 

 

Hisoka separaba la basura que se había acumulado en esos días. Lavó los pocos trastos y escombró el apartamento, estaba haciendo la colada cuando Hiromi salió de su habitación. Se apresuró en vaciar el detergente y salió al encuentro de su mayor.

-Buenos días hermana-le saludó sonriente el moreno-¿Dormiste bien?

-Sí, muchas gracias-la soprano caminó hacia la cocina y buscó en la alacena.

-No hay muchas opciones que desayunar, pero si lo deseas, puedo ir por algo al súper.

-¿Y el trabajo? ¿No piensas ir?

-Pedí permiso para llegar tarde, quería escombrar el apartamento.- la mayor sintió culpa, ella había ocasionado todo ese desorden en esos días.

-¿Tu ya desayunaste?-el chiquillo negó con la cabeza. Hiromi torció la boca y lanzó un suspiro-Deja me cambio la pijama y vamos a comer algo fuera, yo invito.

-¡Sí!

Fueron a comer udon a uno de los locales cerca del apartamento. Los hermanos ya estaban hartos de la caballa asada.

-¿Ya estás mejor?-le preguntó Hisoka, mientras se peleaba con los fideos.

-Si…gracias por preocuparte por mí.

-No me gusta ver a mi hermanita triste-Hisoka recargó su cabeza en el hombro de la soprano.

-No te preocupes manis, ya no estaré así. Perdóname…-se alejó del menor y le tomó el rostro-Te he descuidado mucho-besó la mejilla de su hermano. Algunas lágrimas recorrieron la mejilla de la mujer.

-¿Hermana?-Hisoka le enjugó las lágrimas.

-Perdóname manis, sólo que aún yo…

-No te preocupes-Hisoka abrazó a su mayor. El guitarrista no insistió y sólo se dedicó a darle animo a su hermana.

Comieron en silencio hasta que  su hermana le instó de que si no se apurada llegaría tarde al trabajo. Encaminó a su hermano y de ahí se fue a ver a Dresde.

En el camino a la disquera, Hisoka pensaba en la situación de su hermana y por más que trataba de ponerse en los zapatos de Hiromi, no lograba entender la magnitud de las cosas. Supuso que sería muy doloroso que la persona que amas sea gay. Inmediatamente pensó en Tatsuha, recordó en la manera tan natural con la que le contó sobre la relación de Shu y Yuki. Él no tenía ningún problema con que su hermano fuera gay; la llama de la esperanza se prendió en su interior para ser apagada al instante. Una cosa era aceptar a su hermano gay y otra muy diferente era que su amigo fuera bisexual y estuviera enamorado de él.

-¿Cómo reaccionaría si le digo de mis sentimientos?-se preguntó el jovencito. No obtuvo una respuesta por lo que decidió no hacer nada al respecto, preferiría mil veces acallar sus sentimientos y conformarse que ser sólo un amigo, a que Tatsuha supiera de sus sentimientos y se alejase de él-Así estoy bien…-susurró-Aunque sea un conformista.

 

 

Hiroshi, Suguru y Sakano miraban el reloj con preocupación, pasada del medio día y K no había aparecido. El norteamericano no era de las personas que llegaba tarde al trabajo.

-¿Estará bien?-preguntó Fujisaki.

-Esperemos que si-suspiró Nakano.

-Estoy  a punto de sufrir de un ataque de ansiedad-instó nervioso el productor.

-Cálmese Sakano-le zarandeó Fujisaki.

La puerta de la sala de ensayos se abrió dando paso a una bella mujer de cabello largo y rizado.

-Yuju…Noriko ya está aquí-vociferó la mujer-A partir de ahora seré su nueva manager.

-¡¿Cómo?!-vociferaron al unísono los tres hombres.

 

 

-Cree usted que fue buena elección nombrar a Noriko como manager de Love and rockets-preguntó K, mirando por el gran ventanal de la oficina de Mika.

-¿Dudas de ella?-le dijo la castaña, con ojos entornados.

-No…pero…

-Noriko es mi mejor amiga y conoce muy bien  éste medio, ella los llevara por el buen camino-se cruzó de brazos y disfrutó del paisaje urbano.

-Sólo espero que no los guíe hacia el lado oscuro-la mujer soltó una risilla-Tu cumples mejor el perfil para ser mi secretario personal.

K le miró con ojos brillosos y sonrió.

-Yes my lady-se hincó y besó la mano de Mika-Como primer trabajo, ¿Desea que entrega las invitaciones?

-No, yo misma lo quiero hacer.

 

 

Cuando Hisoka llegó a su apartamento en la noche, se encontró con Tatsuha y Hiromi hablando tranquilamente. El semblante de su hermana se veía mejor, incluso reía por las cosas que Tatsuha decía.

Ese día Tatsuha se veía increíblemente guapo y el aroma a su loción invadía el apartamento, su corazón se aceleró y no pudo evitar su sonrojo. Fingió seguir enojado con el joven por lo que ceñudo le ignoró y saludó con un beso a su hermana.

-Te traje algo Hisoka-dijo el Uesigi al ver a su amigo centrar toda su atención en su hermana. Ono respondió con un monosílabo. Tatsuha dejó sobre la mesa de la sala una caja de regalo.

-Anda manis, no seas grosero-le codeó Hiromi. Con la boca torcida, Hisoka tomó la caja y la abrió. Frunció el ceño y el tic del otro día apareció de nuevo.

-¿Pero qué demonios es esto?-espetó, sacando el kigurumi de pollo.

-Mi regalo por haberte hecho enojar.

-Es broma ¿verdad?-masculló.

-No.

Estaba por lanzárselo en la cara cuando Hiromi lo tomó y dio un grito.

-¡Qué lindo!-exclamó-Un pollito.

-Si-sonrió Uesugi-cuando lo vi pensé en Hisoka pues creo que él es un pollito salido del cascaron.

Hisoka apretó lo mandíbula.

-¿Un pollito? Yo siempre he creído que es un dragón bebé-la jovencita se llevó un dedo a su barbilla.

-No…parece más un pollito bien tierno.

-Ahora que lo dices…-la chica analizó las palabras de su compañero-Creo que tienes razón, Hisoka parece un hiyoko.

-¿Tú también hermana?-susurró con decepción el menor de los tres.

-Hisoka hiyoko-dijo con ojos brillosos-vamos manis, póntelo.

-¿Qué? No, me niego-dijo ceñudo.

-¿En serio no piensas ponértelo?-la chica hizo un puchero y sus ojos se llenaron de lágrimas-¿Quieres hacer llorar a tu hermana?

-¿Eh?-le miró con ojos se sorpresa-Yo…no…-musitó arrepentido.

Hiromi soltó en llanto.

-¿Cómo puedes hacerle eso a tu hermana?-le recriminó Tatsuha, consolando a Hiromi.

-Es tan cruel Tatsuha, mi hermano es tan cruel.

-Yo…no…lo siento hermana-susurró Hisoka y al ver que su hermana no dejaba de llorar, se puso de pie y tomó el kigurumi-Me lo pondré pero ya no llores.

-¡Sí!-exclamó Hiromi como si nada, mientras que Tatsuha aplaudía.

Hisoka tardo unos minutos en ponerse el kigurumi, Hiromi aprovechó esa gran oportunidad para tomarle fotos a su hermano. Tatsuha abrió los ojos al ver a su hiyoko, sintió que el aire le faltaba y algo escurría de su nariz.

-¡Tatsuha!-exclamó Hisoka, señalándolo-Estás sangrando.

-¿Eh?-se llevó una mano a su nariz y lo comprobó, estaba sufriendo de una hemorragia nasal y todo por ese condenado de Hisoka. Hiromi corrió hacia el sanitario mientras que Hisoka le decía que pusiera la cabeza en alto y le oprimió la nariz. La soprano le hizo un pequeño tapón con papel higiénico y cuando la hemorragia cedió, Hiromi siguió tomando fotos de su hermano.

-Ahora canta una canción manis-le ordenó.

-¿Cómo? Pero…

-La del pollito pío-terció Tatsuha, con los ojos desorbitados.

-¡Sí! ¡Esa!-exclamó feliz Hiromi.

-¡Tatsuha!-vociferó Hisoka-No des ideas-hizo un puchero para colmo del monje quién deseó que a Hiromi se la tragara la tierra y pudiera estar solo con el hiyoko y hacerlo suyo.

-¿No quieres cantar para tu hermana?-lo ojos de Hiromi se llenaron de lágrimas-Qué cruel eres Hisoka Ono-y la jovencita volvió a llorar.

-Calma Hiromi-le consoló Tatsuha-No lo puedo creer de ti-negó con decepción el monje.

Al ver ese par, Hisoka lanzó un gruñido y comenzó a cantar.

 

En la radio hay un pollito
En la radio hay un pollito
Y el pollito PÍO
El pollito PÍO
El pollito PÍO
El pollito PÍO
El pollito PÍO
El pollito PÍO…

 

Hiromi y Tatsuha grabaron al guitarrista cantando aquella absurda canción. Cuando hubo terminado, el pobre jovencito quería llorar de la vergüenza.

Después de satisfacer todos los deseos de su hermanita, Hisoka se cambió para quedar en pijama. Pidieron pizza para cenar y hablaron de banalidades Tatsuha y Hiromi, pues Hisoka seguía en silencio, deseoso de que la tierra lo tragara.

-¡Oh! Se me olvidaba-dijo Hiromi dando un respingo. Se puso de pie y fue hacia el mueble del televisor-Te trajeron esto manis-la jovencita le tendió un sobre al menor.

-¿Para mí?-preguntó con desconcierto.

-Sí, lo trajo una mujer muy bonita-se llevó un dedo a la barbilla-de hecho…-miró de soslayo al invitado-Se parecía mucho a Tatsuha.

El aludido-quién comía pizza-pestañeó varias veces y cuando analizó lo que dijo la chica, se atragantó y comenzó a toser. Hisoka tomó el sobre y lo abrió, leyó el contenido y su rostro se iluminó.

-Es de la señora Mika-dijo.

-¿Quién es ella?-preguntó ceñuda su hermana mayor.

-Es la hermana de Tatsuha-sonrió Hisoka.

-Ahora entiendo-asintió Hiromi.

-Me invita a su fiesta de cumpleaños-dijo jovial el chiquillo-será de disfraces.

-¿Cómo?-terció el monje, ya recuperado y le arrebató la invitación a su amigo-Yo no tenía idea de eso-hizo un puchero.

 

 

A la mañana siguiente, Shuichi se despertó con la intención de hablar con Hiromi, sólo esperaba que las aguas se hubieran calmado un poco.

Se alistó y desayunó en compañía de Yuki, quién insistía en conseguir una gran casa lo más pronto posible.

-¿A dónde vas?-le preguntó el rubio al ver que su novio se ponía los zapatos.

-Iré a ver a Hiromi.

-Oh, es cierto-el mayor se rascó la cabeza en señal de pereza-Ya no me acordaba de ella.

-¿Y tú?

-Iré a  ver unas casas que Kana eligió.

-Bien, entonces ¿Te gustaría vernos en algún lugar para comer?

-¿Te parece el restaurante de maki sushi que está en la esquina de la estación de Shibuya?

-Perfecto-Shuichi le dio un beso de despedida a su novio y salió del apartamento.

 

 

 

Aprovechando que Hisoka se había ido a trabajar, Hiromi se dedicó a escribirle un correo electrónico a Ana, su mejor amiga, la cual estaba estudiando medicina en México. Como su carrera exigía tiempo, las amigas sólo se comunicaban por medio de largos correos. Había recibido varios correos de Ana, pero ninguno había respondido; en el último, la mexicana le había dicho que estaba sumamente preocupada por ella y que esperaba y se encontrara bien, por lo que Ono no lo pensó dos veces e inició su biblia -como le decía Hisoka-a los correos que le mandaba.

Tardó como una hora en poner al corriente a su amiga en todos los pormenores que había sufrido la chica, no pudo evitar llorar de vez en cuando al recordar a Shuichi y su efímera relación.

Una alarma sonó al instante en que ella mandó el correo, vio una señal en el ícono de Skype y creyó que era su amiga. Se llevó una gran sorpresa al ver que se trataba de una video llamada de su madre y abuela.

-Buen día princesa-le saludó la anciana.

-Abuela-sonrió Hiromi y la saludó.

-¿Cómo está mi nena?-en la pantalla apreció la mamá de los Ono.

La señora Noemí era una mujer de mediana edad, tez apiñonada, cabello corto y castaño, ojos inexpresivos y grises como su hijo Hisoka, en cambio, la anciana Ono era una mujer que a pesar de su edad se veía joven, de ojos oscuros, tez blanca y cabello negro y lacio.

-Muy bien madre, ¿Cómo está papá?

-Trabajando-torció la boca Noemí, mientras que la anciana Ono lanzaba un bufido.

-Eso significa que está bien.

-Pues si…-se encogió de hombros la mamá.

-¿Y mí bodoque?-se apresuró en decir la anciana.

-Está en el trabajo.

Las dos mujeres lanzaron un suspiro de decepción.

-Esperaba hablar con él-dijo con desilusión la anciana.

-Yo también-terció Noemí.

-Él está bien…ya tiene un amigo.

-¡Cómo!-exclamaron las dos.

-¿Es en serio?-preguntó con ojos brillosos la madre.

-Sí.

-¿Escuchó eso?-le dijo a la anciana-Mi nene ya tiene amigo, comienza a ser un chico como los demás.

-Si…eso me da gusto.

-Si quieren ahora mismo les mando una  por medio de wat´s up  para que lo conozcan-la chica sacó su celular.

-Hey-le dijo la abuela ceñuda-Apenas estamos descifrando esto del Skype y tú nos quieres mandar cosas al no sé qué-Noemí asintió, apoyando a su suegra.

-Lo siento…

-Hablando de fotos-continuó Noemí, pensativa-¿Si les sirvió las fotos que les mandé?

-¿Cuáles fotos?-preguntó confundida Hiromi.

La anciana Ono codeó a su nuera.

-Shhh…ellos no saben Mimí-susurró la anciana. La mamá de los Ono se cubrió la boca, arrepentida.

-¿De qué hablan?

-De nada nena…ando alucinando- rio nervios-ya es tarde, nos tenemos que ir.

-Pero…esperen…

-Cuidas a tu hermano, ¿Si?

-Besos a mi bodoque.

Las dos mujeres se despidieron con un movimiento mano y cortaron comunicación con la chiquilla.

-Qué raro-musitó ceñuda.

Apagó la pc y se fue a preparar algo para el almuerzo. Estaba calentando el agua para su ramen instantáneo cuando el timbre sonó, Hiromi apagó la estufa y fue hacia la puerta.

Cuando la abrió se topó con que no había nadie, o eso al menos creyó hasta que un ladrido agudo le hizo mirar hacia abajo, ahí a sus pies estaba un perrito frenche poodle de color blanco, que movía la colita.

-¿Estás perdido?-preguntó la jovencita, emocionada al ver al animalito. Lo tomó en brazos y éste le besó.

-Tal vez lo esté si tu no lo aceptas-la voz de Shuichi hizo que Hiromi sintiera un vuelco en su corazón. El joven apareció de entre una gran planta que adornaba el pasillo-Hola.

-Hola…

-¿Te gustó?

-¿Es para mí?

-Si…

Hiromi apretó al perrito y aguantó el llanto.

-¿Podemos hablar?-le preguntó con voz dulce, la chica solo asintió y se hizo a un lado para que el otro entrara al apartamento.

Mientras el poodle recorría todo el apartamento, Hiromi y Shu se miraban serios.

-Siento tanto todo lo que te hice-rompió el silencio Shuichi.

-Olvídalo-musitó cabizbaja la soprano-Eso ya no importa…

-Pero…

-Ese día…el de la serenata, me di cuenta de algo…-alzó su mirada y observó a su amigo-Del Shuichi del que me enamoré no existe-esbozó una pálida sonrisa-de hecho nunca existió…-el moreno desvió la mirada- Así que es imposible enamorarse de alguien que no existe, ¿Ne?-la chica limpió unas lágrimas y sonrió de nuevo.

-Hiromi…

-Así que no te acongojes amigo-se acercó al joven y le frotó la espalda-Las cosas entre nosotros serán como antes, ¿Vale?

Shuichi le miró suspicaz.

-¿Estás segura?

-Por supuesto-le guiñó el ojo-Y por cierto…-miró al perrito que ya había evacuado en la sala-Gracias por el perrito…

 

 

Para la siguiente semana, Shuichi le avisó a Rage de que su voz ya había regresado, Yuki no estuvo de acuerdo con eso. Esa misma semana, la banda delerium retomó su trabajo pendiente. Después de que Shuichi grabara la parte de la voz de la segunda canción, los encargados hicieron los ajustes necesarios.

Fue a mediados de semana que el joven vocalista se mudó a la gran casa que Yuki había comprado.

Iniciando la otra semana, James les dio el itinerario de los cinco días de trabajo. Comenzarían con los promocionales de las canciones inéditas y de los dos álbumes que sacarían de edición especial, mientras la empresa se dedicaba a fabricar los discos, la banda iba de una televisora a otra, de vez en cuando a alguna radiodifusora. Para el miércoles, los chicos se reunieron en la disquera para ir a la televisora Donut, en donde participarían en el programa de variedades-en vivo-más visto por los nipones, “Trapitos al sol”.

 

 

En casa de Eiri y Shu, el rubio se acomodó en el mullido sofá y acercó una rebanada de pastel, encendió el televisor y estaba buscando el canal en donde pasaría  el programa  donde participaría Shuichi cuando el timbre sonó, lanzó un gruñido y sin soltar su pastel, fue a  abrir.

-Hola hermanito-le saludó Tatsuha.

-Hey mocoso, ¿No tienes escuela?

-Ammm…no…

-Eres pésimo mintiendo.

-Por un día que falte no pasará nada.-se encogió de hombros.

El mayor le dio paso a su hermano, éste se descalzó y caminó hacia la sala.

-Tu nueva casa me gusta-le dijo, tomando asiento en amplio sofá frente al televisor.

-¿A qué viniste?-le preguntó el escritor, al ver que su hermano se acomodaba mejor en el sofá.

-A que más…a ver el programa de “Trapitos al sol”

-¿Qué no tienes televisor en tu casa?-masculló, sentándose a lado de su hermano.

-Sí, pero quería ver a Hisoka en una pantalla de alta definición.

-Ahora entiendo el porqué de la preocupación de Mika.

-¿Ya te fue con el chisme?-preguntó con indiferencia Tatsuha.

-Digamos que fue un poco comunicativa.

 

 

-Estoy muy nervioso-musitó Hisoka, al ver el folleto donde venía el contenido del programa.

-El nombre del programa lo dice todo-dijo Shu.

-Hey James-gritó Hiromi, mirando a su manager quién bebía tranquilo una taza de té-¿Cómo se te ocurre esto?

-Se me hace un excelente programa, después de que participen la gente los amará-y le guiñó un ojo a Hiromi.

La chica arrugó el folleto y se lo lanzó, el rubio lo esquivó.

La chica se paseó inquieta por el camerino hasta que una idea rondó por su cabeza, con siguilo se acercó a su hermano y lo llevó hacia una esquina.

-Manis, hagamos un juramento-y puso su dedo meñique en alto.

-Respecto a qué.

-Tú no dirás ningún secreto  mío y yo juro no decir nada tuyo.

Hisoka miró con ojos entrecerrados a su hermana y sin pensarlo dos veces unió su dedo meñique con el de su hermana.

Uno de los chicos del staff del programa fue por la banda al camerino. Todos se dieron ánimos y salieron de la habitación seguidos por su manager.

El público rompió en aplausos cuando la banda apreció, todos sonrieron y saludaron a sus admiradores.

La primera etapa del programa consistía en una pequeña entrevista con los invitados.

Hablaron sobre la infancia de cada quién y de algunos momentos vergonzosos. Hasta ahí todo resultó tranquilo, pues los chicos cuidaron de sus palabras.

Después del corte, los miembros de Delerium se alistaron para tocar en vivo.

Cuando los encargados les dieron la indicación, la banda comenzó a tocar la introducción y después Shuichi cantó.

 

Si me advertí
que no debí ceder
y así ya no caer tanto
Pero sigo aquí
pensando en que aprendí
para poder avanzar juntos

pues que mal que no lo ves
a un lado me puedes tener
y sigo aquí pensando en ti
en todo lo que te dí...
pues que mal que no lo ves
ahora no me puedes tener
y sigo aquí pensando en ti
en todo lo que te dí...

Si me advertí,
que el error te hace crecer,
¿cuántos debo cometer?
dime...
Y si no está en mí,
qué tan cerca estoy de tí,
lo que busques aquí está,
¿cuándo?


pues que mal que no lo ves,
a un lado me puedes tener,
y sigo aquí pensando en ti,
en todo lo que te dí...
Debo ver para saber,
que hiciste para seguir,
y vivir con el placer,
de mentir y mentir...

 

 

-Ouch…eso dolió-dijo con sorna Tatsuha.

-Cállate mocoso, esa canción la compuso antes de que nos reconciliáramos-dijo ceñudo el rubio, engulliendo un gran trozo de pastel.

-Yo solo decía-dijo Tat encogiéndose de hombros.

-Si sigues haciendo comentarios fuera de sí te saco a patadas y no ves a tu mocoso ese-le instó.

-Está bien, está bien…

 

 

Después de la canción se fueron de nuevo a comerciales y los del staff se encargaron de acomodar el foro para a segunda parte del programa.

Esa parte del programa consistía en que el conductor les hacía una pregunta referente a uno de los miembros de la banda y el que oprimiera primero el botón, respondería.

Cuando comenzaron a grabar, los cuatro miembros de delerium estaban detrás de podio que tenía un botón anaranjado.

-Buenos días, espero que sigan viéndonos.-dijo el conductor-Seguimos en su programa…”Trapitos al sol” soy su querido conductor Shima Shintaro. La gente aplaudió.-En ésta ocasión tenemos como invitados a los miembros de la gran banda Delerium.

Las cámaras los enfocaron y éstos sonrieron.

-Bien…como muchos sabrán. En esta etapa del programa tendremos lo mejor, sabremos los secretos más oscuros de nuestros queridos jóvenes y también sabremos que tanto se conocen, pero antes de dar inicio a la preguntas, ¿Quieren saber cuál será el regalo del ganador?

El público gritó. Unas edecanes quitaron una cortina y mostraron un oso de felpa de tamaño natural; a Hisoka le brillaron los ojos y se decidió por que ese oso sería suyo.

-Muy bien, ¿Están listos?-los cuatro asintieron.-¡Comencemos!

Detrás de las cámaras, James trataba de disimular su risa.

-En verdad que éste programa se va a poner muy bueno-dijo.

-La primera pregunta es: ¿Qué miembro de la banda tiene un defecto fisiológico?

Los cuatro chicos se quedaron pensando hasta que Hisoka oprimió el botón.

-¡Muy bien!-el conductor le señaló-¿Cuál es la respuesta?

-Dresde-dijo con seguridad Hisoka-tiene los dos últimos dedos del mismo tamaño, le da tanta pena ese defecto que por eso nunca usa sandalias.

-Chibi-espetó la inglesa, sonrojada.

-Lo siento Ashi, pero quiero ese oso-se disculpó el menor.

-Respuesta correcta. La siguiente pregunta: ¿Qué miembro de la banda acostumbra a hurgarse la nariz?

Inmediatamente Hisoka volvió a oprimir el botón.

-Shuichi senpai.

-Muy bien.

Shindo le lanzó una mirada asesina al chiquillo quién volvió a justificarse, Hiromo rio por lo bajo.

-¿Quién susurra Bonny Babú cuando duerme?

Shuichi apretó el botón.

-Hisoka y ese tal Bonny Babú es su oso de felpa.

El público gritó extasiado, mientras que Hisoka se ponía rojo como un jitomate.

-Venganza-susurró Shu.

-¿Quién eructa cuando bebe café?

Hiromi sin pensarlo dos veces oprimió el botón.

-¡Hisoka!-gritó.

-Hermana-vociferó Hisoka-la promesa…

-¡Lo siento!-dijo. Había olvidado por completo la promesa que le había hecho a su hermano.

-Muy bien. ¿Qué miembro de la banda se ha orinado en varias ocasiones en el escenario?

Hisoka apretó el botón y ceñudo respondió:

-Hiromi.

La aludida abrió los ojos de sorpresa y deseó que la tierra se la tragara.

-Tengo problemas de esfínter.

El público cuchicheaba.

Siguieron con varias preguntas vergonzosas y todos los miembros de la banda respondían, como venganza al prójimo.

-¿Miembro de la banda que se hizo en los pantalones durante un concierto?

Dresde apretó el botón.

-Shuichi.

El público lanzó varios quejidos y pusieron cara de asco.

-Tenía una infección en el estómago-dijo Shu.

En casa de Yuki, Tatsuha se retorcía de la risa, mientras que el mayor había dejado de comer el pastel de chocolate, asqueado.

-Ahora comenzaremos con las anécdotas vergonzosas.

-No, ya no más…-pensaron los cuatro chicos.

-Ésta anécdota no tiene mucho: Ese día de trabajo, cierta personita tenía muchas ganas de beber licor, por lo que entró a la oficina del manager a escondidas y buscó algo que pudiera beber. Encontró una botella de vino tinto con una ligera natita a la cual no le dio importancia y se la bebió, provocando que se intoxicara. ¿De qué miembro de la banda hablo?

Hisoka oprimió el botón.

-Esa fue Hiromi.

-Muy bien, un punto más para Hisoka.

Y siguieron con las anécdotas vergonzosas, como cuando los chicos fueron a un concierto en Nueva York y un chico orinó la pierna de Hisoka, éste dio tremendo grito pues creyó que alguien había lanzado un  petardo y ésta había caído en su pierna.

-Estaba tan caliente que creí que me había quemado-les había dicho en esa ocasión a sus amigos.

O la vez en que Hiromi se había orinado en Central Park por que no alcanzaba a  llegar a casa. También salió al aire cuando a Dresde se le rasgó la costura del pantalón y enseñó la tanga que llevaba  puesta y como olvidar cuando aún no estaba formada la banda y Hisoka aún no estaba y había salido a beber en compañía de Tamaki, habían terminado tan ebrios que olvidaron a Hiromi, la cual se había quedado dormida en una silla.

-Y la puntuación es: Dresde 10 puntos, Shuichi y Hiromi van empatados con 30 puntos y Hisoka con 35 puntos. Creo que posiblemente ya tengamos a un ganador.

Pero desafortunadamente a Hisoka ya no le importaba el oso, lo único que le importaba era recuperar lo poco de orgullo que le quedaba.

-En la siguiente sección, pondremos fotos de los miembros y ustedes contarán la anécdota de esa foto.

En una pantalla apareció Shuichi vestido de colegiala y con un letrero que decía : “Soy un perdedor”

Dresde sin dudar oprimió el botón.

-Fue después de que perdiera una apuesta respecto a un partido de la NFL.

Shuichi se cubría la cara, avergonzado.

Le siguieron algunas fotos de Hiromi babeando mientras dormía, otra de Hisoka dormido y maquillado. Una de Dresde enseñando un seno y otra de Shu de bruces, pues se había caído.

Cuando estaba por finalizar el programa, los cuatro miembros estaban ceñudos y tratando de disimular su sonrojo, mientras que James reía y reía. Aquél programa se había vuelto una guerra entre ellos, ¿Quién ganaría?

-Y el ganador es-el conductor miró su tarjeta y sonrió- Por sólo dos puntos de diferencia-la gente aplaudió-Hisoka Ono-exclamó.

Varias serpentinas cayeron en el foro, Hisoka abrió los ojos de sorpresa y saltó feliz, olvidando por completo el bochorno.

-Perdedores…-les dijo a sus compañeros antes de aceptar su gran oso de felpa.

Ni Hiromi, ni Shuichi y mucho menos Dresde aplaudieron ante la noticia.

-Y como ya es costumbre en éste programa, las fotos del recuerdo.

En la pantalla apareció una foto de Dresde pequeña, vestida de niño y llena de lodo, seguida de esa foto aparecía una de Shuichi, quién tendría unos cinco años y estaba en traje de baño, haciendo la señal de amor y paz.

Yuki al ver esa foto abrió los ojos. Cuando su novio regresara del trabajo lo  obligaría  a ir a casa de sus padres para que mamá Shindo le mostrara todas las fotos de Shuichi cuando era niño.

-Pederasta-le dijo Tatsuha al ver la reacción de su hermano.

La foto de Hiromi maquillándose en el espejo mientras vestía la ropa de mamá provocó uno que otro suspiro del público. Y cuando apareció la foto del miembro más pequeño de la banda, Hisoka se quiso desmayar, mientras que Tatsuha sufría de una hemorragia nasal. Ahí en la gran pantalla estaba un Hisoka de unos tres años, disfrazado de pollito en conmemoración del día de la primavera en México.

-Enfermo…-masculló Yuki al ver a su hermano limpiarse la sangre.

James rio aún más al ver esas fotos, en verdad le había costado mucho trabajo contactar con las familias de los miembros, pero había valido la pena.

De regreso a la disquera, ninguno habló.

 


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