Ya era tarde y la lluvia comenzó a caer, como es típico de los húmedos días de agosto.
En lo profundo de un bosque un chico de cabellos largos debajo de la cadera y castaños como los de su hermano gemelo; se tambalea mientras avanzaba por la profundidad, sus heridas eran graves y la sangre no para de brotar, hasta que por fin cayó al suelo, saliendo de sus labios un nombre “Ren”
Ren se encamino a la casa de Yoh, le diría que aceptaba su propuesta , después de todo era la viva imagen de Hao y aunque, el chiste fuera olvidarlo, el verlo a cada segundo le era muy grato… aunque le faltar ese algo que los diferenciaba, después de todo no hay dos persona iguales en el mundo.
Entro como era su costumbre y se quito el calzado, al llegar a la cocina escucho ruidos por lo que se detuvo tras la puerta para escuchar de que se trataba.
-vamos Yoh –decía un peli verde muy emocionado –entrenaremos y luego te invitare a comer
-Lizergh, no puedo pero tal vez mañana u otro día –decía repetitivamente el castaño tratando de no ser grosero
-vamos, solo será un rato… y pasaremos un tiempo juntos –dijo por debajo sonrojándose un poco
-Lizergh, estoy esperando a Ren, no quiero que llegue y no me encuentre –dijo Yoh bajando la cabeza -tal vez si el llega podremos…
-ir los tres juntos –termino el peli lila –verdad Yoh – Ren se acerco al castaño dándole un beso en la mejilla
-¿Ren? Esto… quiere decir que tu… ¿aceptas? –pregunto un tanto sonrojado Yoh pero con una gran sonrisa en los labios
-eh –contesto el peli lila dándole otro beso pero esta vez en los labios, el cual fue correspondió ante la mirada atónita de un peli verde que por pura dignidad no lloraba.
-ejem –carraspeo un poco el chico viendo que hacia mal trió -Yoh creo que lo dejamos para después… si te parece
-pero ¿Por qué?- Pregunto inocentemente Ren, si era cierto que no sabía de los sentimientos de Lizergh asía Yoh en un 100% le fascinaba ver que el peli verde echara chispas –podríamos ir los 3 y divertirnos mucho
-si Lizergh, sería divertido si vamos los tres, tendríamos más de que hablar –apoyo Yoh a su nuevo novio.
-si eh incluso podríamos invitar a Horo Horo –dijo Ren muy emocionado –se donde se quedan el y su hermana Pilika, sería una especie de reunión de amigos
-mmm si sería divertido –dijo el peli verde casi sin ánimos; y es que como era posible que lo que se suponía que sería una cita, ósea 2 personas se hubiera convertido de un momento a otro en una “reunión de amigos” en la cual ya estaban invitando a todos sus conocidos.
-que buena id eren vamos por ellos –dijo Yoh tomando la mano de Ren y camindo asi la puerta, ya cuando estaba a pocos centímetros de salir grito desde la entrada -¡apresúrate Lizerght o te dejaremos!
Más vale saber cuándo rendirse ante un enemigo que te lleva bastante ventaja, sin emargo cuando de verdad se ama, uno no se puede rendir… al menos eso es lo que Lizergh pensó.
Decidieron que ir a un parque de diversiones seria entretenido para pasar el rato con los amigos, después de todo había mas atracciones y diversión que en un campo en donde solo hay flores y… pasto; o al menos esa era la opinión de Ren y como Yoh no se opondría a su decisión, decidieron ir a donde el “señorito” deseaba ir.
Todo iba bastante bien, se divertían como amigos, hasta que a alguien se le ocurrió la brillante idea de ir al túnel de los enamorados…
-Yoh ¿Por qué no vamos al túnel de los enamorados?–sugirió un peli verde sin pensar en las consecuencias de sus palabras
-cierto Yoh –secundo un peli lila muy animado –pero… Lizergh ¿con quién subirás?
Es cierto hasta ese momento no soportaba a Ren Tao, pero ahora lo odiaba, y lo odio mas cuando tomo de la mano a Yoh y lo encamino a la fila del juego… ¡eso era guerra! Y el único premio era Yoh, el despistado Yoh Asakura; el cual no se había dado cuenta de los sentimientos del peli verde por más obvio que quisiera ser
Por su parte Horo Horo y Pilika subieron juntos, ya que la pequeña no quería perderse la atracción y como el peli verde se negó rotundamente a subir con ella, su hermano no tuvo corazón para dejarla subir sola.
Cuando todo ese horroroso día por fin finalizo y todos fueron a cenar a casa de Yoh, lo peor no había siquiera comenzado…
-bueno Yoh, creo que nos vamos –dijo Horo Horo despidiéndose de sus amigos, a la entrada del parque
-no espera –dijo el castaño –los invito a cenar
-seguro, hoy podría comerme todo lo que me pongan en frente –digo feliz el peli azul
-claro, tu también estas invitado Lizergh –dijo Yoh con una de sus grandes sonrisas las cuales siempre lo caracterizaban
Ya en la casa, de Yoh y luego de haber degustado un deliciosa cena, estaban riendo y contando chistes, todos, excepto un peli verde que el cual no se sentía a gusto viendo a Ren y a SU Yoh tan pegados
-bueno, si los invite a cenar era porque quería comunicarles una noticia –dijo el castaño levantándose y pidiéndole la mano a Ren para levantarlo también –oficialmente Ren y yo somos pareja
Por 30 segundo es mundo se detuvo y giro en reversa, esas palabras resonaban incesantes en la mente del peli verde “somos pareja” ¿este era una especie de juego enfermizo a caso?, imposible, increíble, irreal… ¿Cómo había pasado eso? Si bien siempre había estado enterado de los sentimientos del castaño por Ren, siempre supo que este le era totalmente indiferente y ahora… ahora eran pareja
-¿hablas en serio? –pregunto un poco atontado como no creyendo lo que acaba de escuchar
-si –respondió Ren recibiendo de parte de lizergh una mirada de odio con un toque de “no te pregunte a ti” –es una buena noticia ¿no es verdad?
-claro –se apresuro a decir Horo Horo y Pilika, felicitando a los dos enamorados
-se –fueron las únicas palabras del peli verde antes de salir sin decir siquiera un adiós, cosa que Ren no pasó por alto
En el bosque, el joven que antes estaba mal herido se hallaba en el piso con todas las heridas vendadas y un paño de agua fría en la frente… se encontraba delirando, repitiendo un nombre mil veces “Ren”
-REN! –grito fuertemente, despertando así de su letargo e incorporándose un poco
-señor Hao, está vivo –dijo un pequeño niño con un peinado estilo afro abrasándolo efusivamente
-¿O-Opacho? –Pregunto incrédulo el chico, mientras correspondía el abrazo -¿Por qué estoy vivo?
-como pregunta eso –dijo el niño molesto –Opacho lo salvo porque quiere mucho al señor Hao, Opacho no quiere ver mal al señor Hao
-yo… yo creí que me odiabas –dijo bajando un poco la mirada
-Opacho odia al señor Hao malo –dijo el niñito –pero usted es mi señor Hao y le quiero
-gracias –dijo el mayo volviendo a recostarse
-señor Hao, Opacho está preocupado, porque repite mucho un nombre –dijo el pequeño poniendo de nueva cuenta el paño en la frente del mayor
-eh –contesto –creo que me equivoque, necesito verle, hablar con él, lo extraño
-Opacho ayudara al señor Hao –dijo el pequeño sonriendo
-claro, ya nos las arreglaremos –dijo cerrando sus ojos e intentando recuperarse de esas dolorosas heridas, mientras pensaba como llegar a Ren.