Christopher tartamudeaba sin saber que decir en lo absoluto. Aquella hermosa muchacha de la que haca dos aos se haba prendido, a la que estuvo por confesarle todo lo que senta hacia unos segundos…Era un chico! Por Jesucristo, Carrie era un hombre! Estaba traumado. Estuvo por decirle que le amaba a un hombre.
-Eres un hombre! –Le seal la entrepierna como si no fuera obvio, con las mejillas arreboladas aun y todos los vellos de su cuerpo erizados como el pelaje de un gato.
-Te sorprende? –Pregunt como si nada, reacomodndose el tul del armador y la falda para cubrir su encantadora lencera, guindole un ojo y sonriendo socarrn al darse cuenta de lo traumado que lo tena- Pens que ya lo habas descubierto y solo te hacas el que no saba nada.
-Hacer...? Carrie! Siempre he credo que eras una chica! –Le tom por lo hombros zarandendolo- Empezando que te llamas Carrie Marie…
-En realidad es solo un nombre de nacimiento –Respondi- Mis padres creyeron a primera instancia que era una fmina, y en particular incluso todo lo haban comprado de nia.
-Pero que no se dieron cuenta de que eras nio cuando…? –Ya estaba ms tranquilo, relajado, respiraba profundo hasta que las ltimas palabras cruzaron sus odos.
-Era hermafrodita. –Agreg con simpleza, sonriendo de forma sutil como si no fuera nada.
-QU…?! -El siguiente grito se podra haber odo en toda la cuadra.
Eros suspir pesadamente en la cocina, terminando de preparar todo, escuchando el segundo alarido de sorpresa y lamentos del primo de Merlov- Y ya le cont lo del nombre.
Lo conocan tan bien como para saber a qu se deban cada uno de los gritos, en especial en ese momento que se haban quedado a solas con Carrie. A decir verdad, ellos tampoco podan creerlo en el momento que se enteraron. Merlov lo haba descubierto cuando les haba cado a pia a los reggaetoneros que lo tenan aprisionado en una de las cabinas del bao de hombres. Primero queran violarlo, y al descubrir lo que era realmente se le estaban por ir encima a golpes. Eros…pues lo saba desde siempre, despus de todo era su medio hermano menor.
El asunto de cualquier manera no era una molestia, empezando que Carrie Marie era “toda una seorita” al punto que los profesores tambin tenan la certeza de que era precisamente una dama con aires de la poca Victoriana, y no una versin occidental de Mana sama (aunque se le pareciera de sobremanera, incluyendo el cabello azabache y ensortijado tan perfectamente que si no se senta su textura, se creera que no era natural)
-Crees que debamos ver cmo estn? –Pregunt Eros buscando unas smirnoff en la hielera.
-Nah…-respondi Merlov, con simpleza, abrazndole de la cintura a su espalda y dejando algunos besos sutiles en su nuca-. Djalos que se diviertan.
-Quien se est divirtiendo aqu eres t, Merlov! –Replic entre carcajadas, separndose del congelador para que Merlov le alzara algunos centmetros hasta sentarle en uno de los muebles de la cocina- Y me preocupa que quede traumado de por vida.
-No va a quedar traumado de por vida –Respondi, acomodndose entre sus piernas y haciendo que abrazara su cintura con ellas, robndole un nuevo beso antes de proseguir- te aseguro que acaba cantando “Nothing Else Matters” y Carrie le sigue gustando de la misma manera, no creo que el hecho de que sea hombre lo detenga…
Eros le devolvi la sonrisa- Cmo tu?
-Como yo. –Corrobor, volviendo a besarle, esta vez algo ms demandante que antes.
Mientras tanto en la cochera, Christopher aun trataba de organizar todos los pensamientos que atormentaban su cerebro en ese instante. Segn las palabras de Carrie, todo haba sido un complot de sus genes, formando un precioso sexo femenino en el exterior, y los rganos internos del gnero masculino. A lo cual no se haban dado cuenta hasta ya varios das de su nacimiento, comenzando una larga serie de cirugas reconstructivas, con los mejores cirujanos. Despus de todo, el capital econmico que se lastraba la familia de Carrie era inmenso.
Se corra el rumor que sus tos manejaban una de las Mafias ms buscadas del mundo, pero sin embargo, ella no tena demasiado contacto con su familia paterna desde que Alphonse, su padre, haba fallecido…en un muy curioso homicidio.
Christopher finalmente asimil toda la enorme carga de informacin que le haba proporcionado su amiga, ahora “amigo”. Cayendo en cuenta que, en la actualidad, este asunto era cosa de todos los das, y que con todos los desastres genticos era incluso posible que conociera un centenar de personas que pasaban por lo mismo y no decan nada. Ya el hermafroditismo no era algo nuevo que los peridicos y los diarios amarillistas pagaran sumas excesivas por publicar.
-Bueno, supongo que lo aceptare.
Carrie enarc una ceja divertido- Es que lo tienes que aceptar, Chris.
-Aun as tu voz suena tan melodiosa, nunca hubiera pensado que fueras un chico en realidad. –Se daba cuenta que aun cuando supiera la verdad sobre su sexo, Carrie segua parecindole tan hermoso como antes…e incluso ms ahora que una puerta de honestidad pareca haberse abierto entre ambos.
-Es por ciertos problemas hormonales, y cuestiones de esas, algunas parecen no segregarse el numero debido, trayndome consecuencias de esta apariencia ms andrgina de lo debido –Hizo un ademan para referirse a s mismo.
-Igual sigues siendo hermoso. –Las palabras brotaron de sus labios como si fueran agua, sin darse cuenta siquiera de lo que acababa de decir hasta que ya lo haba dicho, junto al intensificado rubor de sus mejillas.
-Realmente crees eso? –Pregunt, incrdulo-. Aun cuando soy un hombre te sigo pareciendo hermoso?
-De bolas, como puedes pensar que no, Carrie! –Replic, ampliando la sonrisa, aunque acaricindose la nuca con nerviosismo- Claro que esto es nuevo para m, es algo que nunca me habra imaginado…en especial el hecho de que aunque fueras hombres te vistas de mueca victoriana.
-Ah, eso es que mi ideologa es que entre hombres y mujeres no debera de existir diferencias.
-Qu estas insinuando?
-Que deberas seguir mi ejemplo y vestirte de chica, seguro te ira perfecto con tu pelo rubio.
-Ni de coa! –Neg con la cabeza repetidas veces, causando una larga carcajada a Carrie, escuchando entonces algunos relmpagos y la lluvia que caa a cantaros, casi pareciendo que rompera el cristal de la nica ventana de aquella curiosa cochera-. Supongo que tendrn que quedarse Eros y t esta noche.
-Si, djame le aviso a mam para que no se preocupe… -Agreg, sacando su celular, con un colgante de un murcilago violeta, rechoncho y deforme, que Chris le haba regalado en su anterior cumpleaos.
En la ciudad la lluvia caa a cantaros, despiadada, que incluso el trfico se haba detenido, era casi imposible de ver en aquel llanto celestial. Las avenidas estaban desiertas, la noche oscura estaba nublada. Ni siquiera los paraguas de colores, abrindose como si fueran flores.
Solo una figura menuda se abra paso, caminando con dificultad, con la ropa rota y el cuerpo entero magullado. Su cabello pelirrojo le caa empapado por el rostro amoreteado. Algunas lgrimas que escapaban de su retina se confundan con la fiera lluvia.
Su padre le haba echado de su casa luego de que Daniel se hubiese negado a complacerle sexualmente en una de sus borracheras. Le haba golpeado mil veces el cuerpo entero, las piernas y los brazos estaban llenos de marcas del cuero del cinturn, y estuvo por sufrir una lesin peor si su padre hubiera alcanzado golpearle con la botella rota de cerveza… por suerte logr escaprsele, escuchando como le gritaba que era una vergenza desde la puerta, que era una puta desgraciada, que nunca regresara o lo matara realmente.
Sus pies le dolan de tanto caminar medio descalzo, el cuerpo se senta dbil despus de tantos golpes. Se lamentaba de no ser tan robusto como su progenitor, de ese modo hubiera conseguido defenderse. Pero el nunca se comparara con aquel quien haba sido en su juventud parte de la lucha libre.
Peda a un dios, si realmente exista, que le buscara en ese instante, que se lo llevara lo ms pronto posible. Por fin encontr una parada de autobs, acurrucndose en la banca en busca de mantenerse seco y clido, cosa que era imposible estado tan empapado como estaba.
-Mam…-murmur mirando el cielo azul negruzco, su propias pupilas se nublaban, su cuerpo estaba demasiado fatigado-…esta noche ser mi fin.
Sin embargo, antes de darse cuenta se encontraba en brazos de un hombre. Deba ser un hombre porque era muy fuerte al poder cargarlo. Aunque l pesaba menos que una pluma segn lo que le decan. Sus sentidos haban perdido contacto con el exterior, solo visualizaba aquel rostro de facciones masculinas, nariz larga y perfilada, cejas oscuras que enmarcaban uno par de ojos almendrados. El cabello….no, tena la cabeza rapada y varios piercings en el cartlago de las orejas.
Sera un ngel de esos del Post modernismo? Cmo los que dibujaba su madre, tan apasionada de las artes plsticas cuando an viva?
Senta sus parpados pesados, lo ltimo que diviso sin embargo…fue una cadena con la cruz de hierro… aquella que era otorgada como una condecoracin militar alemana…
Sus parpados se cerraron sin ms, ya demasiado agotado. Dejndose llevar por aquel ngel Nazi.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español