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Contradicción.... por cielphantomhive
Notas del capitulo: pues a peticion de muchos... nueve en realidad... a qui el segundo cap.... muchas gracias por su apoyo... y creanme cuando les digo que el tercero tardara enllegar sino recibo comentarios....
KKM no me pertenece sino el HENACHOKO de Yuri ya estaria incinerado....
- ¿Cómo que no regreso? – el estallido de voz se escucho hasta las afueras del castillo – te aconsejo que midas tus palabras Gwenldal Von Walde – era la primera vez usaba ese tono y formalismo con uno de los hermanos, y los ojos rasgados símbolo de que la esencia del Maou había despertado susto en el mayor de aquella sala
- Yo no puedo decirle más... si su majestad desea saber - le extendió una carta
Estimado Rey Maou:
Por medio de esta carta le extiendo mis mas sinceras disculpas por los inconvenientes que la siguiente noticia pueda causarle.
Le informo que debido a circunstancias ajenas a mi persona no podré regresar a Shin Makoku, por lo mismo y a conveniencia su ya y mía le pido la disolución de nuestro compromiso; estando por demás seguro que esto le dará una gran alegría.
La redacción de dicho documento corre a cargo del noble Gwenldal Von Walde, a quien he confiado una firma en blanco para tal propósito.
Las razones de mi proceder serán aclaradas cuando el antes mencionado rinda su informe del viaje, que espero aya concluido en buenos términos.
Sin más asuntos a tratar, me despido deseándole el mejor de los futuros posibles y una larga vida.
Atte: Wolfram Von Bielefeld
Yuri termino de leer en el mas solemne silencio, sus ojos no daban crédito a las palabras escritas con tan exquisita letra cursiva y estilizada, sin dudad alguna estaba seguro que fue escrita por quien la firma. Aun así, se negaba a creer todo eso, miro con expectación y algo de suplica a Gwenldal para que de repente solo dijera que era una broma, pero el semblante de este y de su hermano eran de total angustia.
- El no volverá – susurro
- Así lo a decidido... – contesto secamente el mayor
¿Que sucedió en Güindemort? – ahora si eras su turno de hablar, el primero de los hijos de la reina sexy trago duro, se aclaro la garganta y comenzó
Wolfram miraba por la ventana, preguntándose si había hecho lo correcto al quedarse en aquel reino, desde el comienzo savia que algo como eso podía pasar, pero jamás, ni remotamente considero pagar un precio tan alto por un acuerdo de paz. Emprendió el viaje con la ilusión de complacer a Yuri, pronto seria el cumpleaños del pelinegro y que mejor regalo que una alianza más que acreditar al decimoséptimo Maou, no por que pensara que al moreno le importaría que su popularidad se acrecentara, más bien por el buen corazón que posee.
Y ahora ahí estaba él, suspiro como por veinteava vez, asía solo unos días desde que salió de Pacto de Sangre y ya extrañaba su hogar, pero por sobre todo a su familia, ¿cómo se encontraría Greta?
- ¿Por que estas tan pensativo? – la voz era varonil sin dejar la amabilidad de lado
- Por nada en especifico – contesto mirando al interlocutor, sus ojos eran de un verde aceituna, sus cabellos azules petróleo, contrastando de manera sublime con su piel morena clara y esa figura estilizada hacia a mas de una persona suspirar, su porte era el de todo un monarca
- Últimamente te noto algo ausente, ¿tienes algún problema? No me gusta verte así, una sonrisa le queda mejor a tan exquisito rostro – le acaricio tan sutilmente que Wolfram solo pudo cerrar lo ojos ante aquel toque. Sus mejillas ardían con tan galantes palabras, retiro rápidamente el rostro
- No crees que deberías dejar esas cosas, es decir de todas maneras ya no me iré – contesto bajo
- No lo hago por eso... Wolfram, tu eres un ángel, cualquiera que te observe solo tiene dos caminos, amarte u odiarte, ambas por la misma razón y yo he preferido mil veces la primera... – se arrodillo para quedar a su altura – eme aquí, soy un rey, dueño y señor de todo lo que me rodea, aguerrido, orgulloso, indomable, muchos han deseado verme arrodillado y ni con riquezas, sabiduría, fuerza o soberbia lo han logrado... y tu sin pedirlo me tienes a tus pies, cualquier cosa que me pidas te daría, como no sea dejarte ir.... – beso con delicadeza la mano blanca del ojiverde
- Solo preguntare una cosa... ¿puedo estar seguro que contestaras con la verdad? – lo miro a sus pies, justo como lo proclamaba, deseaba que Yuri algún día hiciese eso, pero volviendo a la realidad esta seguro que solo se engañaba así mismo, esperando aquel día
- Te doy mi palabra de rey que no mentiré al contestar... – lo observo con suplica, era tan bello, cuanto tiempo espero por alguien así, inocente, frágil, orgulloso y rebelde
- ¿De verdad me amas tanto? –sus ojitos cristalinos, deseos mudos pugnando por salir, deseaba escuchar un si con ansias locas y al mismo tiempo lo contrario, una lo ataría de por vida a aquel hombre que en poco tiempo consiguió encontrar un camino a su corazón, no tal que se olvidara de Yuri, pero si que con el tiempo y un poco mas de ese trato lo llegaría a ser feliz
- Yo... – la interrupción duro décadas para el rubio, esos ojos aceitunados clavados en su persona – te amo con toda mi alma y corazón...
Wolfram sintió algo muy caliente en su pecho, era cariño o tal vez algo más. Se lanzo a los brazos de ese hombre, percibiendo el tibio calor y el aroma suave de aquel que si proclamaba su amor al mundo entero.
- Tardamos tres días en llegar al reino de Güindemort, en donde nos recibieron con gran cortesía, pues Sir Von Bielefeld había mandado una misiva con la noticia de nuestra visita, no podemos poner queja alguna, las habitaciones dispuestas para nosotros eran de lo mejor y sin mencionar el servicio. Pedimos de inmediato audiencia con el Rey Leonardo Von Baker; la cual nos fue concedida para la tarde de pasado mañana, dejándonos un día de descanso – Gwenldal camino hacia el escritorio y tomo asiento, la historia era larga y aun cuando no quisiera demostrarlo estaba cansado – el día siguiente fue de completo reposo, uno de los mozos de la corte se encontraba dispuesto a atendernos asta en las complacencias mas mínimas, aun así , su majestad conoce a Wolfram y en ningún momento se aprovecho de la situación, entablando incluso con aquel hombre joven una que otra platica – cerro los ojos recargando su mejilla en su mano derecha – resulto que ambos compartían cierta afición por los caballos y con orgullo presumía de cómo su padre le enseñara el arte de las armas, por lo que mi hermano no perdió tiempo en retarlo a duelo, y debo decirlo, es la primera vez que lo vi feliz a pesar de haber perdido con un plebeyo – en su entrecejo a parecieron dos nuevas arrugas que Yuri considero como mal presagio, debía de dejar de pasar tanto tiempo con Gûnter o de lo contrario terminaría siendo tan paranoico – por la noche se llevo acabo un banquete para presentarnos ante los miembros de la corte real. Vestimos formal para la ocasión, sin llegar a gala, la cena como el día anterior estuvo deliciosa y la platica amena, mas el rey de aquellas tierras seguía sin dar la cara, comentamos con gran entusiasmados los acuerdos de paz, que con la misma efusividad fueron correspondidas, intentamos vislumbrar el futuro que traería la tarde de mañana cuando fuera definitiva la alianza entre Güindemort y Shin Makoku, las propuestas para la consolidación del pacto que se propusieron fueron variadas, todas factibles, pero como solo fueran especulaciones nada fue tomado en cuenta. La noche precedió a un gloriosa mañana, en la cual a primera hora aquel mozo ya nos esperaba con el desayuno, Wolfram, como he dicho entablo amistad, por lo que sin pensarlo lo invito a compartir mesa con nosotros, la conversación a partir de ese gesto se derivo asía su persona majestad – Yuri dibujo una sonrisa al saberse en los pensamientos del rubio – Wolfram comento en más de una vez que deseaba mas que nada en el mundo ver su sueño cumplido, ese en el que todas las personas pueden caminar por un mundo sin temer. Y el hombre que nos acompañaba sonreía al ver tan animado a mi hermano, antes de la audiencia el joven convido a Wolfram a montar a caballo, él ni tarde ni perezoso acepto, por lo que salieron un par de horas. Regresaron casi con el tiempo justo par la audiencia y ese joven cada vez más...
- Gwenldal, todo eso es muy interesante, pero ¿qué tiene que ver con la decisión de Wolfram de quedarse? – pregunto Yuri que se le hacia que el relato solo era algo sin sentido, cuando su mayor curiosidad era saber porque el rubio se quedo en aquel reino
- Majestad, le aseguro que todo lo que le he contado es necesario que lo supiese porque.... – el ojiazul lo medito un momento, parecía debatirse entre decirlo de una vez o alargar mas las cosas – aquel mozo.... al entrar junto a mi hermano en la sala del trono... – volvió a guardar silencio, a Yuri le parecía demasiado dramático, como que ese criado estaba tomando demasiada importancia en la historia de su regente – se dirigió a este y tomo asiento...
- ¿QUEEEEE!!!!???
- Majestad, le aseguro que su sorpresa no es nada comprada con la de Von Bielefeld quien casi se va de espaldas, al saber que prácticamente ha estado siendo vigilado y sin saberlo
- ... – el moreno no podía disimular su cara de perturbación, ahora si entendía por que Gwenldal le contó todo aquello
- Se presento amablemente, Leonardo Von Baker, con cortesía le pidió a Wolfram que se aproximara hasta donde él se encontraba, y como soldado y Noble que es, así lo hizo, con respeto y una ligera inclinación – el pelilargo frunció el seño como si el recuerdo fuera menos que agradable – al parecer ese gesto no gusto a Von Baker por que de inmediato intervino “Wolfram Von Bielefeld en mi persona nada a cambiado, del mozo que en estos días a estado a tu lado y el rey que ahora vez, entonces ¿porque tu semblante y tu actitud así mi si?” estas palabras descoloraron un poco a Wolfram pero se repuso de inmediato y respondió, “yo no sabia con quien trataba y ...” tal vez mi hermano sea un noble pura sangre y un orgulloso pero en ese momento se veía tan indefenso
- ... – Yuri casi hacia trizas los papeles que tenia en la mano, ese sujeto se atrevió a incomodar a su prometido ¿oh? ¿Que fue ese pensamiento?
- “Ya he tomado una decisión” – Yuri no entendió lo ultimo, pero prefirió dejar que el general continuara – “con respecto a tu petición de alianza entre nuestras tierras” – el moreno por fin comprendió que Gwenldal estaba repitiendo el discurso del tal Leonardo – “creo que es una buena idea... una guerra entre dos naciones tan portentosas solo traería desgracia, pero como sello de nuestro pacto deseo...” el muy miserable tenia una sonrisa enigmática y ninguno de nosotros pudo imaginar lo que pediría – Gwenldal golpeo el escritorio – cuando lo vimos levantarse y caminar hacia Wolfram nos colocamos a la defensiva, “tenerte con migo para siempre...” fueron sus palabras
- Ese hombre... – el Maou apretó los puños - ¿cómo se atreve? Wolfram aunque no lo parezca es mi prometido, ¿cómo se atreve a hacer semejante proposición? – los dos hermanos se miraron sin entender, el mayorkoku del rey se extendía con vertiginosa fuerza
- Majes... Yuri – corrigió Conrad - tranquilízate y deja que Gwenldal termine de contar – el castaño tuvo que intervenir al ver que el monarca explotaría de un momento a otro
- Gracias – concedió a su hermano menor – Wolfram no supo que contestar, aquella petición lo dejo desconcertado, trate de intervenir, es decir como usted acaba de decir, a pesar de todo Von Bielefeld es el prometido del Rey Maou, pero Wolfram me freno, pensé que él mismo quería aclarar las cosas así que desistí para escuchar lo que tenia que decir, “ su majestad Leonardo Von Baker, acepto su propuesta de matrimonio” no pude...
- Eso no pude ser cierto... – dijo Yuri con un arranque de ira
- Yo tampoco podía dar crédito a lo que escuchaba, pero desdecir a un noble frente a un gobernante extranjero era algo fuera del protocolo y peligroso
- El protocolo se puede ir mucho a la....
- Yuri... – llamo su padrino para que no hablara de mas
- Salidos de aquella sala intente que Wolfram me explicara las verdaderas razones “lo primero que debes admitir es que entre Yuri y yo solo existe una amistad, como el mismo lo a dicho infinidad de veces, y aun que me quedase con el toda la vida jamás pasaría de ser su prometido, y si solo me puede ver como eso, me engaño al pensar que algún día será diferente, esto es lo que respecta a mi persona, por otro lado esta el reino que sin duda debe ser prioridad, esta alianza traerá consigo muchos beneficios. Y bueno yo… desde que le informara a mi tío de mi visita a Güindemort me comento que viniera preparado, al principio no entendía bien porque lo decía, hasta que se lo conté a Madre ella solo me informo de los intentos de la casa Von Bielefeld para que Elizabeth fuera considerada como posible candidata a lazos nupciales con el rey Leonardo, este desistió alegando que el ya tenia alguien designado para tal propósito y que mi tío estaba por demás enterado de ello… asi que deduje… no es difil leer entre lineas… y pienso que tal vez mi destino esta aquí sirviendo de una manera diferente al Maou. Su majestad no peleara por el rompimiento del compromiso, talvez ahora encuentre alguien que lo sepa hacer feliz”… después de eso, Leonardo no se separo de Wolfram ni un solo momento, el acuerdo de paz fue firmado y como agradecimiento le ha mandado todos estos tesoros que son…
- El pago por Wolfram...
- ¿Perdón?... – digo Gwenldal al escuchar decir algo a su rey
- Es que acaso esta pensando que compro a Wolfram
- Majestad es tradición agradecer a la persona o familia del novio
- Pues mas que un acuerdo de paz o agradecimiento siento como si ese fuese el precio que Leonardo le puso a la persona de Wolfram, y si debo consentir, diré que fue muy poco, ni con todo su reino, vida y salud podrá pagara por él, Wolfram no tiene precio
- Majestad, piense lo que esta diciendo, ahora no hay nada que podamos hacer, Wolfram a consentido la unión
- Acepto, pero yo aun no he cancelado nuestro compromiso y no quiero dejarlo libre...
- Yuri... – su rostro reflejaba comprensión y paciencia como la que siempre le tenia a ese chico y a pequeño hermano – eso seria la guerra...
- Por que Conrad, crees realmente que aquel hombre ame tanto a Wolfram como para sacrificar vidas inocentes…
- ¿Y que pasara si el decide aceptarla?, el que tendrá la culpa por insinuarla siquiera será usted...
- Pero él es mi prometido Gwenldal...
- ¿Y cuando le demostraste que era importante para ti?, yo no le insistí en que hablara contigo, porque pensé que le aria mas daño verte feliz por la disolución de su relación, era mas que obvio para todos que él te quería y tu solo lo ignorabas, deja de ser tan egoísta y déjalo ir... – el regente sin querer había hablado mas de la cuenta, pero era cierto, cada palabra, cuanto tiempo se guardo todo aquello, esas visiones de las esmeraldas llenas de lagrimas y tristeza, tanto dolor y sufrimiento que pasaron desapercibidas por el joven rey que sin querer era responsable de estas.
- Yo... no soy egoísta... – intento defenderse, pero ni él se lo creía. Cuando había cambiado tanto, es decir por primera vez su cerebro entendía lo que estaba diciendo, estaba reclamando al rubio, como si de su novio se tratase, se supone que era un amigo no algo mas, ¿entonces porque se la había pasado extrañándolo?, ¿porque no podía dejar de pensar que si no hacia algo al respecto de su vida no tendría sentido? – es por su bien estar, estoy seguro de que no será feliz si se queda con ese hombre...
- Ah no!! Y ¿por qué estas tan seguro? – Conrad pregunto seguro y por primera vez desafiante
- Porque... – ahora si había metido la pata, no encontraba como contestar, o ¿es que acaso no existía tal? Era desesperante – por que...
- Es suficiente... – Günter acababa de entrar salvando al rey - su majestad a tenido un día muy cansado y un asunto como este debe ser tratado durante horas adecuadas… - miro desafíate, si las miradas mataran – vamos majestad, debe descansar, ya mañana firmara ese documento, la proclamación de amistad y todo se volverá a ser como antes…
Como antes” esas palabras resonaban en su cabeza “Como antes”, nada volverá se lo mismo si él no regresaba, miro el techo de su cama, aquel que era cubierto por doseles; y en el otro extremo de la cama aquella piyama rosa que su madre le hubiese hecho al ojiverde, ¿que diría ella si se enterase?, de una u otra manera había aceptado muy bien que aquel chico rubio era su prometido, ¿pero como no? si encontró en él la posibilidad de convertirse en maestra, ella tenía la ilusión de enseñarle de todo a Wolfram, desde cómo vestirse hasta como cocinarle a su hijo, sin mencionar la idea nada despreciable de que sus hijos sacaran su belleza. Si había algo que aceptar era que lucía muy bien en aquellos vestidos que ocasionalmente se ponía, y que aun contra su voluntad sele veían grandiosos, un suspiro salió de su pecho, algo así como cansancio, pero se mentía si esa excusa intentaba dar y lo sabía.
Continuara…
Notas finales: ah!! se me ovidaba con respecto al piyama de Wolfram... digo para quien ya vio la tecera tempo... no hay problema... para quien no... pues... creo que ya les arruine algo... a por cierto en los cap siguientes sitare esenas de la serie... el cap en ci no los pongo asi que muy vivos.... yo digo que Yuri solo es algo retrasado... por que para mi ya quedo mas que claro que quiere a Wolf-cha....
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