Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¡Papá! Quiéreme… por Pazu_chan

[Reviews - 19]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

siento la demora u.u' es que ando perdida xD jojojo... con tantas cosas que tuve que hacer ju... mi mama estaba de cumple el 14 (menuda fecha para su cumple u.u')

bueno les dejo el ultimo capi, espero les guste ^^

A leer!!!!!!!!!!!!!!

Titulo: ¡Papá! Quiéreme…

 

Resumen: Tres historias incestuosas, tres hijos obsesionados con sus respectivos padres ¿Serán capaces de lograr sus objetivos? ¿Sus padres caerán ante el pecado?

Parejas: Lucius/Draco Remus/Ted James/Harry

1º One-shot: Papá, no me voy. (Lucius/Draco)

 

Resumen: Lucius decide mandar al extranjero a su hijo, para que termine sus estudios en Francia, pero Draco tiene algo que decir al respecto.

2º One-shot: Papá, yo si. (Remus/Ted)

 

Resumen: Remus no a tenido pareja desde que Tonks le dejo con el pequeño Ted, y Ted solo aceptara a una sola persona como pareja de su padre. 

3º One-shot: Papá, ámame a mí. (James/Harry)

 

Resumen: James siempre a amado a Lily, aun después de que está haya muerto hace años, Harry solo quiere que su padre le ame a el.

Advertencias: Au (universo alterno) shouta (relación adulto/niño) incesto (relación entre parientes) leve alteración de las personalidades de los personajes.

Capítulos: 3

  

****

  

3º One-shot: Papá, ámame a mí. (James/Harry)

 

James manejaba su vehículo a una velocidad normal, sus ojos avellanas, estaban ocultos detrás de unos lentes oscuros, llevaba puesto el traje de oficina, que ocupaba ahora que trabaja en las oficinas de la policía. El siempre había sido un hombre de acción, por eso y por su mente idealista de querer apresar a los malos de su país, se había vuelto policía, uno de los mejores. Pero ahora no estaba en servicio activo, sino en oficina, haciendo todo lo que le aburría, en una habitación de cuatro paredes grises y frías. Pero era lo único que podía hacer ahora, por que debía pensar en el bienestar de su hijo; su hijo había pagado mucho por sus errores. Cuando había perdido a Lily, a su amada Lily, en aquel trágico accidente de transito, creyó que moriría de pena, de dolor… lloro como nunca lo había hecho, dejo de ir por un mes al trabajo y su hijo de seis años, paso al olvido, se quedaba con la niñera que había contratado una semana antes de que su esposa muriera.

 

Sin poder soportar un día mas, en aquella casa que tantos recuerdos le traían de su amada esposa, había decidido tomar una misión en el extranjero de un caso muy importante que involucraba Inglaterra y Francia, por lo que tendría que vivir en el extranjero. No podía ir con su hijo, tanto por su seguridad y por que no podía verle a los ojos, esos ojos iguales a su amada.

 

Él no había abandonado a su hijo, aun cuando eso había parecido, pero es que… si, él era el culpable y no había noche en que no se reclamara y se odiara por lo que le había hecho a su propio hijo. Una semana después de la muerte de su mujer, el tomo el caso de los traficantes de armamento en Francia, su mejor amigo y padrino de su hijo, Sirius Black, fue con él, como siempre juntos. A Harry lo dejo en casa de Petunia, la hermana de su mujer, sabia que ella odiaba a su hermana, por los celos que tenia por que Lily era mucho mejor que Petunia, no solo en lo físico, sino también internamente. James creyó que con la muerte de Lily, ella había capacitado, es por eso que le dejo a su hijo a su cuidado, tanto de ella como de su esposo Vernon Dursley.

 

Fueron dos años que paso en el extranjero, llamaba cada vez menos a su hijo, todo por el trabajo, luego de un año dejo de llamar, él no se había olvidado de su hijo, eso jamás… pero entre tantas cosas que tenia que hacer estando en Francia, su hijo había pasado a último lugar en su cabeza, algo que jamás podría dejar de culparse. Había querido olvidar a su amada Lily, pero con eso también, había comenzado a descuidar a Harry.

 

Fue inesperado que el plan funcionara a la primera y acabara por fin con la misión, es por eso que no aviso a nadie de su regreso. Estaba nervioso por lo que pasara cuando se encontrara nuevamente con su hijo, que ahora tenia ocho años, no podía evitar la culpa y dolor, al saber que a Harry no le había llamado ni una sola vez ese año, solo le seguía mandando dinero, ya que el banco tenia la orden de entregarle cierta cantidad de dinero a Petunia, por la mantención de Harry. Pero… lo que descubrió cuando fue a la casa de su cuñada, fue algo que lo dejo helado…

 

Cuando entro a la casa, Petunia estaba nerviosa y no quería decirle donde estaba Harry, le dijo que estaba en la escuela y que llegaría mas tarde, pero James estaba ansioso por volver a ver a su hijo; nada lo había preparado para lo que vio después, cuando la puerta de la cocina fue abierta por un niño, delgado y bajito, con ropa el doble de su cuerpo, vieja y rota, además de que su cara estaba con moretones, lo que lo impacto mas, fue ver aquellos ojos verdes, por que nunca podría olvidar ese color, ese color igual a la de su amada Lily…

 

No tuvo compasión a la hora de enviar a prisión a esos dos, uso todo sus contactos, para que fueran condenados, con la pena máxima por maltrato infantil. James jamás había llorado tanto, ni siquiera cuando su esposa había muerto, pero al ver a su hijo así, no pudo evitarlo y cada vez que lo recordaba, lloraba y se culpaba una y otra vez, por que por su egoísmo, había hecho sufrir a su hijo lo inimaginable.

 

Habían pasado los años, y ahora Harry tenia dieciséis años, ambos fueron a un sicólogo, ya que Harry tenía miedo a perder a su padre, por lo que le daba pánico cada vez que este se iba de casa para trabajar y James también necesitaba de ayuda.

 

La convivencia entre ambos era buena, aun cuando Harry era algo tímido y reservado cuando estaba con gente que no conocía, pero era muy alegre y abierto cuando estaba con gente que era cercana a él. James veía que Harry era completamente distinto a él cuando joven,  por que Harry era mas tranquilo, amable, “inocente” y varias cualidades mas que él jamás poseyó cuando joven, en cambio James siempre fue un engreído, presumido y mujeriego.

 

James recostó su cabeza en el manurio de su auto, ya que el semáforo estaba en rojo, un suspiro cansado, dejo escapar y cerró sus ojos un momento. Hoy las cosas volvían a complicarse, ya que hace un par de semanas atrás, fue el aniversario de la muerte de Lily y había tomado de más con su mejor amigo Sirius. Había estado con muchas mujeres, incluso hombres, con tal de olvidarse de Lily, pero no lo había conseguido, por eso volvió a emborracharse el día de su muerte. Llego a casa muy tarde y su hijo estaba despierto esperándolo, no sabía como ocurrió, pero cuando Harry lo había ayudado a subir las escaleras y tumbarlo en la cama, se quedo prendado de aquellos ojos verdes, que le recordaban tanto a la única mujer que había amado, le beso… beso a su propio hijo y este por mas extraño que sonara, le respondió el beso, pero cuando se separaron por falta de aire… James no pudo evitar murmurar el nombre de su difunda esposa…

 

Al otro día, James si recordaba el beso, pero no quiso sacarlo en colación, no quiso mortificarse a si mismo y a su hijo, por que eso estaba mal, aun cuando hasta ahora, recargado contra el manurio de su auto, podía recordar el placentero y embriagante hormigueo de sus labios, al besar a su hijo…

 

No sabia que era aquello, pero cada vez que veía a su hijo, unas ganas locas por besarlo, acariciarlo y amarlo, le arrebataban la razón; no podía hacerle daño a su hijo, se había prometido nunca mas dañarlo, por eso estas dos semanas, había estado saliendo muy temprano en la mañana y llegando muy tarde a la casa, para así no toparse a su hijo… pero sabia que debía enfrentar la situación, no podía seguir escondiéndose de Harry.

 

Harry había llegado hace un par de horas del colegio, venia con un amigo de su colegio, era Oliver, su capitán de futbol, tenia diecisiete años era su ultimo año en el colegio, por lo que estaba obsesionado en ganar, fue por su exagerado entrenamiento, que Harry iba algo tarde a casa, aun cuando sabia que no había nadie esperándolo, por que su padre le evitaba desde lo del beso…

 

– pasa ¿quieres un jugo? – le pregunto sonriendo hacia su amigo, Oliver se había ofrecido a llevarlo a casa por lo tarde que habían salido de clases.

 

– si, gracias… – dijo algo cohibido pro estar solo, en la casa de Harry.

 

– siéntate, voy y vuelvo – le dijo, mientras iba hacia la cocina.     

Oliver no dijo nada, se sentó en uno de los sillones más grande de la casa, frente a la televisión, mientras esperaba a su amigo. Harry volvió con una bandeja con un par de vasos con jugo y un pocillo con galletas de chocolate, el menor los puso sobre la mesa y luego se sentó.

 

Hablaron de varias cosas, anécdotas, jugadas de futbol que habían visto en la televisión, lo que harían después de salir del colegio y varias cosas más. Mientras hablaban Oliver se fue acercando mas hacia el menor, hasta estar a muy pocos centímetros de su cuerpo, llevo su mano a la mejilla de Harry, donde la acaricio suavemente, el menor se sorprendió y abrió sus ojos verdes asombrado, pero se dejo acariciar, se besaron con lujuria. Harry quería olvidar su primer beso, el beso que se había dado con su padre, no quería tenerlo mas en su cabeza y sobre todo en su corazón, quería ser amado, aun cuando no fuera por la persona que en realidad amaba, pro que sabia aunque dolía, que su padre solo tenia ojos para su difunda madre.

 

Oliver empujo suavemente al azabache, recostándolo sobre el sillón, mientras él se ponía sobre el cuerpo más pequeño. Los besos fueron en aumento, así como las caricias, Oliver metió sus manos bajo la camisa del menor y este jadeo suavemente.

 

Un sonido fuerte, de algo cayendo al suelo, fue lo que los hiso separar rápidamente, para asombro de los dos muchachos, se encontraba James, mirándolos completamente incrédulo ante lo que había visto. Harry realmente estaba asombrado, ya que su papá había estado llegando mucho mas tarde y jamás se le pasó por la cabeza que llegaría más temprano.

 

– yo… – dijo nerviosos Oliver, mientras se paraba del sillón.

 

– ¡vete! – le ordeno el adulto – ¡ahora! – rugió al ver que el muchacho no se movía.

 

Oliver dudo, pero tomo su bolso y despidiéndose desde lejos, se fue de la casa de su amigo.

 

Harry iba a decir algo, pero no pudo ya que unos labios se interpusieron, James se coloco sobre su hijo, beso con ferocidad los suaves labios de Harry, el menor se dejo hacer, estaba asombrado pero no iba a desaprovechar aquel beso.

 

James se había vuelto loco, cuando vio a ese idiota sobre su pequeño, era de él, dolo de él… cuando termino el beso y se separo unos centímetros de su cuerpo, la razón volvió a él y asustado de lo que hacia, se separo completamente del menor, parándose de un salto…

 

– esto no esta bien, no, no, no… – murmuraba para si.

 

Harry vio con dolor como su padre se alejaba y como entre murmullos llamaba a su madre, no pudo evitar molestarse y sentirse miserable, pero sabia que no podía estar sin su papá, lo amaba y quería que solo lo amara a él. Se paro del sillón y fue hacia su padre, lo agarro de un brazo y se colgó de su cuello, para besarlo desesperadamente, beso que no fue correspondido.

 

Después de salir de su asombro, James tomo de los brazos a su hijo, separándolo suavemente de su cuerpo.

 

– no Harry esto no esta bien… – le susurro con cariño el mayor, mientras le acariciaba su mejilla.

 

– Papá… – le llamo el menor, con lagrimas cayendo por sus mejillas – ámame, ámame solamente mi… – le rogo volviéndolo a besar.

 

Y James se dio cuenta en ese momento, que aquellos ojos no eran iguales a los de Lily, eran mucho mas hermosos, y aquellos labios eran mas adictos que los de Lily, y ese cuerpo delicado, suave y ardiente, era por lejos mucho mas atrayente que el de su difunda esposa… quizás la petición de su hijo, de solo amarlo a él, no seria difícil de cumplir.

 

Harry gimió deliciosamente, al sentir las manos de su padre bajo su trasero, para así elevarlo y tomarlo en brazos, Harry se aferro a su papá, pasando sus piernas por la cadera del mayor y sus brazos por el cuello de James, mientras este subía las escaleras con dirección a su habitación.

 

– ámame papá… ámame a mi…

 

Fin.  

Notas finales:

bueno, gracias x leer y dejar review (a quienes an dejado xD)

nos leemos, en otra de mis locuras ^^

Matta nee!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).